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CANCER DE VIA BILIAR

Matias Roberto Fatechi, Sergio Gabriel Leiva Friguglietti, Claudia Lorena Roa.
Dr. Gustavo Smith.

Resumen:
Los carcinomas biliares son tumores malignos infrecuentes, pero no excepcionales, cuyo pronós-
tico ha sido tradicionalmente ominoso a corto plazo por un doble motivo: su carácter clínicamente si-
lencioso hasta fases avanzadas de invasión tumoral y su extensa invasión local en áreas de difícil
abordaje quirúrgico, como el hilio hepático y la zona pancreaticoduodenal. La obstrucción al flujo bi-
liar es la consecuencia principal de su desarrollo en estas localizaciones anatómicas, y su resolución
con frecuencia prolonga la vida aun en ausencia de resección tumoral. En los últimos años se ha
producido un notable progreso en las técnicas de radiología intervencionista destinadas a paliar la
obstrucción biliar mediante colocación de catéteres transbiliares percutáneos o por vía endoscópica;
el drenaje biliar externo o interno conseguido de esta forma mejorar con frecuencia la supervivencia y
evita la intervención quirúrgica, que sólo es curativa en casos excepcionales y está gravada con una
importante morbilidad y mortalidad en la ictericia tumoral. El 80% de los pacientes con carcinoma de
vesícula tienen Colélitiasis, lo cual sugiere una relación etiológica entre la presencia de cálculos y la
posterior degeneración maligna del epitelio de la vesícula biliar. Su prevalencía en material de autop-
sia es del 0,5%; se encuentra 4 veces más en mujeres que en varones, en concordancia con la fre-
cuencia relativa de Colélitiasis en ambos sexos. Su prevalencía es también mayor en los grupos de
población con elevada incidencia de Colélitiasis, como las tribus indias del sudoeste norteamericano
y los chilenos. Para el paciente con Colélitiasis, sin embargo, el riesgo de degeneración maligna de
la vesícula es pequeño, ya que su incidencia es sólo del 1%. Por razones desconocidas, este riesgo
es sustancialmente mayor en pacientes con vesícula calcificada (vesícula de porcelana), por lo que
en este grupo está indicada la colecistectomía profiláctica. La edad media de presentación clínica
oscila alrededor de los 70 años.
Palabras claves: Cáncer de vía biliar, epidemiología, tratamiento.
Summary:
The biliary carcinomas are malignant tumors infrequent, but nonexceptional, whose prognosis has
been traditionally ominous short term by a double reason: its character clinically quiet until phases
outposts of tumorlike invasion and their extensive local invasion in areas of difficult surgical boarding,
like hilio hepático and the pancreaticoduodenal zone. The obstruction to the flor biliary it is the main
consequence of his development in these anatomical locations, and its resolution frequently prolongs
the life even in the absence of tumorlike resección. In the last years a remarkable progress in the
techniques of interventionist radiology has taken place destined to palliate biliary obstruction by
means of positioning of percutáneos transbiliares catheters or by endoscópica route; secured the ex-
ternal or internal biliary drainage of this form to improve frequently the survival and avoids the opera-
tion, that is curative in exceptional cases and is only taxed with an important morbidity and mortality in
tumorlike jaundice. 80% of the patients with vesicle carcinoma have Colélitiasis, which suggests a
etiológica relation between the presence of calculations and the later malignant degeneration of epite-
lio of the biliary vesicle. Su prevalencía in autopsy material is of 0.5%; one is 4 times more in women
than in men, in agreement with the relative frequency of Colélitiasis in both sexes. Su prevalencía he
is also greater in the groups of population with high incidence of Colélitiasis, like the Indian tribes of
the North American southwest and the Chileans. For the patient with Colélitiasis, nevertheless, the
risk of malignant degeneration of the vesicle is small, since its incidence is only of 1%. For unknown
reasons, this risk is substantially greater in patients with calcified vesicle (porcelain vesicle), reason
why in this group the prophylactic colecistectomía is indicated. The average age of clinical presenta-
tion oscillates around the 70 years.
Key words: Cancer of biliary route, epidemiología, treatment.

INTRODUCCION publicó 13 casos de canceres de la bifurcación


El cáncer de la vía biliar se conoce desde del conducto hepático en 1965 (2,3).
hace mas de un siglo. El carcinoma de vesícula Si dividimos la vía biliar en tres tercios, el
biliar (CVB) fue descrito por primera vez por 55% de los tumores biliares involucran al tercio
Maximillian de Stoll en 1777 (1). En 1889, Mus- superior, el 15% al medio, e1 20% al inferior y
ser publicó 18 casos de cáncer primario de la un 10% es difuso (2).
vía biliar extrahepatica. Los tumores malignos El pesimismo clínico y pronóstico que rodea
de las vías biliares intrahepaticas y perihiliar al CVB es debido esencialmente a su presen-
fueron descritos de manera mas reciente; Alte- tación tardía.
meier comunico tres casos en 1957 y Klatskin La mortalidad se relaciona con el grado de
diseminación tumoral locorregional; como cau-

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sas de muerte encontramos la falla hepática y ceres digestivos después de estómago, colon,
colangitis, secundarias a la progresión local de recto y esófago (4).
la enfermedad con obstrucción biliar. Estas le- Las tasas más altas de incidencia se regis-
siones comprometen la confluencia biliar y es- tran en Chile, habitantes del noreste de Europa,
tán asociadas con peor pronóstico que los tu- Israel, indios americanos y americanos de ori-
mores dístales. Esto se debe a que en el mo- gen mexicano (5,6).
mento del diagnóstico generalmente se encuen- A 200 años de la descripción inicial, este
tran localmente avanzados (2). tumor aún se caracteriza por una evolución
Pocos centros cuentan con experiencia en desfavorable como consecuencia del curso clí-
su tratamiento, y el mismo es complejo y se en- nico solapado, que en el momento del diagnós-
cuentra asociado a una alta morbimortalidad. El tico ya se presenta como una enfermedad
95% de estos tumores son adenocarcinomas avanzada imposible de resecar.
(1,2)
. El cáncer de vesícula biliar (CVB) es una en-
Objetivos: Los objetivos de esta revisión fermedad frecuente en el noroeste argentino.
son primeramente determinar los factores de La tasa de mortalidad anual para el cáncer de
riesgo para el cáncer de vías biliares, realizar vesícula y vías biliares en la provincia de Salta
una descripción de las diferentes variedades fue 6,7 (por 100.000 habitantes) para el año
histológicas y por ultimo evaluar las posibles 2001, siendo la tercera causa de muerte por
opciones terapéuticas paliativas. cáncer en mujeres en la provincia(7). La tasa de
mortalidad anual en la República Argentina fue
MATERIALES Y METODOS 3,7 para el período 1989-1992, siendo la nove-
Se realizó la búsqueda de material con refe- na causa de muerte por cáncer en mujeres (7).
rencias bibliográficas de las revistas primarias El diagnóstico temprano, la cirugía agresiva
incluidas en las revisiones sistemáticas a texto y la quimioterapia constituyen la base para lo-
completo de los registros del PubMed, National grar una mejor sobrevida. No obstante el avan-
Cáncer Institute (NCI), American Society of Cli- ce con los procedimientos de diagnóstico por
nical Oncology (ASCO y), American Cáncer So- imágenes, el diagnóstico oportuno continúa
ciety (ACS), utilizando como palabras claves. siendo un problema.
Cáncer de vía biliar (cáncer of billiary tract).
Epidemiología (epidemiology). Etiología (etiolo- Factores de riesgo.
gy). Factores de riesgo (risk factors). Mortalidad Es difícil establecer una lista de factores de
(mortality). Manifestaciones clínicas (clinical riesgo debido a la falta de estudios epidemioló-
manifestations). Anatomía patológica (patholo- gicos, aunque se podría considerar el sexo fe-
gy). Diagnostico (diagnosis). Tratamiento menino (76 a 77% de los casos), la edad ( entre
(treatment). Las revisiones sistemáticas obteni- 66 y 70 años) y la Colelitiasis como acompaña-
das con la estrategia mencionada líneas arriba doras de ésta patología. La litiasis se asocia en-
se identificaron independientemente por tres in- tre un 45 y 100% de las veces, debido a que
vestigadores (Leiva Friguglietti, Sergio Gabriel; desencadena un gran proceso inflamatorio, con
Roa, Claudia Lorena; Fatechi, Matías Roberto) la posterior liberación de factores de crecimien-
y las discrepancias se resolvieron por mutuo to que producen alteraciones en genes como el
acuerdo. p53, el K-ras, el Bcl-2, el MAPK y otros (inicia-
Criterios de inclusión: Se incluyeron todas las dores tumorales) (8).
referencias bibliográficas que pertenecían a re- Favorece la hipótesis de la litiasis e inflama-
vistas médicas primarias de las revisiones sis- ción como causantes de CVB la observación de
temáticas. que en vesículas resecadas con estas altera-
Criterios de exclusión: Se excluyeron: refe- ciones, el 83% presenta displasia, 13,5% pre-
rencias no consideradas como revistas médicas senta hiperplasia atípica y el 3,5% de los casos
(tesis, presentaciones en congresos no publi- presenta carcinoma in situ, las cuales se consi-
cadas en revistas), tópicos relacionados a pro- deran lesiones precursoras del cáncer invasor
fesionales de la salud no médicos y tópicos re- (9)
.
lacionados con la ética. Las referencias exclui- Por otro lado, tanto la vesícula en porcelana
das también se identificaron independientemen- que resulta de la calcificación sobre una infla-
te por tres investigadores (Leiva Friguglietti, mación crónica, como la unión ductal pancrea-
Sergio Gabriel; Roa, Claudia Lorena; Fatechi, tobiliar anómala que produce inflamación cróni-
Matías Roberto) y las discrepancias se resolvie- ca, están asociadas a mayor riesgo de cáncer
ron por mutuo acuerdo. de vesícula (9).
Otros factores asociados a CVB son los
DESARROLLO quistes coledocianos, los químicos de uso en la
Epidemiología. industria del caucho (tricloroetileno) y los póli-
Las neoplasias de la vía biliar son infrecuen- pos de vesícula (10).
tes y se asocian a una alta mortalidad y mal Asociaciones raras con el cáncer de la vesí-
pronóstico. Ocupa el quinto lugar entre los cán- cula incluyen: pacientes con colitis ulcerosa,

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especialmente con pancolitis ulcerosa (4). Como A mayor grado de diferenciación y menor ni-
la colecistectomía agrega poca morbimortalidad vel de penetración, menor es la probabilidad de
a la proctocolectomía total, podría estar indica- extensión ganglionar y hepática. La penetración
da en los pacientes cuyas piezas resecadas hasta la capa muscular aumenta significativa-
tienen evidencia de una displasia de alto grado. mente el riesgo de metástasis, en un porcentaje
En la anomalía congénita de la unión de los mayor comparado con el cáncer en otros órga-
conductos pancreático y biliar se han descriptos nos tubulares. Esto se debe a que la vesícula
dobles carcinomas: en la vesícula y en la vía bi- biliar carece de submucosa y la cara que con-
liar principal. tacta con el hígado carece de serosa.
La alta incidencia en el noroeste argentino y Esta peculiaridad de la anatomía vesicular
Chile lleva a considerar la posibilidad de facto- explica, entre otros factores, por qué el CVB es-
res alimentarios y genéticos como causantes de tá avanzado al momento del diagnóstico en la
CVB. Un estudio reveló que el 6% de los indios mayoría de los casos (4).
nativos del Sudoeste de América a los que se Las vías de diseminación que dan origen a
les practicó cirugía del tracto biliar tenían cán- la clasificación TNM (tabla II) son la vía por con-
cer de vesícula (6,7). tigüidad (T); la diseminación linfática (N) que
reconoce la vía colecisto-retropancreática (la
Factores de riesgo asociados.
• Litiasis.
más común), la colecisto-celíaca, y la colecisto-
• Edad mayor de 50 años. mesentérica; y la diseminación hematógena (M)
• Sexo femenino. en la que el órgano más frecuentemente involu-
• Vesícula en porcelana. crado es el hígado seguido en orden decrecien-
• Unión pancreatobiliar anómala. te por el pulmón y los huesos. Debe agregarse
• Factores genéticos. la vía de diseminación por contaminación debi-
• Pólipos.
• Químicos de la industria del caucho.
da al manipuleo quirúrgico (13).
• Quistes del colédoco. Por las razones que mencionamos arriba el
CVB tiene una diseminación rápida: el 50% de
Anatomía patológica. los tumores T2 ya tiene invasión ganglionar; el
La anatomía patológica del CVB ha sido 50% de los tumores T3 tiene invasión peritoneal
(9.13)
muy bien descripta. El adenocarcinoma repre- .
senta el 80 al 90% de los casos y es el tipo his- Esto explica que la sobrevida a los 5 años
tológico más frecuente (9). sea pobre: 28 a 100% para los tumores T1; 20
El carcinoma indiferenciado aparece en un a 70% (según se realice reintervención quirúr-
6%, el carcinoma escamoso en un 3%, el tumor gica o no) para los T2; 14% para tumores T3; y
mixto o acantoma en el 1% de los casos. Como 7% para T4.
variedad histológica rara figuran: el leiomiosar-
coma; melanoma primitivo y metastásico; tumor Estadificación de Nevin (21) para el Carcinoma
carcinoide; rabdomiosarcoma alveolar; rabdo- Vesícula Biliar (original y modificado de Donohue
miosarcoma embrionario; paraganglioma; oat Original (Nevin, Modificado (Dono-
cell vesicular; carcinoma de células pequeñas; 1976) hue, 1990)
Nevin 1 Carcinoma limitado a Carcinoma in situ
adenoma velloso de la vesícula con áreas de mucosa
carcinoma In Situ"; histiocitoma fibroso maligno Nevin 2 Limitado a capa Invasión muco-
y linfomas. También se han descripto tumores muscular sa/muscular
malignos sincrónicos: adenocarcinoma y co- Nevin 3 Limitado a capa sub- Infiltración hepática
serosa (no infiltra contigua
rioncarcinoma; carcinoma escamoso y angio- hígado)
sarcoma. Entre los tumores mixtos: carcinoide y Nevin 4 Afección ganglio cís- Afección ganglionar
adenocarcinoma, carcinoma y sarcoma (10,11,12). tico (+)
Existen dos factores pronósticos que se ob- Nevin 5 Infiltración hepática Metástasis hepáticas
tienen de la biopsia y son de gran importancia: directa o metástasis o a otros órganos
a distancia
el grado histológico y la penetración.
Invasión locorregional y metástasis basado en Clasificación TNM del cáncer de vesícula.
(4)
una revisión de la bibliografía de Boerma, 1994 Tumor
Hallazgo histopatológico Incidencia Tis carcinoma in situ
(%) T1 invade mucosa y muscular
Confinado a pared vesicular 10 T1a invade mucosa
Invasión hepática 59
T1b invade muscular
Infiltración de vía biliar principal 35
T2 invade serosa (sin penetrarla)
Invasión linfática locorregional 45
Infiltración venosa de vesícula biliar 39
T3 perfora serosa o invade un órgano adyacente
Invasión de vena porta o arteria hepática 15 (hígado menor a 2 cm)
Invasión de otros órganos (no hígado) 40 T4 invade hígado mayor a 2cm, o más de un órgano
Invasión perineural 42 adyacente
Metástasis hepáticas 34
Metástasis a distancia (no hepáticas) 20

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Ganglios linfáticos C Síndrome ictérico: Cuando el tumor de la
N0 ausencia de metástasis ganglionares. vesícula se extiende hacia las vías biliares
N1 invasión de ganglio cístico, ganglios pericoledo- se puede comprobar con la ecografía, una
cianos o hiliares. dilatación de las vías intrahepáticas y a
N2 invasión de ganglios celíacos, periportales, peri-
duodenales, peripancreáticos, lumboaórticos, me-
veces un tumor, ocupando el lugar de la
sentéricos. vesícula.
D.Cólico biliar: En el cáncer temprano el
Metástasis a distancia diagnóstico de certeza es anatomopatoló-
M0 sin invasión de órganos a distancia. gico. Además en el cáncer avanzado se
M1 invasión de órganos a distancia (incluye metásta- observa, con el examen ecográfico, una
sis hepáticas no por contigüidad) proliferación de la pared vesicular, junto a
Estadios los cálculos, o un engrosamiento localiza-
0- Tis, N0, M0 do o difuso con borramiento de los límites
I- T1, N0, M0
II T2, N0, M0
de la vesícula por invasión del lecho. Co-
III- T3, N0, M0 mo hemos mencionado, en los casos de
T1-3, N1, M0 vesícula escleroatrófica no se obtienen
IV-A T4, N0-1, M0 mayores datos.
IV-B T1-4, N2, M0 E.Colecistitis aguda: En estas circunstan-
T1-4, N0-2, M1 cias ni la clínica ni la ecografía sugieren la
presencia de un proceso maligno. El
Es claro que para alcanzar la curación es hallazgo generalmente es quirúrgico.
necesario el diagnóstico en etapas tempranas.
El diagnóstico temprano resulta del hallazgo Diagnóstico.
en piezas de colecistectomía en la mayoría de Diversos trabajos concluyeron que todo póli-
los casos, y raramente cuando se detecta por po mayor de 10 mm es altamente sospechoso y
métodos complementarios. Es muy importante, tiene indicación de colecistectomía. Los pólipos
entonces, que el patólogo busque meticulosa- menores de 10 mm deben ser controlados cada
mente la presencia de cáncer en las piezas 3 meses con ecografía. Si se detecta aumento
operatorias. La frecuencia con que se detecta de tamaño se debe realizar colecistectomía in-
cáncer como hallazgo en piezas de colecistec- mediatamente (4).
tomía oscila entre el 0 y el 5%, dependiendo del Debido a su efectividad en el diagnóstico de és-
centro y de la técnica de búsqueda llevada a ta patología, la ultrasonografía es el procedi-
cabo por el patólogo (14). miento de primera elección para el estudio de
En el momento del diagnóstico, sólo el 10% las vías biliares (2,4).
de los pacientes tienen el tumor contenido de- Los procesos inflamatorios y litiásicos de las
ntro de los límites de la vesícula, y es un vías biliares son estudiados de preferencia con
hallazgo quirúrgico o anatomopatológico. El este procedimiento. Pero no permite reconocer
15% tiene un cáncer invasivo temprano que el carcinoma en forma temprana.
compromete el lecho vesicular y los ganglios Este tumor puede tener diferentes patentes
regionales (14). ecográficas: a) proliferación intraluminar; b) en-
grosamiento localizado o difuso de la pared; e)
Manifestaciones clínicas: masa que reemplaza totalmente a la vesícula
(5)
Desdichadamente, en la mayoría de los pa- . No es posible diferenciar las lesiones tumo-
cientes el CVB ocasiona los primeros síntomas rales benignas (adenomiomatosis) de las ma-
cuando la enfermedad es incurable (4,15). lignas y en algunas ocasiones las tumorales de
El 60 al 95% de los casos tiene dolor. La ic- las no tumorales.
tericia está presente en el 25-50% de los casos. Los resultados obtenidos mediante tomogra-
La anorexia y la pérdida de peso con deterioro fía computarizada (TC) se superponen con los
general son frecuentes. hallazgos ecográficos y, como en esos casos, el
En la mayoría de las experiencias se obser- diagnóstico también es tardío.
van distintas presentaciones clínicas: La citología por aspiración con aguja fina
A.Cáncer avanzado con una clínica que su- guiada por ecografía o por tomografía compu-
giere la presencia de un proceso maligno tada es útil para tener la certeza diagnóstica
(hipoorexia, astenia, descenso de peso). prequirúrgica.
En este caso la ecografía resulta de gran La punción dirigida por ecografía tiene la
utilidad excepto en los casos en que la ventaja que observa la posición de la aguja en
vesícula escleroatrófica no permita obser- tiempo real, mientras que la TC muestra la ima-
var el contenido de la misma. gen a posteriori.
B.Masa abdominal palpable (sólo se pudo La biopsia por punción está contraindicada
conocer su etiología luego de realizada la cuando el tumor es potencialmente resecable
laparotomía exploradora). porque tiene un riesgo elevado de diseminación
a través del trayecto de la aguja (4).

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La proteína p53 y Kl 67 son halladas por rragias y causar una colecistitis aguda, de la
técnicas de inmunohistoquímicas en el carci- cual son los jóvenes particularmente sensibles.
noma temprano de la vesícula. Los hallazgos El cáncer produce un engrosamiento difuso
sugieren que estas proteínas se encuentran no de la pared vesicular con infiltración de las es-
sólo en el carcinoma temprano sino también en tructuras vecinas o se proyecta hacia la luz de
el epitelio atípico de la vesícula. También se re- la vesícula. En esta etapa la ecografía lo puede
gistran elevaciones de la alfafetoproteína en los detectar pero ha se encuentra en una etapa
casos cuya patente histológica es similar al avanzada. Cuando se extienden hacia los con-
Hepatocarcinoma (16). ductos biliares (hepático común) hay que esta-
La TC puede visualizar mejor el compromiso blecer el diagnóstico diferencial con los tumores
del parénquima hepático y la extensión a órga- hiliares (18). Ya en un estadio temprano invade
nos abdominales. La TC helicoidal obtiene imá- en forma directa al hígado, y se produce la di-
genes en forma rápida luego de la inyección de seminación hematógena a través de las venas
contraste endovenoso. Esto permite diferenciar que drenan desde el cuello vesicular pero en la
el tejido tumoral del normal si ambos tienen di- mayoría de los casos no hay diseminación
ferente irrigación arterio-venosa, ya que a los hematógena a distancia (1). La diseminación lin-
pocos segundos de la inyección la imagen fática se concreta desde los ganglios que ro-
hepática se hace homogénea (4). dean al cístico, al colédoco y a la región pan-
Por el mismo principio la TC helicoidal per- creaticoduodenal.
mite diferenciar un tumor hipervascularizado
cuya imagen se realzará durante la fase arterial Tratamiento.
(hepatoma), de un tumor hipovascular que real- El manejo de los tumores proximales de la
zará durante la fase portal (metástasis de cán- vía biliar tiene por objetivo:
cer de colon). • Ser posible la exéresis del tumor
La resonancia magnética nuclear (RMN) • Tratar la ictericia
puede determinar con mayor certeza el com- • Promover una razonable calidad de vida
promiso vascular. El único tratamiento curativo para estos tu-
Cuando debe descartarse o confirmarse un mores es la resección quirúrgica, ya sea me-
hemangioma la RMN es especialmente útil, diante una resección local o en conjunto con
pues este tumor produce una imagen casi pa- una resección hepática (4,7).
tognomónica con el resonador. La evaluación preoperatoria, cuando se sos-
Al igual que la colangiografía, la RMN permi- pecha del carcinoma de la vesícula, está orien-
te estudiar la relación del tumor con la vía biliar tada a determinar el tipo de cirugía que se rea-
(colangiorresonancia) (17). lizará. Esto incluye, en ciertos casos, efectuar
Si bien los métodos descriptos permiten evi- una colangiografía retrógrada endoscópica o
tar una intervención quirúrgica cuando determi- percutánea (7).
nan la irresecabilidad del tumor, la situación in- La resección radical persigue la ausencia de
versa no es así. Aún cuando no se observen tumor residual tras la resección quirúrgica; se
signos de irresecabilidad por estos estudios, só- han establecido tres categorías en función del
lo la exploración del cirujano determinará si el resultado: R0 (ausencia de tumor residual micro
tumor es resecable (7). y macroscópico); R1 (presencia de tumor resi-
dual microscópico), y R2 (presencia de tumor
Diagnóstico diferencial: residual macroscópico).
En el diagnóstico diferencial hay que tener La resección radical R0 será posible reali-
en cuenta las masas vesiculares observadas en zarla en un porcentaje variable de pacientes
el examen ecográfico: los pólipos simples, los que oscila entre el 20 y el 50%; esta variabili-
pólipos constituidos por mucosa gástrica hete- dad depende de la selección preoperatoria de
rotápica, los pólipos carcinomatosos, el coris- los enfermos que van a ser sometidos a laparo-
toma (tejido hepático heterotópico sin conexión tomía y de la propia experiencia del cirujano.
alguna con el hígado) y el hígado accesorio de Los criterios de irresecabilidad del CVB son
la vecindad de la vesícula (18). También la cole- los siguientes: mala condición general del pa-
cistitis xantogranulomatosa puede simular un ciente (paciente no operable); presencia de me-
carcinoma mínimo y prestara confusión. tástasis hepáticas, peritoneales o a distancia;
Con los pólipos vesiculares menores de 1 afección extensa del tronco principal de la vena
cm., se sugiere tener una conducta expectante porta o de la arteria hepática, y afección bilate-
y realizar exámenes ecográficos cada 3, 6 y 12 ral de ambas ramas portales o arteriales (18).
meses si no ocurren modificaciones. Aquellos La clasificación de Nevin permite establecer
que superan el centímetro deben ser resecados la expectativa de vida: estadio I, compromiso in-
(colecistectomía). Si el pólipo está constituido tramucoso; estadio II, mucosa y mucularis; es-
por mucosa gástrica heterotópica pueden pre- tadio III, están involucradas las 3 capas; estadio
sentarse complicaciones: ulceración y/o hemo- IV, las tres capas y el ganglio linfático del císti-
co; estadio V, extensión directa o metastásica

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hacia el hígado. La colecistectomía puede ser La obstrucción biliar prolongada puede pro-
curativa en los estadios I y II y no se justifica vocar:
mayor resección. La cirugía puede ser curativa • disfunción hepatocelular
en los estadios III y IV y con infiltración hepáti- • desnutrición progresiva
ca, si se efectúa una resección en bloque (vesí- • coagulopatia
cula con los segmentos hepáticos adyacentes • prurito
IV y V o IV y VI, con resección linfática). El 75% • disfunción renal
de los tumores no resecables tiene una vida • colangitis
media de pocos meses (4).
El cáncer avanzado, en los estadios que no Opciones terapéuticas paliativas:
tienen oportunidad quirúrgica puede ser tratado Paliación quirúrgica: En pacientes con bajo
con quimioterapia, radioterapia y una combina- riesgo quirúrgico y enfermedad potencialmente
ción de ambas. En estas circunstancias la tera- resecable, esta indicada la exploración quirúrgi-
péutica siempre es paliativa (19,20). ca (4). La mitad de estos pacientes no serán pa-
En el cáncer de la vesícula la diseminación sibles de una resección con criterio curativo.
locorregional y sistémica es frecuente, no así el La mortalidad operatoria en la paliación qui-
compromiso del sistema nervioso. Los estudios rúrgica tiene un rango entre 4 al 27%.
tendientes a determinar si las resecciones más Las conductas ante la irresecabilidad del
extensas mejoran los resultados, determinan tumor durante la laparotomía exploradora pue-
que la simple colecistectomía no siempre es cu- den ser las siguientes:
rativa cuando las lesiones tempranas se descu- • Hepaticoyeyunoanastomosis en Y de
bren en forma incidental, y que pacientes con Roux con drenajes transtumorales
enfermedad avanzada pueden tener una larga
• by-pass del segmento IU a los conductos
sobrevida con amplias resecciones; además és-
hepáticos izquierdos
tas se recomiendan incluso en pacientes selec-
• Cierre de la laparotomía y posterior tra-
cionados en estadio III.
tamiento percutáneo.
La supervivencia a 5 años de los pacientes
Paliación no quirúrgica: En los casos donde
con CVB a los que se les realiza cirugía radical
la evaluación preoperatoria revela que el pa-
curativa adecuada en función de su estadio tu-
ciente tiene un riesgo elevado para la cirugía o
moral se sitúa entre el 14 y el 20% (4).
que el tumor es irresecable, es apropiado el
Asimismo, el factor pronóstico más impor-
manejo paliativo no quirúrgico.
tante para conseguir una supervivencia prolon-
En estos pacientes, con expectativa de vida
gada es la radicalidad de la resección quirúrgi-
limitada, son preferibles la técnicas invasivas
ca; otros factores que se han identificado en los
mínimas para restablecer la permeabilidad del
diversos trabajos son: ausencia de afección
conducto (3,21).
ganglionar; grado de infiltración parietal; estadio
Las prótesis endoscópicas están asociadas
TNM y Nevin; grado histológico de diferencia-
en los tumores altos con un alto porcentaje de
ción tumoral, y diagnóstico postoperatorio del
fracasos y un significativo nivel de colangitis. El
CVB o CVB incidental (7).
porcentaje de éxito en la colocación de los
Debido a la complejidad técnica, al tiempo
mismos se encuentra entre el 42 al 75% en
quirúrgico empleado y a la eventual necesidad
manos expertas, pero el drenaje bilateral no
de derivados sanguíneos, la cirugía con inten-
supera al 30% de los casos, por lo que e1 dia-
ción curativa del CVB se acompaña de una
gnóstico y tratamiento endoscópico es de limi-
morbilidad postoperatoria no despreciable, con
tado valor en esta patología (21). Las técnicas
tasas que oscilan entre el 5-54%. Las compli-
percutáneas por lo tanto son de elección (7).
caciones más frecuentes serán fístulas biliares,
Clásicamente, se ha dicho que el drenaje
insuficiencia hepática leve-moderada, absceso
unilateral es efectivo para tratar la ictericia en
intraabdominal e insuficiencia respiratoria.
un 80% de los pacientes.
La mortalidad postoperatoria de los casos
operados y resecados oscila, en función de las
Quimioterapia y radioterapia:
series, entre el 0 y el 21%, siendo mayor cuan-
Quimioterapia: La quimioterapia se ha usado
do se realizan resecciones hepáticas mayores y
como terapia coadyuvante en el CVB resecado
resecciones de la vía biliar.
o como paliación en el CVB no resecable, y en
Más del 80% de los pacientes con ictericia
ninguno de los casos se ha logrado aumentar la
obstructiva de origen maligno requiere trata-
supervivencia. Diversos estudios cooperativos
miento paliativo. Éste puede ser quirúrgico,
han examinado el papel de la mitomicina C (en
percutáneo o endoscópico (colocación de en-
bolos), 5- fluorouracilo, adriamicina y nitrosu-
doprótesis plásticas o expandibles) (21). En los
reas, solos o en combinación, con comunica-
casos donde la cirugía no es posible, se descri-
ciones aisladas de mínimas respuestas. Tam-
ben diversos procedimientos para paliar la icte-
bién se ha usado la terapia regional intraarterial
ricia con una razonable calidad de vida.
con mitomicina C, con tasas globales de res-

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puesta del 48% y un incremento de la mediana diagnóstico precoz, como para su tratamiento
de supervivencia de 5 a 14 meses en relación en estadios avanzados.
con cohortes históricos de control (22). La mortalidad se relaciona con el grado de
Radioterapia: Los distintos modelos de aplica- diseminación tumoral locorregional. Pese al
ción de radioterapia (externa; intraoperatoria e gran desarrollo de las técnicas de diagnóstico
interna, esta última usando dispositivos inserta- por imagen, la detección temprana de esta
dos por vía percútanla o endoscopia que liberan neoplasia continúa siendo difícil. La mejora de
la radiación localmente mediante agujas de iri- los resultados debe basarse en: a) la realiza-
dio-192 o de cobalto-60) se han usado como ción de resecciones quirúrgicas de primera in-
tratamiento paliativo para el CVB localmente tención con finalidad curativa siempre que sea
avanzado y no resecable; los resultados sugie- técnicamente posible; b) la identificación de pa-
ren que podría aumentar la sobrevida, aunque cientes portadores de litiasis biliar sintomática
el beneficio es escaso (de 6 a 8 meses en la (principal factor de riesgo asociado) para some-
mediana de supervivencia). No obstante, es terlos a colecistectomía, y c) el análisis exhaus-
bien tolerada y parece que podría ser útil para tivo histopatológico de los especimenes de co-
mejorar los síntomas en pacientes selecciona- lecistectomía para diagnosticar aquellos tumo-
dos (19,23). res incidentales en estadios iniciales que van a
Por otro lado, se han publicado dos series ser subsidiarios de reintervención con intención
de cirugía asociada a radioterapia intraoperato- curativa. Tanto los métodos diagnósticos como
ria para CVB avanzado, con tasas de sobrevida las técnicas resectivas curativas han tenido un
de 10,3 a 3 años en uno de ellos. El desarrollo avance importante en los últimos 10 años. Por
de esta línea terapéutica podría aportar calidad lo tanto las esperanzas de avanzar en el trata-
y cantidad de vida a los pacientes con CVB lo- miento de ésta enfermedad son muy promiso-
calmente avanzado (24). rias debiendo continuar con investigaciones a
cerca de la misma, para que en un futuro ten-
CONCLUSION gamos una morbimortalidad y una esperanza
Los tumores malignos de vía biliar represen- de vida a los 5 años mucho mejor.
tan un desafío para el cirujano, tanto para, el

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