Hábitos de estudio Programa de Tutoría

Así se estudia mejor

Un espacio tranquilo y sin distracciones es el lugar ideal para
repasar las materias.
PLANIFICACIÓN
En las semanas que son muy
ajetreadas, lo mejor es planificar el día por
adelantado. Esto permite saber bien cuáles
son las tareas del día y darle prioridad a lo
más importante, además de poder resolver
problemas a tiempo. Dejar un espacio
diario para el estudio es más efectivo que
hacerlo “todo de una”.

DE DIFÍCIL A FÁCIL
Al momento de estudiar, no
siempre es bueno comenzar por lo más
fácil. Repasar las materias más importantes
o más difíciles al principio y dejar las más
fáciles para el final, permite usar mejor el
tiempo de estudio. También es recomendable darle antes una mirada general a la
materia, para tener una referencia sobre lo que se va a estar repasando.

ORDEN
Un escritorio ordenado ahorra mucho tiempo de estudio. Es importante botar
papeles que no sirven y, archivar fotocopias y apuntes, dejando a mano lo que más se
va a usar. También es primordial tener todos los elementos para el estudio cerca, para
así evitar levantarse y perder la concentración.

¿DÍA O NOCHE?

No todas las personas funcionan de la misma manera durante el día. Unos son
más activos en la mañana, mientras que otros funcionan mejor en la tarde o noche.
Hay que aprovechar ese momento en que uno se siente más energético para ponerse a
estudiar. Ahora bien, de todas maneras estudiar de noche o muy tarde puede tener
efectos contrarios porque se carga con el cansancio del día y eso puede afectar la
concentración.

AYUDANDO A LA CONCENTRACIÓN

El ruido y la música son constantes distractores al momento de estudiar, por

eso lo mejor es acudir a bibliotecas o lugares donde se mantenga el silencio. Un
escritorio despejado disminuye también la capacidad de distraerse. Y estudiar con el
estómago lleno tampoco ayuda a la concentración.
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ESPACIO PARA RELAJARSE

Ropa cómoda, buena postura y una iluminación adecuada ayudan a mantener

la concentración. Cuando el cansancio llega, o incluso antes, es bueno tomarse un
tiempo para distenderse, relajarse o escuchar música. Ese pequeño descanso permite
seguir adelante y no llegar al agotamiento.

ATENCIÓN EN CLASES
Asistir a clases y poner atención es parte fundamental para hacer más fácil el
estudio. Es la oportunidad para escuchar lo que dice el profesor, tomar apuntes y
consultar las dudas en la sala, despejando así las que pudieran aparecer durante el
estudio.

LA UNIÓN HACE LA FUERZA

Aunque estudiar individualmente es provechoso, también resulta bueno tener

un grupo, personas con las cuales compartir la materia y apuntes, e intercambiar
puntos de vista sobre lo que se está estudiando.

SUBRAYAR LA MATERIA
Los textos entregados en clases son esenciales para entender la materia del
curso o ramo. Para rescatar lo más importante de ellos es muy útil subrayar los títulos
y subtítulos, y los datos más relevantes (fechas, nombres y lugares), además de las
ideas fundamentales. A la vez, leer primero los textos un par de veces evita subrayar
de más.

BUENA ALIMENTACIÓN

Un cerebro nutrido funciona menor. Tomar desayuno completo todos los días,
con cereales, leche y frutas, permite trabajar bien durante el día. Por muy ricas que
sean el azúcar y las grasas, hay que dejarlas de lado para nutrir al cuerpo con alimentos
que den más energía, como ensaladas y carnes, ojala el pescado. Hidratarse también
es importante, por lo que se recomienda tomar un litro y medio de agua al día.

Para compartir:

1. ¿Qué aspectos relacionados al estudiar te llamaron la atención?

2. ¿Cuáles aspectos crees tú que te preocupas de realizar y cuáles

no en tu práctica diaria de estudio?