Você está na página 1de 2

ACTO DE CONTRICCION 1 Seor mo, Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre, Redentor mo, por ser vos

quien sois, bondad infinita y por que os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazn haberos ofendido, tambin me pesa porque podis castigarme con las penas del infierno. Animado con tu divina gracia, propongo firmemente nunca mas pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta, para el perdn de mis pecados. Amen

ACTO DE CONTRICION 2 Psame Dios mo y me arrepiento de todo corazn de haberte ofendido. Psame por el infierno que merec y por el cielo que perd; pero mucho mas me pesa porque pecando ofend un Dios tan bueno y tan grande como vos; antes querra haber muerto que haberle ofendido, y propongo firmemente ayudado por tu divina gracia, no pecar mas y evitar las ocasiones prximas de pecado. Amen

ACTO PENITENCIAL Yo confieso ante Dios Todopoderoso y ante ustedes, hermanos, que he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisin: por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso ruego a Santa Mara, siempre Virgen, a los ngeles, a los santos y a ustedes, hermanos, que intercedan por mi ante Dios, nuestro Seor. Amn

ORACIN PARA TODOS LOS DAS Oh Virgen Mara, Madre de Dios y Madre tambin de los pecadores, y especial Protectora de los que visten tu sagrado Escapulario; por lo que su divina Majestad te engrandeci, escogindote para verdadera Madre suya, te suplico me alcances de tu querido Hijo el perdn de mis pecados, la enmienda de mi vida, la salvacin de mi alma, el remedio de mis necesidades, el consuelo de mis aflicciones y la gracia especial que pido en esta Novena, si conviene para su mayor honra y gloria, y bien de mi alma: que yo, Seora, para conseguirlo me valgo de vuestra intercesin poderosa, y quisiera tener el espritu de todos los ngeles, santos y justos a fin de poder alabarte dignamente; y uniendo mis voces con sus afectos, te saludo una y mil veces, diciendo: (rezar tres avemaras) Rezar a continuacin la oracin del da que corresponda:

Você também pode gostar