Como un sol turco, como un nufrago del siglo XX, el poeta Nazim Hikmet escribi y vivi entre la crcel

y Varsovia, Berln este y Anatolia, Mosc y Estambul . Esa vida errante -ese naufragio- cre un gran legado, que tras su muerte qued esparcido por los tres mundos de entonces. Hikmet estudi en el instituto francs de Galatasaray y entr en la escuela naval de Turqua, aunque no lleg a embarcar por su quebrada salud y empez a ejercer como maestro en Bolu. Impresionado por la revolucin rusa se march a Mosc a principios de 1921; tena 19 aos y su pas estaba sumido en una guerra de supervivencia. En diciembre de 1924 volvi a Turqua e ingres en la redaccin de la revista Aydinlik (claridad). Al mes siguiente la revista fue cerrada por comunista y sus redactores encarcelados. Hikmet escap a Izmir y vivi un tiempo en la clandestinidad, tras ser condenado a 15 aos de prisin decidi huir de nuevo a Rusia, donde cre el teatro-estudio METLA. Regres a Turqua en 1928, pero fue detenido en la frontera y pas 9 meses en la crcel. A la salida se instal en Estambul y empez a trabajar para el diario Aksam (Noche) y el Risimli Ay (Mensual ilustrado). En 1929 public sus primeros poemarios, 835 lneas, La Gioconda y Si-Ya-U. Por entonces conoci a uno de los grandes amores de su vida, Piyar, de 22 aos, con la que se casara en 1935. Antes, en 1933, fue encarcelado por pertenecer a una organizacin comunista y en el juicio, celebrado en Bursa, el fiscal reclam la pena de muerte para el poeta. No obstante, al ao sali de la crcel, gracias a una amnista promulgada por el X aniversario de la Repblica. Nazim volvera a prisin en 1938, para cumplir una nueva condena (28 aos y cuatro meses) por militancia comunista. En la crcel de Bursa conocera a dos de los grandes intelectuales turcos de la segunda mitad del siglo XX, Orhan Kemal e Ibrahim Balaban. En 1951 naci su hijo Mehmet y pocos meses despus emprendi el exilio definitivo en la Unin Sovitica. Muri en una dacha de Mosc en 1963.

"Uno no siempre hace lo que quiere, pero tiene el derecho de no hacer lo que no quiere ", reza su epitafio.