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Organizacion Mundial de la Salud Serie de Informes Técnicos No. 30 COMITE DE EXPERTOS EN SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR . Informe de Ja Primera Reunién Ginebra, 7-12 de agosto de 1960 Introduecién . Rasones para dar atencién especial al grupo de edad escolar... Lo que puede haserse por Ia salud del escolar......2+++++ Personal y adiestramiento necesarios para el servicio de higiene escola. servieios de higiene escolar. 3. Nuevos estudios 7 Conelusiones .. OFICINA SANITARTA PANAMERICANA Oficina Regional de la Organizacién Mundial de Ia Salud 1501 New Hampshire Avenue, N. W. 40 Ta traduccién e impresién de este Informe se hicieron con eargo al presupnesto de In Oficina Regionsl pars Ins Américas de la ORGANIZACION MUNDIAL DE LA SALUD COMITE DE EXPERTOS EN SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR Primera Reuntéa Miembros Dr. C. F. Brockington, Puncionatio Médico Sanitario del Condado, West Riding of Yorkshire, Wakeleld, Reino Unido (Previdente) Dr-B. C. de Castro, Méilieo Escolar, Departamento de Higiene Escolar, Muniei- palidad del Distrito Fedorel, Rio de Janeiro, Brasil Profesor J. H. de Huss, Soccién de Higiene Maternoinfantil, Departamento de Salud Pablica, La Haya, Potsos Bajos (Viee-Presidente). Srta, H. Lindquist, Enfermera Rsealar, Hstocolmo, Suecia, Dr. Dorothy B. Nyswander, Profesora de Edueacidn Sanitarin, Pacuela de Salud Piblica, Universidad de California, Berkeley, Calif, E.U.A. Dr. M. E, Wegman, Profesor de Pediatris, Universidad Hatatal de Louisiana, Nuove Orleans, La., E.U.A, (Relator), Observadores: J. Bowors, Soccién do Eduoncién Bésien, UNESCO, Paris Dr. F. W, Clemens, Jefe, Soccia de Nutricién, OMS (en representacion do Ia FAO), Srta. M. Fairchild, Divistin-de ‘Trabsjadores Jévenes y Mujeres, ILO. Srta, TL, M. Muckenzie, Divisidn de Actividades Sociales, Naciones Unidas, Nueva York. Asesores Regionalee de la OMS en Higiene Maternoinfantil: Dr. F. Gémer, Oficina Regionsl de las Américas, Washington, D. C., B.U.A. Dr. G. Mettrop, Oficina Regional del Mediterréuiea Oriental, Alejandrie, Exipto Dr. Jean M. Orkney, Oficina Regional Provisional del Pacifico Oceidental, Hong Kong, Ching. Dr, Cicely D. Williams, Oficina Rogional para Asia Sudeste, Nueva Delhi, India, Seeretarta: Dr. U. Hjiene, Cansultor en Higione Matornoinfantil (Higiene Beeolas), OMS (Secretaria). Dr. L. Verhoestraste, Jefe, Seccién de Higiene Maternoinfantil, OMS. COMITE DE EXPERTOS EN SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR Informe de la Primera Reunién' La Segunda Asamblea Mundial de la Salud reconocié la importancia de Ja salud de los nifios de edad escolar y aprobé el programa de la OMS para 1950, el cual inclufa la reunidn de un Comité de Expertos en Servicios de Higiene Escolar? Hl Comité de Expertos en Servicios de Higiene Escolar se reunié en sesiones plenarias y grupos de trabajo en Ginebra, del 7 al 12 de agosto de 1950, inclusive. Abrié la sesién el Director General de lx Onganizacién Mundial de la Salud, Dr. Brock Chisholm. 1 Introducci6a En sus deliberaciones el Comité consideré que era imposible preparar uun extenso iniforme dentro del tiempo fijado y decidié, por lo tanto, que su primera tarea debia cousistir en preparar una breve descripcién de las normias y procedimientos bésicos, aunque no fuera completa. Bsas normas debian ser aplicabies a diferentes paises y a diferentes zonas dentro de cual- quier pais; a las amadas zonas poco désarrolladas asi como a las téenica- mente mas desarrolladas, Muchos paises han preparado manuales bastante satisfactorios sobre higiene escolar, adecuados a su propia situacién, y debia estimularse a los otros para que hicieran lo mismo. Bs de esperar que esos manuales, siguiendo buenas practicas administrativas, se preparen con la cooperacién de aquellos miembros del personal que han de llevar a cabo las disposiciones del manual, el que estard sujeto a revisién constante a medida que se dispone de nueva informacién y surgen nuevas ideas. BI Comité se dedies al estudio del problema de la salud del niffo de edad escolar. Aunque los servicios de higiene para los nifios de este grupo se orgsnizan usualmente en cooperacién con el sistema escolar y se refleren sellos como “servicios de higiene escolar,” existen algunas partes del mundo 1B Consejo Ejecutivo, en su séptima sesién, aprobé la siguiente resoluciéa. El Consejo Bjecutivo, Después do estudiar ol informe del Comité de scolar, en su primers reunién, 1, Da las gracins a los miembros del Comité por eu trabajo; 2. Autoriza la publieaeiéa del informe 3. Recomienda que se disponga Ia distribuctin adecuada, y 4, Considera que el Comité ha euzaplide la tarea que le fué asignada, (Resolucién EB7.R62, Of. Ree. World Hth, Org. 82.) * Off. Rec, World Hith, Org. 21, 152. Expertos en Servicios de Higiene 5 6 SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR donde se carece de escuelas 0 las que hay son inadecuadas y para esas egiones no es posible erear un servicio organizado en esta forma, El Comité decidi6, por Jo tanto, limitar sus debates a las comunidades que cuentan con algdn tipo de escuela o sistema escolar. Hsto incluirfa guar- dersas-escuelas, asi como también esctelas para nifios de més edad. Debo notarse que cualquier clase de trabajo de higiene que se Heve w cabo en zonas que carocen de escuelas, debe comprender el estudio de las nooesi- Gades de higiene de los nifios de edad escolar como parte de todo el programa de higiene de una comunidad, Al Comité le agradaria agregar, sin em- bargo, a riesuo de insistir en lo que resulta obvio, que los mismos puntos citados més adelante como necesidades y oportunidades especiales do Jos niios de edad escolar en materia de higiene, constituyen argumentos adicionales para el més répido establecimiento de escuelas en aqucllas zonas quo carecen de ellas. Ademés, el Comité reconocié que la cantidad relativa de recursos médicos ¥ de salud priblica a disposicién de los nifios de edad escolar variaré de ‘souerdo con los problemas de la higiene de cada comunidad. La distribucién de servicios debe hacerse después de estudiar las nocesidades y condiciones locales, pero el Comité llamé la atencién hacia el hecho de que la eseucla, como unidad social, freeuentemente ofrece oportunidades para introducit servicios de higiene para los nifios, que la comunidad comprende y acepta, Estos servicios ofrecen grandes posibilidades para que se desarrolle confianza ¥ 8 acepten otras medidas de salud publica. 2 Razones para Dar Atencién Especial al Grupo de Edad Escolar La seleccién de un segmento de Ta poblacién para proporcionarle ser- vieios especiales de higiene, supone comprensién clara de las razones que existen para esa selevcién. Los nifios de edad escolar deben considerarse como un perfodo de la vida de toda. Ia poblacion. Durante este perfodo todos los nitios estan expuestos a ciertas situaciones y tienen que pasar por fases de desarrollo que requieren observacién cuidadosa. Ademés, los problemas de higiene de los nifios, junto con el drama de su crecimiento biolégico, oftecen oportunidades para educar a los padres y conciudadanos sobre las responsabilidades que Tes corresponden de ofrecer su cooperacién dentro de Ia eseucla y de la comunidad para ayudar al nifio a alcanzar su estado do salud méxima, Esas necesidades y oportunidades, aunque varfan en magnitud, son bésicamente iguales para todos los nifios de edad escolar preseindiendo de raza, clima, situacién googrifica, escuela a In que asisten, o estado de desarrollo técnico del pais y la comunidad, Las razones especiales mencionadas se estudian bajo cuatro epfgrafes PRIMERA REUNIGN 7 gonerales en Jos cuales deben basarse los programas de higione de los nifios do edad escolar. 2.1 Orecimiento y desarrollo Los nifios se hallan constantemente en evolucidn. Esta evolucién se manifiesta de muchas maneras—fisioa, mental, emocional y social, Durante Jos primeros afios de escuela, el crecimiento sigue un paso relativamente uniforme, pero después los problemas de Ia. pubertad y el salto a In adoles- cencia, frecuentemente eausan dificaltades. En esta situacién dindmica el curso de la evolucién puede ser infiuldo positivamente hacia el mejo-, Tamiento, tobrepasando el estado tedrieamente promedio o negativamente, por medio de la aparicién de enfermedades, incapacidad y defectas. ‘Las medidas preventivas comenzadas durante el perfodo de crecimiento pueden ejercer influencia beneficiosa para el resto de la vida y puoden evarse a cabo con més facilidad que si se espera hasta que se haya com pletado el crecimiento Debe prestarso atencién a los problemas del erecimiento y correcto desa- rrollo fisicos, la aptitud, inmunizacion adecuada contra las enfermedades transmisibles, y el equilibrado desarrollo y adaptacién emocional y social. Resulta claro, por lo tanto, que el conoeimiento de los principios funda mentales del proceso del crecimiento, de acuerdo con estudios prolongados en individuos y grupos, es esencial para poder planear un programa de higiene escolar bien equilibrado. 2.2 Esfuerzo, tensién y contagio Para la mayor parte de los nifios la escuela es la primera experiencia de la vida en grupo, fuera de su propio hogar. Forman parte de una situacién en la cual Ia competencia juege papel principal. Los nifios reaccionan de modos diferentes al esfuerzo y a Ia tensién que impone una atmésfera de competencia. La respuesta individual del nif, agresiva o de retraimiento, equiere comprensién por parte de todos los que con él trabajan, AAdemés, el hecho de reunir a los nitios en grupos atumenta el peligro de la ‘ranemision de enfermedades. Aunque la eaeuela en este sentido encierra peligro, resulta al mismo tiempo un lugar ideal para la colaboraciin efee- tive en un amplio programa eclectivo do lucha contra las enfermedades transmisibles. Otro peligro lo ofrecen los accidentes, cause importante de muerte e ‘ineapacidad en este grupo de edad. La excitacién del juego en grupos y las istancias que tienen que recorror para asistit a la escuela, son factores contribuyentes, Debido a esta exposicidn a esfuerios, tensién y contagios, los problemas 8 SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR de salud mencionados.ofrecen Ia oportunidad de planear programas co- operatives de higiene de la comunidad, a fin de erear un ambiente en el cual Ios riesgos se reduzean al mfnimo. 2.3 Responsabilidades y oportunidades educativas Para que el aprendizaje sea efectivo, los nifios necesitan gozar de buena salud. Los defectos de la vista y del ofdo y muchos otros impedimentos pueden hacer muy dificil el aprendizaje. La oportunidad de proporcionar educacién higiéniea equilibrada, junto con el aprendizaje, es enorme. La nsefanza de Ia higione debe entrelazarse con la ensefianza de todas las Iaterias. Ademés, Ia enseftanza de la higiene en las escuelas tiene im- ortante corolario. Cuando se educa al nifio en materias de higiene, é 4 su vez puede ejercer influencia sobre sus padres y familiares de modo ventajoso, y cuando lege a la edad adulta y crea un hogar puede esperarse que sus hijos posean mejores conocimientos con respecto a Ia salud. La escuela que cuenta con los servicios de una enfermera de salud piblica, osee mejores oportunidades de ensefianza, Fn su contacto eon los padres ¥ en sus visitas domiciliarias la enfermera puede practicar la ensefianza en un cuadro familiar especialmente reeoptivo al aprendizaje. En las zonas ‘téenicamente poco ‘desarrolladas, el maestro puede ser la vnica persona que ejerza infiuencia sobre el nifio y sobre toda Ia comunidad en materias de higiene. Debe recalearse que Ia edueacién en higiene significa mucho més que conferencias, ejercicios en clase e instruceién oficial organizada. Los cono- cimientos de higiene y los hébitos higiénicos se adquieren més facilmente ¥ se convierten en parte de la preparacién del nitio para vivir, cuando se han obtenido por experiencia propia en el cuidado personal y la higiene de Js colectividad, durante los afios escolares. Tl ejemplo de los adultos y el ambiente saludable son poderosas inffuencias educativas. ‘Ya sea en las escuelas 0 en otros Ingares, los médicos y las enfermeras cuando trabajan con nifios estén constantemente desempetiando su impor- tante funcién como maestros por medio de los preceptos y el ejemplo, aun cuando no se den cuenta de ello. 2.4 La escuela como wnidad de la comunidad Te escuele juega un importante papel en Ia estructura social de la comu- nidad. La interrelacién entre la escuela y el hogar del nitio no solamente conduce a la ensefianza de la higione sino que facilita considerablemente un programa organizado para el mejoramiento de la salud, su evaluacién y su restablecimiento, De este modo la escuela ejerce influencia no slo sobre las familias de los propios estudiantes sino sobre toda la poblacién de la zona. El maestro, como persona respetada en la comunidad y como PRIMERA REUNION 9 miembro importante en la vida del niflo, puede iniciar y participar en los planes para los programas de higiene. Asi resulta claro que un sistema ‘organizado de escuelas constituye una estructura bien preparada para evar a cabo un programa efectivo de supervisién higiénica que puede aleanaar y afectar a gran mémero de personas. 3. Lo Que Puede Hacerse por la Salud del Escolar El desarrollo de un servicio de higiene escolar se discutiré bajo cuatro epigrafes principales—planeamiento, mejoramiento de la salud, evaluacién de la salud y restablecimiento de la salud, en los que naturalmente no ‘encajan ciertas secciones adicionales sobre detalles de importancia, 8.1 Planes para el servicio de higiene escolar El Comité estimé prudente, tomando en cuenta su contenido, estudiar programas adecuados tanto para las zonas técnicamente poco desarrolladas como para las més desarrolladas, comenzando con un breve repaso de Ia ‘base histérica de los servicios de higiene escolar. Las primeras poderosaa influencias—el deseo de hacer algo sod la propagucidn de las enfermedades ‘ransmisibles, de descubrir la causa del mal estado fisico en posibles reclutas del ejército y corregir las dolencias causadas por la vida escolar obligatoria —determinaron en gran parte las normas de la mayor parte de los servicios de higiene escolar actuales. ‘Toda vez que esos eslmulos resultaban en gran parte “negatives” en cuanto a que conducfan a programas tendientes a desoubrir la enfermedad y los defectos, con frecuencia ha resultado diffcil cimentar sobre ellos una sélida estructura de supervisién higiénica des- ‘tineia a fomentar el mejoramiento de la salud y a obtener toda la ventaja de las posibilidades de ensenar higiene “positiva” al nino y a la comunidad. El Comité acordé que aun en zonas que no cuenta con programas de hic tiene organizados, es de gran importancia el hacer planes adecuados para los servicios de higiene escolar, y que un programa bien equilibrado, a deter- minado plazo puede producir resultados satisfactorios, mayores a medida que la zona se desarrolla. Muchos programas que ya existen han recibido varias influencias ¥ posiblemente no estén bien equilibrados y so benefi- ciardn con el examen erftico y el andlisis de los objectivos alcanzados y los rocedimientos seguidos. En algunas partes del mundo los trabajadores sanitarios tienen que enfrentarse con vastas zonas en las que existe una formidable incidencia de enfermedades endémicas y epidémicas, ausencia casi absoluta de sanea- miento e ignorancia de la higiene personal y coleetiva. Existe, por lo tanto, gran oportunidad para efectuar campafias de tratamiento en masa y para organizar programas de saneamiento, pero tales programas, por sf solos, resultan unilaterales. Debe sefialarse que el mejoramiento més duradero 10 SHRVICIOS DE HIGIENE HSCOLAR en Ia higiene publica e individual se obtione a través de los cambios de sotitud y de una mayor comprensién del pueblo; en breves palabras: por medio de Ia educacién. La comunidad debe contribuir en todo lo posible por medio de una accién coordinada y se debe evitar, por otra parte, que intervenga sin previa orientacién. Los planes coordinados que son reali- 2ados por médicos, enfermerss y otros trabsjadores sauitatios, junto eon especialistas en agricultura y maestros, pueden conducir a esos fines. Las recomendaciones de programas minimos adecuados, cuando los recursos son escasos, pueden ser mal interpretados. Preoeups al Comité elhecho de que lo mfnimo aconsejable pudiera interpretarse como lo dptimo. Ademés, se estudié minuciosamente In mejor manera de presentar los Programas en sus diferentes etapas evolutivas y su posible desarrollo. Se acordé que toda vez que un programa bien equilibrado es importante en todas las etapas de su desarrollo, debfa hacerse todo lo posible por pre- sentar un programa mfnimo bien integrado, y que su desenvolvimiento podria ilustrarse por medio de la serie de actividades factibles en su posible expansién. Al trazar los planes se ha insistido, en primer Iugar, en. que los servicios de higiene para nifios de edad escolar deben organizarse en forma coopera- tiva. Los planes representan programas de conjunto, en los que toman parte los padres, 1a comunidad, los grupos profesionales, Jos organismos socisles y todo aquel interesado en el bienestar del niffo. En los planes or lo tanto, deberé incluirse todo el que vaya a tener alguna relacién con el programa. Les personas que toman parte en los planes desde el comienzo, forzosamente porseen mayor comprensién de los objetivos, nor- moas y metodologia. La organizacién de un consejo de higiene para dar forma 4 los planes mutuos ha demostrado ser de gran ayuda en las zonas que cuentan tanto con servicios minimos como con servicios mejores, Es innecesario recalear que los planes deben tener por base la situacién local y no una norma estereotipada. Un buen ejemplo de organizacién efectiva lo ofrece ln integracién de os servicios de higiene escolar con otros servicios tales como los que se proporcionan a lactantes y nifios de edad pre-escolar, Ins actividades de los Aepartamentos de salud pébliea y los servicios ofrecidos por los médicos generales y hospitales. La supervisiOn del crecimiento y desarrollo para ser efectiva requiere continuidad. Un programs. de servicios de higione para escolares debe ser una continuacién directa de los servicios pre-escolares y correlacionados de tal modo que el beneficio de Ja informacién sobre el niffo, acumulada durante el perfodo pre-escolar, pueda utilizarse en el pro- grama de higiene escolar. PRIMERA REUNIGN uw 3.2 Mejoramiento de la salud del escolar ‘Por mejoramiento de la salud se entienden aquellas medidas generales relacionadas directamente con la salud de los nifios en la escuela: higiene ambiental, programa de alimentacién escolar, horario de Ia escuela, control de seguridad, supervisién de la salud del personal escolar, programa de control de las enfermedades transmisibles, actividades fisicas bajo super- visién, mejoramiento de Ja higiene mental y correcta ensefianza de la higiene Hasta donde se puede desarrollar cualquiera de esas importantes medidas snderé de los recursos de la. comunidad. Por otra parte, aun en las con- diciones més limitadas, pueden iniciarse todas y los principios generales que gufan ls iniciacién del programa continuarén aplicéndose a medida que mejoran los recursos. 3.21 Higiene ambiental. Las necesidades primordiales son el abastecimiento de agua potable para consumo y la disposicién adecuada de las excreta humanas. Un manantial bien protegido o receptaculos perfectamente lim- pios para la conduccién del agua pueden resultar mucho més segutos que las tuberias y llaves de agua con conexiones cruzadas. Igualmente una letrina bien construfda y limpia puede resultar mucho més segura y de mayor valor educativo fundamental que un servicio de porcelana y mosaicos que se deje ensuciar. Se dice muchas veces que las communidades rurales con recursos limitados pueden hallarse en situacién muy desventajosa desde el punto de vista del saneamiento ambiental. Aunque puede que asf sea con respecto a comodidades y bienestar oestética, es perfectamente posible que esa comu- nidad posea condiciones satisfactorias de seguridad y pueda fomentar las buenas précticas de higiene. Ademés, en una comunidad pequefa, la po- blacién suele ser de interdependencia suficiente para que resulte relativa- mente fécil conseguir ayuda voluntaria y eooperacién para la construecién de facilidades sencillas, pero adecuadas. Una gran cantidad de edificios escolares dejan mucho que desear y desgraciadamente muchas nuevas construceiones ineurren en viejos errores Los distritas ricos no poseen necesariamente buenos edificios escolares y algunas zonas pobres no han proporeionado sus liraitados fondos para ase- gurar el minimum posible de beneficios de higiene, Donde existe mala cons- truccién, poca ventilacién y luz, falta de medios para lavarse, sanitarios defectuosos o deficiencias semejantes, los nifios adquirirén ideas errSneas ¥y hébitos perjudiciales que quizas no Hleguen a corregir nunca. Es de pri- mordial. importancia obtener asesoramiento de las autoridades de salud publica al proyectar nuevos edificios para esouelas o la reconstruccién de Jos antiguos, R SERVICIOS DE HIGIENE, BSCOLAR Este informe no puede presentar las numerosas fases do la seguridad y valor educativo del buen ambiente higiénico. El Comité recomendé que cada pas recopile normas apropiadas a las condiciones locales, pero en- ‘caminadas a satisfacer los requisitos nevesurios de higiene y educacién para Ios nitios. 3.2.2 Aspectos nutricionales de Ia higiene escolar. La nutricién correcta esté estrechamente relacionada con el adelanto en la educacién; mientras peor es Ia nutricién, més dificil es para el nifio aprender y adaptarse a la vida de Ia escuela, La desnutricién es un serio obstéculo para el mejo- ramiento de la salud fisiea y mental. La educacién, a su yer, es de im- portancia para asegurar una nutricidn correcta para el nifio y para la comunidad. En todos los pafses, pero especialmente en los que el grado de desnutricién es considerable, la escuela puede ser una fuerza potencial para atacar el problema a través de Ia familia y de la integracién de planes para mejorar la nutricién del pre-escolar. Resulta obvio que toda en- sefianza relativa a Ja alimentacién debe guardar relacién positiva con los alimentos del pats. La alimentacién de los escolares debe revisarse a la luz de estos prin- cipios. Todo proyecto de alimentacién escolar debe ir acompatiado de la educacién sobre los principios de la nutricién relacionados con el alimento ‘que se utiliza. A fin de llevar a cabo esta labor, los maestros necesitan tener preparacién adecuada, En algunos paises se ha encontrado que los pro- gramas bien organizados de alimentacidn escolar han resultado de indudable muchas veces inapreciable valor, para mejorar el estado de nutticién no? sélo de Is poblacién escolar, sino de toda la nacién. El Comité no estimé justificado juzgar por esos Gxitos que el suministro de alimentos en las escuelas daria los mismos resultados efectives 0 convenientes on todas partes. Mucho depende de las condiciones y hibitos locales. iste el peligro, por ejemplo, sobre todo en las zonas con abastecimientos mfnimos de alimentos, que los padres consideren que la comida que suministra la escuela es suficiente 0 casi suficiente para todo el dia. Siempre que esto ‘ccurre, los beneficios que proporciona la comida escolar pueden anularse por la inanicién virtual en la case, El Comité estimé, sin embargo, que las escuelas, especialmente en Ins zonas de bajo estado econdmico, donde In nutricién probablemente es mala, tienen una funcidn muy importante al proporcionar los elomentos nutritivos necesarios por medio de la alimentacién escolar, El Comité se enters con interés de los estudios y trabajos realizados por Ja Organizacién de Alimentacién y Agricultura (FAO), en colaboracién con el Fondo Internacional de Socorro a la Infancia de las Nacionos Unidas (ONICEP), en el desarrollo de proyectos de alimentacién escolar, y elogis PRIMERA REUNIG: 18 Jn estrecha cooperacisn existente en este campo entre In OMS, FAO y otros ‘organismos internacionales. 3.28 Bl dta escolar, Tos prerrequisitos para el crecimiento fisico éptimo jncluyen alimentacién adecuada, aire libre, ejercicio, descanso y stefo. Para sa desarrollo general, el nifio que crece necesita, ademés, trabajo ditigido, responsabilidad, getividad social y un hogar cooperative con padres comprensivos. Necesita también tiempo para si mismo-—para jugar, trabajar y edquirir experiencias por medio de las euales puede desarrollat un sentido de dignidad personal. Durante los afios de In. escuela el nifio pasa una parte considerable de su vida bajo Ia jurisdiceién de las autori- dades escolares. Que las muchas necesidartes del nifio puedan o no ser satisfechas por la escuela, depende en gran parte de la sabia distribucién del dia escolar. El programa diario para los escolares puede variar de una zona geo- ‘grifica a otra, pero en todas debe planearse el dia. con clara comprensién de las nevesidades particulares del nifio en cuanto a higiene y crecimiento. ‘La parte de las 24 horas que se asigna a estudios y lecciones normales, inclusive la tarea para la casa cuando sea conveniente, debe tomar en cuenta las necesidades mfnimas del nifio en cuanto a suelio y a su “vida personal”. Naturalmente, a norma de “vida personal” variaré mucho de una cultura a otra, asf como la norma de educacién y de vide familiar. La “vida perso- nal” comprenders, en diversas proporciones, vida familiar, social, aficiones, recreo, deportes, exploradores o clubes, tiempo libre, comidas, transporte yy otras actividades informales o planeadas en Ia casa o en la escuela, que desarrollen el crecimiento fisico y el ajuste mental, social y emocional del nifo. Debe tenerse en cuenta que a fin de preparar un horario escolar con éxito debe haber la més estrecha cooperacién entre la escuela y el hogar. Solamente cuando los padres y maestros trabajan conjuntamente en pro de Jos intereses del nifio, puede la educaci6n alcanzar resultados permanentes, Otro factor que afecta la salud de los nifios, y sl que con demasiads fre- euencia se presta poca atencin, es el “ambiente emocional” del aula, La personalidad afectuosa del maestro, los procedimientos liberales en Ia clase y la sabia administracién de las prucbas, grados y promociones, con- tribuyen al estado de énimo del nifio y sus sentimientos hacia la escucla. 3.2.4 Control de la seguridad. Una causa importante de muerte entro los nifios, en algunos paises la causa principal, son los aceidentes La exube- rancia de los juegos juveniles, la falta de precauciones, la falta de aprociacién, de los riesgos que corre, el deseo de ganar en competencia, el peligro del ‘réfico cuando se dirige al colegio y al regresar, todo aumenta Ia posibilidad de accidentes. Los programas de higiene escolar deben .comprender dis- 4 SERVICIOS DE HIGIENE RSCOLAR Posiciones para la revisién de las medidas de seguridad en Ia esoucla y us alrededores, eliminacién de peligros que puedan descubrinse y, de funda- ‘mental importancia, edueacién en las medidas de seguridad y en Ia pre- vencién de accidentes. A pesar de todas las precauciones ocurrirdn accidentes mientras el nifio esta on la escuela. Debe establecere un plan escrito, bien comprendido, para cuando ocurran tales emergencias (inclusive enfermedad repentina) con provisién de medics para prestar los primeros auxilios esenciales, solicitar ayuda médica cuando sea necesario y notifieacién a los padres. 3.2.5 Supervisién de la salud del personal escolar. Los maestros y otros ‘trabajadores en contacto con los escolares pueden hacer mejor labor si dis- frutan de buena salud. Ademés, las oportunidades para diseminacién de la enfermedad por el contacto entre grupos que son parte de la vida escolar (mencionados en la seccién 3.2.6 sobre control de enfermedades trans- misibles) puede aplicarse al personal adulio de la escuela, ast como a los alumnos. A fin de asegurar la salud méxima al personal escolar, y protegerlo al igual que a los nifios, es importante disponer de un servicio de higiene del personal. Las medidas reconocidas para examen de la salud personal, tales como radiografias torécicas y examenes fisicos, constituirdn parte regular de este servicio, El personal que manipuls slimentos, ya sea pagado © voluntario, debe cumplir estrictamente con los requisitos oficiales que se exige a los manipuladores de alimentos. 3.2.6 Control de enfermedades transmisibles. El control de las enfermedades ‘transmisibles ha sido siempre una de las principales preocupaciones de las escuelas y de los trabajadores de higiene escolar. El népido cuidado del nifio enfermo, la proteceién de sus condisefpulos y profesorado, la partici- pacidn en los programas de la comunidad para medidas preventivas espeetficas tales como las inmunizaciones y cumplimiento de la funcién de la escuela como centro de educacién, han sido siempre Ins razones funda- mentales. Comité no intenté ocuparse de enfermedades en lo particular. Otros comités de expertos de la OMS se estén ocupando de ello y se espera que estudiarin debidamente los problemas especiales prosentados por la orga- nizacién escolar al discutir el lugar que ocupa la escuela en los diversos programas de control. Es importante que las escuclas estén preparadas para cambiar sus reglamentos a medida que se hacen adelantos cientificos, Con frecuencia excesiva se contintian prictieas que requieren mucho tiempo ¥ que estn ya en desuso, E] Comité quiso, sin embargo, presentar algunos prineipios generales. Creo firmemente que In administracién de programas de lucha contra enfermedades transmisibles debe ser responsabilidad que PRIMERA REUNION 15 compete a las autoridades do salud piblica y que las autoridades escotares deben dirigitse al funcionario de salud piblica para orientarse en este trabajo. La integracién del servicio de higiene escolar con el servicio general de higiene de la comunidad, indicado en la secci6n 8.1, al hacer planes para elservicio de higiene escolar, debe ineluir este objetivo. Cada sistema escolar debe desarrollar sus reglamentos en estrecha colaboracién con el funcionatio de sanidad y con debida consideracién a las normas nacionales ¢ inter- nacionales. La ocurtencia de epidemias presenta un problema dificil. Si una escuela debe permanecer abierta o debe cerrarse, dependeré del carfoter de la en- fermedad, la ubicuidad de In infeccién, In posibilidad de que los nifios se retinan tanto si las escuelas estén cerradas como si asisten a ellas, Ia ventaja de tenerlos bajo el ojo observador del maestro y Ia enfermera y no de temores sin base cienttfiea ‘Las Hamadas “enfermedades transmisibles menores” como sarna, pedi- calosis, tifla,etc., en algunas zonas pueden ser de la mayor gravedad. Afeo- tan la asistencia a la escuela y entorpecen seriamente la capacidad del nifio para concentrarse en sus lecciones. Deberan hacerse gestiones encaminadas 2 proporeionarles tratamiento, el que quizés sea necesario aplicar en la misma escuela, Un programa efectivo de prevencién depende de que el ptiblico esté bien informado. Los servicios educacionales y preventivos que se da a los nifios de la escuela deben estar orientados también hacia Ia educacién de los adultos. El eonocimiento de las medidas preventivas por toda Ia comunidad debe ser la meta de la educacién. La informacicn errénea en los periddieos, Js supersticiones de épocas pasadas, y la adhesin a métodos ya desacredi- tados deben ser combatidos vigorosamente en un buen programa educa- ional Por la misma razén que la escuela es el centro de fomento educacional en la mayoria de las comunidades, desempefia un papel nico en la dise- ‘minacién de conocimientos sobro las enfermedades transmisibles. El msestro puede ejercer influencia sobre los nifios y los padres a fin de que tomen medidas preventivas o sigan una Iinea directa de accién orientada para detener el curso de numerosas enfermedades. Un propésito comin y comprensible de la mayor parte dé las escuelas es el perfecto registro de la asistencia, Frecuentemente es deseable y nece- sario estimular la asistencia a In escuela, pero es un error levarlo, como sucede frecuentemente, hasta ol extremo de que los aluimnos asistan a Ja escuela a pesar do presentar sintomas o signos de trastornos inminentes. ‘Toda vez que un corclatio de este problema es la infeccién de las vias respiratorias superiores, se sugieren dos temas de investigacién: {Bs bene- ficioso para el nifio separarlo répidamente del colegio? {Hasta dénde debe 16 SERVICIOS DM HIGIENE ESCOLAR extenderse la educacién en higiene con respeoto a las infecciones de las vias respiratorins? 8.2.7 Supervisién de actividades fisieas. La edwcacién fisiea de los nifios de edad escolar sitve numerosos propésitos. Contribuye al mejor crecimiento y desarrollo, ofrece una vélvula de escape a la nevesidad de actividad Fisica del nifio, ayuda a estimular la coordinacién muscular y la buena postura y en general mejora la aptitud fisica. Ademés, un programa bien dirigido de actividades fisicas, estimularé el sentido de trabajo en grupos y el sentido de equidad proporcionaré al nifio timido la oportunidad para expresarse y ayudaré al nifio resuelto a dominar su intrepides. Los pro- fesores de educacién ffsica preparan sus programas teniendo en cuenta estas consideraciones. El interés médico en los programas tiende a dirigirse a ciertos problemas especttficos: (1) El examen, con el consejo de especialistas adecuados cuando sea necesario, es importante para decidir a extensién de Iss actividades que emprenderé cada alumno individualmente y planear los programas modi- fieados que necesitan algunos nifios. En algunas zonas del mundo donde prevalece la desnutricién debe tenerse cuidado de no recargar demasiado al limite de resisteincia fisica, (2) Debe estimularse la participacién de los escolares en actividades fisicas adecuadas y combatir le tendencia de algunos médicos de dar notas viidiendo que se excuse a los alumnos de toda actividad fisica (8) El programa de estudios de la escuela debe ofrecer un periodo libre © que no requiera gran concentracién, inmediatamente después del periodo de ejercicio fisico. (4) Los edificios escolarse deben proyectarse de tal modo que estén provistos de facilidades para lavarse, si es posible baiios de ducha, para usarios después de las actividades ficicas agotadoras. (5) De ser posible, el programa de educacién fisica comprenderé fisio- terapia de los problemas mrisculoesqueléticos. Para este fin es esencial la estrecha cooperacién de ortopédistas y fisioterapeutas con el resto del servicio de higiene escolar y las autoridades de educacién, (6) Bl exeeso de atencién de las estrellas en atletismo puede distruer la atencién que reguieren los otros alumnos. Los atletas, generalmente entre los segmentos més saludables de Ia poblacién escolar, no deben recibir una parte desproporcionada de los servicios de higiene disponibles. 3.2.8 Promocién de la higiene mental. A fin de obtener toda la ventaja de In gran oportunidad que oftece el trabajo de higiene escolar para la promocién de la higiene mental y el descubrimiento de problemas psicolé- PRIMERA REUNION 7 ggicos en los nifios, a edad temprana, cuando es fécil que respondan al tratamiento, hay que vencer tres obstaculos comunes. Primero, muchos trabajadores de higiene escolar frecuentemente mues- tran falta de interés en los aspectos psicolégicos de los problemas de salud del nifio. Es mucho més fécil para ellos concentrarse en los defectos ffsicos y en Ia enfermedad, para los cuales el tratamiento suelo ser més sencillo, ‘que en Ja atencién de los problemas emocionales. Despertar verdadero interés cuando éste no nace espontdneamente es diffe. Requiere la demos- tracién de casos y Ia ilustracién espectfica del impacto de los factores emocionales en Ia situacién de la escuela local. En segundo lugar, aun aquellos trabejadores de higiene escolar intere- sados en Ios aspectos de la higiene mental en su trabajo, con frecuencia se hhan sentido may entorpecidos por Is falta de preparacidn adecuada, El Comité, por lo tanto, agradecié la iniciativa tomada por el Comité de Experios de la OMS en Educacién Profesional y. Técnica, de reeamendar que ‘un ndmero mayor de escuelas de salud plibliea incluyan la higiene mental como tema de eleceisn en el adiestramiento postgraduado de médicos para ‘trabajo de salud piblica* Es también digno de encomio que en ciertos paises el programa de estudios para enfermeras de salud pitblica haya sido revisado en afios recientes a fin de incluir adiestramento més amplio en esta materia, Pero la revisién del programa de estudios en instituciones de adiestramiento influiré en las précticas generales del trabajo de higiene escolar solamente tras un prolongado perfodo de tiempo; es igualmente importante que el adiestramiento “en servicio” se comience sin demora. Un de los principales objetivas de ese adiestramiento debe ser crear una fctitud que haga al funcionario médico escolar y a la enfermera escolar comprender Ia trascendencia de los problemas de higiene mental en la nifiez, juzgéndolos no solamente desde el punto de vista de su trabajo lfnico, sino en la evalueaidn tanto de sus prdcticas propias como del am- biente escolar general. El adiestramiento ha deser una experiencia formativa més bien que el simple hecho de impartir conocimientos: esa ensefianza debe tener base clinica, pero hay lugar para la experimentacién con numerosos métodos diferentes, especialmente aquellos que pueden dar a los trabaja- ores de higiene la pereepcién de sus propias reacciones ante los problemas de higiene mental de otros. La revisién periddiea de todos ls procedimientos de higiene escolar en términos del impacto de la salud mental sobre los padres y el niflo, aunque usualmente se omite, es esencial. Hl adiestramiento debe comprender el criterio que se ha de utilizar en esta sutoevaluacién ¥ ejemplos de los defectos mAs frecuentes. El Comité tomé nota y agradecié Ia intencién del Comité de Expertos * World Hlth, Org. techn. Rep. Ser. 1950, 2, 18, 18 SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR en Higiene Mental, de dedicar su préxima reunién a la cuestién del adies- ‘tramiento en higiene mental de los trabajadores de salud piblica, y ex- presé Ia esperanza de que este Comité haga recomendaciones especificas con respecto al adiestramiento, en este sentido, de los trabajadores de hrigiene escolar. Ei tercer obstéculo que existe es que el trabajador de higiene escolar interesado en los problemas de higiene mental del nifio, no puede tratarlos por sf solo. Es imprescindible el trabejo conjunto de los maestros, traba- jadores de higione escolar, clinicas de orientacién infantil y servicios sociales de Ia comunidad y, en un nivel més elevado, de las autoridades de educa- cin, sanidad y bienestar social. Hay que admitir que en algunos casos la rivalidad profesional y departamental ha impedido el desarrollo de ose trabajo en grupo. Los trabajadores de higione, siempre que su trabajo tenga por base el respeto a la individualidad del nino y Ia de sus padres, pueden omar la iniciativa para desarrollar ese trabajo conjunto, recordando que en ‘al grupo el maestro tiene un papel clave. En la creacién de un ambiente escolar, de efecto més bien favorable que desfavorable sobre Ia salud mental de los nifios, Ia responsabilidad debe residir en el maestro, pero el traba- jador social tiene el deber de wetuar como colaborador y asesor del maestro en el cumplimiento de esta responsabilidad. El maestro tiene también tuna oportunidad mucho mayor que el trabajador de higiene escolar para reconocer Ia existencia de problemas psicolégicos en el nifio. El ayudar a evaluar esos problemas y asesorar al maestro sobre ellos, es con frecuencia responsabilidad bésica del servicio de higiene esoolar. Por otra parte, sélo mediante la mAs estrecha colaboracién con el maestro puede cumplirse debidamente esta responsabilidad. Requiere la técnica de tratar el caso en conferencia més bien que en consulta aislada. El adiestramiento debe capacitar a los trabajadores de higiene escolar Para aconsejar sobre la atencién de los problemas emocionales menos complejos y también para reconocer los trastornos més graves, cuyo tratamiento necesita de los recursos de In piquiatria especializada en nifios. La disponibilidad de esta ayuda variaré, considerablemente en di erentes partes de] mundo, Pasardn muchos afios antes de que algunas re- sgiones cuenten con especialistas, En otras regiones puede que existan al- ‘unos recursos escasos ¥ es necesario hacer planes para su utilizaciin més efectiva, En general, cuando los recursos de psiquiatria infantil son limita- dos, es preferible concentrarse en el adiestramiento y orientacién de los trabajadores de higiene escolar antes de emprender el manejo de casos in- dividuales que requieren més tiempo. En algunas zonas urbanas las clinicas de orientacién infantil lenan parte ‘ Vénso informe de Ia segunda reunién del Comité de Expertos en Higiene Mental, World Hlth. Org. tech. Rep. Ser. 1951, 1. PRIMERA REUNION 19 de esas necesidades. Es probable que Ia inactividad de muchos servicios de higiene escolar en el campo de la higiene mental haya ocasionado el envio excesivo de casos a esas elinieas. Es importante, sin embargo, que el ‘péndulo no se incline demasiado al otro lado. Fl srvicio de higiene escolar debe ser responsable de la seleccién de easos, pero debe evitar la respon- ‘abilidad de tratar al nifio gravemente perturbado. Para mantener una seleceién adecuada de los casos que debe referir a la elfnica, el trabajador de higiene escolar establecers estrechas relaciones cooperativas con el grupo de especialistas de la clinica de orientacién infantil. Esta relacién debe ser efectiva, no sélo para el manejo de los problemas clinicos in- dividuales, sino para la aplieacién de Jos principios de higiene mental en todos los aspectos de la vida escolar Existe otro asunto para comentario, aunque no cae directamente dentro de Ia competencia de In OMS. En. pérrafos anteriores se ha recalcado Ia importancia del papel del maestro de escuela en la promocién de Ia higiene mental. El caricter general de las actividades del sula ejerce influencia poderosa en el desarrollo emocional del nifio, Hs importante, por lo tanto, que el adiestramiento de los maestros los capacite para desempetiar este papel. El Comité elogié ta iniciativa de la OMS al acercarse a la UNESCO para ofrecerle asistencia en caso que esta tiltima quisiera patrocinar una conferencia técnica para discutir el adiestramiento de los maestros de escuela en higiene mental.* El Comité expresé la esperanza de que el Director General de la UNESCO tomara sccién en este asunto y recomends firmemente quo si lo hacia asi, Ia OMS ayudarfa facilitando expertos en psiquiatria infantil ¢ higiene mental para participar en le conferencia, 3.2.9 Direccién de la educacién higiénica. Como se ha manifestado én otra parte de este informe, una razén importante para sostener un programa de higiene escolar consiste en las oportunidades que offece para ayudar a los nifios, durante sus afios de formacién, a comprender el significado de Ia salud y el modo de obtenerla y consérvaria, Que Ia educacién sobre salud forma parte integral de toda la vida escolar, so ha indicado ya repetidamente. ‘Noséloel maestro, sino el médico, la enfermera y otros miembros del personal escolar contribuyen a formar el criterio del nifio en cuanto @ su propia salud y a su conducta en ese sentido. Su influensia puede tener gran sleance. Por este motivo los trabajadores sanitarios profesionales, asf como los maestros, necesitsin examinar continuamente su Ifnea de conducta con los nifios, toda vez que lo que # un adulto puede parecerle contacto superficial o procedimiento de rutina, puede dejar una impresién duradera positiva 0 nogativa, en la mente y emociones del nifto. No puede recalcarse bastante "World Hith, Org. tech. Rep. Ser. 1960, 9, 15. 20 SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR la importancia de que los trabajadores de higiene escolar consideren que todo contacto con los alumnos es motivo de ensefianza. a ensefianza de Ia higiene necesita estar enlazada con las necesidades y experiencias de Ja vida diaria de los nifios, relacionada con sus cambios de intereses y con el ambiente social, cultural y econémico en que viven y crecen. Se insistird en lo seneillo y préctico tanto en la edueacién incidental como en la edueacién hygiénica planeada, Debe darse atencidn a la limpieza personal, del hogar, de la escuela y de la poblacién; el uso més efectivo de los comestibles disponibles; cultivo de jardines escolares y en el hogar; facilidades para tomer agua y para lavarse las manos; construccién de letrinas adecuadas, drenaje de lugares que sirven de criaderos de mosquitos; control de roedares ¢ insectos; efecto de las enfermedades y defectos fisicos, sobre el organismo y sobre la eapacidad para aprender; maternidad y enidad del nifio. Debe fomentarse el desarrollo de ayudas visuales y material de ensefianza escogido, de naturaleza muy préctica, en relacién con los problemas, recursos y cultura indjgenas. Al proparar programas para escuela y para oblaciénes, ¢l maestro debe ostimular la participacién activa de estudian- tes, padres, y lideres de la comunidad. Rees actividades pueden condueit la creacién de comités de sanidad pare le escuela y la poblacién, gremios ¥ consejos en los cuales los adultos y estudiantes por igual toman parte activa en el planeamiento y organizacién de programas pricticos de higiene, Bn las zonas mas adelantadas, las oportunidades para proporeionar ex- periencia educativa son mayores debido a que se dispone de servicios de higiene escolar bien equilibrados, médicos idéneos, enfermeras y otros expecialistas de higiene y personal de ensefianza. Sin embargo, el disponer de esos recursos en una zona dada no aseguran por si solos que se pueda proporcionar una adecuada ensefianza de higiene. Son necesarios planes conjuntos en todas las fases de los programas de higiene para los niflos fin de poder utilizar todas las oportunidades de ensefianza. Ex més, como se manifests anteriormente, el médico y In enfermera deben evaluar el papel que desempefa ol contacto individual con los nifos individualmente como experiencia edueativa y comprender la manera de utilizarlo mejor. El médico y Ia enfermera pueden utilizarse con gran ventaja en el pro- grama de ensefianza oficial de higiene—mediante informacién educativa de los maestros basada, cuando sea apropiado, en los hallazgos actuales entro Jos nifios de la escuela (naturalmente, sin identificar al nifio) y por medio de Ja participacién en los debates de clases, cuando esa participacién forme parte de la materia o proyecto en que estn ocupados los estudiantes. La ensefanza de Ja higiene Hegard también al nifio por medio de sus cursos en asignaturas tales como las ciencias bioldgieas, ciencias domésticas, PRIMERA REUNION a educaci6n fisica, quimica, fisica, y aun humanidades. oficiales de ensefiauza de higiene, aunque con mucha frecuencia resultan fridas deseripciones de hechos, pueden ser dinézaicos y significatives; gran parte depende de la persona que tiene a su cargo el curso. En algunos ppafeos la ensefianza de la higiene es responsabilidad directa del médico y de Is enfermera. Los encangados de esta materia deben hallarse especialmente prepatados cn téenicas educativas. Si el maestro ha de preparare como trabajador de higiene, el médico, la enfermera y él ingeniero sanitario eben prepararse igualmente como educadores. Hin los centros de adies- ‘tramiento de educacién basiea, los médicos y otros trabajadores sanitarios deben tomar cursos de adiestramiento junto con los maestros, especialistas agrénomos, y otros trabajadores sociales en la apreciacién educativa de los problemas para mejorar las condiciones de la salud, Necesitan experiencia también para utilizar medios educativos (cintas einematrogréficas, peliculas, programas de radio, libros). Los trabajadores de salud pablica deben ir més lejos atin, y procurar ayudar a los maestros suministrando material ‘téenico adecuado sobre asuntos de higiene a los autores de libros de texto y a los productores de las pelfeulas que utilizan los maestros. Bn otros pafses los pedagogos han recibido preparacién sobre los puntos principales relacionados con la salud y Ia higione, y también han tenido experiencia especial en los métodos de transmitir esos conocimientos tanto f nifios como a adultos. Se emplean como “educadores sanitarios.”” Su trabajo puede incluir la ensefianza en las aulas, pero Ia mayor parte del tiempo la dedican a desarroller programas de ensefianza de higiene en dife- rentes niveles, y los cursos “‘en servicio” y en institutos de higiene para ‘maestros; coordinacidn de los servicios de higiene y ensefianza de higiene en In escuela; y en ayudar a los consejos de higiene escolar a funcionar efectiva- mente. Muchas colectividades hacen uso extenso de los educadores de higiene en los organismos de higiene piblicos y privados. En todas partes la educacién de higiene a los escolares debe formar parte de un programa de educacidn de higiene de la. comunidad en general, de ‘modo que los padres puedan aprender a la par que Ios hijos. Un problema que es objeto de controversia en In educacién sanitaria lo constituye Jo que generalmente se lama educacién sexual. El Comité estima que este tema comprende dos problemas separados. I primero es la tarea de ayudar al nifio a adquirir conocimientos sobre la fisiologia sexual. Este objetivo, considera el Comité, debe formar parte integral de Ia censefianza general de la fisiologia humana y quedar comprendido en la ‘eclucacién higiénica. El segundo problema es el de preparar al nifio a fin de que desarrolle capacidad para una conducts responsable en las relaciones sexuales. El 2 SERVICIOS DE HIGIENE HSCOLAR Comité estima que esto debe formar parte del problema general en cuanto a discornir métodos de educacién que ayuden al nifio a aprender la manera de establecer relaciones armoniosas y responsables con otros seres humanos, 3.3 Kealuacién de ta salud esvalar. Tn Ie evaluacién del estado do salud del nifio y el progreso de su ere- cimiento y desarrollo, se tendré presente el hecho de que la necesidad es continua més bien que esporéidica y que se obtiene mayor éxito mediante el esfuerzo combinado. El mimero de personas que tome parte en esta tarea variaré, naturalmente, de acuerdo con los recursos de la. comunidad, pero en todo momento uno debe contar bisicamente con los padres, cuyas observaciones e interpretaciones de la conducta del nifio son de gran sig- nificacién, 8.3.1 Posicién del maestro en la eoaluacién de la salud. Un maestro interesado y observador puede ser una gran ayuda para los padres y para los esped listas de higiene de la escuela, ayudindolos a comprender las nevesidades para Ja salud del niio. Como observador adiestrado que pasa gran parte del tiempo con los nifios, el maestro puede estar alerta a cambios sutiles en la apariencia o conducta que puedan ser anuncio del comienzo de tna enfermedad. Para realizar esta funci6n, los maestros necesitan preparacién cuidadosa, tanto mientras asisten a institutiones de educacién para macs- ‘ros, como durante el servicio. Respecto a este adiestramiento debe sefialarse que la ensefianza en relacién con casos especificos es mucho més efectiva que las conferencias pot especialistas y los ejercicios en las aulas, Ciertos procedimientos especfficos levados a cabo por maestros mejoran mucho la calidad del programa de higiene de la escuela. EI método funda- mental es la observacién alerta y continua—no una inspeceién en un momento dado. El estar slerta representa casi un interés subconsciente para cada nifio y el darse cuenta de que ha ocurrido cierto cambio. Ademés, hay ciertas prucbas preliminares especificas de valor considerable. sas pruebas conocidas como “seleecién” bienen por fin medir ciertos indices relativamente objetivos para ayudar a evaluar el estado de salud y ayudar 6 seleccionar a los nifios mAs necesitadas de los servicios del médico o la en- fermera, Por ejemplo, el sentido de la vista es un requisito obvio para el 6sito de la educacién. Por medio de investigaciones se ha demostrado que el maestro, después de un breve perfodo de adiesiramiento, puede realizar pruebas de Ia vista con exactitud satisfactoria, con la ventaja de que como ‘conoce individualmente a ead nifio, puede descubrir a aquéllos que tratan de aprenderse de memoria el cartel. El maestro conoce los nifios con estrabismo o muestran setiales de esfuerzo en In vista. Esos sfntomas son ‘itiles para evaluar casos dudosos. Ademés, los resultados de esas pruebas PRIMERA REUNION 23 ‘constituyen un excelente material para un programa de ensefianza de higiene en el aula. La prueba objetiva efectiva del ofdo es un procedimiento témico que ordinariamente no debe realizar el maestro. Sin embargo, cuando el maestro observa falta de atencisn o apatia, especialmente cuando antes no se habia manifestado, puede ser indicio de pérdida de ofdo o algiin otro problema tie salud. El peso y la medicién son medios sencillos para anotar dos indices de crecimiento y pueden resultar de gran valor cuando se leva un registro acumulativo y se utilizan e interpretan adecundimente. Desde luego no se puede confiar en las tablas de estatura y peco como indice individual del estado de nutricién del nifio, El valor positivo de estas funciones dol maestro en relacién eon la salud del nifio, con su progreso educativo y con Ia enseiianza de le higiene en general, debe ser claro. Y, sin embargo, con frecuencia se dice que esas labores le exigen demasiado tiempo al msestro. El tiempo invertido en algo tan estrechamente relacionado con el adelanto educativo no necesita jus- tifieacién, pero es importante planear las pruebas de seleccin para evitar pposibles entorpecimientos con las rutines del aula, ¢ inculcar en el maestro Ia idea de que Ia observacién alerta continua ‘no requiere tiempo extra— sélo interés profundo en los nifios. En algunos casos el establecimiento oficial del “Dia de la Salud”, por la autoridad de educacién, ayuda a simplificar el problema del tiempo. Cierto dia cada seis meses, o cierto ntimero de horas en un dia sefialado, se dedican al trabajo de higiene. Se utiliza la ocasién para dirigir la atencién de los alurnos hacia la salud, por medio de ejercicios especiales, exhibiciones especiales, pruebas de selecciin espectticas, y comipletar los registros de higiene. Cuando se sefiala ese dia administrativamente es més fécil planear el trabajo y disponer de los cuaddtos y escalas necesarios, El establecimiento de un dia semejante requiere comprensién de su significado y de todo el programa de higiene, por parte de las antoridades escolares. El crear esa comprensién es una importante tarea de los funcionarios del servicio de higiene. Debe aclararse bien que las actividades de hi 1a salud no se limitardn a ese dia—el dia es un acontecimiento conveniente, pero debe evitarse el darle importancia costa de la responsabilidad con- tinuada. El papel descrito para el maestro es sin duda importante y fundamental cn todo servicio de higiene. Kn zonas con recursos de higiene sumamente limitados, el maestro puede ser una de las poces personas de la comunidad, sademés de Ios padres, interesada en Is salud del nifio. Aunque un programs, ‘cuyo peso recae todo en el maestro, no puede ser tan efectivo como el que ‘cuenta con una enfermera y un médico, sin embargo puede hacerse mucho. 24 SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR Por lo tanto, en un servicio muy adelantado el papel del maestro aunque no 8 nico, es tan importante como siempre para el bienestar del nifio y no hay substituto para los conocimientos que se obtienen mediante la observacién continuada que ejerce el maestro en el aula. Los informes sobre desviaciones que se notan debido a esa observacién y el registro de las pruebas de scleceidn realizadas por el maestro, forman parte esencial de Ia historia de la salud. Suministran informacién al médico y a la enfermera, que muchas veces resulta esencial para comprender los problemas del nifio ¥ que no podrian llegar al conocimiento del personal médico por otro conducto. Al parecer, los maestros pueden realizar prucbas preliminares ¥ seleccién con mayor ventaja, permitiendo a la enfermera utilizar su ‘tiempo en hacer pesquisas en los hogares y conferenciar con Ios nifios ¥ con los padres. Es de gran importancis que los resultados de toda accién médica sobre la salud del nfo, estimulada 0 no por la observacién del maestro, sean comuni- cados al maestro en lenguaje corriente, exponiendo claramente los planes futuros o su significado. Dentro de la escuela este objetivo puede eumplirse muy fécilmente cuando el maestro se halla presente durante el examen del nifio, aunque esto no siempre es posible. 3.8.2 Posicién del médico y de la enfermera en ta evaluacién de la salud. El Comité considers conveniente agrupar los servicios médicos y de en- fermerfa, bajo este eneabezamiento, ya que se encuentran tan {ntimamente relacionados. La participacidn, tanto del médico como de la enfermera, es indispensable en un servicio equilibrado de higiene escolar. En algunas rogiones del mundo, sin embargo, hay médicos, pero pocas enfermeras, mientras en otras sucede lo contrario, Siempre que sea posible, el trabajo cn Ia escuela debe constituir una asignacidn permanente para el médico y Js enfermera de modo que puedan sentirse como miembros del personal de la escuela y parte esencial del grupo de higiene de la institucién. Cuando el maestro ha lenado su funcién debidamente, la adicidn del médico o Ia enfermera, o de ambos, al grupo, mareart un gran paso de avance. En general la enfermera debe estar bien equipada para ayudar en la preparacién de los registros ¢ historias elfnieas, para conferenciar con los padres y con los organismos de la comunidad y para seguir las reco- ‘mendaciones del médico. Cuando no hay médico en le escuela, puode que tenga, ms trabajo en las inspecciones preliminates de salud y para tomar decisiones en cuanto a quién se debe enviar al centro médico mAs cereano, Bl médieo puede hacer un examen definitive, un diagndstieo médico, prescribir tratamiento y conferenciar con los padres. A esas fumeiones debe agregar, cuando trabaja solo, ciertas tareas de ls enfermera, Ordinstiamente PRIMERA REUNIGN 25 con estas circunstancias necesitard invertir tanto tiempo, que forzosamente tendré que delegar en el maestro gran parte de su trabajo. ‘Cunndo se cuenta con médico y enfermers, debe planearse una cuidadosa divisidn de las actividades, ya que Is enfermera puede aumentar conside- rablemente la eficiencia del médico. ‘Cuando un médico presta servicios en la escuela es posible que la selec- ion preliminar de nifios resulte més efectivay cubra més adecundamente Jos easos que el maestro, la enfermera, o ambos, traigan a su atencién, La consulta eon el personal edueativo sobre problemas generales serd una parte importante de la educacién “en servicio.” La responsabilidad del médico en relacién con Ja supervisidn de la salud necesita evaluacién euidadosa, Hl Comité considera que la evaluacién de la salud es la piedra angular del servicio de higiene para el nifio de edad es- colar. La observacién continua por maestros, discutida en la seccidn ante- rior, combinada con las medidas objetivas descritas como prucbas de “seleccién”, forman Ia base de Ia evaluacién efectiva de la salud. Las actividades del médico y de la enfermera, al aleccionar al maestro sobre el desempeo correcto de esas funciones, tienen una elevada prioridad y pue- den representar una recompensa tan importante como cualquier fase de las actividades méstioas y de enfermeria de la escuela. Cuando una enfermera presta servicios en Ia escuela puede colaborar con el maestro por medio de conferencias preconvenidas entre maestro y enfermera, para realizar una revisién anual o seminanual del estado de salud de todos los nifios de Ia clase. Mediante esta evaluacién preliminar de Ja salud, pueden escogerse aquellos nifios més necesitados de atencién médica. Bl euidado de esos casos debe merecer prioridad en el turno del tiempo que el médico haya, asignado a los examenes de salud eseolar. La experiencia ba demostrado que los exémenes médicos son especialmente fruetiferos cuando el estudiante ha acudido al médico debido a que el padre, maestro o enfermera sospecharon Ia existencia de algo erréneo, Los eximenes ffsicos realizados a intervalos periédicos sobre una base adecuada de entecedentes, estando presentes los padres y con tiempo suficiente para que el médico desempefie sus funciones como consejero de salud y maestro, para los padres y el nifio, es un procedimiento valioso y una de las partes fundamentales de un servicio completo de higiene escolar. El Comité abriga grandes dudas, sin embargo, sobre la eficiencia de la inspeceién médica rutinaria demasiado elemental. Los eximenes médicos deben ser lo bastante minuciosos y extensos para inspirar respeto médico; lo bastante informativos para guiar al personal escolar en el asesoramiento de los estudiantes y Io bastante personal para formar una experiencia educativa conveniente. Para los grupos de menor edad la escuela debe hacer 26 SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR tun esfuerzo especial para anunciar y preparar los eximenes médicos en Is fecha y lugar que permita ls asistencia de los padres al examen y el bene- ficio de Ins recomendaciones inmediatas del médico sobre la salud del nifio. Cuando se hacen planes para utilizar el tiempo del médico dedicado a los escolares, debe darse orden adecuado a las diferentes priotidades. El miimero de exémenes petiGdicos se decidiré después de dat la debida consi- deracién al tiempo que requeriré el desempetio de las funciones citadas, consejo y consulta & los padres, nifios y personal escolar, y diagnéstico y tratamiento de las condiciones referidas al médico de acuerdo con los procedimientos de seleccidn—que deben tener precedencia. A medida que el médico dispone de tiempo para eximenes periddicos, los nitios recién ad- mitidos deben recibir atencién primero, después los nifios que dejan la escuela por haberse graduado 0 por otras razones, después aquéllos que ‘comienzan la pubertad, esto es, los de 13 a 14 afios, y por dltimo los de 9 a 10 aifos. ‘Al extender el objetivo de la supervisién continua # todos Ios alumnos, In enfermera tiene las importantes tareas de: (1) integrar las actividades de higiene dentro de la escuela; (2) coordinar los servicios de higiene de la escuela con los del departamento de higiene; y (3) estublecer rela- ciones con los padres como amiga ¥ consejera. Podré ofrecer servicios con- sultivos a los maestros y guiarlos en sus observaciones diarias de los nifios, xy enel reconocimiento de las desviaciones de lo normal. La enfermera puede hacer demostraciones que ayudarin al maestro a llevar a cabo las pruebas preliminares y las medidas a que nos hemos referido anteriormente. Podré ayudar al maestro obtener material de modo que tenga tema para la ensefianza de la higiene y pueda intercalarla en la enseftanza diaria de muchas otras materias. Puesto que la interpretacién correcta de las necesi- dades individuales de higiene es asunto que requiere aptitud y criterio profesional, Ie enfermera al trabajar en estrecha cooperacién con el médico de Ja escuela, frecuentemente se halla en posicién favorable para explicar ‘alos maestros los hallazgos del médico y su significacién. Deben existir métodos organizados y de comprensién mutua para el intercambio de informacién entre el maestro y Ia enfermera a medida que se presontan los problemas. El mecenismo de este intercambio variaré, dependiendo, naturalmente, de que las oficinas centrales de la enfermera estén situadas en una escuela sola, en una oficina central en una escuela, ‘en un centro de higione, asf como también de la frecuencia de sus visitas. Las visitas que la enfermera realiza a los hogares ayudardn a expedir y completar planes de asistencia y constituirén uno de los mejores medios de educacién de higiene directa para los padres y los nifios. La enfermera se interesaré en el niflo como miembro de la unidad familiar y no solamente PRIMERA REUNION 27 como alumno de la escuela. En casos escogidos puede hacer arreglos directos para obtoner los cuidados necesarios La enfermera puede realizar inmunizaciones sobre la base de una norma escrita por el supervisor médico, pero cada pais tendri que estudiar el procedimiento adecuado para la proteccién legal de In enfermera en esta actividad. Se desprende de la clase de obligaciones descritas que el funcionamiento cficar del servicio de higiene escolar requiere que Is enfermera pase mucho mis tiompo que el médico en la escuela. No se puede recomendar una pro- poreién definida como universalmente aplicable, pero algunos miembros del comité consideran que custro o cinco horas del tiempo de la enfermera por cada hora del tiempo det médico es un aproximado razonable. ‘En muchos casos tal vex le enfermera no pueda visitar Ia escuela més que una ver al afio y tenga que depender mucho del maestro para conocer los problemas que requieran eu atencién. En tales circunstancias las fun- ciones de la enfermera como consejera de salud son atin més importantes, 34 Restauracién de la salud del escolar. 3A.1 Medios para tratamiento, El valor final de gran parte del trabajo que se hace para el nifio depende de que se cuente con buenos recursos para tratamiento. El Comité, por lo tanto, considers que todo programa de servicios de higiene para nifios de edad escolar debe incluir medios para tratamiento tanto en problemas de salud fisica como emocional. El Comité reconocié qué la manera de suministrar este tratamiento se encontraba muy afectada por los problemas de organizacién social y médica y por la eoo- nomia de los diversos paises y regiones del mundo. La opinién del Comité no fué ungnime en cuanto a la mejor manera de faciitar tratamiento, pero convino en los siguientes principios generales: (W) Todo servicio de higiene escolar fracasa en su objetivo a menos que asegure medios de tratamiento. Por lo tanto, um servicio de-higiene escolar, organizado en eualquier pais 0 zona, debe eonsiderar como una de sus funciones principales le consecucién de medios de tratamiento asequibles 1 todos los escolares. (@) Estos arreglos para tratamiento deben formar parte integral de los servicios de higiene piblica de Ia zona, @) Toda ver que el deseo de fomentar el adelanto educativo y la eduea~ ign sanitaria impele al servicio de higiene escolar a obtener pronto ¥ adecuado tratamiento para los nifios, resultard apropiado establecer directa ‘mente servicios especializados tales como elfnicas ortopéiicas, de oculistas. de orientacién infantil, de podiatria, ete, Eso servicio directo, sin embargo, necesita estar coordinado con los servicios paralelos de Ja comunidad des- 28 SHRYICIOS DB HIGIENE FSCOLAR tinados a Ia poblacién general. No siempre es fécil Ia correlacién porque el intereambio de informacién leva tiempo y el traspaso de registros es engorroso. Un método que se ha sugerido para establecer la relacién de- seada es tratar de usar el mismo personal especializado en ambos lugares. Si bien esto puede resultar conveniente, en las poblaciones pequefias, es is diffcil en los grandes centros urbanos. (4) Bi Comité observé una posible desventaja en separar’ por completo €l trabajo del médico en Ia escuela de la medicina curativa. Debo estudiarse el problema més detenidamente, sobre todo la posibilidad de que los médicos de la escuela puedan estar asignados a hospitales u otros sitios en el eampo curativo, 3.4.2 Bnfoque del tratamiento por medio de la familia. El tratamiento de ‘muchos estados de salud de os nifios necesita enforarse a base de la familia, de lo contrario es ffeil que el problema se presente de nuevo muy pronto. La enfermera de salud pibtica que sirve como eslabén entre la escuela y el hogar y los servicios de higiene a disposicién de la comunidad, puede ser Ja persona més apta para cumplir este objetivo. Lin éste, como en otros 60s, es necesario el intercambio adecuado de informacién entze los or- ganismos médieos de la comunidad y la escuela, para evitar duplicidad y seguir el tratamiento hasta la terminacién efectiva. His necesario que exist comprensién mutua de los fines para los cuales se utiliza la informacién solicitada por la escuela, para .ue la preparacién de ese informe no se considere como tarea innecesaria. Un pafs ha resuelto el problema de la coordinacién de informes sobre el nifio, asignando un visitador de sanidad al hospital, con el fin expreso de obtener informacién esencial destinada a todos los servicios del departamento de higiene. 34.3 Restauracién de la salud del nifio ineapacitado, Fl Comité se enteré con interés, que las Naciones Unidas y los organismos especializados esta- blecerdn un comité conjunto especial de expertos para estudiar detallada- mente los problemas det nifio ineapacitado, En vista de la complejidad (hasta el ntimero verdadero de las diferentes categorfas es deseonocido) de este problema, el Comité limité Ia discusién a unos cuantos puntos de prineipio. El Comité quiso recalear la importancia de descubrir cudl es el nifio incapacitado fisica o mentalmente, a fin de asegurar que se le dé atencidn primordial al mejoramiento de su salud y al problema especial de su educacin. Esta funcién de descubrir casos y el trabajo igualmente importante de la eolaboracién eon los departamentos do edueaciin al tomar las disposiciones necesarias para asegurar al nifio incapacitado el méximum de oportunidades de educacién, es una de las razones por las PRIMERA REUNION 29 ‘cuales el Comité desearia que existieran servicios de pletamente desarrollados en todas partes. BI trabajo que esto requiere es de naturaleza altamente especializada y al mismo tiempo se halla estrechamente relacionada con otras aspectos de la higiene escolar. El cuidado ® los nifios incapacitados no sélo interesa a esta seecién poco privilegiads de Ia juventud, sino que indirectamente beneficia a sus compafieros de escuela normales. Asi resulta importante unificar Is organizacién de los servicios de higiene para el ineapacitado con Jos servicios de higiene,para escolares, Los problemas sociales que acompafian la existencia de condiciones incapacitantes hace muy necesario que los planes internacionales a este respecto estén coordinados con el trabajo del Departamento de Asuntos Sociales de las Naciones Unidas. iene escolar com- 3.5 Otros asuntos de importancia. 3.5.1 Imporlancia de la kigiene dental en los programas de higiene escolar El Comité conocié con interés que la OMS proyecta desarrollar programas de higiene dental y por Io tanto decidié limitar sus observaciones a ciertos prineipios amplios que rigen el trabajo del dentista en el servicio de higiene escolar, lo que pudiera resultar de valor como guia para estudios més detallados. ‘La higiene dental es de gran importancia para la prevencién de Ia mala salud y el mejoramiento de Ia salud del escolar, y sus heneficios durardn toda la vida, Todo programa de higiene escolar debe por lo tanto, compren- der Ja ensefianza de higiene y cuidados dentales. Fsto es esencial en todos los paises y de significacién adicional en zonas poco adelantadas, por In razdn de que el examen de la boca puede revelar estados tales como gingi- vitis (resultado de mala nutricidn y otros factores adversos), que de no remediarse pueden ocasionar daiios permanentes. ‘Toda ves que el examen realizado por una persona no experta en odon- tologia puede conducir a errores y dado que en todo caso un trabajador dental adiestrado tendré que hacer el examen antes de proceder al trata- miento, se considera poco conveniente encomendar el examen dental al médico, la enfermera o el maestro. Sin embargo, los maestros, médicos y enfermeras pueden con gran beneficio, iicluir el tema de la higiene dental en su ensefianza de higiene. En ef desurrollo de un servicio dental escolar es importante que los dentistas (a tiempo completo o parcial), sean asignadas con responsabilidad definida a las escuelas de su zona, Solamente ast pueden establecerse relaciones comprensivas entre ¢l maestro y el dentista, por cuyo medio puede conocerse el cardeter fundamentalmente preventivo del servicio dental. El maestro, Ia enfermera escolar y el dentista que trabajan juntos 30 SERVICIOS DB HIGIENE RSCOLAR pueden tratar de educar a Jos niffos afin de que soliciten exmenes periél- cos de Ia dentadura y tratamiento temprano. ‘De aqui se deduce, naturalmente, que el dentista asignado a la escuela debe combinar el examen eon el tratamiento. En vista de los conocimientos actuales es indudable que la prevencién dels caries dental depende principalmente de que ésta se descubra temprano y se proceda a su tratamiento a la par que se inculean buenos hébitos ditéticos. La pesquisa de otras formas de cuidados preventivos e8, na- ‘turalmente, de gran importancia. Si puede realizarse la profilaxis en masa resultaré de significacién mundial para la salud. A este respecto el Comité quiso que se investigara cuidadosamente el empleo de las téenicas pre- ventivas, tales como el uso del fiior. 3.52 Registros de higiene. Los registros do higiene no constituyen un fin por sf mismos. Su importaneia se mide principalmente por el grado en que resulten titiles al personal, para ayudar al nio a obtener y mantener ‘un méximum de salud, dentro del limite de sus potencialidades. Los siguien- tes principios para establecer y mantener los registros de higiene, van encaminados a este objetivo: (Q) Los registros de higiene deben de ser acumnulativos a través de toda la vida escolar del nifio. Deben contener informacién pertinente respecto al nifio, suministrada por hospitales, clinicas y el médico de la familia, Siempre que sea posible, los registros quo contienen la supervisién de higiene pre-escolar formardn parte de los registros de higiene escolar, Bl registro delestadode satud durante los aiios escolares puede eonsiderarse de valor para guiar al nifio hacia Ia vocacién para la cual posee mayores aptitudes. (2) Los registros de higiene deben contener informacién sobre Ios ser -vieios preventivos (inmunizaciones), pruebas de seleccién (vista y ofdo), descubrimientos del examen del médico escolar 0 del médico particular y Jas recomendaciones sobre medidas terapéuticas. (3) Los registros de higienie deben mostrar el progreso del nifio en cuanto a los objetivos higiénicos, sean éstos Ia correccién de un defecto fisico, la adecuada supervisién médica, o el desarrollo de nuevos hébitos relacionados con el estado de salud. (4) Toda informacién disponible que influya en el crecimiento y desa- rrollo del nifio debe formar parte del registro acumulativo. (6) Cierta informacién contenida en los registros higiénicos de la escuela ‘merecen tabularse, por su utilidad para orientar la politica administrativa, Los sumarios estadisticos de diagndsticos, sin ombargo, sélo pueden ini- ciarse con confianza cuando el criterio de diagnéstico y su interpretaciéa son uniformes, cuando se registran manifestaciones positives y negativas PRIMERA REUNION al respecto al diagndstico o diagndsticos en estudio, y cuando puede realizarse In evaluaciOn periédica sobre la exactitud de las manifestaciones contenidas en los registros, Toda vez que los registros de higiene della escuela conciernen ‘a gran mimero de personas el-Comité entiende que deben estudiarse nuevas maneras y medios de utilizar esos registros para compilacién y andlisis de informes importantes, (6) Debido a que las observaciones hechas por el maestro respecto a sintomas y conducta en relacién con los problemas potenciales de salud tieuen significado para el médico y Ia enfermera, es conveniente que s¢ mantenga un registro en el cual el maestro pueda anotar esos sintomas. Cuando se trata de un registro separado, puede muy bien servir el propésito de ofrecer al médico y a la enfermera una oportunidad, sin violar la eon- fianza profesional, de trasmitir sus descubrimientos y recomendaciones a Tenguaje corriente, a fin de que el maestro pueda entender las necesidades del nifio y participer como miembro del grupo en la ayuda que se presto al niffo en sus problemas, (7) Se sugicre que al establecer los nuevos registros de higiene escolar de cualquier tipo, el personal que va a hacer uso de ellos participe con el personal administrativo en su desarrollo, (8) Finalmente, cuando se presentan nuevos tipos de registros a los médicos, enfermeras y maestros, es importante que un perfodo de “eduea- ign en servicio” preceda al uso de los registros, 8.5.8 Orientacién vocacional. Fl Comité enfoes el problema de Ia orientacién vocacionall desde el solo aspecto de la parte que todo servicio organizado de higiene escolar puede jugar sobre Ia extensién de los objetives de la orientacién vocacional. Se acordé que los asesores vocacionales © comités, encargados de la responsabilidad de orientar a los nifios en el adiestra- mieato 0 empleo vocacional, necesitan apoyarse mucho en los registros sobre los adelantos educativos del nifio. Para los fines de clasificacién adecuada, desde el punto de vista de la salud, el servicio de higiene escolar que cuente con registros acumulatives sobre salud representa una gran ayuda, Un solo examen fisico no es un buen sustituto dela informacion obtenida f través de numerosos afios por el servicio de higiene escolar en sus con- ‘tactos con el nifio en el hogar y en la escuela. Bien utilizada esa informa- cion puede ayudar a encontrar una ocupacién fructifera para el nifio inea- acitado, que de otro modo no podria competir con los dems trabajadores. Se convino undnimemente en el valor tinico de la eontribucién que hace «l servicio de higiene escolar a la orientacién vocacional. Sin embargo, el Comité crey6 de la mayor importancia prevenir sobre los posibles peligros que encierra el facilitar informacién médica a comités desconocedores de 32 SERVICIOS DE HIGIENT BSCOTAR Ja materia. La naturaleza de la informacién eontenida en el registro de higiene del nifio puede facilmente interpretarse mal y su tevelaci6n perju- dicar gravemente al nif. Hs por lo tanto de la mayor importancia que no se entreguen los registros. De todos modos, es0s registros son de escaso valor comparados con Ia cuidadosa interpretacién de su contenido por una persona que entiende su significado. El procedimiento adecuado para reslizar esia dolieada operaciin es indudable; consiste en colocar la res~ ponsabilidad de la necesaria orientacién médiea en los hombros del funcionario médico escolar, que puede desempefiar esta funcidn en persona, © por medio de carta confidencial, Al cumplir este deber, el f médioo escolar naturalmente debe considerar quo se Je ha facilitedo esta informacién primeramente en interés del individuo y sus padres, y on segundo término, para orientacién del comité u otra persona responsable encargada de Ia orientacién vocacional. Los funcionarios médicos escolares eben familiarizarse con las condiciones y peligeos de todas las ocupaciones disponibles en el distrito. EI Comité nots con agrado el trabajo realizado por la Organizacién Intemacional del Trabajo en la orientacién vocacional. 4. Personal y Adiestramiento Necesarios para el Servicio de Higiene Escolar 4.1 Prineipios besicos Un programa de higieno eseolar no puede estar a mayor altura que el personal que presta los servicios. Por esta razén debe darse euidadosa atencién a la eleccién del personal, su adiestramiento, y su capacidad para ‘trabajar en grupo cooperativo. ‘Tres principios bésicos fundamentan Ia provisién de cuidados sanitarios para los escolares: (1) pueden realizarse programas de higiene escolar un cuando sélo se cuente con un maestro; (2) el personal de higiene pro- fesional, inclusive médicos, enfermeras y dentistas, contribuye con servicios adicionales que enriquesen Ins experiencias do higiene del nifio; (8) pres- cindiendo del nimero y clase de personal disponible, puede realizarse un programa educativo satistactorio tinieamente cuando el personal posee una filosoffa para trabajo en grupo. Hsto quiere decir que el trabajo no sélo se planes conjuntamente, sino que se lleva a cabo por macstros, médicos, enfermeras, otros especialistas y administradores, cooperativamente, 4.2, Papel del personal En seceiones anteriores de este informe se han recalcado las contribuciones especiales del personal de sanidad y los maestros para ayudar a los nifios y nifias a desarrollar su organismo de modo més saludable y vida més satis- factoria, Parece adecuado ahora insistir en la clase de servicios que pueden PRIMERA REUNION 33 darse en varias situaciones escolares e indicar la necesidad de que los diferentes tipos de trabajadores que se interesan en la salud de los nifios trabajen en mayor armonia, Hn algunas zonas, ademds de los médicos y cenfermeras que forman el nticleo del personal del servicio de higieno, se han agregado dentistas, trabajadores sociales, educadores sanitarios, maes- ‘ros visitadores, higienistas denteles, psiedlogos, psiquiatras, nutricionistas y grin miimero de personal auxiiar, inclusive voluntarios adiestrados, auxiliares, consejeras y trabajadores subprofesionales. Naturalmente, el mimero y calidad de los trabajadores empleados en los programas de higiene escolar, varfan considerablemente de una zona a otra. En Ins zonas donde el maestro no cuénta con los recursos del servicio de bigiene escolar, es claro que ademés de Ia ensefianza y experiencias para una vida saludable, que debe constituir parte vital del programa diatio, el maestro también necesita estar atento a muchas otras materias de higiene: mantenimiento de las condiciones higiénicas de Ia escuela; atencién a las enfermedades repentinas 0 accidentes de los nifios; descubrimiento de nifios con problemas de salud que representan obstéculos al aprendizaje; tratar de encontrar recursos en la comunidad o del gobierno para atender al problema descubierto; todas ésas son responsabilidades del maestro que desempefiaré de In mejor manera posible dentro de Ia situacién. Cuando se cuenta con los servicios de una enfermera en la comunidad el maestro continuaré observando a los nifios respecto a desviaciones del funcionamiento normal de la salud y para descubrir nitios de poca agudeza visual; pero la enfermera asumiré Ia responsabilidad de gran parte del trabajo de ayudar 2 los padres a obtener atencién médica para el nif ‘Mucho estimularé Ja ensefianza de la higiene, en y fuera de las aulas, la censefianza individual de la enfermera # los nifios y la ayuda que presta al maestro. El papel del médico variaré de acuerdo con los recursos médieos de la comunidad. $i hay poeos 0 ningtin médico en la zona quizés tenga que de- sempefiar no sélo servicios de educacién, diagndstico y preventivos, sino también tratamiento, En zonas que cuentan con més recursos su trabajo puede limitarse a la evaluacin de la salud de los nifios y a las funciones cducativas de muchas clases. La terapia para los nifios estard a cargo de médicos particulares y orgunismos piblicos. Como miembro del “equipo de higiene”” el médico trabajaré en estrecho contacto con el maestro y la enfermera, compartiendo con ellos sus conocimientos y aprendiendo de ellos ciertos hechos que guatdan relacién eon la salud y comportamiento del nifio, Cuando los recursos econémicos de la comunidad han permitido el empleo de especialistas para tratar Ia gran variedad de problemas de higiene que ofrece la poblacién escolar, se han agregado otros trabajadores 34 SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR profesionales al personal de higiene de la escuela. Los trabajadores auxi- liares bajo supervisién profesional han sido vitiles no sdlo en las zonas donde se carece de personal profesional, sino también en zonas més favoreci- das donde los ayudantes técnioos y trabajadores voluntarios han llevado 1a cabo tareas que dejan libre al personal profesional para servicios que solo él puede realizar. ‘A medida que se aumenta el personal, se necesitan mejores planes ad- ministrativos y mayor supervisién del personal. Fl trabajo en grupos se hace m&s imperativo, pero no surge como filosoffa de trabajo sin el esfuerzo consciente del administrador y del personal. 43, Preparacién del personal ‘Un programa que Ilene las necesidades de higiene de los escolares requiere personal adiestrado para ese trabajo. Una gran parte de Ia apatia y poca ceficiencia de muchos servicios de higiene escolar son resultado directo de la, poca preparacién del personal. 4.3.1 Médizos de ta escuela. E médico que trabaja con escolares debe ser algo més que un biten clinico. Debido a que el programa de salud escolar es principalmente preventivo y edueacional en sus objetivos, debe estar también familisrizado con una sana teorfa y préctica de salud pablica, pposeer visién de las necesidades emocionales de los nifios y estar farailiari- zado con las diversas técnicas de ensefianza. Para trabajar eficientemente como “miembro de grupo” con enfermeras, maestros, padres y otros trabajadores sociales debe aprender a respetar y utilizar los aportes que ‘otras profesiones traen a la solucidn de los problemas de la salud del nifio Las escuelas médioas, por lo tanto, contribuirén considerablemente & In utilidad profesional de sus graduados en cuanto a la higicne escolar, in- cluyendo en el programa de estudios précticas de educaciéa en salud piblica, higiene mental, e higiene escolar. ‘Bs necesario preparar ctrsos en los cuales se capacite al médico interesado ‘en entrar en el servicio de higieno escolar y a los médieds que actualmente trabajan en las escuelas, para adquitir préctica en psiquiatria infantil, pediatria y pedagogfs, lo que hark més valiosa su enseftanza a los nifios, a los padres y a los maestros. La experiencia de varios pafses indica que las conferencias y reuniones en las cuales los médicos, enfermeras y maestros discuten problemas comunes son sumamente ttiles para elevar la calidad de los servicios de higiene escola EI Comité estimé que uno de los temas de discusién més importantes es el problema de decidir In mejor forma de adiestramiento para el médico escolar. Sin embargo, dado el tiempo de que se disponfa fué imposible PRIMERA REUNIGN 35 proseguir el asunto con la minuciosidad necesaria, y el Comité recomends enérgicamente que se haga un estudio més profundo de este asunto. 43.2 Bnjermeras. La enfermera, como e1 médico, tiene una turea diferente cuando trabaja dentro de la estructura de la escuela, pues no es la situacién clinica a la cual estaba acostumbrada en su prictica de hospital. Es una rmueva experiencia con nifios, a ls cual le enfermera debe traer afvcto, acepta- cidn y comprensidn. Para el maestro, ella debe ser una fuente de informa- cién y una gufs, Para el padre, debe ser una consejera amistosa, conocedora de los recursos de la comunidad, simpatizando con los problemas familiares y una intérprete por excelencia de las nevesidades del nifio, de acuerdo con Jo que revelen los exmenes médicos y su comportamiento en Js escuela. La enfermera, pues, tiene muchos papeles’ que desempefiar y debe estar bien calificada por medio del adiestramiento en muy diferentes aspectos del trabsjo. Primero, debe ser enfermera graduada y registrada en st. propio pais. Debe poseer, ademés, preparacién en enfermeria de salud piiblica, cuya preparacién incluiré ‘cursos de psicologfa, higiene mental, ‘ecucacién sanitaria y comprensién de los factores que determinan la con- ducta humana, asf como un buen enteidimiento de los problemas del ereci- mientoy desarrollo del nifio. Ademés, preveré, al emplearse, que trabajaré a les drdenes de una enfermera graduada supervisora, La preparacién exacta que se exige a la enfermera de salud piibliea requiere estudio més profundo y el Comité recomend6 que asf se haga. Bn los paises donde hay gran eseases de enfermeras, graduadas quizés no sea, posible conseguir enfermeras con las ealifieaciones deseritas para los servicios de higiene escolar. En tales casos se emplearén les enfermeras mejor preparadas que puedan conseguirse. Hsos paises deben tratar de establecer escuclas de enfermeria en las cuales los principios de higiene ‘mental, salud publica y prevencién de la enfermedad estén integrados en el programa de enseBanza bésica' de enfermeris. Ein esta forma todas las enfermeras estardn més eapecitadas para desempefiar sus funciones de censefianza positiva de higiene a los nifios y a sus familias Siempre que sea necesario y conveniente usar personal de enfermerfa auxiliar en el servicio de salud piblica de la escuela, ejereerdin sus fun- ciones bajo la supervisién de una enfermera graduada con preparacién en salud piblica, de ser posible. ‘Los procedimientos de higiene escolar varfan constantemente, Asi ta onfermera, al igual que otros trabajadores sanitarios, debe tener la oportu- nidad de mejorar sus calificaciones profesionales. Esto puede alcansarse de muchas maneras, por medio de reuniones del personal de educaciéa, * Véaso el informe de Ia primera zeunién del Comité de Expertos on Bafermeria, World Hlth. Oro, tech. Rep. Ser. 1950, 44, (Trad, eapattols, Of. San. Pan.; Pub. 269, 1951.) 36 asistencia a “institutos” en las vacaciones, o conferencias organizadas du- rante periodos breves. : 4.3.3 Maestros, Si so espera que los maestros ineulquen a los nifios précticas de higiene y una informacién apropiada, conducente a una vide sana, deben tener la oportunidad de aprender por sf mismos lo que deben ensefiar con respecto a salud y cémo ensefiarlo, La mejor manera de realizar esto, naturalmente, es introducir la ensefianza de la higiene como parte del programa de preparacién de los maestros en las instituciones de ensefianza ‘8 maestros. Hn esos cursos preparatorios, el futuro profesor aprender no slo los hechos fundamentales relacionados con el funcionamiento del cuerpo humano y las medidas de higiene preventiva, sino que también adquiriré experiencia en observar a los nifios desde el punto de vista de Ia salud y desarrollo, y en pruebas sencillas como las de la visidn y el peso de los nifios. Como ya se ha sefialado en la seccién sobre higiene mental, es evidente que el maestro necesita comprensién de las necesidades emocionales del nifio, Debe, por lo tanto, hacerse mucho hineapié en que durante su pre- paracién los maestros adquieran comprensiGn bisiea de las necesidades del niflo en las varias etapas del desarrollo, El futuro maestro debe también tener visién de los métodos por los cuales puede ensefiarse higiene utilizando las actividades y proyectos relacionados con la misma, Las instituciones de ensefianza para maestros necesitan mantener es- trechas relaciones con el funcionario de salud piiblica de la comunidad ¥ otros especialistas a fin de que el programa de estudios sobre la ensefianza de la higiene sea moderno en su enfoque y se utilicen los servicios de asesoria disponibles. ‘Muchos de los maestros que estén trabajando actualmente no han tenido esa preparacidn en la ensefianza de Ia higiene. Para ellos, la instruecién debe planearse especialmente por medio de cursos de vacaciones, conferencias, “nstitutos” y seminarios, en estrecha cooperacién con organismos de salud piiblica, grupos particulares de higiene, recursos de enfermerfa y médioos Yy otros grupos pertinentes. Los programas de ensefianza que se han encon- trado satisfactorios en los cursos “en servicio” para maestros han include estudios do casos de nitios, participacién en programas de higiene escolar y de la comunidad, demostraciones de téenicas buenas para el descubri- miento de casos, y desarrollo de nuevas unidades de ensefianza, Esos métodos de ensefianza deben formar parte importante de todo curso para maestros, Se estimularé el uso de ayudas visuales adecuadas y materiales de ensefianza de naturaleza muy prictiea, Se enfocarin Jos problemas teniendo en cuenta los recursos y prictica culturales de los nifos y padros cn la zona correspondiente, PRIMERA REUNIGN 37 4.3.4 Personal auriliar. En slgunas zonds de! mundo seré imposible durante algunos afios contar con el mémero de médicos calificados y enfermeras necesarias para el programa escolar. Por esta raain los auxiliares son una necesided definida y deben emplearse para que presten sus servicios bajo la supervision de personal adiestrado. ‘Actualmente gran parte del trabajo médico en algunas zonas lo reatizan Jos ayudantes médicos (auxiliares, auxiliares de hospitales, boticarios, preparudores, dependientes, inspectores sanitatios, ete.). Muchos individuos de esta categoria poseen capacidad e inteligencia y pueden utilizarse en el trabajo de higiene escolar. Fl empleo de ayudantes auxiliares, sin embargo, lleva consigo la responsabilidad de adiestrar a es0s trabajadores para nuevas tareas. Su adiestramiento, 1o mismo preventivo que curativo, ha sido muy escaso en Io concerniente a la salud del nifio, y més aun con respecto a educacién 0 medicina social Es necesario organizar cursos, por lo tanto, antes de que los trabaja- dores asuman sus responsabilidades, y a intervalos frecuentes después de cempleados. Su adiestramiento debe incluir aquellos aspectos de la salud del niflo y de Ja higiene escolar adecuados a las necesidades locales y dentro de Js capacidad del trabajador ausxiiar. Kntre los puntos que hay que recaleat, ‘estén el saneamiento del local escolar, elementos de nutricién y tratamiento de dolencias menores, junto con una comprensién de los tipos de enfermedad que necesitan cuidado médico y de hospital. Kin muchos sistemas de higiene escolar bien desarrollados, la préctica de emplear trabajadores suxiliares ‘con adiestramiento en servicios especiticos esté recibiendo gran estimulo, Los téenicos para realizar pruebas de la visidn y audicién, eyuda de secre- tarias para mantener los registros acumulativos, consejeras para orientar Jas necesidades de las nifins en Ins escuelas secundarias, voluntarias para ayudar en las elinicas de higiene escolar bien organizadas y en los prove mientos de eximenes médicos—todos constituyen ejemplos de la clase de asistencia auxiliar que se hace cada ver més itil. Hs evidente que el adies- tramiento es necesario en todas los grupos. 4.3.5 Programa de adiestramiento espectfico, El Comité considers el tema del adiestramiento adecuado y ia preparacién de personal como uno de Jos més fundamentales, y aunque hizo algunas indicaciones espectficas estimé imprescindible un estudio més detallado. Los planes cooperativos preparados por representantes de escuelas de medicina, salud pablica, enfermeria y editeacién, deben producir buenos programas para Tas escuelas respectivas, Las diferentes escuelas deben también participar en los planes yy administracién de los programas de estudios necesarios para realizar “ins- titutos” especiales de higiene escolar. 38 SERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR 6, Estructura Orgénica y Administrativa en Ia que Pueden Bcuadrar los Servicios de Higiene Escolar Al considerar cuél pudiera ser la mejor estructura orgénica y adminis- trativa en que pudieran encuedrar los servicios de higiene para nifios do edad escolar, el Comité ofrecis los siguientes prineipios de orientacién: ) Es posible una gran variedad en formas de administracién y no puede concebirse ninguna estructura esténdar para hacer frente a las circunstuncias de todos los pafses. (2) La eficiencia del trabajo de higiene escolar dependers menos de In estructura particular de la administracién que de la manera como los ‘grupos de higiene escolar desempefian sus funciones y Hegan a una com- prensién sobre la cooperacién con las dems autoridades que participan en Jos servicios relacionados con el trabajo escolar. (8) En vista de la importancia de esta relacién cooperativa, el Comité realizé Ia ventaja que se derivard de integrar la administracién del servicio de higiene escolar con la administracién del programa de higiene de la comunidad en general. Fsto puede conseguirse cuando ol funcionario meédico a cargo de la salud de Ia comunidad es también funcionario médico de la escuela, pero indudablemente puede también conseguirse de otros modos. (@) El funcionario médico de la escuela (y otro personal del grupo de higiene escolar) debe tener un nombramiento definitivo que lo coloque en posicién de responsabilidad hacia el mantenimiento de Ia salud en la escuela, Bajo ninguna circunstancia seri consideado como un visitante casual, sin responsabilidad continuada. (5) Las buenas relaciones entre el grupo de higiene escolar y la familia ¥ Ta comunidad (de la cual forma parte la escuela), serdn atin mejores cuando la enfermera que sirve la escuela sirva también Ins necesidades de higiene general de la comunidad. Donde no pueda hacerse esto, Iss dis- posiciones administrativas entre los departamentos permitirdn que la en- fermera que trabaja en la escuela participe en las reuniones do trabajo y profesionales de los trabajadores sanitarios de la comunidad. (6) Un servicio de higiene escolar debe servir a todos los nifios de edad escolar en una comunidad definida y por lo tanto debe incluir a los nitios que asisten a las escuelas privadas. (7) Los servicios de salud de los nifios de edad escolar no pueden aislarse de las actividades de higiene de la comunidad en general; sobre todo en Io ‘quese refiere a Jas actividades de higiene materno-infantil. Un buen servicio de higiene escolar, por Jo tanto, estard correlacionado con los servicios del nifio en Jos atfios pre-escolares haciendo, por ejemplo, que el personal de higiene escolar trabaje también en el servicio de higiene materno- infantil, F mismo principio se aplica al periodo después que se deja la PRIMERA REUNION 39 escuela y el servicio de higiene escolar debe estar correlacionado con los servicios de higieno general, tales como higiene industrial y servicios de alinica. (8) Anteriormente se hizo referencia a los consejos o comités de higiene escolar. St organizacién puede reunir a todos aquellos que en una zona se interesan on la higiene escolar—padres, industriales, y trabsjadores sociales, ademés del personal profesional més directamente interesado, Hn las pequefias colectividades donde In escuela es un centro de actividad de la comunidad, el comité de higiene de Ia poblacién puede muy bien funcionar ‘como comité de higiene escolar. (®) Bl Comité subrayé Ia importaicia del concepto de la salud total y continuada del nif, El trabajo prenatal, los centros de salud para Jac- ‘antes y nifios de edad pre-escolar, el trabajo de higiene escolar, y la super- visién de la salud de los adolescentes, deben ser dirigidos por la misma administracién médica, a fin de obtener continuidad ininterrumpida en la supervisién del individuo durante todo el perfodo de crecimiento y desa- rrollo, Donde administrativamente resulte imposible 0 poco eonveniente seguir este procedimiento, deben asumir la responsabilidad los diversos organismos interesados en coordinar su trabajo a fin de no fraccionar la atencién de la salud del nifo, 6. Nuevos Estudios En el curso de lus discusiones surgicron cicrtos temas que el Comité estimé merectan mayor consideracién y estudio detallado. Se recomend6, por Io tanto, que los siguientes problemas sean objeto de estudio, bien por miombros solecionodas det grupo asosor de expertos de la Organization Mundial de la Salud, o bien rofiriéndolos a otros comités de expertos 0 conferencias apropindos. (1) Estudio del empleo de registros de higiene escolar y anélisis de log registros hechos por el personal en el sentido de su utilidad, (a) para gufa de nifios y padres, (b) para mejorar las pricticas de supervisin y administrativas; (c) para suministrar informacion bGsica de investigacién en estudios planeavdos para la salud del nif (2) Un estudio del contenido del programa de estudios y métodlos de adiestramiento para preparacién de médicos en el trabajo escolar. La valides, de las nevesidades del programa se investigaré en términos de las clases de servicios y experiencias que encontrardn Ios médicos en las escuelas. (8) Un andlisis de os problemas de salud fitica, emocional y social que encuentre la enfermera y su signifieacién en el adiestramiento pre- servicio y mientras estin “en servicio” de las enfermeras de salud piblica empleadas en el trabajo de higiene escolar. (4) Un andlisis de los nuevos tipos de programas de higiene dental 40 BERVICIOS DE HIGIENE ESCOLAR con miras a determinar su utilided en las campafias de profilaxis en masa en scala rmundial. (6) Estudios sobre la manera cémo los servicios de higiene para el nifio {incapacitedo pueden coordinarse con los servicios de higiene para, todos los esedlares. (6) Estudios de programas de slimentacién escolar en Ia zona, para determinar su efecto sobre el crecimiento fisico, reacciones emocionales yy adaptacién social de los nifios. También es necesario un estudio sobre Ins actitudes y priicticas de los pedres cuando se proporcionan alimentos en Ia escuela. (7) Un andlisis de los problemas con que se tropieza en la administra- cidn efectiva de un servicio de higiene para personal escolar y eémo puede complementarse ese servicio. (8) Anilisis de los diferentes métodos para evaluar el estado de nutricién yy crecimiento, con miras a determinar su valor y efectividad en su uso en los programas de higiene escolar. (9) Un estudio de los distintos medios de coordinar los eximenes prac- ticados por médicos particulares, con el programa de la evaluacién con- tinua de ls salud del nifio, . Conclusiones Al terminar su labor para ln preparacién de un plan general de la politica bésica y procedimientos de higiene escolar, el Comité convino en que la aplicacién efectiva de programas mejorados indiscutiblemente darfa por resultado nifios y adultos més sanos y felices Todo pais tiene le oportunidad y la responsabilidad de revisar su politica de higiene para los nifios de edad escolar. Por medio de su informe, el Comité ha indicado la direccién que deben tomar esas revisiones y ha sefalado el modo de introducirlas. El Comité abrigé la esperanza que Ins ideas y sugestiones presentadas en el curso de las discusiones encontrarén aplicacién prictica para el mejoramiento de la salud de los nifios de edad escolar en todas las regiones. HOE *O00Z20787"

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