Você está na página 1de 24

Más allá de la calle

Além da rua
Rogério Augusto
Traducción/Tradução:
Stella Maris Baygorria
Edición/Edição:
Marcelo Barbão
Revisión/Revisão:
Miriam T. Osuna
Proyecto Gráfico/Projeto Gráfico:
Vanderley Mendonça
Foto de la cubierta/Foto da capa:
Pepe Valdés

Amauta Editorial
2005
AMAUTA EDITORIAL LTDA, 2005

Distribuição Gratuita
Distribución Gratuita

A Coleção Muro de Tordesilhas é distribuida


gratuitamente em Buenos Aires (Argentina),
Cidade do México (México) e São Paulo (Brasil).

La colección Muro de Tordesillas es distribuida


gratis en Buenos Aires (Argentina), México DF
(México) y São Paulo (Brasil).

Amauta Editorial
Rua Augusta, 1378 - Cj 72
01304-001 - São Paulo - SP - Brasil
www.amautaeditorial.com
contato@amautaeditorial.com
ROGÉRIO AUGUSTO nació en São
Paulo en 1967. Periodista y licenciado
en letras participó de la antología de
la Escola de Escritores, Traços, en
1998. Algunos de sus cuentos fueron
publicados en la famosa revista de
literatura brasileña Cult.
Los cuentos que publicamos a con-
tinuación, Enamorada, Certamen y
Tabaco son de su primer libro Além da
Rua (Com-arte – 2002).
Fernando Bonassi, escritor, drama-
turgo y guionista brasileño afirma
sobre la obra y su autor: “Rogério rea-
liza artísticamente el cuestionamiento
de Clarice Lispector en el epígrafe de

3
este libro: un hombre sí puede abrir
una puerta y mirar. Y esperamos que
todos los que lo hagan puedan, como
en las páginas que vienen, ir más allá
de la calle y recoger un poco de la
humanidad de nuestra tragedia”.
La producción literaria de Rogério
Augusto, su grandiosa capacidad de
síntesis lo ponen entre los primeros
escritores brasileños de nuestros días.
Sus cuentos entran a la colección
Muro de Tordesillas desparramando
cascotes urbanos.

4
Cuentos
6
MÁS ALLÁ DE LA CALLE

Hoy es sábado. Ojalá que gane en


el billar. O entonces que tenga traba-
jo para la semana que viene. Si no
pasa ninguna de las dos cosas, la voy
a ligar yo. Como siempre. Como la
semana pasada. Agarraron al tipo equi-
vocado y ¿quién se llevó la paliza?
Yo. Les habían pagado por uno y
mataron a otro. Lo bueno es cuando
todo sale bien. Ahí la que sale ganan-
do soy yo. De fiesta toda la noche.
Cerveza y asado para todos los veci-

7
nos. Sobra la plata, y hasta hay rami-
tos de flores y perfume importado. En
la cama, mucho cariño. Ahora me
pongo a espiar por la ventana con el
corazón en la mano. Si pudiera reco-
nocer de lejos si es él el que dobla
la esquina… Todo se nubla por la piña
que me dio la semana pasada. Si hoy
llega bien, tomo coraje y me arriesgo
a pedirle plata para ir al médico. De
lo contrario, todavía termino ciega.

8
CERTAMEN

El caño del arma apuntándome a la


cabeza. El muchacho de torso desnu-
do me preguntó sarcásticamente cuál
era la capital de Indonesia después de
abrir el atlas en una página cualquie-
ra. “O acertás en un minuto o te vuelo
la cabeza”. El muchacho de camiseta
negra se reía a carcajadas, nervioso,
refregándose el polvo blanco en las
encías. Cuanto más me esforzaba para
acordarme, más lejos se encontraba la
respuesta. La policía, del lado de afue-

9
ra de la casa, daba voz de mando. De
repente, invadieron el lugar disparan-
do para todos lados. Los cuerpos de
los secuestradores cayeron al piso
junto con el atlas, irónicamente abier-
to en el mapa de Asia. Aún atado y
amordazado pude ver la respuesta de
lejos. Yakarta. Cerré los ojos por unos
instantes. Jamás acertaría.

10
TABACO

Empezó a fumar para olvidarla.


Después no paró más. Hizo de todo
para largar el cigarrillo. Clínicas de
desintoxicación, caminatas, alimenta-
ción balanceada, hipnosis. Leyó varios
manuales de autoayuda, cambió sus
hábitos. Probó la macrobiótica, la
homeopatía y las técnicas milenarias
chinas, entre ellas, la acupuntura. Por
recomendación de un amigo usó adhe-
sivos de nicotina y mascó chicles
medicinales. Recurrió al do-in, a méto-

11
dos suizos y a tratamientos con láser.
No se sentó más en lugares para fuma-
dores de restaurantes y bares, ni tomó
más café. La última vez que lo vieron
participaba en una sesión de charlas
de fumantes anónimos. Persistía. Pero,
en realidad, no podía vivir sin ella, la
mujer presa al humo de sus cigarrillos.
Cínica, envuelta en una niebla de la
que para él es muy difícil librarse.

12
ENAMORADA

Astrología, numerología, tarot, cába-


la, cartas, quiromancia, oráculos, cris-
tales, buzios, I Ching, ángeles, cromo-
terapia, grafología, hechicería, regre-
sión, progresión, interpretación de sue-
ños, videncia, magia, rituales de bru-
jería, runas, flores de Bach, biblioman-
cia, duendes, orishás, santos, curas,
pastores, rabinos. Intentó de todo para
conseguirlo de vuelta. Sólo que el des-
tino no lo quiso así.

13
14
Contos

15
16
ALÉM DA RUA

Hoje é sábado. Tomara que ele


ganhe na sinuca. Ou então que tenha
serviço para a semana que vem. Se
nada disso acontecer, vai sobrar pra
mim. Como sempre. Como na semana
passada. Pegaram o homem errado e
quem levou a surra? Eu mesma. O
pagante pediu um e eles mataram
outro. Bom mesmo é quando tudo dá
certo. Quem leva a vantagem aqui sou
eu. Tem festa a noite inteira. Cerveja
e churrasco para toda vizinhança.

17
Dinheiro de sobra, com direito a ra-
malhete de flor e perfume importado.
Na cama, é só carinho. Agora eu fico
espiando pela janela com o coração na
mão. Se pudesse reconhecer de longe
se é ele quem dobra a esquina... Tudo
embaralha por causa do soco que levei
dele na semana passada. Se hoje ele
chegar bem, tomo coragem e arrisco
pedir dinheiro para ir ao médico. Do
contrário, ainda acabo cega.

18
QUIZ SHOW

O cano da arma apontado para


minha cabeça. O rapaz de dorso nu
perguntou-me sarcasticamente qual era
a capital da Indonésia, depois de abrir
o atlas numa página qualquer. “Ou
acerta num minuto, ou leva bala!”. O
rapaz de camiseta preta gargalhava
nervoso, esfregando o pó branco na
gengiva. Quanto mais eu me esforçava
para lembrar, mais distante a resposta
se encontrava. Os policiais do lado de
fora da casa davam voz de comando.

19
De repente, invadiram o local, atiran-
do para todos os lados. Os corpos dos
seqüestradores caíram no chão junta-
mente com o atlas, ironicamente aber-
to no mapa da Ásia. Ainda amarrado
e amordaçado pude ver a resposta de
longe. Jacarta. Fechei os olhos por
instantes. Jamais acertaria.

20
TABACO

Começou a fumar para esquecê-la.


Depois não parou mais. Tentou de tudo
para largar o cigarro. Clínicas de
desintoxicação, caminhadas, alimen-
tação balanceada, hipnose. Leu vários
manuais de auto-ajuda, mudou seus
hábitos. Experimentou a macrobiótica,
a homeopatia e as técnicas milenares
chinesas, entre elas, a acupuntura. Por
indicação de um amigo, usou adesivos
de nicotina pelo corpo e mascou chi-
cletes medicinais. Partiu para o do-in,

21
para os métodos suíços e tratamentos
com laser. Não freqüentou mais alas de
fumantes em restaurantes e bares, nem
bebeu mais café. A última vez em que
foi visto, participava de uma sessão de
palestras nos fumantes anônimos.
Persistia. Mas, na verdade, não podia
viver sem ela, a mulher presa à fu-
maça de seus cigarros. Cínica, envolta
numa névoa difícil dele se desvenci-
lhar.

22
APAIXONADA

Astrologia, numerologia, tarô, caba-


la, baralho, quiromancia, oráculos, cris-
tais, búzios, I Ching, anjos, cromotera-
pia, grafologia, feitiçaria, regressão,
progressão, interpretação de sonhos,
vidência, magia, simpatias, runas, flo-
ral de Bach, bibliomancia, duendes,
orixás, santos, padres, pastores, rabi-
nos. De tudo ela tentou para consegui-
lo de volta. Só que o destino não quis.

23
Coleção/Colección

Os Imigrantes – Horacio Quiroga


Ciudad Ácida – Marcelino Freire
Uma Pena Extraordinária – Martín Kohan
Más allá de la calle – Rogério Augusto
O pássaro azul – Rubén Darío
Un acreedor del Ministerio de Economía –
Qorpo Santo

Próximos autores:
Claudinei Vieira - Brasil
Furio Lonza - Brasil
Glauco Mattoso - Brasil
Indigo - Brasil
Joca Reiners Terron - Brasil
Marcelo Barbão - Brasil
Marcos Cesana - Brasil
Nelson Oliveira - Brasil
Osvaldo Lamborghini - Argentina
Ronaldo Bressane - Brasil
Salvador Elizondo - México

Você também pode gostar