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Cómo enseñar a dividir por 2 cifras

Matemática clara Matemática en el aula

Como todas las cuestiones matemáticas, la forma recomendable de


enseñar a dividir por dos cifras tiene que ver con acompañar a los
estudiantes a recorrer el camino que hicieron los matemáticos para inventar
ese algoritmo. Si no es así estaremos propiciando aprender de memoria un
mecanismo, efectivo sí, pero vacío de sentido razonable. Y siempre
volvemos al punto: “razonar” es la base del quehacer matemático y una
clase matemática no es tal si hay cosas porque sí.

Arranquemos por decir que “dividir por dos cifras” es un abuso de lenguaje
que se usa para decir “dividir cuando el divisor es un número entre 11 y 99″.

Para enseñar estas cuentas hay que llevar a clase la construcción de ese
algoritmo de cálculo paso por paso. Pero hay un problema: no solo la
mayoría de los docentes lo ha aprendido de memoria en su propia infancia
sino que además el procedimiento de la cuenta es un raro ejemplo de
contenido matemático que casi nunca aparece en los libros. Esto no es un
detalle menor porque refleja este fenómeno que rodea a la enseñanza y el
aprendizaje de la cuenta de dividir por dos cifras. Es que mientras le
decimos a los chicos “pensá, nene, pensá”, no nos percatamos de la
arbitrariedad de aceptar los pasos de la cuenta sin respaldo razonable.

Hecha esta aclaración, acá va el trasfondo de la cuenta, que no es más que


calcular una división a partir de las cifras que componen el dividendo y el
divisor escritos en sistema decimal. Una cosa es dividir un montón de
objetos en grupos de igual cantidad y otra bien diferente es calcular una
división como ésta

45032 dividido 36

trabajando solamente con

4, 5, 0, 3, 2, 3 y 6

Veamos cómo los matemáticos han logrado eso partiendo de la idea de


división. Es decir, de calcular cuántas veces se puede restar 36 de 45 032.

Si bien es posible restar 36 tantas veces como sea necesario hasta que no
se pueda más, y ese es el camino que los estudiantes seguirán, superada
una primera etapa, queda claro que es posible restar varias veces 36, por
ejemplo, 252 que es 7 veces 36, para hacer más corto el procedimiento.

Entonces nos abocaremos a encontrar la manera más práctica y breve de


calcular cuántas veces se puede restar 36 de 45 038. Tengamos a la vista
las cantidades.

Estas son cantidades pequeñas respecto de 45 038 así que estimemos con
cantidades más grandes.

Entonces la cantidad que buscamos es un número entre 1000 y 10 000.


Aprovechando la tabla que ya construimos, con solo agregar ceros,
obtenemos éstas:
Seleccionando de estas listas podemos armar el siguiente cálculo:

Con mucha práctica, es posible obviar algunos pasos, por ejemplo, hay unos
cuantos ceros que los podemos pensar mentalmente sin escribirlos. Me
refiero a los que están resaltados en amarillo.
Saquemos esos ceros si ya estamos tan cancheros que no hace falta
escribirlos.

Si podemos hacer mentalmente las restas y no necesitamos escribir los


números que se restan, la cuenta queda un poco más corta. Confiemos en
nuestra capacidad para “guardar números en la memoria” y saquémolos de
la cuenta.
Si ya estamos completamente acostumbrados a hacer esto y nos cansamos
de escribir tanto, la suma que aparece en el cociente la podemos hacer en
un solo renglón.

Esta es la cuenta de dividir por dos cifras que conocemos. Se me dirá que
toda esta explicación es larga y complicada. Es cierto. Tan cierto que
prefiero pensar que ahorrarla pudo haber sido la motivación que inspiró a
generaciones de maestros a enseñarla de memoria. Pero no me parece que
esa escusa alcance. La verdad que aprendí en las aulas es que chicos de
todas las edades aprenden mejor y más rápido cuando disponen de toda la
explicación que ante el desafío de aprender de memoria un procedimiento
vacío. Es más, de memoria pueden (a veces) aprender a hacer cuentas de
dividir por dos cifras mientras que puestos a deducir todo el recorrido
aprenden (con seguridad) una parte de la matemática que va más allá de la
cuenta.

llamado “Principio fundamental de conteo”:


Si una decisión, operación o acción, puede tomarse de M formas diferentes y sí después
de que ha sido efectuada de una de esas formas, una segunda decisión puede tomarse de
N formas diferentes, entonces el número total de formas diferentes en que las dos
decisiones pueden tomarse siguiendo el orden mencionado es igual a M x N.

Es decir:

Si hay m formas de hacer una cosa, y n formas de hacer otra, existirán m x n formas de
hacer ambas.

I.I.II Ejemplos

Un Club esta en el período de elecciones de la nueva Comisión Directiva. Hay tres


candidatos a presidente, cuatro a vicepresidente, cinco para secretario y dos para
tesorero.¿Cuántos resultados diferentes puede tener la elección?

Respuesta:

El número total de resultados distintos en que puede terminar la elección es igual a:

3 x 4 x 5 x 2 = 120

Înter%Reglas de la Multiplicación

Se refieren a la determinación de la probabilidad de la ocurrencia conjunta de A y B.

Existen dos acepciones de esta regla:

1) Si los eventos de independientes:

P(A y B ) = P( A ∩ B ) = P(A)P(B)

2) Si los eventos son dependientes:

Es la probabilidad de A multiplicada por la probabilidad condicional de B dado A.

P(A y B) = P(A)P(B|A)

Si la posición de los dos eventos se invierte, se obtiene un valor equivalente.

P(A y B) = P(B y A ) = P(B)P(A|B)

EJEMPLOS

1) Si una moneda equilibrada se lanza dos veces, la probabilidad de que ambos


lanzamientos den por resultado una “cara” es :

(1/2) x (1/2) = (1/4)

‘+INSTITUTO TECNOLÓGICO DE LEÓN Licenciatura en Administración


e lo explico con un ejemplo:

Si 4 lapices me cuestan 25€, ¿cuantos € me cuestan 20 lapices?

4 lapices ------ 25€


20 lapices----- x

Multiplicas 20*25 y lo divides entre 4 = la x es igual a 125€ es el total.

Te haces un dibujo como el mio diciendo cada cosa y lo que no sabe lo llamas "x" y
despues lo multiplicas en cruz (20*25 y 4*x) y lo divides por el numero de la x, en este
caso 4. El resultado es el valor de la x.

Un saludo y espero haberte ayudado y si no te aclaras, me lo dices que te lo intentaré


explicar lo mejor posible.

• hace 3 años

Regla de tres
De Wikipedia, la enciclopedia libre

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La regla de tres es una forma de resolución de problemas de proporcionalidad entre tres


o más valores conocidos y una incógnita. En ella se establece una relación de linealidad
(proporcionalidad) entre los valores involucrados. La regla de tres más conocida es la
regla de tres simple directa, si bien resulta muy práctico conocer la regla de tres simple
inversa y la regla de tres compuesta, pues son de sencillo manejo y pueden utilizarse
para la resolución de problemas cotidianos de manera efectiva.
Contenido
[ocultar]

• 1 Regla de tres simple


directa
• 2 Regla de tres simple
inversa
• 3 Regla de tres compuesta
• 4 Campo de aplicación
• 5 Demostración
• 6 Ejemplos

• 7 Enlaces externos

[editar] Regla de tres simple directa


La regla de tres es una forma de resolución de problemas de proporcionalidad entre tres
o más valores conocidos y una incógnita. En ella se establece una relación de linealidad
(proporcionalidad) entre los valores involucrados. La regla de tres más conocida es la
regla de tres simple directa, si bien resulta muy práctico conocer la regla de tres simple
inversa y la regla de tres compuesta, pues son de sencillo manejo y pueden utilizarse
para la resolución de problemas cotidianos de manera efectiva.

Imaginemos que se nos plantea lo siguiente:

Problema a resolver: si necesito 2 litros de pintura para pintar 2


habitaciones, ¿cuántos litros necesito para pintar 7
habitaciones?

Este problema suele interpretarse de la siguiente manera:

2 habitaciones son a 2 litros como 7 habitaciones


son a Y litros.

La solución es una "regla de tres simple directa": basta con multiplicar 7 por 2 y el
resultado dividirlo entre 2. Necesitaré, por tanto, 7 litros de pintura. De manera formal,
la regla de tres simple directa enuncia el problema de la siguiente manera:

A es a B como X
es a Y

lo que suele representarse así:


donde A es 2, B es 2, X es 7 e Y es el término desconocido. Para resolver todas las
reglas de tres simples directas basta con recordar la siguiente fórmula:

[editar] Regla de tres simple inversa


En la regla de tres simple directa, cuando el tercer término (X) crece, también crece el
término que intentamos averiguar (Y), y viceversa. En el ejemplo anterior, cuando el
número de habitaciones aumenta, es obvio que necesitaremos más pintura, y cuando el
número de habitaciones es menor, necesitaremos menos pintura. Es lo que se llama una
relación directamente proporcional. Sin embargo la vida cotidiana puede ofrecer
situaciones en las cuales la relación sea inversamente proporcional, es decir, si aumenta
X, entonces Y disminuye, y viceversa. Veamos el siguiente ejemplo:

Problema a resolver: si 8 trabajadores construyen un muro en 10


horas, ¿cuánto tardarán 5 obreros en levantar el mismo muro?

Si se observa con atención el sentido del enunciado, resulta evidente que cuantos menos
obreros trabajen, más horas necesitarán para levantar el mismo muro (suponiendo que
todos trabajan a la misma velocidad). Tenemos por tanto una relación de
proporcionalidad inversa, y deberemos aplicar una regla de tres simple inversa. Su
resolución en este caso se plantea inicialmente de la misma forma, pero se resuelve de
manera distinta. Al igual que antes, tenemos:

8 trabajadores son a 10 horas, como 5 trabajadores


son a Y horas.

La solución pasa por multiplicar 8 por 10, y el resultado dividirlo por 5. Necesitarán,
por tanto, 16 horas (nótese que si fuera una regla de tres directa hubiéramos operado
multiplicando 5 por 10 y dividiendo el resultado por 8, lo que nos daría un resultado
equivocado).

Formalizado, como antes:

A es a B como X
es a Y

lo que se representa como:


Siendo la solución formalizada la siguiente (nótese el cambio de orden de los valores):

Es importante examinar con atención el enunciado para descubrir si se trata de una


proporción directa o inversa.

[editar] Regla de tres compuesta


En ocasiones el problema planteado involucra más de tres cantidades conocidas, además
de la desconocida. Observemos el siguiente ejemplo:

Problema a resolver: Si 12 trabajadores construyen un muro de


100 metros en 15 horas, ¿cuántos trabajadores se necesitarán
para levantar un muro de 75 metros en 26 horas?

En el problema planteado aparecen dos relaciones de proporcionalidad al mismo


tiempo. Además, para completar el ejemplo, se ha incluido una relación inversa y otra
directa. En efecto, si un muro de 100 metros lo construyen 12 trabajadores, es evidente
que para construir un muro de 75 metros se necesitarán menos trabajadores. Cuanto más
pequeño es el muro, menos número de obreros precisamos: se trata de una relación de
proporcionalidad directa. Por otro lado, si disponemos de 15 horas para que trabajen 12
obreros, es evidente que disponiendo de 26 horas necesitaremos menos obreros. Al
aumentar una cantidad, disminuye la otra: se trata de una relación de proporcionalidad
inversa.

El problema se enunciaría así:

100 metros son a 15 horas y 12 trabajadores como 75 metros son a 26


horas e Y trabajadores.

La solución al problema es multiplicar 12 por 75 y por 15, y el resultado dividirlo entre


el producto de 100 por 26. Por tanto, 13500 entre 2600 resulta 5,19 (lo que por
redondeo resultan ser 6 trabajadores ya que 5 trabajadores no serían suficientes).

Formalmente el problema se plantea así:


• La resolución implica plantear cada regla de tres simple por
separado. Por un lado, la primera, que, recordemos, es directa, y se
resuelve así:

• A continuación planteamos la segunda, que, recordemos, es inversa,


y se resuelve así:

• A continuación unimos ambas operaciones en una sola, teniendo


cuidado de no repetir ningún término (es decir, añadiendo el término
C una sola vez):

lo que nos da la solución buscada.

El problema se puede plantear con todos los términos que se quiera, sean todas las
relaciones directas, todas inversas o mezcladas, como en el caso anterior. Cada regla ha
de plantearse con sumo cuidado, teniendo en cuenta si es inversa o directa, y teniendo
en cuenta (esto es muy importante) no repetir ningún término al unir cada una de las
relaciones simples.

[editar] Campo de aplicación


Como se ha comentado, la regla de tres es un mecanismo sencillo y extremadamente útil
que sólo se puede establecer cuando existe una relación de linealidad entre los valores
que pueden tomar las variables que intervienen. Sin embargo no es siempre fácil
averiguar si existe tal relación, de modo que es necesario utilizar para ello el sentido
común y la experiencia.

[editar] Demostración
La regla de tres se fundamenta en una relación de proporcionalidad. Una cantidad es a
otra, como una tercera lo es a una cuarta. Como ya se ha comentado, la regla de tres
establece una relación de proporcionalidad, por lo que rápidamente se observa que:

Donde k es la constante de proporcionalidad, despejando se obtiene que:


[editar] Ejemplos
• Para pasar 60 grados a radianes podríamos establecer la siguiente
regla de tres:

Ubicamos la incógnita en la primera posición:

Esto formaliza la pregunta "¿Cuántos radianes hay en 60 grados, dado que π radianes
son 180 grados?". Así tenemos que:

Donde π es el Número π.

Una técnica útil para recordar cómo encontrar la solución de una regla de tres es la
siguiente: X es igual al producto de los términos cruzados (π y 60, en este caso) dividido
por el término que está frente a X.

• Calcular cuántos minutos hay en 7 horas. Sabemos que hay 60


minutos en 1 hora, por lo que escribimos:

El resultado es:

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