SOBRE UN PRETENDIDO METODO DE CROSS A EL Ingeniero de Caminos, Canales y la primera parte de una obra’ titwlada ~Breve introduecion af me Por CARLOS LORENTE DE NO, Tngesiero de Caminos. Kodrigues, ha. publicode todo de Cross A, para ol cileulo de estructuras reticularce plauas, Cuadérno primero. Los giras sin traslaciones de los wudes™. Fucron cron curios lus compaiieres ye a publicacién de algin articulo, libro decian encontrar. No accedimos a cllo en atencién exclusive al crearon a la Kedaccién de esta Revista solicitands le diseutir hacer er los errores que en el citedo ” Lépce Rodrigue con el fi ‘Con algiena onterioridad, ef mismo citado Ingeniero Sr. Lopes Rodrigues nos habia hecho entrega, com el raego de que se publicara en esta Revists, de wn articulo, concordante con et Contenido del libro en cucstibn, titulado: “Presunta sorpresu tocunte al grado de Uberted de las estructuras reticularcs”. Pensamos que si este articulo cra publicado ya no era posible scyuir ndo las co- lumas de la Revista a los compateros que descobon escribir sobre las tesis cxpuestos por el Sr. Lépes Rodrigues. Deseasos de criter esta contreversia, de 1a que pudiera no salir favorccide el Sr. Lépes Rodrigues, eseribis la. Direceién de esta Revista vk Onkas Pénuicas carta ye. a la letra, fi queridy amigo y respetado Jefe: Hemas estado estudiando le ucstiin de ts publicacién ew la Revista v4 Oweas P= uicas del articule que nos remitig usted iltimamente, El tema tratoda en este articulo es muy semejante al desarrollads cn et litre que usted us publicado recientemente, taml Dostat he sido yrandemente discutida y comentada por «que desarrollaremos en nuestro texto), en determinados mu- ‘los de cada estructura, renunciando alos apcyos y fuerzas ficticios tan en boga.” Y poco mis adelante nos asegura: ~Concedemo: en este modesto trabajo al grado de libertad excepcional importancia: por lo que, laciéndole todos los honores, he- mos de considerar, precisar y aun acicalar tal concepto. con el debido detenimiento, ., » a tales efcctos vamos 2 pasar revista a las distintas partes de la figura 1.*, en la he resnido un enjambre de variadas estructuras, ex3- minandolas wna por una y haciendo tal cual seneillo co- imentario, con To que me parece que 1a bisqueda y estable- cimiento de wna aceptable definicién del grado de libertad habrin de resultar satisfactoriamente documentados, exp! cados, justificados y formulados, aun para los mis descon- tentadizos, puristas o implacablemente exigentes.” No es menester seguir estas documentadas ex- vlicaciones, justiticaciones, etc., ete. Basta con re- producir ta figura del citado enjambre (fig. 6.4) y anotar al pie de la misma el grado de libertad que cl Sr. Léper Rodriguez asigna a cada una de ellas. Dice son de un grado de libertad las estructuras &). 1b), b") yb”). De dos grados de libertad las estruc- turas ¢). c’) y "). De tres grados las @). d') y d”). Y de grado de libertad cuatro las ¢) y ¢’). No solamente el estudioso, sino también ¢! lector menos aplicado. en cuyos entusiisticos aplausos con- fiaba el autor del Método de Cross «1. preferirén, vista la figura, cerrar el libro y renunciar a oir tales documentadas explicaciones. ete. see (2) Lo que no recoge, a pesar de ser ello un extremo fun- damental, es que todos esos tratadistas ponen buen cuidado ‘en precisar que el apoyo ficticio es un opoye deslisonte, ¥ ‘que algunos, mis reiterativos, y perdonen me cite insistimos fen decir que lo que aplicamos es “una biela, 0 10 que es lo * mismo, un apoyo deslizante, 0 dicho de otro modo, una fuerza". Y con ello hecho ‘patente que tan sélo impone- ‘mos tna y no dos limitaciones a ta traslacién del nudo. KEVISTA,DE OBRAS PUBLICASFig. 67 Para el Sr. Laver Rodriguer, todas fas estructuray #7 so de dos gals de tihertad: todas tas 4) son de tres grados y de cuatro grados de libertad las extructuras SEPTIEMBRE 1936 413Para cualquier lector de la Revista es de dos grados de libertad Ia estructura ¢), pero no es de dos, sino de cuarto grado In ¢’), y de tercero Inc”) fen cuanto se piense que une de los apoyos de esta viga Vierendeel es forzosament: deslizante. Tienen tres grados de libertad las estructuras d) v d”), per es, en cambio, de cuarto Ia d’). Es, efectivamente, de cuarto grado In ¢’), pero tiene cinco grados de hertad fa c). :Cémo es posible haya Hegado su autor a tan inexactas estimaciones del grado de libertad de Jas estructuras? Partiendo de un grave y fundamental error: Veamos Io que dice de Ta iante we par auxiliar aplicado en J fijamos este mudo. pot estarlo cl A, quedari también fijo (o imposibilitado para traslaciones) cl #1: y al estar éste fijo, lo estara el C, Sera suficiente aplicar wn sepundo par ‘lector en R, que impida las traslaciones de este mudo, para que resulten_fijos los nnudos 1. y K, al estarlos los J, Cy R. Este mimero mi nnimo de dos pares flectores ausitiares acredita que Ia s- truetura ¢) de la figura 1” es de grado 2” (0), Si el lector compara este parrafo con el que figu- raha en cf articulo titulade Compases de la marcha A Fig. 7+— Esto es lo que sucede enando xc aplica un par en cl mmudo J. (Para esta figura y para las anteriores figuras 2: 98 3h toma ome alr 8 = 96 = 26, = 2), (8) Aum dentro de lo inexacto de este razonamiento, sor- prende ver cémo su autor To ha aplicado tan arbitrariamente 2 sus estructura. Légicamente debiera haber clasificado la estructura ) como de un solo grado, de, libertad, pues la aplicacion de un par en 1, que, sexin él inmovitiza este unto, caren Ta nmovilzacion de Fs. por tanto, Ia de todos los restantes. TLa estructura ¢) debiera haberla clasificado como de dos srados, pues a. le basta aplicar un par en C para inmo- vilizar B,J ¢ 1, y otro par en E para inmovitizar todos los Festantes nudos, etc, ete. 44 . €D -0.053308 « . triunfal de mi método de Cross 1. v que hemos de- jado transcrito en los “Antecedentes”. veri que en My 0838524; My 0338881 Hy: My 40639: 5001010, Mgr QI22001* 5 My QS6LUSY-= ; Myronose-- 1M Qae3s06-- Ma cQUST2S- = 5 Mg 2701 = j Meg QIERE = My 00661-= -q1ose6s « {1108973 = PC -Q108265 * \orgrse) - E -9000001-0 AB acurren «{ 920 accoooe - goss .& 329076 - : . BC 9.007475 «| SBOE = gazssse - goo7u7s « & 3 i q000001~0 EZ 001891 - Diagrama de momentos flectores, reacciones curva de presiones para estructura solicitada por un par aplicado en el nudo J. Y su comprobaciin elistica. REVISTA DE OBRAS PUBLICASvano han pasado tres afios y que han ressiltado initi- les todas las indicaciones que le fueron hechas al re- solver el problema que en aquel articule nos fuera planteado. Ocioso. por imitil, resultaria repetir las indica ones alli dadas y no comprendidas. Y necesari es Sr. Lope Rosi sus pares sobre los puntos de sts estracturas Ia far cultad, taumatiirgica, de fijarlos Ingeniero Sr. 1-6pez Rodi haber olvidado que la aplicacién de un par sobre un jmnto de una estructura hace sufrir a dicho punto tuna rotacion instantinea alrededor del centro QO. de si clipse elastica. Cuando se aplica un par en el punte J de esa estructura ¢), Ias cosas suceden tal y cons indicamos en fa adjunta figura 7" (1). El punto Jno queda fijo: le tinico que queda es cblizado a trasedarse segiin la direceién r J r normal al radio J Oz. Fl efecto del par es idéntico al logrado por un apovo que de izase sobre fa recta rr, 0 lo que es lo mismo, al logrado por una hiela orientada segiin ‘a recta Ox, es decir. es tan silo el de Ia limitacién de uno de los dos grades de libertad de traslaciin de dicho punto J. Vea el Sr. Léper Rodriguez como no difere en nada Ia accién de un par de la accién de un apaye deslizante ficticio © de la aplicacién de fa fuerza fic- ticia que desde hace medio sigle venian ‘aciendo lox tratadistas, Tan sdlo difiere en que éstos, averados en caleulo de estructuras. no solamente rehnven el ‘empleo de pares. sino que adoptan en cada casa comw ‘rientacién del apoya o como direccidn de Ia fuerza. la mas conveniente para facilitar la posterior dleduc- in del valor de la reaccidn o fuerza ficticias, Fl caso particular en el que Ia accin del par ne ega a producir In trastacién del punto. por coinci con el propio punts el centro de st clipse elisticn, es pricticamente inexistente y limitado tan slo a casos muy especiales: por ejemplo, las zt fijas. Tan inverosimil ex esto como Ta coincidenci que las acciones a que estuviese sometida fa extruc- tura de Ia figura 1." fuesen tales aute provocasen cn <1 punto J una trasheién que precisamente tuviera lugar segiin r Jr, tinico caso en que el par aplicado por el Sr. Lépez Rodriguez podria Wear a anlar tal traslacién (2). a (1) ¥ en Ia figura 8° reproducimos tos diagramas de momentos flectores de reacciones y todas las operaciones hnamérieas que comprueban en una y otra célula de la ex Aruetura. I total exactitud de Ia solucién dada en Ia f- ura 7: (@) Pero ain mis improbable ex que el autor del Cross «1 Megase a aleanzar Ia solucién elistica del problema por perposicion de un diagrama Cross de nudos inméviles ¥ dor solos diagramas. trastacionales, Le quedan otras dos Posibilidades de movilidad, es decir. dos infinidades de pro- able error: al superponer estos tres diagrams tio recons- SEPTIEMBRE 1936 Fig. 9%—Cuateo obsticules simples impiden ta taslacién ste la totalidad de los nudos de esta estructura. (La supresion ‘ie uno evalauiera de ellos nos conduce a estructuras de un sélo grado de libertad.) traye la estructura primitiva, sino que, sin, saberlo, tlega a wma estructura de inual aspecto que la de ta fig. 1 pero {que tiene aplicados en dos de sus nudos unos apoyos desi antes, y al ignorar su presencia y no tomar en cuenta las Feacciones que ellos ejercen, le resultardn elasticamente fal- sos cuastos diagramas es ‘obtenga (por mucho que haya cuidado de hacer las comprobaciones de equilibrio de nudes y de barras). a5,Hemos dejado para después de esta puesta en claro de la ct el comentar la definicién que. en Ia pagina 14, del libro que comentamos, al final del examen del enjambre de estructuras, formula el Sr. Laper Rodriguez, y que es la siguiente: ~Euten- demos por yrado de libertad de wa estructura reticolar plana cualquiera, ef siimero minimo de mdos de lx misma, 2 Tos que, aplicados pares flectores ausiliores, basten para impedir las traslaciones de Ia totalidad de tos mudos de ta estructura de que s€ trate.” Pues bien, es de notar que esta definicion, que en manos de su autor conduce a tan dispares v erri- eos resultados. es. en manos de cualquier otfo. unt dlefinicion correcta, Tanto da, desde un punto de vista tedrico. como ya hemos visto, coartar los m vimientos de los nudos mediante pares como coar- tarlos mediante apoyos deslizantes 0 fuerzas. cuatro grados de libertad de esa estructura ¢"), igual- mente pueden ser anulados por los cuatro pares de Hnaderas dle la figura 9b.) Tin la practica resolutiva, este pro- cedimiento de apoyos destizantes o fuerzas fet presenta ventajas decisivas sabre el de aplicaciin de ares. como Itego. con mas detalle. comentamos Hay al pie de esa pigina 14 una nota que por mn momento hace pensar que el autor ha caide en cuenta de que alge hay que no ¢s correcto. Dice Ia not del 4,—Fs totalmente correcta Ta definicion de srrado de libertad dada: pero hay alguna incorreecion on 10 fque antecede a su estahlecimiento, que complidamente pode dlegvanecerse en cl segundo cuaderno.” Pero la incorreccién que encuentra, y que pro te desvanecer, debe ser muy accesoria (qui ahitrariedad con que, a st modo. aplica ta defii 4 ¥ que anteriormente hemos eomentada). adelante, en el capitulo 1V. titulado *Sucinta exposicién del camino a seguir yara ta distribucién Cross de los momentos flectores”. adlopita jmt- 1a autxilio grafico de dicha exposicién la griia tildn de la figura to. Ya esta estructura la define, tant t v ‘su autor como de cuatro Fig. 10.—Gria Titin, definida por ‘grados de libertad. 476 cn la. pigina 28 como en las 38 v 39. como de grado de libertad 4, v sigue hablandonos de inmovilizar los nudos mediante la aplicacién de pares en los mi es decir, manteniéndose en el mismo errur ya vis cn aquellos Compases de la Marcha Triunfal. La estructura de la tal griia titan tiene. para los grades de libertad. neranddo. pues lt estrecha visidn que el autor del método 1 tiene del Método de Cross. queda bien dle manifesto en ct siguiente pirrafo. en ¢l que completa ef detalle de us cargas que aplica a la aria fildn: “Para que nada falte, hay otra peso aislado (P2) aplicado en el mido Q: yr debo declarar que mis preferencias por iliares relativamente a las juerzas fic twin: zaué puede dar que disteibuir, de si por si. el peso fv es necesario que hagamos comentario alguno. imes los hari, y sabross, ef lector. Tan candorost pregunta descubre. por otra parte, el origen y lat inviabilidad del pretendido método 4.) Los métodos particulares de célculo de estructuras. Ain mas que el mismo error, lo que cn este ca extrafia es st contumacia, y ésta solamente resulta explicable por haber operado dicho autor con estruc- turas de un solo grado de movilidad. en las que ciectivamente. la aplicacién de una sola accién hasta para anular las traslaciones de los nudos El suponer auc lo que es valido y cierto para estas estructuras hha de seguir siéndolo en las de mayor grado de movi- idad. ha sido probablemente 0 que le ha levade desoir las indicaciones que le fucron hechas. Para mejor apartar por nuestra parte los yeli- xros que toda general encierra, volvamios de ‘nuevo sobre la indicacién. al principio apuntada, de fas condiciones tan especiales que imponemos a lax estructuras alo. atribuirles otra deformahilidad que la de los giros elementales debidos a Ia accién de los momentos flectores: en cada elemento de longitud ds no hay mis deformacién elastica que 1 giro relativo entre sus caras de valor dong os aa alrededor del centro de gravedad de estas secciones “En cuanto a los esfuerzos normales y a los tangen- ciales, la materia de estas estructuras se comporta como el sélido rigido de la mecinica racional. Pues bien, esta hipdtesis de la indeformabilidad frente a dichos dos esfuerzos. hipétesis frecuente en REVISTA DE OBRAS PUBLICASmuchos problemas elisticos, no se reduce en este «ase a la introduccién de una mera licencia tendente a lx simplificacién de los cilculos, sino que. por el con- trario, es la hipétesis bisica complementaria de la gue depende la valides de todos los mitodos parti- calares de céleulo de estructuras (métolo de Gross, método de los puntos fijos. métede de tas deforma- clones, ete... ote.. fF Fig. 11.—Varincidn de fa, movilidad del extremo B seein ccambia Tay propicdades clisticas del materia! de lapiz, Creemos haber desarrollado con ‘claridad este tema en esta misma Revista (articulos del mes de ‘octubre de 1953 ¥ siguientes) (1), y hecho notar como de Ia simple consideracién de esta tan particular de- formabilidad se deducen las expresiones de giro de nudo y giro de barra, ex decir, las expresiones de Mohr («ue cincuenta afios después nos valverian bajo el nombre de slope deflection method). y con ellas el concepto de “grado de movilidad” de las estruc- turas y la posibilidad del conocimiento previo de las relaciones entre recorridos de los mudos, (a) Recogidos posteriormente en forma de libro, Edito- rial Dossat. “Los métodos directos (y los métodos de apro- ximaciones.sucesivas) de cileulo de estructuras”. Madrid, 1984. SEPTIEMBRE 1936 No es menester reproducir ayui tode ello, pues basta la adjunta figura 11 para llegar, cuatitatica- ‘mente, a iguales conchusiones. Si Tos elementos del troz0 . yasan a ser exactas las expresiones de Mohr y tom sentide el concepta de “gira ¥ de la barra” como relacién entre Ia traslacién normal PBF sll extrem a la longitud. 4B, de Ja barra. . Es mis, recordemos qite el comportanienta elis: : tico del extremo Fes, en este ‘itm reo, idéntic’, al del extremo Bde la cadena 2B (ver figura 11-c). formada por esos tres eslabones rigidos, atticulados entre si, en 3 y 2. por tnos resortes de sK (Y es posible 2eF resolver cualquier problema elistico como un ejer- Cicio de cadenas cinemiticas.) fiexibilidad al giro 91 = g2= Una estructura de un grado de movilidad como ta representada por la figura 12 (que es reproduccién de la figura 18 de los citados articulos). formada por barras de esta tan especial materia eldstica, presenta amen su deformacion la ventajosisima propiedad de que las truslaciones normales entre extremos de cadi barra han de guardar entre . saber cules son los valores de todas las restantes, « Jo que es lo mismo, dado un valor de un “giro de barra”, determinar el de todas las demas (11. convi- nigndonos atribuir todas estas frastaciones normales. © todos. esto na inedemita iucrz F* aplicada en um sido capaz de producir el movimienty de nudos s puesto. Y por una regla de tres caleular cuales son los corrimientos, y los momentos, cuando lo. que aplica- mos ex una determinada fuerza de magnitud F. Una estructura como In de esa figura 12. en la que. sean cuales sean las caryas que apliquemos, 2 ven’ constrefiides los nudos a moverse segin diree- ciones fijas. y con recorridos en proporcién constante, puede ser inmovilizada, para In debida aplicacién del Cross, por una eats cualquiera. par o fuerza, causa 4, A. A wa SaeSe, [3s] fe Fig. 12, + Reprertueci a de la figura 18 de “Los Métodos directos de cileulo de estructuras”. Fig, 18- Al no existir delormaciones por esfuerans normales i tangencinles, las trex baras de Ia célla A 1 Cb Geca canguira ia cama que cise sobre a estructura ACIDE. f el pune de fa misma cn cl go [Ste apcada ne deforma a esc Ta com Ml conocimiento del estado elastico real se Heya al operar por Cross (como ya lo hacia e! método de Jos puntos fjos), aplicando barra por harra los pares 2 Ely con lo que conseguimos llevar paralela- mente sus extremos a ta posicién que obligadamente han de ocupar, para después restablecer la continui- dad entre barras aplicando en cada extremo pares iguales y contrarios (0 dicho en la terminologia cros- sista: aplicando en cada nudo el momento descom- pensado cambiado de signo). Hecha la distribucion de momentos. una cualquiera de las condiciones de Ja estitica nos da el valor de esa fuerza T* que habia (@)_O dicho en otras palabras: sabido a qué punto se ha trasladado un nudo, se sabe cuales son los puntos a los que tienen que trasladarse todos los demas: quedando sélo por determinar los valores de los giros de ios 478 ‘gue las tessloconer, normales relaiezt ew ' dependiente tan slo te Ia vientacion de dichas bara, ts extremes ecarin cv «que no solamente puede estar aplicada en un nude, sino que pucde estarlo en cualquicr punto de la ‘estructura, Un sencillo caso de este tipo de estruc- turas es el portico de la figura 13. Es el pértico estu- dliado por el Sr. Lépez Rodriguez en su libro EI Método de Cross cn serio y de broma, “estudio” que ie llevé a afirmar que el método de Cross es inexacto cuando hay barras oblicuas. Afirmacién de la que. por cierto, no se ha desdecido. sino limitado a rele- garla, como cuestién secundaria, ante el logro de su Cross A (1). (t) Véase su artieulo “El Método de Cross y el diagra- sma de Wilt”, en el mimero de la Revista del mes de fe- brero de 1953. (Va tambien comentamos en su dia, R. O. abril 1s, diene compendia oe tenia que Here rama de’ Willit en estas extructuras, en 126 que. por prin~ ‘pio de partida, no cabe la deformacion axial) KEVISTA DE OBRAS PUBLICAS(Lo particular de los movimientos que estas ¢s- tructaras pueden ejecutar queda de modo bien apa- rente y visible si. como hacemos en dicha figura 13. representamos las elipses que traclucen y definen cl comportainiento elistico de los nudes: son elipses degeneradas a su eje mayor. estanda este eje situade sobre la barra respecto a la cual ha de_verificarse siempre la traslacion normal del nudo. Como en lt figura hemos anotado las caracteristicas de estas clipses, y las relaciones entre las tres traslaciones normales 41, Sz. 3s. es tun ejercicio elemental deter- — 2 a 95 Ba hy BF 3 us Moa hy Big” ge) BY Fig minar los movimientos de los andes aplicamos pares o fuerzas, y Ia exactitiid de los resultados.) ade en ellos mprobar yor Maxwell Aunque Ter especial de las propicdaates ebistica impuestas al material de estas estructuras ob dentro de cada barra, a que sus puntos silo pet separarse normalmente respecto a sit ¢je, la comb nacién de este movimiento con los de arrastre de la harras puede permitir que puntos. y mules, de deter- minadas partes de la estructura, xocen de su total movilidad y perdamos esa ventaja tan fundamental de saber predecir geométricamente los recorridos dle los nudos. El ejemplo mas sencillo de esto lo logramos con adicionar una segunda barra a la 1 B de la anterior SEPTIEMBRE 1036 figura 11-b jentas del nuevo extreme C figura 14-2) vienen definidos por una clipse elisticn perfecta (1). ¥ por tanto, en sti deformacién elastica imtede trasladarse hacia cualquier direccién de! plans. Y en a figura 14-b) se esquematiza el recurso a adoptar (el mismo que empleamos en las estructu de dos o mis grados de movilidad de muslos), a fin de obligar al punto C a que sts recorrides hayan de ser traslaciones_normal roducide en Run apoye idvil, o fuerza ficticia F. queda impedida toda tras: acidn de este nudo y el nude C no puede stifrir mas 606 ML. ao Me9e tee EF 6. OG, = 135 ME. ed de By de.los giros de los elementos entre By C), n centro sabre In recta BC, y por tanto, las tras- laciones CC" yausin a ser. necesariamente, traslacio- nes normales a ka barra, (EI estado ckistico real se oltiene ahora come superposicién del estado 14-6, estructura coartad: por el apoyo ficticin, euya reacciin ex F, y del estado correspondiente a estructura sometida a la fuerza -F) “Tanto ¢l método de tox puntos fijos, desde 1911. 10 después los métodlos de aproximaciones snce- sivas, al enfrentarse con estructiras de grado n de movilidad, resuelven el problema por superposicién de una estructura inmovilizada sometida a Tas cargas (2) Lo mis cmodo seri obtener esta clipse como clipse dle inercia de las cuatro masas elisticas 01. 90s ¥ ds. 419exteriores (en la que estn impedidas las traslaciones de sus nudos por Ia aplicacién de los # apoyos 0 fuer- mas ficticias) y de n estructuras de un sélo grado de ‘movilidad (obtenidas al retirar, uno a uno, cada de esos apoyos) sometidas respectivamente a Ia accidn de las fuerzas — F Fy. Totes estos n-+-1 estados particulares de movilidad nos son di rectamente cognoscibles, tanto en ino como en viru método, y para pasar a la estructura real basta plan- hasta con impedir de B. tear el sistema de nm ecuaciones de las nm fuerzas incdgnitas y efectuar Ia superposicidn de los m+ 1 diagramas estudiados (1). (2) En tanto que los métoros, generales. nos obligarian xeneralmente a sistemas con un nimero mucho mas elevaio fle incégnitas, al tratar de determinar directamente las reac clones hiperestaticas de la estructura (métodos de Culmann, Bresse, Castigliano). Y también nos conduciria a sistema mas penosos de ecuaciones el llamado “método de las de- formaciones”, 0 método de los iros, en el que se toman como incdgnitas los giros de nudo més los giros de barra, 480 Conclusiones acerca del método de Cross A. Con lo acabado de recordar, no resulta teme- rario, ni siquiera expuesto, formular conclusiones sobre ese pretendido método de Cross A sin que sea necesario esperar a la aparicién del anunciada segundo fascieulo, pues. proporciona el primero sohrados ele- mentos de juicio para poder hacerlo, Si_nos hemos detenido en detallar las premi clisticas.y los procedimientos operatorios que per- miten al método de los puntos fijos ximaciones sucesivas acometer ¢l calcu! turns por reduceidn al estudio de estructuras de un sumente en ésto, radica la idoneidad de dichos méto- dos para el cileulo de estructuras reticulares: deter- minada xeométricamente en un estado de un sole xrado de muvilidad cual es la posieién que han de pa- Fa ocupar todos y cada uno de los nudes, tan sdk Festa averiguar ettiles deben ser. ademas. los giros de thos nudes. Y esto se obtiene por fa simple distribu- n de los Tlamados pares traslacionales. Una cual- iera de las ecuaciones de Ia estitiea nos informa lespués de cual ha sido el valor de In fuerza F* que. plicada en uno cualquiera de las nudes. ha provocad iin de la estructura, Método de Cross <1. falta toda indicaciin, indicie vislumbre de que de algin mado vaya a hacer us+ dle tan especialisimo y eficaz recurso. Es mis, rotunda 'y reiteradamente manifesta el Sr. Lépex Rodriguez que renuncia alos apoyos:y fuerzas ficticias, y que se valdri silo y exelusivament: de pares flectores ausiiares (1) Ya todo esto se traslucia en anteriores. publica- Jones de dicho autor, De nuevo ruege al lector rel fh resolucién dada al problema que me planteara en 1953. Comprohara eémo'en dicha resolucién. ¥ sin que al parecer viniese entonces a cuente, se le hacia notar lo estéril de las mil psiginas de! Calcul des Canstructions Hyperstatiques del Sr. Rieger. que com (1) Lo que no ercemos es que tal de haya sido de- 1e por tm momento haya meditado en que, por mplo, en el portico de la fig. 13, Cross sabe resolver ‘con um solo diagrama de distribuctén el problema de fuerz: rmtxlo (0 para decirlo con mayor rigor: con una posterior rexin de tres), mientras ‘que resolverlo et je el caso de aceién dean far tiene F de inmovilizacién yuna superposi correspondiente a una fuerza — Es decir, recurriendo a la postre a ese caro de fuerza « apoyo fieticios, sinico cuya resolucién es directa, Quitar al método de Cross este recurso es quitarle pre- cisamente la herramienta que caracteriza a los métodos par- ticulares de cilewlo de estructuras, Y oblixarse al emples de otros recursos elisticos, REVISTA DE OBRAS. PUBLICASsus “momentos estaticns ficticios”, no hace sino vol- ver a los métodos generales. Comentario, y adverten- cia, de nuevo recogidas en mi articulo de la Revista bE Onras PGmuicas de mayo de 1954 (1). No hay mis que repetir lo que alli deciamos: “De todos mo- “dos, lo que no podian lograr estos henévolos juicios, “ni esta presentacién como novedad. era el conseguir ‘que pudiese prosperar como métedo general de ani- ¥y cilculo de estructuras este métodlo, destinado, ‘por su naturaleza, a ser un métado comprobatoris ‘atilizado como hace Rieger. no es sino una equ (1) “Los Métodos direetos de cilelo de estructuras”, gina 90. “lencia, poco cémoda, de los métodos generales de “obtencion de las reacciones (Culmann, Bresse. Cas : XS estructu- puede, mialisis.” Pues en esto precisamente viene a abocar, aun des- pugs de que el Sr. Lapez Rodrigues repase sus con- ceptos de mecinica, racional y clistica, su prestin- tuoso Método de Cross -l: suprimigndole al de Cross todo lo que tiene de métadlo expecifica de cileulo de cotur ridiculus mus. SEPTIEMBRE 1956 Br