Gua para el trabajo con la FICHA 15.

1. Canto: Celebramos la promesa. 2. Escuchamos la Palabra a. Lectura de Lucas 8, 26-39. Clave de lectura: En el texto que hoy vamos a escuchar, Lucas nos relata el encuentro de Jess con un endemoniado, y la curacin de este hombre. El relato es un poco complicado... y nos puede parecer difcil de entender en una primera lectura. Por eso, mientras lo leemos por primera vez, vamos a prestar atencin al recorrido que hacen los demonios durante el relato. b. Reconstruccin del texto: - Cmo viva el hombre antes de su encuentro con Jess? - Qu recorrido hacen los demonios, obligados por Jess, durante el relato? - Cmo queda el hombre despus de su encuentro con Jess? (Prestar atencin a las acciones que seala Lucas). - Qu actitud toma la gente frente a lo sucedido? Leer el magnfico comentario de la Lic. Brusco y el Prof. Burgardt en AA.VV., En Camino, t. XV, ed. San Cayetano, Quilmes Oeste 2001, 3. edicin agotada. 3. Meditamos y compartimos la Palabra Jess vino para que todos tengamos vida en abundancia (ver Jn 10, 10). Por medio de su accin y predicacin, l lucha contra los males que daan a la vida. Le dice al hombre: Vuelve a tu casa, y cuenta todo lo que Dios ha hecho contigo. En nuestra vida o en la de nuestra comunidad: En qu momentos hemos sentido que Jess nos ha liberado de males concretos (demonios)? Jess lucha por recuperar la dignidad de la vida perdida por causa del pecado. Libera la vida amenazada de los males y demonios que la oprimen hasta matarla. A quien quiera seguirlo le da poder para curar enfermedades y para expulsar a los espritus malos (ver Lucas 9, 1-2). Los discpulos y las discpulas deben asumir la misma lucha en defensa de la vida. Somos conscientes de que tenemos este poder que nos libera para liberar a otros? De qu manera nuestra comunidad est comprometida en defensa de la vida?

4. Oracin comunitaria Ambientacin: Colocar en el centro una Biblia abierta, una vela encendida y un cntaro con agua. a. Splicas: Pedir a Dios que nos libere de los males que aquejan nuestra vida y nuestra sociedad, con peticiones espontneas a las que todos respondemos: Lbranos del mal. b. Gesto: En las aguas de aquel lago, Jess hundi los males que aquejaban a aquel hombre. En las aguas de nuestro bautismo, Dios hundi nuestros males y nos hizo resurgir como mujeres y hombres nuevos con Cristo. En memoria de nuestro bautismo, vamos a trazar con agua la seal de la cruz sobre la frente de algn hermano/a de nuestra comunidad. c. Conclusin: rezamos juntos el Padre nuestro.