Você está na página 1de 1

IX

EL JARDIN DEL EDN


Ya sea que hayas o no logrado tener una clara visin de lo que hasta aqu se ha dicho, no
lo descartes como algo imposible de comprender. En cada lnea est oculto un significado, cuya
posesin te recompensar con creces el esfuerzo que necesariamente tengas que hacer para estudiarlo
hasta comprenderlo.
Este Mensaje tiene por objeto despertarte a la comprensin clara de lo que T eres; excitarte a la
realizacin de tu verdadero Ser. Tiene por objeto, tambin, hacerte consciente una vez ms de M, tu
Ser Divino, pero de tal manera consciente de este hecho que nunca ms seas engaado por ese otro yo
(o ser inferior) que has imaginado que eres t, y el que por tanto tiempo te ha tentado alimentndote con las
insatisfacciones placeres de los sentidos, con sus disipaciones mentales y deleites emocionales.
Ms antes de que eso pueda suceder, te ser necesario conocer
Perfectamente a ese otro supuesto yo; a ese yo que T creaste, al figurrtelo mentalmente
real y separado de M, por lo cual lo has conservado vivo y le has dado el poder, por ese medio, de seducirte
y engaarte; s, a ese yo que al figurrtelo real le diste el poder para autoerigirse; a ese yo con
su jactancia de s mismo, sus ambiciones y soado poder; con su amor a la vida y posesiones materiales,
as como con su deseo constante de ser considerado como sabio o como bueno; pero el cual yo no
es sino tu personalidad humana, la que naci slo para morir, ya que no es sino una entidad separada, y,
como tal, no tiene ms permanencia o realidad que la hoja, la nieve y la nube.
S, sers puesto cara a cara con ese insignificante yo personal y vers, con videncia perfecta, todo su
srdido egosmo y vanidades humanas; y entonces si es que quieres acudir a Mi y demandar con
sencilla fe y confianza sabrs que Soy Yo, la parte Infinita e Impersonal de Ti, la que mora siempre en
tu interno, quien as te muestra todas estas ilusiones de la personalidad, que es lo que por tantas edades te ha
separado de M, en conciencia; es decir, de Tu propio glorioso Ser Divino.
Esta realizacin seguramente vendr cuando puedas ya reconocer que este Mensaje procede de M y, sobre
todo, cuando te determines a que tal realizacin se verifique. Para Ti, a quien Yo he inspirado a
tomar tal determinacin, har a su tiempo que toda ilusin desaparezca, y, entonces, t en verdad Me
conocers.
El ejercicio que hace tu mente al esforzarse en penetrar el tema abstracto de estas lneas no te perjudicar.
Por el contrario, es lo que ella necesita. Porque slo hasta que puedas comprender Mi Propsito, cuando
te sea presentado en ideas como las aqu expresadas, llegadas a ti por la va externa, hasta entonces podrs
percibir e interpretar correctamente Mi Idea cuando Yo te la inspire de lo interno: De este modo es como Yo
ESTOY preparando a tu mente, a fin de que en el USO de ella recibas, no

39

Você também pode gostar