La musica religiosa del Renacimiento tardio y la Reforma 331
vo», para que «la casa de Dios pueda ser llamada, con justo derecho, casa de
oracién» (véase el recuadro). Se dejé la labor de aplicar esa directriz en manos
de los obispos de las didcesis y se nombré una comisién especial de cardena-
les encargada de supervisar su ejecucién en Roma. El concilio no tocé aspec~
to técnico alguno: no se prohibieron especificamente ni la polifonia ni la
imitacién de modelos profanos.
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Canon sobre la musica que se usard en la misa, Concilio de Trento
Todas las cosas deben de estar ordenadas de tal manera que las misas, se cele-
bren con musica o no, lleguen tranquilamente a los oidos y corazones de aquellos
aque las escuchen, cuando todo se gjecute com claridad y la velacidad correcta. En
TT caso de aquellas misas que se celebren con canto y érgano, que en ellas nada
profano se entremezcle, sino slo bimnos y preces divinas, Debe consttuirse todo
41 plan del canto segin los mados musicales no para que proporcione un placer
‘cio a los oidos, sino de tal forma que las palabras las entiendan claramente t0-
dda y at el covazin de los ayents se vea arrastrado a desear las armonias celesta-
les en la contemplacién del jtibilo de los benditos... También se desterrard de la
iglesia toda misica que contenga, bien en el canto oe la gjecucién del érgano,
cosas que sean lascivas 0 impuras.
Tomado de A. Theiner: Acta... Concilii tridentini..., 2 (1874): 122, mrad. en Gustave
‘Reese: La musica en el Renacimiento, Alianza Editorial, Madrid, 1988.
Durante mucho tiempo circulé, a finales de la década de 1590, una le-
yenda segiin la cual, cuando se insté al Concilio de Trento a abolir la polifo-
‘fa, Palestrina compuso una misa a seis voces para demostrar que el estilo
polifénico no era, en modo alguno, incomprensidn del texto.
La obra en cuestién era la que se publicé en 1567 con el nombre Misa del
papa Marcelo (véase el Credo y el Agnus I en NAWM 49). Lo que no esté
taro es su vinculacién exacta con el Concilio de Trento. Indudablemente,
sobre la decisiGn final del mismo influyé la miisica de Jacobus de Kerle (ca.
1532-91), compositor flamenco que en 1561 puso en miisica una serie de
preces specials (oraciones especiales) que se cantaron en las sesiones del conci-
lio y que, por su transparence escritura polifénica, frecuente uso del lenguaje