Paulino Castells, doctor en medicina y ciruga por la Universidad de

Barcelona, en su libro Tenemos que educar, recuerda siempre la ancdota

de la simptica monjita que le invitaba todos los aos a dar una charla a los
padres de su colegio y antes de empezar le peda: Doctor, no se olvide de
decir a los padres que el colegio no es ninguna compaa de seguros y que
aqu no garantizamos la buena educacin de las alumnas, ya que esta labor
la tiene que hacer la flamilia.

Estas son algunas de las soluciones prcticas que especialista en Pediatra,

Neurologa y Psiquiatra detalla en su gua para conseguir que una orden o
instruccin sea eficaz:

1) D slo una instruccin cada vez (no repetir rdenes mil veces). Debe
especificar de manera breve y clara cul es la condulta deseada.

2) Debe ser acorde a la edad del nio. Sin amenazas. Con mano firme pero
con el gesto suave.

3) Debe darlas consecutivamente, no intentar imponer varias de forma

simultnea.

8 claves para restaurar la autoridad perdida en casa

4) Use esquemas del tipo hacer y si..., entonces.... (Si terminas tus
deberes, entonces podrs ir al parque, le dir, aplicando la ley de la
abuela que le he explicado antes).

5) Dle oportunidades de obedecer mediante avisos y recordatorios.

6) Apoye las instrucciones de su pareja. Compruebe la realizacin de la tarea

si fuera necesario.

7) Alabe la obediencia y establezca consecuencias para la desobendiencia.

8) Si el castigo est comprometido, es decir, si el nio sabe que una actitud o

accin concreta conlleva sancin y la comete, hgasela cumplir.

8 claves para restaurar la autoridad perdida en casa

Por ltimo, concluye Castells en su libro, cuanto ms claras sean las normas,
ms probabilidades habr de que su hijo las obedezca. Las reglas carecen de
sentido si no hay una base excepcional que las sostenga. El genial autor de El
Principito, Antoine de Saint-Exupry, gran conocedor del alma infantil, deca:
"Exijo obediencia porque mis rdenes son razonables".