Você está na página 1de 43

1.

1 Aparato reproductor masculino


Los órganos genitales masculinos son: Los testículos, con funciones endocrinas (producción
de
hormonas masculinas) y funciones de génesis y maduración de los gametos masculinos o
espermatozoides,
que serán trasladados a través de las vías espermáticas hasta la uretra, la cual desemboca
en el
exterior a través del pene. Incluyen otros órganos accesorios, como la próstata y las
glándulas de
Cowper.
A. Testículos
a. Situación, forma y relaciones
Los testículos son dos órganos situados en el exterior de la cavidad abdominal, el izquierdo
un
poco más bajo, debajo del pene y alojados en las bolsas escrotales o escroto, elescroto tiene
la función
de mantener los testículos a una temperatura ligeramente inferior a la del cuerpo (5Cpor
debajo
de la temperatura central corporal), puesto que las células germinales, generadoras de
espermatozoides,
son muy sensibles a los cambios de temperatura y ligeros incrementos producen esterilidad.
En su origen, en la vida embrionaria, los testículos se encuentran en el interior de la cavidad
abdominal. La anormal permanencia de esta situación se denomina criptorquidia.
Tienen forma ovalada, con un diámetro mayor de unos 4 cm, una anchura de 3 cm y un
espesor
de 2,5 cm, y cada uno de ellos pesa alrededor de 20 g. La superficie del testículo es lisa y
brillante,
de color blanco, formada por una cubierta fibrosa denominada albugínea, muy tensa, lo que
le confiere
una consistencia dura.
En su polo superior se aprecia una pequeña formación correspondiente a un resto
embrionario
denominado hidátide sésil de Morgagni.
Por su cara posterior, el testículo está en contacto con el epidídimo, una estructura que
forma
parte de las vías espermáticas y en la que se distinguen tres porciones: cabeza, cuerpo y
cola. La
cabeza del epidídimo emerge del polo superior del testículo, y el cuerpo y la cola descienden
adosados
a su cara posterior.
El testículo y el epidídimo están envueltos por una serie de capas que constituyen la bolsa
escrotal.
Hemos de recordar que el testículo ha descendido desde el abdomen y, en ese trayecto hacia
el
exterior, ha arrastrado las diferentes capas de la pared abdominal; por lo tanto, las
envolturas testiculares
serán equivalentes a las capas musculares y aponeuróticas que constituyen la pared
abdominal.
Entre ambos testículos, las diferentes capas (excepto la piel) forman un tabique escrotal que
llega
hasta la raíz del pene. En la piel, entre los dos testículos, hay un rafe escrotal que se
continúa hacia
el ano para formar el rafe perineal. Desde el testículo hasta la piel queda un resto de
gubernáculo
embrionario que arrastró el testículo fuera de la cavidad abdominal: es el ligamento escrotal.
b. Estructura interna
La cápsula fibrosa que envuelve el testículo, la albugínea, tiene un engrosamiento en la parte
posterior del testículo, el cuerpo de Highmore. Por esta zona salen las vías seminales hacia el
epidídimo.
Desde el cuerpo de Highmore parten unas láminas fibrosas hacia el interior
del testículo, dividiéndolo en unos 300 compartimientos que constituyen los
lóbulos del testículo.
234 Editorial CEP
Temario Específico. Tema 46
CEP
En cada lóbulo hay 2 o 3 conductos de forma contorneada denominados tubos seminíferos,
en
los que se forman los espermatozoides. Los tubos seminíferos constan de unas células de
sostén, las
células de Sertoli, que sirven de soporte a los espermatozoides y las células precursoras.
El espermatozoide se origina en una célula denominada espermatogonia, situada en la
periferia
del tubo seminífero, es decir, junto a su lámina basal. Las espermatogonias dan origen, por
mitosis,
a los espermatozoides primarios de los cuales, se generan luego, mediante una nueva
mitosis, los
espermatozoides secundarios. Cada uno de ellos se sitúa más próximo a la luz del tubo
seminífero,
siempre entre las células de Sertoli, las cuales nutren a los espermatozoides en desarrollo.
Por último
los espermatocitos secundarios se transforman en espermatozoides, los cuales disponen de
un
flagelo que les da movilidad; éstos están situados ya en la luz del tubo seminífero, con la
cabeza en
contacto aún con las células de Sertoli.
Los tubos seminíferos de cada lóbulo se dirigen hacia el cuerpo de Highmore, pero antes de
entrar en él se unen en un tubo recto también formado por células de Sertoli. Por lo tanto,
hay tantos
tubos rectos como lóbulos testiculares. Estos tubos entran en el cuerpo de Highmore, donde
forman
un entrelazado de tubos anastomosados entre sí, denominado red de Haller o rete testis, de
donde salen de 10 a 15 vasos eferentes muy plegados sobre si mismos, adoptando una
forma cónica,
que reciben el nombre de conos eferentes. Estos vasos eferentes salen del testículo
desembocando
sucesivamente en la cabeza del epidídimo de la que forman parte.
Entre los tubos seminíferos se encuentran las células intersticiales de Leydig entremezcladas
con
los capilares del testículo y el tejido conectivo. Son células poliédricas que producen la
testosterona,
hormona sexual masculina, la cual vierten a los capilares. Las células de Leydig, por lo tanto
constituyen
la parte endocrina del testículo.
c. Funciones de los testículos
Como ya se ha mencionado, el testículo tiene funciones espermatogénica y hormonal
(secreción
de testosterona)
La espermatogénesis comienza en la pubertad por estímulo de las hormonas gonadotrópicas
de
la hipófisis. Aunque las etapas de la espermatogénesis ya se han mencionado, a continuación
se
detallan algunos aspectos:
- Las espermatogonias situadas en la periferia de la pared de los tubos seminíferos proliferan
continuamente y se diferencian hasta dar lugar a los espermatozoides.
- En primer lugar cada espermatogonia se transforma en un espermatocito primario, el cual
duplica sus cromosomas y se divide en 2 espermatocitos secundarios, con 46 cromosomas
agrupados en 23 pares.
- Los espermatocitos secundarios se convierte, por división meiótica, en dos células
denominadas
espermátides. Estas contienen, por lo tanto, 23 cromosomas no emparejados. Uno de estos
cromosomas determinará el sexo; es decir, los espermatocitos secundarios contienen un par
de
cromosomas XY y, al dividirse en dos espermátides, cada una de ellas tendrá el cromosoma
X
(determinante del sexo femenino) o el cromosoma Y (determinante del sexo masculino). Al
madurar las espermátides se convertirán en espermatozoides sin cambiar su dotación
cromosómica,
por lo que habrá espermatozoides X (hembras) y espermatozoides Y (machos). Según
cuál de ellos fecunde el óvulo, el sexo del hijo será hembra o varón, respectivamente.
- La maduración de la espermátide origina el espermatozoide, que consta de cabeza, cuello,
cuerpo y cola. En la cabeza hay una estructura denominada acrosoma, que
interviene en la penetración del espermatozoide en el óvulo. La cola le permite
moverse a través de los fluidos mediante movimientos similares a los
Editorial CEP 235
Aparato Reproductor masculino y femenino

CEP
de un reptil, con una velocidad de unos 30 cm/hora. Una vez que ha alcanzado el óvulo y lo
ha fecundado, solo la cabeza penetra en él.
- El espermatozoide sólo puede vivir 2 o 3 días en los productos de la eyaculación, pero se
mantiene
vivo durante mucho más tiempo en los conductos testiculares y el epidídimo.
- En su función como células de sostén de los espermatozoides y de sus precursoras, las
células
de Sertoli aportan material nutritivo a dichas células.
236 Editorial CEP
Temario Específico. Tema 46

CEP
Tabique escrotal
Cabeza del
epidídimo
Hedátide pediculada
Hedátide sésil
Testículo
Tejido adiposo
Cavidad vaginal
Túnica vaginal (parietal)
Hedátide pediculada
Cremáster
Fondo de saco
subepididimario
Dartos
Cordón espermático
Cuerpo Highmore
Tubos rectos
Albugínea
Tabique testicular
Tubos seminíferos Cuerpo Highmore
Concucto epididimario
Red deHaller
Conos eferentes
B. Vías espermáticas
En realidad, las vías espermáticas comienzan en los tubos seminíferos del testículo, pero en
la
estructura interna de este órgano ya se han descrito los tubos seminíferos, los tubos rectos,
la red de
Haller y los conductos eferentes, por lo que en este apartado se describirá el resto de las vías
espermáticas:
epidídimo, conducto deferente, vesículas seminales y conductos eyaculadores.
a. Situación, forma y relaciones
Los conductos o conos eferentes que emergen de la red de Haller desembocan en el
conducto
epididimario, también muy plegado, y constituyen con la primera porción de este último la
cabeza
del epidídimo, situada en el polo superior del testículo. En ella se puede apreciar una
pequeña formación,
la hidátide pediculada de Morgagni, resto embrionario situado junto a la hidátide sésil del
testículo.
Una vez que el conducto epididimario ha recibido los conos eferentes, continúa descendiendo
dentro de la bolsa escrotal, adosado a la cara posterior del testículo y constituyendo el
cuerpo y la
cola del epidídimo. Estas dos porciones, cuerpo y cola, están envueltas íntimamente por la
hoja visceral
de la túnica vaginal, continuación de la que cubre la cara posterior del testículo y que dibuja
el fondo de saco subepididimario.
El epidídimo mide unos 5 cm, aunque el conducto epididimario, muy replegado, tienen en
realidad
una longitud de unos 6 cm.
La cola del epidídimo se continúa con el conducto deferente, más ancho y menos sinuoso;
asciende hacia el polo superior del testículo a lo largo de la cara interna del epidídimo y sale
de la
bolsa escrotal hacia el conducto inguinal. En este trayecto forma parte del cordón
espermático, junto
con los vasos espermáticos, arteria deferente, linfáticos y fibras nerviosas, todo ello envuelto
en
fibras del músculo cremaster.
El conducto deferente tiene una consistencia dura y una longitud de unos 40 cm. Entra en la
cavidad abdominal con el cordón espermático por el conducto inguinal, pasando por delante
de la
rama pubiana, junto a la espina del pubis. Dentro de la cavidad abdominal el conducto
deferente se
separa de los demás componentes del cordón espermático y se dirige hacia atrás por debajo
del peritoneo,
cruza los vasos iliacos externos por delante y se adosa a la cara lateral de la vejiga. Cruza
por
encima del uréter y busca la cara posterior de la vejiga, entre ésta y el recto, descendiendo
por debajo
del uréter hacia la próstata, sobre la cual contacta con la vesícula seminal. En este último
trayecto
se ensañad formando la ampolla del conducto deferente.
Las vesículas seminales son dos bolsas con función secretora que aportan el líquido seminal
en
la eyaculación. Contienen también espermatozoides, como el resto de las vías espermáticas.
Están
situadas entre la vejiga y el recto, por encima de la próstata y por fuera de la ampolla del
conducto
deferente.
El fondo de saco de Douglas cubre el extremo superior de la vesícula seminal, es decir, el
fondo
de ésta. La abertura de la vesícula se halla hacia abajo y adentro y desemboca junto con la
ampolla
del conducto deferente en el conducto eyaculador.
El conducto eyaculador es un tubo corto (de 2,5 cm) que atraviesa la próstata. Termina al
desembocar
en la uretra prostática o tramo de la uretra que atraviesa la próstata.
b. Estructura interna
Los conductos eferentes tienen un epitelio cilíndrico simple con células ciliadas
y células con micro vellosidades. Este último tipo contiene además gránulos
de secreción. La capa muscular de fibra lisa es delgada. Tanto los cilios como
Editorial CEP 237
Aparato Reproductor masculino y femenino

CEP
las fibras musculares facilitan la progresión de los espermatozoides hacia el conducto
epididimario.
Este se caracteriza por poseer un epitelio de tipo seudo estratificado, con vellosidades y una
capa
muscular fina.
El conducto deferente mantiene la morfología epitelial del conducto epididimario, pero su
capa
muscular es mucho más gruesa y está formada por tres láminas de fibras: una interna
(longitudinal)
otra media (circular) y una lámina externa donde las fibras musculares vuelven a adoptar
una disposición
longitudinal. Rodeando a la capa muscular existe una adventicia de tejido conectivo denso.
La estructura de la ampolla es la misma que la del resto del conducto deferente.
Las vesículas seminales se caracterizan por una capa muscular más fina y un epitelio sin
células
ciliadas pero con abundantes gránulos de secreción, cuyo contenido vierte hacia la luz de la
vesícula
para formar parte del líquido espermático.
Los conductos eyaculadores tienen un epitelio cilíndrico simple, son vellosidades ni gránulos
de
secreción. Su capa muscular es muy fina, entremezclada con el tejido conjuntivo y el propio
tejido
prostático.
c. Función de las vías espermáticas
A lo largo de la exposición se ha mencionado la función de las vías espermáticas, que
mediante
la contracción de su capa muscular ayudan a los espermatozoides en su trayecto hacia el
exterior,
en el momento de la eyaculación. Por otra parte, las células secretoras de los conductos
deferentes
y epididimario y de las vesículas seminales producen una secreción mucosa que forma parte
del
líquido seminal que nutre a los espermatozoides y les proporciona un medio protector.
C. Próstata
a. Situación, forma y relaciones
La próstata es una glándula de secreción exocrina que se sitúa debajo de la vejiga, rodeando
la
uretra y los conductos eyaculadores que desembocan en la uretra. A partir de la pubertad
crece
hasta el tamaño del adulto 3 cm de altura, 4 cm de anchura y 2 cm de grosor.
Por su forma, tamaño, color y consistencia, es semejante a una castaña. La base se orienta
hacia
arriba, bajo la vejiga; el vértice hacia abajo, apoyado en el diafragma urogenital (músculo
transverso
del perineo). Por detrás, está en relación con el recto, lo cual permite su exploración
mediante el
tacto rectal. Por delante está la sínfisis del pubis, de la que la separa la grasa y las venas
prostáticas.
La uretra sale de la próstata por su vértice, después de atravesar la glándula en sentido
vertical.
La próstata está envuelta en una aponeurosis que engloba también el plexo venoso
prostático.
Los engrosamientos de esta aponeurosis constituyen los ligamentos de fijan la glándula a las
paredes
pelvianas.
b. Estructura interna
Las estructuras que atraviesan la próstata, la uretra y los conductos eyaculadores dividen la
próstata en cuatro lóbulos: uno medio, otro anterior y dos laterales. El espacio triangular
formado
por ambos conductos eyaculadores y la uretra es el lóbulo medio; a ambos lados de los
conductos,
los lóbulos laterales, unidos por una zona central por delante de la uretra, que es el lóbulo
anterior.
También puede distinguirse una región craneal, donde asienta el adenoma prostático, y una
región
caudal, donde se desarrolla el carcinoma.
Su estructura consta de glándulas tubuloalveolares que desembocan en la
porción de uretra que la atraviesa, donde vierten su secreción. Estas glándulas
238 Editorial CEP
Temario Específico. Tema 46

CEP
están formadas por un epitelio cilindrico simple, con gránulos de secreción que vierten a la
luz, irregular
y de tamaño variable.
Entre las glándulas hay tejido conectivo, fibras musculares lisas, vasos sanguíneos y
linfáticos y
fibras nerviosas.
c. Funciones de la próstata
La próstata, como se ha señalado, es una glándula que secreta un líquido blanquecino hacia
la
uretra, el líquido prostático, que se une a las secreciones de las vías espermáticas y los
espermatozoides
para constituir el semen.
El líquido prostático es alcalino, por lo que neutraliza la acidez de los demás componentes del
semen, aumentando la motilidad y fertilidad de los espermatozoides.
Durante la eyaculación, la próstata se contrae junto con el conducto deferente y las vesículas
seminales, expulsando su contenido a la uretra.
D. Pene
a. Situación, forma y relaciones
El pene es un órgano cilíndrico que pende sobre las bolsas escrotales, por debajo de la
sínfisis
pubiana. Está unido a la región anterior del perineo. Su tamaño y consistencia varían según
se halle
en estado de flaccidez o de erección: en estado fláccido mide unos 10 cm y en erección se
vuelve rígido
y mide unos 15 cm. Está formado por tres elementos que constituyen los órganos eréctiles:
dos
cuerpos cavernosos y un cuerpo esponjoso.
Los cuerpos cavernosos de fijan en las ramas isquiopubianas formando la raíz del pene; en
este
tramo están recubiertos por el músculo isquiocavernoso. Se unen bajo la sínfisis del pubis,
desde
donde emergen, y forman la porción dorsal del pene.
El cuerpo esponjoso se fija bajo el músculo transverso profundo del perineo en un
ensanchamiento
denominado bulbo. A partir de este punto recibe la uretra, que recorre toda su extensión
hasta el extremo anterior, constituyendo la uretra peneana. El bulbo está recubierto por el
músculo
bulbocavernoso. El cuerpo esponjoso se dirige hacia delante para unirse, bajo la sínfisis del
pubis,
con los cuerpos cavernosos, a los que se adosa formando la porción ventral del pene. En su
interior
está la uretra, que desemboca en la punta del pene. El extremo anterior del cuerpo
esponjoso, más
dilatado que el resto, se denomina glande y cubre también el extremo de los cuerpos
cavernosos. El
borde del glande constituye la corona. En su vértice, el glande tienen la abertura hacia el
exterior de
la uretra; es una hendidura vertical, el meato uretral.
El pene está recubierto por varias capas; la más interna es una envoltura fibroelástica, la
fascia
peneana, que se continúa con la fascia superficial del escroto y perineo. Esta envoltura se
una a la
sínfisis del pubis por el ligamento suspensorio del pene.
El músculo dartos del escroto se continúa también por el pene formando otra de sus
envolturas,
entremezclándose con el tejido celular.
La piel, con un tejido celular muy laxo, está adherido al pene en toda su longitud, excepto en
el
glande, con el cual sólo se une mediante una línea por su cara inferior denominada frenillo. El
resto
de la piel del glande está libre, cubriéndolo únicamente en estado de flaccidez. Esta porción
de piel
es el prepucio, que se retrae descubriendo el glande durante la erección. Cuando
su orificio anterior es cerrado, no permite la salida del glande, lo cual constituye
la fimosis.
Editorial CEP 239
Aparato Reproductor masculino y femenino
CEP
El surco formado entre la corona del glande y el prepucio es el surco balanoprepucial, donde
se
acumula el esmegma, compuesto de la secreción de glándulas sebáceas y descamación de
las paredes
del prepucio.
b. Estructura interna
Los tres componentes eréctiles del pene, cuerpos cavernosos y cuerpo esponjoso, están
rodeados,
cada uno de ellos, por un albugínea fibroelástica, densa, de la cual parten tabiques hacia el
interior
de los cuerpos (trabéculas), formando un entramado como el de una esponja, cuyos huecos
forman
lagos sanguíneos. Los capilares sanguíneos rellenan estos huecos. Están dotados de
dispositivos
musculares que permiten o cierran el paso de la sangre a los lagos sanguíneos. Cuando la
sangre
pasa a estos lagos, los cuerpos cavernosos y esponjosos se hinchan y se endurecen.
Esto ocurre durante la erección, que se comentará mas adelante, junto con la función del
pene.
c. Función del pene
El pene tiene una doble función. Al contener en su interior parte de la uretra, interviene en la
micción. Por otra parte, es el órgano copulador en el acto sexual. Por estimulación
parasimpática,
los cuerpos cavernosos y esponjoso se llenan de sangre, con lo cual, el pene aumenta de
tamaño, se
endurece y se pone rígido durante la erección, necesaria para la realización del coito. En este
proceso
intervienen varios factores; en primer lugar, la dilatación de las arterias produce el llenado de
los
cuerpos cavernosos y esponjoso; por otra parte, la musculatura de la raíz del pene, músculos
isquiocavernosos
y bulbocavernoso, se contrae, impulsando aún más la sangre hacia el pene; el músculo
transverso profundo del perineo, diafragma urogenital, se contrae, dificultando la salida de
sangre
ya que comprime las venas que pasan a través de él.
La erección que en principio es un acto reflejo, puede ser inhibida por estímulos psíquicos,
como
el temor. Los pensamientos o imágenes sexuales pueden desencadenar el proceso de
erección. La
corteza cerebral actúa como un centro integrador de la actividad sexual, modificando los
reflejos
que intervienen en ella, bien sea disminuyéndolos o favoreciéndolos.
Por otra parte, la uretra posee numerosas glándulas en su recorrido por el cuerpo esponjoso,
las
glándulas de Littré, que elaboran una secreción mucosa que favorece la lubricación, aunque
a ello
contribuyen en mayor medida los órganos sexuales femeninos. También producen secreción
mucosa
las glándulas bulbouretrales o glándulas de Cowper, que se verán más adelante.
Por último, las contracciones del músculo bulbocavernoso impulsan el semen en la
eyaculación
a través de la uretra peneana.
Durante el coito, se observan en el varón diversos cambios fisiológicos, que pueden
resumirse
en tres fases:
� Excitación
Las sensaciones, debidas a estimulación fisicomecánica o psíquica, siguen una vía consciente
hacia el encéfalo y una vía inconsciente que, a través de la médula espinal, provoca por vía
parasimpático la erección del pene, un aumento de tamaño y elevación de los testículos, un
incremento en la tumescencia y colocación púrpura del glande y una secreción mucosa de
las
glándulas bulbouretrales, con la finalidad de lubricación.
� Orgasmo
Los cambios experimentados por el pene en la fase anterior provocan
un incremento en la superficie de contacto del mismo; se incrementa la
intensidad de la sensación fisicomecánica, lo cual tiene una proyección
240 Editorial CEP
Temario Específico. Tema 46

CEP
consciente encefálica y una proyección espinal que, por vía simpática, induce la contracción
del
epidídimo, del conducto deferente y de los órganos accesorios. Se produce una emisión
seminal,
que llena la uretra, dilatándola e incrementando la sensación fisicomecánica antes
mencionada
(sensación de inminencia eyaculatoria), lo cual conduce a la eyaculación, por contracción
rítmica de los músculos bulbocavernosos e isquiocavernosos y también del esfínter anal.
� Resolución
La última fase, o de resolución, está definida por una involución rápida de la erección, con
vuelta a los niveles de partida, relajación muscular y disminución de la vasocongestión. Estos
cambios se acompañan de un periodo refractario más o menos largo.
E. Uretra masculina
Desde la vejiga urinaria, la uretra desciende verticalmente, atravesando la próstata desde su
base
hasta el vértice: es la uretra prostática. En este tramo presenta un relieve en su pared
posterior, el veru
montanum, donde desembocan los dos conductos eyaculadores y, entre ellos, el utrículo
prostático,
que es un pequeño divertículo de aproximadamente 1 cm de longitud. A ambos lados del
veru montanum
desembocan las glándulas prostáticas; hay unos 20 o 30 orificios correspondientes a estos
conductos
de desembocadura. La uretra prostática tiene una longitud de unos 3 cm.
Por debajo de la próstata, la uretra atraviesa el músculo transverso profundo del perineo
(diafragma
urogenital), recibiendo el nombre de uretra membranosa. En este tramo está rodeada por las
fibras
musculares del esfínter estriado (voluntario), y por detrás, entre las fibras musculares del
esfínter, las
dos glándulas de Cowper o glándulas bulbouretrales, que aportan una secreción mucosa
lubricante,
tienen forma redondeada, del tamaño de un guisante. Desembocan en la uretra un poco más
abajo,
cuando ésta atraviesa el bulbo esponjoso del pene. La uretra membranosa mide
aproximadamente 1
cm.
Por debajo del músculo transverso del perineo, la uretra entra en el bulbo esponjoso; traza
una
curva hacia delante siguiendo ya todo el trayecto del cuerpo esponjoso hasta el glande,
donde se abre al
exterior. En este tramo se denomina uretra peneana o uretra esponjosa. Al nivel del bulbo
tiene un
pequeño ensanchamiento: el fondo de saco bulbar.
Bajo la sínfisis del pubis, siguiendo la posición del pene en estado de flaccidez, describe otra
curva
hacia abajo hasta el orificio de salida: el meato uretral. Inmediatamente antes del meato, en
el glande,
hay un ensanchamiento, la fosa navicular. En la uretra peneana desembocan pequeñas
glándulas mucosas,
a lo largo de todo el trayecto: las glándulas de Littré, con acción lubricante.
La uretra peneana mide unos 15 cm de longitud; por lo tanto, la longitud total de la uretra es
de
unos 20 cm.
El epitelio de la uretra es de tipo urinario en su comienzo, como continuación del epitelio de
la
vejiga; por debajo del veru montanum se hace cilíndrico estratificado hasta la fosa navicular,
donde se
convierte en pavimentoso estratificado, similar al del glande.
La capa muscular al principio forma el esfínter liso, que se continúa con la musculatura de la
vejiga.
En la uretra prostática las fibras musculares se entremezclan con las de la próstata, y en la
uretra
membranosa son sustituidas por fibras estriadas del esfínter voluntario.
El riego sanguíneo lo recibe a cada nivel de las arterias que riegan los respectivos órganos
por
donde pasa: arterias vesicales inferiores, hemorroidales inferiores, bulbar y dorsal del pene.
Las venas
terminan en la vena dorsal profunda del pene o directamente en el plexo periprostático.
Editorial CEP 241
Aparato Reproductor masculino y femenino

CEP
Los linfáticos de la uretra prostática y membranosa desembocan en los ganglios iliacos
internos, y
los de la uretra peneana, fundamentalmente en los ganglios inguinales.
El nervio pudendo interno recoge las sensaciones de la uretra. Sus fibras motoras actúan
sobre el
esfínter voluntario, regulando la micción

nidad Nº 16:
Aparato Reproductor Masculino.-
Introducción: consideraciones generales, elementos y relaciones.
-Testículos: consideraciones generales (ectopía testicular, dimensiones, peso, color y consistencia).
Configuración exterior y relaciones (testículo propiamente dicho, epidídimo). Constitución anatómica
(albugínea y tejido propio). Vasos y nervios. Cubiertas del testículo o bolsas, configuración exterior,
constitución anatómica (escroto, dartos, túnica celulosa, eritroides y vaginal con sus hojas parietal y
visceral).
Conductos intratesticulares: Tubos seminíferos: epitelio seminífero, línea espermatogénica (fases:
espermatogénesis y espermiogénesis), espermatozoide, línea de nutriente o sostén, intersticio (rasgos
citomorfológicos, célula de Leydig). Reacción acrosomal, barrera hematotesticular. Tubos rectos, rete
testis, conductos eferentes.
Conductos extratesticulares: Epidídimo: características generales, partes, epitelio de revestimiento,
túnica media, adventicia, funciones. Conducto deferente: dimensión, consistencia, trayecto; división y
relaciones, constitución anatómica, vasos y nervios; epitelio de revestimiento, túnica media, adventicia;
funciones. Conducto eyaculador: trayecto, dimensiones, relaciones, constitución anatómica, vasos y
nervios, constitución histológica. Pene: conformación exterior y relaciones, cuerpo, extremidades,
constitución (cuerpos cavernosos, cuerpo esponjoso, envoltorios), vasos y nervios.
Glándulas anexas: Próstata: forma, tamaño, color, peso, consistencia, relaciones, constitución y
componentes (glandular y sus planos, estromal), características de la secreción, vasos y nervios.
Vesículas seminales: configuración exterior y relaciones, constitución anatómica; componentes (mucosa,
capa muscular y adventicia), características de la secreción, vasos y nervios. Glándulas de Cowper o
bulbouretrales: configuración exterior y relaciones, constitución anatómica, componentes (mucosa, capa
muscular, adventicia), características de la secreción, vasos y nervios.
Histofisiología testicular: temperatura testicular, alcoholismo y desnutrición, vitaminosis E, rayos X,
factor endócrino.
Semen y eyaculación: volúmen, composición y variaciones.
Una vez que un muchacho llega a la pubertad, producirá millones de espermatozoides por
día. Cada espermatozoide es extremadamente pequeño: tan solo 1/600 de pulgada (0,05
milímetros) de largo. Los espermatozoides se desarrollan en el interior de los testículos,
dentro de un sistema de diminutos tubos denominados túbulos seminíferos.

1. Histofisiología del Aparato Reproductor Masculino


Fecha, profesores y objetivos

29/04/2008, María José Gómez, Identificación de las células de la espermatogénesis en


extensiones de semen, Identificación de las células precursoras de los espermatozoides en los
diferentes estadíos, Comparación morfológica comparada entre cortes histológicos de humanos
y de tortuga.

Memoria

MATERIALES

Microscopio óptico, cortes histológicos de biopsias testiculares humanas, cortes histológicos de


epitelio germinal de tortuga.

MÉTODOS

Dichos cortes han sido teñidos con la tinción hematoxilina/eosina

Identificamos en el epitelio germinal:


• Membrana basal
• Componentes Celulares:
• Células de Sertoli
• Células germinativas
• Espematogonias
• Espermatocitos I
• Espermatocitos II
• Espermátidas
• Espermatozoides

ESPERMATOGÉNESIS

La espermatogénesis comprende todos los fenómenos mediante los cuales las


espermatogonias se transforman en espermatozoides y comienza en la pubertad. Poco antes
de la pubertad los cordones sexuales se tornan huecos, se convierten en los túbulos
seminíferos y el epitelio de los túbulos se diferencia a células de Sertoli. Casi al mismo tiempo
las células germinales primordiales dan origen a las células madre espermatogónicas.

Las células germinales espermatogénicas son unidas por las células de Sertoli mediante
moléculas de cadherina-N sobre ambas superficies celulares y por moléculas de
galactosiltransferasa sobre las células espermatogénicas que se unen a un receptor de
carbohidrato sobre las células de Sertoli. Las células de Sertoli nutren y protegen a las células
espermáticas en desarrollo, proporcionan sostén y ayudan a la liberación de los
espermatozoides maduros (espermiación).

A intervales regulares, a partir de la población de células madre espermatogónicas surgen


células que dan origen a las espermatogonias tipo A, cuya producción señala el comienzo de la
espermatogénesis. Las células tipo A experimentan un limitado número de divisiones mitóticas
para formar un clon celular. La última división celular produce espermatogonias tipo B, que
entonces se dividen para dar lugar a los espermatocitos primarios.

Los espermatocitos primarios entran en una profase prolongada (22 días), seguida de la
finalización rápida de la meiosis I y la formación de espermatocitos secundarios. Durante la
segunda división meiótica estas células comienzan inmediatamente a formar espermátides
haploides.
Desde el momento en que las espermatogonias tipo A abandonan la población de células
madre hasta la formación de espermátides, la citocinesis es incompleta, de modo que las
generaciones celulares sucesivas están unidas por puentes citoplasmáticos. Las espermátides
que están conectadas así tienen núcleos haploides, pero son funcionalmente diploides, debido
a que un producto génico producido en una célula puede realmente difundir hacia el citoplasma
de sus vecinas.

Durante las divisiones desde la espermatogonia tipo A a espermátide, las células se mueven
más y más lejos de la membrana basal del túbulo seminífero y se acercan a la luz. Por lo tanto,
cada tipo celular puede ser encontrada en una capa particular del túbulo. Las espermátides
están localizadas en el borde de la luz y aquí pierden sus conexiones citoplásmaticas,
denominadas cuerpos residuales que serán fagocitados por las células de Sertoli.

La espermatogénesis es regulada mediante la hormona luteinizante (LH) producida por la


hipófisis. La LH se une a receptores localizados sobre las células de Leydig y estimula la
producción de testosterona, y a su vez esta última se une a las células de Sertoli para
promover la espermatogénesis. La hormona foliculoestimulante (FSH) también es esencial
debido a que se une a las células de Sertoli y estimula la producción de líquido testicular y la
síntesis de las proteínas intracelulares que constituyen los receptores de andrógenos.

ESPERMIOGÉNESIS

La serie de cambios que experimentan las espermátides para su transformación en


espermatozoides recibe el nombre de espermiogénesis. Estos cambios son :

- Formación del acrosoma, que se extiende sobre la mitad de la superficie nuclear y contiene
enzimas que ayudan a la penetración del ovocito y de las capas que lo rodean durante la
fecundación: corona radiata y zona pelucida.
- Condensación del núcleo
- Formación del cuello, pieza intermedia y cola
- Eliminación de la mayor parte del citoplasma.

En el ser humano, la espermatogonia tarda 64 días en convertirse en espermatozoide. Los


espermatozoides completamente formados llegan a la luz de los túbulos seminíferos, desde
donde son empujados hacia el epidídimo por los elementos contráctiles que se encuentran en
la pared de los túbulos. Aunque en un principio son poco móviles, los espermatozoides
alcanzan su movilidad completa en el epidídimo.

La espermátide haploide de mamíferos es una célula redondeada, sin flagelo que no se parece
en nada al espermatozoide maduro. La primera etapa en la espermiogénesis es la construcción
de la vesícula acrosómica desde el aparato de Golgi. El acrosoma forma un casquete que
cubre al núcleo del espermatozoide. A medida que se forma el casquete acrosómico, el núcleo
rota de modo tal que el casquete quedará después enfrentado a la membrana basal del túbulo
seminífero. Esta rotación es necesaria debido a que el flagelo, que está comenzando a
formarse desde el centriolo sobre el otro lado del núcleo, se extenderá hacia la luz. Durante el
último estadio de la espermiogénesis, el núcleo se aplana y se condensa, el citoplasma
restante se desecha (gota citoplasmática) y las mitocondrias forman un anillo alrededor de la
base del flagelo.

Uno de los principales cambios en el núcleo es el reemplazo de las histonas por protaminas. La
transcripción de los genes para protaminas es observada en las espermátides haploides
tempranas, aunque la traducción es demorada por varios días. Durante la espermiogénesis, los
nucleosomas se disocian, y las histonas del núcleo haploide son finalmente reemplazadas por
protaminas. Esto causa la paralización completa de la transcripción en el núcleo y facilita que
éste adquiera una estructura casi cristalina.
Referencias
s 1 de junio de 2009
Espermatogenesis en los túbulos seminíferos

Las celulas de Sertoli que rodean y


dan sustento a las celulas del proceso de espermatogenesis, también fagocitan el
citoplasma de las espermatidas, para dar origen a los espermatozoides. Estas celulas de
Sertoli componen el grosor mismo de los túbulos seminiferos. En la foto se muestra un
segmento del túbulo.

Parénquima testicular. Cada testículo está integrado por un gran número de túbulos seminíferos que
ocupan cada pirámide testicular formando lóbulos testiculares (cada testículo tiene aproximadamente 250
lóbulos). Los túbulos seminíferos son las unidades morfológicas y funcionales del parénquima testicular.
Cada túbulo mide aproximadamente de 30 cm. a 100 cm. de longitud y en cada lóbulo testicular
generalmente se encuentran 3 o 4 túbulos.
Los túbulos seminíferos se inician como fondo de saco ciego en la base de las pirámides testiculares y,
enrollándose sobre sí mismos se dirigen hacia el mediastino testicular (cuerpo de Highmore), donde sus
extremos finales se hacen rectos, constituyendo los tubulillos rectos; éstos se unen o anastomosan
entre sí para formar la red testicular (rete testis).
Entre los túbulos seminíferos se localizan las células intersticiales o de Leydig, de forma poliédrica.
encargadas se sintetizar y secretar andrógenos (testosterona). Estas células se caracterizan porque se
agrupan alrededor de capilares sanguíneos formando acumulaciones celulares. Poseen un citoplasma
acidófilo con un núcleo esférico con predominio de eucromatina y un nucleolo notable. El microscopio
electrónico muestra un citoplasma lleno de túbulos de retículo endoplásmico liso y abundantes
mitocondrias con crestas tubulares, característica morfológica de las células que sintetizan y secretan
esteroides. En el citoplasma se observan pequeñas gotitas de lípidos y unos cristales romboidales de
naturaleza proteínica (cristales de Reinke).
Los túbulos seminíferos están rodeados por una capa de células derivadas de células mesenquimatosas
que forman parte del intersticio del testículo embrionario (gónada). Estas células se disponen unidas entre
sí para integrar una especie de membrana celular continua. Son células alargadas fusiformes, similares a
las fibras musculares lisas. Mediante técnicas inmunohistoquímicas se les ha demostrado que poseen
componentes proteínicos de actina y miosina. Tienen capacidad contráctil Por esta razón se le conocen
como células mioides (miofibrocitos). Se ha demostrado que poseen receptores membranales para la
testosterona. Encima de ellas se sitúa una membrana basal que sostiene a las células del epitelio
seminífero. constituído por estratos de células germinales y de células localizadas entre ellas, que
reciben el nombre de células de sostén, sustentaculares o de Sertoli.
El epitelio seminífero es una secuencia de células germinales que por divisiones sucesivas mitóticas y
meióticas, originan a los espermatozoides (células haploides y flageladas). El proceso de transformación
de las células del epitelio seminífero para formar espermatozoides, se denomina espermatogénesis.
Células del epitelio seminífero. Las células del epitelio seminífero son:
a) Espermatogonias. Son células diploides, (2n cromosomas) localizadas en la porción más profunda del
epitelio seminífero. Se reconocen dos tipos de espermatogonias:
las espermatogonias de tipo A son células con forma de cúpula que se apoyan en la membrana
basal: Tienen un núcleo ovoideo, con escasa cantidad de heterocromatina y dos nucleolos. Se consideran
células madre del epitelio seminífero. Mediante división celular algunas de ellas permanecen como
espermatogonias A, en tanto que las otras se transforman en
las espermatogonias tipo B, células con núcleos esféricos y grumos de heterocromatina excéntrica y
un solo nucleolo de posición central. Por influencia de la hormona hipofisiaria, la folículo estimulante, las
espermatogonias de tipo B se multiplican activamente, por varias generaciones hasta que mediante la
síntesis de abundante material citoplasmático, crecen para transformarse en

b) Espermatocitos primarios. son células que se desplazan hacia la luz del tubulillo. Son células
diploides, (2n cromosomas) grandes y redondeadas con un núcleo voluminoso en donde la cromatina se
dispone de manera diferente dependiendo de la etapa de la profase meiótica en que se encuentre el
espermatocito primario. En la fase de leptoteno, los núcleos se observan integrados por cromatina en
forma de filamentos delgados. En las fases de cigoteno y paquiteno es posible distinguir los
cromosomas homólogos juntos y engrosados.
Después de esta fase continúa la fase de diploteno; a continuación los pares homólogos se separan
originándose dos células hijas con el número haploide de cromosomas y cada cromosoma con dos
cromátidas (divalente). En esta etapa las células germinales se denominan
c) Espermatocitos secundarios. Son células más pequeñas ( n cromosomas), redondeadas de núcleo
con eucromatina escasa y mayor cantidad de heterocromatina. Éstas permanecen poco tiempo en
interfase, rápidamente entran en la segunda fase de la división meiótica, por lo tanto no es fácil
observarlas en las preparaciones histológicas; se dividen para originar a
d) Las espermátidas. células más pequeñas que las anteriores, haploides (n
cromosomas),monovalentes (una sola cromátida). Presentan núcleo picnótico, de cromatina densa. El
citoplasma es acidófilo. Se localizan en la porción más superficial del epitelio seminífero, tal como se
observan en la figura.
Las espermátidas se observan, muchas de ellas, en contacto estrecho con las células sustentaculares o
de Sertoli. Al relacionarse con ellas, las espermátidas experimentan cambios morfológicos muy evidentes
para transformarse en los espermatozoides.
Todo este proceso de divisiones celulares y de transformación morfológica que experimentan las células
del epitelio seminífero, desde la etapa de espermatogonias hasta los espermatozoides se denomina
espermatogénesis.
La espermatogénesis es la transformación de células primitivas del epitelio seminífero, las
espermatogonias (células diploides) que, por mitosis, originan a los espermatocitos primarios (células
diploides) y éstos, por meiosis se convierten en espermatocitos secundarios (células haploides) para
que, en la segunda fase de la meiosis, originen a las espermátidas (células haploides), las cuales por
transformación morfológica (espermiogénesis), originarán a los espermatozoides (células haploides y
flageladas).
Las células de Sertoli. Son de formas cilíndricas piramidales, localizadas entre porciones del epitelio
seminífero. Presentan bordes laterales escotados porque las células del epitelio seminífero,
especialmente las espermátidas, se alojan en concavidades de su citoplasma medio y apical con la
finalidad que, en un proceso de transformación morfológica, denominado espermiogénesis o
espermoteliosis se conviertan en espermatozoides.
Las células de Sertoli se caracterizan porque se extienden desde la membrana basal hasta la luz del
tubulillo seminífero. Presentan un núcleo elipsoidal con una o dos escotaduras que le proporcionan un
contorno irregular. el nucleoplasma es uniforme y sobresale en él la presencia de un nucléolo esférico y
prominente rodeado de dos masas redondeadas de heterocromatina. El citoplasma es ligeramente
acidófilo, posee abundante retículo endoplásmico liso gotitas de lípidos.
Está demostrado que ellas pueden sintetizar estrogenos (poseen la enzima aromatasa) a partir de la
presencia de precursores de andrógenos en su citoplasma. Producen varios factores que tienen acción
directa sobre la espermatogenesis; ellas sintetizan la proteina ligadora de andrógenos (ABP) que capta
y fija la testosterona proveniente de las células intersticiales o de Leydig y la proteína inhibina que a
través de la circulación sanguínea frena la secreción de FSH. Durante vida fetal, las células de Sertoli
sintetizan y liberan el factor antimulleriano que inhibe, en los fetos de sexo masculino, la diferenciación de
los conductos de Müller en trompas uterinas, útero ,cérvix y porción proximal de la vagina.
Las células de Sertoli emiten en su tercio parabasal unas prolongaciones celulares laterales que se unen
a otras similares de células de Sertoli vecinas. Las prolongaciones se unen entre sí mediante complejos
de unión tipo nexo y uniones ocluyentes constituyendo la denominada barrera hematotesticular. De esta
manera se forman dos recintos diferentes:
a) un compartimento basal que comprende el espacio situado entre la pared del tubulillo y la superficie
interna de las prolongaciones de las células de Sertoli; este espacio alberga cantidades apreciables de
hormonas esteroideas (andrógenos y estrógenos) así como aminoácidos y iones. En este compartimento
se alojan las espermatogonias.
b) un compartimento adluminal situado entre la superficie externa de las prolongaciones unidas y la luz
del tubulillo. Gracias a las uniones laterales de las células de Sertoli; este compartimento mantiene un
microambiente totalmente distinto al del compartimento basal, por lo que no llegan sustancias dañinas o
tóxicas que podrían alterar en gran medida a los otros estadios celulares del epitelio seminífero.

Así mismo, esta barrera impide que proteínas provenientes de las otras células del epitelio seminífero y,
especialmente de los espermatozoides (producidas durante la espermiogénesis) puedan atravesar la
pared del tubulillo seminífero y lleguen al torrente circulatorio intertubulillar y generar una respuesta
autoinmune contra los espermatozoides y producir esterilidad.
Las células de Sertoli desarrollan una gran capacidad fagocítica. Durante la transformación de las
espermátidas en espermatozoides, los restos citoplasmáticos de las espermátidas (cuerpo residual o
“gota citoplasmática”) son endocitados para ser digeridos posteriormente.
Como ya se ha mencionado, las células de Sertoli intervienen en la maduración morfológica de las
espermátidas para transformarse en espermatozoides en el proceso denominado
espermiogénesis. a través del cual los componentes celulares de las espermátidas experimentan una
serie de cambios y transformaciones hasta que, de una célula mas o menos esférica u ovalada de 20 �m
de diámetro resulta el espermatozoide, célula flagelada que alcanza una longitud de aproximadamente
60 �m de longitud (fig. 1.22).
Los espermatozoides experimentan varios procesos durante el recorrido que realizan a través del
epidídimo. Estos cambios son:
- Adquieren movimiento propio, es decir, las sustancias secretadas por las células del epidídimo
activan el movimiento flagelar de los espermatozoides, para producir la maduración fisiológica.

- Un cierto porcentaje de espermatozoides anormales son destruidos y reabsorbidos.


- La secreción de las células secretoras les confieren un factor discapacitante (capa externa de
glicoproteínas) que impide que los espermatozoides tengan poder fecundante; lo adquirirán
durante su trayecto por el tracto genital femenino.
- Los espermatozoides se alojan y almacenan en el cuerpo y la cola del epidídimo, y permanecen
allí hasta que se produzca la eyaculación. En el caso que ésta no ocurra, después de un tiempo de
permanencia en el epidídimo (15 días aproximadamente), son reabsorbidos.
Vías espermáticas o seminíferas. Son las encargadas de transportar los espermatozoides desde el
extremo final de los tubulillos seminíferos hasta el exterior, en el acto de la eyaculación.
Las vías seminíferas se inician en
a) los tubulillos rectos, revestidos por células similares a las de Sertoli. Estos se anastomosan y forman
b) la red testicular o rete testis; de esta red se proyectan 10 a 15 pequeños conductos denominados
c) eferentes, los cuales atraviesan la albugínea y confluyen para constituir el conducto

d) el epidídimo es un conducto que mide de cinco a seis metros de longitud; se enrolla varias veces, y
rodeado de la albugínea forma una estructura alargada y ovalada que se sitúa en el borde craneal y
posterior del testículo. Anatómicamente, el epidídimo presenta tres porciones: cabeza, el cuerpo y la cola.
La luz está tapizada por un epitelio pseudoestratificado, cilíndrico y secretor, con abundantes
microvellosidades largas denominadas estereocilios.
El extremo final del epidídimo se continúa con
e) el conducto deferente. Estructura tubular de paredes gruesas, formado por tres capas
de fibras musculares lisas. Este penetra a la cavidad pélvica a nivel de la región inguinal,
formando parte del cordón espermático. Se continúa hasta relacionarse con la vejiga urinaria
y el conducto de secreción de las vesículas seminales. Tiene una longitud de 35 a 40
centímetros por dos a tres milímetros de

Testículo propiamente dicho: el testículo propiamente dicho tiene la forma de un ovoide, se le


consideran 2 caras laterales, dos bordes y dos extremos.


o Caras laterales: de las dos caras laterales una es externa y la otra interna,
ambas son lisas y uniformes; se encuentran recubiertas por la hoja serosa de
la vaginal testicular.
o Bordes: en numero de dos, anteroinferior y posterosuperior. El borde
anteroinferior es convexo, la serosa lo cubre en toda su extensión. El borde
posterosuperior corresponde en toda su extensión al Epidídimo.
o Extremos: en numero de dos, anterior y posterior. El extremo o polo
anterior mira hacia arriba y hacia delante; presenta a veces una pequeña
prominencia, la hidátide de Morgagni. El extremo posterior o polo posterior
mira hacia abajo y hacia atrás, de el parte el ligamento escrotal del testículo.

Epidídimo: es un cuerpo alargado, adosado al borde posterosuperior del testículo. Mide 5cm de
longitud, se le describe: una cabeza, un cuerpo y una cola.


o Cabeza: la cabeza es la parte mas anterior del epidídimo y su porción más
voluminosa. Lisa y redondeada, descansa sobre el polo superior del
testículo. Está unida al testículo por los conductos seminíferos(conos
eferentes) que, desde la glándula suben al epidídimo y se continúan con este.

o Cuerpo: el cuerpo del epidídimo, aplanado de arriba hacia abajo, presenta


dos caras(superior e inferior) y dos bordes(externo e interno).
o Cola: descansa sobre el polo inferior del testículo al que se encuentra
íntimamente unido.

Constitución anatómica: desde el punto de vista de su constitución anatómica, el testículo y el


epidídimo se componen de dos partes morfológicamente muy distintas:

Una cubierta fibrosa o albugínea: la cubierta fibrosa recubre sucesivamente el testículo


propiamente dicho(albugínea testicular) y al epidídimo(albugínea epididimaria).


o Albugínea testicular: la albugínea testicular es una membrana fibrosa que
envuelve al testículo en forma continúa, su superficie exterior se encuentra
tapizada por la hojilla visceral de la túnica vaginal y su superficie interior
corresponde al tejido propio del testículo. En el borde posterosuperior del
testículo la albugínea presenta un engrosamiento denominado cuerpo de
Highmore en cuyo espesor se encuentran una rede de conductillos
espermáticos denominados Red de Haller. Del vértice de el cuerpo de
Highmore o parten una serie de laminillas o tabiques que se dirigen en forma
radiada hacia la periferia del testículo y lo dividen en una serie de lobulillos.
o Albugínea epididimaria: la albugínea cubre totalmente el epidídimo, pero a
este nivel es mas delgada.

Un tejido propio: ocupa todo el espacio circunscrito por la albugínea, en el tejido propio se
encuentran: los conductillos productores de esperma y los conductos secretores de esperma.


o Conductos productores de esperma: llenan los espacios circunscritos por
los tabiques de la albugínea, de este modo forman los lobulillos
espermáticos, constituidos por 3 o 4 conductillos seminíferos, formando una
rede o por extremidades libres y se dirigen al cuerpo de Highmore
anastomosándose sobre si mismo. Se anastomosan entre si al llegar al
lóbulo se unen para formar los conductos rectos.
o Conductos secretores de esperma: se hallan representados en cada
lóbulo por un tubo recto que recubre los canalículos seminíferos;
anastomosándose ampliamente con el cuerpo de Highmore, los tubos rectos
constituyen la red de Haller; de allí parten de 10 a 15 conductos eferentes que
penetran en el epidídimo y se vuelcan en el conducto epididimario, fino
conducto enrollado sobre si mismo en 5cm y que se continúa directamente
en el conducto deferente.

Irrigación del testículo y del epidídimo: recibe su irrigación a traves de tres arterias:

• La arteria espermática, rama de la aorta abdominal.


• La arteria diferencial rama de la arteria vesiculodiferencial, que a su vez es rama
de la hipogástrica.
• La arteria funicular, rama de la arteria epigástrica que a su vez es rama de la iliaca
externa.

Inervación del testículo y del epidídimo: la innervación proviene del sistema nervioso autónomo.

• Plexo espermático: se origina en el plexo periaórtico y sigue la arteria espermática


hasta su terminación.
• Plexo deferencial: originado en el ganglio hipogástico cuyas ramas siguen al
conducto deferente desde la vesícula seminal hasta la cola del epidídimo.

REGION ESCROTALComprende el conjunto de los planos que envuelven a los dos testículos y sus
vías excretoras. Se sitúa por delante de el periné, por debajo de la region pubiana y por detrás del
pene. Las envolturas de el testículo forman un saco alargado verticalmente, que recibe el nombre
de bolsas escrotales.

De la superficie a la profundidad encontramos en la region escrotal seis planos:


• Piel o escroto: delgada y semitransparente, cubierta de pelos.
• Dartos: es una delgada lamina de color rojizo, íntimamente adherida al escroto, se
compone esencialmente de fibras musculares lisas. Por delante se prolonga
constituyendo el dartos peneano y por detrás constituye el dartos perineal.
• Túnica serosa o fascia de Cooper: es considerada como fibras provenientes de la
aponeurosis del músculo oblicuo mayor de el abdomen, estas fibras son arrastradas
por los testículos durante su descenso desde el abdomen hasta las bolsas
escrotales.
• Tunica muscular: la túnica muscular o ertroides, esta formada por expansiones
del músculo cremaster el cual acompaña al cordón espermático en toda su extensión.
Sus fibras provienen de fibras musculares de los músculos anchos del abdomen que
son arrastrados durante el descenso testicular.
• Túnica fibrosa: tiene la forma de un saco que envuelve al testículo y al cordón
espermático, corresponde a la fascia transversalis procedente del abdomen.
• Túnica vaginal: es una membrana serosa dentro de la cual se invaginan el
testículo y el epidídimo. Como toda serosa presenta dos hojas: parietal y visceral. Es
continuación del peritoneo de la cavidad abdominopelviana que es arrastrado por los
testículos durante su descenso.

ttp://www.monografias.com/trabajos14/aparato-reproduct/aparato-reproduct.shtml
Enfermedades de los testículos

Otros nombres: Enfermedades testiculares

Los testículos producen las hormonas masculinas y el esperma. Son dos órganos
ovalados ubicados dentro del escroto, que es una bolsa de piel que se encuentra detrás
del pene. Es fácil lesionar los testículos porque no están protegidos por huesos o
músculos. Los hombres y los niños deben usar suspensorios al practicar cualquier
deporte.

Debe examinarse los testículos mensualmente y buscar atención médica si detecta


nódulos, enrojecimiento, dolor y otros cambios. Los testículos pueden inflamarse o
infectarse. También pueden desarrollar cáncer. El cáncer de testículos es poco frecuente
y muy tratable. Suele ocurrir entre los 15 y los 40 años.
Torsión de testículo - Cáncer testicular - Inflamación testicular

TORSIÓN DE TESTÍCULO.

La torsión del testículo es el resultado de la rotación de esta glándula y el epidídimo sobre su cordón espermático.

A través del cordón espermático llegan las arterias y venas que nutren a los testículos, por lo que al producirse la
torsión se comprimen estos vasos ocasionando un serio déficit en su flujo sanguíneo. Las consecuencias van a
depender del grado de torsión testicular y del tiempo de instalada, pudiendo ir desde una leve congestión de la sangre
hasta la muerte del testículo comprometido.

Se han observado una serie de factores predisponentes, principalmente anatómicos, existiendo una alteración en la
fijación normal de los testículos que les permite una mayor movilidad.

Las causas inmediatas que van a desencadenar la torsión son un roce o un golpe, zambullidas, contracciones bruscas
de los músculos abdominales, durante la defecación o practicar ciclismo.

Inmediatamente después de producida la torsión del testículo el hombre experimenta un intenso dolor en la región
testicular e inguinal que se propaga hacia el abdomen. Al intentar caminar o moverse el dolor se intensifica y se torna
intolerable por el roce y se ve imposibilitado de poder realizarlo.

Habitualmente se acompaña de náuseas y vómitos, transpiración fría y hasta desmayos o desvanecimientos.

La mayoría de los cuadros tienen estas características, siendo muy raro que no se presente con dolor. En algunos
hombres puede producirse un aumento de la temperatura corporal.

Al examinar el escroto se observa que los testículos se encuentran ascendidos al ser traccionados por un cordón
disminuido en longitud por la propia rotación del mismo.

Una vez realizado el diagnóstico o ante la sospecha del mismo deben adoptarse inmediatamente medias terapéuticas
para evitar la progresión del cuadro.

El tratamiento quirúrgico es de elección para revertir la torsión.

A medida que transcurren las horas el cuadro evoluciona alterando progresivamente al tejido testicular. Cuanto más
pronto se realice la cirugía, menores serán las consecuencias que se establezcan.

CANCER TESTICULAR

Es una enfermedad caracterizada por la presencia de células cancerosas o malignas, en los tejidos que constituyen
los testículos, pudiendo afectar a uno o a ambos. Estos tumores son relativamente infrecuentes, afectando en su gran
mayoría a personas jóvenes, entre 15 y 35 años.

Actualmente, estos tumores son los únicos que tienen un índice de curación entre 80% a 90%. Si bien sus causas no
se conocen con exactitud, se han involucrado algunos factores de riesgo, como la criptorquidia (testículo no
descendido a su posición normal), en la cual el riesgo es 10 a 40 veces superior en comparación con el varón normal;
en cuanto a los traumatismos, se les ha dado un valor exagerado y son más bien un factor que contribuye al
descubrimiento del tumor. Otros factores pueden ser la exposición a radiaciones, temperatura elevada y el uso de
estrógenos en el primer trimestre del embarazo materno.

Manifestaciones clínicas. En esta enfermedad se observa un aumento del contenido del escroto (bolsa de piel
suspendida directamente del pene, que contiene a los testículos), no produce dolor, con un crecimiento relativamente
lento, sin que se desarrolle un proceso inflamatorio de los tejidos adyacentes al testículo o la piel.

La detección de estos tumores, no suele presentar dificultades, mediante la palpación del escroto pueden detectase
anormalidades o masas. La ecografía es un método auxiliar de diagnóstico muy eficaz.

Debe consultarse al especialista en casa de molestias o hinchazón testicular.


Como mencionáramos anteriormente, la mayoría de los enfermos puede curarse con los tratamientos disponibles
actualmente.

El tratamiento quirúrgico, es el de elección para la mayoría de las personas que padecen este tipo de tumores. Este
procedimiento consiste en la extracción de uno a ambos testículos.

Posteriormente y dependiendo del tipo de tumor puede recurrirse a la radioterapia, utilizando rayos X, para destruir
células cancerosas y disminuir el tamaño del tumor. La utilización de esquemas de quimioterapia para eliminar las
células malignas en forma definitiva,

INFLAMACIÓN TESTICULAR.

Definición. La orquitis es un proceso inflamatorio limitado al testículo, pudiendo afectar a ambos en forma sincrónica.

La fiebre urleana (parotiditis), representa uno de los pocos ejemplos de orquitis verdadera. Se presenta como una
complicación de dicho cuadro sobre todo en los adolescentes y adultos jóvenes, siendo de rara presentación en los
niños. El virus de la parotiditis, además de afectar a las parótidas (glándulas salivales), en el 15 al 20% de los casos
compromete a los testículos.

Diversas bacterias pueden afectar a los testículos, a los cuales llegan por vía sanguínea durante procesos de
diseminación general a través del sistema circulatorio. Las bacterias más frecuentemente encontradas como
responsables son: Escherichia coli, Klebsiella pneumoniae, Estreptococos, Estafilococos y Pseudomona auriginosa.

Cuadro clínico. En el caso de ser una complicación de una parotiditis, el compromiso testicular aparece luego de
cuatro a seis días de instalada aquella, aunque también puede producirse en ausencia de afección de las paratiroides.
Aparece como un nuevo cuadro febril, dolor e hinchazón testicular cuando comenzaba a ceder la fiebre de la paperas.
En aproximadamente el 70% de los casos es uno el testículo afectado, con algún tipo de atrofia en la mitad de las
casos.

En las orquitis de origen bacteriano el testículo se encuentra tenso, hinchado, con una tonalidad azulada y unos
puntitos hemorrágicos en la piel. También se acompaña de fiebre, náuseas y vómitos y dolor testicular intenso que
puede desplazarse hacia la región inguinal.

Si ambos testículos padecieron la infección existe una elevado riesgo de esterilidad en el futuro, no así si el
compromiso es de uno solo donde el riego es bajo.

El tratamiento de la inflamación testicular consiste en la realización de reposo, elevación del escroto y colocación de
hielo en el lado afectado. Con la administración de analgésicos y antiinflamatorios se consigue una buena respuesta,
aliviando el dolor y disminuyendo la inflamación.

En algunos hombres, el cuadro cede en alrededor de una semana sin ninguna secuela, pero en otros, luego de
desaparecida la inflamación el testículo afectado puede quedar más pequeño que el opuesto y muy sensible al tacto
durante varios años.

Los antibióticos están indicados cuando los agentes responsables son bacterias; si son utilizados en forma temprana
pueden prevenirse secuelas importantes.

Patología Testicular

-Anorquidia: Ausencia de ambos testículos.

-Monorquidia: Un sólo testículo.


-Poliorquidia: Testículos supernumerarios.

-Hipoplasia: Disminución tamaño de ambos testículos.

-Criptorquidia: Detención del testículo en algunas zonas anatómicas correspondientes a su trayectoria


descendente (lumbar, abdominal, inguinalo puboescrotal). Muy frecuente.

-Ectopia: Desplazamiento del testículo de su trayectoria o descenso normal. (perineal, peneana, crural,
inguinalo pelviana). Poco frecuente.

-Traumatismos: Contusiones y heridas.

-Testículo en ascensor: Su falta de sujeción favorece la torsión del mismo.

-Torsión testicular: Cuadro clínico grave motivado por la torsión brusca del cordón espermático que ocasiona
infarto por estrangulación y requiere urgente solución.(su denominación más correcta sería torsión del cordón
espermático).El diagnóstico lo haríamos por la clínica: dolor y por el estetoscopio ultrasónico con efecto
Doppler: Falta de sonido pulsátil.

-Orquitis: Proceso inflamatorio del testículo y del epidídimo con predominio de la participación testicular.

-Tumores de testículo: Son estas neoplasias las que alcanzan el grado máximo de malignidad entre todos los
tumores urológicos (3% de los tumores del varón) Entre los 25 y 35 años. Los más frecuentes son el seminoma
y el teratoma. Son los más malignos por la inmadurez histológica, la tendencia precoz a las metástasis
fundamentalmente por vvía linfática en ganglios lumbares y mediastínicos. El diagnóstico es RX por una placa
de tórax donde podemos ver las metástasis, ureterograma retrógrado, flebografía Cava, linfangiografía,
centelleografía con Galio 67 que nos da las metástasis por todo el cuerpo.

Testículos
Los testículos son órganos pares que durante la vida
extrauterina se encuentran
contenidos en el escroto, que es una bolsa fina, compuesta
por piel, una capa de
músculo liso (dartos) y tejido subcutáneo.
La posición que ocupan los testículos y el área de superficie
que presenta el escroto,
permite que estos órganos se mantengan a una temperatura
inferior a la del cuerpo; por
otra parte, la presencia de músculo liso contribuye a que el
escroto disminuya de
volúmen al contraerse en respuesta a determinados estímulos,
como por ejemplo, el
frío, acercando de esta forma los testículos
al cuerpo. Como órganos macizos que son
los testículos, presentan elementos pertenecientes al estroma y
al parénquima.
Estroma
El estroma está compuesto por tejido conjuntivo que
comprende una cápsula, de la
cual parten tabiques y tejido intersticial.
La cápsula testicular está compuesta por tres capas: la primera
y más externa es la
túnica vaginal, formada por una sola capa de células
mesoteliales, separadas de la
capa media por una membrana basal. La capa media es la
túnica albugínea de color
blanco y formada por tejido fibroso denso con algunas células
musculares lisas
aisladas. La más interna, túnica vasculosa, está compuesta por
redes de vasos
sanguíneos incluidas en tejido conjuntivo laxo.
En la parte posterior del órgano, la cápsula se engruesa
formando el mediastino
testicular, a partir del cual se extienden en forma radiada
tabiques fibrosos, que dividen
al órgano en numerosos compartimientos piramidales, los
lobulillos testiculares. Los
tabiques pueden no alcanzar la cápsula, lo cual permite que los
lobulillos se
comuniquen entre sí.
Cada lobulillo puede presentar de uno a cuatro túbulos
seminíferos, entre los cuales
se encuentra un tejido conjuntivo laxo, denominado tejido
intersticial.
file:///C|/Documents%20and%20Settings/Francisco%20G/E.../Histologia2/Bibliografia
%20Basica/REPROMASCULINO.htm (1 of 9)25/08/2003 7:49:44
ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL
En este tejido se observan distintos tipos celulares y una rica
red de vasos
sanguíneos y linfáticos. Entre las células que presenta
tenemos, las células
intersticiales o de Leydig y también otras células que están en
estrecha relación con la
pared de los túbulos seminíferos (células mioides). Se
observan, además, algunos
macrófagos, leucocitos y en ocasiones, células cebadas y
plasmáticas.
Parénquima
El parénquima del testículo lo forman los túbulos seminíferos y
las células
intersticiales o de Leydig.
Túbulos seminíferos
Los túbulos seminíferos estan separados del tejido intersticial
por un tejido limitante,
que incluye la clásica lámina basal más una malla de fibras
colágenas y células
aplanadas, denominadas células mioides ó peritubulares. Estas
células contráctiles
dependiendo de las especies presentan numerosos filamentos
citoplasmáticos similares
a los de actina, las con• tracciones rítmicas que se observan en
los túbulos seminíferos
se debe a estas células.
La pared de los túbulos está constituida por un epitelio de tipo
estratificado, en el que
se observan dos clases de células: los sustentocitos o células
de Sertoli y las células
esperma• togénicas (células de la línea germinal).
Células sustentaculares o de Sertoli
Las células de Sertoli ocupan la mayor parte del espesor de la
pared de los túbulos,
encontrándose las bases de estas células en contacto directo
con la membrana basal.
Por su forma irregular
no es posible observar con claridad los límites de estas células
al M/O. Los contornos celulares son imprecisos, ya que las
células germinales, durante
su diferenciación, ocupan profundas depresiones en el
citoplasma de las células de
Sertoli,
las cuales no solo sirven de sostén, sino que también participan
en su nutrición.
La célula de Sertoli es una célula columnar alta, que presenta
su núcleo cerca de la
región basal, mientras que el resto del citoplasma se extiende
hasta llegar a veces
cerca de la luz del túbulo.
El núcleo observado al M/E es generalmente ovoide, pero
presenta pliegues
profundos en su contorno. El nucleoplasma es relativamente
homogéneo, y lo más
característico que presenta es el nucleolo.
El citoplasma presenta un aspecto reticular que contiene
delgados filamentos y
microtúbulos aislados o en ordenamiento paralelo al eje mayor
de la célula.
Las mitocondrias son alargadas y bastante numerosas y el REL
está mucho más
desarrollado que el RER. Se observan también gotas de lípidos
y delgados cristales
fusiformes, localizados cerca del núcleo. El significado
fisiológico de estos cristales se
desconoce, aunque son característicos en el humano.
Barrera hemato•testicular
En la zona cercana a la base de las células, por encima de las
espermatogonias, las
membranas plamáticas de las células de Sertoli vecinas se
unen mediante bandas de
cierre (especializaciones de contacto entre células) que
constituyen la barrera
hemato•testicular. Esta barrera separa dos compartimentos: el
basal, por debajo de las
bandas de cierre, que contiene las espermatogonias y el
compartimento periluminal, en
el que se encuentran el resto de las células espermatogénicas
y que es el sitio donde
tiene lugar el proceso de meiosis.
file:///C|/Documents%20and%20Settings/Francisco%20G/E.../Histologia2/Bibliografia
%20Basica/REPROMASCULINO.htm (2 of 9)25/08/2003 7:49:44
ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL
Las células germinales del compartimento basal, se nutren
directamente de la sangre
de los capilares del tejido intersticial, mientras que las células
del compatimento
periluminal obtienen las sustancias y son mantenidas por las
células de Sertoli.
Las células de Sertoli sintetizan la proteína transportadora de
los andrógenos (síntesis
que al parecer está estimulada por la FSH).
Esta proteína ayuda a concentrar la testosterona en el
compartimento periluminal,
para que se desarrolle normalmente el proceso de
espermatogénesis. En la
acumulación de grandes concentraciones de testosterona en el
compartimento
periluminal y en su mantenimiento colabora la barrera
hemato•testicular. Las
espermátidas del compartimento periluminal son haploides y
pueden comportarse como
células ajenas al organismo si pasaran al tejido circundante.
Las bandas de cierre
evitan el paso de esas células haploides al resto del organismo
y evitan por lo tanto la
formación de anticuerpos contra las propias células
germinativas.
Además de participar en el soporte mecánico y en la nutrición
de las células
germinativas, las células de Sertoli controlan la migración de
las células germinales a
través de todo el epi• telio, contribuyendo a la liberación de los
espermatozoides en la
luz de los túbulos, mediante movimientos que provocan los
filamentos de actina y los
microtúbulos presentes en ellas.
Células espermatogénicas
Las células espermatogénicas o de la línea germinal, com•
prenden varios tipos
morfológicamente diferentes: espermatogonias,
espermatocitos primarios,
espermatocitos secundarios, espermátidas y espermatozoides.
Estos distintos tipos
morfológicos, desde el punto de vista ontogénico, no son
distintos tipos celulares, sino
estadios continuos del proceso de meiosis y de diferenciación
de las células germinales
masculinas.
A partir de la espermatogonia se desarrolla toda una
generación
de células que se
ordenan en capas más o menos concéntricas,
los estadios posteriores de
diferenciación se localizan más cercanos a la luz del túbulo, de
modo que los
espermatozoides
se encuentran directamente bordeando la luz.
Espermatogénesis La espermatogénesis es el proceso
mediante el cual sucesivas
transformaciones traen como resultado la formación de un es•
permatozoide (célula
haploide). Este proceso está latente en el periodo embrionario
y comienza después de
la pubertad, dando lugar a partir de este momento y durante la
vida sexual del individuo
a una renovación continua de la estirpe de células germinales.
Durante el desarrollo embrionario las células germinativas
primordiales emigran del
saco vitelino hacia la gónada en de• sarrollo y forman parte de
los cordones sexuales
derivados del epitelio celómico. Los gonocitos surgen de estas
células germinativas
primordiales.
Los gonocitos se multiplican y dan lugar a las espermato•
gonias. Después de la
pubertad tienen lugar varias divisiones mitóticas sucesivas y de
diferenciación de las
células hijas, quedando algunas como espermatogonias, pero
otro grupo se transforma
en espermatocitos primarios.
Los espermatocitos primarios son las células germinales en las
cuales se desarrolla la
meiosis. Esta comprende una profase extremadamente larga
con pareamiento e
intercambio del material genético. La reducción en el número
de cromosomas, tiene
lugar en el curso de dos divisiones sucesivas (divisiones de
madu• ración), dando
file:///C|/Documents%20and%20Settings/Francisco%20G/E.../Histologia2/Bibliografia
%20Basica/REPROMASCULINO.htm (3 of 9)25/08/2003 7:49:44
ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL
primero un espermatocito secundario (núcleo diploide) y luego
espermátidas (núcleo
haploide).
Las espermátidas son las células germinales posmeióticas del epitelio
seminífero. En ellas ocurren una
serie de transformaciones
morfológicas durante la espermiogénesis, las cuales terminan en la
formación
del espermatozoide.
Estructura de las células de la línea germinal
Las espermatogonias se pueden localizar junto a las células
de Sertoli, cercanas a la
membrana basal, estas son las únicas células germinativas que
se presentan antes de
la pubertad. En la microfotografía de la figura 17.35, de un
testículo infantil, se puede
apreciar en la pared de los túbulos seminíferos dos tipos
celulares, las células de Sertoli
y las espermatogonias.
Las espermatogonias se dividen en dos variedades: de tipo A y
tipo B.
Las espermatogonias tipo A son menos numerosas y de
forma aproximadamente
oval, parcialmente rodeada por la célula de Sertoli. El núcleo es
oval y el nucleoplasma
es pálido, presen• tando una fina granulación. El citoplasma es
pobre en organitos
membranosos. Su división es por mitosis y casi la mitad de las
células hijas
permanecen como tipo A que actúan como células madres,
mientras que el resto se
transforma en espermatogonias de tipo B.
El tipo B de espermatogonia es mucho más numeroso y se
localiza también
parcialmente rodeado por las células de Sertoli,
o en contacto con otras
espermatogonias B. El cuerpo celular es redondeado, con un
núcleo esférico en el que
se observan grumos de cromatina y un nucleolo heterogéneo e
irregular.
El citoplasma
es comparable con el de la espermatogonia A y en él también
se observan partículas
que parecen corresponderse
con polirribosomas.
Al final de la última división de estas células, la división del
cuerpo celular es
incompleta, persistiendo puentes interce• lulares en las
siguientes divisiones meióticas,
manteniendo unidos hasta cuatro espermatocitos
secundarios y ocho espermátidas.
Al final de la última división de las espermatogonias B, las
células hijas son los
espermatocitos primarios. Estas células ocupan
aproximadamente la zona media del
epitelio, y es en ellas que ocurre la división meiótica. Las
características morfoló• gicas
de dichas células están en relación con el estadio fisiológico en
que se encuentren. En
el citoplasma se puede observar un mayor desarrollo de los
organitos membranoso.
Una característica importante es la presencia de puentes
intercelu• lares. Los
espermatocitos primarios se hallan en estrecho contacto con
las células de Sertoli.
Producto de la primera división de maduración de la meiosis,
que ocurre en el
espermatocito primario, surgen los espermatocitos secundarios,
en los cuales continúa
el proceso de división. Estas son células pequeñas que se
dividen con rapidez, para dar
lugar a las células con un número haploide de cromosomas
que son las espermátidas.
Las espermátidas son células pequeñas, aproximadamente
es• féricas, y de núcleo
también esférico. Muestran gran desarrollo de algunos
organitos membranosos, tales
como mitocondrias y aparato de Golgi, pero también la
morfología del citoplasma va a
estar en relación con el estado de espermiogénesis en que se
encuentra la célula.
En la espermiogénesis, los principales cambios que ocurren
en las espermátidas son
los siguientes:
file:///C|/Documents%20and%20Settings/Francisco%20G/E.../Histologia2/Bibliografia
%20Basica/REPROMASCULINO.htm (4 of 9)25/08/2003 7:49:44
ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL
1. El aparato de Golgi, situado muy cercano al núcleo,
comienza a formar vesículas que
se unen formando una vesícula acrosómica que se adosa a la
membrana externa de la
envoltura nuclear. Esta vesícula sigue creciendo por fusión de
otras que provienen del
aparato de Golgi, y van rodeando la parte superior del núcleo,
hasta cubrir la mitad de
él; pos• teriormente se condensa el material acrosómico y la
membrana de la vesícula
forma en el núcleo el capuchón cefálico.
2. De forma simultánea a lo anterior, en un polo del núcleo (polo
opuesto) comienza a
desarrollarse el flagelo, órgano que sirve para el desplazamiento del
espermatozoide En estadios
tempranos del desarrollo del flagelo aparece el manchete, que es una
cortina de microtúbulos que
rodea la parte inferior del núcleo y participa en los cambios de formas
nucleares
y en la
implantación del flagelo.
3. La masa excesiva de citoplasma que va quedando según se
forma el
espermatozoide, contiene muchos mitocondrias y estas rodean
la pieza media del
flagelo formando la vaina mitocondrial, la cual proporciona la
energía para su
movimiento. El producto final de estos cambios es el
espermatozoide, célula sexual
masculina, cuya estructura se representa en la figura 17.36.
En la figura 17.37 pueden observarse microfotografías
electrónicas de los estadios
sucesivos de la formación del acrosoma en una espermátida;
se representan estadios
inciales y tardios de la formación.
Células intersticiales ó de Leydig. Como planteamos al
principio del capítulo, las
células instersticiales ó de Leydig (figura 17.38) se localizan en
el tejido intersticial y
pertenecen al parénquima, pues tienen la importante función de
comportarse como
glándulas endocrinas puesto que secretan las hormonas
sexuales masculinas (testosterona).
Estas células epitelioides se encuentran agrupadas formando
acúmulos en estrecha
relación con los vasos sanguíneos. Las células de Leydig son
células grandes de forma
poliédrica irregular, de núcleo excéntrico que contiene gránulos
de croma• tina y un
nucleolo bien desarrollado. El citoplasma, de aspecto
vacuolado, presenta abundantes
inclusiones en forma de gotas lipídicas; en el humano
presentan los denominados
cristaloides de Reinke cuyo significado fisiológico se desconoce
( 17.39).
El organito más desarrollado es el REL, lugar de síntesis de las
hormonas esteroides;
las mitocondrias muestran crestas tubulares características de
las células que producen
estas hormonas.
Sistema de conductos excretores
Como se observa en las figuras 17.30 y 17.31 los conductos
excretores del sistema
reproductor masculino están constituidos por estructuras como
los tubos rectos (que
parten de los túbulos seminíferos), la red testicular o rete testis,
los conductillos
eferentes, el epidídimo y los conductos deferentes y
eyaculadores.
Tubos rectos. Son cortos y parten del vértice de cada lobuli•
llo testicular; están
formados por un epitelio cúbico simple, en el que sólo se
observan células de Sertoli,
separadas del tejido conjuntivo laxo por una lámina basal.
Rete testis o red testicular. Los tubos rectos llegan al
mediastino testicular donde
file:///C|/Documents%20and%20Settings/Francisco%20G/E.../Histologia2/Bibliografia
%20Basica/REPROMASCULINO.htm (5 of 9)25/08/2003 7:49:44
ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL
forman parte de una red de tubos anastomosados formados
por un epitelio cúbico
simple.
Conductillos eferentes. De la red testicular parten de 12 a 15
conductillos eferentes formados por un epitelio cilíndrico simple
ciliado. Por debajo de
la membrana basal del epitelio se observa una delgada capa
de músculo liso en
disposición circular.
Estos conductillos se hacen muy espiralados y constituyen los
lobulillos del epidídimo.
Epidídimo. Cada epidídimo tiene una cabeza, un cuerpo y una
cola, y presenta una
cubierta fibrosa similar a la albugínea. La cabeza, en su mayor
parte, está constituída
por los conduc• tillos eferentes unidos mediante un tejido
conjuntivo muy vascularizado.
Los conductillos eferentes desembocan posteriormente en el
conducto del epidídimo,
formado por un revestimiento epitelial, una membrana basal y
una delgada capa de
fibras musculares lisas, dispuestas circularmente. El epitelio a
todo lo largo del conducto
es cilíndrico seudoestratificado con dos tipos de células, las
pequeñas basales y las
cilíndricas altas que presentan
estereocitos. El conducto del epidídimo comprende la
mayor parte del cuerpo y de la cola, y en su porción distal, se
va haciendo cada vez
más recto hasta que se continúa con el conducto deferente.
Conducto deferente. La pared del conducto deferente es
gruesa y su luz es
estrecha, pues la mucosa forma pliegues longitudinales que
determinan el contorno
irregular de la luz. El epitelio que lo reviste es
seudoestratificado y presenta células
altas que poseen estereocilios; por debajo se encuentra la
membrana basal que lo
separa de la lámina propia. Por debajo de la mucosa se
localiza la submucosa con
muchos vasos sanguíneos e inmediatamente se presenta la
capa muscular, que es la
más gruesa y presenta las fibras dispuestas en tres
direcciones. La más cercana a la
submucosa se orienta longitudinalmente, la capa media es
circular y la más externa es
nuevamente longitudinal; esta última se encuentra
directamente en contacto con la
adventicia que se une a los tejidos vecinos.
La porción final dilatada del conducto presenta una luz más
amplia y mayor cantidad
de pliegues en la mucosa y constituye la ampolla del conducto
deferente. Este
conducto, junto con la arteria espermática, el plexo venoso
pampiniforme y los nervios
del plexo espermático y fibras longitudinales de músculo
estriado
(músculo cremaster)
forman el cordón o fascículo espermático.
Conductos eyaculadores. Estos conductos se forman por la
unión de la extremidad
distal de la ampolla del conducto deferente y el conducto
excretorio de la vesícula
seminal. La mucosa forma pliegues delgados que se proyectan
hacia la luz del
conducto. El epitelio de la mucosa es cilíndrico simple ó
seudoestratificado.
Glándulas anexas
Las glándulas anexas del sistema reproductor masculino, son
la próstata, las
vesículas seminales y las glándulas bulbouretrales .
Próstata
La próstata rodea la uretra, cuando esta sale de la vejiga. Es
una glándula
tubuloacinar de forma cónica y aplanada en sentido
anteroposterior, siendo más gruesa
en la parte superior. Tiene consistencia firme y está rodeada
por una cápsula delgada
de tejido conjuntivo, de la cual parten tabiques anchos y
gruesos que separan
file:///C|/Documents%20and%20Settings/Francisco%20G/E.../Histologia2/Bibliografia
%20Basica/REPROMASCULINO.htm (6 of 9)25/08/2003 7:49:44
ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL
ampliamente las glándulas, presenta además fibras musculares
lisas.
El tejido parenquimatoso está representado por un
conglomerado de 30 a 50
glándulas pequeñas, que se hallan distribuidas en tres zonas
bien delimitas, situadas
más o menos concéntricas y rodeando a la uretra.
La región prostática que está por delante de la uretra está
prácticamente desprovista
de glándulas y la parte situada entre la uretra y los conductos
eyaculadores contiene
glándulas que se abren cerca de la abertura utrículo prostático.
Este es un divertículo
ciego glandular que se extiende hasta el lóbulo medio de la
próstata entre los conductos
eyaculadores.
En la zona media se localizan las glándulas submucosas, y por
último, en la parte
más externa que ocupa mayor espacio en la glándula, se
localizan las glándulas
principales que producen la mayor parte de la secreción
prostática.
El epitelio glandular es de tipo cilíndrico simple o seudoes•
tratificado y descansa
sobre una capa de tejido conjuntivo con muchas fibras elásticas
y células musculares
lisas.
Las unidades secretoras, en sus extremos ciegos, son de
menor calibre que el resto
de la unidad. Por lo cual en los cortes se evidencian porciones
amplias que alternan
con tubos estrechos ramificados.
Las células del epitelio secretor presentan abundantes mi•
tocondrias y un aparato de
Golgi desarrollado.
La secreción prostática es un líquido poco viscoso con bajo
contenido proteíco, pero
es la fuente principal del ácido cítrico y de la fosfatasa ácida del
semen. En la luz de las
glándulas se observan frecuentemente acúmulos de material
secretor,
denominados
concreciones prostáticas.
Vesículas seminales
Estos órganos están localizados simétricamente a cada lado de
la línea media, por
detrás de la vejiga y por encima de la próstata. Son tubos
largos muy apelotonados y
enrrollados sobre sí, cuya pared presenta tres capas:
1. Capa que rodea la luz del túbulo. Es la mucosa que presenta
numerosos pliegues, lo
que amplía la superficie secretora. El epitelio varía con la edad
y las condiciones
fisiológicas, pero es generalmente seudoestratificado formado
por una capa de células
basales y otra capa de células cilíndricas. La lámina propia
parece contener glánduals,
pero eso se debe solamente a los pliegues de la mucosa.
2. Capa media. Es muscular, con las fibras lisas dispuestas
circularmente en la parte
interna y longitudinales en la parte externa.
3. Capa externa. Es la más externa y está formada por tejido
conjuntivo con muchas
redes de fibras elásticas. Las vesículas producen un líquido
viscoso de color amarillo.
La estructura del epitelio de las vesículas seminales varía
según las condiciones
hormonales, por lo que se modifica con la edad del individuo.
Glándulas bulbouretrales
Las glándulas bulbouretrales están situadas en el
compartimiento perineal profundo,
como puede observarse en la figura 17.41, entre el margen
inferior de la próstata y el
bulbo de la uretra. Las glándulas bulbouretrales de Cowper son
tubuloalveolares
compuestas y su secreción es de tipo mucoso. Los conductos y
las unidades secretoras
son de forma y tamaño irregular y la estructura del epitelio varía
según el estado
funcional, encontrándose desde células aplanadas en los
alveolos dilatados hasta
file:///C|/Documents%20and%20Settings/Francisco%20G/E.../Histologia2/Bibliografia
%20Basica/REPROMASCULINO.htm (7 of 9)25/08/2003 7:49:44
ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL
células cúbicas y cilíndricas.
El epitelio de los conductos es de tipo seudoestratificado,
similar al de la uretra. La
secreción es viscosa y clara, muy parecida a la mucina.
A su salida de los tubos seminíferos, los espermatozoides no
tienen aún capacidad
fecundante ni motilidad, sólo viajan por las primeras porciones
del sistema de conductos
ayudados por las contracciones de las paredes de estos tubos,
debido a la actividad
del músculo liso. Es a nivel del epidídimo que adquieren las
dos propiedades antes
mencionadas.
Durante la ayaculación, al paso de los conductos se une el
líquido seminal a los
espermatozoides. Dicho líquido es producido
por las glándulas anexas al aparato
reproductor y junto con los espermatozoides forma el semen
que es expulsado durante
la eyaculación mediante el órgano copulador, el pene.
Pene
Consta de dos porciones, una perineal y posterior y otra
anterior o libre, aunque es
esta última porción a la que se considera como parte primordial
del órgano
genitourinario.
El pene está formado por tres cuerpos cilíndricos de tejido
eréctil: un par de cuerpos
cavernosos en el lado dorsal y el cuerpo cavernoso de la uretra
(cuerpo esponjoso),
estructura impar y media situada en la porción ventral del pene,
en el surco que forman
los cuerpos cavernosos en su superficie infe rior.
Los cuerpos cavernosos se extienden desde el pubis hasta el
glande; entre ambos
cuerpos existe un tabique fibroso, denominado
septum penis, que los delimita (figura
17.45).
Por fuera de los cuerpos cavenosos se encuentra una capa de
tejido conjutivo fibroso,
la albugínea, constituida por fibras colágenas dispuestas en
dos capas, una circular y
otra lon gitudinal. En ambas capas también están pesentes
fibras elás• ticas dispersas
entre las fibras colágenas.
El tejido eréctil de los cuerpos cavenosos es un amplio sistema
de tejido esponjoso
constituido por espacios vasculares, revestidos por endotelio y
alimentados por las
arterias aferentes que cursan por el centro de cada uno de
ellos. Los cuerpos
cavernosos son drenados por venas eferentes.
En el interior del cuerpo cavenoso esponjoso se encuentra la
porción de la uretra
denominada uretra esponjosa. Por fuera de la albugínea que
cubre a los cuerpos
cavernosos y al cuerpo esponjoso de fibras elásticas forman la
denominada fascia penis
que favorece la erección. Recubriendo este tejido conjuntivo se
encuentra musculatura
lisa que presenta externamente, a su vez, una piel de aspecto
fino, móvil y de
coloración más oscura. Esta última presenta, hacia la porción
proximal del pubis,
glándulas sudoríparas y sebáceas, así como folículos pilosos
que desaparecen
en la
porción más distal.
En esta porción la piel cubre el glande en forma de pliegue,
constituyendo el prepucio.
La superficie interna del prepucio continua al glande, está
cubierta por un epitelio
estratificado plano húmedo. El epitelio que cubre el glande está
firmemente adherido al
tejido conjuntivo subyacente.
CORRELACION HISTOFISIOLOGICA EN EL SISTEMA
REPRODUCTOR
MASCULINO
file:///C|/Documents%20and%20Settings/Francisco%20G/E.../Histologia2/Bibliografia
%20Basica/REPROMASCULINO.htm (8 of 9)25/08/2003 7:49:44
ELEMENTOS CONSTITUYENTES DEL
La estructura y la función de los testículos están bajo control de
la hipófisis anterior,
glándula productora de las hormonas
gonadotrópicas que estimulan los testículos para
que produzcan
los espermatozoides y el andrógeno.
El andrógeno más importante es la testosterona, que afecta de
diversas maneras a
las células corporales. La testosterona estimula el desarrollo de
los caracteres sexuales
secundarios, los cuales aparecen en el varón al comienzo de la
pubertad.
La otra función testicular sometida a control hipofisario es la
formación de las células
sexuales masculinas, que tiene lugar mediante el proceso de
espermatogénesis.
Los testículos o gónadas cumplimentan una doble función, la
producción hormonal y
la formación de espermatozoides. Estos dos procesos se
realizan en estructuras
diferentes dentro del órgano.
La síntesis de hormona sexual masculina se efectúa en el
tejido intersticial del testículo, tipo de tejido conjuntivo muy
vascularizado que garantiza
el paso de la hormona a la sangre. Por otra parte la
testosterona es también una
hormona de tipo esteroidea, por lo que las características
morfológicas de las células de
Leydig que la producen son similares a las estudiadas en el
sistema reproductor
femenino, es decir, REL desarrollado, Aparato de Golgi y
mitocondrias abundantes.
En relación con la formación de espermatozoides, esta se
realiza en los túbulos
seminíferos y se observa en la pared del tubo un gradiente de
maduración, o sea, las
células inmaduras se localizan cerca de la membrana basal y
según se van diferenciando
los estadios hasta la formación del espermatozoide, las células
se van ubicando más
cercanas a la luz; por último, los espermatozoides se
desprenden del epitelio y siguen
su recorrido por el sistema de conductos, siendo capacitados a
nivel del epidídimo.
Los espermatozoides, ocurrido el coito, llegan al útero viajando
en el líquido seminal,
que es una mezcla de H2O y secreción de las glándulas
anexas. En el líquido seminal
se le garantiza al espermatozoide nutrición y energía para su
despla• zamiento.

Você também pode gostar