Você está na página 1de 2

LA MAQUINA DE AHORRAR

Autor: Eva Mara Rodrguez


Edades: A partir de 6 aos
Valores: ahorrar
Haba una vez un pueblo llamado Muchapasta de Arriba en el se viva muy bien. Sus
habitantes tenan mucho dinero y se lo gastaban todo en sus caprichos y mansiones.
A unos kilmetros se encontraba Muchapasta de Abajo. Sus habitantes tambin tenan mucho
dinero, pero vivan de manera ms humilde, ya que preferan gastar solo lo necesario y guardar
una
parte
de
sus
fortunas
por
si
acaso
venan
tiempos
peores.
Y los tiempos peores llegaron. Poco a poco, los habitantes de Muchapasta de Arriba empezaron
a notar la falta de dinero, y no podan seguir viviendo como hasta entonces. Sin embargo, en
Muchapasta
de
Abajo
las
cosas
seguan
como
siempre.
El alcalde de Muchapasta de Arriba, al ver que sus vecinos apenas carecan de nada mientras
que ellos apenas tenan para comer, decidi mandar a un detective para que averiguara qu
pasaba
en
aquel
pueblo.
El detective, hacindose pasar por un escritor famoso que buscaba inspiracin para escribir un
cuento, se fue a Muchapasta de Abajo a investigar. En el pueblo le recibieron con los brazos
abiertos, y le contaron todo lo que el hbil detective quiso saber. Adems le obsequiaron con un
increble regalo: una mquina de ahorrar, con instrucciones y todo. Los vecinos de Muchapasta
de Abajo incluso le regalaron los planos para construir ms mquinas.
Al cabo de unos das, el detective volvi a Muchapasta de Arriba con la mquina, las
instrucciones
y
los
planos.

E
l alcalde, con gran inters,
abri la caja que contena la mquina de ahorrar y ley atentamente las instrucciones de uso.
Decan
as:
Paso 1: Colocar la mquina de ahorrar en un lugar visible de la casa.

Paso
Paso
Paso

2:
Introducir
3:
No
abrir
4: Cuando no

varias
monedas
o
billetes
todos
los
das.
nunca,
a
no
ser
que
sea
una
emergencia.
quepa ms, guarda la mquina y construye otra.

- Increble! -deca la gente de Muchapasta de Arriba-. Esta mquina nos har ricos.
Todos los habitantes de Muchapasta de Arriba se fabricaron su propia mquina de ahorrar. Al
principio les cost mucho esfuerzo ir introduciendo billetes y monedas, pero cuando vinieron
tiempos
mejores
empez
a
resultar
ms
fcil.
A los pocos meses, los vecinos de Muchapasta de Arriba tuvieron que abrir sus mquinas de
ahorrar, porque las cosas empezaron a ir mal otra vez. Al abrirlas, se dieron cuenta de que
tenan
muchsimo
dinero
dentro.
- Qu maravilla! -decan los habitantes del pueblo-. La mquina ha hecho crecer el dinero que
metimos
dentro!
Un nio que fue testigo del momento, sin creer lo que vea dijo:
- Pero si no es ms que una hucha! Y lo que hay dentro no es ms de lo que habis metido
vosotros.
Los vecinos no daban crdito a lo que oan, y se negaron a creer que aquello era algo tan simple
y
vulgar
como
una
hucha.
Pero, qu ms daba lo que fuera aquello? Desde entonces en Muchapasta de Arriba nunca falt
de nada cuando las cosas fueron mal, porque sus habitantes, al igual que sus vecinos de
Muchapasta de Abajo, usaban sus ingeniosas mquinas para guardar parte de lo que ganaban
para cuando les hiciera ms falta.

Você também pode gostar