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aan eS oe sioeeovic RR ne Perret Ute TEMAS DE PSICOANALISIS Y PRACTICA PSICOANALITICA Se agrupan en esta seccién titulos de psicologia, psiquiatrfa y psi coanilisis, segin un criterio no solamente tematico sino tambi conceptual y cientifico, Retine libros de fondo dentro de la mas actual produccién tedrica en la teoria psicoanalitica y sus dis- tintas vertientes: psicoterapia de grupos, andlisis institucional, historia del movimiento psicoanalitico, et¢., sin omitir las apor ciones de la llamada escuela lacaniana. LUCIO PINKUS Teoria de la psicoterapia analitica breve SALVADOR MINUCHIN Familias yterapia familiar LEONARD SMALL Psicoterapias— breves EDGARDO GIL Y PACHO ODONELL Eljuego CLAUDE LE GUEN La practica del método psicoanalitico ‘NANCY CHODOROW El ejercicio de a maternidad __ FERNANDO DOGANA P8leopatohgia del consumo covidiano MAUD MANNONI La primera entrevista con el psicoanalista D.WWINNICOTT Psicoandlisis de una nifia pequeiia (The Pigele) JANETMALCOLM Psicoandlisis: una profesion imposible (sigue en pig. 385) Salvador Minuchin FAMILIAS Y TERAPIA FAMILIAR ‘Titulo del original inglés: Families & Family Therapy © 1974 by The President and Fellows of Harvard College Traduceién: Victor Fichman Disefio de cubierta: Carlos Rolando y Asociados ‘Octava reimpresién, marzo del 2003, Barcelona, 1* Reimpresién en México, agosto del 2004 Derechos reservados para todas las ediciones en castellano © Editorial Gedisa, S.A. Paseo Bonanova,9 I'- I 88022 Barcelona, Espaiia Tel. 93 253.0904 Fax 93 2530905 Correo electrénico: gedisa@godisa.com bitp:/www gedisa.com Gestién, representacién y direccién de esta edicién ‘© Editorial Gedisa Mexicana, S.A. Guanajuato 202 loe. 1 Col. Roma (06700 México DF. E-mail: gedisa@gedisa-mexico.com ISBN: 968-852-041-1 Depésito legal: B. 11728-2003 Verdaguer, 1 - Capellades (Barcelona) Impreso en México Printed in México ‘Qusda prohibida la reproduccin total o parcial por cualquier modio de impresin, en forma idéntica, extractada © modifcada, en castellano © en cualquier otro idioma, Dedicatoria. Agradecimientos Nota gcerea de las transcripciones 1 TERAPIA ESTRUCTURAL DE* LA FAMILIA u UNA FAMILIA EN FORMACION. WI UN MODELO FAMILIAR Vv UNA FAMILIA DEL KIBBUTZ v IMPLICACIONES TERAPEUTICAS DE UN ENFOQUE ESTRUCTURAL, vw LA FAMILIA EN TERAPIA, vir FORMACION DEL SISTEMA TERAPEUTICO, INDICE 39 18 108 138 165 183, Vu LA REESTRUCTURACION DE LA FAMILIA Ix LA TEENICA DEL SI, PERO: LOS SMITH Y SALVADOR MINUCHIN. x LA TECNICA DEL "ST Y' LOS DODDS Y CARL A. WHITAKER XI LA ENTREVISTA INICIAL, .OS GORDEN Y BRAULIO MONTALVO, LONGITUDINAL, Y EL SALVADOR MINUCHIN LOS BROWN A mi padre y a mi madre, que me enseRaron el significado de la famtlia, Ya mi esposa ¢ hijos que ampliaron mi experiencia AGRADECIMIENTOS Este libro se originé en gran medida en un seminario in- formal realizado dos veces por semana durante un pertodo de dos afios y con una extensién que oscilaba entre los treinta y los cuarenta minutos, cuando Jay Haley, Braulio Montalvo y yo nos dirigiamos en automdvil a la Philadelphia Child Guidance Clinic y regresdbamos de ella. Muchas de las ideas expuestas surgieron de nuestras discusiones, por lo que les estoy suma- ‘mente agradecido. Agradezco en particular a Braulio Montalvo, fal que considero como el maestro que mds influyé sobre mt. Tiene la rara capacidad de recibir una idea y luego devolverla en forma desarroliada. A lo largo de nuestros diez aiios de trabajo conjunto, en muchas ocasiones reorient mi pensamiento y, siempre, lo enriquecié. También me beneficié cott la asis- tencia de Francés Hitchock, quién durante siete aos me ayu- dé a clarificar mis ideas y a volcarlas al papel. Muchos de mis colegas de jla Philadelphia Child Guidance Clinic contribuyeron a este libro a través del constante in- tercambio de ideas que mantuve con ellos. Deseo mencionar, en particular, a Jerome Ford, Cdrter Umbarger, Mariaune Walters y Rae Weiner. Este libro se inicié con una serie de conferencias presenta das en grupos de Estados Unidos, Suecia y Holanda. Deseo agradecer a mis estudiantes de ja Asociacion de Psicoterapia de Grupo de Holanda, quienes contriltuyeron con sus ejem plos y comjxjrtieron sus ideas. Mordecai Kaffman, M. D., en: trevisté especialmente a la familia israelf para este ilhro. sentileca que le agradezco. Por iiltimo, debo expresar mi agra- decimiento a Lyman Wynne por sus tiles sugerencias cuando leyé ef manuscrito y a Virginia LrPlante por su trabajo al editar el libro. NOTA ACERCA DE LAS TRANSCRIPCIONES Las transcripciones de este libro fueron realizadas teniendo cen cuenta la proteccién de la vida privada de las familias en- trevistadas. En los casos en que fue necesario hacerlo, los con- tenidos fueron expurgados. Antes de las transcripciones, en algunos casos se presentan referencias a las familias implicadas, a titulo de ejemplos con- cemientes a diversos aspectos. Este recurso anticipatorio es utilizado para familiarizar al lector con los casos, para que cuando lea el relato de la sesién en su totalidad pueda pres- tar una menor atencién al contenido y concentrarse en mayor medida en el proceso terapéutico. Las entrevistas a las familias Smith, Dodds y Gorden fuc- ron filmadas, y el anilisis correspondiente fue realizado. por Braulio Montalvo, Los titulos de las peliculas son "Pienso que soy yo- Despliegue Diferencial Como Hecho Contextuar (capitulo 9), "Afinidad” (capitulo 10), y "Una familia algo agitada” (capitulo 11). Para toda informacién acerca de estas peliculas, dirigirse a la Philadelphia Child Guidance Clinic, 1700 Bainbridge Street, Philadelphia, Pennsylvania 19146. B PROLOGO PARA LA EDICION ESPANOLA En la hima década, en los Estados Unidos, la terapia fa- miliar ha dejado de ser un proceso experimental, usado en lugares especializados, y se ha convertide en una de las mods- lidades terapéuticas que se practica en los centros de salud meatal. En centros donde la orientacién es predominantemente individual y psicodinémica la terapia familiar se ha incorpo- rado tinicamente como una nueva técnica sin modificar los ‘conceptos teoréticos tradicionales. Pero denrto del campo de Ja terapia familiar se ha desarrollado una diferenciacién en los conceptos teorsticos tradicionales. Pero dentro del campo de procesos de supervisién y ensefianza. A veces teoria, técnica y centrenamiento se confunden y aglutinan en la figura carismé- tica de un maestro. Desde un punto de vista general se podrfa decir que hay tres corrientes en Ia terapia familiar en los Estados Unidos. Una que lamaré la corriente transicional que trata de amal- gamar conceptos nuevos de sistemas con conceptos dindmicos twadicionales y que en el tratamiento tiene como objetivo la reestructuracién psicolégica del paciente, y pone énfasis en la exploracién del pasado, en el contenido de la comunica- cin y en interpretacién y transferencia como instrumento de cambio. La segunda es Ia corriente existencia! que tiene como objetivo el crecimiento y expansién de Ia persona y en el tratamiento pone énfasis én la experiencia en el presente entre as el terapeuta y los miembros de la familia, como instrumento de cambio para ambos. La tercera corriente tiene como obje- tivo el cambio del sistema familiar como contexto social y psi- colégico de los miembros de la familia, y en la terapia el <énfasis esté en la transformacién de los procesos interpersonales cen disfuncién. Describiré dos grupos en cada corriente simplemente para dar al lector de habla hispana una visién panordmica, pero es claro que ésta es una lista muy parcial y en algunos aspectos no es la mis representativa, Dentro del primer grupo esta el Instituto de Natin Acker man en Nueva York ditigido ahora por Donald Bloch que es también el Editor de la revista "Family Process". Este grupo ccuyas raices teoréticas se encuentran en los libros de Ackerman, es. fundamentalmente -0, Bloch ha elaborado y expandi- do coneeptos escencialmente dinémicos como la idea del "ego portable" para explicar Ia continuidad del individuo a travé: de las visicitudes de la familia y ha incorporado en la ense- fianza en su centro conceptos existenciales y las téenicas de escultura, desarrollados por V. Satir Otro miembro de esta corriente, I. Boszarmenyi Nagy, pro- fesor en 1a Universidad de Hahnemann en Filadelfia, ha de- sarrollado una teoria ética de la familia con raices Buberianas. Nagy en su libro "Invisible Loyalties" propone un sistema ético de obligaciones familiares que se desarrolla a través de las generaciones. El sugiere que el tratamiento familiar in- cluya por Io menos tres generaciones con el objetivo de libe- racién individual a través del "pago” de las obligaciones inter- familiares, Dentro del grupo existencial 1a figura més conocida es V. Satir. V. Satir forms parte del grupo original de Palo Alto Junto con D. Jackson, J. Haley y D> Weakland y fue influen- ciada entonces por conceptas de sistema y comunicacién; so- bre esa base ella incorpors conceptos Cestaltistas (a la Fritz Perls) y técnicas de grupos de encuentro. V. Satir ha de- 16 sarrollado una técnica terapéutica Hamada "escultura de fami- lia" en la cual los miembros del grupo familiar transforman sus emociones y percepciones de la familia en un cuadro vivo en {que todos expresan en posiciones estiticas 0 movimientos cor- porales una metéfora en tres dimensiones de la visién familiar Esta técnica se ha incorporado al entrenamiento de terapeutas, familiares especialmente en el Instituto de Terapia Familiar de Boston con Fred y Bony Duhl y en cl Nack Gn con Peggy Pap. En algunos centros esta técnica ha tomado la dimensién exa- gerada de escuela, Ota persona de este grupo es Cari Whitaker, Profesor de la Universidad de Wisconsin, que ocupa una posicién impor- tante como el Terapista de los terapeutas de familia. Habiendo trabajado muchos aiios con pacientes esquizofrénicos en colabo- racién con Malone y Wirkentin, el Dr. Whitaker incorporé en sus téenicas de tratamiento libertad para utilizar tos estados emacionales e incluso los procesos irracionales del terapeuta para atacar la rigidez de las defensas de los miembros. fami- liares. El grupo de sistema tiene entre sus miembros al Decano de los terapeutas familiares, Murray Bowen de la George ‘Washington University. Bowen cs uno de los innovadores en el terreno de la terapia familiar. Hace més de 10 afios Bowen hospitalizaba en el Instituto Nacional de Higiene Mental (N.LM.H.), familias completas de pacientes esquizofrénicos pa- ra estudiar la familia como factor ctiol6gico. Uliimamente Bo- ‘wen ha incorporedo en el entrenamiento la familia de origen del estudante a terapeuta, El requiere que sus estudiantes vuelvan a sus familias de origen, exploren el pasado familiar hasta donde haya trazas histéricas, y que traten de producir cambios favorables en las relaciones de los miembros de st familia, Esta téenica se ha difundido y es utlzada en otros centros. En est grupo est la Philadelphia Child Guidance Clinic que yo diigi por 10 affos, donde trabajan entre otros Jay Hailey 7 y Braulio Montalvo. Esta es una de tres cuatro clinicas infan- tiles en los Estados Unidos donde todo el tratamiento es "fami- liar". Fue una de las elinicas que iniciaron servicios especiali dos para nifios en los Estados Unidos en 1925. En 1975 ade- mas de dar servicios extemos a més de 4.000 familias la cli- nica incorporé a sus servicios 24 camas para tratamiento corto (un maximo de dos meses) y capacidad para 70 nifos en hospitalizacién parcial (de 9:00 AM hasta las 3:00 PM). Ambos servicios utilizan la familia y terapia familiar en el tratamiento del nifio. El hospital tiene dos departamentos donde se hos- Pitalizan familias enteras por perfodos cortos para estudio y tratamiento, Como centro de investigacién hemos desarrollado en la eli- nica nuevos modelos para estudiar la influencia de la familia en el mantenimiento de sintomas psicosomiticos en cl nif, ‘Como centro de enseiianza hemos entrenado terapeutas no profesionales, tratando de ver en qué medida se pueden actua- lizar las experiencias y cualidades naturales del "healer" que no tiene educacién académica y tenemos un grupo de maes- ‘ros no-profesionales que ensefan terapia familiar. Tratando de desarrollar modelos econémicos de ensefianza familiar hemos establecido un grupo de maestros que viajan a diversas instituciones en el estado de Pensylvania; en ese programa en Ios thimos $ afios hemos implantado més de 40 instituciones y entrenado més de 350 terapeutas de familia, En supervisién Braulio Montalvo y Jay Hailey han establecido reglas de "supervisién en vivo" donde el supervisor observa la sesion a través del espejo unidireccional y hace sugerencias al terapeuta a través del teléfono o en consulta inmediata que el supervisor o el terapeuta pueden iniciar durante la sesién, Los conceptos que desarrollé en el libro son el producto de mis 10 afios como director de la Philadelphia Child Guidance Clini 20 de junio de 1975, S. Minuchin, 18 I TERAPIA ESTRUCTURAL DE LA FAMILIA Robert Smith su esposa, su hijo de doce aftos y su suegro se encuentran sentados junto a mi en su primera consulta con un terapeuta de familia, El sefior Smith es el paciente iden- tificado. En el transcurso de los tiltimos siete afios ha sido hospitalizado en dos ocasiones por una depresién acompafiada con agitacién y reciente mente ha solicitado una nueva hospi- talizacién, Minuchin: {Cuil es el problema?... {Entonces, quién de- EL seior Smith: Creo que es mi problema. Soy el que ten- go el problema .. Minuchin: No esté tan seguro. No hay que estar tan seguro. El sefior Smith: Bueno, soy el que estuvo en el hospital y todo eso. Minuchin: Aja, pero de todas maneras eso no me convence de que el problema sea suyo. Esta bien, prosiga. {Cusl es su problema? Seiior Smith: Estoy nerviosa, inguieto todo el tiempo... nunca puedo relajarme, Me levanto tenso, y les pedi que me hospitalizasen 19 ‘Minuchin: (Cree que usted es el problema? Serior Smith: Oh, pienso algo de eso. No sé si alguien to provoca, pero soy yo el que tiene el problema. Minuchin:.. sigamos su Vinea de pensamiento. Si estuviese cansado por algo o alguien exterior a usted, geval diria que es su problema? Sertor Smith: Sabe, me sentiia may sorprendio. Minuchin: Pensemos en la familia. ,Quién lo perturba? Seitor Smith: No creo que nadie de la familia lo haga Minuchin: Déjeme preguntarle a su esposa, ;De acuerdo? La consulta que se inicié con este didlogo fue el comienzo de un nuevo enfogue del problema del sefior Smith. En lugar de centrarse en el individuo, el terapeuta se centré en la per- sona en el marco de su familia. La afirmacién del terapeuta: "No esté tan seguro", cuestions Ja conviccién de que sélo el sefior Smith era el problema o Io tenia —una conviccién com- partida por el sefior Smith, su familia y los diversos profesi nnales de salud mental con los que habfa tenido contacto, EI marco de referencia del terapeuta es la terapia estructural de familia, un cuerpo de teorfa y téenicas que estudian al in- dividuo en su contexto social. Lat terapia basada en este marco de referencia intenta modificar 1a organizacién de la familia ‘Cuando se transforma Ia estructura del. grupo familiar, se mo- difican consecuentemente las_posiciones de los miembros en ese grupo. Como resultado de ello, se modifican las experie cias de cada individuo. La teorfa de la terapia de familias se basa en el hecho de que el hombre no es un ser aislado, sino un miembro activo y reactivo de grupos sociales. Lo que experimenta como real depende de elementos tanto intemos como extemos. Ortega ¥ Casset explica la paradéjica dualidad de la pervepcién humana de la realidad mediante una parabola: "Peary relata que en su viaje al polo se trasladé durante un dia entero hacia el norte, haciendo que los petros del trineo corriesen aprisa. 20 ‘A Ia noche consulté su rumbo para determinar su latitud y comprobé con gran sorpresa que estaba mucho més al sur que ala mafiana, Durante todo el dfa haba estado empefiado cn dirigirse hacia el norte sobre un inmenso iceberg orientado hacia el sur por una corriente ocednica"’. Los seres humanos se encuentran en una situacién similar a la del comandante Peary sobre el iceberg. La experiencia del hombre es deter- minada por su interaccién con el medio. Decir que el hombre es influido por el contexto social, so- bre cl cual también influye, puede parecer obvio. El concepto, sin duda, no es nuevo; ya Homero lo conocfa. Pero el hecho de basar las técnicas de salud mental en este concepto, cons- tiluye un nuevo enfogue. Las técnicas tradicionales de salud mental se originaron en tuna fascinacién producida por la dina/nica del individuo. Esta preocupacién dominé el campo y condujo a los terapeutas a concentrarse en la exploracién de la vida intrapsiquica. Como consecuencia inevitable, las técnicas de tratamiento basadas en esta concepcién se concentraron exclusivamente en el in- dividuo, aislado de su medio. Entre el individuo y su contexto social se crigié una "irontera” artificial. En teoria, se reconocié que esta frontera era artificial, pero en la préctica fue man tenida por el proceso de terapia. Al ser tratado en forma ais- Jada, era inevitable que los datos encontrados fuesen restrin- gidos a la forma en que él pensaba y sentia sélo acerca de lo que le ocurrfa; ese material centrado en el individuo, a su vez, reforzaba el enfoque del individuo en forma aislada de su contexto y dejaba escaso margen para un feedback correlativo. Por sf sola, la abundancia de los datos disponibles desalentaba ‘otros enfoques. Como consecuencia de ello, se legs a con- cebir al individuo como el asiento de la patologia, Un terapeuta orientado hacia la terapia individual tiende atin a considerar al individuo como el asiento de la patologia y a reunir solamente los datos que pucden obtenerse del © acerca del individuo. Por ejemplo, es posible que se dirija un nifio au 1 terapia porque es timido y tiene ensuefios diumos en clase. Es un solitario, con dificultades para relacionarse con sus com- paiieros. Un ferapeuta que trabaja en sesiones individuales ex- plorarfa los pensamientos y sentimientos del nifio acerca de su vida presente y de las personas de su. medio, los desarrollos hist6ricos de este conflicto con sus padres y hermanos, y la intrusién compulsiva de este conflicto en situaciones extra familiares aparentemente no relacionadas con él. Establecerfa contacto con la familia y la escuela, pero para comprender al nifio y su relacién con su familia se basaria fandamentalmente ‘en el contenido de la comunicacién del niio y en los fenmenos transferenciales. Se considera, dentro de esta concepcién, que tuna modificacién intema cognitiva-afectiva constituye cl paso necesario para facilitar Ia superacién del problema planteado. Podemos comparar al terapeuta que trabaja con este marco de referencia, con un técnico que utiliza un vidrio de aumento, Los detalles del campo son claros, pero cl campo esti suma- mente reducido. Al terapeuta que trabaja con el marco de referencia de la terapia estructural de familia lo podemos com- parar con un técnico con lentes graduables. Puede acercarse cuando desea estudiar el campo intrapsiquico, pero también puede observar con un foco mas amplio. Si el mismo nifio fuese enviado a un terapeuta familiar, el terapeuta explorarfa sus interacciones con los contextos. im portantes de su vida. En las entrevistas con la familia, el te- rapeuta observarfa la relacién del nifio con su madre, con su mezcla de unién y hostilidad. Es posible que observe que cuando el nifio habla en presencia de sts padres, rara vez se dirige a su padre, © que, cuando lo hace, tiende a hacerlo fa través de su madre, quien traduce y explica a su hijo ante su marido. Puede observar también que los otros. hermanos parecen mis espontiineos, interrumpen a los padres. y hablan tanto al padre como a la madre. De ese modo, el terapeuta no tiene que depender do las descripciones del nifio acerca de su padre, madre y hermanos para postular la introyeccién de las 2 figuras do la familia, Los miembros de la familia se encuen- tran presentes, muestran su. conducta en relacién con el nifio que, asi, puede sor descripta operacionalmente. El foco més amplio y la mayor flexibilidad del terapeuta aumentan las posibilidades de intervencién terapéutica. El terapeuta no se limita a 1a interaccién de 1a familia tal como hha sido inter- nalizada por cl nifio, sino que puede experimentar por sf mismo Ja forma en que los miembros de la familia se sostienen y califican mutuamente, Desarrolla entonces una teoria interac cional para explicar el fenémeno que observa. También puede ponerse en contacto con la escuela del nifio, puesto que el problema presentado se relaciona con el rendimiento escolar, Y las teorfas y técnicas de la terapia de familias conducen muy pronto a trabajar con el individuo en contextos diferentes del de la familia De ese modo, el terapeuta de familia no basa sus concep- ciones en una personalidad "esencial" que permaneceria. in- modificada a través de las vicisitudes de diferentes contextos y circunstancias. Considera al nifio como un miembro de dife- rontes contextos sociales, actuando y respondiendo en su marco Su concepeién acerca de la localizacién de la patologia es ‘mucho més amplia y también Io son, consecuentemente, las posibilidades de intervencién. EL HOMBI N SU CONTEXTO La terapia estructural de familia, que estudia al hombre en su contexto social, fe desarrollada en la segunda mitad del siglo veinte. Se trata de una de las miiltiples respuestas al concepto de hombre como parte de su medio, que comen- 26 a difundirse a comienzos de este siglo. El pensamiento psicodinamico individual se elabors a partir de una concep- én diferente, Ia del hombre como héroe, que sigue siendo el mismo poso a las circunstancias. En el Parafso perdido apa- 2B rece un ejemplo de esta idea, Cuando Satands es derrotado cen su rebelién contra Dios y arrojado al infiemo, desafia a sus circunstancias: ‘The mind is its own place, and of itself Can make a Heav'n of Hell, a Hell of Heav'n! + Esta percepcién del individuo pudo perdurar en un mundo cen el que los recursos del hombre parecfan infinitos. La tec- nologia moderna modifies esta concepeién. La tierra ya no aparece como un territorio sin limites, que espera a su preten- diente, sino como una cosmonave cuyos recursos disminuyen. Estos conceptos se reflejan en las percepciones del hombre acerca de sf mismo y de su forma de ser, Ya en 1914 Ortega y Casset escribia: "Yo soy yo y mi cir- cunstancia, y si no la salvo a ella no me salvo yo" y "este sector de la realidad circunstante forma la otra mitad de mi persona: sélo a través de él puedo integrarme y ser plena- mente yo mismo. La ciencia biolégica més reciente estudia el organismo vivo como una unidad compuesta del cuerpo y su. medio particular: de modo que el proceso vital no consiste s6lo en una adaptacién del cuerpo a su medio, sino también en la adaptacién del medio a su cuerpo. La mano procura amoldarse al objeto material, a fin de apresarlo bien: pero a Ja vez, cada objeto material oculta una previa afinidad con una mano determinada”, Existe un notable paralelo entre esta observacién poética realizada a comienzos de siglo y Ia explicacién mis moderna, cexpresada en Ienguaje cibernético, con la que Gregory Ba- teson anulé los limites entre el espacio interior y exterior para elaborar su propia metéfora de Ia mente: "Piensen en un home bre que tala un abo! con un hacha, Cada hachazo es mo- dificado © corregido de acuerdo con la forma del corte dejado * La mente es su propio tugar, y de sf —puede Fierno, un inficrno de ciel.) yer un cele del ine 4 cn el Arbol por los hachazos anteriores. Este proceso autoco- rrectivo es producide por un sistema total, érbol-ojos-cerebro- miisculos-hacha-golpe-irbol, y es este sistema total el que tiene las caracteristicas de 1a... mente". La antigua idea del individuo que actiia sobre su medio se ha convertido en este caso en una concepcién del individuo en interacci6n con su medio. Parafraseando a Ortega, un hombre no es él mismo sin sus circunstancias. La metéfora de Bateson de la mente y Ia imagen poética de Ortega acerca del hombre y sus circunstancias son corro- boradas por experimentos que demostraron que el context influye directamente sobre el proceso interno de la mente. Por ejemplo, el neurdlogo José Delgado, que realiz6 expe- riencias implantando electrodos en los cerebros de animales, demostré en forma concluyente que mientras un animal res- ponde al efecto desencadenante de Ia estimulacién eléctrica, Ja conducta asf motivada es organizada por su contexto, Al escribir acerca de sus experimentos con monos, dijo: "Se sabe perfectamente que las colonias de monos constituyen socieda- des autocriticas en las que un animal se ubica como jefe del grupo, que requiere una gran parte del tertitorio, se ali- menta cn primer lugar y es cvitado por los otros, quicnes cexpresan su. sumisién... Hemos observado en diversas colo- nias que la estimulacién eléctrica del mono jefe incrementaba su agresién ¢ induefa a ataques bien dirigidos contra otros miembros del grupo, a los que echaba y ocasionalmente mor- dfa,,. Era evidente que esta hostilidad se orientaba en for- ma I6gica... puesto que habitualmente atacaba a otto ma- cho que desafiaba su autoridad y nunca atacaba a la hembra peguefia que era su compafiera favorita”. En otras palabras, Ja estimulacién interna, eléetrica, de la conducta era modi- ficada, en todos los casos, por el contexto. La estimulacién eléctrica podia, suscitar agresién, pero la expresién de ésta se relacionaba con el grupo social EI interés de Delgado en la relacién entre la imulacién 28 eléctrica del cerebro y el contexto social del animal estimu- lado lo condujo a realizar experiencias modificando el con- texto social del animal. El rango social de una mona fue mo- dificado a través del cambio de la composicién del. grupo. En el primer grupo ocupaba el lugar mis bajo entre cuatro, cen el segundo ocupaba el (erver lugar, y en el tercero fue uubicada en el segundo. En las tres colonias, la estimulacién elécttica indyjo a la mona a corer a lo largo de su jaula, f trepar, golpear, vocalizar y atacar @ ottos animales. En el primer grupo, sélo intents atacar a otto mono en una opor- tunidad. En el segundo grupo se volvié més agresiva, atacando veinticuatro veces. En el grupo tres, la mona estimulada atacé ‘otros monos setenta y siete veces. Delgado Hlegé a la siguiente conclusién: "la agresién dirigida contra individuos de la mis- ma especie fue provocada... por la estimulacién eléetrica de diversas estructuras cerebrales, y su expresién dependia de la organizacién social... un acto agresivo provocado artifi- cialmente puede dirigirse contra un miembro especifico del grupo puede suprimirse por completo, de acuerdo con el rango social del sujeto estimulado™. Delgado comprobé también que si un mono de baja jerar quia es estimulado dentro de la jaula, es posible que no mues- tte cn absoluto una respuesta de rabia. Este descubrimiento puede ser explicado en téminos de represién, Pero también cs posible explicar la falta de respuesta del mono en. términos de dos potenciales distintos, uno de los cuales es més po- deroso. Si el potencial del contexto del mono de baja jerar- gu{a es mayor que Ia estimulacién del cerebro, es posible que no sienta rabia. Si se aumenta la estimulacién, 1a conducta del mono en este contexto se modifica, al igual que si se mo- difican las circunstancias. sociales. Delgado profundiza atin mis sus observaciones conside- rando también 1a influencia de la esfera social sobre el hom- bre, "No podemos ser libres en relacién con los padres, maestros y sociedad”, escribié, "puesto que ellos constituyen 26 Jas fuentes extracerebrales de nuestras mentes"”. La concep- cién de Delgado de la mente cerebral y extracerebral puede ser comparada en forma directa con las ideas de Bateson y Ontega*. Una mente humana se desarrolla a medida que el cerebro procesa y almacena los milltiples potenciales estimu- lados tanto intema como externamente. La informacién, acti- tudes y formas de percibir son asimiladas y almacenadas, y se convierten asi en una parte de la forma de accrcamicnto de la persona al contexto habitual con el que interactia, La familia constiuye un factor sumamente significative en este proceso, Bs un grupo social natural, que determina las respuestas de_sus miembros a través de estimulos desde el interior y desde el exterior. Su organizacién y estructura tamic zan y califican la experiencia de los miembros de la familia En muchos casos, se la puede considerar como la parte ex- tracerebral de la mente. La influencia de Ja familia sobre sus miembros fiver demos- trada experimentalmente por una investigacién de las enfer- medades psicosomiticas de la infancia que conduje con Lester Baker y nuestro equipo. Las comprobaciones realizadas en Ja investigacién proporcionaron fundamentos experimentales para el niicleo bésico de la terapia de familia: nos referimos al hecho que el niffo responde a las tensiones que afectan a la familia, Desarrollamos un método de medicién de las. res- puestas fisiol6gicas individuales a las tensiones de a familia, En el transcurso de una entrevista con una familia, concebida con este objetivo, se toman muestras de sangre de cada miem- bro de la familia, procediendo de tal modo que la obtencién de las muestras no interfiera con las interacciones en curso. Posteriormente, se analiza el nivel de dcidos grasos libres del plasma en las muestras. El cid graso libre (free fatty acid, FFA) constituye un indicador bioquimico del despertar emo- cional, ya que la concentracién aumenta dentro de los cinco a quince minutos posteriores a la tensién emocional. La com- paracién de los niveles de los FFA en diferentes momentos au de la entrevista estructural permite documentar_fisiolégica- mente Ia respuesta del individuo al stress familiar. Los resultados de los FFA de Ia familia Collins constituyen, un buen ejemplo (Figura 1). Ambos nifios eran diabéticos. Dede, 17, era diabética desde hacia tres afios; su hermana, Violet, lo era desde In infancia. Los estudios de la "labilidad fisiol6gica” de los nifios mostraron que no existian difere cias netas entre sus respuestas individuales al stress, Sin em- bbargo, estas dos nifias, con la misma enfermedad metabslica, con un equipamiento genético muy similar, y que vivian en la misma casa con los mismos padres, presentaban problemas clinicos muy diferentes, Dede era una “diabética super- lébil", es decir una diabética afectada por problemas psicosométicos. Presentaba ataques de cetoacidosis que no respondian a la insulina administrada en su hogar. En tres afios, habfa registrado treinta y tres ingresos al hospital para un tratamiento de emergencia. Violet presentaba algunos pro- bblemas de conducta de los que sus padres se quejaban, pero su diabetes se encontraba bajo un buen control médico. en. on. on Wn. wh Fig. I.— Cambios de los FFA de la familia Collins 28 En el transcurso de la entrevista tendiente a medir la res- ‘puesta de las nifias al streess, entre las 9 y las 10 AM. los padres fueron sometidos a dos situaciones de stress diferentes, mien- tras las nifias los observaban a través de un espejo de visién unidireccional. Aunque las niffas no podian participar en Ia situacién conflictiva, sus niveles de los FFA aumentaron cuan- do presenciaron la situacién. El impacto acumulativo del stress fisiol6gico en curso fue lo suficientemente importante como para producir cambios fisiolégicos notables aun en nifios no implicados directamente. A las diez en punto, las nifias fuc- ron conducidas a la habitacién con sus padres. En ese mo- mento, se comprobé con gran claridad que desempefiaban Papeles muy distintos en la familia. Dede estaba atrapada entre sus padres. Cada uno de ellos intentaba obtener su apoyo en la lucha contra el otro, de tal modo que Dede no podia responder a los requerimientos de uno sin aparecer como tomando posicién contra el otro. El apoyo de Violet no ert uscado: de ese modo, podia responder al conflicto de sus padres sin verse capturada en el medio. Los efectos de estos dos roles pueden apreciarse en los resultados de los FFA. Ambas nifias presentaron aumentos significativos en el transcurso de la entrevista, entre 9 y 10, y aumentos ain mayores entre 10 y 10:30, cuando estuvieron ‘con sus padres. Después del final de la entrevista a las 10:30, sin embargo, los FFA de Violet volvieron muy pronto a su nivel habitual. Los de Dede permanecieron elevados durante una hora y media més. En el caso de los padres, los niveles de los FFA aumentaron entre las 9.50 y las 10, lo que seffalaba un stress en las relaciones entre los esposos. Pero sus FFA disminuyeron des- pues del ingreso de las nifias y de que los padres hubiesen asumido sus funciones parentales. En esta familia, los con- flictos entre los padres disminufan o se desviaban cuando asumfan funciones parentales. Las nifias funcionaban como mecanismos que permitian derivar los conflictos. El precio que 29 pagaban es sefialado tanto por su incremento en los niveles de los KFA. como por la incapacidad de Dede para retomar a su nivel habitual. La interdependencia entre el individuo y su familia —h corriente entre "adentro” y “aluera'— es de- ‘mostrada en forma clara en Ia situacién experimental, en la que los acontecimientos producides a nivel de la conducta de los miembros de la familia pueden medirse en la corriente sanguinea de otros miembros de la familia EL ASIENTO DE LA PATOLOGIA Cuando se concibe a la mente como extracerebral al igual que como intracerebral, el hecho de situar a la patologia en cl interior de Ia mente del individuo no indica si se Io hace dentro o fuera de la persona, La patologia puede ubicarse en el interior del paciente, en su contexto social o en el feedback entre ambos. La frontera artificial es confusa y, por Jo tanto, el enfogue de la patologfa debe moditicarse. La terapia orientada desde este punto de vista se basa en tres axiomas. Cada uno de ellos pone el acento en cosas distintas que el axioma mencionado de la teorfa individual. En primer lugar, la vida psfquica de un individuo no es exclusivamente tun proceso interno. El individuo influye sobre su contexto y cs influido por éste por secuencias repetidas de interaccién. El individuo que vive en el seno de una familia es un miem- bro de un sistema social al que debe adaptarse. Sus acciones se encuentran regidas por las caracteristicas del sistema, y estas caracteristicas incluyen los efectos de sus propias accio- nes pasadas. El individuo responde a los stress que se pro- ducen en ottos lugares del sistema, a los que se adapta; y él puede contribuir en forma significativa al stress de otros miembros del sistema. El individuo puede ser considerado como un subsistema, 0 parte del sistema, pero se debe fomar en cuenta al conjunto, El segundo axioma que subyace a este tipo de terapia es el de que las modificaciones en una 30 estructura familiar contribuyen a la produccién de cambios cn la conducta y los procesos psiquicos internos de los miem- bros de ese sistema, El tercer axioma es que cuando un terapeuta trabaja con un paciente 0 con la familia de un Paciente, su conducta se incluye en ese contexto. Los tera- peutas y la familia forman en conjunto un nuevo sistema, terapéutico en este caso, que gobierna Ia conducta de sus miembros. Estas tres consideraciones —h de que el contexto afecta los procesos internos, la de que las modificaciones del con- texto producen cambios en el individuo y la de que la con- ducta del terapeuta es significativa en este cambio— siempre han formado parte del sentido comin basico de la terapia. Han ocupado el trasfondo en la bibliografla de psicoterapia, mientras los procesos intemos se situaron en el primer plano. ‘Sin embargo, no se ubicaron en el centro de la préctica psico- terapéutica, en la que atin existe una dicotomfa artificial en- te el individuo y su contexto social Podemos mencionar un ejemplo tomado de los conceptos del pensamiento paranoico, puesto que en este campo es fun- damental lograr una comprensién del contexto del paciente. ‘Sin embargo, en términos intrapsiquicos se sigue encarando a la paranoia como un trastomo del pensamiento formal, en cl que la percepcién de los acontecimientos es determinada por procesos internos, Como lo escribié Aaron Beck: "entre las personas normales, la secuencia percepcién-conocimiento- emocién es determinada en gran medida por el carécter de Ja situacién estimulo... (sin embargo) el paciente paranoide puede abstraer selectivamente los aspectos de su experiencia que concuerdan con su idea preconcebida de persecucisn, etc. Puede realizar juicios arbitrarios que no poseen fundamentos verdaderos, Habitualmente, éstos pueden manifestarse a través de la lectura de significados acultos en los acontecimientos. ‘También tiende a generalizar en exceso instancias aisladas de intrusién, diseriminacién, ete."'. En estos términos, la pa- 31 runoia es un fenémeno intemo relacionado con la realidad sélo en forma tangencial. Compérese lo que acabamos de sefalar con una concep- cién de la paranoia referida al contexto. En un estudio de enfermos mentales con sintomas paranoides, Erving Coffman sefialé que en las etapas iniciales de esta enfermedad, el con- texto social se complementa con el paciente que soporta la enfermedad’, Los grupos sociales significativos, como. los compatieros de trabajo, intentan refrenar al paciente, ya que sus sinfomas presentan tn carter destructive, Lo evitan en la media de lo posible y lo excluyen de las decisiones, Re- curren a.un modo de interaccién pucificador, evasivo, humo- ristico, que desalienta en lo posible la participacién del pa- ciente, Pueden incluso espiarlo 0 constituir una red de convi- veneia para lograr subrepticiamente que recurra a una atencién psiquidtrica. Su bien intencionado tacto y reserva despojan al paciente de un feedback correctivo, con In consecuencia ukerior de construir alrededor del paranoico una comunidad paranoide real El pensamiento y In conducta paranoides también pueden crearse experimentalmente en profesionales normales, de-ed- cacién superior, a través de experiencias de grupo tales como las proycctadas en los Leadership Institutes de la Travistock Clinic, En cl "ejercicio de grupo amplio", entre teinta y cine cuenta participantes se encuentran sentados en cfrculos con- ricos cuyo nimero oscila entre tres y cinco, Los profe- sionales se encuentran diseminados a través de los citealos, utlizando ropas de trabajo, con caras impasibles y permanecen silenciosos. Al grupo se le asigna una tarea ambigua: la de estudiar st. propia conducta, Dentro del marco de esta tarea sin lider, los patticipantes realizan declaraciones que no se dirigen a nadie en particular; debido a la forma en que se han sentado, ademas, los partici- antes se dan la espalda y no pueden ver al que habla. El dilogo no se desarolla; tuna afirmacién puede ser seguida 22 por otra afirmacién en un drea diferente. Las comunicaciones no son refrendadas por feedback que concuerden o disientan ‘con ellas. Se observa constantemente la aparicién de sospe- cchas, confusién acerea de la naturaleza de la realidad que se experimenta, Ia bisqueda de un objetivo y, finalmente, Ia aparicién de chivos emisarios en el grupo o el etiquetamiento de los profesionales como perseguidores omnipotentes. En este contexto, se desarrolla invariablemente el "pensamiento para- noide”, que es expresado por participantes cuyas circunstan- cias de vida y cuyas historias han sido muy diferentes. Es evidente asi, que la experiencia individual depende de ca- racterfsticas de Ia idiosinerasia del individuo en el contexto de su vida habitual, EL ESTUDIO DE IN CASO. En el pais de las maravillas, Alicia crecié repentinamente hasta alcanzar una estatura gigantesca. Lo experiment6. sin- tiendo que creefa, mientras la habitacién se hacia més. peque- fia. Si Alicia hubiese crecido en una habitacién que lo hu- biese hecho con el mismo ritmo, hubiese sentido probable- mente que todo permanecfa igual. Sélo si Alicia o la habita- cin cambian por separado su experiencia se modifica. Es simplista, aunque no incorrecto, decir que la terapia intrapsi quica se centra en el cambio de Alicia. Una terapia estruc- tural de familia intenta cambiar a Alicia en forma conjunta con la habitacién, El tratamiento de un paciente con desérdenes paranoides del pensamiento es instructive en relacién con estas diferen- tes concepciones. Una viuda italiana de cerca de setenta ailos, que habfa vivido en el mismo departamento durante veinti- cinco afios, comprobé un dia, al regresar a él, que le habfan robado. Decidié mudarse y llamé a una compafifa de mudan- zas. Fue el comienzo de una pesadilla, Segin su relato, las personas que se ocuparon de su mudanza intentaban con- 33 trolar-sus pasos. Cuando desplazaban sus pertenencias, in- tencionalmente colocaban fuera de lugar 0 perdian sus pre- ciosas_posesiones. Dejaron siniestras inscripciones —criptogra- smus— en sus muebles. Cuando salié, la siguieron, hacigndose secretamente seffales entre sf, Concurrié a ver a un psiquiatra, {que le dio tranquilizantes, pero sus experiencias no cambiaron. Fue enviada entonces a una unidad de intemacién en la que ‘otro psiquiatra la entrevist6. Intencionalmente, éste dejé unas botellas sobre la mesa. Aunque no sabfa qué eran, de todas ‘maneras ella las considers peligrosas. El psiquiatra le reco- mendé que se hospitalizase, pero se neg6. Fue a ver a otro terapeuta, cuyas intervenciones se basa- ban en una comprensién ecolégica de los ancianos y solitarios. Le explicé a la mujer que clla habia perdido su. caparazén la antigua casa en la que conocfa a todos los objetos, al ba- rio y a las personas que vivian en &—, De ese mado, y como todo crustéceo que pierde su caparazén, era vulnerable, La realidad producirfa nuevos efectos, Estos problemas. desapa- recerfan, le aseguré, cuando le creciese una nueva caparazén. ‘Ambos discutieron acerca del modo eficaz para abreviar ese pperfodo. Ella debfa deshacer todo el equipaje, colgar los cua- dros que habfan decorado su departamento anterior, poner los libros en los estantes y organizar el departamento para que todo le fuese familiar. Tenia que "rutinizar" todos sus movi- mientos. Debfa levantarse a la misma hora, hacer las compras en un momento determinado de la jomada, ir a los mismos negocios y ticndas, y asf sucesivamente, Durante dos sema- ras, no (enia que intentar hacerse de nuevos amigos cn cl nuevo barrio, Debfa ir a visirér a sus antiguos amigos, pero para no abusar de sus amigos y de su familia, no debia des- cribir ninguna de sus experiencias. Si alguien la interrogaba acerca de sus problemas, les dirfa que, simplemente, eran los problemas de los ancianos, ilégicos y temerosos, Esa intervencién establecié una rutina para ayudar a la pa- ciente a aumentar su sentido de familiaridad con un nuevo 34 tervitorio, en una forma muy similar a Ia que utilizan los ani- males para explorar y examinar un rea desconocida, La te- rrorifica experiencia de la escasa familiaridad con nuevas circunstancias habfa sido interpretada por esta solitaria per- sona como una conspiracién contra ella. A través de las mis- mas medidas mediante las cuales habfa intentado comunicar sus experiencias, el feedback de su medio habfa ampliticado su sensacién de ser anormal y psicética. Sus parientes y am gos se habfan asustado ante su actitud y, a su vez, la habfan asustado mediante su conspiracién secreta. A su alrededor, se habia desarrollado una comunidad paranoide. Dos psiquia- tras le diagnosticaron una psicosis con alucinacién paranoide y. de acuerdo con esta interpretacién, le sugirieron que se internase. Sin embargo, un terapeuta basado en una concepcién del contexto interpreté su mudanza a un nuevo departamento como una crisis ecol6gica, De acuerdo con la metifora de Ali cia en su habitacién, percibié a 1a mujer como cambiando con mayor lentitud que su mundo. Su intervencién implies un cambio de la posicién de la mujer en el mundo proporcién ndndole un control sobre é! hasta que le fuese familiar, Actus para proteger a la mujer, haciéndose cargo de la situacién, guidndola hasta tanto le creciese "una nueva caparaz6n", Al mismo tiempo, bloqueé los procesos de feedback que poten ciaban Ia patologfa de la paciente, Su intervencién modifies la experiencia de ésta en relacién con sus circunstancias y sus sintomas, asf, desaparecieron répidamente. Siguié viviendo fen su nuevo departamento, con la independencia que deseaba. En este ejemplo, al igual que en la parébola del comandante Peary, el cambio st produjo en menor medida en lo que con- cernia al interior o al exterior del paciente que en lo refe- rente a la relacién de la paciente con sus circunstancias. La terapia estructural de familia encara el proceso del feed- back entre las circunstancias y las personas implicadas —bs ‘cambios impuestos por una persona sobre sus circunstancias y Ja forma en que los feedback en relacién con estos cambios 35 afectan su accién posterior—. Una mutacién en ta posicién de luna persona en relaciGn con sus circunstancias constituye una modificacién de su experiencia. La terapia de familia recurre fa técnicas que alteran el contexto inmediato de las personas de tal modo que sus posiciones cambian, Al cambiar la rela cin entre una persona y el contexto familiar en que se mueve, se modifica consecuentemente su experiencia subjetiva. Por ejemplo, una nifia de doce afios tenia asma de origen pskosomético. Recibfa una intensa medicacién, faltaba a me- nudo a la escuela y el afio anterior habia sido evada a la sala de urgencia en tres ocasiones. Se la dirigié a un psiquia- tra de nifios, que insistié en ver a toda la familia —ks padres y los dos hermanos mayores— de la paciente identificada, En fl transcurso de la primera entrevista, cl terapeuta Hamé la atencién de la familia acerca de la obesidad de la hija mayor. La preocupacién de la familia, entonces, se desplazé ¢ incluyé a la preocupacién acerca de la paciente asi identificada. Los sintomas de la nifia asmética disminuyeron entonces hasta un unto tal que permitié controlar su asma con una medicacién mucho menos intensa y, también, dejar de faltar a 1a escuela, En la estructura de 1a familia se produjeron modificaciones. Dej6 de ser una familia preocupada por proteger a una nifia asmatica para pasar a ser una familia con dos padres preocu- pados por el asma de una hija y la obesidad de otra. La po- sicién de la paciente inicialmente identificada en la familia se modifies y, concomitantemente, se modificé su experiencia, Empe76 a considerar a su hermana mayor como una persona que enfrentaba dificultades. La forma de interaccién de sus padres con ella, basada en la sobreproteccién y la preocupa- cién, disminuy6 al afiadirse un nuevo blanco de preocupacién. El terapeuta habia cambiado una parte de la organizacién de la familia de tal modo que el movimiento era ahora posible: ‘Adopt6 una modalidad habitual cn cllos —proocupacién— pero amplié su objeto. La nueva perspectiva modificé la experien- cia de los miembros de la familia 36 Este es el fundamento de la terapia de familia, El terapeuta se asocia con la familia con el objetivo de cambiar la orga- nizacién de la familia de tal modo que la experiencia de sus micmbros se modifique. A través de la facilitacién del uso de modalidades alternativas de interaccién entre los miembros de la familia, el terapeuta recurre a la matriz de Ia familia para el proceso de curacién, La familia, al modificarse, ofrece a sus miembros nuevas circunstancias y nuevas perspectivas frente a sus circunstancias. La nueva organizacién permite un continuo refuerzo de la nueva experiencia, lo que proporciona una validacién del nuevo sentido de sf. En esta estructura teorética no se ignora al individuo. El presente del individuo es su pasado mds sus circunstancias actuales. Una parte de su pasado sobreviviré siempre, con- tenido y modificado por las interacciones actuales. Tanto su pasado como sus propiedades singulares forman parte de su contexto social, sobre el cual actiian del mismo modo en que éste acttia sobre é1. En los estudios del tipo del de Delgado se aprecia un respeto del individuo en su contexto, una preocu- pacién acerca del individuo no sélo en lo concerniente a sus caracteristicas innatas y adquiridas, sino también en su in- teraccién en el presente. El hombre tiene memoria; es el pro- ducto de su pasado, Al mismo tiempo, sus interaceiones en sus circunstancias actuales apoyan, califican 0 modifiean su experiencia, La terapia estructural de familia utiliza este marco de con- ceptualizar al hombre en sus circunstancias. El objetivo de la intervencién puede estar constituido también por cualquier otro segmento del ecosistema del individuo que parezca ade- cuado para encarar estrategias de Sproduccién de cambios. OBJETIVO DE LA TERAPIA El objetivo del terapeuta de familia y la técnica a la que recurre estén determinados por su marco teérico. La terapia 37 estructural de familia es una terapia de accién. La herra- mienta de esta terapia consiste en modificar el presente, no cen explorar ¢ interpretar el pasado. El pasado influyé en la creacién de la organizacin y funcionamiento actual de la fa- milia; por Io tanto, se manifiesta en el presente y podré cambiar a través de intervenciones que cambien el_ presente. EI objetivo de las intervenciones en el presente es el sis tema familiar. El terapeuta se asocia a este sistema y utiliza a su persona para transformarlo. Al cambiar la posicién de los miembros del sistema, cambia sus experiencias subjetivas. Con este objetivo, el terapeuta confia en algunas propic- dades del sistema. En primer lugar, una transformacién de su estructura permitiré al menos alguna posibilidad de cambio. En segundo lugar, él sistema de la familia esti organizado so- bre Ia base del apoyo, regulacién, alimentacién y socializa- ‘ein de sus miembros, Por lo tanto, el terapeuta Se une a la familia no para educarla o socializarla, sino, més bien, part reparar 0 modificar su funcionamiento para que ésta pueda desarrollar estas tareas con mayor eficacia. En tercer lugar, el sistema de la familia tiene propiedades de autoperpetua cién, Por Jo tanto, el proceso que el terapeuta inicia en el seno de la familia ser mantenido en su ausencia por los mecanismos de autoregulacién de ésta, En otras. palabras, luna ver. que se ha producido un cambio, la familia lo pre- servaré, proveyendo una matriz diferente y modificando el feedback que continuamente califica © valida las experiencias de sus miembros. Estos conceptos de estructura constituyen el fundamento de la terapia de familia, Sin -embargo, la terapia estructural de familia debe partir de un modelo de normalidad que le permita medir las anomalfas. Diversas entrevistas con familias pertenccientes a diferentes culturas que funcionan en forma z ilustrarén las dificultades normales de la vida familiar I UNA FAMILIA EN FORMACION La familia cs una unidad social que enfrenta una serie de areas de desarrollo, Estas difieren de acuerdo con los. pari- metros de las diferencias culturales, pero poseen rafces uni- versales. Este aspecto comiin de las situaciones de la familia fue expresado en forma ilustrativa por Giovanni Guareschi: {Por qué hablo tanto acerea de mf, de Margherita, de L: bertino y de la Pasionaria? En verdad, en nosotros no hay nada "excepcional”: Margherita no es una mujer "poco co- min’, ni tampoco Albertino y la Pasionaria son nifios "ex- traordinarios" Existen cien variedades diferentes de la uva, de la blanca fa la negra, de la dulce a la amarga, de la pequefia a la gran- de. Pero si se le extrae el jugo a cien racimos de uva de variedades diferentes, lo que se obtiene es siempre jugo de uuva, Si se exprimen uvas, nunca se obtiene nafta, leche © Timonada, Y lo que importa es el jugo, en todas las cosas; ¥ el jugo de mi familia es el mismo que el jugo de millo- nes de familias "ordinarias", puesto que Ios problemas bisicos de mi familia son los mismos que los de millones de fami- 39 lias: se originan en una situacién familiar basada en la ne- cesidad de adherir a los prineipios que constituyen la base de todos los hogares "corrientes" En Ja entrevista que figura a continuacién, los Wagner son una familia corriente; es decir, la pareja tiene miliples pro- blemas de relacién entre sf, debe educar nifios, manejarse ccon los parientes politicos y enfientar al mundo exterior, Al igual que todas las familias normales, enffentan constante- mente estos problemas y negocian los compromisos que po- sibilitan la vida en comin. La entrevista con ellos fue condueida para ilustrar las pas y procesos del desarrollo familiar. Los Wagner constitu yen una familia joven y, por lo tanto, la sesiGn intenté ex plorar la formacién de Ja familia y las modificaciones que se producen en una familia cuando nace el primer hijo. Al comienzo del matrimonio, una joven pareja debe enfien tar un cierto mimero de tareas. Los esposos deben acomo- arse mutuamente en un gran nimero de pequefias rutinas, Por ejemplo, deben desarrollar rutinas para acostarse y le- vantarse aproximadamente a la misma hora. Debe existir una rutina para comer juntos, y para poner y sacar la mesa, Debe existir una rutina para estar desnudo y tener relaciones sexua- les, para compartir el bafio y para leer el diario del domingo, para mirar televisién y clegir los programas, y para salir fa lugares que son del gusto de ambos. En este proceso de mutua acomodacién, la pareja desarro- Ua una serie de transacciones, formas en que cada esposo cestimula y controla la conducta del otro y, a su vez, es in- fluido por la secuencia de conducta anterior. Estas paulas tran- accionales constituyen una trama invisible de demandas com- plementarias que regulan muchas situaciones de la familia La pareja también enfrenta la tarea de separarse de cada familia de origen y de negociar una relacién diferente con los padres, hermanos y parientes politicos. Las prioridades 40 deben modificarse, ya que los deberes fundamentales de los nuevos esposos conciernen a su matrimonio. Las familias de origen deben aceptar y apoyar esta ruptura. Del mismo modo, los encuentros con los elementos extra familiares —trabajo, deberes y ocios— deben reorganizarse y regularse de un nuevo modo, Se deben adoptar decisiones en Jo que concicrne al modo en que se permitiré que las de- mandas del mundo exterior interfieran con la vida de la nueva familia. Cada esposo debe conocer a los amigos del ‘ovo y seleccionar a aquéllos que serin los amigos de la pa- reja, Cada cényuge debe ganar nuevos amigos y perder otros, antiguos. EI nacimiento de un nifio sefiala un cambio radical en la organizacién de la familia. Las funciones de los cényuges deben diferenciarse para enfrentar a los requerimientos del nifio, de atencién y alimento y para encarar las restricciones asi impuestas al tiempo de los padres. Por lo general, el com- promiso fisico y emocional con el niffo requiere un cambio fen las pautas transaccionales de los cOnyuges. En la organi- zacién de la familia aparece un nuevo grupo de subsistemas, cen el que los niffios y los padres tienen diferentes funciones. Este periodo requiere también una renegociacién de las fron- ‘eras con Ja familia en su conjunto y con os elementos extra- familiares. Los abuelos, tias y tfos pueden incorporarse para apoyar, orientar u organizar las nuevas funciones en la fa- milia, © la frontera alrededor de la familia nuclear puede fortalecerse. Los nifios se hacen adolescentes y luego adultos. Nuevos hermanos se unen a la familia, o los padres se convierten en abuelos. En diferentes periodas del desarrollo, asf, se le re- quiere a la familia que se adapte y restructure. Los cambios de la fuerza y productividad relativa de los miembros de la familia requieren acomodaciones continuas, al igual que el cambio general de la dependencia de los niflos frente a sus rnadres que se convierte en dependencia de los padres en 41 relacién con los hijos. A medida que los hijos abandonan la familia, reaparece 1a unidad original de marido y mujer, aun- que en circunstancias sociales totalmente distintas, La familia debe enfrentar el desafio de cambios tanto internos como ex- temos y mantener, al mismo tiempo, su continuidad, y debe apoyar y estimular el crecimiento de sus miembros mientras se adapta a una sociedad en transicién, Estas tareas no son ficiles de encarar. La pareja que entrevistamos a continuacién ilustra algu- nas de estas dificultades. Emily y Mark Wagner se casaron hace cuatro afios, Tienen un hijo, Tommy, de tres afios, Hace lun affo tuvieron cuatro sesiones con un consejero matrimonial. En Ja actualidad se consideran como una familia normal que ha debido enfrentar dificultades. Estén orgullosos por haber aleanzado un nivel de desarrollo en el que existe un mutuo apoyo y que permite su crecimiento. Respondieron un aviso aparecido en un pequetio periédico local para participar en una entrevista a cambio de una cierta suma. La entrevista fue realizada ante una gran audiencia de terapeutas de familia, que se encontraban sentados en la misma habitacién y respondieron a la entrevista a medida que se desarroll6. Tommy estaba en la habitacién jugando con una baby sitter La entrevista no es una entrevista terapéutica, Se trata de luna entrevista que se ocupa del desarrollo, que intenta reunir material histérico y dilucidar las percepciones de los. parti- cipantes acerca del funcionamiento de su familia, En una en- ttevista con una familia normal, existe un contrato implicito. La familia que se considera desde un comienzo normal, seri confirmada y apoyada en esta creencia por la entrevista. Cuan- do parta, seguiré consideréndose como una familia normal Minuchin: Lo primero que quiero saber es por qué estén aqui. ;Cémo tomaron Ja decisién de venir? Qué proceso los indujo @ hacerlo? a * Seftor Wagner: El sibado, en lo que a mi se refiere, es nuestro dfa libre, por asf decirlo. Todo lo que ella quiera “hacer, bueno, lo hacemos. Quiero seguir con este método, El domingo, entonces, es més © menos mi dia Minuchin: Es algo interesante; ;es0 quiere decir que uste- ddes deciden dividir el fin de semana en téminos de dias en Jos que usted toma las decisiones fundamentales y dias an que su esposa lo hace? Seiior Wagner: No es exactamente asi, es una especie de~ Minuchin: Sucedis asf. ;Cémo fue que se lleg6 a eso? Es interesante histéricamente; ;e6mo llegaron a esta especie de divisidn de la toma de decisién? ;Lo recuerdan? Sefior Wagner: Me atreveré a formular una hipstesis. Solfa ‘trabajar desde el lunes hasta el sabado en el asunto del hos- pital; el sabado era una especie de dar vueltas. Consideraba al domingo como el dia libre, en Io que me concemia. Asi, tan pronto como el silbado quedé libre, ella se apoders de él, por asf decirlo. No le hubiese dejado optar por el domingo porque el domingo era en cierto modo mi dia. Minuchin: Asi, llegaron a esta forma de regla implicita sin siquiera haber establecido nunca que éste era el modo en que actuaban, Seffora Wagner: Por lo general, los domingos va a pescar © algo asi y yo voy por mi lado. Siempre ha sido asf; bueno, ha sido asf desde hace més 0 menos un afi. Minuchin: Va a pescar los domingos. El sabado es el dia ‘en que ambos hacen algo juntos, y usted es la que decide Seftor Wagner: No es asi, no es exactamente asi, en reali- dad. Diria que los sdbados hay més probabilidades de que mi mujer sea la que decida qué vamos a hacer. Seffora Wagner: Por lo general tengo algo planificado, sabe, que quiero hacer, y por lo general lo hacemos. Los Wagner discuten una pauta transaccional que evolucio- rng en el transcurso de su vida de casados. Aunque pueden re- construir el desarrollo de esta pauta y no la consideran "exac- 43 tamente asi", de todos modos se trata de una regla que se hha convertido en parte de la organizacién de su vida en comin. Emily Wagner "tiene por lo general algo planeado" para el sdbado, y "por lo general" lo hacen. Los domingos cada c6n- yuge realiza sus propias actividades. Ambos considerarfan que luna infraccién innecesaria de esta pauta constituye una trai- ccién personal. Elementos morales y emocionales acompaiian las pautas transaccionales contractuales, aun aquellas cuyos orf- genes y razones han sido olvidados. Minuchin: ,Cémo ocurtié esto? Que decidiesen venir aqui Seiora Wagner: {Nenir aqui? Vi un aviso en el diario y Jlamé para informarme. Mi madre vio un aviso en el diario. Minuchin: ;Su madre? Hableme de su familia. {Viven cerca de ustedes? Sefiora Wagner: Viven en la misma comunidad. Sefior Wagner: Vamos a ir maiiana a mi casa, a la casa de mis padres, ‘Minuchin: {Sus padtes viven cerca? Seior Wagner: Oh, dirfa unos doscientos metros. Minuchin: (sus padres? Senora Wagner: Dirfa cuatro 0 cinco kilémettos. Minuchin: {Qué importancia tienen para usted sus padres? Seftor Wagner: Diria que— Seiiora Wagner: No mucha, realmente. Sefior Wagner: No, no en la medida de sus padres para ella Sefiora Wagner: Los padres de él trabajan ambos, y por lo ‘general no los vemos mucho cuando trabajan, y el domingo es el tinico dia en el que hacen las cosas que tienen que hacer. No los vemos con tanta frecuencia como a los mios, pero a los mios tampoco los vemos demasiado a menudo. El no los ve; yo los veo més, durante la semana. Minuchin: Eso quiere decir que la familia de Emily tiene ims relaciones con su familia que la de Mark. Era igual al comienzo, antes del nacimiento de Tommy? 44 Seior Wagner: Creo que si Seiora Wagner: Antes del nacimiento de Tommy viviamos con mis padres, al principio de nuestro matrimonio. Minuchin: Cuando se casaron, {se mudaron a lo de sus padres? Seftora Wagner: El estaba todavia en la universidad en ese momento, terminando un semestre alli. Y entonces nos que- damos alli. Vivimos con ellos desde abril hasta agosto. Y fue horrible Minuchin: {Su familia no lo queria? Senora Wagner: Lo querian, pero pensaban que — empeza- ‘mos a vernos cuando tenfamos dieciséis afios. Yo tenia dieciséis, 1 tenia diecisiete, asf que cuando empezamos a salir no se habia resuelto todavia nada, oh, creo que quedamos prendidos. Minuchin: {Qué edad tenian cuando se casaron? Sefora Wagner: Diecinueve Minuchin: ,X sus padres los invitaron a ir con ellos? Senora Wagner: Ellos slo dijeron, vengan a vivir con nosotros, hasta que fuimos a Kansas, Minuchin: (Ustedes pensaron que era 1a nica solucién que tenfan; no tenia» otras altemativas allt? Seftor Wagner: Bueno, hubiésemos podido vivir afuera pero yo estaba todavia estudiando y no queria abandonar mis es- tudios; queria seguir full time, y la tinica forma de logrario era reducir nuestros gastos de alojamiento en la medida de lo posible, y entonces aceptamos. Hubiésemos podido mudar- nos aluera, pero en esas circunstancias aceptamos su offeci- miento para poder ahorrar —asi, no estabamos realmente obli- gados a vivir allf, fue un problema de ahorro. Decidimos que podriamos vivir asf hasta tanto pudiésemos volver. Minuchin: (Qué ocurti6 entonces? Estin aquf, provenientes de dos familias distintas, unigndose y queriendo crear algo propio, pero yendo a vivir con su familia. ;Cémo funcion6? {Dijeron que vivieron allf durante mucho tiempo? ;Seis meses? Seiora Wagner: Cuatro meses. Pienso que me molesté algo 45 no tener mi propio departamento y todo eso; me pareefa que no podia, que realmente no podia ser una esposa Minuchin: {Por qué no podia ser una esposs! Senora Wagner: Oh, no lo puedo explicar, era s6lo una sensacién que tenfa como mujer. Seior Wagner: No, creo que quiz puedo decir algo acerca de esto. Era el resentimiento de su padre. Su padre es un poco el tipo al que le gusta hacer indicaciones perentorias acerca del modo de actuar en relacién con todo. Observé que podia aceptarlas o rechazarlas y que es no lo perturbaba, asf, en lo que me concemia, no me preocupé demasiado. Pero ella, ebido a sus sentimientos emotivos hacia su padre, toda ste gerencia que él hacia la rechazaba por completo y sentia que 41 le hacia perpetuamente indicaciones, aqui, alli, en todas partes. Minuchin: Bueno, veamos si entiendo lo que Mark dijo en forma distinta. Me parece que ustedes se casaron y usted (dirigiéndose a la esposa) queria separarse de la familia. Us- ted querfa crear una frontera y esperaba que él la ayudase a erearla, Pero vivieron en su casa y Mark se levaba bien con sus padtes. gLo ayudé él a fortalecer los limites alrededor suyo como esposa, o acaso se convirtié en un hijo de sus padres? Senora Wagner: No sé si puedo contestarle. Minuchin: {Le molestaba a usted cuando su esposo confra- temizaba con su padre mientras usted estaba enojada con Este? {Cuando confratemizaba con su. madre mientras usted estaba enojada con ella? Sefora Wagner: No, & nunca tomaba partido, por lo que— Minuchin: Es imposible. Seiiora Wagner: No lo hacia — munca venta a decitme "estés equivocada”. Y por lo general la que lo estaba era yo, no ‘mi familia Minuchin: Fijese, si él no tomaba partido, estaba tomando partido. 46 Sefiora Wagner: Pero se mantenfa callado. Minuchin: Bra una forma de tomar partido. Sabe, porqué, {uno esperaba usted que se pusiese de parte suya’ Sefiora Wagner: Sf, pero—. Minuchin: Entonces, si no lo hacfa, se ponfa del otro lado. Sefiora Wagner: Pero si hubiese abierto la boca se habrian planteado muchos problemas. Minuchin: Si no atacaba a su madre cuando usted Io hacfa, entonces se ponia del lado de su madre, aunque no hiciese nada. Seiior Wagner: Umm, hum, La unién de dos personas con la intencién de formar una familia, constituye el comienzo formal de una nueva unidad familiar. Pero entre la iniciacién formal de una familia y la creacién de una unidad viable hay un gran trecho. Una de las tareas que enfrenta la nueva pareja es la negociacién de su relacién con la familia del cényuge. Ademés, cada familia de origen debe adaptarse a la separacién © separacién parcial dé uno de sus miembros, la inclusién de un nuevo miembro y Ia asimilacién del subsistema del eényuge en el marco del funcionamiento del sistema familiar. Silas estructuras de las familias de origen, instauradas desde hace mucho tiempo no se modifican, es posible que lleguen a amenazar el proceso de constitucién de una nueva unidad Minuchin: {Cémo fue realmente? {Con quién tenia las dis- cusiones, con su padre © con su madre? Seflora Wagner: Mi madre—jno! No sé. No puedo acor darme, Sefior Wagner: ‘Tu padre a través de tu madre. Seflora Wagner: Era asf? No puedo acordarme, fue hace tanto tiempo. Minuchin: El dijo “tw padre a través de tu madre”, Es una linda manera de decitlo. Es asi cémo funciona’? Sefior Wagner: No esta totalmente relacionado con su ma- a dre ni con su padre; una parte del problema era yo. Siempre ‘me parecié que mi suegra y yo, en cierto modo, éramos una zona tampén entre ellos. Siempre me parecié que si consideraba ‘que mi esposa estaba equivocada, podta decitselo, y si estaba totalmente equivocada, ditia ‘ests equivocada", pero nunca me parecié que estaba totalmente equivocada. Es posible que me haya parecido que estaba equivocada en lo que hacia, pero que debfa haber alguna razén para ello, por lo menos en lo que 2 mf respecta. ‘Minuchin: ,Matk es siempre sensato? Sefiora Wagner: Ummm, hummmm, Minuchin: Bueno, eso debe ser muy doloroso. Seftora Wagner: A veces. ES muy sensato y yo soy muy ilégica. Somos tan diferentes como el dia y la noche, Minuchin: Asi que en esa época usted queria ser una es- posa y seguia siendo una hija. Sefiora Wagner-, Asi es Minuchin: Y ellos no maduraron. Sus padres no maduraron, Sefiora Wagner: No mis—no, no dirfa que mis padres, dirfa que fui yo Ia que no maduré. Minuchin: No, ellos tampoco crecieron Seflora Wagner-. Creo que discrepo con usted. Minuchin: Siguieron tratindola a usted como una hija cuan- do ya era una esposa. Sefiora Wagner: Puede ser, creo que es asf Minuchin: {Sabe? Eso quiere decir que no maduraron, En Jo que a usted respecta, frente a Ia nueva situacién, la siguic- ron tratando como una hija cuando usted ya habia cambiado. Era una hija, pero era una esposa, Los padres de la sefiora Wagner eran incapaces de cambiar para adaptarse a las nuevas circunstancias. En lugar de apren- der a tratarla como una esposa, comprometida en la forma cin de una nueva unidad social, siguieron traténdola funda ‘mentalmente como su hija, ubicando a su nuevo esposo en la 48 dificil posicién de tener que elegir entre su esposa y su sue- agra, La situacién que los Wagner describen es un problema de “limites” —an problema de negociar reglas adecuadas para Ja formacién de nuevos subsistemas. También es un proble- ‘ma ofiginado en el mantenimiento inadecuado de pautas de relacién Minuchin: Cudl es su nombre? Sefiora Wagner: Emily. Minuchin: Emily. Bien, mi nombre es Sal. {Qué tipo de familia es la suya? Quizé pueda describir a su familia. Y Mark puede ayudarla, pero sélo si usted lo necesita. {De acuerdo? Empiece usted, y si lo necesita a usted, Mark, se lo pedir, Sefiora Wagner: Bueno, tengo un hermano, con el que no hablaba hasta hace alrededor de tres afios. Peledbamos como perro y gato. Yo tenfa una relacién muy intima con mi madre. Mi padre, no lo pude soportar hasta que me casé. Y més o me- nos sigue igual Minuchin: No parece haber mucha comunicacién Sefiora Wagner: No, pero existe una totalidad, existe una ‘a comunicacién, sabe, y una cierta estabilidad. Minuchin: {La controlaban mucho? ; Se preocupaban por lo que hacia? Sefiora Wagner: Bueno, mi padre sf, mi madre no, Mi ma- dre era muy indulgente. Acostumbraba a protegerme por las ‘cosas que yo hacia mal. Minuchin: Umm, Asi, habfa algo entre usted, su padre y su madre en Io que usted podia mover al uno contra el otro. Sefiora Wagner: Bueno, pero yo — empecé a fumar a los trece. No tuve permiso de mi padre para hacerlo hasta que cumplt dieciséis, pero podfa fumar delante de mi madre. Cuando 61 no estaba, Henaba Ia casa de humo, Minuchin: Era como un triéngulo, Sefiora Wagner: Solfa hacerme la enferma, sabe, quedarme en casa y no ir a la escuela, y ella sabia que no estaba enferma 49 después de mis 0 menos las 8.15, y me encubria para que pu- diese quedarme el resto del dia. Seftor Wagner: Oh, algo mis que eso. Minuchin: Espere un poco. Ella esti describiendo a su fa milia y es ella la que tiene que preguntarle Sefiora Wagner:'E] quiere meter sus cosas. Seftor Wagner: Como ejemplo, més tarde, cuando nos co rnocimos, si nos quedabamos afuera hasta las 2 6 3 de la fiana, si pap se enteraba, bueno, habria habido Ifo, pero nunca lo supo, Sefiora Wagner: Tu madre y tu padre tampoco lo supieron. Seior Wagner: No, pero no se preocupaban, esa es la di- ferencia Minuchin: En su familia, algo ocurria entre su padre y su madre en Jo que usted toms partido por su madre Seiora Wagner: Recuerdo un incidente, no sé lo que fue, ‘mit padre se puso furioso por algo. Yo era, sabe, descarada, tenfa una lengua terrible y no me cuidaba de mandarlo a pa- seo. Debit tener quince, no sé siquiera qué habfa hecho que Jo puso furioso, pero sé que no me hablaba porque estaba furioso por algo que yo habfa hecho, y mi madre me dejé salir porque no estaba de acuerdo con su teorfa, y él no Te hablé por el resto del dia, tan exasperado estaba. Quiero decir que éste era cl tipo de situacién, apenas un incidente: Minuchin: Asi, su madre peleaba con su padre a través suyo. Sefiora Wagner: Probablemente, s{. Ah, no puedo acordarme de que mi padre me haya pegado hasta que tuve cerca de quince, y entonces lo hizo. Pienso que me pegé una vez. Me golpeé un par de veces, fue lo que hizo; no le hablé. Y le dijo a su hermano que—yo era muy arrogante, No lo res- petaba. ‘Minuchin: Quiero ilustrarlos acerea del modo en que se desen- vuelve una familia, asf que empezamos con su familia, y lo que me parece es un trigngulo en el que su madre fomentaba su enojo contra su padre, Veamos a su familia, Mark, ;Qué 50 tipo de familia era? Quiero que entiendan lo que estoy tra- tando de hacer. Quiero conocer algunas de las cosas que te vieron que erear para separarse de sus familias de origen. Seftor Wagner: Bueno, puedo empezar con las diferencias entre las dos. Mi familia, en contraposicién, es muy unida, Puede deberse al hecho que mis padres eran muy unidos, Minuchin: ;Cusntos hermanos tiene? Senor Wagner: Un hermano mayor y una hermana menor. Siempre hicimos cosas juntos, con muy poca discordia o pelea de esta naturaleza en el seno de la familia Sefiora Wagner: Pienso que te equivocas aqui. Sabes, tu madre. ‘Minuchin: Espere un momento, desea que ella intervenga? Senor Wagner: Seiora Wagner: Ti y tu madre tienen mucho contacto, pero tu padre es un miembro excluido. Sefior Wagner: Si, en cierto sentido es como un recién lle- gado. Mi madre era la antorcha guia de la familia Minuchin: ,Antorcha grande 0 pequeiia? Seftor Wagner: Una pequefia antorcha, asf de grande (risas). Minuchin: ;Peto su padre estaba afuera? Seftora Wagner: Su padre no tenfa nada que ver con la familia, realmente. Su madre era la guia; quiero decir que era ella quien tomaba las decisiones; hacia todo para los nifios Sefior Wagner: Se ocupaba de mis ropas y de mi vida social y de todo. Es cierto, O fue tn sido— cierto, Sin entrar muy fen detalle, la tinica persona que quizé no estaba tan ce no tan cerca, era mi padre. Era la nica persona que quiz era algo diferente en el sentido de que no formaba parte de Ja unidad, En la actualidad, sin embargo, toda la situacién se ha modificado. En esa época, sin embargo, era un extraiio. No habia mucha pelea porque en cierto modo intentsbamos evitamos. Minuchin: Usted y su padre. 1, esta bien, SL Seftor Wagner: Si, yo intentaba evitarlo. En realidad hacia lo mismo con el padre de ella si discrepaba con él. Minuchin: {Si discrepaba lo evitaba? Sefior Wagner: Si discrepaba con él, lo evitaba, por asf de- cirlo. Hacia caso omiso de su deseo si pensaba que no estaba bien, Si pensaba que estaba bien lo acataba, mi madre, de todos modos, siempre lo apoyaba, Minuchin: ;Su madre lo apoyaba? Seior Wagner: S{, dirfa que lo respaldaba en muchas de- cisiones erréneas — realmente actuaba de ese modo. Si estaba muy fuera de lugar, siempre racionalizaba en favor de él, e in- tentaba hacemos comprender las causas. Cada eényuge ha descripto asf el funcionamiento del sub- sistema parental en cada familia de origen. El subsistema pa- rental es Ia unidad de la familia sobre Ia que recae la respon- sabilidad en la guia y alimentacién de los nifios. En la familia de origen de Emily Wagner, el subsistema parental cra la norma de clase media, una pareja de esposo y esposa. Pero los conflictos entre ambos se esparcian hasta el frea de la hija, La autoridad parental estaba dividida, y cada padte atacaba al otro a través de su hija. La madre la alentaba para que desobedeciese al padre; el padre la agredia cuando estaba enojado con su esposa, En la familia de origen de Mark Wagner los padres habfan realizado una distribucién de las funciones. La madre se ocupaba de la mayor parte de las tareas relacionadas con la educacién y el padre era mis bien periférico, Pero los nifios sentian a su. madre como repre- sentante de Ia autoridad del padre. Minuchin: Asi, Wegaron a desarrollar una familia y cada uno de ustedes tenfa un modelo acerca de cémo hablar. En- tienden, Mark aprendié algunas reglas, y Emily otras, y apa- rentemente estas reglas eran diferentes. Seftor Wagner: Ast es. 2 ‘Minuchin: Bueno, entonces, se unieron ,y qué ocurri6? T vieron que crear sus propias reglas. {Como fue eso? Cuando una pareja se une, cada uno de sus miembros es- pera que las actitudes de! eényuge asumirén las formas a las que esti habituado. Cada cényuge intentara que el otro asuma Tas actitudes que conoce © que prefiere e incitard al otro a hacerlo, Un cierto ntimero de acuerdos son posibles. Cada ednyuge tendré areas en las que no serd flexible. En otras freas, es posible que se clijan formas alternativas de relacién cn respuesta a las preferencias del otro. Cada cOnyuge con- firmaré en algunas circunstancias a su esposo y lo descalificard en otras. A medida que se acomodan y se asimilan a las pre- ferencias del otro, algunas conductas son reforzadas y otras descartadas. De ese modo, se constituye un nuevo sistema familiar. Minuchin: {Cémo fueron los primeros afios? {Qué ocurrié el primer afio de matrimonio? Seffora Wagner: Fue un desastre. Minuchin: El la deja a usted decir la cosa afectiva. Ast, usted dice que fue un desastre. ;Cémo fue para usted, Mark? Sefior Wagner: Hasta cierto punto, fue una desilusién, por- que —ti mis ni menos de lo qué esperaba, en cierto modo. Minuchin: Oh. Sefior Wagner: Si, asf fue. Porque sabia, cuando nos casa- ‘mos, que no podiamos comprar una casa. Minuchin: Si, pero ésto no es nada. Este no es el modo en que... en que usted sintié. Sefior Wagner: Me meti en esto en forma algo més romin- tica. Estaba seguro de que seria superado ficilmente. Minuchin: {Siempre dice él las cosas a medias? Usted dijo que fue un desastre y él respondié con su I6gica. Seffora Wagner: Es légico en todo. Racionaliza lo que yo estaba diciendo, aunque es posible que realmente no Io sien- ta ast 33 Minuchin: Probablemente, ambos quieren decir lo mismo, Son sélo formas diferentes de decir exactamente lo mismo. ;Sa- be lo que diria si tradujese lo que él dijo a su lenguaje? Sefiora Wagner: ,Qué? Minuchin: Que fue wn desastre, {Quiere decir eémo fue 0 quiere que lo diga Mark? Sefiora Wagner: No, sabemos cémo apestaba (risas). Ponga a dos personas inmaduras juntas en una habita mente va a ser un desastre, my natural Minuchin: Pero de diferentes maneras. Sefiora Wagner: Bueno, él era estudiante, asi, cuando las, cosas iban mal podia meterse en sus libros. Y él realmente le ‘metia duro y parejo, y cuando las cosas iban mal, y yo me quedaba sentada ahi machacando sobre él y haciendo una montafia de las cosas, inflindolas fuera de proporcién y creo que si no hubiese tenido a Tommy probablemente lo hubiese dejado después del primer mes de casamiento. ‘Minuchin: ,Quién? Seiora Wagner: Tommy, mi hijo. Si no lo hubiese tenido, probablemente hubiese hecho las valijas y me hubiese ido corriendo a casa de mi madre después de estar un mes con 41a solas. Dirfa el segundo mes. El primer mes fue bien; todavia, Minuchin: No, pero usted dijo que los primeros cuatro meses usted— Senora Wagner: Oh, es cuando nos mudamos. Minuchin: Esti bien, eso quiere decir que los_primeros cuatro meses fue un desastre en cierto modo y luego Ip fue en forma diferente. Sefiora Wagner: Asf es. Fue un desastre durante dos. alos y medio. Seftor Wagner: Tuvo més altibajos. Senora Wagner: Tavo mas bajos que altos. Minuchin: Y probablemente usted pensé que era una si- twacién tinica, 4 Seftora Wagner: {Unica? Pensé que era horrible. Minuchin: Bien, ;qué ocurrié entonces? El —jqué estudia- ba usted? Sefior Wagner: Biologia y comercio. En un primer momento biologia Minuchin: ;Dénde? Seilor Wagner: En el City College, Kansas Minuchin: Bien, ;qué ocurrié entonces? El se alejaba y se ‘metia en sus libros. Setiora Wagner: AS. es Minuchin: Y usted no tenia nada que hacer. Sefiora Wagner: Me sentaba ahi y hablaba. ‘Minuchin: {Podta sacatlo de los libros? ;Podfa hablar con é1? Setiora Wagner: Si lo hubiese enloquecido lo suficiente, me habrfa replicado, pero es calmo y antes de perder realmente el control tiene que alcanzar el punto de hervor. Seftor Wagner: Emily, pienso que lo estis entendiendo mal (dirigiéndose a Minuchin). Pienso, que esté hablando acere: de nuestra capacidad de comunicamos. Minuchin: Estoy hablando de emo era un desastre. Sefior Wagner: Ese cra el problema fundamental, comuni- Sefiora Wagner: No. nos comunicébamos. Seftor Wagner: Habia diferencias de opinién muy serias (risas) sobre muchas cosas, una de las cudles era vivir en Kansas, ah, en un primer momento lo detestabas Setora Wagner: Pienso que en cualquier lugar que hubié- semos vivido, los dos primeros afios y medio hubiesen sido To mismo Sefior Wagner: Bueno, probablemente esa era la manera tuya de expresarlo, a través de Kansas, A ella no le gustaba cémo viviamos; no le importaba que yo fuese a la universi- dad; queria un poco mis al comienzo, creo. Sefiora Wagner: No nos comunicabamos para nada, Du- rante dos afios no cxistié ninguna comunicacién entre nosotros. 55 Después de la embestida, sabe, "te odio" y "te odio” —ese era el nivel de nuestra comunicacién. Finalmente Ilegamos hasta un punto en el que nos odiébamos mutuamente después de un rato, Seor Wagner: © creimos que ast era Sefiora Wagner: Sabe lo que sucedfa? El tenia un escape y yo no tenfa ninguna manera de escaparme, asf que me que- daba sentada alli Minuchin: Por supuesto. Realmente, él no cambié mucho su manera de vivir. Antes era un estudiante, y después también, {De qué manera cambié su vida? Sefora Wagner: En nada, salvo que una tiene que esperar un bebé y Iuego tenerlo y cuidarlo. Minuchin: ,Qué hacia antes del matrimonio? jora Wagner: Era estudiante, y después trabajé durante un tiempo. Minuchin: Entonces, el estilo de vida de Mark no fue per- turbado por el matrimonio y el suyo sf Seiiora Wagner: Perdéneme, le pido disculpas, no entendi esto Minuchin: 1 matrimonio alters mucho su estilo de vida. El de él no. Sefiora Wagner: Cierto, creo que es asi; pienso que tiene ran. Minuchin: ¥ entonces usted queria algo més de él. Sefiora Wagner: Si, porque é1 seguia con la misma rutina que tenia antes del matrimonio. Minuchin: No admitia que estaba casado. Seftora Wagner: Creo que lo admitia, bueno, lo hacfa hasta cierto punto, Volvia al hogar a un departamento que estaba limpio y preparada la comida, creo que después que llegé Tom- my hubo algo mas de desorganizacién (risas). ‘Minuchin: Bueno, No metamos todavia a Tommy. Ustedes se mudaron después de cuatro terribles meses, cuando usted era todavia una hija siendo ya una esposa; Iuego se-muda- 56 ron a Kansas. Y allf no era ya una hija, porque sus padres no estaban allf; no era una estudiante, no trabajaba, pero de tun modo u otro no era una esposa. Sefiora Wagner: Creo que tiene razé6n, si Un matrimonio debe sustituir determinadas disposiciones so- ciales que han sido abandonadas para la formacién de la nue- va unidad. La creacién de un nuevo sistema social significa la creacién © consolidacién de un limite alrededor de la pa- reja. Se ven separados de determinados contactos y activida- des anteriores. La inversi6n en el matrimonio se obtiene & ex- pensas de otras relaciones, EL grado de inversién en el matrimonio puede depender de cuiinto ha sido Io que se abandoné. Mark Wagner siguié realizando la misma tarea, la de estudiar, cuando fueron a Kansas. Ella, por su parte, se vio amputada de su vida ante- rior, de modo tal que le pedia a la relacién mucho més de Jo que le pedia Mark. Minuchin: Abora, ,qué hizo para cambiar eso? Seffora Wagner: ,Qué quiere decir, ahora? Minuchin: No, entonces. Me reliero @ que por lo que veo para Mark fue mas fcil casarse sin cambiar realmente mucho en relacién con su vida anterior. Pero para usted fue muy diferente, Dependia de usted, entonces, el intentar cambiarlo, puesto que él estaba cémodo. {Qué hizo usted? Sefiora Wagner: {Qué hice? Minuchin: Si, como ,cémo lo sacudi6? Comprende, él es- taba dormido, Sefiora Wagner: Oh, no sé, no puedo Minuchin: {Cémo lo sacudié ella? (larga pausa) Seftor Wagner: Usted ha visto s6lo uno de tos lados de 1a historia (risas). Ah, no, tal como lo veo, no intent6 realmente sacudirme. Lo que hizo fue suprimir la comunicacién, por completo, Sefiora Wagner: Ummm, 37 Sefior Wagner: Fijese, ni siquiera podia hablarle, No que- ria discutir nada en absoluto. Senora Wagner: Construi un gran muro a mi alrededor. Minuchin: Esa es una forma de comunicarse. Le estaba diciendo a é1.. Seffora Wagner: Reventa Minuchin: Bueno, © cambia. Sefiora Wagner: Pero creo que era yo la que tenfa que cambiar. Pienso que en cierto modo era yo la que tenia que cambiar. Era inmadura. Llegué al matrimonio con una idea Minuchin: {EL también era inmadurol Sefiora Wagner: As{ es. El tenfa... Minuchin: El no estaba casado, jlo entiende? Seflora Wagner: Pero fijese, no, no me di cuenta de eso fen ese momento. Simplemente acepté todo lo que ocurrfa y me acusé por ello Minuchin: {Por qué? Seflora Wagner: Porque habitualmente yo provocaba las co- sas, quiero decir, él solfa permanecer tranquilo, sabe, escri- biendo un trabajo de apuro 0 algo asi Minuchin: Ese es su estilo, su estilo es achicar los proble- ‘mas, usted era la que tenfa que activar algo si querfa que se hiciese, pero él la hacia sentir culpable. Sefiora Wagner: Yo dirfa que cra mitad y mitad. Yo me hacia sentir culpable y luego 1 lo acentuaba y decia: "eres una bruja’, me entiende, respaldéndome en mi forma de sen- tirme. Minuchin: Mark, {cuindo se cas6 usted? Pienso, Emily, puesto que usted se cas6, que usted realmente lo necesitaba y que en un comienzo usted estaba mis comprometida que 1 en el matrimonio, Sefiora Wagner: Si. Minuchin: Entonces, Mark, jcudndo se casé usted? Sefior Wagner: Hace aproximadamente un aio (risas). 58 Minuchin: Bueno, sigamos con esto. Me entienden, simple- mente quiero deciries que lo que me estin diciendo es muy habitual, saben. Diria que probablemente obedece a las le- yes estadisticas, Por supuesto, es espectfico en el caso de cada pareja. Pero todas las parejas alraviesan situaciones. simila- res a ésta. Y algunos nunca, nunca se casan realmente. Asi, el proceso desde el rite du passaje* (rito de pasaje) que ustedes tuvieron con el juez de paz, o lo que sea, hasta el punto de estar casado, puede extenderse realmente durante un lapso muy profongado. Algunas personas se divorcian sin haber estado realmente casadas. Sefiora Wagner: Oh, nosotros también pensamos en esto, quiero decir Sefior Wagner: Yo comprendia, atin entonces, que algo te- nnfa que cambiar, pero entonces trataba de racionalizar, "bue- no, {cudl es el problema?" (Risas,) "Bueno, iremos hasta el origen: {cules son los orfgenes del problema?" Bueno, ob- viamente, se requiere una cierta adaptacién de ambas partes. Para mf, es una adaptacién muy simple, porque a todo.res- ecto hubo poca modificacién, ningin cambio, de ninguna manera. En su caso, sabfa que se trataba de un cambio radi- cal. Me entiende, era en relacién con eso que estaba equivo- cado. Me mantenia demasiado en mi propio surco, en mi propio ritmo. Me tenia que mantener tal como era, realmente metiéndole duro y parejo. El obstéculo se encontraba alli, y realmente no intenté derribarlo; yo queria intentarlo, nada ocurria, y volvia a mi modo de ser, diciendo que tarde 0 temprano me tenfa que aplacar 0 cuando la situacién cam- bie, me aplacarfa, cuando nos mudemos, cuando coneluya mis studios, etc. Y ocurrié, pero no creo que lo hice por esta raz6n particular. Creo que ocurrié porque maduré y compren- di que habia muchas mis cosas involucradas que las que yo habia hecho. * Bn francés en el original. (N. del T.) 59 La tarea de constitucién de Ia familia Wagner requirié ‘un tiempo bastante prolongado, y ello se debi6, en parte, a que Ja familia estaba inmersa en situaciones sociales que obs- taculizaban la formacién de una unidad conyugal estable. Primero vivieron con los padres de Emily. Emily habia sido parte de una estructura transaccional disfuncional en el ma- trimonio de sus padres. Cuando se casaron, éstos fueron in- capaces de renunciar a ella e, incluso, incorporaron al matido a sus propias pautas. Mark y Emily fueron incapaces de apoyarse ‘mutuamente para consolidar la frontera entre ellos y los pa dres de Emily. Cuando se mudaron, las necesidades de Mark como estudiante y como el que parcialmente ganaba lo nece- sario para mantenerse lo sumergicron, dejindole escasa ci pacidad para un compromiso emocional significative con su mujer. Las posibilidades de un apoyo mutuo se vieron anula~ das por pautas disfuncionales, Minuchin: Examinemos lo que ocurrié en ese momento. Entienden, en ese momento ocurié algo fundamental. ;Cus do nacié Tommy? Sefora Wagner: Después de que fuimos a Kansas. Minuchin: {Qué ocurrié entonces? Seiora Wagner: No mejors. Empeors. Minuchin: Bueno, pero cémo? Entonces lo tenia a Tommy. Sefiora Wagner: Es cierto, y entonces no necesitaba a Mack, Simplemente, lo excluf por completo, sabe Minuchin: Se convirti6 en una madre. Sefiora Wagner: AS es. Minuchin: {Qué le ocurrié a usted? Sefior Wagner: No cambié lo suficiente, probablemente En cierto modo cambié, pero, una vez mas, estaba detris de mi pequefio muro, Minuchin: Tommy era importante para usted? Sefior Wagner: Oh, sf. Sefiora Wagner: Estébamos muy préximos —buen>— en el 60 ‘momento del nacimiento él estuvo muy cercano; quiero decir, bueno, estuvo conmigo durante los dolores de parto. Minuchin: (Tuvo usted, tuvo usted un parto natural? Sefior Wagner: No realmente, no estuve con ella en el parto. Estuve con ella durante los dolores del parto y hasta el arto, Minuchin: Bueno, tuvo a Tommy y no lo necesitaba a us- ted, qué le sucedié entonces a usted? Sefiora Wagner: Nada. Siguié estudiando, Seffor Wagner: Nada realmente cambi6. En cierto sentido, Sefiora Wagner: Fue a los cursos la misma noche del dfa cen que su hijo nacié de mafiana. Fue a clase aunque no dur- mi6 en toda la noche. Minuchin: Oh. {Qué ocurri6 entonces? Ven, entonces hat ocurrido algo nuevo. Ella tenia un hijo propio. Era madre. Y usted podia ser padre 0 podia no serlo, gme entiende? Usted tenia una alternativa, Cuando nace un nifio, deben aparecer nuevas. funciones. EI funcionamiento de una unidad conyugal debe modificarse para enfrentar los requerimientos de la paternidad. En gene- ral, el sistema debe efectuar los complejos cambios requeri- dos para pasar de un sistema de dos a un sistema de tres. Por lo general, el compromiso de la mujer con una unidad de tres, incluyendo un mayor compromiso con el matrimonio, se inicia con el embarazo. El nifio es una realidad para clla mucho antes que para el hombre. Recién en el nacimiento 1 comienza a sentirse como un padre, y, en algunos casos, in- cluso mas tarde. El hombre puede seguir sin comprometerse mientras 1a mujer ya se esté adaptando a un nuevo nivel de formacién familiar Seftora Wagner: Bl siempre ha sido un padre. Seflor Wagner: No sé realmente qué decir. No puedo pen- sar ahora, y no puedo decir que cambié radicalmente 0 que 61 Minuchin: Como se sacaba Ja basura. Sefior Wagner: Era s6lo una pequefia cosita, y todas las cosas que ella mencioné eran pequeflas cositas, ah Minuchin: La vida esta hecha de pequetias cositas. Sefior Wagner: {Ese era mi modo de mostrar resistencia o... qué? Minuchin: Creo que usted estaba diciendo todo el tiempo “soy soltero", ;no le parece’? Sefiora Wagner: Podia haberlo sido. Minuchin: Usted le decia “estés casado, Saca la basura Es una funcién del que esté casado” (risas). El decta "soy soltero” Senora Wagner: El no ayudaba. Quiero decir, nunca cam- bi6 un pafial hasta que Tommy tuvo seis meses, y fue a: desde un comienzo. Yo decia "Mark, tienes que aprender a cambiar los pafiales, qué pasaria si me enfermo o si ocurre algo. Vas a tener que cambiar los pafiales”. Bueno, no podi salir sin Ievarme al bebé conmigo, porque el bebé podia molestarlo mientras estudiaba, Y asf, justo en ese punto, se produce un conflict. La crianza de un nifio ofrece miiltiples posibilidades para el crecimiento individual y para consolidar el sistema fami- liar, Al mismo tiempo, es un campo en el que se disputan muchas batallas arduas. A menudo, los conilictos no resucl- tos entre los esposos son desplazados al area de la crianza del nifio debido a que la pareja no puede separar las fun- ciones de padre de las funciones de esposo. Minuchin: Permitanme meterme en un terreno dificil. Apues- to que la madre de Mark es una persona muy eficiente, que hizo mucho por é Sefior Wagner: Si. Si, en ese sentido lo es. Es posible que no sea un ama de casa eficiente, Minuchin: Hablo acerca de las otras cosas, 64 Sefior Wagner: Cierto. Era la persona a la que se recurria para, Sefiora Wagner: Hizo mucho por ti Sefior Wagner: Si uno tenia que tomar una decisi6n para resolver un problema, ella era la persona que podia ayudario uno a resolverlo, Hablando en general, su idea era correcta, © parecfa serlo, Minuchin: Sabe... de lo que estoy hablando es de las ex- pectativas que tenia en relacién con Emily. Seftor Wagner: Bien. Mientras mi madre estaba siempre alli con todo lo que podiamos necesitar Sefiora Wagner: Debo decir, nunca me dijo lo que espe- raba de mi como esposa. Yo solfa decir lo que esperaba de €1 como esposo, pero él nunca dijo "espero esto de ti como esposa’. Nunca hablabamos de lo que esperibamos del otto, Jo que fue una actitud errénea desde un comienzo. Ni siquiera nunca hablamos, simplemente, sabe, simplemente nos casa- mos, "eh, va a ser divertido’, entiende. Nunca supimos qué esperar del otro Senor Wagner: Probablemente, habia intentado cambiarla y ella se limité a decir "no sigas con eso" Seffora Wagner: Si, él esperaba algo de mi, como, comen- zaré cuando empezamos a salir. Yo no debfa fumar en piiblico y no debfa hacerme claritos en mi pelo y no debja hacer esto Minuchin: {Tiene el pelo con claritos? Sefiora Wagner: Ahora si Minuchin: Eso quiere decir que han llegado a un cierto acuerdo, Senora Wagner: Un ejemplo, estabamos... estabamos en Kan- sas, oh, desde hada quizés un mes y podiamos vivir en la residencia del colegio y todas las chicas se habfan aclarado €l cabello, Este es silo un pequeiio ejemplo, entonces yo dije “voy a aclarar mi cabello” y él dijo "bueno, voy a tener una Yol Brynner’, Este era el problema, entiende; yo desafiaba 6s sus deseos y él estaba dispuesto a pelear conmigo, y yo dije no vas a pelear conmigo; simplemente vas a pelear contigo puesto que eres tti el que va a parecer ridiculo". Algo como esto podia iniciar una disputa de cinco meses, entiende. Yo iba contra sus deseos. Minuchin: Sabe, lo que usted describe es tan habitual. Me ‘ocurrié a mi y le acurrié a todo el mundo. {Qué ocurrié en- tonces? Tommy estaba creciendo, y ahora eran tes y no dos. Ahora tenian un modclo que habfan aprendido ca sus hogares: que papi y mami pelean a través de mi. EI que uste- des deseribieron como el modelo de sus hogares. Seftora Wagner: Pero nunca lo entendf asf hasta que us- ted me lo dij. Minuchin: Bueno, pero volvamos ahora a Tommy y vea- mos si este modelo. Sefiora Wagner: Diria que lo hicimos. Si, sin duda, oh, sin dda, usamos a Tommy para pelear. Yo podia enfurecerme con Mark y cerrarle la puerta y él se quedaba afuera gol- peando la puerta, y yo llevaba a Tommy a la ventana y esto era terible— io sefialaba —y decia— mira, Tommy, mira a ese hombre raro, y nos quedsbamos ahi haciéndole moris- quetas. Setior Wagner: Si (visas). Sefiora Wagner: El se qucdaba alli, mutiendo, dispuesto a matamos a los dos, a matarme porque yo instigaba al bebito, entiende, Minuchin’. Usted transfersa un modelo familiar que apren- en su hogar a su matrimonio. Sefiora Wagner: Creo que en un comienz0 lo hice, si. Minuchin: ;,Cémo cambi6 eso?, porque es algo muy perni- cioso. ;Cémo lo cambié? Sefior Wagner: Ah, si usted dice, realmente un punto en 1 que cambiamos, legamos a una crisis, 0 periodo critico, ‘cuando le dije, uhhh, "o vemos un consejero matrimonial © sino te olvidas de todo. Pienso que seria ridiculo hacerlo basta 68 que por lo menos comprobemos cudles son nuestros proble- mas, y sino podemos comunicamos quizas una persona pue- de ayudamos a comunicamos. Quizd no es algo tan serio como creemos, quiz simplemente se junt6 un montén de cositas". Entonces vimos un consejero matrimonial, hace més Minuchin: Bien. Bueno, justed decia que el momento critico fue cuando, cuando partieron de Kansas? Sefioro Wagner: Ummmm hmmmm. Fue cuatro 0 cinco me- ses después de que Minuchin: Después de que vinieron aqui. Bueno, observan, que en ese momento se produjeron una serie de cambios. Ya no eran estudiantes. Era la primera vez que no disponfan de un camino para circular sin problemas. Qué les ocurri6 a ustedes? Seftor Wagner: Aqui estoy yendo hacia una nueva situa cién; modificamos nuestra situacién por completo, es un tipo de vida totalmente distinto. Yo, en un rineén de mi mente, ra cionalicé que cuando nos irfamos de allf —de esa situacién- las cosas mejorarfan. Pero no mejoraron. Si algo cambi6, fue para peor. Minuchin: {De qué manera? Sefior Wagner: En lo que a mi conciene, empeoraron, por- que no podia controlarlas, la manera en que podfa, que sen- ‘fa que podia en ese otro clima, esa pequefia universidad, yo. Minuchin; {Cémo mantuvo a su familia cuando estaban en Kansas? Sefior Wagner: Tenia un trabajo de verano, entonces no la vefa en el verano. Incluso cuando estibamos casados. Minuchin: (Esto, esto los mantenia econémicamente? Sefior Wagner: En to fundamental, Pedi dinero prestado; trabajaba en Ia escuela, y hacia esto durante el verano Minuchin: ;Sus padres lo ayudaban 0 usted...? Sefiora Wagner: Mis padres si. Y sus padres también, o Minuchin: Entonces, sus familias ocupan avin mucho espa- jo, En algunos casos, saben, eso plantea dificultades para la definicién del nuevo matrimonio. Sefior Wagner: Sin embargo, creo que era muy atil. Nos dieron algo para respaldamos. Minuchin: Lo que estoy diciendo es que eso crea otra dimensién. Qué ocurrié cuando vinieron aqui? ;Qué pensa ron que iban a hacer? Sefior Wagner: Yo, bueno, habia previsto que una vez que estuviese trabajando a tiempo completo... Minuchin: {En qué? Usted concluy6 sus estudios ... Sefior Wagner: Conclut mis estudios en administracién y en biologi Minuchin: Entonces vinieron aqui. {Qué estin haciendo? Sefior Wagner: Trabajando como empleado de administra- cién en la ciudad Minuchin: La formacién que recibié corresponde a su ‘trabajo? Sefior Wagner: Sf, en términos generales. Sefiora Wagner: No. Minuchin: Usted dijo "no" y el dijo "st" Sefior Wagner: Sf, en términos generales. Sf. Sefiora Wagner: No diria que es el trabajo que lo hace més feliz, Sefior Wagner: Bueno, en primer lugar lo que més me in- teresa es la biologia, pero no me conviene vivir de ella por ‘que no tengo ganas de ensenar, de hacer investigaciones, y no puedo permitirme estudiar medicina, por eso empecé a es- tudiar administracién en mi primer afio, comprendiendo que biologia tendria que ser una especie de hobby, y empecé a estudiar administracién, que fue mi segunda opeién Minuchin: Entonces, usted trabaja y mantiene a su fami- lia, {Usted mantiene a su familia ahora’? Seftor Wagner: No. Seftora Wagner: Yo también trabajo. 68 Sefior Wagner: Ella empez6 a trabajar hace muy poco tiem- po. No es absolutamente necesario, pero Sefiora Wagner: Yo quise hacerlo; fue mi propia decisién. Minuchin: Eso quiere decir que es una gran suerte en su vida, Ahora ya no es estudiante y los grupos ya no estén organizados para usted, Sefior Wagner: No sélo eso, pero cuando me voy del tra- bajo, se acaba el trabajo; no tengo nada que estudiar, ni nada que se le parezea, y entonces lo canalizo a través de la fae milia, Si yo no me contento con esto, comprendo que es mejor que haga algo, porque es mi vida, me entiende, mien- tras que antes podia negarlo, Aqué no tengo salida, O vivo asf, 0 hago algo. Minuchin: Entonces, parece como si fuese la primera vez en a que usted realmente se compromete, Sefior Wagner: Ummm hummm. En cierto sentido. Minuchin: Ahora usted también esté atrapado. Las circunstancias cambiantes de la vida de los Wagner se corresponden con cambios en la familia, Mark ya no es un estudiante. Ha asumido una posicién mais independiente en el mundo exterior, en el que posce ahora autonomfa y res- ponsabilidad. Ahora existe una delimitacién mis neta entre Ja familia y lo extrafamiliar. Cuando vuelve a su casa, esti en casa. Ya no realiza tareas extrafamiliares en ella. En el caso de Emily se han producido cambios compl mentarios. Ha comenzado a trabajar, lo que Ie otorga un se tido de eficacia, o competencia, en el mundo exterior. Dis- pone de menos tiempo para la familia, pero el tiempo de que dispone como esposa y madre es asf mis satisfactori. Minuchin: Ustedes ven, hasta el momento, Emily, usted estaba atrapada y él era un estudiante, Entonces - usted (al ‘marido) viene aqu{ y se compromete con la familia, En este punto la situacién comienza a andar mal, Sefior Wagner: Ummm hummm, 69 Minuchin: Bueno, es entonces cuando deciden ver. Seior Wagner: S{, yo decidf que tenfamos que ver a un consejero matrimonial. Lo hicimos. Tal como se dio, tuvimos que verlo sélo cuatro veces porque ambos cambiamos en forma radical. Y desde entonces nos hemos levado muy bien Seflora Wagner: Todavia tenemos, sabe, discusiones Sefior Wagner: Sf, pero no es algo constante. Minuchin: Tienen suerte. Algunos consejeros matrimonia- les se aferran a las familias y no las dejan ir. Sefiora Wagner: Cuando tuimos, dije: "si no lo podemos evitar, podemos por lo menos prestarle atencién’. Encontré fa ese tipo, nos gust6. Era formidable. Dijo: "En lo fundamen- tal tienen un buen matrimonio, deberfan s6lo tratar de callar y escuchar al otro y dejar de trabajar uno contra el otro", y Minuchin: ;¥ con s6lo esto los ayud6? Setior Wagner: No, no fue realmente asf. Fuc la atmés- fera y el hecho que él era lo sulicientemente inteligente como para darse cuenta cuando no deciamos la verdad. Seflora Wagner: Yo no dije la verdad durante tres sesiones mis 0 menos. (risas). Sefior Wagner: Si uno no decfa la verdad, bueno, uno se sentia muy tonto. Seiora Wagner: Yo simplemente me sentaba ahi, y él de- cfa: "no es Io que quiero oft", me entiende, algo que me ator- ‘mentaba y que me lo guardaba dentro de mf, no era asunto de ninguna otta persona. Y él sentado ahf: "Emily, no me est diciendo la verdad", entiende, y realmente lograba que yo penetrase en mis propios pensamientos y me detuviese ¥ pensase antes de decir algo. Minuchin: ;Y a usted qué le hizo? Seftor Wagner: Bueno, quizé se dio cuenta que yo no era completamente sincero conmigo mismo, en primer lugar. Y también, fue la primera oportunidad que tuye de prestar aten- cin a To que ella decia realmente. Minuchin: Sabe, no estoy de acuerdo, Creo que usted era 70 sincero consigo mismo, y que no era sincero con su matri- monio. Sabe, hacfa su propia vida. Si en este momento de su relacién matrimonial el foco de cexploracién hubiese estado constituido por las realidades in- dividuales de Mark y Emily en lugar de la realidad de su complementaridad, el matrimonio probablemente se habria roto, Seftor Wagner: Ummm hummm, pero yo no... habia mu- chas cosas que yo pasaba por alto, defectos mfos, que quiz no podfa ver subjetivamente, pero objetivamente. Sciiora Wagner: Yo tenia toda esa culpa, que él cra bueno y que todo era por mi culpa, me entiende? Yo habia ti casado y asi era la cosa, tenfamos que zalamos de la tuacién y darla por terminada y cuanto antes, mejor, Minuchin: ¥ él los ayudé a resolverlo. Sefiora Wagner: Ummm hummm. Minuchin: Bueno, dejemos aqui. ;Alguna pregunta del pi- blico? Pregunta: Tenia una pregunta para hacerle referente a lo que usted estaba interesado en preguntarle a estas personas, el tipo de cosas que le interesa discutir en este tipo de en- trevistas en contraposicién con la entrevista terapéutica, cuan- do acude alguien que suite por algo. Minuchin: Nuestro colega me preguntaba antes, en priva- do, si no habfa algunas cosas de esta entrevista que no eran Jo suficientemente tensionantes. Yo no me centraba en las reas de tensidn, Le dije que yo pensaba que ustedes cons- titufan una familia normal, Io que quiere decir que estaban tan confundidos como él, como muchas otras familias. Ustedes ppasaron por las mismas cosas que muchos de nosotros. Lo {que atravesaron, creo, es la tremenda cantidad de dificul- fades que se tienen para formar una familia, Ellos vienen de diferentes culturas con diferentes ideas, y se produce el encuentro, como extraios. Necesitan crear limites alrededor de si, y pelean. ¥ pelean y hacen tonterfas y se hacen salir n sangre de la nariz, Todos nosotros tenemos estas cosas. Y, saben, algunos matrimonios perduran y otros no. Pero todos pasamos por eso, de diferentes maneras. Pregunta: No tengo claro por qué tuvieron sélo cuatro encuentros. con el consejero matrimonial y cémo decidieron suspender. Sefior Wagner: Se podria decir que él rompié la capara- 76n; derribé la barrera y entonces pudimos comunicamos entre nosotros y, puesto que nos comunicamos con tanta sinceridad en ese momento, no se escondié nada ni nada por el estilo, y ambos comprendimos que habjamos cometido errores. Pregunta: Deduzeo que hubo un momento en su vida en particular cuando usted estaba dispuesto a ofrecer algo. Seftor Wagner: Donde antes no podta. Pregunta: Si, usted pudo negociar Seftor Wagner: Probablemente eso requiere tanto tiempo como cualquier otra cosa, Pregunta: Tengo un par de preguntas para hacerle. En el transcurso del perodo inicial cuando estaba ocurriendo todo eso, jlo dejé alguna vez? Seftora Wagner: Si. Faimos a una excursién de camping, que fue una experiencia terrible. El seguia un curso de bio- logia en medio de los bosques y yo estaba alli desde hacfa ‘res semanas, me sentia muy mal: se habia ido por todo el dia y no habla vecinos, estaba a trece kilémetros de la ciudad en el medio del bosque, con nadie cerca. Era terrible, con nadic salvo Tommy, y él tenfa clases de noche; era como una experiencia de laboratorio, realmente, y él tenia clases de noche, y un dia llamé a casa y dije: "por favor, mndenme el dinero; no puedo soportar esto", y fui a mi casa, me iba @ quedar slo una semana y me quedé dos semanas y luego volvi y volvimos a Kansas para una visita y lo levé a Tommy ‘conmigo como para tener compaiifa, sabe. Pregunta: {Tenia mucho miedo cuando lo dej6? Sefiora Wagner: Cuando volvi a casa, lo extrafié mucho. n ‘Tenia miedo, pero cuando volvi pensé que quizé nos leva- rfamos bien, y ereo que asf fue el primer dia, pero al dia si- guiente volvimos a nuestra antigua rutina, Me sentfa como si no hubiese valido la pena volver. Pregunta: Supongo que incluso cuando ponen barreras, las personas se siguen comunicando ain de otras maneras. si mantienen el contacto. Y creo que es parte de esto, sabe, real- mente, lo que se manifests hoy, que ustedes tienen mucho contacto, Ustedes se consultan acerca de muchas cosas, cuan- do hablan, Pueden interrumpirse, y usted lo interrumpe més que él a usted ., Sefiora Wagner: Sin duda Pregunta: Y todo lo dems, pero existe una gran comuni- cacién que se manifiesta en el modo en que se miran y se consultan acerca de algunas cosas, usando sus cuerpos y sus ojos, ete., que creo que es algo que ocurre en las familias, Jo que es un modo de comunicacién que por lo general no se tiene suficientemente en cuenta. Esa forma de comunicarse puede estar presente, mientras estin enfurecidos acerca de la basura y enfurecidos acerea de las reglas, hay otras cosas que fuuncionan y supongo que son cosas que ambos demos- traron en relacién con Tommy y también en la relacién entre ustedes. No existe una ira malevolente, la ira no es del tipo de... cuando duele, no me parecié que fuese "la que leva a matar Sefior Wagner: Era més... més falsa, Seiora Wagner: Era més con la intencién de herir, mas que nada, Cuando volvi a casa después de haberme ido, no estaba enojada con él; estaba harta, me sentia desdichada, estaba ‘més sola que nada, porque él no estaba allt, © algo asi. Quiero decir, en esas dos semanas la cuenta de teléfono de mi madre fue de 40 délares, sélo por dos semanas, Nos llamabamos todo el tiempo, sabe. Simplemente, volvimos a nuestro anti- ‘guo modo de ser. Cuando me fui habia un clima enfermizo, B y cuando volv{ también, En esas dos semanas ninguno de nosotros habia cambiado, Pregunta: Usted se refirié a las cosas en relacién con las cuales no contaban con el otro, por ejemplo, la basura, y me pregunto en relacién con qué, ahora, cada uno de ustedes puede contar con el otro. Minuchin: {De qué manera se apoyan mutuamente? Seflora Wagner: jAbora? Creo que, en lo que concierne 4 mi marido, no podria tener un mejor maride, mejor pro- veedor, él es muy colaborador, no hay nada que dejarfa de hacer por mf, en lo que concierne a la eficiencia. Sefor Wagner: Esto fue algo que tuvimos que resolver en- tte nosotros dos, ah Sefora Wagner: Antes no era capaz de hacer nada por su propia cuenta, pero ahora no puedo detenerlo. El me ayu- da... todo el tiempo. Por supuesto, reo que ocurrié cuando Jogr6 adaptarse mejor al matrimonio; cuando pudo sentirse feliz, distruts embelleciendo nuestra casa y todo eso, sabe. Sefior Wagner: Fijese, antes nunca tuve que hacer esas co- sas en la Universidad, porque ti lo hacfas siempre por mi, centonces no tuve que ocuparme. Yo simplemente deefa: "lo voy a hacer después". Era muy probable entonces que tii Io hicieses, EI cambio en la conducta del marido se acompaiia con tun cambio complementario en Ia interaccién de su esposa con 41, ZO acaso el cambio se produce en sentido inverso? Pregunta: En relacién con esto hay otra cosa que es muy amativa, que el doctor Minuchin sefial6 en un momento dado, me refiero a que la reaccién de la sefiora Wagner es como un barémetro afectivo, y por lo general el sefior Wag- nner Io equilibra con una interpretacién muy légica. Existe ‘entonces una especie de vitalidad que Ia sefiora Wagner puede darle a una interpretacién I6gica, y por ello mismo se pro- 14 duce un suavizamiento notable. Eso cuando todo va bien, pero hemos visto muchas personas que tienen la misma separacién de roles, con uno que se ocupa del proceso de pensar y el otro del sentimiento; no dan la impresién de funcionar bien en relacién con eso... Entonces observamos aqui otra cual dad. Dada esta cualidad, estos dos funcionan muy bien, como usted lo sefial6. No parece tan fragmentado como Io estoy describiendo, puesto que, creo, ambos hacen todo; en cierto modo, existe probablemente mas superposicién de lo que Minuchin: Bueno, durante un cierto mimero de afios esto no anduvo. Pienso que una de las cosas que probablemente cocurri6 fue ta falta de compromiso de Mark con el matri- monio, eh? Que usted siguié siendo una persona soltera du- rante mas tiempo que ella. Seftor Wagner: Durante mucho més tiempo, es cierto. Para ella yo era una especie de sabihondo, me entiende, simple- mente se oponfa a mi naturaleza. Ni siquiera estoy dispuesto ‘a empezar a discutir algo. Quiero decir que le ponfa fin; es por eso que nunca podiamos Iegar a ninguna conclusién, Yo podia decir algo o sugerir algo y probablemente podia ser algo imperative en relacién con eso, y entonces ella solia decir: "bueno, eres un sabihondo, de todas maneras", y todo terminaba asi, Yo ter que aprender a recibir algunos gol- pes, aflojar un poco, y ceder. Observé que alguien comenté que lla sucle interrumpirme con mayor frecuencia que yo a ella. Pero hace un aiio o dos solia ocurtirme lo contrario. Sefiora Wagner: En realidad, si tenemos una conversacién normal, Mark la monopoliza. Yo era ... yo tengo que interrum- pitlo, por lo general, para poder decir algo. Cuando él con- timda, no puedo realmente decir nada. En ese sentido, esté fain en su propio mundo, Usted dice algo, incluso si se interesa igual que él en eso, pero no, no puede decir ni una palabra, Pregunta: Me estaba preguntando, que, en lo que ocurtié 1s hoy, tenia un significado para los dos, un tipo diferente de significado? Sefior Wagner: Muy pocas cosas. El dijo algo que quizé no es realmente, no parece importante. El observé que en esta relacién yo tiendo a hablar a medias, Ella tiende a hacer lo contrario, y realmente nunca lo supe, al menos nunca lo supe en forma consciente, que era asi. Yo siempre califico lo que ella dice. Seiora Wagner: Protegiéndome contra m{ misma. Sefior Wagner: A ve pase la boca. Senora Wagner: Lo hago. Seiior Wagner: Ella va demasiado lejos, ve. Hace una ge- ss siento como si ella misma se ta- neralizacién flagrante, bum, yo vuelvo y digo: "bueno, sf pero...". Esté en mi naturaleza proceder de ese modo, para bien o para mal Pregunta: ;Cusl fue el cambio dramitico a medida que usted se comprometié més? Seftor Wagner: Oh, no creo que haya sido un cambio dra- mitico, Creo, que, pese a las apariencias, no era una relacién tan mala, Eran s6lo esas pequefias cositas, Ia terquedad .. esas cositas que siempre serin discordantes, siempre tirantes con- tra cada uno en la superficie, y eso bloques mucho la comu- nicacién que hubiese podido existir... pero de todos modos habia comprensién entre nosotros. Como usted dijo, era una forma distinta de comunicacién. Sefiora Wagner-. Ain en la actualidad hay dias en que nos ‘odiamas, y no tiene nada de anormal Seftor Wagner: mente cambios, quiero decir como mediador que podia exis- En relacién con Tommy, no ha habido real- tir en nuestro matrimonio. Ha habido algin cambio en lo que se refiere a lo que hayamos podido aprender en nuestras concesiones mutuas en relacién con la educacién de los ni- fios, pero eso fue s6lo el resultado de la capacidad de hacer 16 cconcesiones que hemos adquirido en este periodo, y muchas cosas se han originado en eso. Pregunta: {Podrfa decimos algo acerca de esas cosas? Seflor Wagner: Concretamente, quizis ahora tenga una ac- titud més tranquila en lo que concierne a la educacién de Tommy. Cuando un nifio me dice "no", no me estremezco, Trato de hacerle entender que, sabe, no se dice "no. Ella acta en forma algo diferente: si usted dice "no", bueno, zap, usted a liga. A ella no se le puede decir "no", En relacién ccon eso tenemos algunas diserepancias. De todos modos, creo que quizé su modo de actuar es tan correcto como el mfo, pero en la medida en que é1 lo acepta, entonces ella acepta mi modo de actuar, y yo acepto el suyo, Antes eso era una causa de discusiones; no habia concesiones: era de un modo © de otro, Ahora es una especie de compromiso entre ambos, Hemos adoptado los métados del otro, por lo menos en mayor medida que antes. Eso es quizé todo lo que puedo decir. Otro modo de decirlo, cuando dos personas deciden efectuar un cambio, es algo diferente cuando uno lo hace y cuando no Io hace. Coincidimos en el cambio. Creo que ella estaba esperando el cambio mucho antes de que yo me decidiese siquiera a hacerlo; ella prevefa ese cambio, estaba esperin- dolo, en cierto modo, asf que cuando decid{ que habria un cambio ¢ intenté efectuarlo, a ella le fue facil seguirme, n I UN MODELO FAMILIAR El hombre sobrevive en grupos; esto es inherente a la con dicién humana. Una de las necesidades més bésicas del nifio es Ia figura de una madre que lo alimente, proteja e instruya, ‘Ademiis, el hombre ha sobrevivide en todas las. sociedades fa través de su pertenencia a diferentes agrupamientos socia- les. En las sociedades primitivas, observamos amplios agrupa- mientos con una distribucién estable de las funciones. En la medida en que las sociedades se hacen més complejas y se requicren nuevas habilidades, se diferencian estructuras so- ciales. La civilizaci6n urbana y no urbana industrial moderna le plantea al hombre dos requerimientos conflictivos: la ca pacidad para desarrollar habilidades altamente especializadas y la capacidad para una répida adaptacién a un escenario so- cio-econémico que se modifica constantemente. La familia siempre ha suftide cambios paralelos a los cambios de la sociedad. Se ha hecho cargo y ha abandonado las funciones de proteger y socializar a sus miembros como respuesta a las, necesidades de la cultura. En ese sentido, las funciones de Ja familia sirven a dos objetivos di intos, Uno es interno —h proteccién psico-social de sus miembros; el otro es extemo kr acomodacién a una cultura y la transmisién de esa cultura, 8 La sociedad industrial urbana ha entrado por la fuerza en la familia, haciéndose cargo de miltiples funciones que en algiin momento fueron consideradas como deberes familiares. En Ia actualidad los ancianos viven apartados, en hogares para ancianos 0 en conglomerados edilicios hechos especialmente ppara los ciudadanos de mayor edad. El sostén econémico es previsto por la sociedad a través de la seguridad social o de beneficencia, Los jévenes son educados por las escuelas, los medios de difusién y por sus compaiieros. La importancia del trabajo que solian realizar las mujeres ha sido reducida en forma dréstica por la tecnologia modema, gracias a la cual Jas tareas necesarias para la vida de la unidad familiar son realizadas por las méquinas con una mayor eficiencia. Las condiciones que permiten 0 que requieren que ambos cén- yuges trabajen fuera de la familia crean situaciones en las que el sistema extrafamiliar puede avivar y exacerbar los conflictos entre los esposos. Junto a todos estos cambios, el hombre modemo sigue adhi- iendo @ una serie de valores que pertenecen a una sociedad diferente, una sociedad en la que los limites entre la familia y Io extrafamiliar estén delineados con claridad. La adheren- ‘cia a un modelo pasado de moda conduce a clasificar a mu- chas situaciones que son claramente transicionales como pato- 6gicas y patogénicas. El criterio para la vida familiar sigue siendo el legendario "entonces se casaron y vivieron felices por siempre jams”. No es sorprendente, entonces, que todas Jas familias queden muy lejos de este ideal. EI mundo occidental se encuentra en un estado de trat cién, y la familia que siempre debe acomodarse a la socie- dad, se modifica juntamente con é1. Pero, debido a las di- cultades transicionales, la tarea psicosocial fundamental de la familia —apoyar a sus miembros— ha aleanzado més im- portancia que nunca, S6lo la familia, la més pequeifa unidad social, puede cambiar y al mismo tiempo mantener una con tinuidad suficiente para la educaciGn de nifios que no serin 9 "extrafios en una tierra extrafia”, que tendrin raf cientemente firmes para crecer y adaptarse, LA MATRIZ E LA IDENTIDAD En todas Jas culturas, la familia imprime a sus miembros tun sentimiento de identidad independiente. La experiencia Jhumana de identidad posce dos elementos: un sentimiento de jdentidad y un sentido de separacién. El laboratorio cn el que estos ingredientes se mezclan y se proveen, es la familia, Ja matriz. de ta identidad En los procesos precoces de socializacién, las familias mol- dean y programan la conducta del nifio y’el sentido de la identidad. El sentido de pertenencia se acompafia* con una acomodacién por parte del niio a los grupos familiares y con su asuncién de pautas transaccionales en la estructura fami- liar que se mantienen a través de los diferentes acontecimien- tos de la vida. Tommy Wagner es un Wagner, y a través de toda su vida ser el hijo de Emily y Mark. Este seré un importante factor de su existencia. El hecho de que Mark es cl padre de Tommy constituye un importante factor en Ja vida de Mark, al igual que el hecho de ser el esposo de Emily. El sentido de la identidad de cada miembro se en- cuentra influido por su sentido de pertenencia a una familia specifica El sentido de separacién y de individuacién se logra a tra- vés de la participacién en diferentes subsistemas familiares en diferentes contextos familiares, al igual que a través de la participacién en grupos extrafamiliares. I nifo y la familia cerecen en conjunto, y la acomodacién de la familia a las ne- cesidades del nifio delimita éreas de autonomia que él expe- rimenta como separacién. Para ese nifio particular se crea un territorio psicolégico y transaccional. Ser Tom es diferente a ser un Wagner, 80 EI sentido de identidad de cada individuo es influide por su sentido de pertenencia a diferentes grupos. Parte de la iden- tidad de Mark Wagner se origina en el hecho de que es el padre de Tommy y el esposo de Emily, asi como también el hijo de sus padres. Los componentes del sentido de ident dad de un individuo se modifican y permanecen constantes Como lo sefialé Roger Barker, "la persona psicolégica que scribe ensayos, marca puntos en un juego y cruza calles, permanece como una entidad identificable entre partes inte- riores inestables y contextos exteriores a los que se encuentra ligado, y, al mismo tiempo, profundamente separado."” La persona psicolégica, que es una entidad separada, se encuen- tra vinculada con contextos exteriores. Aunque Ia familia es 1a matriz del desarrollo psicosocial de sus miembros, también debe acomodarse a la sociedad y ga- rantizar alguna continuidad a su cultura. Esta funcién social es actualmente Ja fuente de ataques contra la familia en los Estados Unidos, La sociedad norteamericana esté cambiando, y en su interior muchos grupos quieren acclerar el cambio, Esos grupos consideran a la familia, Io que es bastante cierto, por otra parte, como un elemento de conservadorismo y una fuente de estancamiento, Los ataques contra la familia son tipicos de los periodos revolucionarios. Cristo les dijo a sus discipulos que abandonasen a sus padres y familias y lo guiesen, Las Revoluciones Francesa, Rusa, China, carcomie- ron la estructura familiar tradicional en esos pafses, en un intento para acelerar el progreso hacia un nuevo orden social. El kibbutz israeli constituye otro ejemplo del mismo proceso social, Las leyes rusas referentes a la familia en el transcurso y des- puss de su Revolucién ilustran este proceso. En los affos de la década de 1920 a 1930, las leyes que regulaban el ma- trimonio, el divorcio y el aborto tendieron hacia la disolucién de la familia. Pero en la década de 1930 a 1940, cuando Rusia se orientaba hacia la cristalizacién de sus nuevas normas so- 81 cfales, las leyes se modificaron para consolidar la continuidad familiar. En forma similar, los kibbutzim israelies tienden en Ta actualidad a incrementar las funciones de la familia nuclear cen el interior del kibbutz. En muchos de ellos, en la actuali- dad los bebés permanccen cn la habitacién de sus padres y los nifios viven con ellos durante un period mas prolon- ‘gado, antes de instalarse en el hogar de los nifios. Todo estudio de la familia debe incluir su complementa- ricdad con 1a sociedad. La familia nuclear, que en teorfa, al menos, constituye la norma de la clase media nortcamericana, es un desarrollo histérico reciente. Atin en la actualidad, se encuentra confinada en gran medida a las sociedades urbanas industrializadas. Los conceptos de las funciones familiares también cambian a medida que se modifica la sociedad. Hasta hace cuatrocientos afios, no se consideraba a la familia como luna unidad de edueacién del niffo, y recién mucho tiempo después se reconocié a los niffos como individuos con sus propios derechos En la actualidad, la familia norteamericana, al igual que la sociedad norteamericana, se encuentra en un perfodo de tran- sicién. Y al igual que la sociedad de la que forma parte, Ja familia es atacada. Por ejemplo, un programa de televisién educative de doce horas, "una familia norteamericanal*, siguié fa Ia familia Loud a través de las rutinas de su vida y sus relaciones con sus trabajos, escuela, parientes politicos y ami- gos. Algunas personas consideraron a esta presentacién como tuna revolucién de los medios de comunicacién masivos; con un valor antropolégico significative. Otros criticaron ¢j rficter prosaico de la presentacién de la vida familiar. Un ‘grupo critico significative fue la propia familia Loud. En pro- grumas de televisiGn independiente trataron de comunicar ‘a. una audiencia de millones que no les agradaba verse a sf mismos tal como los habfan retratado, Sefialaron que en su vida habfa mucho mas de lo que habfa sido mostrado. Lo que la audiencia norteamericana vio fue, en realidad, el 82, Intinto de vista del productor. Influide por las concepciones corrientes de la familia, seleccioné y subray6 extractos que ejemplificaban estas opiniones. El cameraman y el resto del personal que realiz6 el programa produjeron distorsiones si- milares, escogierony subrayaron Io que consideraron como aspectos relevantes de la familia. Los norteamericanos vieron tuna familia norteamericana presentada de acuerdo con las concepciones culturales de las familias convencionales. Los ataques contra 1a familia provienen de muchas fuentes. Confluyen cn ellos los lideres intelectuales del movimiento de contra-cultura y los grupos de jévenes que han realizado experiencias de formas comunitarias de organizacién familiar y de educacién de nifios comunitaria, En el campo de la si lud mental, R. D. Laing y sus discipulos han influido en gran medida sobre estas concepciones al describir a la familia como lun productor malevolente de psicosis y, lo que es aun peor, de los adultos "normales” que pucblan nuestto mundo". El nuevo movimiento feminista también ha atacado a la fami- lia, deseribiéndola como una trinchera del chauvinismo mascu- lino. Consideran a la familia nuclear como una organizacién que inevitablemente produce nifiitas educadas para ser posas cn la casa de muficeas, y nifiitos que también se verin atrapados por pautas superadas. La familia cambiaré a medida que cambie Ia sociedad. Pro- bablemente en forma complementaria, la sociedad desarrolla- 4 estructuras extrafamiliares para adaptarse a las nuevas co- rrientes de pensamiento y a las nuevas realidades sociales y econémicas. La década de 1970 es al parecer un periodo ‘en cuyo transcurso los cambios crean tuna necesidad de estructuras que atin no han surgido. Por ejemplo, el gran mimero de familias en 1a que ambos padres trabajan fuera del hogar ha creado una necesidad para ser La brecha generacional constituye otro ejemplo de necesi- 3 dad es no satisfechas. La familia renuncia a la socializacién de los nifios a una edad cada vez mds temprana. La escuela,] los medios de difusién y los grupos infantiles se ocupan cada vex en mayor medida de la guia y educacién de los nifios; mayores. Pero la sociedad no ha desarrollado atin fuentes ex-; trafamiliares adecuadas de socializacién y apoyo. La sociedad Masai posefa una cultura de los grupos ado- lescentes que era en gran medida independiente pero a la que se le asignaban algunas tareas especificas que el grupo debia realizar bajo una supervisién permisiva de los guerreros de la tribu. De ese modo, los j6venes podian realizar los procesos adecuados a su edad de separacién de la familia y de adquisicién de su independencia sin alienarse de la sociedad en su conjunto. Los grupos de jévenes de los Iribbut- Zim israelfes desempefian una funcisn similar. La sociedad oc- cidental no posee funciones claramente diferenciadas para los adolescentes. Cuando la familia deja de ocuparse de sus hijos, los deja a cargo de sistemas de apoyo inadecuados. No es sorprendente que las crisis de identidad de los adolescen- tes hayan dado lugar a un cierto miimero de fenémenos so- ciales antinémicos' Los cambios siempre se orientan desde la sociedad hacia Ja familia, nunca desde la unidad més pequefia a la mayor. La familia cambiar, pero también persistird debido a que constituye la mejor unidad humana para sociedades.ripida- mente cambiantes. Cuanto mayor flexibilidad y adaptabili- dad requiera la sociedad de sus miembros, més significativa sera la familia como matriz. del desarrollo psicosocial. Del mismo modo en que en un sentido genérico la familia cambia y se adapta a las circunstancias histéricas, también Ja familia individual se adapta constantemente. La familia es un sistema abierto en transformacién, es decir que cons- tantemente recibe y cnvia descargas de y desde cl medio extrafamiliar, y se adapta a las diferentes demandas de las etapas de desarrollo que enfrenta. 84 Sus tareas no son féciles; los Wagner, con todas las dificul- tades que describen en la formacién de Ia familia y el naci- miento de su hijo, ejemplifican las tensiones que enfrenta toda familia normal. Pero en cierto modo Ia concepcién habitual idealizada acerca de la familia normal es la de que no pro- duce stress. Pese a los estudios sociolégicos y antropolégicos de la familia, el mito de la plécida normalidad persiste, apo- yado por horas de programas televisivos en los que se obser- ‘van personajes bidimensionales. Esta imagen de personas que vviven en armonfa, enffentando las descargas sociales sin irri- tarse y cooperando siempre mutuamente se derrumba tan pronto como se observa a cualquier familia con sus proble- mas corrientes. Sin embargo, es alarmante que en algunos casos este standard sea mantenido por terapeutas que con frontan el funcionamiento de las familias-pacientes con la imagen idealizada. Freud sefialé que la terapin modifica las paulas neuréticas convirtiéndolas en las miserias normales de Ia vida, Su comentario es igualmente cierto para la terapia familiar, La familia normal no puede ser distinguida de la familia anormal por la ausencia de problemas; por lo tanto, el tera- peuta debe disponer de un esquema conceptual del funcio- namiento familiar que lo ayude a analizar a una familia, Un esquema basado en la concepcién de la familia como un sistema que opera dentro de contextos sociales especificos, tiene tres componentes. En primer lugan> Ia estructura de tuna familia es la de un sistema sociocultural abierto en pro- ceso de transformacién, En segundo lugar, Ia familia muestra tun desarrollo desplazndose a través de un cierto numero de elapas que exigen una reestructuracién, En tercer lugar, la familia se adapta a las circunstancias cambiantes de modo tal que mantiene una continuidad y fomenta el crecimiento psi- cosocial de cada miembro, La entrevista con los Wagner fue orientada de un modo que permitiese descubrir el segundo componente de este esquema, sus etapas de desarrollo, y los 85 comentarios presentaban aspectos mis genéricos del desarrollo de Ia familia, La estructura de la familia y su adaptacién requieren una discusién mas_profunda, ESTRUCTURA FAMILIAR La estructura familiar es el conjunto invisible de demandas funcionales que organizan los modos en que interactian los miembros de una familia. Una familia es un sistema que opera fa través de pautas transaccionales. Las. trans jones repeti- ddas establecen paulas acerca de qué manera, cuiindo y con quign relacionarse, y estas pautas apuntalan el sistema, Cuan- do una madre le dice a su hijo que beba su jugo y éste obe- dece, esta interaccién define quién es ella en relacién con él Y quién es él en relacién con ella, en ese contexto y en ese momento, Las operaciones repetidas en esos términos cons- tituyen una pauta transaccional. En su entrevista los Wagner describieron muchas pautas de este tipo, Emily planea por lo general las actividades. saba- tinas de la familia, pero sélo un hecho de importancia fun- damental la Hevarfa a interferir con las actividades de pesca de su marido del domingo. En su familia de origen, Emily se encontraba implicada en una coalicién junto con su madre cen contra de su padre. La madre estimulaba a la hija a desobe- decer al padre, quien complementaba la situacién atacando a Ia hija cuando se encontraba enojado con la madre. Las pautas transaccionales regulan Ia conducta de los miem- bros de la familia, Son mantenidas por dos sistemas de coae- cién. El primero es genérico e implica las reglas universales que gobiernan la organizacién familiar. Por cjemplo, debe existir una jerarquia de poder en la que los padres y los hijos poseen niveles de autoridad diferentes. También debe existir tuna complementariedad de las funciones, en la que el marido 86 y Ia esposa acepten la interdependencia y operen como un equipo. El segundo sistema de coaccién es idiosinerasico, e implica las expectativas mutuas de los diversos miembros de la fa- milia. El origen de estas expectativas se encuentra sepultado por affos de negociaciones explicitas ¢ implicitas entre los miembros de la familia, relacionadas a menudo con los pe- quefios. acontecimientos diarios. A menudo, la naturaleza de los contratos originales ha sido olvidada, y es posible que ‘nunca hayan sido explicitos. Pero las pautas permanecen —co- mo un piloto automdtico— en relacién con una acomodacién mutua y con una eficacia funcional De ese modo, el sistema se mantiene a s{ mismo, Ofrece resistencias al cambio mas allii de cierto nivel y conserva las ‘pautas preferidas durante tanto tiempo como puede hacerlo. En el interior del sistema existen pautas alternativas. Pero toda desviacién que va més allé del umbral de tolerancia del sistema excita mecanismos que restablecen el nivel habitual. Cuando cxisten situaciones de descquilibrio del sistema, es habitual que los miembros de la familia consideren que los ‘otros miembros no cumplen con sus obligaciones. Aparecen centonces requerimientos de lealtad familiar y maniobras de induccién de culpabilidad’ Sin embargo, la estructura familiar debe ser capaz de adap- tarse cuando las circunstancias cambian, La existencia conti- nua de la familia como sistema depende de una gama suf ciente de pautas, la disponibilidad de pautas transaccionales alternativas, y Ia Mlexibilidad para movilizarlas cuando es ne cesario hacerlo. La familia debe responder a cambios inter ros y extemos y, por lo tanto, debe ser capaz de transformarse de modo tal que le permita encarar nuevas circunstancias sin perder la continuidad que proporeiona un marco de refe- rencia @ sus miembros. EL sistema familiar se diferencia y desempefla sus funcio- nes a través de sus subsistemas, Los individuos son subsis- 87 temas en el interior de una familia. Las diadas, como la de ‘marido-mujer 0 madre-hijo, pueden ser subsistemas. Los sub- sistemas pueden ser formados por generacién, sexo, interés © funcién. Cada individuo pertenece a diferentes subsistemas en los ‘que posce diferentes niveles de poder y en los que aprende hhabilidades diferenciadas. Un hombre puede ser un hijo, so- brino, hermano mayor, hermano menor, esposo, padre, y asi sucesivamente. En diferentes subsistemas se incorpora a dife- rentes relaciones complementarias. Las personas se acomodan en forma de caleidoscopio para lograr la reciprocidad que po- sibilita las relaciones humanas. El nifio debe actuar como un hijo como su padre acta como un padre; y cuando el nifio Jo hace es posible que deba ceder el poder del que disfruta ‘cuando interacriia con su hermano menor. La organizacién fn subsistema de una famitia proporciona un entrenamiento adecuado en el proceso de mantenimiento del diferenciado "yo soy", al mismo tiempo que ejerce sus habilidades inter- personales en diferentes niveles. Limites: Los limites de un subsistema estin constituidos por las reglas que definen quiénes participan, y de qué ma- nera, Por ejemplo, el limite de un subsistema parental se en- cuentra definido cuando una madre (M) le dice a su hijo mayor: "No eres el padre de tu hermano. Si anda en bicicle- ta por la calle, dimelo y lo haré volver" (Fig. 2). Fig 2 M__—(Subsisterna ofecutivo) ‘hilos——(wubsistems frateroo) Si el subsistema parental incluye un hijo parental (HP) et limite es definido por la madre que le dice al nifio: "Hasta que vuelva del almacén, Annie se ocupa de todo" (Fig. 3). Fig 9 My HP (Sutsstema ofeoutivo) ‘tron bijou (wubststeme fraterno) 88 La funcién de los limites reside en proteger Ia diferenci cién del sistema. Todo subsistema familiar posce funciones especificas y plantea demandas especificas a sus miembros, y el desarrollo de las habilidades interpersonales que se lo- gra en ese subsistema, es afirmado en la libertad de los sub- sistemas de Ia interferencia por parte de otros subsistemas. Por ejemplo, la capacidad para acomodacién complementaria ‘entre los esposos requiere la libertad de la interferencia por parte de los parientes politicos y de los hijos y, en algunos casos, por parte del medio extrafamiliar. El desarrollo de ha- Dilidades para negociar con los padres, que se aprende entre Jos hermanos, requiere la no interferencia de los padres. Para que el funcionamiento familiar sea adecuado, los i- mites de los subsistemas debes ser claros. Deben definirse con suficiente precisién como para permitir a los miembros de los subsistemas el desarrollo de sus funciones sin interferen- cias indebidas, pero también deben permitir el contacto ex- tre los miembros del subsistema y los otros. La composicién de subsistemas organizados alrededor de las funciones fami- liares no es tan significativa como la claridad de los limites lace pera las fguees 3-48 = Kate caro Amite vido 89 de su estructura. Un subsistema parental que incluye a una abuela © a un hijo parental puede funcionar perfectamente bien, siempre que las lineas de responsabilidad y de autori- dad se encuentren definidas con nitidez. La claridad de los limites en el interior de una familia constituye un parémetro stil para la evaluacién de su fun- cionamiento, Algunas familias se vuelean hacia sf mismas para desarrollar su propio microcosmos, con un incremento conse- cuente de comunicacién y de preocupacién entre los miembros de la familia, Como producto de ello, Ia distancia disminuye y los limites se esfuman, La diffrenciacién del sistema fa- miliar se hace difusa. Un sistema de ese tipo puede sobrecar- garse y carecer de los recursos necesarios para adaptarse y cambiar bajo circunstancias de stress. Otras familias se desarro- Ilan con limites muy rigidos, La comunicacién entre los sub- sistemas es dificil, y las funciones protectoras de la familia se ven asf perjudicadas. Estos dos extremos del funcionamien- to de los limites son designados como aglutinamiento y des- ligamiento. Es posible considerar a todas las familias como ppertenccientes a algiin punto situado entre un continuum cu- yyos polos son los dos extremos de limites difusos, por un lado, ¥ de limites sumamente rigidos, por el otro (Fig. 4). La mayor parte de las familias se incluyen dentro del amplio espectro normal. Fig. 4 DESLIGADA LIMITES CLAROS AGLUTINADA ‘pormal) mites aoe (espectro is En términos humanos, aglutinamiento y desligamiento se refieren a un estilo transaccional, o de preferencia por un 90 tipo de interaccién, no a una diferencia cualitativa entre lo funcional y lo disfuncional. La mayor parte de las familias poseen subsistemas aglutinados y desligados. Es pésible que el subsistema madre-hijo tienda hacia el aglutinamiento frente a los niffos. La madre y los nifios més pequefios pueden aglu- tinarse hasta un punto tal como para determinar que el pa- dre sea periférico, mientras el padre asume una posicién mas ‘comprometida con los hijos mayores. Un subsistema padre-hijo puede tender hacia el desligamiento a medida que los nifios crecen y, finalmente, comienzan a separarse de la familia Las operaciones en los extremos, sin embargo, seifalan dreas de posible patologia, Un subsistema de madre © hijo suma- mente aglutinado, por ejemplo, puede excluir al padre que se convierte en excesivamente desligado. El consecuente de- bilitamiento de la independencia de los niffos puede constituir lun importante factor en el desarrollo de sfntomas. Los miembros de subsistemas 0 familias aglutinados pue- den verse perjudicados en el sentido de que el exaltado sen- tido de pertenencia requiere un importante abandono de la autonomia, La carencia de una diferenciacién en subsistemas desalienta la exploracién y el dominio auténomos de los pro- bblemas. En los niffos, en particular, el desarrollo cognitivo- afective se ve asi inhibido, Los miembros de subsistemas © familias desligados pueden funcionar en forma auténoma, pero poseen desproporcionado sentido de independencia y carecen de sentimientos de lealtad y pertenencia y de la capacidad de interdependencia y de requerir ayuda cuando la necesitan. En otras palabras, un sistema préximo al extremo desligado del continuum tolera una amplia gama de variaciones indi- vviduales entre sus miembros. Pero los stress que afectan a uno de los miembros de la familia no atraviesan sus limites inade- ‘cuadamente rigidos. Sélo un alto nivel de stress individual puede repercutir con Ia suficiente intensidad como para ac- tivar los sistemas de apoyo de Ia familia, En el extremo aglu- tinado del continuum, se observa lo contrario. La conducta de 1 tun miembro afecta de inmediato a los otros y el stress de un miembro individual repercute intensamente a través de los limites y produce un répido eco en otros subsistemas. Ambos tipos de relacién provocan problemas familiares ‘cuando se ponen en marcha mecanismos adaptatives. La fa- millia aglutinada responde a toda variacién en relacién con Jo habitual con una excesiva rapider. ¢ intensidad. La familia desligada tiende a no responder cuando es necesario hacerlo. En una familia aglutinada los padres pueden verse suma- mente afectades porque un hijo no come el postre. Los pa- dres de una familia desligada, por su parte, pueden perma- necer inmutables ante los problemas escolares de un hijo. ‘A menudo, un terapeuta opera como un delineador de limi- tes, que clarifica los limites difusos y abre los limites exce- sivamente rigidos. Su evaluacién de los subsistemas. famil res y del funcionamiento de los limites proporciona un répido cuadro diagnéstico de Ia familia en funcién del cual orienta ‘sus intervenciones terapéuticas. EL subsistema conyugal. El subsistema conyugal se cons- tituye cuando dos adultos de sexo diferente se unen con la intencién expresa de constituir una familia. Posee tareas 0 fun- cciones especificas, vitales para el funcionamiento de la fa- millia, Las principales cualidades requeridas para la implemen- tacién de sus tareas son la complementaridad y la acomoda- cién mutua. Es decir que la pareja debe desarrollar pautas en las que cada esposo apuntala Ia accién del otro en muchas reas. Deben desarrollar pautas de complementaridad que permitan a cada esposo ceder sin sentir que se ha dado por vencido. Tanto el esposo como la esposa deben ceder parte de su individualidad para lograr un sentido de pertenencia, La aceptacién de la mutua interdependencia en una relacién simétriea puede encontrar obstéculos originados en Ia insis- tencia de los cényuges en sus derechos a la independencia. EI subsistema conyugal puede convertirse en un refugio ante los stress externos y en la matriz para el contacto con 98 otros sistemas sociales. Puede fomentar el aprendizaje, la crea tividad y el crecimiento. En el proceso de acomodacién mu tua, los cényuges pueden actualizar aspectos creatives de sus Paulas que permanecian latentes y apuntalar los mejores rrasgos de cada uno. Pero las parejas también pueden estimu- larse mutuamente los rasgos negatives. Los cényuges pueden insistir en mejorar 0 preservar a su pareja y, a través de ese proceso, descalificarla, En lugar de aceptarla como es, im- Ponen nuevos standards que deben lograrse. Pueden estable- cer pautas transaccionales del tipo dependiente-protector, en cuyo marco el miembro dependiente se mantiene como tal, para proteger In impresién de su cényuge de ser el protector. Esas pautas negativas pueden existir en las parejas corrien- tes sin que ello implique una patologia grave 0 motivaciones malevolentes en ninguno de sus miembros. Si un terapeuta de- be enfrentar una pauta que funcione en forma negativa, debe tener en cuenta la necesidad de enfrentar el proceso sin atacar las motivaciones de los participantes. El terapeuta che realizar interpretaciones que subrayen la reciprocidad, tales como: “usted protege a su mujer de un modo que la inhibe, y usted suscita una proteccién innecesaria de su es- poso con gran habilidad". Una interpretacién consecutiva de este tipo subraya la complementariedad de los sistemas, los aspectos positives y negatives de cada cényuge, y elimina implicancias valorativas de motivacién. El subsistema conyugal debe Hegar a un limite que lo pro- teja de la interferencia de las demandas y necesidades de otros sistemas; en particular, cuando la familia tiene hijos. Los adultos deben poseer un (erritorio psicosocial propio —n refugio que pueden proporcionarse mutuamente, un sostén emocional. Si el limite alrededor de los esposos es excesiva- mente rigido, el sistema puede verse stressado por su aisla- miento. Pero si los esposos mantienen limites flexibles, otros subgrupos, incluyendo a los hijos y a los parientes politicos, pueden interferir en el funcionamiento de su subsistema. 93, En términos humanos simples, marido y mujer se necesitan mutuamente como refugio ante los miltiples requerimientos de la vida. En terapia, esta necesidad obliga a que el tera peuta proteja los limites que rodean al subsistema conyugal. Si en una sesién familiar los hijos interfieren en las relacio- nes del subsistema conyugal, se debe anular esta interferencia, Es posible realizar entonces sesiones entra marido y_ mujer ‘excluyendo a los otros miembros. Si en esas sesiones éstos siguen discutiendo acerca de los problemas de sus hijos en lugar de referirse a las relaciones marido-mujer, es conve- niente que el terapeuta seflale entonces que estin franqueando un Limi EL subsistema parental. Cuando nace el primer hijo se alcanza un nuevo nivel de formacién familiar. En una familia intacta el subsistema conyugal debe diferenciarse entonces para desempefiar las tareas de socializar un hijo sin renunciar al mutuo apoyo que caracterizara al subsistema conyugal. Se debe trazar un limite que permita el acceso del nifio a ambos padres y, al mismo tiempo, que lo excluya de las relaciones conyugales. Algunas parejas que se manejan correctamente como grupo de dos nunca logtan realizar una transicién sa tisfactoria a las interacciones de un grupo de tres. En algunas, familias es posible que se incorpore al nifio al marco de los problemas del subsistema conyugal, tal como le ocurtié a Emily Wagner. ‘A medida que el nifio crece, sus requerimientos para cl desarrollo, tanto de la autonomia como de la orientacién, imponen demandas al subsistema parental que debe modifi- carse para satisfacerias, El nifio comienza a tener contacto con compaficros extrafamiliares, la escucla, y otras fuerzas socializantes exteriores a la familia El subsistema parental debe adaptarse a los nuevos factores que acttian en el marco de la socializacién, Si el nifio es severamente atectado por su medio extrafamiliar, ello puede afectar no s6lo su relacién 94 ccon sus padre sino, incluso, las transacciones internas del sub- sistema conyugal. La autoridad incuestionada que caracteriz6 en algin mo- mento al modelo patriarcal del subsistema parental ha desapa- recido y fue reemplazada por el concepto de una autoridad flexible, racional. Se espera de los padres que comprendan las necesidades del desarrollo de sus hijos y que expliquen las reglas que imponen, Fl ser padre es un proceso extremada- mente dificil. Nadie lo desempefia a su entera satisfaccién, y nadie atraviesa el proceso incélume. Es probable que ello haya sido imposible en todas las épocas, en mayor 0 menor grado. En la sociedad actual, compleja, de répido desarrollo, fen la que las brechas generacionales corresponden a interva- los cada vez més pequeiios, las dificultades de ser padre se han_incrementado. Los procesos que corresponden a ello difieren segiin la edad de los nifios. Cuando éstos son muy pequeitos, predo- ‘minan las funciones de alimentacién. El control y la orienta cién asumen una mayor importancia luego. A medida que el nifio madara, especialmente en el transeurso de la adolescen- cia, los requerimientos planteados por los padres comienzan a entrar en conflicto con. los requerimientos de los hijos para Jograr una autonoméa adecuada a su edad, La relacién, de patemidad se convierte en un proceso dificil de acomodacién mutua, Los padres imponen reglas que no pueden explicar en el momento o que explican en forma incorrecta, 0 consideran {que los fundamentos de las reglas son evidentes, mientras que para los niffos no es asf. A medida que los nifios crecen, es posible que no acepten las reglas. Los nifios comunican sus necesidades con distintos grados de claridad, y realizan nuc- Vos requerimientos a los padres, como los de que se les de- ddique un mayor tiempo © un mayor compromise emocional Para juzgar en forma adecuada a sus participantes, es esen- cial comprender la complejidad del proceso de educacién del nifio. Es imposible que los padres protcjan y guien sin, al 9s mismo tiempo, controlar y retringir. Los nifios no pueden cre- cer e individualizarse sin rechazar y atacar. El proceso de socializacién es inevitablemente conflictivo. Toda intervencién del terapeuta que enfrenta un proceso disfuncional entre los padres y los hijos debe, al mismo tiempo, apoyar a sus par- ticipantes. La relacién de paternidad requicre la capacidad de alimen- tacién, guia y control. Las proporciones de estos elementos dependen de las necesidades de desarrollo del nifio y de las capacidades de los padres. Pero la relacién requiere el uso de la autoridad. Los padres no pueden desempefiar sus'fun-

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