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DIMANSIÓN DEL
TRABAJO
¿Cómo se elabora?
¿Quién la elabora?
¿Qué material se necesita?
¿Dónde se adquiere el
material?
DIMENSIÓN CULTURAL
DIMENSIÓN ESPACIAL ¿Para qué se elabora?
¿Dónde se vende? ¿Qué impacto social
¿Dónde se elabora? produce?
¿Qué transmite?
ARTESANÍAS
DIMENSIÓN ECONÓMICA
DIMENSIÓN SOCIAL ¿Se elabora para vender?
Diferentes roles y ¿Qué se intercambia en la
funciones (artesanos y venta?
receptores).
DIMENSIÓN TEMPORAL
La artesanía en el pueblo
La artesanía en la ciudad
La artesanía en el pasado y
en el presente.
HISTORIA ABORIGEN
La pampa y la Patagonia
Cueva de las Manos, Río Pinturas, Santa Cruz, Argentina, 7.300 a. C. El arte más antiguo de Sudamérica.
En la misma zona se han hallado pinturas de manos y guanacos estampadas 7.300 años
adC en la Cueva de las Manos (Río Pinturas, Santa Cruz). Se trata de una de las
expresiones artísticas más antiguas de los pueblos sudamericanos y ha sido declarada
Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco.
Para el año 9.000 a. C. ya había comenzado el poblamiento de la pampa.
Más tarde, entre los 7.000 y 4.000 años A.P., aparece la industria Casapedrense,
caracterizada por una mayor proporción de instrumentos líticos confeccionados sobre
láminas, probablemente como una muestra de la especialización en la caza del guanaco,
lo cual también esta presente en los desarrollos culturales posteriores de los patagones o
tehuelches.
Desde ese momento y hasta la llegada de los europeos (inicios del siglo XVI) los
tehuelches poseían un modo de vida cazador-recolector en el que hacían uso de una
movilidad estacional, desplazándose en pos de las manadas de guanacos; durante los
inviernos se encontraban en las zonas bajas (vegas, mallines, costas, orillas de los lagos,
etc.) y durante el verano ascendían a las mesetas centrales de la Patagonia o a la
cordillera de los Andes en donde tenían entre otros sitios sagrados el cerro Chaltén.
Hacia el siglo XIV d. C., una rama de los tehuelches, los selknam, invadió la Isla de
Tierra del Fuego, forzando a que los yámana y kawéskar, que se encontraban allí al
menos desde el siglo X, a desplazarse hacia las costas meridionales y occidentales.
Las culturas pampeanas y patagónicas no parecen haber desarrollado un ningún
conocimiento agroalfarero, y se organizaron sobre la base de sistemas de caza y
recolección.
La zona del noroeste comenzó a ser habitada hacia el año 7.000 años adC.
Los indígenas de la región andina fueron los pehuenches, huarpes, diaguitas, omaguacas
y apatamas. Como los otros habitantes de la región andina tenían conocimientos muy
avanzados de la agricultura, la construcción de terraza y el riego artificial. También
criaban animales como la llama que les servían para comerciar con otros grupos
indígenas.
Las poblaciones indígenas en la Argentina han disminuido mucho con relación a la
población en general. Esto se debe a diferentes causas interrelacionadas, como las
enfermedades, el mestizaje, las campañas de exterminio (siglos XVIII y XIX), la brusca
interrupción de sus culturas y la inmigración considerable de Europa.
Pueblos Indígenas
• aonikenks-tehuelches
• atacameños-atacamas
• avá-guaraníes-chiriguanos
• aymaras
• diaguitas - calchaquíes
• chanés
• charrúas
• chiripás
• chorotes
• chulupís
• comechingones
• huarpes
• kollas
• lules
• mapuches
• mbyás-guaraníes
• mocovíes
• ocloyas (parcialidad de los omaguacas)
• omaguacas
• onas-selk' nams
• pampas
• pehuenches (rama de los mapuches)
• pilagás
• paí tavyterás (o cainguás)
• puelches
• quechuas
• querandies
• ranqueles-rankulches
• sanavirones
• tapietés
• tobas-qoms
• tonocotés
• tehuelches
• vilelas
• wichís-matacos
• yámanas (o yaganes)
ABORÍGENES DE LA ACTUALIDAD
Hoy en día, las mujeres aborígenes aun conservan la tradición, y confeccionan ponchos,
mantas, tejidos en general con sus telares, en el noroeste y sur argentino.
Los hombres se dedican a la alfarería en la zona del noroeste y cestería en la
Mesopotamia en su mayoría.
Las fibras extraídas de las hojas del cocotero, eran torcidas sobre los muslos desnudos
para convertirlas en sogas, hilos y piolines. Las raíces de karaguata (cardón), eran
utilizadas en múltiples usos, hasta para confeccionar tejidos. Las hojas del yvíra (cardo
sin espinas), les sirvieron para atar, hacer bolsos, redes y hamacas. Del piri (junco) y de
totoras hicieron cortinas, esteras, alfombras y otros enseres. Las tiras extraídas de la raíz
del guembepi, se usaban para hacer esterillas, redes, gruesas cuerdas, aplicaciones
ornamentales de otros trabajos y para confeccionar yrupê (cedazo), u otros. El
mandyju (algodón), proveía los más finos hilados. Aunque su cultivo, como el del
tabaco, no se efectuaba en grandes escalas, la producción cubría sus necesidades. La
tacuara, en sus distintos tipos, fue ideal para la cestería. Las hojas de karanda´i
(variedad de palmera), resistentes y durables, se utilizaron en diversos usos.
Confeccionaron hamacas, cordones, mantas, bolsos, cintas, vestiduras, cuerdas para
transportar bultos o cruzar ríos. Fabricaron canoas, arcos, flechas, lanzas, macanas y
cuantos elementos necesitaran para el descanso, la defensa, el transporte, las
comodidades del hogar y adornos. Las hamacas, de diversas fibras, presentaban varios
tipos de trama en su tejido, y borlas que adornaban sus costados.
Todos los demás enseres, cacharros, atavíos y armas, se distinguían por el agregado del
anónimo artista mediante alguna nueva aplicación que era copiada por otros para quedar
establecido su uso en la comunidad.
Los dibujos utilizados en cerámicas, vestidos, mantas, binchas, cesterías y demás, eran
sencillos y simétricos. Preferían colores negros con blanco; negro con marrón o todo
rojo. También, se pintaban objetos con fondo blanco o crema haciendo que resaltaran el
color de los dibujos, rojo o negro. Todos eran de trazos simples, geométricos o tomados
de la naturaleza, imitando los diseños de la piel de las víboras u otros animales o flores.
Mediante la combinación de sustancias, obtenían la variación de colores de los dibujos.
Otra de las manifestaciones artísticas era la alfarería. Trabajaban arcilla para hacer, de
barro cocido, los tazones, jarros, cantimploras, vasijas de todo tipo, elementos para la
cocina, ollas, cántaros, etc. Y también los recipientes funerarios con sus tapas.
Los morteros, los mangos para pisar, espátulas, utensilios de cocina y demás útiles y
muebles para el hogar, se confeccionaban de madera.
En cerámica, las mujeres cocinaban piezas zoomorfas y figuras para juguetes o adornos
para el hogar. Luego, eran puestos a la sombra, para secarlos.
Consiguieron afilar piedras para su uso como hachas y otros elementos cortantes que
servían de cuchillos. La carencia de herramientas metálicas y la inexistencia de la
escritura fueron lamentables factores negativos para el desarrollo de esta rama artística.
Artesanía cerámica: eran hechas exclusivamente por las mujeres. Fabricaban platos,
ollas, vasos, pipas, escudillas, etc.; las vasijas, denominadas "yapepó" eran de gran
tamaño o mediana y se empleaban para fermentación, como almacenamiento y como
urnas funerarias. Utilizaban arcilla negra, las colocaban boca abajo sobre piedras
candente para su secado.
Moldeaban vasijas, usadas para conservar bebidas; en las más grandes se inhumaba a
los muertos. Otro elemento ritual: las pipas de cerámica. Confeccionaban cernidores
para tamizar productos, canastos y estuches para flechas. En ceremonias, festivales y
rituales de curación utilizaban diversos instrumentos musicales, como las sonajas
(calabazas con diseños grabados a fuego) o la flauta de Pan.
Atravesando el labio inferior, los hombres adultos llevaban su tembetá, una especie de
botón de madera, piedra o metal, que tenía valor mágico.
Armas y útiles: Los elementos empleados eran: para moler el maíz usaban los
morteros de madera cavados en troncos de árboles; para el cultivo el palo de plantar o
de sembrar, con punta aguzada; también usaban hachas y rudimentarias piedras de
moler. Para hacer el fuego empleaban el taladro o aparato de producir fuego por sistema
de frotación. Las armas principales eran: la maza, la macana, el arco y la flecha.
Algunos grupos empleaban lanza.
Canoas: Como eran hábiles navegantes, construyeron canoas que alcanzaban 10 metros
de longitud eran hechas de un árbol ahuecado; se manejaban con remos.
Instrumentos musicales: Como los dioses son los primeros músicos, los instrumentos
musicales son de expresión divina. Usaban el compley o flauta, sonaja o maraca, tambor
de madera cascabeles y silbatos.
En 1974 se creó este museo, con exposiciones y actividades sin contar con local fijo. En
1981, se asentó en el actual edificio del barrio de Belgrano, sede del Instituto Nacional
de Antropología y Pensamiento Latinoamericano, dependiente de la Dirección Nacional
de Antropología y Folklore de la Secretaría de Cultura de la Nación. Una exposición
sobre la cultura mapuche en la Argentina, fue el inicio de sus exhibiciones.
Cuatro salas dan marco a exposiciones continuas y renovadas que, también, se llevan al
interior y al exterior del país. La temática de la antropología recrea el arte, los grupos
aborígenes y la arqueología.
Excelentes fotografías completan el panorama. Las artesanías tradicionales de la
Argentina se muestran en tres grupos definidos: el código autóctono (artesanías
mapuche, mbya, chiriguano-chané, toba, pilaga, mataco, chorote, chulupi o cocoví), las
artesanías de las áreas Noroeste, Cuyo, Santiago del Estero, Córdoba y el ámbito
pampeano patagónico. Y el tercer grupo, las artesanías no autóctonas. El tejido ocupa
otro lugar importante. Se muestra instrumental y los tejidos propiamente dichos.
También las máscaras resultan de gran interés, pues constituyen una manifestación
cultural con vigencia prácticamente universal desde la prehistoria hasta la actualidad.
Misión
La misión del Museo Nacional del Hombre es rescatar, investigar, conservar, difundir y
exhibir sus colecciones de etnografía, arqueología y artesanías tradicionales
principalmente. Dirigido a organizaciones educativas, de investigación, organismos no
gubernamentales, grupos étnicos y público en general. Sus proyectos están relacionados
con las investigaciones que lleva a cabo el INAPL, del cual depende. Fomenta la
recuperación de las historias de las diferentes comunidades involucradas en sus
exhibiciones, recobrando su memoria oral y su patrimonio material e inmaterial; con el
Colecciones
FUNDAMENTACIÓN
PREGUNTAS PROBLEMATIZADORAS
• ¿Cómo se elaboran?
• ¿Dónde se originaron?
PROPÓSITOS
CONTENIDOS
AMBIENTE SOCIAL
PLÁSTICA
• Producción en la tridimensión.
• Trabajos de modelado en arcilla.
• Trabajos con papel maché.
• Pintar.
MÚSICA
Secuencia Nº 1
Actividad nº 1
Inicio:
Desarrollo:
Lectura del cuento “Elal inventor”, del autor Miguel Ángel Palermo.
Cierre:
La docente mostrará las ilustraciones del libro. Les dará el libro para que lo pasen
de mano en mano mirando los dibujos. Luego, ella retomará el libro y realizará
junto con los niños la lectura de dichas imágenes, haciendo hincapié en la
descripción de las vestimentas y herramientas que presentan los personajes e
introduciendo a la historia de los pueblos originarios.
Materiales:
o Libro: “Elal inventor”, del autor Miguel Ángel Palermo. (Ver Anexo)
Actividad nº 2:
Inicio:
Desarrollo:
El docente presentará a los niños una gran cantidad de fotos e imágenes referidas
al tema. Las desplegará en el centro de la ronda y permitirá a los niños elegir
algunas de ellas para verlas de cerca. Se realizará una lectura de las imágenes en
donde los niños y el docente analicen las características principales de las
imágenes. El docente andamiará el análisis de los niños, si es necesario,
completando sus frases y corrigiendo los términos que empleen (por ejemplo, un
niño que vea la foto de una vasija y la describa diciendo “es una taza…”). Las
imágenes serán de artesanías y pobladores originarios.
Cierre:
El docente cerrará la lectura de imágenes pidiendo a los niños que retomen las
características que más veces surgieron, las más destacadas. Luego guardará las
imágenes y anticipará la visita al Museo del Hombre, en donde verán todo lo que
trabajaron en clase, pero esta vez no por medio de fotos, sino con objetos reales.
Materiales:
Actividad nº 3:
Inicio:
Desarrollo:
Una vez que cada grupo se encuentre en su sector de trabajo, el docente repartirá
a cada niño una hoja y varios crayones de colores. Los niños elegirán un objeto
(sin agarrarlo) del salón y lo tomarán como modelo para realizar un dibujo.
Cierre:
El docente, una vez finalizado el trabajo de todos los niños, retirará los dibujos y
los guardará en una carpeta para luego llevarlos al jardín. Luego, esperarán a los
demás grupos para poder finalizar la visita al museo.
Materiales:
o Hojas,
o Crayones de colores.
Secuencia Nº 2
Actividad nº 1:
Inicio:
Desarrollo:
Los niños se sentarán en las sillas, alrededor de las mesas, y el docente repartirá a
cada uno de ellos papel de diario. En el centro de la mesa, cada cuatro niños
aproximadamente, pondrá una pequeña palangana en donde haya plasticota y
agua. Enseñara a los niños a hacer papel maché, les indicará cómo mojar el papel
y cómo modelarlo. A medida que vayan dominando la técnica, los niños
realizarán el diseño de las máscaras guiándose por algunas imágenes que estén
presentes en las mesas, por sus recuerdos y su imaginación.
Cierre:
A medida que los niños vayan terminando, el docente tomará sus máscaras y las
pondrá a secar en un sector en donde no estén en peligro de romperse. El docente
tendrá un trapo con el cual limpiará las manos de los niños. Los niños ayudarán
en el orden y la limpieza.
Materiales:
Actividad nº 2
Inicio:
Desarrollo:
(El docente habrá realizado, previamente, para esta actividad, varios telares, con
maderas y clavos que habrá pedido donar a las familias).
Los niños se sentarán en el piso, en grupo de cuatro o cinco y el docente
entregará un telar a cada grupo e hilos de lana de colores y tamaños diferentes.
Les entregará una sola aguja por grupo, por lo cual se deberán turnar en el
momento de tejer. El docente andamiará las acciones de los niños y funcionará
como mediador de la actividad grupal.
Cierre:
Al finalizar los tejidos, el docente reunirá al grupo en ronda para enseñarles cómo
quitar el tejido de los clavos. Una vez que los sacaron, ayudarán al docente a
guardar el material.
Material:
Actividad nº 3
Inicio:
Desarrollo:
Los niños se sentarán en las sillas, alrededor de las mesas. El docente les dará a
cada uno una porción de arcilla. Les enseñará a usarla y luego los niños harán
cada uno la suya.
Cierre:
Una vez finalizada la producción, el docente llevará a las vasijas recién hechas a
un lugar en donde no corran peligro de romperse. Luego ayudará a los niños a
limpiar sus manos y ordenarán los materiales.
Materiales:
Actividad nº 4
Inicio:
Desarrollo:
Los niños se sentarán en las sillas, alrededor de las mesas. El docente le entregará
a cada niño su máscara. En el centro de la mesa habrá bandejas con pintura y
pinceles. Una vez que las máscaras se terminaron de pintar, el decente les
entregará las vasijas. Nuevamente, los niños deberán decorar con pintura sus
producciones.
Cierre:
El docente, a medida que los niños vayan terminando, pondrá los trabajos a secar
en un lugar que quede fuera de peligro de romperse. Luego se ordenarán los
materiales.
Materiales:
Secuencia nº 3
Actividad nº 1:
Inicio:
Desarrollo:
Cierre:
El docente traerá al recuerdo de los niños las artesanías que realizaron en las
actividades anteriores y anticipará la producción de instrumentos por parte del
grupo. Luego, guardarán los instrumentos musicales.
Materiales:
Actividad nº 2:
Juego- trabajo
Inicio:
El docente reunirá al grupo en ronda e indagará acerca de la canción “Soy un
coya chiquitito”, que escucharon anteriormente. Luego retomará la
caracterización de los instrumentos musicales, volviendo a mostrar los
instrumentos reales que el docente llevó a clase. Luego, propondrá a los niños el
armado de instrumentos, con el fin de musicalizar la canción. Planificarán el
armado de los instrumentos en base al material que el docente presentará a los
niños. El docente propone formar cuatro grupos para dividir tareas: el primer
grupo hará palos de lluvia, el segundo grupo hará maracas, el tercer grupo hará
ciqus, y el cuarto grupo hará bombos.
Desarrollo:
Cada grupo realizará los instrumentos musicales que se le asignaron. Tendrán
fotos de ellos para poder guiarse en el armado, además de ser andamiados por la
intervención del docente, quien incentivará el accionar de los niños y mediatizará
el trabajo grupal.
El grupo que produce palos de lluvia tendrá tubos de cartón, mostacillas y
tapones de plástico. El grupo de las maracas tendrá botones, mostacillas, tuercas
y frascos de plástico de varios tamaños. El grupo de los ciqus tendrá tubos de
caña de varios tamaños y cintas para unirlos. El grupo de los bombos tendrá
latas, baldes y bidones de varios tamaños, además de retazos de cueros y tejidos
para decorarlos.
Cierre:
Una vez finalizados los instrumentos, el docente reunirá a los niños en ronda.
Pondrán en común el trabajo evaluando el producto, los logros y las dificultades.
Luego exploraran las producciones oyendo sus sonidos. Una vez corroborado su
funcionamiento, el docente hará sonar nuevamente la canción “Soy un coya
chiquitito” y los niños sonorizarán con los instrumentos.
Finalmente, guardarán los instrumentos junto con las demás producciones acerca
de esta unidad didáctica.
Materiales:
Actividad nº 3:
Juego Dramático
Inicio:
Desarrollo:
Juego dramático. Los niños dramatizan por medio de roles asumidos todo lo
aprendido acerca de los pueblos originarios, utilizando ropa, instrumentos
musicales y máscaras. El docente será partícipe, estimulará las acciones de los
niños, mediatizará las relaciones.
Cierre:
Materiales:
Secuencia nº 4
Actividad nº 1:
Inicio:
El docente reunirá a los niños en ronda. Anticipará la visita que se hará en
pocos minutos y propondrá pensar preguntas para hacerle a los artesanos.
Luego de formularlas de manera grupal y haber tomado nota de ellas por
parte del docente, se prepararán para la salida.
Desarrollo:
Entrevista:
• ¿Qué tipo de actividad realiza?
• ¿Hace cuanto tiempo la realiza?
• ¿Cómo la aprendió? ¿Está enseñando a algún familiar su arte?
• ¿Que factores influyen a la hora de realizar sus trabajos y que
materiales utiliza? ¿Cómo y dónde los compra?
• ¿En qué momento realiza sus trabajos? ¿Cuanto tiempo tarda en
finalizar un trabajo?
• ¿Que similitudes y diferencias encuentra entre las artesanías
hechas en el interior del país y las que se hacen en Capital
Federal?
• ¿Por qué vende sus trabajos?
Cierre:
Actividad nº 2:
Inicio:
Desarrollo:
Cierre:
Materiales:
Actividad nº 3:
Juego Dramático.
Inicio:
Desarrollo:
Cierre:
Materiales:
Anexo
Cuentamérica, “Lo que cuentan los tehuelches”, Miguel Angel Palermo, Ed.
Sudamericana
Elal el inventor
Elal inventó… ¡tantas cosas! Cuando todavía era muy chiquito, hizo él solo un arco y
unas flechas, y dicen que ése fue su primer invento. En seguida se puso a cazar
pajaritos, pero la abuela le dijo que eso estaba mal, que a los pajaritos había que dejarlos
tranquilos porque eran animales buenos y no servían para comer; atacarlos era hacer
daño porque sí. Entonces, Elal cazó un guanaco y con la piel se hizo un Quillango (esa
especie de capa que siempre usaron los tehuelches). Y ése fue el primer Quillango que
hubo sobre la Tierra. Con la piel que le sobraba, se hizo un par de mocasines para no
andar descalzo en invierno. Y ésos fueron los primeros mocasines que alguien se puso.
¡Ya había inventado tres cosas muy útiles y todavía no tenía un año! Pero no se
conformó con eso; no, señor.
Elal siguió creciendo muy rápido y en poco tiempo se hizo hombre. Un día juntó ramas
y pasto secos, empezó a golpear dos piedras hasta que sacaron chispas y así encendió el
primer fuego. Después, hizo más cosas. En esa época, la Patagonia era bastante chica,
porque la mayor parte estaba tapada por el mar. A Elal no le pareció bien. Buscó el arco
y las flechas, y empezó a tirar. Y ahí donde caía una flecha, el agua se hacia para atrás
como si se asustara, y aparecía la tierra seca. Así, a flechazo limpio, fue saliendo toda la
Patagonia, hasta que a él le pareció que había bastante y paró.
En esa tierra recién salida del mar fueron creciendo pasto, árboles y arbustos (en
algunas partes más, en otras menos) y los animales se metieron por todos lados. Pero no
había gente.
Entonces, dicen los tehuelches que Elal amasó un poco de barro y se puso a hacer dos
muñequitos: uno tenía forma de hombre y el otro de mujer. Trabajó y trabajó, y al final
esos muñequitos estuvieron vivos: se hicieron de carne y tenían corazón y sangre.
Cuando crecieron, esos dos tuvieron muchos hijos y así hubo cada vez más y más gente.
De ellos nacieron los abuelos de los abuelos de los abuelos de los abuelos de los
tehuelches.
Al principio, esas personas no sabían hacer nada de nada, así que Elal tuvo que
enseñarles todo.
Un día, por ejemplo, llamó a los hombres y les dijo: -¡Vengan para acá!
Les mostró un arco y unas flechas, y les enseñó cómo se hacían y cómo se usaban. Les
hizo fabricar a cada uno su propio arco, para ver si habían aprendido de veras, y después
les hizo practicar puntería.
Entonces, cuando ya las flechas iban para donde ellos querían y no para cualquier lado
(¡es difícil tirar con arco!), les enseñó a cazar.
Los llevó al campo y les decía, por ejemplo: -¿Ven? Esta es una huella de guanaco.
O si no: -¿Ven? Esta otra es una huella de choique.
O: -Por acá pasó una mara. ¡Miren, miren las marcas de las patitas!
Y después los hacía seguir las huellas y cuan do se encontraban con el animal, les tenía
que mostrar: -Ése es el guanaco.
O:
-Ése es el choique.
O:
-Ésa es la mara.
Y entonces les decía cómo había que cazarlos. Cuando supieron esto, les enseñó más:
-El guanaco se come, y la piel es muy buena para muchas cosas. Sirve para hacer
quillangos o capas (así uno no pasa frío) y para hacer mocasines (así uno no se enfría
los pies ni se los lastima) y también para hacer toldos (así uno tiene dónde dormir y
meterse cuando llueve o nieva o hay demasiado viento).
Les enseñó cómo se sacaba el cuero y cómo se cortaba el cuerpo del guanaco para
llevarlo hasta los toldos. Después les dijo para qué servían los otros animales: cuáles se
comían y cuáles no, cuáles tenían buena piel y cuáles no servían para nada.
Los hombres ya tenían bastante. Por eso Elal buscó a las mujeres y les dijo: -¡Vengan
para acá!
Las mujeres fueron, y él les mostró lo que habían cazado los hombres. –La carne hay
que cocinarla para comer-les dijo- Para eso hay que encender fuego – y les enseñó
cómo-. Con las pieles se hacen muchas cosas, pero hay que saber cómo. Y eso van a
aprender ustedes, porque siempre será uno de sus trabajos.
Entonces les enseñó cómo había que limpiar los cueros para sacarles todos los pedacitos
de carne y grasa pegados, y cómo había que clavarlos en el suelo con palitos, bien
estirados al sol para que se secaran. Después, les mostró cómo cortarlos en pedazos,
cómo elegir los mejores recortes y cómo coserlos con hilitos de tendón de guanaco, para
hacer capas y toldos.
Después de todos esos inventos, que él había hecho para que la gente viviera bien, Elal
pensó que si estaban todos los animales juntos, en un solo lugar, a la gente le iba a
resultar más fácil conseguir comida. Se pasó días enteros arreando los bichos del
campo. Junto choiques, caballos, guanacos, vacas y muchos animales más. Los encerró
en un corral enorme y avisó a los hombres: -Ahora tienen acá todos los animales juntos.
Pero se viene la noche. ¡Mucho cuidado, que los animales no se espanten y se escapen!.
Todos se pusieron a dormir.
Cuando empezaba a amanecer, el Zorro se despertó, vio que salía el Sol, y se puso a
cantar, porque la costumbre de los tehuelches era cantar cuando se hacía de día.
Pero el Zorro cantó demasiado fuerte, pegó un grito que era como un alarido, más que
un canto (¡qué sorpresa!, ¡siempre hay un zorro que mete la pata!), y los animales se
asustaron (¡Y…despertarse así…!). Tanto se asustaron, que empezaron a correr para
todos lados, a saltar y tirar patadas. Al fin, rompieron el corral y salieron disparando; de
paso, voltearon los toldos de la gente y les pisotearon todo: fue un desparramo total.
Las vacas y los caballos se fueron al galope para el norte. Corrieron, corrieron y se
perdieron de vista; no quedó más que la polvareda que levantaron.
Los demás animales-guanacos y choiques-corrieron hacia el sur. Como los tehuelches
viven allí, se tuvieron que conformar con ellos. Las vacas y los caballos; en cambio,
quedaron para los criollos o para otros indios del norte. Por eso, cuándo querían
caballos para montar, los tehuelches tenían que hacer unos viajes larguísimos para
conseguirlos.
Familias:
SI NO …………………
Firma
Familias:
SI NO …………………
Firma
Bibliografía:
• Sitios web
http://www.angelfire.com/ar
http://www.laeducacion.com
http://es.wikipedia.org
http://www.artesaniaaborigen.com.ar
http://www.peumayenargentina.com.ar
http://www.buenosaires.gov.ar
http://www.inapl.gov.ar