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Los fariseos cristianos

El término los fariseos ( los separados ) lo encontramos en los


Evangelios, estos individuos formaban parte de una secta o partido
religioso de dónde viene su nombre, son identificados como
enemigos acérrimos de Jesús juntamente con el partido de los
saduceos y los escribas, estos grupos de personas juntamente con
los principales sacerdotes y los ancianos formaron un frente común
contra el Señor Jesús en su ministerio público. Primeramente
queremos dar a conocer una breve semblanza de los fariseos y de
esta manera nos sirva de referencia en las diferentes
consideraciones que analizaremos acerca de estos personajes y su
resurgimiento (como metáfora) en nuestros tiempos.

Una de sus principales características era la ostentación que hacían


acerca de la " obediencia " a la ley tradicional, y los deberes
religiosos acentuándose más su orgullo si se desempeñaban como
rabinos o escribas, funciones que estaban relacionadas con la
enseñanza y la conservación de las escrituras así como la
interpretación de la ley. Este tipo de personajes juntamente con los
principales sacerdotes controlaban y gobernaban el culto, los
sacrificios y las celebraciones de las fiestas en el templo, regulando
y condicionando la vida moral y religiosa, las actividades civiles y
sociales del pueblo de Israel. De esta casta gobernante los fariseos
eran los más influyentes y respetados.
Sin duda que debido a esta posición que ocupaban, cuando El
Señor Jesús inició su ministerio público, anunciando el reino de
los cielos ellos fueron los principales opositores desde el
principio. Mat 4:17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar y a decir:
«¡Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado!» En el mensaje de
la presentación del evangelio El Señor Jesucristo no se adhirió a
las enseñanzas de ninguno de los partidos existentes, por lo cual
lo consideraron un enemigo del cual deberían cuidarse de sus
doctrinas y de las pretensiones acerca de su persona como el
Mesías e Hijo de Dios. El antagonismo del Señor Jesús contra el
judaísmo representado por los fariseos no se hizo esperar desde el
principio. Juan. 2:13-16 Estaba cerca la Pascua de los judíos, y subió Jesús a
Jerusalén. Encontró en el Templo a los que vendían bueyes, ovejas y palomas, y a
los cambistas que estaban allí sentados e hizo un azote de cuerdas y echó fuera del
Templo a todos, con las ovejas y los bueyes; también desparramó las monedas de
los cambistas y volcó las mesas; y dijo a los que vendían palomas: –Quitad esto de
aquí, y no convirtáis la casa de mi Padre en casa de mercado. Es admirable
como el carácter del Señor se manifestó por el celo para purificar
el templo, a pesar de que sabía la terrible enemistad que esto le
acarrearía, desde entonces esta confrontación con el judaísmo
no cesaría hasta el desenlace de la Cruz por medio de Poncio
Pilato. Las diferencias del Señor Jesús con los fariseos eran en
relación a las escrituras; los fariseos eran celosos en guardar "la
ley tradicional" conocida como la "mishnah," es decir habían
adulterado la ley en su interpretación, y habían agregado
mandamientos de hombres para que se guardaran como palabra
de Dios. Por su parte el Señor, corregía sus interpretaciones y
les reprochaba que enseñaran como palabra de Dios
mandamientos de hombres. Mat.15:1 Entonces se acercaron a Jesús
ciertos escribas y fariseos de Jerusalén, diciendo: –¿Por qué tus discípulos
quebrantan la tradición de los ancianos?, pues no se lavan las manos cuando comen
pan. Respondiendo él, les dijo: –¿Por qué también vosotros quebrantáis el
mandamiento de Dios por vuestra tradición?. Note usted como este
espíritu farisaico está también presente en nuestros días, donde
muchos " fariseos" están aglutinados en un dominante sistema
denominacional religioso que han levantado al margen de las
escrituras. El judaísmo en el tiempo del Señor Jesús, guardaban
la mishnah o segunda ley, los fariseos de este tiempo predican
en la carne el Evangelio. En medio de la confusión en la que se
encuentra la cristiandad, mucho tiene que ver no sólo la obra de
los falsos maestros, sino también este espíritu farisaico en la
comunión cristiana en donde parece que cuenta más el
denominacionalismo que la bendición del auténtico y verdadero
compañerismo, como fue el caso de los fariseos y los saduceos
que formaron un frente común para oponerse al Señor Jesús,
pero entre ellos mismos había diferencias irreconciliables, en
esta cristiandad esta peor el asunto donde se cierran filas en
contra de las aberraciones de los falsos maestros, pero también
se resiste al Espíritu Santo contristándolo y apagándolo en
muchos casos para no escuchar su voz y recibir la luz que quiere
darnos. Consciente o inconscientemente se está predicando un
evangelio "tradicional" en la carne, sin la intervención del
Espíritu. Es probable que muchos debidos a este espíritu fariseo
ni cuenta se hayan dado de esto, en medio de la satisfacción y
el orgullo que experimentan en el sistema religioso que
viven. 2Co 13:5 Examinaos a vosotros mismos, para ver si estáis en la fe; probaos
a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos? ----- . Mat 23:5-7 Antes
bien, hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres, pues ensanchan sus
filacterias y extienden los flecos de sus mantos; aman los primeros asientos en las
cenas, las primeras sillas en las sinagogas, las salutaciones en las plazas y que los
hombres los llamen: “Rabí, Rabí” (Pastor, Pastor)………

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