SEMINARIO TEOLGICO CENTROAMERICANO

PABLO, EL ESPIRITU Y EL PUEBLO DE DIOS

Reporte de Lectura presentada en cumplimiento parcial de los requisitos de la materia Pneumatologa

Gerson Samuel Cruz Dvalos

28 de agosto de 2013

Como indica el libro en su prolegmeno, la cristiandad si bien no niega la persona del Espritu en sus credos, himnos o en sus conversaciones, en gran medida se le ha relegado tanto en el campo del estudio como en la vida de la iglesia a un segundo plano. Esta es una gran verdad puede ser debido al nfasis cristolgico y al concepto gris que se concibe acerca del Espritu, ya que tanto Cristo como Dios Padre fcilmente son identificados. No que el Espritu no se pueda identificar como persona sino que demanda un anlisis concienzudo para ver su obra dentro de la trinidad que es imprescindible y se hace notoria fcilmente en cada faceta de la vida del cristiano. As se puede apreciar su rol en la trinidad que principalmente para Pablo consista en la presencia capacitadora que tena que ver con el fruto, el testimonio y los dones. Estoy de acuerdo con el autor en la mencin que hace tan esencial y principal del Espritu en la conversin del cristiano, de principio a fin se encuentra presente obrando, nacemos por medio del Espritu, crecemos por medio de l, somos equipados y llenos de su poder para perseverar en las obras del Espritu al igual que haciendo el uso de los dones que provee para la edificacin del cuerpo de Cristo que a propsito esta unido por el mismo Espritu y que a su vez posee una variedad dentro del mismo. Es decir que para Pablo el Espritu era la muestra de la promesa futura, escatolgica del reino de Dios, lo que bien conocemos como el ya, pero todava no El Espritu es un ingrediente esencial en la teologa de Pablo, se podra decir en otras palabras que sin la base del espritu toda la teologa de Pablo se desplomara. De hecho se encuentra en el centro mismo de su teologa, como cumplimiento de la esperanza dada desde los profetas, es decir el derramamiento del Espritu, Dios morando en el corazn de su pueblo. As lo entendan Pablo y los primeros cristianos, no solo lo tenan como concepto sino como una realidad, lo que bien sera para nosotros que vivimos en este mundo postmoderno un gran aliciente para perseverar en este mundo cado an en medio de cada prueba o afliccin.