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Análisis Brasil

La economía de Brasil es líder en América Latina en diversos sectores económicos, tales


como lo industrial, agrícola y exportaciones. Además, es integrante de BRIC (Brasil, Rusia,
India, China), países considerados superpotencias emergentes, actualmente las
exportaciones de Brasil se encuentran entre las 20 más grandes del mundo.

La economía brasileña al igual que la de otros países emergentes, ha estado sometida en


los últimos años a una serie de impactos externos e internos que han afectado su
desempeño. Pese a que estos han tendido consecuencias desde el punto de vista de la
tasa de crecimiento del PBI y en las tasas de empleo, puede afirmarse –en general- que el
manejo macroeconómico brasileño permitió superar estos impactos negativos.

El país aseguró un fuerte crecimiento en el año 2000, superando rápidamente los efectos
negativos de la devaluación de enero de 1999, A partir del 2001, la economía
nuevamente ha enfrentado una serie de condiciones adversas, en lo externo la
desaceleración económica que trajo una fuerte desconfianza sobre los mercados
emergentes y un consiguiente incremento de las tasas de riesgo de estos países. En lo
interno, la crisis económica regional derivada de los problemas argentinos, los problemas
suscitados por el abastecimiento energético así como los costos de la gran incertidumbre
derivada de la situación política-electoral del país. Todo esto redundó en una caída de la
actividad económica, que fue superado recién en el año 2003, cuando se produjo un
pequeño crecimiento económico.

Sin embargo este ritmo de crecimiento de la economía disminuyó a lo largo del año,
verificando una caída sobre fines del 2004 debido a una serie de elementos entre los
cuales se destaca la interrupción de la reducción de la tasa de interés de Brasil, debido al
objetivo de preservar los niveles inflacionarios. Al respecto, el Banco Central del Brasil –en
el informe mensual de junio del 2005- sitúa en un 3.1 % su estimación de crecimiento del
PBI para el presente año.

El nivel de actividad actual ha sido acompañado por una alteración en la composición de la


demanda, con mayor participación del sector externo en detrimento del mercado
doméstico. En el ámbito externo el crecimiento de la economía mundial, se ha reflejado
en el dinamismo de las exportaciones. En el ámbito interno, desde finales del 2004
aparece una retracción en los niveles de inversión derivada en parte, de la pérdida de la
renta agrícola. El mercado de trabajo presenta indicadores favorables en los primeros
meses de 2005, una caída en la tasa de desempleo derivada del crecimiento económico
del año pasado. En el 2004 el índice de desempleo fue del 11.5% contra 12.3% en el 2003.
En mayo de este año la desocupación cayó a 10,2%, dos puntos porcentuales menos que
los 12,2% de mayo de 2004.

El comportamiento de la inflación reflejó el éxito de las medidas de política monetaria


adoptadas durante el 2003 y 2004. La variación del IPCA -Índice de Precios al Consumidor
Amplio- disminuyó en el 2004, alcanzando un índice de 7.6%, significati
significativamente
vamente menor a
la variación de 9.3% del año anterior y dentro de los parámetros establecidos por el
Comité de Política Monetaria.

La proyección de inflación -medida


medida por el IPCA para el 2005
2005- descendió a un 6.15 % anual.
Las estimaciones del Banco Centra
Central la sitúan en 5.1% para fines de 2005.

La economía brasileña ha experimentado un crecimiento moderado pero continuo,


promediando 3,7% anual en el período 1999
1999-2008
2008 y avanzando por encima del 5% sólo
tres años (2004, 2007 y 2008), lo que ha permitido una rreducción
educción de los índices de
pobreza registrando en el año 2001 46.7% y el años 2008 30.3%

En la gráfica siguiente se aprecia las alzas y bajas del Producto Interno Bruto de Brasil en
términos constantes, mostrando un claro crecimiento en el año 2004 según fuente f de
CEPAL.

PIB en términos constantes


900.00
800.00
700.00
Miles de Millones de US$

600.00
500.00
400.00
300.00
200.00
100.00
0.00
1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

En el primer semestre de 2000 se ha mantenido el crecimiento observado en los últimos


meses de 1999, con un aumento del PIB del 3,8% en esos seis meses; en cabeza de este
aumento se sitúa el sector de las telecomunicaciones, cuyo producto creció un 14%,
mientras que el del sector agropecuario alcanzó el 6,4% y la industria en general el 5,0%.
La tasa de desempleo para este mismo período fue del 8,0% y la inflación acumulada se
cifró en un 1,1%, valor considerado como positivo por el Gobier
Gobierno
no que se fijó la meta del
6% para todo el año. También la balanza comercial mejoró sus resultados en el primer
semestre de 2000, ya que las exportaciones crecieron un 16,5% y las importaciones un
9,8% en relación con el mismo período de 1999, arrojando un saldo favorable de 819
millones de dólares, frente a los 621 millones de déficit registrados el año anterior.

Después de la devaluación del real en 1999 y 2002 a 2004, Brasil convivió con elevados
déficits en transacciones corrientes y niveles de endeudam
endeudamiento externo.

Tasa de cambio Real por 1 US$


3.50
Tipo de cambio Real / US$

3.00
2.50
2.00
1.50
1.00
0.50
0.00
1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

La crisis argentina de 2001 fue la peor crisis financiera en la historia argentina. Como
resultado de la crisis financiera, la mayoría de la gente perdió mucho dinero y la población
sintió que habían sido traicionados por su propio gobierno. A raíz de esta crisis, Brasil tuvo
los peores resultados lo que se refiere a gastos en tecnología informática. De acuerdo con
Ricardo Stevenson, gerente general de International Data Corporation (IDC).

El gobierno reaccionó a las crisis económica


económicass de 2001 mediante una adecuada
combinación de contracción de su política fiscal y monetaria. A mediados de 2001, el
gobierno elevó su meta de superávit fiscal primario y mantuvo políticas fiscales creíbles y
sólidas a través de todo el período. El actual superávit fiscal para 2001 llegó al 3,7% del
PIB, marcando otro año de superación de las metas fiscales.

También en ese mismo año, Brasil experimentó una grave crisis de suministro eléctrico
causado por una de las peores sequías de las que se tenga regist
registro.
ro. Las sequías afectaron
enormes áreas del país e impidieron que se rellenaran los grandes embalses de agua para
la generación de energía hidroeléctrica de la cual depende el país. Esto provocó la
interrupción de los suministros de energía, causando grav
graves
es problemas económicos y
sociales, especialmente en la región nor-oriental más pobre. El Gobierno manejó la crisis
exitosamente, pero ésta puso de manifiesto las falencias existentes en la organización del
sistema energético de Brasil y la necesidad de encarar las deficiencias normativas
implícitas que eran la raíz del problema.

Por todos estos datos, se puede considerar que el balance de la economía brasileña
reciente ha resultado positivo; la recuperación de la crisis que atravesó en los años 1997-
1999 ha desembocado en unas condiciones que le permiten afrontar el futuro inmediato
con confianza, aunque para ello sea necesario mantener un ritmo de crecimiento elevado
a lo largo de bastante tiempo.

A comienzos del 2003 se adoptaron severas medidas en el plano monetario y fiscal para
controlar la aceleración de la inflación y recuperar la confianza de los mercados
financieros internacionales, parcialmente perdida por el deterioro de las expectativas en
el último semestre del 2002. Las medidas dieron los resultados deseados: la inflación en
12 meses disminuyó de 17,2% en mayo a 9,3% en diciembre de 2003 y a un 5,2% en mayo
de 2004, mientras que el riesgo país descendió de más de 2200 puntos en el segundo
semestre de 2002 a 447 en octubre de 2004.

La tendencia de la política monetaria cambió iniciándose un proceso gradual de descenso


de las tasas de interés (SELIC). Como consecuencia de esto, el PIB y la producción
industrial mostraron una tendencia a la reactivación, que se acentuó en los cinco primeros
meses del 2004.

El nivel de actividad de la economía brasileña muestra una recuperación en el 2004,


después de haberse contraído en el 2003 y haber crecido poco en años anteriores. El PIB
experimentó un crecimiento del 5.7% en el segundo trimestre del año, la cifra más
elevada de los últimos ocho años, lo que unido al 2.7% del primer trimestre, resulta un
crecimiento del 4.2% en los seis primeros meses del año. Los factores que han contribuido
a este crecimiento del segundo trimestre han sido, junto al esperado buen
comportamiento del sector exterior, las tasas de crecimiento de la inversión (1.5%) y muy
especialmente del consumo privado (1.5%), la tendencia es a alcanzar el crecimiento del
4.5% del PIB que el gobierno esperaba para este año.

La inversión comenzó a elevarse como consecuencia del mayor aprovechamiento de la


capacidad instalada y de las mejoras en las condiciones de financiamiento interno y
externo.

Fitch completa el proceso de mejora de la calificación crediticia de la deuda externa


brasileña que comenzaron Moody´s y S&P, señalando como factor clave para ello la
consolidación de las políticas macroeconómicas y a la política de reducción de la carga de
la deuda del país. La decisión está basada en el marcado cambio observado en el
desempeño brasileño en el comercio internacional. El superávit por cuenta corriente, los
flujos de inversiones hacia el país y el fuerte crecimiento de las exportaciones está
provocando una reducción de la carga de la deuda externa neta, que según pronósticos
estará por debajo del 140% de las exportaciones de este año cuando en 1999 estaba en el
308%

La buena marcha de los ingresos fiscales está redundando en una reducción de los niveles
de deuda del país aun cuando la expectativa de necesidades de financiación externa para
el 2005 (6000 millones de dólares) se mantiene en niveles similares a los de este año
(5500).

abril 2004 el sector publico registro un ssuperávit


En el periodo enero-abril uperávit primario
correspondiente a un 6.4% del PIB, monto cercano al acordado con el FMI para el primer
semestre del año.

En el sector externo, en 2004 las exportaciones mantienen su dinamismo y, el incremento


de las importaciones se aceleró consistenteme
consistentemente
nte con la reactivación económica, por lo
que probablemente la economía brasileña volverá a registrar un superávit comercial de la
misma magnitud que en el 2003.

Brasil Población Total


200.0
195.0
Millones de personas

190.0
185.0
180.0
175.0
170.0
165.0
160.0
1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

Brasil actualmente posee una población aproximada de 195.14 millones de habitantes.


Crece a un ritmo anual de 1,4% con lo cual a cada año, aproximadamente se incorporan
2,5 millones de personas. Las estimativas del IBGE (Instituto Brasileño de Geografía y
Estadística) indican que para 2012 se alcanzarían los 200 millones de habitantes, mientras
que
ue en 2020 el total ascendería a 219 millones.
La demografía brasileña viene sufriendo un acelerado proceso de transición. En las últimas
dos décadas los niveles de crecimiento de la población se han desacelerado claramente. A
este respecto cabe destacar la drástica caída que ha sufrido la tasa de fecundidad en los
últimos años. Después del pico de los años ‘60s donde el promedio era de 6,3 hijos por
mujer, se disminuyó a 4,4 en los 80’s y a 2,3 hijos por mujer en el año 2000, nivel muy
cerca de la tasa de reposición.

La tasa de natalidad por su parte ha decrecido llegando a 21,2 cada 1.000 habitantes en
2000, igual que la tasa de mortalidad que en ese año se situó en 6,9/1.000. Sorprendente
asimismo ha sido la significativa caída de la tasa de mortalidad infantil. Mientras que en
1990 esta tasa se situó en 48 niños menores de un año a cada 1.000 nacimientos vivos, en
diez años el nivel se redujo a 29,6/1.000 nacimientos y en 2003 era de 27,3/1.000.

En concordancia con estos indicadores, la expectativa de vida ha crecido


significativamente, comenzando en la década de los ’90 un sostenido proceso de
envejecimiento de la población brasileña. En tan solo 10 años la expectativa de vida pasó
de 60 años en 1990 a 68,5 años en 2000 (64,6 para hombres y 72,3 para mujeres).

La gran mayoría de los indicadores sociales y socioeconómicos, han dado un salto


cualitativo en las últimas dos décadas. Diversos factores tales como, la inversión en
saneamiento básico (56,47% de los domicilios en 2000), los avances en la educación
(actualmente la tasa de alfabetización se sitúa en 86,4%), la urbanización (actualmente en
83%), ayudados por la estabilidad económica conquistada principalmente a partir de la
reducción de la inflación en la década de 1990, han contribuido a un notorio aumento de
la calidad de vida de los brasileños en promedio, a pesar de las grandes disparidades
existentes por regiones.
Importacion - Exportaciones - Balanza Comercial
160.00
140.00
120.00
100.00
Miles de Millones

80.00
60.00
40.00
20.00
0.00
-20.00 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

-40.00

IMPORTACIONES EXPORTACIONES Balanza Comercial

El crecimiento en las exportaciones brasileñas le permitió cambiar el déficit comercial


registrado entre 1999 y 2001 a superávits en 2003 y el primer trimestre de 2004. Esto
también se encuentra explicado por el superávit que Brasil obtuvo con la mayoría de d sus
principales socios comerciales, y en particular con China. Diversos factores tanto internos
(aumento de la producción agropecuaria, tipo de cambio competitivo) como externos
(alza de los precios agrícolas y de la demanda mundial) estimularon este dinamismo
din
exportador.

Estos resultados han significado la obtención de considerables y crecientes superávit


comerciales en el último trienio, en gran parte gracias al desempeño del agronegocio.
Más allá del dinamismo en la producción y el empleo que el aume
aumento
nto de las exportaciones
genera, los saldos favorables de la balanza comercial han cumplido un papel relevante en
el equilibrio de la Cuenta Corriente de la Balanza de Pagos.

Las importaciones por otro lado, sufrieron en este período fuertes oscilaciones, afectadas
fundamentalmente por dos crisis cambiarias. La primera a raíz de la devaluación del real
de enero de 1999 y la otra, a causa de la fuerte depreciación de la moneda brasileña
frente al dólar ocurrida a partir del segundo semestre de 2002. La baja del Real se fue
agudizando al acercarse las elecciones presidenciales de finales de ese año, lo que terminó
afectando asimismo el desempeño de 2003.

Por su parte, el dinamismo observado en los flujos de inversión extranjera directa en los
noventa decayó en el periodo bajo revisión, de 2000 a 2004. El sector más importante en
términos de valor fue el de los servicios, en gran parte motivado por el proceso de
privatización de los servicios financieros y de las telecomunicaciones. Ello a pesar de que,
como llama la atención el informe de la Secretaría de la OMC, Brasil no ha ratificado el
Cuarto Protocolo sobre Servicios de Telecomunicaciones Básicas ni el Quinto Protocolo
sobre Servicios Financieros, del Acuerdo general para el comercio de servicios (AGCS), ni
tampoco ha participado en las negociaciones del Acuerdo sobre tecnologías de la
información.

Las exportaciones brasileñas de TI (Tecnología de Información) se contrajeron en 52% el


2002 respecto del año anterior, llegando a US$121mn, según datos de la asociación
industrial brasileña de electricidad y electrónica ABINEE.

Pese a la depreciación del real, los exportadores se vieron perjudicados por el colapso
económico de Argentina, el mayor socio comercial brasileño.

Brasil importó US$733mn en productos de TI, aunque dicho monto fue un 29% menor que
la importación total del 2001 de US$1.040mn. La facturación consolidada de TI en el país
alcanzó los 13.400mn de reales, una baja de 9% respecto del 2001.

En el año 2003 la demanda de acero en China se incrementó en un 22% por el hecho de


que el país fue la sede de los Juegos Olímpicos del 2008. Se construyeron un total de 22
estadios y se utilizaron más acero para construir la Villa Olímpica.

Las exportaciones brasileñas de acero y mineral de hierro se vieron afectadas


negativamente en el 2004, por los altos costos de flete del mercado mundial. Los
exportadores de estos productos observaron alzas de los precios en efectivo para los
embarques de 275% el 2003. El costo por transportar mineral de hierro subió hasta llegar
al mismo nivel que el costo del producto mismo. En el caso de los desbastes planos de
acero, los costos de flete correspondieron a un 13% del precio de US$245/t de desbaste
plano. La fábrica paulista de acero plano Cosipa informó que los costos de flete a China se
duplicaron en el transcurso del 2003 a US$50/t.

En 2004 Estados Unidos fue el principal socio comercial de Brasil, tanto como destino de
sus exportaciones (US$ 20 mil millones), como origen de sus importaciones (US$ 11.300
millones). Las importaciones argentinas volvieron a fortalecerse, lo que significó que este
país volviera a ocupar en 2004, el segundo lugar tanto en exportaciones como
importaciones brasileñas. El tercer lugar es ocupado por países europeos, Holanda cuando
se trata de exportaciones brasileñas y Alemania respecto a las importaciones. China pasó
a ser el cuarto socio comercial del Brasil, origen de US$ 3.700 millones de las
importaciones y destino de US$ 5.440 millones de las exportaciones.
Respecto a las importaciones por regiones, cabe destacar en este período la caída de las
compras provenientes de los tres principales socios comerciales (NAFTA, UE y MERCOSUR)
y el aumento de la participación de los países asiáticos y otros. Las importaciones
provenientes de América del Sur (Mercosur representa el 70% de ellas) y las del NAFTA
disminuyeron no sólo en términos relativos, sino en términos absolutos. Las compras de
la UE se mantuvieron constantes, lo que llevó a perder espacio. Finalmente, las
importaciones provenientes de países asiáticos prácticamente se duplicaron.

Región Productos exportados Productos importados

NAFTA Aviones, autos, hierro, calzados, Maq. y equipamientos, partes


manuf. Acero, fuel oil, pasta aviones, carbón, ins. p/
madera, oro, café. fertilizantes

UE Soja, plataformas, mineral hierro, Auto-partes, partes aviones, ins.


café, pasta madera, jugo naranja, fertilizantes, autos, máquinas.
carne aves.

ASIA Soja, mineral hierro, carne aves, Circuitos integrados, partes p/


prods. acero, pasta madera, electrónicos, carbón, diesel,
aluminio, petróleo. goma.

Am. del Sur Autos, auto-partes, máquinas, Cereales, autos, gas natural,
celulares, tractores, neumáticos, cobre, naftas, petróleo, insumos
aviones. plásticos.

De manera general, se podría resumir que las exportaciones de Brasil dirigidas a la región
y a los EEUU (aunque en menor medida), están constituidas principalmente por
manufacturas de alto valor agregado, mientras que los productos agrícolas tienen como
principales destinos a los países asiáticos y a Europa.

En cuanto a las importaciones, Brasil continúa abasteciéndose con productos primarios de


la región, aunque de forma cada vez menor por la sustitución de importaciones que se
está desarrollando en el sector agropecuario. La tecnología utilizada en la industria
electrónica proviene básicamente de Asia, los bienes de capital principalmente de los
Estados Unidos y también de Europa, así como los químicos y fertilizantes.

En abril de 2008, la calificadora Standard & Poor‘s otorgó a los títulos de la deuda
brasileña el «grado de inversión». Casi en el mismo momento, el país dejaba de ser
deudor neto del resto del mundo y se convertía en acreedor, como resultado de la
reducción de su deuda y del aumento de sus activos (inversiones) en el exterior.

La balanza comercial brasileña cerró 2008 con el peor resultado desde 2002, debido al
fuerte aumento de las importaciones. Los os efectos de la crisis internacional comenzaron a
sentirse al final del año, y terminaron po
porr recortar en unos 6000 millones de dólares las
expectativas del país para exportaciones (que el gobierno había estimado en más de
200.000 millones de dólares) e importaciones.

La crisis internacional y los altibajos de la moneda brasileña fueron las variables


varia que
marcaron n el ritmo de la balanza comercial brasileña
brasileña.

Esto también se debe all extraordinario aumento de las exportaciones mundiales de China,
que pasaron de U$S 434 mil millones en 2000 a U$S1510 mil millones en 2007, esto
manifiesta el grado de competencia
mpetencia que China ejerce sobre las exportaciones de los
demás países

La gráfica siguiente presenta la participación de Brasil y China en las importaciones totales


de EEUU. Podemos observar que la parte proporcionada por China, además de ser mucho
mayor a la brasileña, presenta también un crecimiento más acelerado a lo largo del
período. Por un lado, las exportaciones chinas, que representaban el 8,3% pasaron al
16,6% en 2007 y cayeron levemente al 16,1% en 2008. Por el otro, la participación de las
exportaciones
aciones brasileñas, que representaba el 1,1en 2000, creció hasta el 1,5% en 2005 y,
después de una pequeña fluctuación en los años siguientes, permaneci
permaneció en 1,4% en 2008.

Participación de Brasil y China en las Importaciones de


EEUU
18
16
14
12
10
%
8
6
4
2
0
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008
Brasil China
Conclusiones

Brasil logró superar el déficit de cuenta corriente crónico gracias a una fuerte expansión
exportadora liderada por commodities como la soja y el petróleo, pero incluyendo
también productos industrializados como automóviles y celulares. En materia monetaria,
el Banco Central de Brasil adoptó la política de metas de inflación manteniendo el
incremento en el nivel de precios en un dígito desde 2003.

En general, en el mundo, la crisis ha tenido un impacto menor que lo esperado o, mejor


dicho, la recesión ha sido superada antes de lo previsto. Brasil no es la excepción y se
presume que ya en esta última mitad del año estaría experimentando una recuperación
importante, a pesar de lo cual, 2009 cerrará con signo negativo. En el caso de Brasil ha
sido clave el alineamiento comercial con China en los últimos años. Así, mientras países
como México aguardan la recuperación de Estados Unidos, en Brasil ya se disfruta la
rápida reactivación asiática. En términos de políticas destaca, como en el caso de casi toda
Latinoamérica, el prudente manejo de las cuentas públicas y de la política monetaria que
han permitido inyectar paquetes fiscales para combatir la crisis. Brasil tiene mucho
potencial para convertirse en una de las naciones líderes en esta nueva etapa. Más allá del
poderío militar y político francamente consolidado en los últimos años, la economía
brasileña se ha visto beneficiada por el acercamiento a los gigantes asiáticos, principales
demandantes de commodities alimenticias y energía.

También tiene a favor una amplia base de recursos naturales, un mercado interno de
dimensiones colosales y un grado de seguridad jurídica que le permite mantener el riesgo
país en niveles sumamente ventajosos para el acceso al mercado de capitales global del
sector público y privado.

Probablemente la política golpee menos a la economía en Brasil de lo que lo hace en la


Argentina simplemente porque, en la medida en que el Estado provea de un marco
jurídico estable y una Justicia independiente y eficiente, la política per se no tiene
mayores posibilidades de alterar el comportamiento económico de los agentes, si no a
través de las instituciones republicanas de gobierno. Lula llegó al poder después de haber
sido derrotado en tres elecciones presidenciales. Algunos autores en efecto señalan que
para finalmente alcanzar esa victoria, Lula "giró a la derecha", aunque esta apreciación
puede resultar acotada. Quizás la idea de que se "pragmatizó" sea más acertada. Lo cierto
es que Lula no prescindió del sistema de mercado, sino que lo fortaleció, pero sin
renunciar a su principal objetivo, el combate de la desigualdad. Aunque su política
redistributiva ha estado condicionada por un notable grado de responsabilidad fiscal.
Evidentemente Brasil ha hecho muchas cosas bien estos últimos años. En particular, supo
venderle al mundo la imagen de un país serio, con problemas, pero con muchas
oportunidades para hacer negocios.

Las profundas reformas estructurales llevadas a cabo por el presidente del Gobierno, Luiz
Inácio Lula da Silva, han conferido nuevos aires de estabilidad y seguridad, que lejos de
salpicarse con las crisis vecinas que sumieron en un auténtico caos a países como
Argentina o Venezuela, han aprovechado el tirón del crecimiento para atraer el flujo de
capitales extranjeros.

El Gobierno de Lula, gracias a su política ortodoxa, la reducción del desempleo y de la


inflación (el talón de Aquiles del país) y las políticas de crecimiento, ha conseguido situar
al país entre los más atractivos de Ibero América para invertir.

A pesar de los importantes avances que ha logrado Brasil en los últimos años, la quinta
parte más pobre de los 195 millones de habitantes del país representa sólo el 2,4% del
ingreso nacional. En efecto, Brasil es la segunda nación después de Sudáfrica con la mayor
desigualdad de ingresos del mundo. Según datos de 2001, prácticamente la quinta parte
de la población vive con menos de US$2 al día y el 8% vive con menos de US$1 diario. Por
sumarte, en el Noreste de Brasil se encuentra la mayor concentración de pobreza rural de
América Latina.

Los problemas medioambientales siguen afligiendo al país y representan riesgos para la


salud de gran parte de la población. En la ciudad de Recife, por ejemplo, sólo 33% de las
aguas servidas reciben tratamiento, factor que constituye una importante fuente de
contaminación. En un país con gran cantidad de población urbana (el 83% de los
brasileños vive en ciudades), sólo el 83% de las viviendas urbanas tiene acceso a
instalaciones mejoradas de saneamiento. En el campo, el 58% de los hogares tiene acceso
a una fuente de agua mejorada y sólo el 35% tiene acceso a instalaciones de saneamiento
mejoradas.

La delincuencia también afecta a las ciudades de Brasil y a nivel estructural, la mala


calidad del sistema de transporte y la burocracia elevan los costos de manera evidente,
tanto para los ciudadanos comunes como para las empresas. En São Paulo, una persona
pobre destina la quinta parte de sus ingresos a transporte y le dedica más de 2,5 horas
diarias.

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