Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
a. Tratamiento post-aprovechamiento
b. Secado
c. Preservación
Los métodos de preservación que se proponen a continuación, se utilizan para guadua que va a
ser empleada en interiores, es decir, que no estará expuesta a la intemperie. Se debe tener en
cuenta además, que la guadua esté en el grado de madurez óptima y que se encuentre seca,
con un contenido de humedad por debajo del 12%, buscando que el material tenga buenas
condiciones de resistencia físico-mecánica.
1 Kilo de Bórax
50 Litros de Agua
Una vez realizada la mezcla con una buena dilución, se procede a hacer la inmersión de la
guadua en los tanques por un lapso de 5,8 horas. Posteriormente se deja escurrir en forma
vertical. Por economía preserve la guadua solo en las dimensiones que utilizará posteriormente.
Existen en el mercado muchos otros productos químicos, algunos de ellos biodegradables, que
se han utilizado con óptimos resultados, cuya función específica es preservar y proteger las
maderas y la guadua contra insectos: comején, carcoma y otros xilófagos.
El tratamiento con estos productos se realiza perforando la guadua cerca de los tabiques. Luego
se inyecta por los orificios de 1/8" dosis de 2,5 cc hasta 10 cc, según el diámetro de la guadua y
la longitud de sus entrenudos. Cada guadua se debe rodar en posición horizontal de ta1 manera
que el producto cubra completamente la pared interna. Finalizada la aplicación se tapan los
orificios con cera de abejas para evitar la entrada de otros líquidos disolventes.
Si el corte de los tallos se efectúa al amanecer y en luna menguante se obtienen con menor
contenido de humedad y menores concentraciones de carbohidratos y por lo tanto más
resistentes a los ataques de los hongos y agentes xilófagos.
Corporación Autónoma regional del Quindío, Centro Nacional Para El Estudio Del Bambú –
Guadua, p. 16.
La durabilidad natural del bambú es de uno a tres años, empleado en la construcción en contacto
con el suelo, y de cuatro a siete años, si se utiliza en las partes interiores (Lantican et al. 1987).
La vida útil del bambú aumenta con los tratamientos de preservación. Así, según (Tewari 1981)
el bambú tratado puede durar como mínimo 15 años (hasta 20), aún en condiciones extremas, o
hasta 30-50 años sin estar en contacto con la humedad (Carmiol 1998).
Inmersión en agua corriente: Los culmos son echados a ríos poco turbulentos por varias
semanas, y lastrados con piedras para sumergirlos. Por medio de este proceso el almidón y los
azúcares son disueltos, y se mejora la absorción de preservantes por difusión y presión (Liese
1985).
Metabolismo y transpiración después del corte: Se corta el bambú, se deja con ramas y
follaje en forma vertical y la savia (almidón y otros componentes) es liberada del extremo
cortado. A continuación, se coloca en la misma posición dentro de un recipiente con preservante
por dos a cinco días, que es absorbido con ayuda de la transpiración de las hojas (Hidalgo 1974,
Stultz 1981).
Método "Boucherie": Con este método (Figura 6) es preferible utilizar culmos recién
cosechados con ramas y follaje. Se conecta la base cortada del bambú con una llave, que sale
de un recipiente. Con preservante ubicado a una altura superior, y se coloca un recipiente al final
del culmo para colectar el preservante. La sustancia, que penetra por efecto de la gravedad y
también por la transpiración de las hojas, debe dejarse difundir por espacio de dos a cinco días
(a). El método de "Boucherie" mejorado es con un bomba de aire (compresor) conectada al
recipiente con preservante, con el cual se reduce el tiempo a unas tres a ocho horas (b) (Hidalgo
1974 Stultz 1981, Liese 1985).
Figura 6. Método de ¨Boucherie¨(a) simple, (b) con bomba de aire (Stultz 1981)
Presión: Este es uno de los mejores tratamientos, pero se necesitan instalaciones especiales.
Se utilizan preservantes solubles en agua o también creosota, aplicados a los bambúes secados,
primero efectuando un vacío de 10 –500 mbar y luego una presión de 0,5 – 1,5N/m2.
En Taiwán se tratan así a los bambúes utilizados para puntales de bananos (Liese1985). Las
soluciones de preservantes más empleadas son (Hidalgo 1974, Stultz 1981, Liese 1985):
Después del tratamiento, los bambúes se deben secar al aire por espacio de varios días, hasta
que el contenido de humedad descienda a 10-15% (Stultz 1981). Otros métodos de menor
importancia son el calentamiento sobre llama, la ebullición en agua. Utilizando preservantes, la
aplicación de borax: ácido bórico (1:1) con brocha o atomizador. Además, se pueden aplicar
preservantes contra el fuego (Hidalgo 1974, Liese 1985).
----------
----.-------------
ESPAÑOL ENGLISH PORTUGUÊS
Molienda Justa -
Negocios justos,
beneficios para
todos - México
Corriente Alterna -
Gente con energía -
Perú
Rompedores de
Babasu - Negocios
justos, beneficios
para todos - Brasil
Bambú - De la
misma selva -
Colombia
Uña de gato - De la
misma selva - Peru
Dólares por
esencias - Puro Gen-
eo - Brasil
Negocio pesquero -
Red de gananacias -
Perú
Palmo aPalmo -
Desde el bosque -
Guatemala
Pepa de Oro -De la
misma selva -
Ecuador
Energía Solar -
Combustible
inteligente -
República
Dominicana
En Colombia, los pobres construyen con bambú mientras que los más pudientes construyen con
cemento. Después del terremoto de enero de 1999, extensas áreas residenciales de clase media
colapsaron, pero las viviendas hechas de bambú permanecieron en pie. A pesar de la probada
resistencia del bambú a los terremotos, este material no goza de credibilidad como material de
construcción.
El bambú alcanza tal resistencia y altura que los bosques de este material pueden producir
suficientes postes de 9 metros para construir ciudades enteras. Para vencer el prejuicio de que el
bambú es para casas "pobres", las casas en Colombia se construyen con la misma apariencia
externa que las viviendas residenciales de alta calidad: con paredes de mallas de alambre
cubiertas con una capa fina de concreto y techo de tejas. La diferencia es que las paredes, el
primer piso y el techo no están apoyados en concreto, sino en flexible y fuerte bambú, el cual
resistirá hasta el terremoto más violento. Lo que atrae al gobierno es que la casa de tres
habitaciones cuesta 1.600 dólares, la mitad que una de concreto.
Cosecha y almacenaje
En el mundo existen unas 600 especies botánicas de bambú. El bambú es un pasto gigante que
crece a una velocidad de 13 centímetros al día. En seis meses, medirá más de 10 metros, y
alcanza la madurez a los tres años. En cuatro o cinco años, el tallo de esta planta, que es hueco,
se vuelve lo suficientemente fuerte y resistente como para soportar una casa.
La cosecha debe realizarse durante la temporada seca para que los troncos de bambú tengan un
bajo contenido de humedad, lo cual facilita su transporte y disminuye la posibilidad de un ataque
de hongos y de pudrirse. Una vez que se corta, el tallo vuelve a crecer rápidamente. Sólo deben
cosecharse los troncos adultos, porque los jóvenes suministran alimento a la planta de bambú.
Es importante que no se corten demasiados troncos de la misma planta, pues esto produce un
daño irreparable que, a la larga, causa la muerte de la planta.
El bambú debe almacenarse bajo techo para protegerlo de la lluvia y, preferiblemente, sin tocar
el suelo. El suelo debe estar limpio, sin basura y libre de termitas. Es vital que haya una buena
ventilación. Si el bambú fresco se almacena en posición vertical se secará en cuatro semanas, y
si se almacena horizontalmente, tardará el doble en secarse. Si el bambú se seca demasiado
rápido, podría rajarse.
Protección el bambú
El bambú es material ideal a prueba de terremotos, pero debe ser tratado para protegerlo de los
insectos, quienes atacan el centro del bambú, la parte que posee más almidón y azúcar.
Anteriormente, se solía proteger el bambú del ataque de insectos mediante químicos costosos e
importados de Europa, pero ahora se usan virutas del bambú para producir un insecticida
natural.
Las grandes cajas donde se ahuma el bambú ya cortado para la construcción se encienden con
virutas de la planta. Estas virutas exudan un ácido pirolítico natural que protege el bambú contra
los insectos. Después de este tratamiento, el bambú será resistente a los insectos durante 100
años.
Asesor Técnico
Intermediate Technology Development Group
Schumacher Centre for Technology Development
Bourton Hall
Bourton On Dunsmore
Warwickshire
CV23 9QZ
Reino Unido
Tel: +44 (0) 1788 661100
Fax: +44 (0)1788 661101
E-mail: infoserv@itdg.org.uk
sitio web: www.itdg.org
Intermediate Technology Development Group desea agradecer a Paul Brown por proveer el
artículo original sobre el uso del bambú como material de construcción en Colombia. ITDG
también desea dar un reconocimiento a J. A. Janssen, quien escribió el manual original "Building
with Bamboo" (Construyendo con Bambú) ISBN 1 85339 203 0, publicado por ITDG
Development Bookshop, 103/105 Southampton Row, London, WC1B 4HH, RU.
Este documento es resultado de un proyecto financiado por el Departamento Británico para el
Desarrollo Internacional (DFID) para el beneficio de los países en desarrollo. Las opiniones
expresados no son necesariamente las mismas que las del DFID.
Outra atenção especial a ser tomada é a idade do bambu. Para fins de tecelagem ou
cestaria usam-se os bambus jovens e imaturos, pela sua flexibilidade. Para fins de
construção deve-se usar os bambus maduros, mas não podres, com cerca de 3 a 4 anos,
quando atingiram sua resistência ideal.
Estando na época certa do ano deve-se escolher a fase adequada da lua , esta sendo a lua
minguante. A razão científica para este fato ainda está sendo investigada, mas é
corroborado pela cultura popular e pela experiência.
Dentro da fase adequada da lua, escolhem-se as horas antes do amanhecer como as ideais.
Após o corte aconselha-se deixar o bambu em pé no local de colheita, ainda apoiado nos
vizinhos, por cerca de 2 a 3 semanas. Neste tempo ele secará, mas ainda nos estados de
temperatura, pressão e umidade em que sempre viveu. Os passos seguintes diferem muito
entre si na quantidade de culmos, disponibilidade de recursos e transporte, fins, etc...
SECAGEM 1
O culmo cortado ainda estará úmido por dentro, e, desejando utilizar-se o bambu para
fins de construção de objetos ou estruturas deve-se secá-lo para obter resistência e
durabilidade. Pode-se apoiar o bambu, ainda com as folhas, em um aposento arejado com
chão e parede livres de umidade, sob proteção da chuva e do sol, e, dependendo da
espécie e das condições climáticas, deixar a seiva escorrer e evaporar de 2 a oito
semanas.
Com fogo podem-se obter resultados mais rápidos, mesmo com climas mais frios e
úmidos. Segundo Johan Van Lengen, do Instituto Tibá, no seu livro "Manual do
Arquiteto Descalço": "faz-se um buraco pouco profundo e cobre-se o solo e as esquinas
com tijolos, para que não perca calor. O bambu deve ser colocado a uns 50 cm acima do
fogo. Para que seque de maneira uniforme, deve-se virar os troncos de vez em quando.
Com este método, a parede do tronco fica mais resistente aos insetos, mas cuidado! Se o
fogo é muito forte pode abrir ou deformar os troncos."
SECAGEM 2
Outra forma de secagem com fogo é a utilização de uma fonte pontual de calor como o
maçarico. Neste processo é importante utilizar fogo baixo, e obtém-se alta resistência e
brilho. Porém é um método mais demorado e trabalhoso, por ser feito um a um. Pode-se
também defumar o bambu, introduzindo-o num compartimento com pouca saída de ar
que tenha fogo e fumaça sob os culmos de bambu. Nesses métodos onde se utiliza fogo
geralmente um tipo de óleo (ácido piro-lenhoso) aparece na superfície dos troncos. Este
óleo pode ser removido com pano ou reutilizado como fonte de fumaça. Segundo Ximena
Londoño este método utilizando o ácido piro-lenhoso é bem eficaz.
Estufas são um meio muito eficaz de secar o bambu. Na Colômbia existem estufas
verticais de muitos metros de altura, onde o bambu é colocado em pé. Geralmente as
estufas são horizontais. As estufas devem coletar o calor dos raios do sol durante o dia,
sem incidir diretamente sobre os bambus e sem causar calor excessivo, e manter seu
interior quente durante a noite. Este processo dura algumas semanas. Mais uma vez Van
Lengen nos dá um pouco de seu conhecimento: "constrói-se um armazém com um
aquecedor solar de ar. O aquecedor é construído com blocos, latas pintadas de negro e
vidro ou plástico. O armazém deve ter paredes isolantes, para que o calor não escape
durante a noite. De dia, controla-se o fluxo de ar com painéis, que ficam fechados à noite.
Note que este aquecedor também pode ser utilizado para secar alimentos "
Secagem com aquecedor solar-pg. 355 Johan Van Lengen -
FERVURA / COCÇÃO
TRATAMENTO QUÍMICO
Para banhar os troncos na solução pode-se construir uma banheira com barris de ferro
cortados ao meio e soldados, como na sugestão mais uma vez de Johan Van Lengen:
Esta banheira pode ser adaptada para cozinhar os bambus, se afastada do chão para
queimar lenha.
BOUCHERIE
Um modo de tratar quimicamente o bambu é fazer passar, sob pressão, a solução química
através dos culmos e fibras do bambu. Usa-se uma bomba de ar comprimido para dar
pressão, e mangueiras adaptadas nas extremidades do bambu.
É importante salientar que o uso indevido dessas substâncias químicas muito tóxicas pode
ocasionar a intoxicação grave e até a morte do operador, além de contaminar o solo ou a
água no local de despejo. Correntes ecológicas afirmam que os tratamentos naturais
agridem menos o meio ambiente, portanto sendo mais ecologicamente responsáveis.
ÁGUA
O bambu pode ser tratado apenas pela permanência em água parada (piscina ou tanque)
por algumas semanas, porém precisará passar por um processo de secagem demorado
após o banho. Pode-se banhar também em água corrente (riachos).
Fonte: www.bambubrasileiro.com.br