ACTA DE MATRIMONIO

En esta Tarde que parece noche obscura y llena de sombras y sonidos extraos y
siendo la nica forma de que un hombre honrado e inteligente cometa este tipo de
atrocidades.
YO la Honorable Juez del Registro Civil, yo que doy fe en los asuntos de mi gente, yo
que quito los pecados del pueblo voy a unir en sacrosanto Matrimonio a estos dos
rapazuelos que haciendo uso de las pocas facultades mentales que les quedan
(despus de tanta chave) vienen por su propio pie.
EL AVENTADO.- YO________________________ Perfecto Calvo del Bosque Mota y Peralvillo
te acepto a ti: _____________________________ de los ngeles y los Arcngeles y todos los
coros celestiales viuda de Daz divorciada de Lpez y dejada de Madrazo como mi fiel
esposa, duea de mis miserias abuela de mis nietos, madre de mis hijos y cuada de
mis hermanos..
LA DOMADORA.- YO___________________________ de los ngeles y los arcngeles y
todos el coro celestial, viudo de Daz divorciada de Lpez y dejado de Madrazo te
acepto a ti.
_________________________________ Perfecto Calvo del Bosque Mota y Peralvillo. Cuando
haya dinero alrededor.
ANILLOS
EL AVENTADO.- Recibe este anillo como smbolo de mi avin y de mi debilidad hacia
las bebidas embriagantes, en el nombre del padre, del hijo y del Speedy Gonzlez.
LA DOMADORA.- Recibe este anillo como smbolo de mi poder y mi autoridad sobre ti,
en el nombre del Padre, del Hijo y del Speedy Gonzlez.
ARRAS.
EL AVENTADO.- Recibe estas arras como prueba de que me dieron puro cambio en la
cantina y consrvalas porque es todo lo que habr.
LA DOMADORA.- Yo las recibo como smbolo del cuidado que tendr a buscarte ms
cuando duermas y a desaparecer el cambio de los mandados.
Como se hace larga la ceremonia y entre ms rpido se vayan mas lana tendremos
esperando su divorcio en prximas fechas, los declaro: par de locos por quererse
casar.
Puede besar el pavimento.

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El agraviado
La perjudicada

El aventado

Nota: pagar todo lo que a ti se te ocurra pedir durante y el tiempo en que estemos ciegos en
santo matrimonio hasta que a algunos de los dos se nos ocurra abrir los ojos y darnos cuenta de
lo que hemos cometido.