Você está na página 1de 4

EL PERDÓN

TEXTO: Mateo 6:12; 14,15


12) Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a
nuestros deudores.
14) Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a
vosotros vuestro Padre celestial;
15) más si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os
perdonará vuestras ofensas.

INTRODUCCIÓN:

Pedro en una ocasión le pregunto al Señor Jesucristo ¿Cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque
contra mí? Y el mismo intentó dar una respuesta ¿Hasta siete? Y el Señor Jesucristo le respondió no te
digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete (Mateo 18:21-22), o sea lo que Jesús le dijo a Pedro es
que 490 veces debemos perdonar a la misma persona si es necesario.
Este es el mandato que Dios le dio a Pedro, y a la vez nos lo da a ti y a mí. El problema es que a veces
no queremos perdonar a la persona que nos ha dañado.

I. ¿QUÉ ES EL PERDÓN?

El perdón: Es el mecanismo por el cual se libera toda amargura, resentimiento, enojo, deseo de
venganza y todo lo que pudo haber quedado en el corazón a raíz de la ofensa o el daño ocasionado
por otra persona.
Para poder entender mejor lo que es el perdón veamos una frase muy conocida: “yo perdono
pero no olvido” o “te perdono pero no penses que olvidaré lo que me hiciste”
➢ A veces pensamos que perdonar debe ser olvidar todo lo que nos hayan hecho.
➢ O no olvidar nada de lo que nos hicieron y seguir recordándolo, pero con cierto dolor.
➢ Ninguna de las dos opciones es la correcta. Veamos:

1. El perdón: no produce amnesia o sea que olvidemos todo sin recordar nada.

➢ La persona está consciente del daño que le hicieron y recuerda muy bien a la persona que se
lo hizo. Pero al tomar la decisión de perdonarla, ha decidido que no va a criticar, odiar,
ofender, vengarse, ni agredir física y verbalmente a la persona que le ofendió.
➢ La ofensa recibida va a recordarla, pero no le hará daño nunca más.

I. LA IMPORTANCIA DE PERDONAR.

Para nosotros los hijos de Dios, es importante tener un corazón perdonador. Cristo mismo nos
exhorta a que seamos perdonadores, porque Él nos da una cátedra de cómo por amor, nos perdona
todos los pecados cometidos.
Él nos enseña con el ejemplo:
A. POR AMOR CRISTO ME PERDONÓ.

1. Por amor me perdonó al morir en la cruz del calvario en mi lugar.(Efesios 2:1-6)


2. Por amor me perdona diariamente, porque soy imperfecto.
A. DEBEMOS DE PERDONAR, PARA QUE PODAMOS SER PERDONADOS.
La mayoría de veces que nosotros ofendemos a alguien queremos que nos perdone, y sí no lo
hace, decimos que el amor de Dios no está en él. Pero cuando los ofendidos somos nosotros,
en verdad que se nos hace difícil perdonar a quien nos ofendió. ¿Por qué se nos hace difícil?
¿Acaso Dios no nos perdona cada vez que le fallamos?
1. Veamos un ejemplo de cómo una persona recibe perdón por todo lo que hizo; pero él no puede
perdonar a uno que le falló en algo muy pequeño. (Mateo 18:23-35)

La parábola la vamos a descifrar de la siguiente forma:

➢ La gran deuda de pecado que fue perdonada a este hombre es comparada con 10,000
talentos,
➢ El pecado cometido contra él, es comparado solamente con 100 denarios.
➢ Veamos que nos quiere decir el Señor Jesucristo con eso:
➢ 1 talento equivale aproximadamente a 5,000 denarios.
➢ 5,000 denarios x 10,000 talentos = 50, 000,000 denarios. (Era el total que él debía)
➢ A él solamente le debían 100 denarios.
➢ Si dividimos 50, 000,000 entre 100 vemos que hay una diferencia de 500,000 a 1.
➢ En otras palabras, él había pecado contra Dios 500,000 veces más,
de lo que el otro lo había hecho con él.

Lo que extraemos de esto es: que el pecado que yo he cometido delante de Dios en el
transcurso de mi vida es 500,000 veces mayor de lo que lo puedan hacer conmigo.

I. APRENDAMOS A PERDONAR.

A. La falta de perdón, trae enojo y el enojo nos descontrola y descontrolados ofendemos al


prójimo y le hacemos daño.
B. Sí en nuestro corazón hay perdón, entonces tenemos libertad.
C. Sí perdonamos nos identificamos con Cristo. La Biblia dice:

1. Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro
Padre celestial; (Mateo 6:14)

2. Por amor a Cristo debemos de perdonarnos. (Efesios 4:32)

A. Debemos de comprender que siempre que estemos con vida, va haber gente que se
esforzará en hacernos daño y en ofendernos. Ejemplos

➢ José por sus propios hermanos y la esposa de Potifar. (Génesis 37:18; 39:14-18)
➢ Moisés por su propio hermano y hermana. (Números 12:1-13)
➢ David por el rey Saúl quien personalmente trató de matarlo. (1º Samuel 18:11; 19:10)

I. QUÉ DEBO HACER PARA PODER PERDONAR.


A. Para poder perdonar es necesario hacer lo siguiente:

➢ Identificar la herida que me hicieron y la persona que me la hizo.


➢ Decidir perdonarla a pesar de lo que siento en mi corazón.
➢ Confesar con mi boca ese perdón, no importando que esté sólo.
➢ Sentirme libre de toda herida que haya quedado en el alma y el corazón.
➢ Acercarme a Dios en oración y decirle con todo el corazón que he decidido perdonar para
que Él también me perdone.

I. PARA ALCANZAR EL PERDÓN; TAMBIEN ES NECESARIO QUE ME PERDONE A MI


MISMO.

A. Te culpas o te culpan por el daño que te hicieron.

1. A veces alguien te ha hecho daño y tú te sientes responsable por lo que él o ella te hizo.
2. Otras personas te dicen que tú tienes la culpa de lo que te pasó.
3. Te menosprecias tu mismo (a) por lo que te hicieron.

A. Debes de perdonarte a ti mismo (a) para ser completamente libre.

1. Libre para servirle a Dios.


2. Libre para vivir feliz.
3. Libre para disfrutar de lo lindo que es la vida.

A. EL PERDÓN NO ES OLVIDAR; EL PERDÓN ES SANAR.

1. Sanar de toda herida causada por alguien que no te valoró como te valora Dios.
2. Recordemos que para Dios somos “la niña de sus ojos”

CONCLUSIÓN:
El perdón es lo que hace que nuestro corazón sane de las heridas, para que nuestra alma brille, para que
nuestra vida vaya en aumento, para que podamos desarrollar este potencial que poseemos y que nadie
nos puede quitar nunca. Debemos perdonar a todos los que nos hacen daño y también aprender a pedir
perdón cuando somos los que causamos el daño.

Su hermano y amigo:
Carlos Leopoldo Chinchilla Quím.

Você também pode gostar