Epistemologia da Comunica¢do organizadora: Maria Iimmacolata Vassallo de Lopes Rea CR UM Cc MPC fo Pec Re em Re a EO eee neo ioc ahha Area aor ore ene eee tea EN i) faa Cue ECR Cao RL te Ree Ne MCL ee Ue ETER Mee Ere MR CUT) Pere gras Coa ea Cre eT Ree Ur)capa: Walter Nabas DIAGRAMAGAO: Ronaldo Hideo Inoue Edigdes Loyola Rua 1822 n° 347 — Ipiranga 04216-000 Sao Paulo, SP Caixa Postal 42.335 - 04218-970 Sao Paulo, SP G&:(0**11) 6914-1922 &:(0**11) 6163-4275 Home page e vendas: www.loyola.com.br Editorial: loyola@loyola.com.br Vendas: vendas@loyola.com.br Todos os direitos reservados. Nenhuma parte desta obra pode ser reproduzida ou transmitida por qualquer forma e/ou quaisquer meios (eletr6nico ou mecanico, incluindo fotocépia e gravagdo) ou arquivada em qualquer sistema ou banco de dados sem permissdo escrita da Editora. ISBN: 85-15-02735-6 © EDICOES LOYOLA, Sio Paulo, Brasil, 2003Apresentagao Parte 1 As epistemologias contemporaneas eo da Go La producci6n social de sentido sobre la produccién ; bi Wack re epistemolégico para los estudios de la comunicacién Badil Fuentes Navarro Por uma epistemologia da Comunicacéo Eduardo Duarte Epistemologia da Comunicagao: além do sujeito e aquém do objeto Lucrécia D’Alessio Ferrara As epistemologias contemporaneas e o lugar da Comunicacgao Luiz C. Martino Parte 2 Atravessando frontelras: as Interfaces da Comunicacao Midiologia Brasileira: 0 resgate das fontes paradigmaticas José Marques de Melo 4 69Comunicagao e Informagao: conflitos e convergéncias Ida Regina Stumpf, Maria Helena Weber O campo da comunicagao e a comunicagao entre os campos na era da globalizagao José Luiz Aidar Prado A Comunicagao e(m) seus limiares Aluizio R_Trinta Parte 3 Teorlas e metodologias no campo da Comunicacado Hermenéutica, teorias da representagao e da argumentagao no campo da Comunica¢gao Luis Carlos Lopes A comunidade e a conformagao de uma abordagem comunicacional dos fendmenos Rousiley C. M. Maia, Vera V. Franca Exploragoes sobre a problematica epistemologica no campo das ciéncias da Comunicagao Alberto Efendy Maldonado Para que pesquisar? Comunicagao: uma ciéncia social aplicada Laan Mendes de Barros Parte 4 A disciplinarizagao da Comunicacao Geopolitica como disciplina comunicacional Jacques A. Wainberg Em busca da disciplinarizagao da Comunicagao: da nogao de campo aos dominios de pesquisa Giovandro Marcus Ferreira Sobre 0 estatuto disciplinar do campo da Comunicagao Maria immacolata Vassallo de Lopes 135 187 253 277Arte, Comunicagao e Ciéncia — A questao da linguagem Fernando Passos Parte 5 O futuro do campo da Comunicacao Ciéncia e método em Comunicagao Muniz Sodré O estranho caso de certos discursos epistemoldgicos que visitam a 4rea de Comunicagao Wilson Gomes A sociedade mundial e o retorno da grande teoria Octavio lanni 313 331a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.Pennie | As epistemologias contemporaneas e o lugar da ComunicacaoLa producclé6n social de sentido sobre la producclén social de sentido: hacia la construcclén de un marco epistemolégico para los estudios de la comunicacién RAUL FUENTES NAVARRO Profesor-investigador Numerario del Departamento de Estudios Socioculturales, ITESO Guadalajara, Jal. México Agradezco profundamente la invitacion a participar en este semina- rio, que entiendo como una oportunidad inmejorable de debate aca- démico y de aprendizaje colectivo. Para mi es, ademas, un honor com- partir la ocasi6n con una representacién tan destacada, en este caso convocada por COMPOS, de la comunidad brasilefia de estudiosos de la comunicaci6n, ejemplar en muchos sentidos y unica por su nivel de desarrollo en América Latina, y hacerlo en el marco de la celebra- cién de los treinta afios del posgrado de la Escola de Comunicagdes e Artes de la Universidade de Sao Paulo, institucion pionera y lider de nuestro campo. Al mismo tiempo que me siento honrado por la invitacién, con- fieso sentirme intimidado por el tema, el escenario y, sobre todo, por el nivel que reconozco en los interlocutores: entiendo que la mejor justificacién de mi presencia en este seminario seria aportar alguna claridad adicional al tema que abordaremos en estos dos dias. Vengo desde tierras muy lejanas, pero no ajenas: creo que Guadalajara si- gue teniendo un lugar especial en el imaginario brasilefio mas de trein- ta afios después de un acontecimiento memorable, y yo he tenido la suerte de compartir en muchas ocasiones el trabajo académico sobre la comunicacion en territorio brasileno, la primera de ellas en 1988. Los afios de contacto con Brasil me han enriquecido enorme- mente, tanto personal como profesionalmente, por lo que tengo un afecto y un interés muy especiales por este pais tan parecido y tan diferente al mio. He aprendido a admirar, a disfrutar y a amar a Brasil, aunque seguramente me falta mucho para comprenderlo. Y sin1% EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO embargo, debo pedir perdon porque no he sido capaz de aprender ahablar su idioma, aunque lo entiendo bien, hablado y escrito. Ape- lo, como siempre, a su amable disposicién para escucharme hablar en espariol, lengua que trato de usar de la manera mas accesible. Y para terminar esta introduccién, me siento obligado a explicitar muy brevemente ante ustedes, como muestra de respeto, desde d6n- de hablo. Esto me parece especialmente importante por ser el Uni- co participante extranjero en el seminario, lo que me compromete a hacer un esfuerzo de contextualizacién que facilite reconocer los referentes compartidos y las perspectivas que nos son comunes como estudiosos latinoamericanos de la comunicaci6n, pero también aque- llos rasgos historicos y estructurales que generan diferencias y disparidades en nuestras practicas y proyectos académicos. Soy un mexicano de cincuenta afios que vive y trabaja en Gua- dalajara. Soy un profesor universitario que ha decidido concentrar todos sus esfuerzos profesionales en el Ambito académico, por lo que abandoné hace mucho un oficio promisorio en la produccién audio- visual y no he pretendido nunca actuar como politico, como comer- ciante o como periodista. Hace veinticinco afios que soy profesor de teoria de la comunicaci6n, primero en el pregrado y desde hace casi quince afios preferentemente en posgrado, tanto en una universi- dad publica como en una privada, las dos entre las mas prestigiadas y productivas en el campo de la comunicacién en México. Mis estu- dios formales los cursé en esas mismas instituciones: licenciatura y maestria en comunicacidn en el ITESO; doctorado en ciencias socia- les en la Universidad de Guadalajara. La condicién provinciana y endogamica que esa trayectoria me podria imponer, la he compensado con una participacién larga y comprometida en las asociaciones académicas del campo: las nacio- nales CONEICC y AMIC, las latinoamericanas FELAFACS y ALAIC, y las internacionales ICA y AIERIAMCR'. Por razones circuns- 1. CONEICC: Consejo Nacional para la Ensefianza y la Investigacién de las Ciencias de la Comunicacién; AMIC: Asociacién Mexicana de Investiga- dores de la Comunicacién; FELAFACS: Federacién Latinoamericana de Aso- ciaciones de Facultades de Comunicacidn Social; ALAIC: Asociaci6n Latinoa- mericana de Investigadores de la Comunicacién; ICA: International Commu- nication Association; AIERI/IAMCR: International Association for Media and Communication Research.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO 7 tanciales asumi en 1982 el papel de responsable de la documenta- cién académica nacional sobre comunicacién y eso marcé desde el inicio mi trayectoria como investigador: mi objeto de estudio princi- pal ha sido el propio campo académico. Trabajar ese objeto desde la practica cotidiana como profesor de teoria, y desde la base descriptiva elemental de la documenta- cién, me ha permitido elaborar un marco de interpretacién denso y complejo, pero que como investigador siempre trato de articular con datos empiricos, tanto cuantitativos como cualitativos. A pesar de que el campo académico es un objeto de estudio que no puede cons- truirse al margen de marcos socioldgicos, sobre todo para no desar- ticularlo de la relacién basica entre universidad y sociedad, he pro- curado siempre abordarlo desde una perspectiva comunicacional. De ahi que proponga como sintesis de nuestra tarea la formula que ofrezco como titulo de esta exposicién: la producci6n social de sentido sobre la produccién social de sentido. Pero antes de entrar de lleno en el tema, debo anotar otro punto de partida fundamental: mi pertenencia generacional. Ya dije que tengo cincuenta aiios, pero ese dato es mas importante en términos estructurales que personales. En México, por razones que son obje- to de otro anilisis, las oportunidades de acceso a posiciones de pro- greso en el campo académico de la comunicaci6n han estado hist6- ricamente limitadas casi exclusivamente a hombres y mujeres de esta generaci6n “post-68” a la que pertenezco, la que llegé6 a la universi- dad entre fines de los afios sesenta y mediados de los setenta. Ademias de las condiciones culturales de aquella época, mezcla de inconformismo y fe en el futuro, en la que se fund6 la carrera de comunicacién, es importante saber que en la década de los setenta el sistema de educaci6n superior mexicano multiplicé su tamafio por cuatro. En esos afios, antes de las crisis econémicas que se han vuel- to permanentes, muchos, quiza sin quererlo, gracias a la demanda del sistema, nos convertimos en profesores, aprendices sobre la marcha. A partir de 1980, aunque el crecimiento de las universida- des no se ha detenido, hasta llegar hoy a atender a cerca de dos mi- llones de estudiantes, la carrera académica se ha vuelto mucho mas dificil de iniciar y mucho menos atractiva para generaciones mas jOvenes y, en algun sentido, mejor preparadas que la nuestra. Sin consolidarse del todo, el campo académico institucionalizado en México se ha vuelto mucho mas rigido.18 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICAGAO En ese contexto, he de resaltar que aproximadamente cincuen- ta de los ocho mil quinientos miembros del Sistema Nacional de In- vestigadores, nos dedicamos a la investigacién de la comunicacién y casi todos tenemos 45 afos o mas. Soy, entonces, uno de los muy pocos privilegiados por la estructura nacional, que disfruta de esta- bilidad, apoyo y hasta reconocimiento para dedicarse al estudio aca- démico de la comunicaci6n en mi pais, en condiciones equiparables alas de cualquier otro, y estoy consciente del privilegio y la respon- sabilidad que eso implica. Casi todos los investigadores mexicanos que ustedes conocen comparten esta condicién y la preocupacién por el futuro de muchos jévenes en cuya formacién académica he- mos colaborado, pero cuya insercién en el campo académico es cada vez mas dificil. Desde ese horizonte, muy practico y muy relaciona- do con los programas de posgrado, es desde donde quiero partir para exponer ante ustedes algunas reflexiones sobre la epistemolo- gia de la comunicaci6n. He organizado mi exposici6n en tres partes, con las que trato de articular una argumentaci6n consistente que vaya de lo mas abs- tracto a lo mas concreto, sobre un eje de problematizacién estruc- tural e historica de los estudios sobre la comunicaci6n. En un pri- mer momento formulo algunos problemas de legitimaci6n; en el segundo ciertos problemas de institucionalizacién y en el tercero de profesionalizacién de estos estudios, y en cada una de estas par- tes intento plantear algunas cuestiones epistemoldgicas cuya discu- sidn y clarificacién me parece urgente. Adopto como premisa de entrada la existencia de un campo académico en el sentido de Bourdieu, y desde el interior de ese campo, tal como me lo represento, intento suscitar una discusién reflexiva sobre sus procesos de institucionalizacién, social y cog- noscitiva al mismo tiempo, entre agentes latinoamericanos altamente capacitados para orientar y reorientar sus procesos de estructuracion. De otra manera, el debate correria fuertes riesgos de convertirse en un ejercicio bizantino 0 bien, como sucede muchas veces, en un “dia- logo de sordos”. Alenunciar el uso heuristico del modelo de campo como mar- co interpretativo y referencial (Velasco, 2000), consciente e intencio- nadamente estoy excluyendo otras perspectivas de entrada, cuya per- tinencia comparativa quizd podamos discutir a propdsito de la par- ticipacién de otros colegas, que estoy ansioso por escuchar. Pero alAS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO, Ww mencionar a Bourdieu como la fuente primera de mi propuesta, debo aclarar que no soy un “bourdiano”, pues he encontrado mayor po- tencia heuristica en los postulados de la teoria de la estructuracion de Giddens y otros autores, para desarrollar el analisis del campo en el que me sito como agente, en multiples dimensiones articuladas y desde una perspectiva sociocultural de la comunicaci6n. Desde ese punto de partida, entiendo que la expresion “Episte- mologia de la Comunicaci6n” refiere a una dimensi6n constitutiva, interna, fundamental, del propio campo académico de la comunica- cion en el que reflexionamos como agentes calificados e interesados sobre ella, independientemente de que desde otras perspectivas pueda referirse a un cuestionamiento inmanente, exterior o preten- didamente “superior”, realizado por otros. Si la epistemologia como disciplina filos6fica, como teoria del conocimiento, puede aportar todavia un criterio util para orientar nuestra practica, es una pregunta que mi incompetencia profesional en el terreno de la filosofia me impide abordar con seriedad, por lo que no niego su eventual pertinencia. Pero si lo que hacemos es en algun sentido “cientifico”, y con mayor razon si nojo es, deberiamos ser capaces de demostrar la consistencia y utilidad de nuestro cono- cimiento refiriéndolo a las propias condiciones y procedimientos con que lo producimos. Porque hay sin duda una insatisfaccién genera- lizada con el estado actual del campo, y su futuro depende, en buena medida, de la manera en que interpretemos y estructuremos la cre- ciente dispersion intelectual, ideoldgica y politica que lo caractet zan. Ahora si, y no como cuando Berelson lo afirmé en los aos cin- cuenta, el campo parece estarse “desvaneciendo” cuando mas se espera de él. Lalegitimacién del campo académico de la comunicacién Comienzo por constatar el hecho de que independientemente del tiempo y el espacio que usemos como escala para identificar el campo académico de la comunicacién y sus condiciones de desarro- llo, encontramos en el centro de ese proceso histérico la cuestion de su legitimacién, siempre en debate, invariablemente objeto de lu- cha, tanto al interior como al exterior del propio campo. Cuando discutimos las condiciones de la legitimidad intelectual de nues-20 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO tros estudios, es decir, cuando apelamos al andlisis epistemolégico de los esquemas, discursos y saberes que postulamos como validos, y confrontamos los criterios de evaluaci6n para calificar 0 descalifi- car perspectivas que no son la propia, no podemos eludir los factores sociopoliticos que, en diversas escalas, determinan ese analisis tam- bién en sus dimensiones ontoldgica, ética y organizativa o social. Quiza no sobra recordar que una vez que fue desplazado el pro- yecto del empirismo ldgico del centro de la discusi6n filos6fica so- bre el conocimiento cientifico, con las certezas dogmaticas que pro- porcionaba a sus adherentes, la epistemologia de las ciencias, co- menzando por las naturales, se ve tensionada por la conviccién de que el conocimiento debe referirse validamente a alguna realidad, como sostenia Popper, y de que es un conocimiento histdérica y so- cialmente construido, como lo propuso Kuhn. El “criterio de de- marcacién”, la distincién entre el conocimiento cientifico y el no cien- tifico, es ahora, en vez de una norma de unificacién, un objeto mas de discusién, sometido tanto a las condiciones de la racionalidad como a las del poder. Por ello en el campo cientifico los conflictos epistemolégicos son siempre, inseparablemente, conflictos politicos. Pero habria que con- siderar con mayor detenimiento que esto esta directamente relacio- nado con el grado de autonomia conquistado por el campo. Si la definicién de lo que esta en juego en la lucha cientifica forma parte de la misma lucha, por lo que segun Bordieu “los dominantes son aquellos que logran imponer una definicién de la ciencia segun la cual la realizacién mas perfecta consiste en tener, ser y hacer aquello que ellos tienen, son y hacen” (2000: 20), es indispensable recons- truir desde su origen las definiciones en pugna, y apreciar en qué medida y de qué manera su formulacidn e institucionalizacién de- penden de agencias de poder internas y externas al campo. Porque, otra vez segtin Bourdieu, “las reivindicaciones de legitimidad obtie- nen su legitimidad de la fuerza relativa de los grupos cuyos intere- ses expresan: en la medida en que estan en juego en la lucha la defi- nicién misma de los criterios de juicio y de los principios de jerar- quizacién, nadie es un buen juez porque no hay juez que no sea, al mismo tiempo, juez y parte interesada” (Bourdieu, 2000: 22). Para el campo académico de la comunicaci6n, cuya constitucién. es tan reciente como incipiente, y debido a sus pretensiones de cientificidad, tengan o no fundamento valido, estas cuestiones siguenAS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS £ © LUGAR DA COMUNICAGAO- 2 indudablemente abiertas, y hacen muy pertinente la indagacion his- torica. Porque quizd estemos tentados a aceptar que es valida la im- posici6n de un solo modelo de futuro, o a considerar la diversidad de fundamentos como un defecto. Y habria que ver, por ejemplo, qué hay en comin en la estructura de produccién del conocimiento y la reproduccién de la comunidad de practicantes, entre el campo de la comunicacién en la actualidad y el de la 6ptica en el siglo XVII, que Thomas Kuhn describié de la siguiente manera: Quien por primera vez entraba en este campo se veia expuesto inevitablemente a toda una variedad de puntos de vista contra- dictorios (...) El hecho de que el principiante tuviera que hacer una eleccién y luego conducirse de acuerdo con ella no impedia que estuviese consciente de las demas posibilidades. Este modo de edu- caci6n tenia, obviamente, mas posibilidades de producir un cienti- fico libre de prejuicios, alerta a los fendmenos nuevos y flexible en la manera de enfocar su campo (Kuhn, 1982: 254). Una postura semejante parece adoptar James Anderson, un des- tacado profesor norteamericano, que escribi6 en la introduccién de su libro sobre los fundamentos epistemoldgicos de las teorfas de la comunicaci6n hace unos cuantos anos, que actualmente “seria no- table un colega que no conversara, al menos, con algo del menu de las revoluciones kuhnianas, la arqueologia foucaultiana, el decons- truccionismo derrideano, el deseo lacaniano, la dialégica bahktiniana, la semiotica peirceana, la hermenéutica alemana y la teoria femi- nista, asi como con las busquedas de los similares de fin de siglo de James y Dewey” (Anderson, 1996: 1). Para él, la necesidad de adqui- rir y mantener certidumbres criticas, especialmente en las practi- cas institucionalizadas de la formacién universitaria de investigado- res, justifica la revision de las teorias como practicas, a partir de una epistemologia que descarta el recurso a la autoridad incuestionable de la ciencia, pero no a las consecuencias de la construcci6n y re- produccién social e institucional de esa “autoridad”. E! debate sobre la legitimidad intelectual de los estudios sobre la comunicacién, que expresa en buena medida la lucha por la legi- timaci6n de ciertas perspectivas y la consecuente deslegitimacién de otras, en funci6n de un poder diferencialmente construido y dis- tribuido, ha tenido sin duda como escenario principal al sistema aca-2 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICAGAO démico norteamericano, cuyo analisis considero muy ilustrativo para nuestros propdsitos latinoamericanos, pues es ahi donde parece haberse impuesto en las Ultimas décadas un pluralismo muy ambivalente y confuso, sospechosamente coincidente con la crecien- te concentracién y expansion global de las industrias mediaticas. Asi, puedo explicarme porqué lo que comenz6 a principios de los afios ochenta como una busqueda de claridad sobre el “fermento en el campo”, entendido como una “crisis de paradigmas” en térmi- nos mas 0 menos epistemoldgicos Journal of Communication, 1983), ha derivado en una polémica multidimensional y en el reconocimien- to de una fragmentacién aparentemente irresoluble, que entre mu- chas otras consecuencias ha suscitado un interés muy critico por la historia, intelectual y social, del propio campo. Habria que interpre- tar desde ahi porqué, después de una década, el debate norteameri- cano se reformuld alrededor del “futuro del campo” (Journal of Communication, 1993) o en el imperativo de “definir los estudios de medios” (Levy & Gurevitch, 1994), para empezar por los titulos bajo los cuales se publicé la polémica. Si bien George Gerbner, el editor de la publicacién de 1983, lle- ga laconclusi6n de que las oposiciones entre conocimiento basico y aplicado, entre ciencia y arte, entre analisis cuantitativo y cualitati- vo, entre investigacién administrativa y critica, “no se sostienen ni légica ni practicamente con independencia de las razones histdricas que lo hicieron creer asi”, y que “el fermento en el campo (...) atesti- gua la vitalidad de la disciplina y su capacidad de acometer las ta- reas criticas” (Gerbner, 1983: 362), Mark Levy y Michael Gurevitch, editores a su vez de la edicién de 1993, plantearon de entrada que “el ansia por descubrir un paradigma universal de la comunicacién ha sido sustituida por una cOmoda aceptacion del pluralismo tedrico”, que “al saber académico de la comunicacion le falta status discipli- nario porque carece de un nucleo de conocimiento y por tanto la legitimidad institucional y académica sigue siendo una quimera”, y que “la guerra fria politica ha terminado, pero las batallas ideoldgi- cas y metodologicas — como las que se dan entre los deterministas psicoldgicos, culturales, econdémicos, textuales y tecnolégicos — con- tinuan fragmentando nuestro campo” (Levy & Gurevitch, 1993: 4). No conozco convocatoria a un ntimero especial que, a media- dos de 2003, tendria que continuar la secuencia autorreflexiva cana- lizada aparentemente cada diez afios por la publicacion principal deAS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO 23 la ICA. Pero si conozco muchos de los términos y posiciones del debate, que inevitablemente se ha internacionalizado y complejizado. Menciono solamente tres de estas posiciones, que me parecen espe- cialmente interesantes para la reconstruccion epistemoldgica: Una, es la del ya mencionado James Anderson, quien sostiene que “la teoria debe tener un objeto de su explicacion, una forma ex- plicativa, un método para relacionar evidencias con postulados, ex- plicaciones caracteristicas dentro de un rango de desempeiio, y una consecuencia valoral”, por lo cual articula siete criterios, en forma de preguntas, correspondientes a los planos de la ontologia, la epis- temologia, la praxeologia y la axiologia, que propone en conjunto para buscar una explicacién racional a la “cualidad y la manera de las creencias que fundamentan nuestro trabajo académico”, en el cual se indoctrina a los estudiantes (Anderson, 1996: 2-5). Y deja a ellos, a los lectores, la construcci6n de las respuestas, después de analizar 18 diferentes teorias de la comunicaci6n. El comentario de Klaus Krippendorff ante este libro posmoderno requeriria una re- flexion adicional: en vez de ofrecer respuestas simples a las preguntas epistemol6- gicas que inevitablemente surgen de las teorias, traza numerosas distinciones entre comunidades de académicos que alegan tener esas respuestas, y asi nos muestra cémo el estudio académico de la comunicacién se hace en el proceso de comunicar sobre la comu- nicacién (Anderson, 1996, solapa). Otra postura que considero muy interesante es la del propio Krippendorff, alguna vez y todavia reconocido por su manual de ana- lisis de contenido, quien ha participado en el debate constatando la necesidad de elaborar desde otras bases epistemolégicas un con- cepto de comunicacién no centrado ya en los mensajes como reali- dades “objetivas”, que “afectan” a quienes se exponen a ellos y que crean una “comunalidad” social de la cual hay que evitar las “des- viaciones” (Krippendorff, 1994: 42). En cambio, habria que construir una radicalmente nueva y virtuosa sintesis, en que se vea a los seres humanos, prime- ro, como seres cognitivamente autonomos; segundo, como practi- cantes reflexivos de la comunicaci6n con los otros (y esto incluye a24 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO, los cientificos sociales en el proceso de sus investigaciones); y ter- cero, como interventores moralmente responsables, si no es que creadores de las realidades sociales en las que terminan viviendo (Krippendorff, 1994: 48). Con bases constructivistas, en algunos momentos radicales, Krippendorff plantea, asi, un proyecto epistemolégicamente reflexi- vo éticamente orientado, del cual seriamos responsables los acadé- micos de la comunicaci6n, como agentes que a su vez reconocen la capacidad de los otros actores sociales de la comunicacién para dar cuenta de sus practicas. Los ejes de una revisin critica del campo y los fundamentos de su reconstituci6n tedrica no podrian ser enton- ces “puramente” epistemoldgicos, sino que deberian articular los fac- tores de ejercicio de poder y de legitimidad con la construccién de los significados. Pero entre los autores a los que decidi referirme en este punto, es quiz4 John Durham Peters el que aporta los planteamientos mas radicales y estimulantes para el debate. Su libro Hablar al aire: una historia de la idea de la comunicacién (1999), cuestiona la pertinencia de cualquier andlisis que no tome en cuenta que “en gran parte del discurso contemporaneo, ‘comunicacién’ existe como una suerte de plasma germinal conceptual malformado e indiferenciado. Rara vez una idea ha sido tan infestada de lugares comunes”. Porque “comunicacién” ha llegado a ser propiedad de politicos y bu- récratas, tecndlogos y terapeutas, todos ansiosos por demostrar su rectitud como buenos comunicadores. Su popularidad ha rebasado a su Claridad. Aquellos que buscan hacer teéricamente preciso el término para el estudio académico han terminado a veces s6lo forma- lizando el miasma a partir de la cultura mas en general. La conse- cuencia es que el pensamiento filos6ficamente mas rico sobre la co- municacién, tomada como el problema de la intersubjetividad o las rupturas en la comprensi6n mutua, se encuentra frecuentemente en aquellos que hacen poco uso de esa palabra (Peters, 1999: 6). Peters argumenta que “la nocin de teoria de la comunicacién no es mas vieja que los afios cuarenta (cuando significaba una teoria matematica del procesamiento de sefiales), y nadie habia aislado la ‘comunicaci6n’ como un problema explicito hasta las ultimas dos dé-AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICAGAQ 25 cadas del siglo XIX” (Peters, 1999: 9-10). Como objeto de debate inte- lectual, Peters ubica a la comunicacién especialmente en los contex- tos posteriores a la primera y la segunda guerras mundiales y justi- fica su estudio en la actualidad, y por lo tanto, la clarificacién de sus fundamentos, en tanto que “comunicacién’ es una rica marafia de hebras intelectuales y culturales que codifica las confrontaciones de nuestro tiempo consigo mismo. Comprender la comunicacién es comprender mucho mas” (Peters, 1999: 2). Ami modo de ver ésta es la veta central de la problematizaci6n epistemoldgica del campo, pues al mismo tiempo que la comunica- cion se convierte en un principio cada vez mas importante del sen- tido en todos los ambitos de la existencia social, segin la doxa imperante, la academia no logra constituir un sistema de conocimien- to que vaya mas alla de la reproduccion de esa doxa, de ese conoci- miento cotidiano acritico y funcional, con el que la ciencia tendria que romper. Siguiendo a Bourdieu, podriamos entonces interrogar los constitutivos comunes entre las comunidades de académicos que sostienen propuestas divergentes pero comparten esa imposibilidad de construir un conocimiento y un método crecientemente aut6no- mos de la determinacion social, externa al campo pero incorporada e institucionalizada en él. Y en esos términos, lo que habria que dis- tinguir es el conocimiento cientifico de esa doxosofia, “ciencia apa- rente y ciencia de la apariencia” (Bourdieu, 2000), que sobre todo con un tinte tecnologicista y a partir de la irrupcién de la Internet en el horizonte cotidiano durante la ultima década, ha proliferado en el campo y alrededor de él. Peters sugiere, pues, que “comprender la comunicacidn es com- prender mucho mas”, comprender “las confrontaciones de nuestro tiempo consigo mismo”, formula paralela a aquella que argument Jestis Martin-Barbero entre nosotros hace mds de una década en el sentido de que la comunicacién ocupa un “lugar estratégico para pensar la modernidad”, razon fundamental por la que su estudio debe de ser transdisciplinario: La expansion e interpenetraci6n de los estudios culturales y de la comunicaci6n no es fortuita ni ocasional. Ello responde al lugar es- tratégico que !a comunicacién ocupa tanto en los procesos de reconversién cultural que requiere la nueva etapa de moderniza- cion de nuestros paises, como en la crisis que la modernidad sufre2% EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO en los paises centrales. No es posible comprender el escenario ac- tual de los estudios de comunicaci6n, y ain menos trabajar en su prospectiva, sin pensar esa encrucijada (Martin-Barbero, 1992). Podemos constatar que muchos analistas de la contemporanei- dad, ubicados en muy distintas posiciones del espectro ideolégico y cientifico, estan proponiendo al conocimiento, a la informacién, a la comunicaci6n, como ejes centrales de construccién de un mundo nuevo, al mismo tiempo que se expanden por el mundo y se con- centran en poquisimos ntcleos de control las industrias del sector. Parece que la idea de que hay un desplazamiento acelerado de los factores econdmicos y politicos hacia los simbdlicos y culturales en los nucleos de la transformacion social no parece tan descabellada como en los siglos anteriores. Las finanzas mundiales y las eleccio- nes en muchos paises, como México en 2000, asi lo hacen pensar. Para algunos, el siglo XXI estara marcado por la importancia cre- ciente de las relaciones simbédlicas, en vez de la de las relaciones materiales, en la estructuracion de la realidad global. La comunica- cién, quiza con la Internet como paradigma, seria asi la clave cen- tral de la globalizacion. ;Pero qué significan, en cada uno de los autores que asi lo argumentan, “conocimiento”, “informacién” y “comunicacién”, y qué relaciones conceptuales proponen entre es- tos términos? Por mencionar solo una de las multiples preguntas que tendrian que seguir a ésta: gy qué tienen que ver los “medios”, como instituciones industriales, en ello? Mi postura es que al dejar sin abordar con rigor estas cuestio- nes basicas, se produce un efecto de disgregacién tal en el campo, que solo es aparentemente paraddjico que prevalezca un “pluralis- mo” superficial y acritico, sea bajo la imagen de la “especializacion” ode la “interdisciplinariedad”, y en realidad se impongan asi el “pen- samiento unico” y la instrumentalizacién de la comunicaci6n y sus recursos. Como corolario de su Historia de las teorias de la comuni- caci6n y, al menos desde Pensar sobre los Medios (1986), asi lo ha- bjan advertido ya los Mattelart: El pragmatismo que caracteriza a los estudios operativos impreg- na cada vez mas las maneras de decir la comunicacion. De ello re- sulta que el campo en su conjunto experimenta cada vez mas difi- cultades para desprenderse de una imagen instrumental y conquis- tar una verdadera legitimidad como objeto de investigaci6n en suAS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO 27 integridad, tratado como tal, con el distanciamiento indisociable de una gestion critica (Mattelart y Mattelart, 1997: 126). En ese movimiento, que indudablemente seguira siendo objeto de debate durante las proximas décadas, la epistemologia es una clave principal para legitimar cientifica y socialmente al campo de estu- dios de la comunicaci6n, en consonancia con la relevancia, real 0 imaginada, que el poder y la historia han otorgado a su objeto. En suma, me parece evidente que la autonomia cientifica del campo de estudios de la comunicacién es muy baja y tiende a decre- cer alin mas, lo cual implica que la acumulacion y distribucién de saberes sobre la comunicaci6n estan sujetas a la intromision no sélo de intereses ajenos al conocimiento dentro del campo, sino a la im- posicién desde su exterior de las definiciones de qué y cémo, por- qué y para qué producirlos y reproducirlos en la institucién univer- sitaria, con la apariencia de cientificidad que ésta otorga, pero con la densidad de critica intelectual mas baja que sea posible. Y, no obs- tante, hay un proceso creciente aunque no mayoritario de reflexién critica y de modificacion practica de las condiciones por las cuales el campo se aleja de un estado, que nunca ha tenido, de monopolio de la legitimidad cientifica y social en un grupo, perspectiva o modelo. La situaci6n presente, entonces, requiere de una articulacion muy delicada de reflexién epistemoldgica con anilisis sociolégicos y éti- co-politicos de los intrincados procesos de su legitimaciOn institu- cional, pues en el fondo, es una lucha ideolégica que cruza por la territorializacion. La institucionalizacién del campo académico de la comunicacién Aunque estoy convencido de que en el debate norteamericano y europeo sobre la historia y futuro del campo de la comunicaci6én pueden encontrarse aportes fundamentales para los anilisis criticos que, desde nuestro espacio académico latinoamericano nadie mas que nosotros puede hacer, convendria mucho distinguir entre “los tres modos de relaci6n del trabajo académico con las concepciones y modelos de comunicaci6n hegeménicos: dependencia, apropia- cion, invencién”, que Jesus Martin-Barbero nos propuso hace casia You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO, 29 truido de diversas maneras los complejos procesos de institucio- nalizacion de estos estudios. Es obvio que las historias, sobre todo si se escriben desde el interior mismo del campo, estén sesgadas por las posiciones e intereses de quienes las construyen. Pero hay un efecto que, junto con la observacién de WahI-Jorgensen, constituye un objeto central de atencidn epistemoldgica: ninguna de las histo- rias abarca un periodo temporal ni un espectro disciplinario mas restringido que las anteriores. Si bien los problemas teéricos son ineludibles al trazar cualquier mapa histérico del campo, las redes de referencias asociadas a las teorias de la comunicaci6n van siste- maticamente cada vez mis atras en el tiempo y mas lejos en el es- pectro de los campos cientificos donde “anclar” sus fundamentos. En otras palabras, se manifiesta ahi una fuerte tendencia “centrifu- ga”, no un proceso de “condensacién”. No hay indicios de un avance hacia una definicién disciplinaria, sino todo lo contrario, aunque las referencias institucionales sean mas comunes cada vez. Ya nadie puede sostener simplemente, como hasta hace unos veinte afios, que el campo de la comunicaci6n nacié sin mas de la yuxtaposici6n de los trabajos de investigacién empirica de Lasswell, Lazarsfeld, Lewin y Hovland, es decir, de una hibridacién de la so- ciologia, la psicologia y la ciencia politica. Ni, como argumenté Everett Rogers (1994), que el tinico y “verdadero” padre fundador del campo sea Wilbur Schramm. Nadie quiere negar el origen mul- tidisciplinario de los estudios de la comunicacién, aunque ese ori- gen se ubique en uno u otro lugar y época, pero cada historiador quiere legitimar, sin embargo, con su version, un proyecto de futuro disciplinario en algun sentido. Por ello hay en juego muchas mas propuestas ontoldgicas, epistemoldgicas, tedricas y metodolégicas que alternativas a la institucionalizacion imperante. Y, también, me- nor convergencia intelectual que organizacional en los supuestos de base de esas propuestas. Eso indica que la institucionalidad, y no la argumentacion inte- lectual, es el lugar social donde se articulan el poder y el saber, por lo que el futuro del campo y la lucha por su orientacién dependen en mayor medida de las formas organizacionales que de las tedricas. El ya mencionado John Durham Peters planteaba hace quince afhos que la institucionalizaciOn bajo la forma de una disciplina autonoma, im- pulsada por Wilbur Schramm en los afios sesenta, los usos de la teo- ria de la informacién en ese contexto y “la auto-reflexi6n como apo-30 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICAGAO logética institucional” explican la “pobreza intelectual” del campo de la comunicacién (Peters, 1986): Elimperativo institucional de crear una disciplina particular en una época cuando los asuntos de comunicacién eran practicamente uni- versales en la vida universitaria significé que las ideas de la teoria de la informacién tuvieran que ser distinguidas del campo en si, para establecer el engramado propio. En suma, la teoria se us6 casi exclusivamente para propésitos de legitimacién y sus “ideas inte- resantes” fueron ignoradas. El destino de la teoria de la informacién es una leccién sobre los compromisos que se hallan en el periodo formativo del campo: negociar alcance teérico por territorio aca- démico (Peters, 1988: 314-315). Otro autor que en ese mismo sentido ha abordado la critica a fondo del “universo de discurso en el que crecimos” es Timothy Glander (2000), cuyo trabajo historiografico interpreta las decisio- nes que guiaron la institucionalizacion del campo de estudios de la comunicaci6n en Estados Unidos en el contexto de la segunda guer- ra mundial en un sentido estrictamente politico, pues habia tantos antecedentes académicos para institucionalizarlos en relacién con la educaci6n, en el campo de las humanidades, como con la propa- ganda, en el de las ciencias sociales. Al resolverse la definicién de los proyectos fundacionales en términos del avance en el conoci- miento y control de los mecanismos propagandisticos, centrados en la difusién masiva y selectiva de mensajes persuasivos, y no de los educativos, asociados a la construccién democratica de comunida- des de conocimiento y accién; y al conseguirse no slo los apoyos politicos y financieros, sino también la legitimidad académica de la investigacion con ese sesgo, la separacién entre comunicacién y educacion y la escision entre humanidades y ciencias sociales que- dé consagrada y el modelo de la Mass Communication consolidado, independientemente de su consistencia epistemoldgica, primero en Estados Unidos y luego, en el resto del mundo. Para los afios sesenta, época de la guerra fria y de la “moderni- zacion” de América Latina, parecia haberse resuelto asi el disefio del campo de la comunicaci6n en Estados Unidos. No solo se habia institucionalizado, en la forma de institutos de investigacién sobre todo, sino que habia clarificado su “misién”, 0 al menos la de laAS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO a “Mass Communication Research”, alrededor de las famosas cinco preguntas de Lasswell — “quién, dice qué, a quién, por qué canal, con qué efectos” — convertidas por Schramm en un auténtico pa- radigma disciplinario. Pero mas que la historia de alla, a partir de este punto me inte- resa discutir cémo se trasladan sus rasgos, hacia aca: hacia América Latina y hacia el resto del mundo, Para esa transicién me sirve mu- cho una cita de Hanno Hardt, autor de otra historia de los estudios de la comunicaci6n en Estados Unidos, ésta trazada desde las cor- rientes “criticas”, en la que busca reconstruir y comprender el tra- yecto de “las ideas sobre la centralidad de la comunicacién en el pensamiento social”: Estas ideas emergieron de Ia cultura social y politica de los Estados Unidos como un pais en vias de desarrollo que se movid, en unas cuantas generaciones, de los experimentos sociales y politicos so- bre la colonizaci6n, la expansion urbana y la industrializacion al liderazgo mundial en practicas democraticas. Durante este perio- do las preguntas sobre la comunicacion y el papel de los medios se convirtieron en una preocupacién practica para quienes se dieron cuenta del papel del lenguaje y de la capacidad de las tecnologias de la informacion para trascender las fronteras culturales y politi- cas (Hardt: 1992: xi). La historia de los medios, asi como la de las practicas comu- nicativas o de la idea de la comunicaci6n, tienen lugares propios en la investigaci6n, que no habria que confundir con la historia del cam- po académico, aunque entre todas esas historias haya vinculos y enlaces multiples. En América Latina, por mas que haya anteceden- tes documentados incluso anteriores a los estadounidenses, la his- toria del campo académico de la comunicacién no abarca mas que las Ultimas cinco décadas, el tiempo que lleva el proceso de su institucionalizacién en las universidades y centros de investigacion. En ese trayecto, me parece muy relevante el hecho de que el estudio de la comunicaci6n haya tenido mucho mas arraigo en la forma de programas de formacién profesional que de centros de investiga- cin, y, por supuesto, la dependencia “obvia” de la investigaci6n la- tinoamericana con respecto a “las orientaciones conceptuales y me- todolégicas establecidas por los investigadores en Europa y los Es-32 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO- tados Unidos”, que ya documentaba y denunciaba Luis Ramiro Beltran (1974, 1976) en los afios setenta. No hay duda de que, en muchos aspectos, ha quedado atras aquella situacién de la “indagacién con anteojeras”, es decir, con mayor precision, la oposicion maniquea entre el rigor de la ciencia y el compromiso politico con la transformacion social que Beltran descubria como patrén del debate central en la investigacion de la comunicacién en América Latina en esa época, y que resultaba mas nociva atin que la dependencia conceptual y metodoldgica de la que no estaba desvinculada. Pero al igual que en las ciencias sociales en general, y en el campo de la comunicacion en Estados Unidos y en otras regiones, el eje central de los debates en el campo parecidé perderse entre los afios ochenta y noventa, precisamente en la épo- ca de su crecimiento explosivo. Como he argumentado en otro lu- gar con mayor detalle (Fuentes, 1999), en mi propio intento de hacer una historia del campo latinoamericano de la comunicacién, hace diez afios (Fuentes, 1992), logré, sin gran dificultad, reconstruir la “problematica” latinoame- ricana de la comunicaci6n y los acercamientos a su investigacién y practica predominantes en los afios sesenta a partir del eje de ten- sion (tedrico-metodolégico) entre el desarrollo y la dependencia, asi como su desplazamiento, en los afios setenta, hacia el eje de ten- sidn (epistemoldgico-politico) entre los criterios de cientificidad y la contribucién al cambio social. Pero ningun esquema de este tipo me permitié entonces organizar las tensiones del campo en los afios ochenta. (...) Sin embargo, la tension predominante en los anos no- venta pareci6 establecerse sobre el eje del abandono de las premisas criticas, sea ante la adopcion de la “inevitable vigencia” de las leyes del mercado también en el ambito de la investigacién, sea ante la dispersién de enfoques sobre las multiples “mediaciones” cultu- rales de las practicas sociales, sea en otras direcciones. Por un lado, entonces, las tematicas asociadas a la “globalizacién” y las tecnologias digitales y, por el otro, las asociadas a las “identi- dades” microsociales, exigieron la ruptura (0 provocaron el “desva- necimiento”) de casi todos los supuestos teérico-metodoldégicos, epistemoldgicos y, sobre todo ideolégicos, que habian sostenido la investigacidén de la comunicacién en las décadas previas. Desde me- diados de los afios ochenta, parece tener cada vez menos sentidoAS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E O LUGAR DA COMUNICACAO, 33 investigar las relaciones de los medios de difusién con la depen- dencia o con el desarrollo nacionales, formular e impulsar alterna- tivas a las politicas y practicas de la “manipulacién” informativa o el entretenimiento comercial, 0 discutir los fundamentos conceptua- les que permiten llamar “comunicaci6n” no sélo a tantos fendmenos distintos, sino enfocados desde perspectivas fragmentarias y hasta opuestas entre si, a lo largo de distintos ejes. Es decir, sin que hayan desaparecido el maniqueismo o el dualismo que en otras épocas organizaban el pensamiento, el discurso y la accién sobre la comu- nicacion, desde mediados de los alos ochenta parecen haberse multiplicado en tal medida las posturas y !as posiciones desde las cuales se puede investigar la comunicaci6n, que el debate es cada vez mas dificil, al haber menos referentes comunes (Fuentes, 1999). Quiza podria sostener hoy, tratando de enfatizar la dimensién epistemoldgica de esta problematizacién, que ese aparente abando- no de las premisas criticas, asi se sustentaran mas en ideologias polfticas que en posturas cientificas, y esa inercia sin proyecto que puede documentarse muy bien en el campo latinoamericano de la comunicacién no sdlo nos acercan mas que en otras épocas a lo que sucede en otras partes, sino que nos exige recomponer nuevamente los esquemas reflexivos desde una postura muy propia. Adelanto que para mi ya no basta tampoco el analisis de la institucionalizacién social y cognoscitiva del campo, como considero que no es suficien- te el andlisis de su legitimacién intelectual, pero si creo que es con- veniente revisar, antes de pasar a otro plano, los fundamentos insti- tucionales de la disciplinarizaci6n del campo y, en consecuencia, las estructuras transinstitucionales en que se sostiene e impulsa, principalmente las publicaciones y las asociaciones académicas. En otras palabras, creo que la influencia fundacional de CIES- PAL’ y sus modelos de escuelas de periodismo primero y de comu- nicaci6n después; la omnipresente actividad de la iglesia catélica y después de otras iglesias en las practicas educativas y comunicativas de todo tipo; los programas estatales de modernizaci6n y los multi- variados movimientos politicos y sociales que han impulsado pro- 2. CIESPAL: Centro Internacional de Estudios sobre la Comuni (antes Periodismo) para a América Latina.u EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO. yectos comunicacionales de signos muy distintos; la intervencién de agencias internacionales de diverso origen, orientaciOn y capa- cidad financiera; los intereses directa e indirectamente asociados con los medios; y muchas otras agencias extra-académicas, han con- dicionado de una manera mucho mas determinante, aunque enor- memente variada, la institucionalizacién universitaria de nuestro campo que la racionalidad no digamos cientifica, sino organizacional de la propia academia. Porque si bien los modelos basicos de formaci6n universitaria de profesionales de la comunicacién fueron importados a América Latina directamente de Estados Unidos, insertados en unos siste- mas universitarios muy diferentes al original pronto adquirieron ca- racteristicas divergentes, de las cuales ahora destaco solamente la desvinculacién de su desarrollo con respecto al de los sistemas co- merciales de medios, que incluso superaron en algunos aspectos, momentos y paises determinados a sus modelos norteamericanos. Quiza, la falta de articulacién de estos programas con la investiga- ci6n, que siempre fue relativamente escasa y durante muchos afios se realizo primordialmente fuera de las universidades, y en la mayor parte de los paises también de los medios, alejé a la gran mayoria de las escuelas de comunicacién de la posibilidad de generar un espa- cio académico minimamente riguroso en cuanto a los saberes que reproducia. Cuando comenzaron a surgir los programas de posgra- do, este patron estaba ya sdlidamente establecido y muchos de es- tos programas no han podido o no han querido sustrarse a él. Se puede explicar asi, entre otros rasgos de nuestro campo, el proceso de disciplinarizacién de los estudios de comunicaci6n. La formacién de profesionales, orientada a la creacién, expansién y de- sarrollo de un mercado laboral en los medios y otras instituciones sociales en el que se insertaran los egresados universitarios, tuvo un impulso mayor por parte de las propias universidades que de las industrias de la comunicacién. Los medios podrfan emplear espe- cialistas funcionalmente capacitados, pero las universidades debian legitimar la oferta correspondiente a esa demanda distinguiendo su formacion de la de otros profesionales: la manera que prevalecié fue la recomendada por CIESPAL en 1963: independizar, al interior dela estructura universitaria, en la forma de escuelas, facultades o depar- tamentos, los estudios de “comunicaci6n”. La denominacién insti- tucional fue mas importante que la fundamentacién conceptual.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAQ, 35 Hay entonces una diferencia sustancial en la institucionalizaci6n disciplinaria de los estudios de la comunicaci6n y, por lo tanto, en la constitucién del campo académico y sus bisquedas de legitimacién, entre Estados Unidos y América Latina: la disciplinarizaci6n, es decir, la construccion y defensa de un territorio delimitado y relati- vamente cerrado para controlar los procesos de produccion y re- produccién de saberes académicos, en Estados Unidos fue la conse- cuencia de una estrategia sociopolitica soportada por la investiga- cién empirica, aquella que Lazarsfeld llam6é “administrativa”. En América Latina, de una estrategia de adaptaci6n y justificacion sociopolitica de las instituciones universitarias, basadas en su fun- cién profesionalizante, como vehiculo de movilidad social y de “mo- dernizacién” de porciones selectas de la poblacién. Al no darse el caso en términos similares ni a Estados Unidos ni a América Latina en la mayor parte de los paises de Europa, quiza con la excepcion espajiola, los estudios sobre la comunicacién comparten quiza los mismos problemas de legitimacién social y epistemoldgica, pero no los de disciplinarizacion del campo. Este analisis, que aqui sdlo insinuo, lleva a la conclusion de que los procesos de institucionalizaciOn, social y cognoscitiva del campo académico de la comunicacién en América Latina se han desarrolla- do manteniendo y reforzando una desarticulacién multiple, que a los problemas “importados” de Estados Unidos suma problemas muy propios. El principal es confundir, como lo ha sintetizado Jesus Mar- tin-Barbero, las condiciones de desarrollo del o los mercados profe- sionales, con las exigencias de un campo intelectual. La formaci6n profesional, al extremar sus rasgos disciplinarios, se fragmenta o es- pecializa funcionalmente, aunque deje un residuo creciente de co- municadores disfuncionales. La teoria no puede segmentarse asi sin perder poder explicativo. Por otro lado, la investigacién académica, con mayor o menor lucidez critica y consistencia cientifica, ha podido desarrollarse a pe- sar de las constricciones disciplinarizantes, pues es evidente la im- pertinencia de “aislar” la comunicacién del mundo en el que sucede, como si tomarla como objeto fuera sindnimo de convertirla en una cosa. Hay proyectos inter-, multi-, trans- y post-disciplinarios y una gran necesidad de debate epistemoldgico, ético y metodoldégico en- tre ellos, que el factor de la disciplinarizacién obstaculiza. Porque no habria que confundir “disciplina” (concepto organizacional y peda- g6gico) con “especialidad” (recorte funcional de enfoque particular)36 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICAGAQ, © con “especificidad” (atributo de una relacién concreta entre un objeto y un método). El espacio idéneo, pues ni el mercado ni la in- dustria ni la profesion pueden pensarse a si mismos de otro modo, que queda disponible para sustanciar y referir pertinentemente este debate es aquel en el que confluyen idealmente las funciones socia- les irrenunciables de la universidad: el posgrado, lugar de la profesionalizacién avanzada. La profesionalizacién del campo académico de la comunicacién Indiqué al principio que mi argumentacion iria de lo mas abstracto alo mas concreto sobre un eje de problematizacion estructural e his- torica del campo de estudios sobre la comunicacion. Al llegar a esta ultima parte, mi exposicion sera mucho mas breve, tanto porque mis puntos de vista 0 mis propuestas estan ya presentados, como porque es en el plano de referencia de las practicas y las estrategias concretas donde espero que se site la parte mas interesante del debate. La “comunicaci6n”, como quiera que la definamos, implica sis- temas y practicas socioculturales, cognoscitivas, econdmicas y poli- ticas, y dimensiones psicoldgicas, bioldgicas y fisicas de las que ne- cesariamente participamos. La construccién de objetos de conoci- miento sobre ella no puede ignorar que como sujetos estamos im- plicados en esos objetos. Por ello el hecho de construirlos y desarro- llarlos de una u otra manera afecta su propia naturaleza objetiva, la institucionaliza y, de alguna manera, la “naturaliza”. En el campo de la comunicaci6n, la tensién esencial parece ser ontolégica: su ob- jeto es un factor constitutivo de lo humano, y al mismo tiempo un instrumento para la consecuci6n de fines particulares, hist6rico-so- ciales determinados. Estamos hechos de comunicacién, como indi- viduos y como sociedades, pero también usamos la comunicacién para afectar particularmente esta constitucion. De ahi que la comu- nicacion implique ineludibles imperativos éticos. En el plano epistemoldégico, entonces, esa “tensidn esencial” se puede resolver tanto separando como buscando articular ambos as- pectos del fendmeno. Las teorias de la comunicaci6n, elaboradas en los campos del conocimiento filos6fico, de las ciencias naturales 0 formales, de las humanidades o de las ciencias sociales, son cons- trucciones alternativas para interpretar sistematicamente, y comu-AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO- 7 nicar a otros 0 con otros, la forma en que se relacionan en la prac- tica concreta las dimensiones constitutivas e instrumentales de la comunicaci6n. Por razones ideoldgicas, histéricamente explicables, parecen haber predominado las perspectivas instrumentales mas reduccionistas en la constitucion del campo académico, al centrarse la atenciOn en los medios o en los mensajes y no en las interacciones entre sujetos o entre éstos y las instituciones. Pero su eficacia expli- cativa, interpretativa o retorica, al operar esa reduccion, genera mas problemas que los que resuelve, debido a que lo que “deja fuera” es precisamente lo que resulta indispensable explicar: la constitucion comunicativa de la realidad social. El principio de la doble hermenéutica de Giddens, uno de los pilares de su teoria de la estructuraci6n, que postula que el trabajo cientifico-social consiste en interpretar hechos ya previamente in- terpretados, y que implica que los sujetos sociales son constitu- tivamente capaces de actuar en consonancia con sus propias inter- pretaciones (Giddens, 1984), aporta un modelo util para identificar que la especificidad de la comunicacién, formulada como media- cién significativa de la constante dialéctica entre los sujetos en interacci6n y las estructuras y sistemas sociales, no puede aislarse tedrica 0 metodolégicamente de las mediaciones del poder y de la “sancion” moral, que confiuyen en la estructuraci6n de los siste- mas sociales a través de la institucionalizacién discursiva, politico- econdémica y legal (Giddens, 1984: 31). Seria objeto de otra revisién la manera en que autores como John B. Thompson (1995) y Klaus Bruhn Jensen (1995) sistematizan teéricamente, con articulaciones diferentes en cada caso, las derivaciones de este esquema para la practica de la investigacion sociocultural de la comunicacién y los medios en la sociedad contemporanea. Para la teoria de la estructuraci6n, la agencia es la capacidad del actor social “para reinterpretar y movilizar un repertorio de re- cursos en términos de esquemas culturales distintos a los que cons- tituyeron originalmente el repertorio” (Sewell, 1992: 19), pues los re- cursos nunca estan homogéneamente distribuidos entre los sujetos sociales (individuales 0 colectivos). “Ser un agente significa ser capaz de ejercer algtin grado de control sobre las relaciones sociales en que uno esta inmiscuido, lo que a su vez implica la capacidad de trans- formar esas relaciones sociales en alguna medida” (Sewell, 1992: 20). Este principio, que por supuesto tendria que desarrollarse mu- cho mas, es la base de mi propuesta final en esta exposicidn: es me-38 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO. diante la formaci6n en los posgrados de agentes académicos com- petentes para producir socialmente sentido sobre la produc- cién social de sentido, que el campo académico de la comunica- cién puede no solo reorientarse para avanzar en su legitimacién, para ganar mayor autonomia y poder, sino que podra generar ex- plicaciones mas plausibles y orientadoras de las transformaciones en curso en el mundo y del papel que los sistemas y practicas de comunicaci6n tienen en esas transformaciones, y basar su legiti- maci6n en esta competencia académica, mas que en su competitivi- dad institucional. Esta tarea educativa, cientifica y politica, que articula las fun- ciones sociales sustantivas de la universidad: la docencia, la inves- tigacion y la extension, con los imperativos funcionales de reforzar la profesionalizacién pero también la critica en todos los campos del saber y en todos sus niveles, tiene en el nivel del posgrado un espacio privilegiado y en el campo de la comunicaci6n una respon- sabilidad estratégica, debido mas que a su propio desarrollo a la extensién que ha adquirido su objeto, y que no es ni puede ser sdlo de él. La comprensién de la comunicacién contemporanea no pue- de ser tarea exclusiva de nadie, pues no puede producirse sin el aporte de los saberes de otros. Lo que puede ayudar mas a clarificar las condiciones de la legitimacién epistemoldgica de los estudios de la comunicaci6n no es su cerraz6n, sino su apertura: su capaci- dad de interaccion critica y de complementaci6n racional en la cons- truccion de un conocimiento s6lido y comprensivo que articule pers- pectivas diversas sobre un aspecto de la realidad que, por defini- ci6n, es multiple. Cuando afirmo que “el campo” tiene ciertas caracteristicas o puede emprender ciertas tareas, no extrapolo la objetivacion social que le confieren las luchas intersubjetivas que lo constituyen a la creencia en que el campo sea un ente racional, con “voluntad” propia, que pue- da orientar su acci6n en algun sentido. Ni la “ciencia”, la “academia”, el “mercado”, el “estado”, la “sociedad” o el “campo” tienen mas capa- cidad reflexiva y practica que la que le asignan sus agentes, o la corre- lacién de fuerzas entre sus agentes. De ahi mi propuesta de centrar los esfuerzos en la profesionalizacién avanzada, en la formacién de agentes académicos en los posgrados, con capacidad de influir criticamente en la definicién de los términos mas pertinentes para que lalucha por la identidad y la monopolizaci6n del saber legitimo, por la acumulacién, reproduccién y, sobre todo, la redistribucién sociala You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.40 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAQ. KRIPPENDORFF, Klaus (1994): “The Past of Communication’s Hoped-For Future” in LEVY and GUREVITCH: Defining Media Studies. Reflections on the future of the field. New York: Oxford University Press. KUHN, Thomas S. (1982): La tensién esencial. Estudios selectos sobre la tradicion y el cambio en el ambito de la ciencia [1977]. México: CONACYT/ Fondo de Cultura Econémica. 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WAHL-JOHANSON, Karin (2000): “Rebelion and Ritual in Disciplinary His- tories of U.S. Mass Communication Study: Looking for The Reflexive Turn”, in Mass Communication & Society, v. 3, n. 1, pp. 87-115.Por uma epistemologia da Comunicagdo EDUARDO DUARTE Professor do Programa de Pés-Graduacéo em Comunicagao da UFPE A idéia da construgado de uma epistemologia da comunicagao esbar- ra inevitavelmente em dividas naturais quanto ao que se entende pelo termo comunicagao. Esse termo, enquanto um campo de pes- quisa e estudo cientifico, ainda é muito recente e por esse motivo ainda passa por tentativas de redefinigdes ou reposicionamentos conceituais no intuito de construir uma ou mais imagens comuns que expressem um conceito. Poderiamos comegar nos perguntando primeiramente: o que é comunicagao? Afinal de contas, nos ultimos cem anos essa palavra tornou-se a expressao de um dos motores essenciais da civilizagao contemporanea. Passou, por isso mesmo, a ter sua definigao expressa nos mais diferentes contextos e descre- vendo os mais variados fendmenos nos campos do saber, como por exemplo: as intercomunicagées celulares, na Biologia; a formagao das redes neurais nas Ciéncias Cognitivas; os fenédmenos de troca de calor, na Termodinamica; os estudos dos meios de comunicagao de massa e os estudos do corpo como plataforma de significados, vistos tanto na Sociologia quanto na Antropologia. Nao é preciso aprofundar-se na aplicacao do termo noutros campos da ciéncia para enxergar seu uso diversificado. Pensar uma epistemologia da comunicagao implica tentar circuns- crever mais precisamente o termo, encontrar um conjunto de idéias que se interliguem e expressem o que se tenta tomar como tema de estudo e pesquisa de principios teéricos e metodolégicos. Uma epis- temologia é uma forma de indagar a realidade. A palavra epistemolo- gia é definida num dicionario etimolégico como,42 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO. o estudo critico dos princfpios, hipéteses e resultados das ciéncias ja constituidas e que visa a determinar os fundamentos légicos, o valor e o alcance objetivo delas'. Mais especificamente temos que as palavras espiteme e logos vém do grego e significam ciéncia e estudo, respectivamente. De outra forma, podemos dizer que epistemologia é um conjunto de co- nhecimentos tedrico-metodolégicos ligados simbioticamente que permitem elaborar uma forma de investigar um objeto. Epistemolo- gia é o estudo dos principios de investigagdo que direcionam um olhar para um tema. Mas 0 que é comunicacao? Voltamos 4 mesma questao. E pos- sivel chegar a uma definigdo nica de comunicagao que inclua to- das as outras? Como os pesquisadores da comunicagao podem de- senhar suas possibilidades epistemolégicas estando longe de um conceito que unifique? Uma possibilidade de responder a essas questoes seria a tentativa de formular um conceito que sirva de re- ferencial cientifico para os pesquisadores da comunicag¢ao, inde- pendente das formas nas quais 0 termo surja no uso cotidiano e em outras disciplinas cientificas, como os conceitos de Energia e For- Ga que sao especificos na Fisica. Esbarramos ai num novo proble- ma que é ainda mais complexo pelos seus desdobramentos poli- ticos: devido a grande quantidade de aplicagdes do uso da palavra comunicagao entre os proprios pesquisadores, como circunscrever esse objeto? E interessante nesse momento tentarmos outra estratégia de ob- servac¢ao do problema investigando um pouco mais as expressdes envolvidas. A palavra comunica¢ao é derivada da palavra latina communis, da qual surge o termo comum em nosso idioma. Communis quer di- zer pertencente a todos ou a muitos. Dessa mesma raiz latina surge a palavra comunicare, origem de comungar e comunicar. Num novo desdobramento dessa raiz, ainda no latim, chegamos a comunicatio- 1. CUNHA, Anténio Geraldo da. Diciondrio Etimolégico Nova Fronteira da Lingua Portuguesa. Rio de Janeiro: Nova Fronteira, 1999, p. 308.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO, “a onis que indica a idéia de tornar comum?. Desdobrando um pouco mais a palavra comunicag¢ao temos junto a idéia de tornar comum que deriva de communis, o sufixo latino ica que indica estar em rela- ¢ao e o sufixo ¢ao que indica a¢ao de’. Temos entao um nucleo de idéias que se associam formando um conceito: Pertencente a muitos, comungar, tornar comum, estar em relagado e agdo de se associam no macroconceito‘ chamado co- municacao. Um macroconceito surge da articulagao reciproca de varios conceitos que se combinam fazendo emergir um conceito macro, que nao pode ser dito de outra forma que nao seja pela emer- géncia da articulagao dos conceitos ou idéias associados. Um macro- conceito é um plano que emerge do encontro de planos cognitivos. Entretanto, as idéias também possuem historia, um percurso no qual sao redefinidas, reorganizadas e agregam outros valores de acordo com os contextos histéricos e emocionais de cada coleti- vo que 0 legitima. O fisico David Bohm afirma que o sentido de uma palavra nao é resultado de um escolha pessoal, mas de um espirito do tempo que o elege. O que muitas vezes pode-se observar é que os conceitos congelam-se em sentidos especificos de um tempo e espago préprios que se afastam de suas origens etimoldgicas. Nao que Bohm defenda um purismo original do sentido dos termos. O fluxo de uma palavra no mundo leva sua historia, agrega e dispersa valores, mas é interessante ver que tendo a palavra um percurso, ela pode informar muito mais do que 0 vocabulo circunstancialmente faz ver. O conceito apresenta-se como um campo vibratério, uma poténcia inominal de onde partem os sentidos regulares que no- meiam e capturam circunstancialmente essa poténcia. David Bohm chama essa ampliacao dos conceitos de reomodo’. No reomodo, os textos ditos cientificos precisam estender sua res- sonancia cognitiva a partir da quebra da utilizagdo viciada das pala- vras, e assim superar a conseqiente visado fragmentada da realidade. Para Bohm, as palavras foram cristalizando modos de operacionali- 2. Idem, p. 195. 3. ALMEIDA, Rotilde Caciano. Diciondrio Etimolégico da Lingua Portu- guesa. Brasilia: UNB, 1980, p. 77. 4. Ver: MORIN, Edgar. Ciéncia com Consciéncia. Rio de Janeiro: Bertrand Brasil, 1996, p. 268. 5. BOHM, David. A Totalidade e a Ordem Implicada - uma nova percep- ¢ao da realidade. Sao Paulo: Cultrix, 1980, p. 5144 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICAGAO za¢ao e significagaéo que expressam visdes de mundo. Quando as palavras sao recuperadas em sua etimologia ou mergulhadas em con- textos e situagdes diversas, como na poesia, elas apresentam potén- cias expressivas muito maiores do que as que se cristalizaram nas visOes de mundo que nos apresentaram suas existéncias. Toda for- ma de linguagem traz uma forma de operacao cognitiva sobre 0 mundo. A estrutura comum da linguagem exerce pressao sobre uma estrutura comum de pensamento. Oreomodo nao pretende explorar a poténcia maxima das pala- vras, mas fazer ver que elas podem produzir novas expressdes cien- tificas e poéticas. Na criagao de novas circunstancias para os concei- tos e para Os textos percebe-se que a dilatagao do campo cognitivo das idéias abre chances a novas emergéncias éticas no fazer cienti- fico. Porque uma nova forma de sentir as palavras conduza uma nova forma de se posicionar diante delas. O principio do reomodo nao implica apenas ampliar as possibilidades significantes do conceito, descondicionando e criando palavras, mas também criar novas pos- sibilidades de reorganizagao gramatical. De outra forma, Ilya Prigogine e Isabelle Stengers® analisam 0 surgimento da epistemologia como a génese da relagao do homem com a natureza. Essa génese traz as perguntas que o homem se faz e que sao averiguadas em tentativas, repetigdes, erros e exclusdes até a formagao de principios tedricos, sempre ligados aos contextos culturais nos quais estao inseridos. A experimentagao exige uma in- teracao de hipdteses tedricas e da manipulagao pratica, o que implica verdadeiras estratégias. Um processo natural se estabelece como chave possivel duma hipé- tese tedrica; e é nessa qualidade que é entao preparado, purificado, antes de ser interrogado na linguagem dessa teoria. E assim temos. um empreendimento sistematico que volta a provocar a natureza, a obriga-la a dizer sem ambigiiidades se obedece ou nao a uma teoria’. Os autores analisam a passagem da ciéncia classica para a cién- cia moderna, mostrando os valores em crise que permitiram uma nova 6. PRIGOGINE, Ilya & STENGERS, Isabelle. A Nova Alianga. Brasilia: Edi- tora UNB,1997. 7. Idem, p. 3.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICAGAO 45 forma de interrogar a realidade e fazer ciéncia. Eles observam que as teorias mais fundamentais criadas a partir desse momento se de- finem como obras de seres inscritos no mundo que exploram, e nao mais ilusdes de conceitos extratemporais. Numa citagao indignada de Erwin Schrodinger os autores resumem esse tema. Existe uma tendéncia para esquecer que o conjunto da ciéncia esta ligado a cultura humana em geral, e que as descobertas cientificas, mesmo as que num dado momento parecem as mais avangadas, esotéricas e dificeis de compreender, sao despidas de significagao fora do seu contexto cultural. Uma ciéncia teérica que nao esteja consciente de que os conceitos que tem por pertinentes e impor- tantes sao, afinal, destinados a ser expressos em conceitos e pala- vras com um sentido para a comunidade culta e a se inscrever numa imagem geral do mundo, uma ciéncia tedrica, digo, onde isso fosse esquecido e onde os iniciados continuassem a resmungar em ter- mos compreendidos o melhor possivel por um pequeno grupo de parceiros, ficaré necessariamente divorciada do resto da humani- dade cultural... esta votada a atrofia e a ossificagao*. O apelo de Erwin Schrodinger é de uma compreensao do pro- duto intelectual dos homens como fruto dos tempos, das circuns- tancias que permitam as perguntas que instauram uma episteme sem o compromisso com uma verdade definitiva, mas com uma verdade possivel, e sempre possivel de ser questionada. Nesse sentido, nao apenas 0 conceito de comunicagao, mas qual- quer conceito enquanto objeto de uma epistemologia precisa ser apre- sentado, mesmo que ja haja consenso politico contextual quanto a sua normatizagao, a fim de que a idéia seja sempre reexplorada e 0 con- ceito alimente-se de sua fluidez para poder expressar mais do que um contextual bom senso permite num hiato de tempo da humanidade. Dessa maneira, reanalisar 0 conceito de comunicagao permite a observagao de sentidos que podem ir além da multivariedade con- temporanea de aplicagdes. Aplicagdes essas que estao fora de um bom senso contextual que as unifique, mas dentro do bom senso do 8. Idem, p. 11.46 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO espirito do tempo relativista de todos os valores e sentidos dos nos- sos dias. O objetivo deste texto é lancar possibilidades de interroga- ¢Ges ao fendmeno da comunicagao que explore novos aspectos de sua poténcia conceitual, ou seja, de sua descrigao do real. Novos as- pectos que permitam a emergéncia de um fazer cientifico que deli- neie seu campo e seu objeto (pesadas herangas das ciéncias exatas assumidas nas ciéncias humanas) sem cristalizar um conceito. Uma tarefa a ser tentada a partir do resgate de poténcias latentes na eti- mologia da palavra e que nos permite recuperar algo de constante que se expressa no conceito. AcomunicagGo como um encontro de fronteiras Ha uma linha sutil que atravessa as idéias de pertencimento a muitos ou a todos, comunhao, tornar comum e estar em relagéo. Uma linha que esta contida entre esses termos e traz uma nova idéia a esse conjunto a partir da observagao de um fato: para que algo seja comum a um grupo, para que haja comunhao, para tornar um pen- samento comum, os envolvidos inevitavelmente tém de estar em re- lacao. Estar em relagao implica a emergéncia de uma superficie co- mum de troca, ou uma zona de encontro de percep¢des dos emisso- res e receptores. Essa idéia de uma zona de encontro de percepgdes que emerge dos protoconceitos associados € 0 proprio sentido do macrocon- ceito comunicacao. Merleau-Ponty chama atengao para essa parti- cular caracteristica do ato de comunicar como sendo 0 encontro de fronteiras perceptivas®. Para ele, o homem como ser natural da-se conta de sua propria consciéncia, mas nao da existéncia de outra consciéncia. O outro ou outra consciéncia sé lhe é possivel acessar ou conceber por ser 0 homem também um ser cultural. Enacultu- ra que uma consciéncia individual percebe que esta inserida num mundo de objetos culturais que foram produzidos por outras cons- ciéncias. Cada objeto do qual um ser consciente se serve, como uma faca, uma escada, uma cadeira, traz a marca de uma fungao, ou a marca 9. MERLEAU-PONTY, Maurice. Phénoménologie de la Perception. Paris: Editions Gallimard, 1945, p. 407.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICAGAO, a7 de um motivo gerado por outra consciéncia talvez anterior, mas que se serve tanto quanto o ser consciente serve-se desse objeto. Esse motivo esté impregnado nos objetos culturais permitindo Aconsciéncia acessar a existéncia de outras consciéncias tao validas quanto ela. Para Merleau-Ponty, é esse o momento da manifestagao de uma consciéncia. Nao se trata da consciéncia de um puro ser para sie em-si, a ser decifrada em seus labirintos, mas de uma conscién- cia que se manifesta em percepgao. O ato de perceber um mundo. direciona a consciéncia, o que necessariamente faz emergir uma zona de fronteira, de troca de sentidos. A consciéncia s6 pode ser obser- vada no encontro perceptivo. Ao discutir a possibilidade do sentido, Gilles Deleuze afirma que este ocorre na fronteira’’. Nao se trata de buscar o sentido nas alturas dos metamundos, nem nas profundida- des labirinticas e interpretativas. O que importa a Deleuze é a super- ficie de contato. E af que a experiéncia torna-se comum. Para Merleau-Ponty, o sentimento de partilha é o que define a co- municagao, é construir com 0 outro um entendimento comum sobre algo. E o fendmeno perceptivo no qual duas consciéncias partilham na fronteira. O entendimento comum nao quer dizer concordancia total com os enunciados envolvidos na troca. O entendimento pode ser a conclusao das consciéncias que discordam dos enunciados uma da outra. A linguagem desponta, entao, como 0 objeto cultural de per- cepg¢ao do outro. A linguagem torna-se o plano no qual a zona de en- contro pode ser desenhada mediante o dialogo. Merleau-Ponty investe um pouco mais nas reflexGes sobre o dia- logo. Para o autor, na troca, ou na comunicag¢ao, entre mim e 0 outro, ambos sao arrastados para uma zona na qual perdem algo de si. Porque algo de mim passa a compor 0 outro, e eu passo a ser compos- to por algo do outro. Para Gilles Deleuze, isso é o que poderia definir uma desterritorializagao e reterritorializagao em seguida": o eue o outro como dois territérios que sao arrastados para redefinigdes territoriais a partir do encontro. David Bohm afirma” que o didlogo sé é possivel a partir de uma suspensao, por minima que seja, das estruturas tacitas de conceitos 10. DELEUZE, Gilles. A l6gica do sentido. Rio de Janeiro: Perspectiva. 11. Idem, Mil Platés — v. 4. Sao Paulo: Ed. 34, 1997, p. 26. 12. BOHM, David. Sobre el didlogo. Barcelona: Editorial Kairés, 1997.48 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO- e idéias que cada consciéncia traz. Com essa suspensao 0 plano cog- nitivo do outro pode se fazer presente no meu plano cognitivo, for- mando um terceiro campo cognitivo que nao estava presente antes do encontro. Para Merleau- Ponty, essa é outra caracteristica da co- municagao: ela nao existe antes das consciéncias envolvidas se en- contrarem. Ela é um terceiro plano cognitivo que emerge e que nao estava contida inicialmente nos planos de nenhuma das partes, mas se construiu pela desterritorializagao das partes que reterritorializam um terceiro cogito emergente. A comunicagao entao é uma virtuali- dade que se atualiza na relagao. Mas as consciéncias envolvidas nao se fundem numa sé. Elas continuam a ser individuais. A suspensao relativa dos conceitos ta- citos permite o encontro ou a formagao de um pensamento ou enten- dimento, mas cada uma carrega sua versao desse entendimento, des- sa coexisténcia. Ela nao se faz a mesma para todas as consciéncias envolvidas. O campo comum nao anula a experiéncia pessoal de ca- da consciéncia. Algo se torna comum, torna-se comungavel, perten- cente a todos que estao em relagao, mas cada consciéncia experi- menta, redefine-se e redefine a percep¢ao dessa coexisténcia. Me- diante sua fenomenologia da percepgao, na qual as consciéncias se encontram, Merleau-Ponty atinge 0 centro etimoldgico da palavra comunicagao. Para Ciro Marcondes Filho, uma epistemologia da comunicagao passa por tentar captar 0 que se da no processo do encontro de pla- nos cognitivos. Observar 0 movimento é o mais importante, nao a analise da estrutura congelada, normatizada. Os elementos emocio- nais volateis do proprio momento tém sua razao propria, participam da comunicagao, mas s6 podem ser percebidos enquanto transitam. Tentar acompanhar o que se passa num processo comunicativo a partir da observagao de sua natureza em fluxo é o que propée 0 Prin- cipio da Razao Durante, como uma possibilidade para uma episte- mologia da comunicagao™. A Razao Durante é esse terceiro cogito emergente no encontro, o que implica necessariamente uma metodologia de trabalho que nao opere apenas no registro descritivo desse encontro. Porque dessa maneira seria reportar-se a ele e, portanto, nao esta mais nele. A emer- 13. FILHO, Ciro Marcondes. In: www.filocom.usp.br.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS € © LUGAR DA COMUNICACAO a” géncia de uma razao durante no didlogo entre algumas pessoas nao pode ser capturada em sua totalidade, pois isso seria sua morte, mas algo pode ser observado por outras formas de registros do proces- so, como a grava¢ao sonora ou audiovisual. Ainda assim 0 instante da observagao do registro ja é outro encontro. Ha limitagdes natu- rais na tentativa de tornar o que se passa no presente um objeto de estudo, pois o presente nao pode ser estudado. No momento em que observamos o presente ele jd se tornou passado. Uma saida provocativa a essa conclusao seria a nao-distingao sujeito-objeto durante a pesquisa. Assumindo-se parte componente do tema observado, o pesquisador pode perceber o fendmeno atra- vés de si mesmo enquanto ele se passa. Mas naturalmente toda a analise serd a posteriori, o que limita as possibilidades de conclusao. Qualquer tentativa de reposicionar a relagao sujeito-objeto na pes- quisa de um fenémeno que se da no presente de um encontro de planos cognitivos ainda sera insuficiente. Mas a certeza da insufi- ciéncia da propria ciéncia na descrigado dos objetos investigados ja confirma um enorme avango na compreensao do fendmeno. Trata- se, como diz Marcondes Filho, nao de enquadrar a teoria sobre ob- jeto, o que obstinadamente o determinismo racionalista da ciéncia faz por séculos. Nao se trata de forgar o mecanismo uniforme expli- cativo sobre o tema pesquisado, mas fazer a teoria por suas limita- des ceder ao objeto, ou seja, construir com 0 objeto uma epistemolo- gia liquida. Odidlogo de planos cognitivos que fazem emergir um novo pla- no é uma forma de representar epistemologicamente um caminho para o tornar comum e 0 estar em relacao da etimologia da palavra comunicagao. Esse didlogo abre espago para avangar um pouco mais a compreensao que estamos construindo se tomarmos as partes en- volvidas no didlogo nao apenas como seres conscientes que se co- municam. Essa idéia pode ser estendida também para outros tipos de planos cognitivos que se encontram, como as disciplinas do sa- ber que aproximam suas fronteiras de pensamento e “promiscua- mente” trocam referéncias tedricas e metodolégicas sobre temas co- muns. A aproximagao de campos como a Antropologia, a Biologia, a Psicologia, a Linguistica, entre outros, que investigam fendmenos comunicativos amplia nao apenas os horizontes dessas disciplinas, como permite o surgimento de novas disciplinas, cégitos emergentes de um encontro.50 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAQ. As ciéncias cognitivas sao um bom exemplo disso. Disciplinas de campos distintos, como a Psicologia, a Filosofia, a Cibernética, a An- tropologia Estrutural, as Neurociéncias, a Pedagogia, entre outras, tra- zem 0 interesse comum de conhecer como se conhece, como se for- ma 0 conhecimento. Nas trocas constantes entre esses planos de sa- beres surgiu um feixe de disciplinas derivadas de cada uma de suas matrizes, que se relacionam permitindo a emergéncia do que se co- nhece hoje como as ciéncias cognitivas. A maneira como se formam as ciéncias cognitivas por meio de uma simbiose de objetivos e técnicas em suas praticas é um exem- plo do que os bidlogos Francisco Varela e Humberto Maturana cha- mam de acoplamento estrutural". O conceito de acoplamento es- trutural descreve a co-dependéncia simbiotica dos seres vivos numa teia biosustentavel. Dessa co-dependéncia surgem novos seres no fluxo de uma historia de transformag6es estruturais partilhadas com os membros de sua espécie, com os seres de outras espécies e com todo o ecossistema no qual esta inserido. Assim surgem também novas estruturas de conhecimento nas ciéncias cognitivas a partir de acoplamentos como a Cibernética com a Biologia, ou a Biologia com a Pedagogia, ou as Neurociéncias com a Filosofia, ou da Linguistica com a Cibernética gerando a Inteligén- cia Artificial. Disciplinas que se poem em relagao criando um campo comum, um territorio de comunhdo e troca que permitem a simbio- se de suas estruturas em novas organizagdes do conhecimento. Todos esses fendmenos complexos nascem e descrevem pro- cessos comunicativos. Vindo a palavra complexidade do latim com- plexus, que significa tecer em conjunto, a comunicagao acaba por ser o motor da organizagao complexa dos sistemas cognitivos orga- nicos e inorganicos. Um objeto e um campo possiveis O exercicio que direcionamos aqui é 0 de olhar mais uma vez para 0 mesmo tema que ja foi e ainda sera diversas vezes visitado e 14. MATURANA, Humberto & VARELA, Francisco. A arvore do conheci- mento. Campinas: Editorial Psy Il, 1995, p. 114.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO, 51 analisado ao longo do tempo, enquanto a comunica¢ao como pes- quisa ainda mantiver interesse para os seres humanos. Um exercicio que estabelece uma tentativa de reenfocar 0 objeto da comunicagao para distender a compreensao sobre ele. Um exercicio que nos per- mite mais do que a ilusdo de explicar 0 objeto, ele nos permite também compreender o percurso do nosso olhar. Passamos a conhecer mais sobre aquele que pergunta do que sobre o que é perguntado. Cada tempo um olhar sobre o mesmo objeto e assim compreendemos mais sobre 0 espirito do momento em que a pergunta é feita. Isso é o que Paul Ricoeur propde como uma hermenéutica da cultura”. Tentamos compreender um conceito num novo contexto com a ajuda da etimologia da palavra e de uma filosofia que se aproxima da investigagao a que se prope etimologicamente o conceito. Um exercicio que, ampliando sua investiga¢ao, nos permitiria compreen- der um pouco mais sobre nosso tempo e nés mesmos mediante uma hermenéutica da comunicagao. Poderiamos agora tentar localizar os objetos da comunicagao a partir do que ja percebemos sobre o tema. Pelo caminho em que localizamos uma proposigao filosofica em ressonancia com o que enxergamos da definigao etimolégica, torna-se objeto da comunica- ¢ao o fendmeno do encontro de planos cognitivos que pela percep- ¢ao do outro sao arrastados para uma fronteira criativa de novas formas cognitivas. Torna-se objeto da comunicagao essa interface e suas propriedades, o processo de estabelecimento do vinculo que permite o desenho de uma fronteira. Torna-se objeto da comunica- ¢4o o que emerge, 0 terceiro plano que nao havia antes do encontro de todas as partes dialogantes. Torna-se objeto da comunicagao o estar em relacao, ou melhor, a troca. Sendo assim, 0 campo da comunicagao pode ser tedérico, quan- do este analisa a ontologia desses encontros, quando se preocupa com 0s processos que tornam comum um pensamento a um grupo que troca informagées. O campo pode ser também empirico quan- doa mesma discussao ontoldgica considera a relagao com os supor- tes nos quais os planos cognitivos estao atrelados. E preciso apenas chamar atengao para o fato de que esses suportes nao sao necessa- riamente objetos de midia. 15. RICOEUR, Paul. Temps et Récit. Tomo I, Paris: Editions du Seuil, 1983, p. 122,52 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO Aqui surge a necessidade de se distinguir os objetos de midia de objetos da comunicagao. Os objetos de midia, como a televisao, 0 radio, ojornal, a Internet, necessariamente nao estabelecem um dia- logo com seus ptiblicos. Podem estar a servico desse didlogo, mas em si mesmos nao trazem interfaces explicitas e inerentes com os planos cognitivos a que se anunciam conduzindo a uma troca que faga emergir um pensamento comum. A disponibilizagao de infor- magoes num site, ou a emissao no ar da freqiiéncia de onda de uma radio ou de uma emissora de TV nao cria por si s6 um meio de co- municacao. E explicito o vetor da transmissao da informagao, mas é discutivel as manifestagdes de um didlogo entre os planos cognitivos em agao. Se tomarmos a comunicagaéo como um fendmeno de per- cepgao e troca, nao podemos reduzi-la a transmissao de informagao, ou seja, os meios nao séo necessariamente de comunicagao. Os meios podem veicular informacao e a veiculagao da informagao é uma das etapas do estabelecimento da comunicagao, mas a veiculagao por si nao indica um fendmeno comunicacional se temos por comuni- cagao os encontros perceptivos entre agentes e os produtos cogni- tivos que emergem. O que temos aqui é um deslocamento do objeto e do campo da comunicagdo. Ao mesmo tempo em que ha uma ampliagao do que pode ser considerado objeto dessa hermenéutica, ha, por outro lado e por conseqiiéncia, a delimitagao de um campo. Ou seja, 0 objeto da comunicagao se desloca para além dos objetos de midia, englo- bando, por exemplo, as manifestagées artisticas midiatizadas ou nao. Esse objeto pode manifestar-se nos estudos das redes neurais e dos sistemas regulares que emergem por agao de atratores. Esse objeto pode estar nos estudos das linguagens que atravessam e marcam o corpo com o pertencimento das tribos, passando pelo teatro, pela moda, pela engenharia genética. Esse objeto pode estar no reflexo antropoldgico, socioldgico, psicolégico do encontro desses agentes cognitivos que se expressam por meio dos veiculos de informagao, dos discursos politicos, dos movimentos das massas. Entretanto, esse objeto pode nao esta onde classicamente € visto, localizado e enges- sado: nos mass media. O que esta em jogo na localizagao desse objeto nao é o suporte no qual ele se expressa, mas qual a comunhdo que ele permite a par- tir da informagao posta na relagao. Qual o sentido de troca que seAS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E O LUGAR DA COMUNICACAO, 53 estabelece a partir da percepcao reciproca do outro? Se ha formas de se localizar esse dialogo dos meios com suas massas que passa a compor de forma mais clara 0 universo dos que percorrem as fron- teiras, teremos um objeto de comunicagao, mas um veiculo de infor- magao nao traz a priori a condigao de ser um meio de comunicagao. Em outras palavras, temos aqui a ampliagao do objeto e a delimi- tacdo de um campo por meio de uma epistemologia da comunicagao, que parte de uma fenomenologia sugerida pela prépria etimologia da palavra. O objeto e o campo da comunicagao redimensionados abrem possibilidades metodolégicas. Como é 0 caso do Principio da Razao Durante que localiza no instante do encontro um veiculo de passa- gem de tudo que nao pode ser capturado pela andlise porque nao esta guardado numa estrutura. Elementos observaveis apenas du- rante o encontro, no movimento e que por esse motivo teriam uma razao propria. Todas as implicagdes que surgem do redimensio- namento do objeto e do campo da comunicagao criam novas pers- pectivas metodoldgicas, como também a revisao da utilizagao das antigas ferramentas. Nao se trata de fundar um “pés-qualquer-coi- sa” como se fosse possivel desfazer-se de todas as investidas meto- doldégicas que os pesquisadores da comunicagao jé desenvolveram. Se a comunicagao é o motor da organizagéo complexa dos sistemas cognitivos organicos e inorganicos, ela soma experiéncias e redi- mensiona-as no contexto epistemoldgico que indaga a realidade. Isso implica cria¢ao constante de novos métodos, reconhecimento expli- cito dos limites naturais de cada método e revisdo das ferramentas ja utilizadas que nos permitem chegar até aqui levantando questdes sobre formas de re-utiliz4-las. A redimensao do campo da comunicagao permite uma varre- dura mais ampla do espectro tematico da cognigao do homem sem perder de vista um critério que defina e pontue seu objeto. O objeto delimitado pelo estabelecimento de relagdes de trocas que geram um plano de entendimento, ou um plano comum as partes, ganha uma zona de fluidez transdisciplinar. Ou seja, o campo se assume transdisciplinar a partir da zona de contato das disciplinas. Uma zona fluida, mas com um campo claro de indagagao da realidade. Um ob- jeto visivel que emerge pontualmente do fluxo invisivel do contra- bando de cognigées, estabelecendo uma tensao que ja faz eco nas54 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO, ciéncias com a crise da modernidade. Essa tensao nos tira da zona segura de explicagaéo do mundo das metanarrativas e nos poem na zona de risco da vida que sempre esteve entre o cristal e a fumaca™®. Bibliografia ALMEIDA, Rotilde Caciano. Diciondrio Etimolégico da Lingua Portuguesa. Brasilia: UNB, 1980. ATLAN, Henri. Entre o cristal e a fumaga. Rio de janeiro: Jorge Zahar Edi- tora, 1992. BOHM, David. Sobre el Didlogo. Barcelona: Editorial Kairds, 1997. . A totalidade e a ordem implicada ~ uma nova percepgao da realidade. ‘Sao Paulo: Cultrix, 1980. CUNHA, Antonio Geraldo da. Diciondrio Etimolégico Nova Fronteira da Lin- gua Portuguesa. Rio de Janeiro: Nova Fronteira, 1999. DELEUZE, Gilles. A légica do sentido. Rio de Janeiro: Perspectiva. DELEUZE, Gilles. Mil platés - v. 4. Sao Paulo: Ed. 34, 1997. FILHO, Ciro Marcondes. In: www.filocom.usp.br. MATURANA, Humberto & VARELA, Francisco. A arvore do conhecimento. Campinas: Editorial Psy II, 1995. MERLEAU-PONTY, Maurice. Phénoménologie de la Perception. Paris: Editions Gallimard, 1945. MORIN, Edgar. Ciéncia com consciéncia. Rio de Janeiro: Bertrand Brasil, 1996. PRIGOGINE, Ilya & STENGERS, Isabelle. A nova alianga. Brasilia: Editora UNB, 1997. RICOEUR, Paul. Temps et Récit. Tomo I, Paris: Editions du Seuil, 1983. 16. ATLAN, Henri. Entre o cristal e a fumaga. Rio de janeiro: Jorge Zahar Editora, 1992.Epistemologla da Comunicac¢dao: além do sujeito e aquém do objeto LUCRECIA D’ALESSIO FERRARA Professora do Programa de Pés-Graduacao em Comunicagao. e Linguagens da Universidade Tuiuti do Parana “Quando o pensamento, interpelado por um objeto, segue-lhe os passos, pode acontecer- Ihe que se transforme o caminho.” (Heidegger, 1973) 1. Por onde comegar? Eapergunta de todos os pesquisadores quando iniciam uma pes- quisa ou um ensaio. £ a pergunta com a qual Roland Barthes inicia um artigo famoso publicado no numero 1 da revista Poétique (1970). E a dificuldade que exaspera pela sua simplicidade e pela duvida que assinala 0 inicio de todas as coisas. Ea pergunta que me fago ao iniciar este trabalho. E a primeira resposta vem rapida e certeira por- que anuncia um caminho definido e sem escolhos: a epistemologia de uma ciéncia apresenta os passos seguros que levam a caracteri- Zar nao so um objeto cientifico, mas sobretudo os elementos que per- mitem reconhecé-lo. Dicionarizada a palavra epistemologia designa essencialmente “o estudo critico dos principios, hipdteses e resultados das diversas ciéncias, destinados a determinar sua origem ldgica (nado psicolé- gica), seu valor e sua dimensao objetiva” (Lalande, 1960: 293). Embo- ra se saliente a dimensao légica do termo, parece necessario, a fim de dirimir duvidas ou equivocos iniciais que atrapalhariam a refle- xao, distinguir epistemologia, metodologia e teoria do conhecimento.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.58 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO, cativa parte de um pressuposto de unificagao imprescindivel a uma identidade, ou seja, operando com as causas Ou com as conseqiién- cias do objeto, estamos sempre explicando para definir uma identi- dade que se confunde com o dominio ou com 0 objeto de uma ciéncia. Portanto, 0 estatuto cientifico da comunicagao exigiria uma epistemo- logia que nos levasse a explicar a comunicagao a partir de paradig- mas estabelecidos. O dominio, o estudo, o ensino, a definigao desses paradigmas seriam os elementos identificadores de uma ciéncia da comunicagao e, mais do que isso, definidores de uma comunidade cientifica que, na conviccao dos seus paradigmas, estabeleceria com- peténcias, adequagoes, legitimidade e, sobretudo, avaliagées a justi- ficar uma estranha pratica que se consome em citagGes de produgdes que nos precedem ou que nos sucedem estabelecendo a competéncia reconhecida de uma ciéncia. Quando e onde se disse que a legitimidade do conhecimento se deve representar pelo reconhecimento da identidade ou da funcio- nalidade do objeto? Eapergunta que desde a segunda metade do século XIX, e sobre- tudo nos nossos dias, vem sendo feita sem cessar. Este é 0 sentido da emergéncia das anomalias de Thomas Kuhn (1978), da teoria critica de Horkheimer (1976), do positivismo e do tecnicismo como “man- chas turvas da racionalidade” de Habermas (1973), da ciéncia como agao de Bruno Latour (1989), do conhecimento do conhecimento de Edgard Morin (1999), das metaforas do organismo de Judith Schlan- ger (1995), do pensamento fragil de Gianni Vattimo (1999), da “diffé- rance” de Jacques Derrida (1967), da enciclopédia como labirinto de Umberto Eco (1985), da nogao de acontecimento para Isabelle Stengers (1995), da nova racionalidade para Ilya Prigogine (1996), para citar al- guns nomes e de modo nenhum esgotar a lista daqueles que fazem eco a pergunta anterior. Secundando a primeira pergunta, surgem varias outras. Seria possivel distinguir ciéncia e produgao cientifica? Seria possivel pen- sar em uma epistemologia que, afastando-se da abstrag4o ou do mo- delo cientifico, se aproximasse das caracteristicas do objeto? Seria possivel ultrapassar a epistemologia enquanto acumulagao teérica de afirmagoes, para aderir a uma epistemologia sutil que se nutrisse mais de perguntas do que de respostas? Seria possivel comegar per- guntando por onde comegar?a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.62 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO os efeitos do seu cédigo, entendendo-se neles fung6es persuasivas, sensiveis, ideolégicas ou pragmaticas. Descreve-se, por exemplo, a natureza sintatica da imagem televisiva para chegar aos efeitos pro- pagadores dessa imagem que invade o cotidiano, contamina com- portamentos e a vida privada até atingir o planeta coma uma epi- demia que nos imerge numa civilizagao da imagem. Das caracteris- ticas tecnolégicas de uma maquina que produz imagens, chega-se a um sistema que tem na imagem seu alicerce de sedugao e contagio ideolégico e manipulador. Dos meios e canais comunicativos como temas de investigagao chega-se, no maximo, a descrigao, mais ou menos redundante, conforme a sagacidade retorica da exposigao. Estamos longe de uma epistemologia da comunicagao produtora de conhecimento, porque resistimos a interrogar praticas e atores que permitem a comunicagao enquanto area de conhecimento comple- xO, Ou Seja, que se interroga ao interrogar, que questiona as media- ges que caracterizam a complexidade das relagdes comunicativas ese acham escondidas e alienam o emissor e 0 receptor da historia e da critica. Nessa interrogagao, uma epistemologia da comunicagao estaria sempre em processo e, por definicao, rejeitaria definir-se. Nas suas atualizagdes fenomenoldgicas, a comunicagao se faz viva, multipla, mutavel e resistente as descrigdes e as explicagdes, porque nao tem paradigmas de exceléncia e de verdade suficientes para o estabelecimento daquele juizo explicativo. Ao contrario, ade- re a interroga¢gao da mudanga para saber como se atualizam as me- diagGes e como se fazem comunicativas as experiéncias entre os ho- mens, entre eles e as capacidades tecnolégicas, entre elas e a comu- nicagao no planeta. Constréi-se nao uma epistemologia da comuni- cagao, mas uma possivel e mutante epistemologia das relagdes co- municativas entre homens, entre maquinas e homens, entre cultu- ras e sociedades em processos de mediag¢ao e de troca. Substitui-se a comunicagao pela relagao comunicativa, a explicagao pela inter- pretagao, a descri¢ao pela andlise, o tema pela pergunta, a episte- mologia modelar pela sagacidade do olhar cientifico produtor de co- nhecimento como coisa viva. Nessa dinamica onde esta 0 vetor capaz de definir, para a comu- nicagao, uma rea cientifica? Para responder a essa questao é necessdrio superar qualquer pretensao definidora de propriedade, dominio ou poder cientificos, ao contrario, é indispensavel ousar perguntar o que transforma umaa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.66 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO- interfaces entre linguagens que se traduzem em didlogo. E essa di- namica que confere a relagao comunicativa outro componente vital que se alia aos anteriores: trata-se da relacao dialégica entre emis- sor e receptor, entre signos, significados, cddigos, tecnologias em que qualquer midia nao é sendo mistura de outras anteriores ou con- comitantes. Para trabalhar cientificamente com relagdes comunica- tivas é indispensavel operar epistemologicamente entre as midias, perceber a mistura que emerge da relagao entre elas, mas que se distingue das respectivas dimens6es codificadas originais. Produz- se uma midia extensiva mais complexa e imprevista, porém indis- pensavel ao aparecimento daquele ambiente adequado a relagao comunicativa dos nossos dias. Esse sistema hibrido foi batizado como infosemiose. (Machado, 2002: 211) ou bios-mediatico (Sodré, 2001 apud Machado, 2002). Nessa dinamica, o que interessa nao é tanto a variacao semistica, embora sedutora, dos sistemas signos, mas perceber que a comuni- cacao é varidvel e multipla e isso pode nao ser a epistemologia cele- brada, mas 4 Unica que nos permite produzir conhecimento que, em conex6es, transforma o acordo de opinides da comunidade cientifi- ca em cumplicidade de pares e disciplinas em didlogo para o qual estado convocados todos os autores e todas as teorias da area cienti- fica ou de fora dela, desde que sejam passiveis de agug¢ar a capaci- dade interpretativa do pesquisador. Mais do que rotagao transdisciplinar promove-se a circularidade construtiva de um pensamento coletivo franqueado a agao cola- borativa entre todos os avangos cientificos. Para essa epistemologia de um acordo de opinides em didlogo, pertencer a uma comunidade cientifica requer um compromisso ético que vai muito além do exer- cicio judicativo, porque é capaz de reconhecer, na colaboragao cog- nitiva, a possibilidade de criar uma epistemologia que supere o saber como poder. Temos um compromisso ético entre pares que escre- vem a historia de uma ciéncia de complementaridades entre o pre- sente e o passado, entre 0 sujeito e o objeto, entre a histdria e a cultura, entre a teoria da comunicacao e a concreta relagao comunicativa. E essa epistemologia que a argucia de Heidegger (1973) observa: “Mais de 2.000 anos precisou 0 pensamento para entender verdadeiramente uma relagao tao simples como a mediagao no seio da identidade... Mas somente se nos voltarmos pensando para 0 ja pensado, seremos convocados para o que ainda esta para ser pensado”.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICAGAQ_ n epistemoldgica pressupoe, portanto, aquilo que Quine chamou de engajamento ontolégico, um certo posicionamento em relagao a al- guns problemas filos6ficos de fundo, justamente como 0 real e a ob- jetividade. A discussao epistemoldgica comega a partir da problema- tizagao dessa investigagao objetiva do real, mas nao pode recuar nes- tes pressupostos sem colocar em risco a prépria condi¢ao de possi- bilidade de um saber de tipo cientifico, ou sem que haja uma dissolu- ¢ao da questao epistemoldgica no universo mais vasto da filosofia. E é praticamente isso que Popper, ao contrario de discutir suas 27 te- ses, acaba tendo de lembrar a seu interlocutor. Longe de avangar nos problemas, ele se vé obrigado a recuar até as condigdes de possibili- dade de um debate epistemoldgico, as condigdes em que ha sentido falar de epistemologia. Nosso objetivo aqui é mostrar como, numa larga medida, a pro- dugao epistemolégica em nossa area se encontra em situagao ana- loga. Sem se posicionar em relagao a este engajamento, todo debate epistemoldgico se vé privado de sentido e, de antemao, condenado a Tecuar a seus pressupostos elementares, sem realmente poder avan- car em nosso verdadeiro objetivo: a fundamentacao de um saber co- municacional. Quais seriam as questoes tipicas que caracterizam o trabalho epis- temoldgico e como elas seriam aplicadas ao saber comunicacional? Acredito que essas duas quest6es podem nos ajudar a enfrentar 0 grande desafio do tema desta mesa de debate: “As Epistemologias Contemporaneas e o Lugar da Comunicagao”, de forma mais apro- priada as dimens6es e aos propoésitos deste encontro. Primeiramente, tentaremos mostrar que a epistemologia se ca- racteriza por certas quest6es especificas e nao por toda e qualquer relagao ao conhecimento. Nesse sentido recordaremos algumas dis- tingdes importantes entre a epistemologia e outras disciplinas que se ocupam da questéo do conhecimento, tais como a filosofia das ciéncias, a gnosiologia, a histéria, a psicologia e a sociologia das cién- cias. A seguir, na segunda parte desta intervengao passaremos em revista alguns pontos significativos da producao epistemoldgica do saber comunicacional. Aprincipio, o tema desta mesa sugere de forma muito clara uma tarefa aparentemente bem definida: levantar as principais correntes do pensamento epistemoldgico atual para ai situar os trabalhos dea You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E O LUGAR DA COMUNICACAO, 75 epistemologico pode variar segundo os pontos de vista, mas tam- bém que ela pode ser uma tarefa muito mais dificil do que se poderia imaginar a primeira vista. Mesmo porque, como observa Granger, uma historia da epistemologia se confunde com a historia da filosofia ecom 0 estado em que se encontra a ciéncia. Além disso, o contraste desses dois autores permite as diferengas de abordagem do proble- ma do conhecimento, que nao podem ser desconsideradas. Diferen- ¢as muito mais amplas que simplesmente aquelas que encontramos entre as correntes no interior de uma mesma disciplina. E é sobre esse ponto que gostariamos de voltar agora nossa atengao. Aepistemologia diante das outras abordagens do problema do conhecimento Ora, se a epistemologia nao é unica, ela tampouco é a tinica manei- ra de abordar o problema do conhecimento. A propria diferenga de critérios que aparece na compara¢ao acima jd é um reflexo dessa cons- tatagao. Dai a necessidade, se quisermos realmente entrar na discus- sao epistemoldgica, de termos em conta certas distingGes entre: — a gnosiologia ou a teoria do conhecimento; ~ a filosofia das ciéncias. E de outro lado entre: ~ a psicologia das ciéncias; — a historia das ciéncias; ~ a sociologia da ciéncia Para além das convengées terminolégicas, essa variedade se apdia em uma base muito concreta, que é a propria diversidade de abordagens possiveis do problema do conhecimento. Sao orienta- des muito diversas, que apontam para problemas e campos de in- vestigacao bastante especificos. Mas se cada uma dessas discipli- nas indica uma relagdo particular com o estudo do conhecimento, qual seria a diferenga entre a epistemologia e as outras abordagens? Como situa-la nesses dois blocos? Uma observagao inicial é que o primeiro bloco situa o problema no interior da filosofia, enquanto o segundo diz respeito a produgaoa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAQ, 79 doldgicos e légicos da ciéncia; 3) a classificagao e a relagao entre as diversas disciplinas do saber de tipo cientifico; 4) a problematizagao da correspondéncia das verdades cientificas com o mundo, o proble- ma de sua eficacia como adequagao a natureza das coisas; 5) a ana- lise da evolugao do conhecimento cientifico (progresso?), a busca de um principio teleologico para a historia da ciéncia; 6) problemas éti- cos surgidos da produgao e da aplicagao do conhecimento cientifico em tecnologias de alto poder de intervengao social ou que se cho- cam com principios morais largamente difundidos (bomba atémica clonagem de seres humanos...); 7) problemas de definigao, possibi- lidade, origem e natureza do conhecimento humano em geral. Essas sao algumas das questGes que a ciéncia apresenta ao pen- samento filosofico e que nao podem ser resolvidas no restrito hori- zonte do rigor metodoldgico, ao qual se encontra submetido o traba- lho cientifico. Sao questées filosdficas que devem ser resolvidas no ambito da filosofia, pelos métodos e recursos que lhe sao préprios. Outra alternativa é reservar o termo filosofia das ciéncias so- mente a alguns desses problemas. Assim, tomando-se trés grandes rubricas, filosofia das ciéncias, gnosiologia (teoria do conhecimen- to) e epistemologia, uma primeira repartigaéo que pode ser feita é aquela que op6e gnosiologia as outras duas, voltadas exclusivamen- te para o conhecimento cientifico. E depois, a distincao entre filoso- fia das ciéncias, que tomaria como objeto os problemas voltados aos aspectos gerais da metafisica da verdade cientifica, bem como aque- les decorrentes das aplicagées e usos dos produtos do conhecimento cientifico, e, de outra parte, a epistemologia, que se voltaria apenas para os aspectos internos do conhecimento cientifico (fundamen- tagao, metodologia...), ou seja, para as caracteristicas que garantem sua “cientificidade”. Dessa maneira, os conjuntos de problemas indicados acima po- deriam ser aproximadamente repartidos da seguinte forma: 0 cam- po da epistemologia poderia ser definido pelos problemas contidos em 1, 2 e 3; ja a filosofia das ciéncias (sentido estrito) compreende problemas como aqueles contidos nos conjuntos 4, 5 e 6; e, por fim, a gnosiologia se volta para um outro tipo de problema, como aque- les contidos em 7. Grosso modo, temos ai uma delimitagao do sentido estrito da filosofia das ciéncias e, por conseguinte, das outras disciplinas que the sao correlatas.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAQ, 83 Mas a essa dificuldade acrescentaremos outra, desta vez do lado da Comunicagao: é incontestavel a pouca sensibilidade dessa area para os problemas da fundamentagao dos conhecimentos ai produ- zidos. E forte o sentimento de que a Comunicagao deva ser conside- rada apenas como uma disciplina sui-generis; e mesmo quando se admite considerd-la como uma disciplina cientifica, persiste ainda o sentimento de que deva ser considerada apenas como uma ciéncia aplicada, no sentido em que seu saber e sua cientificidade sao deri- vados de outros saberes. Convicgdes que convergem e se comple- tam com a afirmagao de que a Comunicagao é apenas um campo de estudo e nao exatamente um saber aut6nomo, O que reforga a im- pressao de que seria pouco proveitoso procurar nas correntes da epistemologia os subsidios para alimentar a reflexao de uma episte- mologia da Comunicagao*. Mas nao ha nada de decisivo nesses obstaculos: nema epistemo- logia das ciéncias humanas se encontra desprovida de trabalhos de qualidade, nem ha verdadeiramente necessidade de se opor a visao da Comunicagao como um campo aquela de como ciéncia. Ou seja, uma epistemologia da Comunicagao pode se fundar no mesmo solo das outras ciéncias sociais e trabalhar com uma perspectiva indepen- dente daquela que entende a Comunicagao enquanto campo (tal como a sociologia nao se anula pela existéncia das ciéncias sociais). O pro- blema maior ainda nos parece provir da comunidade dos professo- res, dos pesquisadores e mesmo dos profissionais dessa area que se mostram muito pouco sensiveis as conseqiiéncias de um baixo inves- timento na fundamentagao do saber comunicacional que justifica suas praticas. Um bom sinal dessa falta de consciéncia é a escassez de tra- balhos e a propria maneira como abordam o tema da epistemologia. 2. O trabalho epistemoldgico desenvolvido na Grea de comunicagao Mas como explicar esse estado de desenvolvimento do saber comunicacional? Primeiramente, é facil constatar que ha uma gran- 8. Enesse sentido que, parece-me, deve ser interpretada a afirmagao do prof. lanni, neste mesmo seminario, de que nao existe uma epistemologia daa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.AS EPISTEMOLOGIAS CONTEMPORANEAS E © LUGAR DA COMUNICACAO, 9 si mesmos. Como se 0 objeto técnico fosse nele mesmo um artefato cujo sentido e finalidade estivessem intrinsecamente ligados a cién- cia (0 “cientificismo primordial do cinema”): (...)a miniaturizacgao, aperfeigoamento e barateamento dos instru- mentos de registro audiovisual estao transformando cada ser hu- mano em um “antropdélogo-cineasta”. Dentre outras conseqiiéncias isso levou ao aparecimento de um novo tipo de descrigao das ma- nifestagdes humanas, a auto-etnografia (p. 114). Se admitirmos esse raciocinio, deveriamos estender 0 mesmo a outros meios de comunicac4o. Por exemplo, o uso que a maior parte das pessoas faz do computador (escrever textos, correio eletrénico, Internet, jogos...) deveria fazer delas “especialistas em ciéncias da informacao” (com ou sem aspas, pouco importa). E facil perceber que 0 uso da caneta e o dominio do alfabeto nao nos torna “shakes- peares” em potencial; nem o uso de termémetros, velocimetros, baré- metros, relogios, balangas... tornam qualquer um de nds especialis- ta em Fisica (autofisico?), Estranha versao do determinismo tecno- légico, em que a banalizagao de uma técnica pode substituir o apren- dizado, a teoria, a ciéncia e toda a esfera académica. Mas a questao principal nao é essa e sim por que deveriamos discutir, de forma isolada, os problemas de uma outra disciplina? Ou deveriamos tomar essa disciplina simplesmente como sindnimo de Comunicagao? O autor nao fornece nenhuma explicagao. Entao, sem se situar em relagao ao plano epistemoldgico, as andlises dos multimeios af desenvolvidas se dao ora como analise gnosiolégica, voltadas para a discussao da objetividade ou da simulagdo tecnolé- gica da realidade; ora como uma discussao do estatuto desses mes- mos meios, repartidos entre a criagao artistica e seu emprego na an- tropologia visual. Sem precisar insistir mais nos seus detalhes, bas- ta-nos constatar que aqui também, mais uma vez, a epistemologia se encontra ausente das discussdes ou a Comunicagao ausente das pou- cas discussGes epistemoldgicas. Considera¢Ges finais Gostaria de encerrar com algumas consideragées sobre o de- senvolvimento do trabalho epistemoldgico em nossa area. E pensoa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.Midiologia brasileira: © resgate das fontes paradigmaticas' JOSE MARQUES DE MELO* Professor do Programa de Pés-Graduagao em Comunicacao da UMESP 1. Conhecimento midiolégico Qualquer campo do conhecimento humano surge como conse- qléncia das demandas coletivas. Trata-se da resultante de um pro- cesso destinado a compreender e controlar os fenédmenos sociais emergentes. Comeca na base da sociedade, robustecido pelo sen- so comum. Amplia-se e desenvolve-se no interior das organizagoes profissionais, culminando com sua legitimag¢ao cognitiva por parte da academia. Oestoque de saber acumulado pela humanidade provém, assim, da confluéncia de duas fontes: 1. As idéias aqui esbogadas destinaram-se originalmente aos participan- tes do Colquio Brasil-Franga de Ciéncias da Comunicagao, realizado na Uni- versidade de Poitiers, Franga, em janeiro de 2001. Elas foram expostas também em outros féruns da comunidade académica brasileira. A realizagao deste III Seminario Interprogramas de P6és-Graduagao constitui uma frutifera oportu- nidade para debaté-las com os representantes do segmento mais avangado da pesquisa em comunicagdo atuante em nosso pais. 2. Doutor em Ciéncias da Comunicagao pela Escola de Comunicagées e Artes da Universidade de Sao Paulo, instituigaéo onde desenvolveu sua carreira académica (1967-1993) e na qual permanece colaborando voluntariamente como professor emérito. Coordenou o Programa de Pés-Graduagao em Comunicagao Social da Universidade Metodista de Sao Paulo durante o periodo de 1994-2001, cabendo-lhe atualmente a regéncia da Catedra UNESCO de Comunicagao.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.122 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICAGAO atribuem as ciéncias da informagao a proeminéncia da técnica e a co- municagao 0 carater social de suas agGes. Propomos, como chave deste processo, trés dimens6es da in- terface comunica¢ao/informagao que ratificam a autonomia de cada uma e, ao mesmo tempo, exigem o compartilhamento multidiscipli- nar: dependéncia, mediagao e intervengao. O debate sobre Comunicag4o e Informagao exerce uma tensao criativa e impulsionadora, alimentando a questao epistemoldgica. Este texto tem por objetivo compartilhar essa discusséo numa perspec- tiva hermenéutica que permite relacionar a matéria-prima da Infor- magao e da Comunicacao ao sentido gerado, por meio dos diferentes modos de registrar (informagao) e interpretar (comunicagao) a rea- lidade e suas representagoes. A discussao epistemolégica sobre a proximidade e o distancia- mento entre Informagao e Comunicag¢éo esta relacionada a ques- tes de ordem historica, técnica e cientifica engendradas pelas duas areas de conhecimento que apontam sempre para uma ldégica de aproximagao, tendo em vista suas conseqiiéncias e apropriagoes. Este esforgo reside na evidéncia de que Informagao e Comunicagao in- terferem diretamente no modo de entender, registrar e intervir no mundo, num processo continuo e indispensavel para qualquer area do conhecimento e atividade humana. Como ta! determinam 0 aces- so as coisas do mundo, assim como indicam como a ele pertencer, num processo permanente de tornar visiveis os acontecimentos, as coisas e os sujeitos. Aparentemente, Comunicagao e Informacao poderiam ser en- tendidas quase como sinénimos, devido a sua interdependéncia, pois a informagao s6 existe quando é comunicada e a comunicagao nao existe sem a informacao. 2. As questées conceituais Nos conceitos sobre comunicagao esta implicita a idéia de in- ter-relagao, assim como o contetido da informagao “é o rastro que uma consciéncia deixa sobre um suporte material de modo que ou- tra consciéncia pode resgatar, recuperar, entao simular, o estado em que se encontrava a primeira consciéncia”, afirma Martino (2001, p. 17). O autor complementa: “A informagao é uma comunicagao que pode ser ativada a qualquer momento” (idem).a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.134 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO. CASTELLS, Manuel. A sociedade em rede (A era da informagao: economia, sociedade e cultura). Sao Paulo, Paz e Terra, 2000. FONSECA, Maria Odila. Ciéncia da Informagao: denominagao de curso e diretrizes curriculares. Transinformagao, Campinas, v. 14, n. 1, jan./jun. 2002, pp. 101-104. LE COADIC, Yves-Frangois. A ciéncia da informagao. Brasilia, Briquet de Lemos, 1996. LIMA, Venicio A. Midia, teoria e politica. Sao Paulo, Fundagao Perseu Abra- mo, 2001. MARTINO, Luiz C. De qual comunicagao estamos falando? In: HOHLFELDT, A. MARTINO, Luiz C.; FRANGA, Vera (orgs.), Teorias da comunicagao: conceitos, escolas e tendéncias. Petropolis, Vozes, 2001. MATTELART, A.; MATTELART, M. A histéria das teorias da comunicagdo. Sao Paulo, Loyola, 1999. TAVARES, Olga. Comunicagio e informagao: caminhos de conexao. in: AQUINO, Miriam de Albuquerque (org.), O Campo da Ciéncia da Infor- magao; génese, conexdes e especificidades. Joao Pessoa, UFPB, 2002, pp. 137-151. THOMPSON, John B. Ideologia e cultura moderna: teoria social critica dos meios de comunicagao de massa. Petrépolis, Vozes, 2000. UFRGS, PPGCOM. Projeto para programa de doutorado. Porto Alegre, 2000. WOLE M. Teorias da comunicagao. Lisboa, Editorial Presenga, 1987.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.138 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO. Esse item “dispersao tematica”, que deveria ser somente um dos mo- mentos da avaliagao, torna-se um parti pris navalhante que cancela a validade das pesquisas e das produgées cientificas que nao este- jam adequadas a tal estratégia de veridiccao ligada a esse novo regi- me de discurso avaliador que busca hegemonia hoje no campo. A estrutura do campo cientifico da comunicagao se define, portanto, a partir das relagdes de forga entre os protagonistas em luta, em nome da “consolidagao” unilateral do campo e do aumento da “competi- tividade” no sistema, relagGes essas que se materializam nas insti- tuigdes como a Compés, a Intercom, os proprios PPGs e as agéncias de fomento. Assim, gostaria de salientar que o campo nao se define somente por seus “objetos” e “métodos”. O que isso significa? Que os objetos nao sao construidos sem 0 langamento das redes conceituais das teo- rias. Os objetos de pesquisa advém, nao estao dados no a priori da pesquisa. Um pesquisador, ao comegar sua pesquisa, tem um pro- blema, sua questdo de pesquisa, e passa a investigar seu corpus a partir do método ou conjunto de métodos de teorias especificas. Com isso ele construira seu objeto, que é de fato resultado de trabalho de pesquisa, em que se cria uma interpretacao. O objeto final da pesqui- sa é, dessa forma, um objeto semiotizado, semantizado, interpretado e colocado a disposigao dos futuros pesquisadores. E preciso lem- brar que 0 momento inicial de cada pesquisa é justamente a verifica- ¢4o, pelo pesquisador, do estado da arte, no campo da comunicagao, das investigagGes ligadas ao tema e ao objeto especificos de seu inte- resse. Em outras palavras, cada pesquisa deve construir-se sempre em relagao aquilo que nesse subcampo e nessa tematica foi feito até aquele momento, caracterizando-se como uma inser¢ao coletiva (nao imposta pela Coordenagao de area). Como um campo se constitui, buscando autonomia em relagao ao campo do qual se separou? Sera que ele surge primeiro ja cons- tituido, para depois escolher seus objetos? Cabe estar atento para nao considerar 0 campo algo redondo, cujas fronteiras definidas al- bergam a seguranga de um estar-em-seguranga epistemolégica. E claro, conforme vimos no Documento de Area, que a cada momento ha uma luta politica para definir quais sao os objetos e temas perti- nentes ao campo. No presente, a corrente hegeménica defende que esses objetos estao nas midias (ou pelo menos naquilo que essa cor- rente entende por “midia”).a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.142 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO mes em termos de suas estratégias comunicativas, ou seja, do modo pelo qual os filmes constroem do ponto de vista narrativo e discursivo a droga, 0 usuario, a luta contra as drogas e a prevengao. Do ponto de vista da construcao narrativa, Leite chegou a trés grupos: a) Num primeiro grupo, a droga é construida como mais com- petente que o usuario. Vinte e um dos vinte e cinco filmes estao nesta categoria. b) Num segundo grupo, a pessoa é mostrada como sendo mais competente que a droga, ou seja, ela reconhece que a droga é perigosa e evita consumi-la. Neste grupo ha trés filmes. c) Noterceiro grupo é construido o dificil embate do usuario em relagao a droga. Aqui ha um filme. No nivel discursivo examinou-se a construgdo de temas e figu- ras relacionados a droga, ou seja, como a droga é figurativizada, como ela aparece nos filmes e como é metaforizada a partir de certos te- mas. Neste caso ha dois grupos: a) A figurativizacdo da droga é terrificante: a droga € apresenta- da como uma faca deixada ao alcance de um bebé que brinca com ela ou como uma perigosa aranha que anda pelo corpo do usuario que dorme etc. Ousuario é construido como uma figura depreciada: € compa- rado, num dos filmes, a uma batata quente que passa de mao em mao na familia até que alguém 0 joga no lixo, ou, em outro, aalguém que diz que a droga nao 0 domina enquanto cresce seu nariz de Pindéquio. b) Em termos de estratégias de manipulagao, as pegas optam pela intimidagao, na medida em que anunciam o perigo da droga e afir- mam que 0 consumo leva inevitavelmente a dependéncia. O usuario é apresentado como alguém fraco, dominado pela droga, sempre construida como poderosa e mortal (figuras da faca na mao do bebé ou da aranha mortal). A partir dessa primeira classificagao, Leite selecionou quatro filmes representativos de seu corpus: 1) Ofilme Pindéquio — em termos narrativos é do grupo “a” aci- ma, e em termos discursivos pertence ao grupo “b”, ou seja,a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.150 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO que é (sera?) um relance de seus pélos pubianos. Uma declaragao como a de Tebbitt sem diivida é 0 equivalente ideolégico desse gesto, pois permite que se vislumbre por um instante a obscena intimi- dade do edificio ideolégico tatcherista. (A propria Lady Tatcher era por demais dignificada para realizar com muita freqléncia esse ges- to a la Sharon Stone, de forma que o pobre Tebbitt teve que atuar em seu lugar.) Contra esse pano de fundo, a énfase dada pelo Par- tido Trabalhista 4 decéncia ndo era um caso de simples moralismo —— sua mensagem consistia antes em dizer que eles ndo estao jo- gando 0 mesmo jogo obsceno, que suas declaragdes nao contém, nas entrelinhas, a mesma mensagem obscena (Zizek, 2003). Adiscursivizagao conservadora hoje opta por colocar em oposi- ¢ao a légica econémica “objetiva” despolitizada contra “formas de paixdes ideoldgicas supostamente superadas” (o regime do “poli- tico” — luta de classes e outros antagonismos divisores “superados”). Trata-se de um projeto de entrar no universo pragmatico pés-ideolégico “maduro” de admi- nistragao racional e consensos negociados, no universo, livre de impulsos ut6picos, em que uma administracao desapaixonada dos assuntos sociais caminha pari passu com um hedonismo estetizado {o pluralismo de “formas de vida”); neste exato momento, 0 politico submetido a foraclusao esta festejando uma volta triunfante sob sua forma mais arcaica: a de édio racista em estado puro e bruto contra o Outro, o que torna a atitude racional tolerante totalmente impo- tente’. Neste sentido preciso, o racismo “pds-moderno” contempo- raneo é 0 sintoma do capitalismo tardio multiculturalista, trazendo a 4. E curioso que nos Ultimos anos de avaliagao continuada, programas de pos-graduagao da area de comunicagao de Sao Pauloe do Rio de Janeiro, antes considerados consolidados, tenham tido seu capital intelectual questionado por meio do rebaixamento de suas notas. Por outro lado, programas de outras re- gides ver cultivando uma escalada avaliativa, acumulando seu capital intelec- tual, o que indica um novo balango nacional de ganhos e perdas pés-graduados. Todo esse esforgo missionario nao conduziu o campo a uma efetiva qualificagao (e consolidagao), mas a uma mera realocagao do capital intelectual rumoa uma descentralizacao territorial e cultural (seria uma nova mutagao genética do “po- liticamente correto”?) ou, em outras palavras, a uma dispersdo.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.A comunicacGo e(m) seus limiares Awuizio R. TRINTA Professor do Programa de Pés-Graduagao em Comunicagao da UFRJ Em tempos de uma tecnologia triunfante, pode-se pensar que a refle- xo filos6fica caiba apontar os rumos a seguir para seu entendimento ou as corregdes a serem feitas para seu aproveitamento integral. O mundo (pés-)industrial de nossos dias parece algo desinteressado por especialistas em Comunicagao eficaz, buscando encontrar es- pecialistas na administracao de transformagdes, mormente aquelas trazidas ou provocadas por implementos tecnoldgicos. Foi em 1970 que Hannes Alfven, ganhador do Prémio Nobel de Fisica, teve a pre- monigao de que a tecnologia nos fornece coisas com rapidez maior do que nossa capacidade de aprender o que fazer com elas. Nao raro, sequer chegamos a entender bem o que significam. Se por obra e graga de formidaveis dispositivos tecnolégicos o fendmeno contemporaneo da pletora de signos acarreta sua desva- lorizagao e, por conseqléncia, o esvaziamento de toda significagao, resta considerar que, por paradoxal que parega, dispondo de infor- magao superabundante e amplamente disseminada, vive-se em ple- nitude a caréncia de sentido. Criar, utilizar e promover a circulagao de signos é uma atividade natural de todo ser humano. Por impreci- sao ou insuficiéncia referencial também se descreve a perda da efi- cacia simbélica da linguagem. Em que pese esta circunstancia, nado sao poucos os que, subme- tidos as insistentes solicitagdes que hes chegam dos meios audio- visuais pelos quais comumente se processa a Comunicagao, se empe- nham em definir, com a precisao e o rigor possiveis, a compreensao que se pode ter de um conceito ou os limites que podem ser postos aa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.ATRAVESSANDO FRONIEIRAS: AS INTERFACES DA COMUNICAGAOQ_ 189 o conhecimento da Comunicagao favorece a compreensao critica das relages que, entre si, os individuos mantém, bem como 0 qua- dro formado por sua cultura, sua insergao em meio social e mesmo a relevancia do papel que em tudo isso os meios de comunicagao desempenham. Fica-se sabendo que, nesta “sociedade midiatica”, potentes mediadores como 0 jornal, a revista, o cinema, 0 radio e, sobretudo, a televisao provéem a propagacao de informagées e a apresentacao valorizada de padrdes de comportamento, realizando, com charme algo indiscreto, intentos de hegemonia cultural e de controle social. Ainda que nos Ultimos anos da década de 1990 se tenha anun- ciado, com expressiva regularidade, o advento de uma “nova era da Comunicagao”, nao se deve perder de vista que comunicar tem sido, desde tempos imemoriais, uma atividade fundamental das socieda- des organizadas. A extrema facilidade que hoje temos de efetuar e dar curso ao processo de Comunicagao pode, de um modo ou de outro, promover a banalizagao do ato de comunicar. Vozes e falas em dema- sia nos atiram em um siléncio decidido, com o qual inibimos ou anu- lamos uma porgao substancial de nossa capacidade de interagir. A Comunicagao constitui, portanto, um ato social e um fendme- no psicolégico. Implica uma interagao e envolve uma troca de cunho simb6lico. Se as agdes de comunicagao forem inibidas ou paralisa- das, a sociedade — 0 conjunto de seres humanos em continua inter- relagao — deixa de existir como tal. Assim se explica a importancia de que se revestem, para a compreensao metddica da Comunica- cao, ciéncias como a Sociologia e a Antropologia. A Comunicagao encontra esteio e mesmo justificativa em toda espécie de fendmenos de transferéncia, produzindo-se entao, com o consentimento e pela vontade dos interagentes, uma partilha. Em sua maior parte, as teorias da Comunicagao resultam de pes- quisas metddicas e observagGes regulares, que sao levadas a termo tendo por referéncia as inter-relagdes mantidas pela constituida por individuo, meios de comunica¢ao, sociedade e cultura. Em sua aparen- te diversidade, esta profusao tedrica torna patente o fato de que a Co- municagao nao encerra um “nucleo duro” e que, enganosa ou apenas provisoria que tal diversidade seja, empurra as teorias da Comunica- ¢do para as cercanias de “situagGes de trafego”, para a proximidade a pontos de passagem. Como tal reconhecida e assimilada, esta transi- toriedade transforma essas teorias em “work in progress”, o que lhesa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.164 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO Na pés-graduagao e nas disciplinas mais teéricas que leciona- mos na graduacao, tateamos na mesma dificuldade, que reside em encontrar solugées topograficas e ideograficas entre as varias par- tes que compéem o vastissimo campo da comunica¢ao. Muitas ve- zes nao € facil dizer se determinada escolha para a pesquisa esta ou nao situada no campo, tal a diversidade de possibilidades e de olha- res sobre os objetos empiricos com que lidamos. Transformé-los em objetos tedricos nem sempre é tarefa simples, sobretudo devido a forte pressao das praticas e tecnologias da comunicagao que nao necessitam, a rigor, de seu exame critico para funcionarem e serem socialmente aceitas. Separar o treinamento para o exercicio de uma profissao e a discussao sobre seus significados tedricos € um problema que ator- doa qualquer pesquisador que também seja professor. Talvez esta equagao nao seja perfeitamente solucionavel em qualquer campo de conhecimentos e de acao profissional. Sabemos que, deontolo- gicamente, um profissional da comunicagdo sera mais consciente, tera mais ética e mais consisténcia em seu trabalho se souber inter- preta-lo. Isso nao é um problema de mercado e sim uma meta-exi- géncia de cidadania. O equilibrio entre essas duas coisas é ténue e variavel em contextos hist6ricos diversos, consistindo em um desa- fio a proposigao de que nossas preocupagées de origem na argu- mentagao cientifica e filos6fica tenham interesse e se vinculem fir- memente ao devir social. As ciéncias sociais ganham sentido quando apontam proble- mas para além do dominio das técnicas e se aproximam dos interes- ses humanos mais profundos. Ganham validade, quando servem para construir paradigmas capazes de inspirar mudangas, reinterpretar aspiragées coletivas, resolver impasses e construir pontes na dire- ¢ao da democracia e da justiga social. Fora disso, soam sem sentido, apocalipticas ou integradas, como na célebre formulagao de Umberto Eco, que pode ser compreendida como a destruicao do que existe sem nada colocar no lugar ou, ainda, a naturalizagao do entorno so- cial. Encontrar caminhos miltiplos que nos permitam uma herme- néutica critica do tempo presente é um dos interesses deste texto, que parte do principio de que devemos olhar para além das aparén- cias e buscar 0 encontro com as esséncias da argumenta¢ao comu- nicacional de nosso tempo. Isso implica um esforgo de compreender os atos e as situacdes comunicacionais como representagdes que re- metem as realidades materiais e simbdlicas de nossa época.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.168 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO, obliquos etc. Isso quer dizer que as mensagens circulam de modo desigual alcangando sujeitos diversos. Em alguns exemplos possi- veis, um simples olhar, um abrago, um beijo ou a visdo de determi- nada imagem gravada em algum suporte fisico constroem atos co- municacionais. Indmeras areas do saber contemporaneo, destacan- do-se os denominados estudos culturais e as chamadas ciéncias cog- nitivas, tém feito varios aportes sobre as manifestagdes comunicati- vas lingiisticas e nao-lingiisticas. A visao tradicional que reduz a comunicagao a um problema essencialmente lingiistico traz prejui- zos ao olhar epistemolégico aqui proposto. Este contrato pode ser formalizado, como na relacao tradicio- nal entre professores e alunos, padres e fiéis, como nos modernos programas televisivos e suas audiéncias, bem como nas relagdes en- tre governantes e governados etc., tendo regras de comportamento previamente acertadas e codificadas. Sempre houve algum espago para a informalidade, mesmo nas situagdes mais rigidas. O rompi- mento dessas regras indica a rebeldia quanto aos padrées formais ou, mais simplesmente, a aceitagao de variagdes dentro do contrato firmado a ser codificado. Os contratos podem ser mantidos, repactuados, alterados etc., como também podem nao existir, quando se referem a processos comunicacionais ainda embriondrios. Considerando-se as diferen- ciagdes sociais, dir-se-ia que os contratos de comunicag¢ao sao mul- tiplos e celebraveis nos momentos em que hd o encontro entre par- ceiros. Imagina-se que eles existem de fato ou estao em processo de montagem, a partir do exame dos atos e situagdes comunicacionais que neles circulam. Seus elementos mais essenciais sao 0 comporta- mento social, as manifestagdes discursivas e o sistema de crengas dominantes em cada época. Os contratos comunicacionais podem ser classificados ou iden- tificados a partir de alguns critérios que se interpenetram, tais co- mo: 1) 0 meio usado para emissao, transmissao e recepgao de mensa- gens; 2) o grupo sociocultural onde é pactuado; 3) 0 contexto social, historico e cultural de sua existéncia. Quando se fala, por exemplo, em contrato de leitura, é necessdrio pontuar de que época e para que grupos socioculturais. O mesmo meio de comunicagao gera, em épocas distintas ou ao mesmo tempo, contratos bem diversos. Isso ocorre inclusive nos atuais meios de comunica¢ao de massa, que fa- zem uma distribuigéo de mensagens de modo universal, concele- brando contratos particulares para cada grupo sociocultural. Por-a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.172 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO Esta modalidade de contrato representou uma fase de transi- Gao, porque ainda possuia fortes vestigios de poder da antiga ordem direta interpessoal. As mensagens circulavam de modo predomi- nantemente estratégico, tal como na propaganda politica de massa liberal nazi-fascista, stalinista e nacional-populista ou, relativamen- te comunicativo, tal como nas radionovelas e na filmografia de fic- Gao, sem que seus objetos sociais destruissem por completo os lagos tradicionais de comunicagao, por mais que os abalassem. A propria tematica e o conteuido dos documentos comunicacionais dessa épo- ca indicam que a validagao das mensagens passava, com mais forga do que hoje, por sua sintonizagao com o modo em que as relagdes interpessoais se davam. Acomunicagao interpessoal ainda nao dependia principalmen- te do que se via nas midias. Elas eram uma das dimensGes comuni- cacionais a disposigao para o uso social. A integragao das midias, enquanto objetos sociais, estava em processo de amadurecimento. A entronizagao e 0 amalgama estavam forjando-se em um proces- so longo e cheio de altos e baixos. Pode-se ver isso nos limites tec- nolégicos das midias da primeira metade do século passado, mas também se refere a historia das sociedades e culturas da mesma época. Em alguns exemplos, como escutar radio ou ir ao cinema, nao implicava se informar basicamente por estas ou outras midias; divertir-se com os romances populares e com as histérias em qua- drinhos nao implicava que as criangas e os adultos nao tivessem vida comunitaria, mesmo nos centros urbanos; ir a comicios nao necessitava de outros apelos e se integrava as redes de relagdes so- ciais existentes. Pouco a pouco, o desenvolvimento em escala gigantesca da in- dustria cultural e o surgimento das maquinas de comunicar eletré- nicas, principalmente da TV nas ultimas cinco décadas, acarretou mudangas decisivas. Obviamente, estas ndo ocorreram em hora e dia marcados. Pensa-se que continuam em processo, 0 ciclo ainda nao se completou e duvida-se que sera absolutamente completo al- gum dia. Aceitar a dificuldade de um ponto final é essencial para se fugir ao modelo tedrico apocaliptico e ao modelo integrado. O pri- meiro fundamenta-se na possibilidade de um mundo destruido pela novidade tecnolégica. O segundo cristaliza-se na mimesis, na tauto- logia ad nausea da existéncia, usando-se uma formulagao similar a critica de Sfez (1990).a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.7% EPISTEMOLOGIA DA COMUNICAGAO sibilidades de analise e compreensao do problema. Torna dificil pen- sar 0 porqué das mensagens, as razGes de suas origens, possiveis sujeitos emissores e receptores, seus objetivos politicos e culturais. Por outro lado, estimula que se criem soluc6es teéricas que elucidem 0 problema. Os novos contratos sao também, sob o ponto de vista ideoldgico e politico, formas de aceitagéo consensual de determi- nada ordem do discurso e de seus siléncios e de multiplas verdades e mentiras construidas de acordo com os novos problemas do devir sociocultural. Nestes novos tipos de contrato, firmados na época do culto as midias, a comunicagao interpessoal ganhou um novo elemento cada vez mais forte, as maquinas de comunicar eletrénico-digitais, trans- formadas nos mais recentes objetos sociais da comunicagao. E cres- cente, por exemplo, a importancia das redes telef6nicas, fixas e por- tateis, eas de computadores, locais e remotas, em intmeros servigos publicos e privados. O telefone celular, objeto social acreditado como fundamental para comunicagao interpessoal, transformou-se em um dos icones de nosso tempo. A televigilancia, representada por came- ras de TV, gravadores de som e outros artefatos instalados em locais publicos e privados, foi naturalizada, tal como se consistisse em um mal necessario. A Internet ja alcanga alguns milhdes, mesmo no Brasil, onde ha limites sociais quase intransponiveis. O antigo cos- tume epistolar cedeu ao correio eletrénico. Escrever cartas e outros textos 4 mao ou datilografadas é cada vez mais raro ou destinado a casos especiais e 4s maiorias que vivem nos limites de pentria da atual ordem econémico-social. O maior mérito dos teéricos da recep¢do foi o de explorar as no- vas possibilidades dos pactos comunicacionais, valorizando as au- diéncias e desmistificando a tese emissionista oriunda no funciona- lismo sociolégico de origem norte-americana. O publico nao é pas- sivo, participa, modifica, constroi e reconstréi a moderna produgao cultural veiculada pelos meios de comunicagao. Esses teéricos se afastaram da tecnofilia e da tecnofobia que inundam parte das in- cursdes sobre o tema. Preferiram o caminho da discusséo da comu- nicagao como problema de cultura, evidenciando-se o que €é compar- tilhado entre o pUblico e os meios de comunicagao. Martin-Barbero (1997; 2001), por exemplo, nao fala em contrato, mas na pratica o in- tui ao teorizar sobre a relagdo entre as partes, rejeitando o modelo matemiatico de transmissaéo de mensagens, quando aplicado a cir- culagao da cultura.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.TEORIAS E METODOLOGIAS NO CAMPO DA COMUNICACAO 181 comunicagao neuréotica, psicopatolégica ou perturbada, tal como nos dizeres de Habermas. Consiste na opiniao das maiorias, para a qual Breton (1999) propée a andlise de seus argumentos como forma de se compreender o que é comunicagao, no lugar de sua existéncia, isto é, no mundo da vida. Essa comunicagao esta no seio das midias e também fora delas, nas relacdes interpessoais de nosso tempo. Abrange igualmente as percepg6es coletivas e individuais derivadas do devir sociocultural. Por mais que se tente ou se possa agir de modo racional e objetivo, havera sempre espagos nao-racionais e de sub- jetividade nos atos e situagdes comunicacionais. Os contratos de comunicagao seriam as expressdes fenomenold- gicas do fluxo de informag6es, opini6es — senso comum — e outras crengas baseadas nas mais diversas tradigées. E dificil ver esses pro- blemas em separado no mundo da vida. Somente por meio da criagao de objetos tedricos, construidos a partir da analise do empirico, po- de-se chegar 4 compreensao dos significados dos atos e das situa- des comunicacionais e, conseqiientemente, dos contratos. Breton (1999) propés a separagao entre retérica e argumenta- ¢ao, fazendo a diferenga entre as manifestagdes discursivas que per- suadem sem ética, de modo impositivo, e as que o fazem a partir de um acordo prévio com as audiéncias. Também diferenciou o discur- so cientifico do argumentativo, lembrando que o primeiro exige a comprovagao e o segundo, apenas, o acordo consensual. Listou as indmeras possibilidades dos discursos comunicacionais, tais como os de natureza religiosa, afetiva, pautada em opinides objetivas, cien- tifica e os argumentativos. Referiu-se basicamente aos atos de fala ou escrita e as situagdes comunicacionais. De nosso mirante, os discursos sao sempre argumentagoes, para isso nao importando muito se tém ou nao 0 acordo prévio com as audiéncias ou se pretendem ser objetivos ou subjetivos. Eles podem ser indutores desse acordo, formalizando o contrato. No caso, por exemplo, da argumentacao retorica, do convencimento a qualquer prego, isso sé é visto assim por quem esta no papel da observagao externa do problema. Os que estao participando da situagao comu- nicacional necessariamente nao a percebem desse modo. O politico eo professor podem ser retéricos, sem que suas audiéncias tenham. consciéncia do problema. Seguindo-se esta linha de raciocinio, o acor- do prévio pode, por exemplo, ter a caracteristica de naturalizar a re- torica de seus comunicadores. Neste ponto vista, constatar-se-ia aa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.A comunidade e a conformacao de uma abordagem comunicacional dos fendmenos Rousitey C. M. MAlA VERA V. FRANCA Professoras do Programa de Pés-Graduacao em Comunicacao da UFMG A discussao sobre 0 objeto da comunicagao retornou com bastante €nfase nos Ultimos tempos, pautada tanto por uma questao con- juntural vivida pela comunidade brasileira de pesquisa (a indagagao sobre a especificidade de nossa area), quanto, e sobretudo, pelo pré- prio contexto epistemolégico mais amplo, atravessado pelos debates sobre a mudanga de paradigmas. No contexto desses debates, em que as fronteiras disciplinares vém sendo rompidas, soa estranho, por um lado, um esforgo de cons- trugdo disciplinar. Por outro lado, o partilhamento de temas, de au- tores e a natureza hibrida das problematicas formuladas pelos pes- quisadores das ciéncias humanas e sociais tornam mais dificil para uma area nova dizer a que veio e delimitar o seu Jugar no contexto da chamada “desdogmatizagao” da ciéncia (Santos, 1989: 23). Acreditamos que, por isso mesmo, é feliz a escolha do tema deste seminario como Epistemologia da Comunicac¢ao, j4 que a “epistemo- logia ganha importancia em momentos de crise”. O estudo critico dos principios, das hipdteses e dos resultados de uma dada ciéncia ou, entao, a indagagao sobre a origem, a estrutura e os métodos de validagao do conhecimento sao fundamentais nessas circunstancias. Nao pretendemos retornar aqui a discussao sobre o objeto da comunicagao. Nesse debate ha uma polémica quanto a circunscrever esse objeto ao estudo dos meios de comunicagao (processos midia- ticos) ou ao processo mais extenso de interagao simbélica, de troca de mensagens entre seres humanos. Entendemos que essa questéo — 0 objeto de nossa area — nao pode ser reduzida a um universoa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.TEORIAS E METODOLOGIAS NO CAMPO DA COMUNICACAO- 191 “abstrato” e “etéreo” (os conceitos ficam externos a realidade exis- tente). Dando continuidade a essa questao, Popper interroga se pes- quisadores no futuro chegassem (por métodos e procedimentos ci- entificos) a proposigdes semelhantes aquelas do livro do clarivi- dente, isso seria suficiente para garantir-lhe o status cientifico? A resposta é negativa, pois as “predig6es” do sujeito clarividente nao teriam como ser sustentadas pelos membros da comunidade de estudiosos de sua €poca — a teoria nao passaria de uma especula- cao desprovida de sentido. Sem saber como a ela se chegou ou 0 modo pelo qual poder-se-ia aplica-la, a tese nao se mostra inteligi- vel, nao se constitui num esquema organizador e é, em ultima ana- lise, supérflua. Obviamente, a combinagao de teorias ou métodos, a “indisci- plina” do pesquisador sao componentes importantes, ou mesmo decisivos, no esforgo investigativo que se propde na pesquisa. Con- tudo, a teoria sé se predica daquelas teorias ou teses que podem ser publicamente avaliadas por métodos experimentais, dedutivos ou argumentativos. Como bem sabemos, a teoria nao é uma mera ati- vidade de intelecgao ensimesmada sobre 0 mundo; nem se deriva indutivamente de observagdes empiricas sobre um mundo prees- tabelecido para, entao, explicar esse mundo. As teorias oferecem- nos os meios para observar e formular testes, e nado apenas os meios para explicar os resultados dos testes e/ou as correlagdes entre as observag6es empiricas (Calhoun, 1995: 6). De tal modo, a matéria sob investigacao deve ser previamente entendida de alguma formae em algum nivel congruente com os entendimentos da comunidade cien- tifica, para que as categorias de andlise nao fiquem externas ao ob- jeto (Hollub, 1991). Para esclarecer 0 modo pelo qual o conhecimento é produzido no ambito institucional, segundo certos procedimentos institucio- nalizados que regem os mecanismos para propor e avaliar as dis- tintas contribuigdes feitas pelos pesquisadores, podemos utilizar o exemplo de Popper sobre a ciéncia crusoeniana (Popper, 1963: 219). Suponhamos, propée Popper, que um determinado pesquisador iso- lado em uma ilha nos moldes de Robson Crusoé dispusesse do tem- po necessario e de recursos suficientes para realizar experimentos baseados em observag6es controladas, por meio do registro siste- matico de dados e reconstrugées analiticas, a fim de garantir uma demonstragao ou uma “explicacao” dos passos seguidos em sua pes-a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.TEORIAS E METODOLOGIAS NO CAMPO DA COMUNICACAO 195 clusivamente pela pressao decorrente da competigao por recursos escassos (Swanson, 1993: 164; Neto, 2002: 30-31), mas sobretudo pelo engajamento critico da comunidade com as atividades de pes- quisa e a renovagao do estoque de conhecimento, bem como a ins- titucionalizagao de uma complexa aparelhagem institucional, que exija e assegure a expressao dessas atividades e oriente certos pro- cedimentos criticos da comunidade. A luta nesse sentido também é politica, a fim de construir as instituigdes democraticas e flexi- veis, refletindo a diversidade de anseios e interesses dos membros que a compéem. N§o se trata de negar a recente historicidade da area, muito me- nos de tentar estabelecer o consenso e a harmonia a toda prova. Ob- viamente, nao se pode neglicenciar os embates por dominagao, sta- tus e adscrigéo sempre presentes na academia conforme configura- es histéricas dadas. E nem se deve supor que os pesquisadores inseridos em diferentes programas poderiam situar-se num grau zero do conhecimento para, a partir da dai, construir o campo. No pro- cesso mesmo de constituigao do campo, o que se pretende é que a comunidade seja capaz de estabelecer “a particularidade ...de ana- lise de um saber” (Martino, 2001: 79), “a especificidade do olhar da Comunicagao” (Franga, 2002: 27), constituindo, nos termos de Braga, “nucleos de atragao e de constituigao de ‘tendéncias’ e ordens reco- nheciveis de problemas” (Braga, 2002: 265). Somente assim sera pos- sivel estabelecer o lugar desta area no didlogo entre as demais areas de conhecimento, sua irredutibilidade aos fatos e seu engajamento com 0 mundo pratico. Assim, 0 que esta em jogo no processo de constituigao do cam- po éa possibilidade de a prépria comunidade ir cobrando, cada vez, maior criticabilidade, tanto dentro das proprias subareas de conhe- cimento (no sentido de demandar maior contetdo empirico e/ou maior clareza conceitual) quanto entre elas. A dispersao intelectual e a chamada “aceleragao da fragmentagao do campo da comunica- gao” (Swanson, 1993: 165) tendem a levar a uma cOmoda e tragica acei- tacao do puro pluralismo. Isso prejudica a propria capacidade da co- munidade de manifestar-se em sua espontaneidade diversificada. Como saber em que somos originais na condugao da pesquisa ou se nossos resultados sao peculiares? Como separar o que nos é espe- cifico daquilo que, presumivelmente, é compartilhado pelos outros? Apreender apropriadamente o especifico supe que nos relacionemosa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.TEORIAS E METODOLOGIAS NO CAMPO DA COMUNICACAO 201 empreender um desenho analitico que promova sua conjugagao. Os achados de uma andlise comunicacional serao resultado dessa con- jungao; eles nos permitirao ler (e compreender) como veio se dando ainteragao — e como ela reposiciona os termos da relagao e se reali- za enquanto pratica instauradora de sentido. Os interlocutores des- se processo — os diferentes candidatos, os eleitores, os inimeros comentadores (a midia, os observadores internacionais etc.) — alte- raram sensivelmente sua posigao ao longo das interagdes estabele- cidas. Os sentidos que revestiram o processo também passaram por profundas mudangas: o Lula de alto indice de rejeigao é o mesmo hoje envolto numa aura quase mitica; a eleigdo e a vitéria assumiram outra tonalidade (inclusive com alto componente civico — valendo registrar aqui, entre outros aspectos, o retorno do Hino Nacional). E um cendrio e sao mudangas perceptiveis para todos — mas é sobre- tudo o olhar comunicacional que se apresenta como 0 viés privilegia- do para dar conta desse movimento, das relagées, do processo, en- fim, por meio dos quais foram vividos os Ultimos acontecimentos. Naturalmente nao temos a pretensao de empreender aqui a ana- lise de um processo de tal envergadura. Como dissemos acima, bus- camos apenas indicar um esboco da maneira como compreendemos a especificidade de nosso olhar. E uma perspectiva dentro da qual temos trabalhado, uma proposta que ganhara mais ou menos legiti- midade conforme alcangarmos nao apenas uma boa demonstragao de nossos pressupostos e de nossos caminhos, mas conseguirmos esta- belecer, a partir dela, a necessaria interlocugao com nossos pares. Referéncias bibliograficas ADORNGO, T. W. Sobre a logica das ciéncias sociais. In: ADORNO, T. W COHN, G. Theodor W. Adorno. Sao Paulo: Atica, 1986, pp. 46-61. BOURDIEU, P. Introdugao a uma sociologia reflexiva. In: O poder simbdlico. Lisboa: Difel, 1989, pp. 17-58, BRAGA, José Luiz. Constituigao do campo da comunicagao. In: BRAGA, José Luiz; NETO, Anténio, FE; PRADO, José L. Aidar; PORTO, S. Dayrrel (orgs.). Campo da Comunicagao — categorizagao, problematizag6es e perspec- tivas. Joao Pessoa: Editora Universitaria. UFPB, 2001, pp. 11-40. . Anilises. In: BRAGA, José Luiz; WEBER, Maria Helena; BENTZ Tone; HOHLFELDT, Anténio (orgs.). Tensdes e objetos: da pesquisa em comunicagao. Porto Alegre: Sulina, 2002, pp. 257-270.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.206 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO. basicas para a produgao cientifica, sem formular argumentos sus- tentados em pesquisa epistémica histérica que brinde subsidios for- tes de conhecimento sobre os processos de configura¢ao do campo, em suas heterogeneidades, seus conflitos, tendéncias, negociagées, perspectivas metodolégicas e modelos teéricos. Nessa perspectiva de reflexao e construgao do campo, constata- mos a necessidade (0 carater imprescindivel) de estruturar algumas linhas de investigagdo epistemoldogica definidas como pesquisa da pesquisa. Essas linhas nao devem ser compreendidas no contexto dos relatérios quantitativos-descritivos; nomeados como “diagndés- ticos” de situagao da pesquisa, que nao superam o nivel de resumos e resenhas superficiais ou burocraticas e tém provocado significa- tivas distorgdes sobre a realidade da area. A pesquisa da pesquisa propde-se numa perspectiva episte- moldgica histérica/genética/construtiva/politica que problematiza os paradigmas e modelos tedricos, explicitando-os na sua configuragao interna — sistemas de hipdteses, categorias, conceitos e nogdes — e vinculando-os as suas fontes de conhecimento precedentes e contem- poraneas. Isso significa problematizagGes teéricas aprofundadas que estudem com respeito, sistematiza¢ao e senso critico os argumentos tedricos de cada modelo, realizando uma desconstrugao minuciosa — que requer de tempos ldgico-reflexivos adequados ao amadure- cimento da pesquisa — e reformulando questdées tedricas em inter- relagao com outras vertentes conceptuais importantes para as proble- matizagdes em comunicagao. Adimensao tedrica da investigacao extrapola, assim, a reprodu- ¢ao cémoda de raciocinios teéricos (longas parafrases; vulgarizagées; “ismos” e a critica irresponsavel/superficial/fatua), buscando com- preender os fundamentos na sua dimensao de realizagao e formulan- do em processo construtivo hipéteses, nogdes e argumentos que se estruturam a partir da pesquisa de modelos tedricos relevantes. A pesquisa teérica é uma excegao na area da comunicagao. O em- pirismo e o pragmatismo vulgar tém influenciado fortemente a pes- quisa no campo; simultaneamente o teoricismo, caracterizado pela voluptuosidade literaria e a proliferagao de idéias sem argumentagao forte, também tem afetado a area (confusdo intensa entre forma sim- bdlica e episteme). Essas praticas de intelectualismo abstruso tém sido um dos principais fatores de rejeigao da praxis tedrica em comunicagao, fortalecendo as posturas funcionalistas e empiristas no campo.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.212 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO- liticas socioculturais e comunicagao; ética e transformagao social séo, entre outras problematicas, tematicas articuladoras de um olhar aprofundado para alternativas de construgao de heterotopias exequi- veis. Hoje é possivel identificar com seriedade as limitag6es proprias de todo conhecimento humano; depois de varios séculos de mode- los totalizantes, importantes posturas gnosiolégicas amadureceram em termos de diversidade l6gica e metodolégica e ampliaram as pro- blematicas tedricas, inserindo varios modelos, tradigées, sistemas e redes conceptuais na gera¢ao de hipoteses, na formulagao e resolu- ¢ao de problemas e no didlogo construtivo de campos de saber. Uma das grandes diferengas com quatro décadas atras € que ninguém vai pretender fundar uma ciéncia univoca, total, acabada e formal nas ciéncias humanas, sociais, da linguagem e da comunica- gao. O reconhecimento dos tragos, dos campos e das dimens6es tem sido um passo importante na defini¢do de pertinéncias, flexibili- dades, misturas e alternativas de fundamentagao teérica. As estra- tégias formais, especulativas e dedutivas deram passo as problema- tizagdes exploratorias, experimentais, pragmaticas, construtivas e hermenéuticas que situam a comunicagao em processos sociocul- turais e de significagao vinculados com sistemas tecnoculturais. A investigacao dos processos comunicacionais contemporaneos é configurada pelas exigéncias dos objetos-problema que as reali- dades historicas e sociais apresentam. Essas construg6es culturais definem dois aspectos cruciais de sua estruturagao: a midiatizagao do mundo por meio de sistemas técnicos de informatizagao, con- trole e produgao de bens simbdlicos, nos quais o campo das midias é chave para a problematica da comunicagao contemporanea; e a compreensao dos processos de produgao de sentido nos contextos miltiplos das mediagdes — sdcio-semi6tica, antropologia, histéria, sociologia da cultura, estética, pragmatica, andlise do discurso, cri- tica literaria, filosofia da linguagem, hermenéutica, retérica e axio- logia convergem para pensar o sentido — a teoria das mediagdes reconstréi, mediante uma dialética precursora e construtiva, frag- mentos de saberes dispersos, definindo a Cultura como a mediagao central articuladora dos complexos de contextos nos quais os sujei- tos sociais interagem produzindo significagdes®. Vai ser o choque 5. Jestis Martin Barbero. Dos meios as mediagées (...), Rio de Janeiro: Editora UFRJ, 1997.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.26 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAQ, gurado posicionamentos de submiss4o logocéntrica, levando a for- magao de comunidades, as vezes seitas, de ritualizagao de discursos sobre a ciéncia que em alguns casos constituiram-se em graves obs- taculos para uma producao séria de conhecimentos. A problematiza¢ao tedrica, nesses casos, foi substituida pela ado- Gao de chavées e esquemas que prejudicaram um desenvolvimento transdisciplinar. Continuam atuando praticas desse tipo e existem dimens6es ideolégicas totalizantes que pretendem atribuir a um au- tor ou escola a centralidade e fundamentagao basica da transdisci- plinaridade"; esse tipo de teorismo especulativo sustenta-se numa combinagao de jogos literarios e o uso superficial de idéias prove- nientes das ciéncias naturais. No campo das ciéncias da comunicagaéo as influéncias dessas praticas e modelos expandiram-se em setores formados e acostumados a procedimentos especulativo-retéricos, cujo posicionamento pode caracterizar-se como o de uma “douta ig- norancia” sobre os processos socioculturais, histéricos, politicos e comunicacionais”®. Uma reformulagao teérico-transdisciplinar supde 0 reconheci- mento do trans como uma problematica vinculada a categoria de movimento, um movimento que ultrapassa “fronteiras” a partir do conhecimento profundo dos problemas-objeto de pesquisa setoriais, 11. Constatam-se posicionamentos desse tipo em seguidores da nomeada teoria da complexidade, cujo maior representante é Edgar Morin. O fracasso do projeto transdisciplinar com Roland Barthes (Semiologia) e Georges Fried- mann (Economia Politica da Comunicagao)}, que partia de um compartilhamen- to de fundamentos e problematicas entre campos cientificos, levaria no futuro Morin a uma pretensdo de generalidade epistemolégica que corresponderia ao summu do conhecimento humano. Detecta-se nessas proposigdes um pro- blema grave de auséncia de explicitagao conceptual, apropriam-se de forma- tos e idéias sem mostrar as fontes e os procedimentos de reformulagao, geram campos de efeitos de sentido que tornam o “saber cientifico” um exercicio cé- modo de especulagao e literatura. A influéncia de correntes literarias pos-mo- dernas realizam estruturagGes semelhantes. Observa-se também a continuidade “totalitarismo metodolégico” de parte dos neofuncionalistas. A velha preten- so de “saber absoluto” continua presente em varios autores e comunidades, que aproveitam a falta de uma tradi¢ao cientifica forte numa area para circular e marcar seus debates retoricamente. 12. Michel de Certeau. A invengao do cotidiano — artes de fazer, Petropolis: Vozes, 1994.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.220 EPISTEMOLOGIA DA COMUNICACAO um conjunto de saberes importantes provenientes de outras areas, os quais mediante a presenga nas argumentagées e pesquisas es- tabeleceram tragos interessantes de reflexao; por outra parte, e si- multaneamente, tem confundido o fazer comunicacional como um derivado dos fazeres na area de origem: sao ilustrativos os casos da lingiistica aplicada; sociologia da cultura; psicologia comportamen- tal, de grupos; etnografia de audiéncias; “marketing”; “atos da lin- guagem’; “filosofias da linguagem” e “teorias matematicas”. Nessa fase de construgao do campo das ciéncias da comunicagao é importante realizar as reformulagées teérico-metodolégicas necessarias 4 definigao de um campo para distinguir-se dos outros, para dialogar e configurar estruturagdes mais complexas. E assim que os pensadores e investigadores da area, considerando a forga que vao adquirindo seus contextos de pesquisa, tomando em conta as novas culturas cientificas que condicionam e valorizam suas pes- quisas e ponderando as demandas de um pensamento comunica- cional forte, precisam redefinir-se, desconstruindo-se e situando-se num espac¢o transdisciplinar articulado pelo comunicacional. Nessa Otica, a perspectiva transmetodoldgica que estamos construindo é uma proposta que busca uma articulagao de métodos organizados em torno de uma episteme e uma conceptualizagao comunicacional renovadoras. Os problemas-objeto, as problematicas de nossas investigagdes exigem constantemente construg6es estratégicas, sistematizagoes 16- gicas que nao podem ser abordadas por uma perspectiva excludente, instrumental, linear ou especulativa. Os fenédmenos culturais con- temporaneos, os processos midiaticos, as mediagGes socioculturais, a produgao social de significagdes, a fabricagao seriada de mensa- gens, os ambientes de interaccionalidade comunicativa, os sistemas e estruturas de informagao, a midiatizagdo intensa e acelerada do mundo pedem defini¢ées transmetodolégicas. Aproximar-se e obser- var sistematicamente, analisar os elementos que conformam um fe- némeno ou processo, organizar modelos de analise que respeitem as realidades empiricas — abordando-as imaginativamente — e dese- nhar formas e espagos cognitivos que expressem e representem a dimensao simbdlica dos sujeitos sao desafios constantes na pesquisa cientifica e académica.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.Em busca da disciplinarizag¢Go da Comunicagao: da nogdo de campo aos dominios de pesquisa GIOVANDRO MARCUS FERREIRA Professor do Programa de Pés-Graduagdo em Comunicagao e Cultura Contemporanea da UFBA “Um estado de ciéncia é condicionado pelas diversas circunstancias externas de nature- za diversa: técnicas, econdmicas, sociais, poli- ticas, ideologicas. Mas ele se define sobretudo por um sistema de conceitos cuja coeréncia mantém o desenvolvimento da pesquisa e da invengao numa determinada esfera, estenden- do muitas vezes tal sistema além do dominio de objetos pelo qual ele foi concebido.” (Gilles Gaston Granger) Abordaremos a discussao sobre a disciplinarizagao da comunicagao dividindo este artigo em duas partes. A primeira sera uma discus- sao sobre a disciplinarizagao tendo como referéncia 0 campo aca- démico e os agentes que trabalham com a comunicagao. A segunda, uma discussdo mais epistemoldgica, ressaltara as contribuigdes de dois tradicionais dominios de pesquisa em comunicagao tendo em vista a sua disciplinarizagao: o estudo da inovagao e o uso da técni- ca e a produgao do sentido. Ambos os dominios sofreram, ao lon- go do tempo, fortes mudangas. O estudo da técnica emerge nos estudos da comunicagao com uma profunda marca determinista. No entanto, as abordagens mais recentes substituem tal concep- ¢ao por uma rela¢ao de negociagao que surge desde a concep¢ao de uma nova técnica até o seu uso maci¢o. O estudo da produgao doa You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.A DISCIPLINARIZACAO DA COMUNICAGAO 265 Marx a explicagao estava na economia, nos modos de produgao, para Innis a explicagao se desloca para os meios de comunicagao. McLuhan vai explorar e difundir ainda mais esse filao iniciado por seu profes- sor e orientador. Os meios de comunicagao para McLuhan tém igualmente um sentido amplo, que ultrapassa a nogdo comumente empregada nos dias de hoje. Uma rodovia €é um meio de comunicagao, a luz elétrica é um meio sem mensagem, mas nao deixa de ser um meio na visao de Mcluhan. Para esse tedrico, o homem conhece o mundo agindo sobre ele e para tal agao cria extensGes de seus sentidos, aumentan- do seu conhecimento no tempo e no espago. Toda extensao afeta 0 “complexo psiquico e social”, nas palavras de McLuhan”. A criagao de novas tecnologias vai provocando gradativamente um ambiente humano totalmente novo. “O meio é a mensagem’”, pois sera ele — meio ou tecnologia — que levara a uma mudanga de escala, um novo modelo que se introduz nos assuntos humanos". Assim, retomando pesquisas de Harold Innis, McLuhan afirma que “a palavra escrita criou o individualismo e o nacionalismo no sé- culo XVI", ou entao, que “os efeitos da tecnologia nao ocorrem no nivel de opiniGes ou conceitos, mas alteram os indices de sensibilida- de ou modos de percep¢ao rapidamente e sem qualquer resisténcia””’. Esta viséo da tecnologia como agente de mudanga social e indivi- dual encontra desdobramentos em estudos mais recentes que po- demos igualmente dividir em dois grupos, sem tentar ser categ6- ricos em tal divisao. De um lado, certos autores que evidenciam o avang¢o social e individual pela influéncia de novas tecnologias, uma visao apologética como a de Pierre Lévy", e de uma certa maneira também a midiologia de Régis Debray"’. De outro, uma visao mar- cada por um certo niilismo tecnolégico, hoje expressa com bastante énfase nos ensaios de Jean Baudrillard. 15. McLUHAN, Marshall, Os meios de comunicagao como extensdes do homem, Sao Paulo, Cultrix, 1979. 16. Idem, ibidem. 17. Idem, Os meios sao as massa-gens, 2° edigao, Rio de Janeiro, Record, 1979, p. 21 18. LEVY, P., A inteligéncia coletiva, 2° edigao, Sao Paulo, Edigdes Loyola, 1999. Ver, também, LEVY, P., Cibercultura, Sao Paulo, Editora 34, 1999. 19. DEBRAY, Régis, Cours de médiologie générale, Paris, Gallimard, 1991.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.A DISCIPLINARIZAGAO DA COMUNICAGAO, 271 ativos que influenciam e sao influenciados ao longo do processo de comunicagao, fazendo apelo as respectivas contextualizagoes; ~ Recupera 0 aspecto histérico da inovagao e do uso da técnica (con- tribuigao da historia de longa duragao), situando uma nova técni- ca a partir das expectativas dos individuos, da evolugao socio- cultural. O estudo da técnica é construido partindo de uma pers- pectiva sincr6nica e diacrénica. 4. Disciplinarizagao Il: a questao da produg¢ao do sentido nos meios de comunica¢ao Um outro dominio interessante a ser explorado na discussao so- bre a disciplinarizagao é o da produgao de sentido; dominio tradicio- nalmente trabalhado pela semiotica e analise do discurso. Acredi- tamos que superando uma perspectiva linear, que marca os primér- dios desse dominio, e deslocando a nogao de comunicagao para a producao de sentido, poderemos explorar um outro filao rico tendo em vista a disciplinarizagao da comunicagao. Essa perspectiva ja vem sendo explorada por outros tedricos, e vamos fazer coro a esta inves- tida*'. Como na parte precedente, vamos mostrar a importancia desse dominio de pesquisa tragando o desenvolvimento da problematica em torno da produgao do sentido, partindo da teoria informacional e articulando com a semidtica. Tendo como problematica a otimizagao, o fluxo e os possiveis ruidos, a teoria informacional ou das telecomunicagoes surge no con- texto de pesquisa da comunicagao a partir da Segunda Guerra. A teoria informacional é essencialmente uma teoria da transmissao, segundo 0 esquema proposto por Shannon. Ha uma fonte que emite sinais por meio de um aparelho de transmissao que, por sua vez, tem. um receptor que procede a conversao de tais sinais para um destina- tario. A mensagem do aparelho pode conter ruidos. 31. Ver entre outros: VERON, Eliseo, “Pour em finir avec la communica- tion”, in revue Réseaux, n° 46/47, Paris, CNET, mar/abr/mai_/jun. 1991. MA- CHADO, Irene, “Semidtica como teoria da comunicagio”, in WEBER, Maria Helena, BENTZ, lone e HOHLFELDT, Antonio, Tensdes e objetos da pesquisa em comunicagdo, Porto Alegre, Editora Sulinas, 2002.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.a You have either reached 2 page thts unevalale fer vowing or reached your ievina tit for his book.A DISCIPLINARIZAGAO DA COMUNICAGAO 281 praticas (rituais) e formas subjetivadas dessas praticas (estruturas mentais interiorizadas, isto €, habitus), é possivel identificar ai o que outros autores trabalham como sendo as representagdes sociais (Moscovici). As representagOes sociais da ciéncia funcionam como matéria-prima das identidades cientificas, fruto das formas simbéli- cas introjetadas, isto é, da cultura cientifica interiorizada. Cabe aqui retomar a idéia de ag6es estratégicas antagOnicas dos sujeitos agen- tes (agency) — 0 antagonismo, seguindo Bourdieu, é 0 principio da estrutura e da transformagao de todo campo social — que atuam no sentido da continuidade (estratégias de conservagao) e da mudanga (estratégias de subvers4o). Bourdieu, diferente de Kuhn, acredita ter havido uma revolugao inaugural na ciéncia quando ela se autono- mizou dos campos politico e religioso, com a revolugao copernicana, “que nos da o paradigma no verdadeiro sentido da palavra” (p. 141). Com o crescimento da autonomia do campo cientifico, o proprio fun- cionamento deste, como “ciéncia normal”, passa a se definir pelas “revolugdes ordenadas”, como diz Bachelard, ou revolugdes perma- nentes, inscritas na propria légica da histéria da ciéncia, isto é, da polémica cientifica. O que leva Bourdieu a afirmar que 0 campo cien- tifico “encontra na ruptura continua o verdadeiro principio de sua continuidade” (p. 143). E que o campo prové permanentemente as condigées tacitas da discussao que se desenha entre a ortodoxia e a heterodoxia, entre o controle e a censura, por um lado, e ainvengao e a ruptura, por outro. Essa extensa reprodugao da analise do campo cientifico feita por Bourdieu justifica-se, a nosso ver, pelas seguintes razOes: 1) para criticar aqueles que apressadamente véem nas mudan- gas internas de uma “ciéncia normal” sempre sinais de “crise de paradigmas”; para impedir que se identifiquem automaticamente lutas ins- titucionais com lutas epistemoldgicas ou, dito de outro modo, as conquistas institucionais sao condigdes necessarias, porém nao garantem per se o fortalecimento tedrico de um campo; para evitar que se confunda 0 subcampo do ensino (reprodu- ao) com o subcampo da pesquisa (produgao) dentro do campo académico. 2 3 Acreditamos que esse delineamento basico ajudaré a esclarecer a questao da disciplinarizagao do campo da comunicagao.