Bstate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. 2 Corintios
12:9. Nunca olvidar esa tarde de impotencia cuando una de mis hijas, abriendo el cuaderno, me pidi que la ayudara a resolver un problema de matemtica Reconocer nuestras limitaciones como padres nos hace ser honestos ante nuestros hijos y nos permite mostrarles que, ante la incapacidad, Dios nos bendice, ayuda e ilumina. En ese momento, Dios no me dict al odo la solucin del problema, pero s me ilumin para saber dnde encontrar la respuesta, buscar alternativas y ayudar a mi hija para que ese problema no se convirtiera en otros problemas, a causa de gritos, reproches o crticas. Tuve que pedirle perdn muchas veces por ese da, y ese incidente me duele profundamente hasta hoy. En ese momento no era mi hija la que no saba, sino yo que no nac para las ciencias matemticas y no poda ayudarla. No nos avergoncemos de no saberlo todo, sino desarrollemos con esfuerzo y oracin los dones que Dios nos ha dado, y con ello estaremos contribuyendo a generar en nuestros hijos inters por sus propias habilidades y la decisin de ponerlas al servicio del Seor. Oramos mucho y muchas veces con mis hijas, entendiendo que cada una de nosotras ha nacido con una vocacin y atraccin muy especial que solo en las manos de Dios puede tomar forma para servir a otros. El Seor dijo que en nuestra debilidad est su oportunidad, y que es suficiente su gracia para hacerla efectiva. Es justamente esa gracia divina la que nos permite saber para qu hemos sido llamados y entender nuestra misin. Las madres debemos ayudar a nuestros hijos a equipar el taller de su vida con las herramientas bsicas para descubrir sus habilidades y permitirles que, en un ambiente de amor, calma y aceptacin, desarrollen sus talentos y sean tiles a su familia, a la sociedad y a Dios. Amiga, podemos dejar pasar la oportunidad de ayudar a nuestros hijos a descubrir sus habilidades, su vocacin o su capacidad de servicio, pero no por eso nos desligamos de la responsabilidad que nos compete. Tanto lo que se hizo como lo que se dej de hacer tendr importancia, porque de eso depende, en gran parte, el carcter. Mara del Pilar Calle de Hengen, Uruguay Tomado de: Lecturas devocionales para Damas 2014 De mujer a mujer Por: Pilar Calle de Hengen