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2010
EDITORIAL
afectados (sobre todo Brasil) (5), estaramos ms o menos dentro de ese rango
o faltndonos poco para ello (una tasa aprox. de 1/50.000).
Otra inevitable conclusin, es que esta nueva patologa emergente jae
chupe(***)- est ya definitivamente instalada entre nosotros. Las futuras luchas
por bajar su incidencia en humanos, adems de tratar de corregir estos
asentamientos irregulares, se debern enfocar en seguir mejorando el nivel
diagnstico: en primer lugar clnico (pensar en ello), luego laboratorial, adems
de eliminar perros callejeros, controlar los canes domiciliarios y perseguir con
fumigaciones a los vectores.
Por lo tanto el mensaje claro y contundente- para los mdicos que ejercen en
Paraguay hoy por hoy, sobre todo en Pediatra, es de alerta sobre el tema.
Nadie puede desconocer hoy en da la hiperendemia de la leishmaniosis
visceral, no slo en perros, sino tambin el alarmante crecimiento y muy
elevada cifra de casos humanos, nios pequeos en su gran mayora, como lo
demuestra acertadamente el artculo central de esta revista y los ltimos datos
asentados en el Ministerio de Salud Pblica.
AGRADECIMIENTOS
Es para m un gran honor y placer al mismo tiempo, el poder ocupar el espacio
editorial de la Revista Paraguaya de Pediatra, a fin de hacer justamente eso:
ejercer el comentario editorial sobre el artculo central del n 3 de la revista
correspondiente a este ao 2010. Agradezco tambin especialmente a su
directora, la Dra. Miriam Espnola de Canata, que me distinguiera eligindome
para comentar con los colegas pediatras sobre un tema de mi especialidad
considerado como vidrioso, que en Paraguay significa no justamente
trasparencia, sino todo lo contrario.
(*)kachii= poco serio
(**)mitai ha mitakuai kuera=aquellos nios y nias
(***)jae chupe=digmosle
REFERENCIAS
1. Canese A. Leishmaniasis visceral: Re-emergente o Re-descubierta en
Paraguay? Revista Paraguaya de Microbiologa. 2003;23(1):1-2.
2. Vzquez C. Caractersticas epidemiolgicas y clnicas de la Leishmaniasis
visceral en un servicio de pediatra. Pediatr (Asuncin). 2010;37(3):