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COMPLICACIONES OBSTÉTRICAS
EN LA GESTANTE DIABÉTICA
María De la Calle Fernández-Miranda
9
INTRODUCCIÓN

La gestación y el parto de una embarazada diabética El presente capítulo se centrará en las complicaciones
conllevan un mayor número de complicaciones en com- que afectan a la madre, tanto en el curso del embarazo
paración con las gestantes no diabéticas (1-3). Estas com- como en el momento del parto, y que secundariamente
plicaciones pueden afectar tanto a la madre como al feto, también pueden hacerlo al feto.
según se muestra en la tabla 1.
Los factores de riesgo para la aparición de complicacio-
nes materno-fetales son fundamentalmente tres (4-6):
a) años de evolución de la diabetes; b) presencia de vas- Tabla 1. Complicaciones maternas
culopatía, y c) mal control glucémico. y fetales de la gestante diabética
El buen control glucémico durante la gestación se aso-
Complicaciones Complicaciones embrionarias
cia a disminución de la hipertensión arterial, hidramnios, maternas y fetales
amenaza de parto prematuro e infección urinaria (4-7).
En la actualidad, y gracias a las consultas preconcepcio- Hipertensión arterial Aborto
nales específicas para mujeres diabéticas, no suele reco- Preeclampsia Malformaciones congénitas
mendarse el embarazo hasta no tener un buen control de (urinarias, cardiacas, neurológicas,
Hidramnios etc.)
la glucemia. Sin embargo, debido a que las mujeres se
embarazan cada vez más tarde, se siguen encontrando Cetoacidosis Alteraciones del crecimiento
diabéticas de muchos años de evolución, muchas de ellas Infección vaginal (macrosomía fetal, crecimiento
intrauterino retardado)
con afectación vascular. Por otro lado, el aumento de la
Infección urinaria
inmigración en España en los últimos años ha llevado a Alteraciones de la maduración fetal
que cada vez haya más inmigrantes embarazadas, algunas Amenaza de parto prematuro
Alteraciones del bienestar fetal
de ellas diabéticas no conocidas o mal controladas y con Parto pretérmino
un mal seguimiento de su gestación. Muerte fetal intraútero
Cesárea
Por tanto, a pesar de que cada vez se tiene una mayor
vigilancia sobre las gestantes diabéticas, los factores ante- Infección puerperal
riormente referidos propician que sigan apareciendo Muerte materna
complicaciones obstétricas en éstas (2, 3).

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COMPLICACIONES GESTACIONALES

HIPERTENSIÓN ARTERIAL INDUCIDA que ha mejorado su control; sin embargo, va aumentan-


do entre las pregestacionales (2, 9). En un estudio de este
POR EL EMBARAZO. PREECLAMPSIA tipo de diabéticas, entre los años 1996 y 2001, se encon-
tró un incremento en la aparición de hipertensión arte-
La hipertensión inducida por el embarazo es la forma rial (4,13 –3,44-4,96–) y de preeclampsia/eclampsia (4,4
más común de enfermedad hipertensiva. Se trata de una –3,43-5,73–) en comparación con las gestantes no diabé-
hipertensión arterial aislada, sin evidencia de afectación ticas (2). En otro estudio, llevado a cabo entre 1965 y
multiorgánica y sin repercusión sobre el bienestar fetal. 2003, se observó un descenso en la incidencia de apari-
Muchos de estos casos representan una forma latente o ción de preeclampsia e hipertensión inducida por el
no diagnosticada de hipertensión crónica, que se mani- embarazo en las diabéticas gestacionales (de 10 a 8,8%),
fiesta en el embarazo ante la sobrecarga hemodinámica mientras que existía un aumento de estas patologías entre
de éste. Por el contrario, la preeclampsia es una enferme- las diabéticas pregestacionales (de 8 a 21,3% entre las
dad endotelial sistémica caracterizada por una vasocons- clases B y C, y de 15,7 a 41% en las clases D o mayores)
tricción generalizada, que aparece en forma de hiperten- (12). Para diferenciar entre las distintas complicaciones
sión arterial, edemas y proteinuria, y que puede llegar a hipertensivas, se ha descrito que, conforme se va avan-
producir una gran morbimortalidad materno-fetal si no se zando en la clasificación de White (6, 7), la preeclamp-
controla (8). Las gestantes diabéticas con una vasculopa- sia es más frecuente: un 10,8% en la clase B, un 22% en
tía basal tienen mayor predisposición para sufrir hiper- la C, un 21,4% en la D y un 36,2% entre la F y R (13).
tensión arterial y preeclampsia (7). Por tanto, la aparición y gravedad de hipertensión indu-
Las enfermedades hipertensivas, tanto la hipertensión cida por el embarazo y la preeclampsia están relacionadas
inducida por el embarazo como la preeclampsia, son más con el grado de control glucémico y con la gravedad de la
frecuentes en las diabéticas pregestacionales o gestacionales enfermedad diabética, con una frecuencia mayor en las
que en las gestantes no diabéticas (2, 3). En tres estudios diabéticas pregestacionales, fundamentalmente en las que
realizados recientemente se encontró un aumento significa- pertenecen a los tipos D, F y R de White (6, 7).
tivo de enfermedad hipertensiva en las pacientes con dia- La aparición de hipertensión inducida por el embarazo
betes gestacional en comparación con el grupo control (9- y la preeclampsia contribuye a su vez a un mayor número
11). Algunos autores afirman que la hipertensión arterial es de complicaciones secundarias, como el parto pretérmino
la complicación obstétrica más frecuente entre las diabéti- y la cesárea (7). Greene et al. (1989) comprobaron que la
cas pregestacionales, con una incidencia del 18% (3). En la aparición de parto pretérmino era mucho más frecuente
tabla 2 se resumen los últimos estudios comparativos sobre entre las diabéticas hipertensas que entre las que no pre-
la incidencia de enfermedad hipertensiva en las gestantes sentaban hipertensión (7). Cousins (1995) encontró en
diabéticas en comparación con las no diabéticas. una revisión realizada entre 1986 y 1993 que las compli-
Actualmente, la incidencia de esta patología parece ir caciones hipertensivas eran la segunda causa más fre-
disminuyendo en las diabéticas gestacionales a medida cuente de parto pretérmino y de finalización electiva del

Tabla 2. Hipertensión arterial inducida por el embarazo y preeeclampsia en gestantes diabéticas y no diabéticas

Diabetes mellitus Controles p Investigadores

Tipo N.o % N.o %

Preeclampsia/hipertensión inducida por el DMG 28/143 19,6 15/143 10,5 < 0,05 Jensen (10)
embarazo
DMG 16/57 21,9 1.632/21.377 7,1 < 0,05 Roach (9)
DMG 8/149 5,3 18/289 6 NS Rizk (47)
DMG 6/218 2,8 0/108 0 < 0,01 Vambergue (11)
Tipo 1 117/683 17,1 23/854 2,7 < 0,0001 Hiilesmaa (18)
B-F, R 79/616 12,8 23/854 2,7 < 0,0001 Hiilesmaa (18)
F, FR 38/67 57 23/854 2,7 < 0,0001 Hiilesmaa (18)
DMG: Diabetes mellitus gestacional. B-F, R, FR: diabetes pregestacional (clases de White). NS: no significativa.

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embarazo (14). A medida que aumenta la gravedad del HIDRAMNIOS
estado hipertensivo, también aumenta la incidencia de
parto pretérmino. Así, en el estudio realizado por Cundy El hidramnios, también llamado polihidramnios, es la
et al. (2002), se describía una incidencia de parto pretér- cantidad de líquido amniótico aumentado por encima de
mino de un 3,5% entre las gestantes diabéticas sin hiper- 2 litros (23). Se considera un indicador no específico de
tensión, de un 10,6% cuando existía hipertensión arterial complicación del embarazo, ya que se asocia con rotura de
crónica y de un 23,1% si aparecía preeclampsia (15). membranas, amenaza de parto prematuro y malestar
El mecanismo fisiopatológico por el que la diabetes des- materno que puede llevar hasta una insuficiencia respira-
encadena hipertensión permanece aún sin aclarar. Sin toria. Aunque el 80% de los hidramnios son leves, cuan-
embargo, se sabe que un deficiente control metabólico do aparecen hidramnios moderados o graves existen, en la
favorece la aparición de complicaciones hipertensivas mayoría de los casos, alteraciones maternas y fetales (24).
(15-19). Coombs et al. (1993) comprobaron que las dia- La diabetes mellitus es, sin duda, la patología materna
béticas pregestacionales con unos niveles de hemoglobi- más frecuentemente asociada con hidramnios. De hecho,
na glicosilada superior al 9% entre las semanas 12 y 16 cuando en una ecografía se observa la presencia de líquido
tenían un riesgo 1,4 veces mayor de desarrollar pre- amniótico aumentado, siempre se debe descartar la existen-
eclampsia en comparación con las que tenían niveles cia de diabetes en la madre (25). Queenan y Gadow (1970)
iguales o menores del 9% (16). Hsu et al. (1996) sostení- encontraron, en un serie de 296 casos de polihidramnios,
an que los niveles aumentados de hemoglobina glicosila- que un 24,6% correspondían a gestantes diabéticas, y que
da en cualquier momento de la gestación aumentaban el era la segunda causa más frecuente de su serie (26).
riesgo de preeclampsia, por lo que habría que promover La incidencia de hidramnios es más elevada en diabéti-
un buen control glucémico desde antes de la gestación cas gestacionales y pregestacionales que en las gestantes
(17). En un estudio de 683 pacientes diabéticas tipo 1 se no diabéticas (12, 27, 28) (tabla 4).
comprobó que un deficiente control glucémico favorecía La frecuencia de hidramnios entre las gestantes diabé-
la aparición de preeclampsia, y no influía en el riesgo de ticas varía mucho según las distintas series publicadas,
hipertensión inducida por el embarazo (18). con un rango comprendido entre el 3 y el 30%, según los
En conclusión, todos estos hallazgos sugieren que un autores (5, 27-31). Esta disparidad de datos puede deber-
buen control glucémico, con unos niveles bajos de hemo- se a los diferentes criterios seguidos en cada estudio para
globina glicosilada desde antes de la gestación, puede el diagnóstico de hidramnios. La mayoría emplean la
prevenir la aparición de estados hipertensivos en el valoración subjetiva del ecografista a la hora de cuanti-
embarazo. ficar la cantidad de líquido amniótico. Sin embargo,
Williams y Wittman (1993), en un estudio sobre la valo-
ración del líquido amniótico, no encontraron diferencias
CETOACIDOSIS significativas entre la medición de forma subjetiva y la
realizada mediante el índice de líquido amniótico (32).
A lo largo de la historia, la cetoacidosis diabética ha
El hidramnios es más frecuente en las diabéticas preges-
sido una de las complicaciones más graves del embarazo
tacionales que en las gestacionales, habiéndose descrito
de la gestante diabética, ya que su presencia producía
una incidencia del 26% en las primeras (29) y del 2% en
una alta morbimortalidad tanto para la madre como
las segundas (29-31).
para el feto. Según las últimas publicaciones, su inci-
El mecanismo por el que se produce un aumento de líqui-
dencia ha disminuido considerablemente en los últimos
do amniótico puede ser un incremento en su producción, o
años. En la revisión realizada por Chauhan et al.
un descenso en la eliminación. En el caso de la diabetes
(1996), éstos encontraron un 22% de cetoacidosis dia-
bética, con un 35% de muerte fetal entre 1976 y 1981;
en cambio, entre 1986 y 1991, esta complicación dismi-
nuyó al 3% y la mortalidad fetal al 11% (20). Cullen et Tabla 3. Factores desencadenantes
al. (1996) obtuvieron resultados similares, con una inci- de cetoacidosis diabética
dencia de cetoacidosis diabética del 2% en una serie de
• Infecciones urinarias
520 diabéticas pregestacionales tratadas entre 1985 y
• Infección viral
1995 (21).
Aunque la frecuencia de cetoacidosis diabética parece • Incumplimiento o mala administración de la insulina
haber disminuido en los últimos años, siempre se debe • Alteraciones en la dieta
tener presente esta complicación por su grave repercu- • Administración de betamiméticos
sión materno-fetal. Lo más importante es la prevención • Administración de glucocorticoides
de las causas desencadenantes, que se resumen en la ta- • Inadecuado control clínico de la diabetes
bla 3 (22).

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mellitus, la causa aún se desconoce, aunque la hipótesis más senta como una infección asintomática (34, 35). La pre-
avalada es la de que el hidramnios se produce por un valencia de candidiasis durante el embarazo es del 20-
aumento de la producción de líquido amniótico, debido al 30% según los estudios (35, 36).
incremento de la diuresis fetal. La hiperglucemia materna En las gestantes diabéticas, la frecuencia de candidiasis
induce hiperglucemia fetal, lo que produce una diuresis vaginales aumenta todavía más, ya que confluyen dos fac-
osmótica por parte del feto. Otros mecanismos para expli- tores de riesgo como son el embarazo y la propia diabetes,
car el hidramnios en estas pacientes son los siguientes: que es uno de los factores predisponentes más conocidos
de micosis vaginales (37). Se ha descrito una frecuencia
• La glucosa transferida por la placenta, entre un com- de micosis vaginal 4 veces mayor en las diabéticas preges-
partimento hiperglucémico materno y un comparti- tacionales y 2 veces mayor en las gestacionales con res-
mento normal fetal, haría que el líquido fluyese hacia pecto a las no diabéticas (38). La prevalencia de candi-
el compartimento fetal. diasis vaginales en las gestantes diabéticas oscila entre el
• La expansión de volumen y el aumento de la filtración 40 y el 60% (38, 39), y está relacionada directamente con
glomerular aumentarían la producción de orina fetal. los niveles de glucosa (40), aunque no parece que esté
• La alteración del equilibrio entre la deglución y la diu- vinculado con la edad gestacional (38).
resis fetal. Como ya se ha mencionado, el germen más frecuente de
la infección vaginal en las gestantes diabéticas es un hon-
Rosenn et al. (1993) encontraron que la incidencia de go, en concreto la C. albicans. Sin embargo, también se
hidramnios estaba significativamente relacionada con los han encontrado otros agentes causantes, como Trichomonas,
valores aumentados de glucosa materna (29). Además, y otros hongos más inusuales, como Saccharomyces, Geo-
estos autores comprobaron cómo los niveles de hemoglo- trichum, Rhodotorula y Trichosporum (40, 41).
bina glicosilada estaban significativamente elevados en En la mayoría de los casos no suele aparecer sintomato-
las gestantes con hidramnios, en relación con el grupo sin logía, y se descubre la existencia de la micosis durante la
hidramnios. Bar-Hava et al. (1994), por su parte, en un exploración ginecológica –en forma de flujo blanquecino
estudio sobre 339 diabéticas gestacionales, encontraron grumoso–, o en los exámenes rutinarios de exudados
que las embarazadas con hidramnios tenían unos valores vaginales durante el embarazo. Otras veces se detectan
de glucosa significativamente mayores un día y una sema- por un empeoramiento brusco en los perfiles glucémicos
na antes del hallazgo ecográfico (33). (43). En muchas ocasiones, la sintomatología que refiere
En conclusión, el hidramnios es más frecuente en la la paciente no se debe a una infección vaginal, sino a los
población diabética que en la no diabética y, a su vez, cambios fisiológicos del embarazo, como son el flujo
entre las diabéticas pregestacionales en comparación con aumentado o el prurito vaginal inespecífico. En un estu-
las gestacionales. dio reciente, un 27,6% de las gestantes con sintomatolo-
gía tenían candidiasis y un 60,4% de las mujeres con
micosis vaginal presentaban síntomas (38).
INFECCIONES VAGINALES Ante el diagnóstico de una candidiasis vaginal, sinto-
Las infecciones vaginales, y en concreto las micosis, mática o no sintomática, debe instaurarse un tratamien-
son más habituales en las gestantes en general que en las to antifúngico para prevenir alteraciones en el perfil glu-
mujeres no embarazadas. Esto es debido fundamental- cémico, rotura prematura de membranas, amenaza de
mente al aumento de los niveles de estrógenos durante el parto prematuro y micosis neonatales (41, 42).
embarazo, que favorece el acúmulo de glucógeno en el
epitelio vaginal, proporcionando el medio idóneo para el INFECCIONES URINARIAS
crecimiento de los hongos (34, 35). Dentro de las mico-
sis vaginales, el hongo que se aísla con más frecuencia es Las infecciones del tracto urinario son las segundas en fre-
la Candida albicans, y en la mayoría de los casos se pre- cuencia después de las vaginales en las gestantes diabéticas.

Tabla 4. Hidramnios en gestantes diabéticas en comparación con no diabéticas

Diabetes mellitus Controles Odds ratio (IC 95%) p Investigadores

Tipo N.o % N.o %

Hidramnios DMG 39/824 4,8 > 120.000 0,7 7,23 (5,0-10,5) < 0,001 McMahon (27)
B-F, R 21/288 7,3 1/150 0,7 < 0,05 Reece (28)
DMG: diabetes mellitus gestacional. B-F, R: diabetes pregestacional (clases de White).

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En general, las pacientes diabéticas no gestantes tie- Así, Vejlsgaard, en 1973, describía una incidencia de bac-
nen más propensión a las infecciones urinarias con res- teriuria asintomática del 18,2% en la gestantes diabéticas
pecto a la población general por la presencia de varios frente al 4,5% en las no diabéticas (50). Sin embargo, en
factores de riesgo asociados a su enfermedad: alteracio- otro estudio más reciente, esta incidencia no ha sido dife-
nes inmunitarias (afectación de la quimiotaxis leucoci- rente en ambos tipos de gestantes (47) (tabla 5).
taria), alteración de la actividad fagocitaria de los neu- El microorganismo más frecuentemente aislado en la
trófilos, aumento del contenido de glucosa en la orina, bacteriuria asintomática de las gestantes diabéticas es, en
presencia de una vejiga neurógena, malformaciones el 60-80% de los casos, Escherichia coli, aunque también
nefrourológicas y presencia de microangiopatía (nefro- es posible aislar C. albicans (47, 51).
patía) (v. tabla 6) (43-45). Si a estos factores se añaden Los análisis de orina y de urocultivos deben llevarse a
los propios de toda gestación, como acortamiento de la cabo de forma rutinaria varias veces a lo largo de la ges-
uretra, cambios en el pH urinario, cambios en la con- tación. Si el resultado del urocultivo indica la existencia
centración de IgA del flujo vaginal, cambios anatómi- de más de 100.000 colonias de E. coli, debe instaurarse
cos que dificultan el vaciamiento vesical y favorecen el tratamiento antibiótico. De lo contrario, la infección
reflujo y la contaminación perianal y vulvovaginal, la puede progresar de manera ascendente, complicándose
incidencia de infección urinaria resulta aumentada en con pielonefritis, amenaza de parto prematuro, septice-
estas pacientes (46). En conclusión, las gestantes diabé- mia, preeclampsia y hasta muerte materna y fetal (49). La
ticas, tanto por su propia enfermedad como por la gesta- progresión a pielonefritis sería del 20-40% sin tratamien-
ción, son la población que con más frecuencia padece to y del 4% tras antibioterapia (52).
infecciones urinarias (45).
Las infecciones del tracto urinario se presentan en la ges- PIELONEFRITIS
tante diabética generalmente en forma de bacteriuria asin-
Se caracteriza por fiebre, dolor lumbar localizado con
tomática, diagnosticada en un estudio rutinario de orina,
puñopercusión positiva y leucocitosis asociada. En la ges-
como ocurre en el resto de las gestantes. Sin embargo, en
tante, además, la pielonefritis puede producir irritación
este grupo de pacientes, las infecciones urinarias pueden
del músculo uterino, desencadenando contracciones y
complicarse y presentarse en forma de pielonefritis, produ-
una amenaza de parto prematuro o rotura prematura de
ciendo una alta morbilidad materno-fetal (47). Se comen-
membranas. Al mismo tiempo, la colonización bacteria-
tarán ambos tipos de formas clínicas por separado.
na del líquido amniótico puede provocar corioamnioni-
tis, sepsis fetal y muerte materna y fetal (6).
BACTERIURIA ASINTOMÁTICA
Aunque las publicaciones de hace algunas décadas indi-
Es la forma clínica más frecuente de infección urinaria caban claramente una mayor frecuencia de pielonefritis en
en las gestantes en general. Según Quiroga et al. (2007), las gestantes diabéticas, los datos de estudios actuales son
en un estudio reciente sobre 72 gestantes, la frecuencia contradictorios. En uno de ellos no se encontraron diferen-
era del 25%, y sólo un 16,7% de las infecciones urinarias cias significativas de su incidencia entre gestantes diabéti-
desarrollaron síntomas (48). En un estudio más amplio, cas y no diabéticas (47), mientras que en otro se halló un
sobre 1.100 gestantes, se encuentra una incidencia del aumento en el primer grupo (28). En este último estudio
6,1% sin relación con la paridad, edad gestacional o índi- no se observaron diferencias en la incidencia de pielonefri-
ce de masa corporal (49). tis en las diabéticas con o sin afectación vascular, ni con
Históricamente se ha considerado que la frecuencia de buen o mal control glucémico (tabla 5).
bacteriuria asintomática es mayor en las gestantes diabé- En conclusión, y a la vista de los estudios realizados,
ticas respecto a las no diabéticas, por la asociación de fac- parece que la incidencia de pielonefritis no está significa-
tores de riesgo de la diabetes y de la gestación (43-45). tivamente aumentada en las gestantes diabéticas. Esto

Tabla 5. Infecciones urinarias en gestantes diabéticas y no diabéticas

Diabetes mellitus Controles p Investigadores

Tipo N. o % N. o %

Bacteriuria asintomática DMG 7/149 4,6 12/298 4,02 NS Rizk (47)

Pielonefritis DMG 2/149 1,3 3/298 1,0 NS Rizk (47)


B-F, R 10/288 3,5 0/150 0 < 0,05 Reece (28)
DMG: diabetes mellitus gestacional. B-F, R: diabetes pregestacional (clases de White). NS: no significativa.

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puede deberse a la mejora en la detección y el tratamien- Tabla 6. Evolución de mortalidad materna
to precoz de la bacteriuria asintomática durante la gesta- en gestantes diabéticas (12)
ción y al riguroso control de las gestantes diabéticas en
Años N.o de muertes Muertes maternas/
los últimos años. maternas 100.000 nacidos vivos

1965-1985 3/2.614 115


MUERTE MATERNA 1986-1993 9/6.070 148

Históricamente, las gestantes diabéticas han sido uno 1994-2003 5/12.360 40


de los grupos con más alta mortalidad en el embarazo.
Aunque las cifras de muerte materna han ido disminu-
yendo, la mortalidad en las gestantes diabéticas sigue
estando por encima de la población no diabética. En la
revisión realizada por Cousins, se observa un descenso 2 casos de crisis hipoglucémicas, 1 caso de cetoacidosis,
general de la mortalidad materna entre los años 1965 y 1 caso de infarto cerebral tras una cesárea y 1 caso atri-
2003 de 115 a 40 por cada 100.000 nacidos vivos (12). buido a complicaciones de la anestesia epidural (53). Los
En la tabla 6 se resumen estos datos. 2 casos de hipoglucemia ocurrieron en las semanas 10 y
Leinonen et al. (2001), en su estudio sobre 972 dia- 15 de gestación, por lo que cada vez es más importante el
béticas tipo 1 realizado entre los años 1975 y 1997, refi- buen control glucémico desde las primeras semanas del
rieron 5 muertes durante la gestación (53). Dos de ellas embarazo. En otros dos estudios recientes se describen
presentaban nefropatía diabética y las otras tres mostra- 4 y 5 casos, respectivamente, de muerte materna en ges-
ban microaneurismas en la retina, sin otras complicacio- tantes diabéticas, aunque no se especifican las semanas
nes vasculares. Las causas de la muerte materna fueron: de gestación ni las causas de muerte (54, 55).

COMPLICACIONES OBSTÉTRICAS

AMENAZA DE PARTO PREMATURO esta complicación disminuye con un buen control meta-
bólico preconcepcional y durante la gestación (58). Sin
embargo, el riesgo de dicha complicación aumenta cuan-
Se define como amenaza de parto prematuro la presen- do la hemoglobina glicosilada está elevada a las 28 sema-
cia de contracciones uterinas acompañadas o no de modi- nas de gestación y cuando existen infecciones vaginales
ficaciones del cérvix uterino entre las 22 y las 37 semanas concomitantes por Candida y Trichomonas (41).
de gestación. La dinámica del parto puede desencadenar-
se por factores maternos, uterinos o fetales, como se resu-
men en la tabla 7. Sin embargo, hay algunos casos en los
Tabla 7. Factores de riesgo
que no se encuentra causa aparente para justificar una
de amenaza de parto prematuro (56)
amenaza de parto prematuro y las contracciones se desen-
cadenan de forma espontánea.
Factores maternos Nivel socioeconómico bajo, edad
La amenaza de parto prematuro es más frecuente entre
< 18 años o > 40 años, escaso peso
las gestantes diabéticas en general que en la población no antes de la gestación, tabaco
diabética (7, 12, 30, 31, 41). Dentro de la población dia- y drogas (cocaína y heroína)
bética, la incidencia entre las diabéticas pregestacionales Antecedentes obstétricos Parto pretérmino, abortos tardíos
oscila entre un 20-30% (29, 41), mientras que en las dia-
Factores uterinos Volumen uterino aumentado
béticas gestacionales está entre el 6,2 y el 9,3%, aunque (polihidramnios, gestación múltiple),
esta última incidencia es similar a la de las gestantes no anomalías congénitas (útero bicorne
diabéticas (12, 30, 31, 57). Por tanto, parece más correc- o unicorne), miomas, incompetencia
to decir que la amenaza de parto prematuro es más fre- cervical, traumatismos
cuente en las diabéticas pregestacionales en comparación Factores fetales Malformaciones fetales, gestación
con las no diabéticas. múltiple, muerte fetal
El mecanismo por el cual la diabetes desencadena la Infecciones Urinarias y vaginales
amenaza de parto prematuro es aún desconocido, si bien

112 COMPLICACIONES OBSTÉTRICAS EN LA GESTANTE DIABÉTICA


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El tema más controvertido de la amenaza de parto pre- neumocitos tipo II del epitelio alveolar. Las dosis utiliza-
maturo hasta hace unos años era el tratamiento en la ges- das son 12 mg i.m. de betametasona cada 12 horas, du-
tante diabética. Los dos objetivos básicos en el trata- rante 24 horas. La hiperglucemia es también el efecto
miento de cualquier gestante con esta complicación son secundario más frecuente tras la administración de gluco-
inhibir las contracciones uterinas y madurar los pulmones corticoides, y necesita, al igual que con los betamiméti-
fetales. cos clásicos, un ajuste en la dosis de insulina. En este caso
Hasta hace pocos años, la inhibición de la dinámica ute- no se dispone de otro fármaco alternativo, y se asume la
rina se llevaba a cabo con la administración intravenosa de prescripción de betametasona porque los beneficios feta-
betamiméticos (ritodrine), que aumentaban secundaria- les superan los efectos adversos maternos.
mente la glucemia materna. Este incremento de la gluce-
mia parecía deberse a una estimulación del páncreas
materno para la secreción de glucagón, con la consiguien- PARTO PRETÉRMINO
te glucogenólisis y glucogenogénesis. La hiperglucemia era
máxima a las 3 horas de iniciar la perfusión y se normaliza- Tras el tratamiento tocolítico en la amenaza de parto
ba a las 24 horas, por lo que se compensaba esta hiperglu- prematuro hay algunos embarazos que no se consiguen
cemia con un ajuste insulínico en perfusión intravenosa y frenar, produciéndose de forma inevitable el parto prema-
un control horario de la glucemia capilar y cuerpos cetóni- turo. En otras ocasiones es el riesgo para la madre o para
cos en orina. Actualmente, este problema se ha solventa- el feto los que determinan la finalización precoz, por
do con la introducción en la mayoría de los hospitales ter- parte del obstetra, de la gestación. Por lo tanto, cuando se
ciarios de un nuevo tocolítico llamado tractocile. El habla de parto pretérmino debe diferenciarse entre parto
tractocile es un análogo de la oxitocina, que actúa blo- pretérmino espontáneo y parto pretérmino inducido, que
queando de forma selectiva los receptores de oxitocina del se expondrán separadamente más adelante.
miometrio (56). Es igual de eficaz que los betamiméticos El parto pretérmino total, es decir, espontáneos más
en cuanto a su efecto tocolítico, pero tiene muchos menos inducidos, es más frecuente en las gestantes diabéticas
efectos adversos, sin haberse descrito alteraciones en el que en las no diabéticas. En la tabla 8 se exponen los
perfil glucémico en las gestantes diabéticas. estudios comparativos entre ambos grupos, realizados los
El segundo objetivo importante que se debe tratar ante últimos años, diferenciando entre parto pretérmino
una amenaza de parto prematuro es la maduración pul- espontáneo, inducido o total. La incidencia de parto pre-
monar fetal. Ésta se realiza administrando glucocorticoi- término total en el grupo de diabéticas pregestacionales
des intravenosos (betametasona), que estimulan la sínte- era del 41,7%, según Malinowska-Polubiec et al. (2005)
sis y liberación de la sustancia tensioactiva a partir de los (3). En otro estudio reciente sobre 913.255 gestantes

Tabla 8. Parto pretérmino en gestantes diabéticas y no diabéticas (12)

Diabetes mellitus Controles Odds ratio (IC 95%) p Investigadores

Tipo N.o % N.o %

PP espontáneo
< 37 sem DMG 34/555 6,2 946/14.552 6,5 – NS Bar-Hava (60)
B-F, R 43/288 14,9 10/150 6,7 – < 0,05 Reece (28)
B-F, R 74/461 16,1 288/2.738 10,5 1,6 (1,2-2,2) < 0,05 Sibai (61)
< 35 sem B-F, R 41/461 8,9 122/2.738 4,5 2,1 (1,4-3,0) < 0,05 Sibai (61)

PP inducido
< 37 sem B-F, R 101/461 21,9 92/2.738 3,4 8,1 (6-11) < 0,05 Sibai (61)
< 35 sem B-F, R 34/461 7,4 45/2.738 1,6 4,8 (3-7,5) < 0,05 Sibai (61)

PP total
< 37 sem DMG 15/143 10,5 7/143 4,9 – NS Jensen (10)
B-F, R 175/461 38 380/2.738 13,9 2,7 (2,3-3,2) < 0,05 Sibai (61)
< 35 sem B-F, R 75/461 16,3 167/2.738 6,1 2,7 (2,1-3,4) < 0,05 Sibai (61)
PP: parto pretérmino. sem: semana. DMG: diabetes mellitus gestacional. B-F, R: diabetes pregestacional (clases de White). NS: no significativa.

DIABETES Y EMBARAZO
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(3.439 diabéticas pregestacionales, 4.051 diabéticas ges- cuente inducir el parto prematuramente en comparación
tacionales y 905.765 controles) se encontró un aumento con la gestante no diabética, ya que acontecen más situa-
del parto pretérmino total, menor de 31 semanas, tanto ciones críticas que pueden poner en riesgo la vida de la
en las diabéticas pregestacionales como en las gestaciona- madre y el feto. Sibai et al. (2000) encontraron una inci-
les. En ambos grupos también era mayor esta complica- dencia 8 veces mayor de parto pretérmino inducido por
ción entre las semanas 32 y 37 (1). debajo de la semana 37 y 4 veces mayor por debajo de la
Los estudios realizados exclusivamente en diabéticas pre- semana 35 en las gestantes diabéticas pregestacionales,
gestacionales hacen especial hincapié en la existencia o en comparación con el grupo control (61) (tabla 8).
ausencia de nefropatía (clase F de White), como factor La causa más frecuente de parto pretérmino inducido es
pronóstico de un parto pretérmino. Kimmerle et al. la hipertensión crónica o la preeclampsia (2, 3, 7, 64).
(1995), en un estudio sobre 150 diabéticas pregestaciona- Otros motivos de finalización prematura de la gestación son
les, encontraron una incidencia de parto pretérmino total la macrosomía fetal, las malformaciones fetales o las altera-
(< 34 semanas) de 31% en las pacientes de la clase F, por- ciones del bienestar fetal demostradas por eco-Doppler o
centaje significativamente superior al de las diabéticas sin registro cardiotocográfico externo (1, 2, 5, 12, 65).
nefropatía (54). Miodovnik et al. (1996) describieron, en En estos casos se deben hacer madurar los pulmones del
su estudio sobre 182 diabéticas pregestacionales, un 57% feto mediante la administración de betametasona (2 dosis de
de parto pretérmino total (<37 semanas) en las de clase F 12 mg i.m./12 horas), para luego proceder a la inducción del
en comparación con un 25% en las de clase B-R (p < 0,01) parto o a la realización de la cesárea según la indicación
(55). Zhu et al. (1997) encontraron un 69,5% de parto apropiada en cada caso. En las gestantes diabéticas, la madu-
pretérmino total en diabéticas de las clases R-F en compa- ración pulmonar fetal debe realizarse en toda inducción por
ración con un 30,5% de las clases B-D (p < 0,0001) (59). debajo de las 37 semanas, en comparación con la población
no diabética, donde se realiza por debajo de las 35 semanas.
PARTO PRETÉRMINO ESPONTÁNEO

El parto pretérmino desencadenado de forma espontá- INDUCCIÓN DEL PARTO


nea está aumentado en las gestantes diabéticas (12), aun-
que no en las gestacionales. Así se demuestra en el estu- La inducción del parto pretérmino no sólo es más habi-
dio de Bar-Hava et al. (1997), en el que la incidencia de tual en las gestantes diabéticas, sino también la del parto
esta complicación en las diabéticas gestacionales es simi- a término por encima de la semana 37. Feig et al. (2006),
lar al grupo control (60) (tabla 8), con unos perfiles glu- en su estudio realizado entre los años 1996 y 2001,
cémicos similares en ambos grupos. encontraron que la inducción del parto era un 1,69 más
En las diabéticas pregestacionales se ha encontrado una frecuente en las diabéticas pregestacionales en compara-
incidencia mayor de parto pretérmino espontáneo que en ción con la población no diabética (2).
los controles (28, 61), y esta incidencia es aún mayor El protocolo actual indica que, en la diabética pregesta-
cuando existe un mal control glucémico o una alteración cional, el parto generalmente debe inducirse, si no lo ha
microvascular (28). Los niveles de hemoglobina glicosi- hecho espontáneamente, en la semana 38. En la diabéti-
lada están más elevados en las gestantes con parto pretér- ca gestacional, si no presenta ninguna complicación, el
mino espontáneo, y el riesgo aumenta un 37% por cada parto no se provocará hasta la semana 40.
incremento del 1% de la hemoglobina glicosilada (62). La inducción en las gestantes diabéticas se realiza igual
El mecanismo fisiopatológico para explicar el riesgo que en las no diabéticas. Primero se madura el cuello uteri-
aumentado de parto pretérmino espontáneo en las diabéti- no con prostaglandinas, bien en forma de gel intracervical
cas pregestacionales no está bien esclarecido. Se ha indica- o bien en forma de cintilla colocada alrededor del cérvix.
do que los niveles aumentados de glucemia en el segundo La cintilla de prostaglandinas es el método más utilizado en
trimestre de embarazo podrían provocar contracciones ute- la actualidad por la posibilidad de retirarla en caso de efec-
rinas. Otra teoría está en relación con la mayor frecuencia tos adversos o dinámica uterina franca. Posteriormente se
de infecciones (vaginales y urinarias) en las pacientes diabé- procede a la administración intravenosa de oxitocina y a la
ticas, que desencadenarían dinámica uterina por irritación monitorización interna tras la amniorrexis.
muscular (12). El aumento en los niveles de prostaglandina Es importante recordar que la paciente debe estar monito-
E, cuando existe un mal control glucémico, es otro mecanis- rizada durante toda la inducción, tanto para registrar la diná-
mo propuesto para explicar el parto pretérmino (63). mica materna como para controlar el bienestar fetal.

PARTO PRETÉRMINO INDUCIDO


CESÁREA
Todo embarazo que se finaliza de forma iatrogénica pre-
maturamente obedece a los mismos motivos: el bienestar La incidencia de cesárea ha ido aumentando con los años,
materno y/o fetal. En las gestantes diabéticas es más fre- tanto en las diabéticas gestacionales como en las pregesta-

114 COMPLICACIONES OBSTÉTRICAS EN LA GESTANTE DIABÉTICA


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Tabla 9. Incidencia de cesárea en gestantes diabéticas y no diabéticas

Diabetes mellitus Controles p Investigadores

Tipo N.o % N.o %

DMG 48/143 33,6 585/2.940 20,2 < 0,001 Naylor (66)


DMG 260/874 30 10.223/61.209 17 < 0,001 Casey (67)
DMG 21/116 18,1 257/4.526 7,9 < 0,05 Aberg (68)
DMG 47/143 32,9 30/143 21 < 0,05 Jensen (10)
B-F 524/683 76,7 161/854 18,8 < 0,0001 Hiilesmaa (18)
DMG: diabetes mellitus gestacional. B-F: diabetes pregestacional (clases de White).

cionales. En la revisión realizada por Cousins entre 1965 y bética (1). Asimismo, estos autores encontraron una inci-
2003, se comprobó que el porcentaje total de cesáreas se ha dencia de cesárea por acidosis fetal 5,01 veces mayor en
incrementado significativamente en las diabéticas gestacio- diabéticas pregestacionales y 2,10 veces mayor en diabéti-
nales (de 20,4 a 31,1) y en las diabéticas pregestacionales de cas gestacionales en comparación con mujeres controles.
las clases D,F y R de White (de 58,3 a 76,1) (12). No hay En las diabéticas gestacionales, el índice de cesáreas
estudios publicados que definan la evolución de la inciden- aumenta cuando existe una macrosomía fetal (> 4.000 g) o
cia de cesáreas en diabéticas pregestacionales de las clases B un antecedente de cesárea previa (66). Según los protoco-
y C. El aumento del número de cesáreas en las gestantes los actuales, y en ausencia de las complicaciones descritas
diabéticas obedece en parte al mayor control que se les rea- en la tabla 10, se debe tener una actitud expectante a la
liza en el embarazo, lo que permite diagnosticar a tiempo hora del parto. Los factores que deben vigilarse son: a) con-
cualquier complicación tanto materna como fetal y finali- trol meticuloso de la glucemia (≤ 95 mg/dl en ayunas y ≤
zar así la gestación de forma preventiva, antes de que apa- 130 mg/dl posprandial); b) presencia de movimientos feta-
rezca un riesgo mayor para ambos. les diarios desde la semana 28 de gestación; c) realización
La incidencia de cesárea es mayor en las gestantes diabé- de ecografía en la semana 38 para valorar el peso estimado
ticas que en las no diabéticas, como ponen de manifiesto y la cantidad de líquido amniótico; d) valoración antropo-
numerosos estudios (1-3, 10, 18, 66-68). En la tabla 9 se métrica para evitar distocias de hombros, y e) registros car-
exponen los resultados de algunas publicaciones de los últi- diotocográficos de la semana 38 a la 40 de gestación (69).
mos años. Todos ellos se refieren a diabéticas gestacionales, Esta actitud expectante, en ausencia de complicacio-
excepto el de Hiilesmaa et al. (2000), realizado en diabéti- nes, podría llevarse a cabo también en las diabéticas
cas pregestacionales de las clases B a F de White (18). La pregestacionales (12). Sin embargo, la presencia de
incidencia de cesáreas en diabéticas pregestacionales está uno o más de los factores indicados en la tabla 10,
entre el 55,9 (3) y el 76,7% (18), y este último porcentaje indica la necesidad de finalizar la gestación mediante
se justifica por la realización de cesáreas electivas a todas las
pacientes diabéticas de la clase D o superior. Feig et al.
(2006) encontraron una incidencia de cesáreas 1,78 veces Tabla 10. Causas favorecedoras de cesárea
mayor en diabéticas pregestacionales en comparación con en gestantes diabéticas
las gestantes no diabéticas (2). Sin embargo, la incidencia
de cesáreas en diabéticas gestacionales es menor, en compa- Factores maternos Factores fetales
ración con las pregestacionales, con un rango comprendido
entre 18,15 (68) y 33,6% (66), según los diferentes autores. Mal control glucémico Macrosomía fetal
Las causas que favorecen un mayor número de cesáreas Hipertensión arterial materna Crecimiento intrauterino retardado
en la población diabética en comparación con la no diabé-
Preeclampsia Malformación fetal
tica se resumen en la tabla 10. La presencia de cualquier
factor de riesgo de los expuestos en dicha tabla puede con- Enfermedad vascular materna Alteración del Doppler fetal
tribuir a la realización de una cesárea. Hay que tener en Hidramnios Registro cardiotocográfico
cuenta que estos factores de riesgo son más frecuentes en Cesárea previa
patológico
las gestantes diabéticas que en las no diabéticas. Gunter et Presencia de meconio
Gestación sin controlar o mal
al. (2006) describieron una incidencia de cesárea por regis- controlada Acidosis fetal (pH < 7,20)
tro cardiotocográfico patológico de 1,51 veces mayor en las
Muerte fetal intraútero
diabéticas pregestacionales y de 1,25 mayor en las diabéti-
en gestación previa
cas gestacionales, en comparación con la población no dia-

DIABETES Y EMBARAZO
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cesárea, muchas veces de forma prematura cuando los una cesárea en caso de estar indicada. Actualmente, están
beneficios materno-fetales esperados superan los posi- aumentando las gestantes que demandan una cesárea
bles riesgos. electiva con el objetivo de evitar cualquier sufrimiento
De cualquier forma, lo importante es individualizar cada del feto, sin tener en cuenta que la cesárea, como cual-
caso y, en todo momento, tener informada a la paciente quier intervención quirúrgica, también tiene sus riesgos y
de la evolución de su embarazo y de las posibilidades de complicaciones.

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DIABETES Y EMBARAZO
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