¿Qué pasaría si las mujeres dejáramos de creer en los partidos de izquierda? ¿Qué pasaría si todas nos desafiliáramos? ¿Sería diferente si al final solo conformáramos un partido político de mujeres?...
Columna de opinión publicada en el sitio del Centro de Medios Independientes el 13 de abril de 2015.
Título original
si las mujeres dejáramos de creer en la izquierda partidista
¿Qué pasaría si las mujeres dejáramos de creer en los partidos de izquierda? ¿Qué pasaría si todas nos desafiliáramos? ¿Sería diferente si al final solo conformáramos un partido político de mujeres?...
Columna de opinión publicada en el sitio del Centro de Medios Independientes el 13 de abril de 2015.
¿Qué pasaría si las mujeres dejáramos de creer en los partidos de izquierda? ¿Qué pasaría si todas nos desafiliáramos? ¿Sería diferente si al final solo conformáramos un partido político de mujeres?...
Columna de opinión publicada en el sitio del Centro de Medios Independientes el 13 de abril de 2015.
Si las mujeres dejamos de creer en la izquierda partidista
Voy a votar por la izquierda por necia
La derecha solo me sirve para escribir Voy a votar por el pensamiento de izquierda No por los polticos que hoy viven de los partidos de izquierda. (fragmentos)1 Qu pasara si las mujeres dejramos de creer en los partidos de izquierda? Qu pasara si todas nos desafiliramos? Sera diferente si al final solo conformramos un partido poltico de mujeres? Todo es posible. No es tan difcil imaginar un partido solo de hombres. Hay quien piensa que ya vivimos partidos masculinos dado que las decisiones son tomadas principalmente por los que gobiernan los partidos de izquierda. Sin entrar por el momento en una discusin filosfica de la naturaleza o identidad de stos, ubicaremos en la izquierda a la histrica Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca URNG-, el joven Partido Poltico WINAQ, y el ms reciente pero no necesariamente nuevo, Convergencia por la Revolucin Democrtica CRD-. Con ms o menos historia poltica, son estos partidos los que hoy por hoy libran la batalla por ganarse el favor de una poblacin; inmersos en sus propios conflictos que son tema para otra discusin. En la vida partidaria de izquierda como en el mundo entero, las mujeres conformamos ms del 50% de las afiliaciones. Aunque segn nos comentan mujeres afines a los partidos, no existen datos desagregados a lo interno o en el Tribunal Supremo Electoral que lo confirmen, pero a ojo de buena cubera cualquiera se da cuenta. Las mujeres engrosamos las marchas, los mtines, talvez no las asambleas pues all van representantes que regularmente son hombres; pero s hemos sido las ms activas en los partidos y esa es una afirmacin popular que pocas personas se atreveran a refutar. Pero ser mayora en un partido poltico o en la vida en general no implica que las mujeres tengamos acceso a cuotas de poder que garanticen ser parte de las decisiones polticas fundamentales de los partidos; lo cual nicamente es otro reflejo de lo profundo que se ha instalado el patriarcado en nuestros seres, individuales y colectivos. Por ejemplo, la URNG cuenta en sus ms de veinte aos de historia partidaria nicamente con una mujer como secretaria general: la Comandante Lola; exceptundola, ese es un privilegio que conservan los hombres. Por qu reproducir la estructura dominante? Falta de capacidad de las mujeres seguro no es. En fin. Las mujeres libramos batallas como parte de la militancia o afinidad para con la izquierda. A lo interno, mujeres inteligentes y valiosas se han desencantado por la abusivez, el acoso sexual o el menosprecio del que han sido objeto por los machos dominantes miembros de los partidos polticos de izquierda, desde secretarios generales o adjuntos hasta integrantes de base 1
Norma liliana Chamal Patzn. Maya Kaqchikel. Poeta, comunicadora alternativa e
independiente, educadora popular.
con el mismo nivel de ellas; otras, luchadoras-persistentes, insisten en ser
parte de estas estructuras aunque en el camino casi confirman que las decisiones al final de cuentas las toman ellos, su batalla ms fuerte es contra la decepcin. En lo pblico, hay que explicarle a la gente por qu seguimos creyendo en un partido que aparenta ser igual a los de derecha, por las decisiones de sus diputados (hombres), por el silencio que a veces decide en momentos en los que debera salir a las calles junto con los movimientos sociales, por las actitudes de las figuras pblicas, etc., hay que mantener la fe en medio de todo. Pero dice el dicho, tanto va el agua al cntaro hasta que lo rompe. Qu pasara realmente si las mujeres militantes y afines a los partidos de izquierda nos cansramos de la violencia machista que se vive en los partidos de izquierda? En la vida privada, las mujeres deciden divorciarse, separarse, denunciar, tirarlo todo y empezar de nuevo. Si las mujeres ya no creyramos en la izquierda partidista Moriran los partidos de izquierda en el pas Si las mujeres de izquierda por fin caen en el desencanto y se van de los partidos, el partido se queda vaco. Se va el debate, la otra forma de ver la vida, la poltica, la economa, la educacin, se va la crtica y la autocrtica. El partido sin mujeres se volvera ms conflictivo por las luchas internas de poder entre hombres. Llamadas excntricas y crticas, pero con ellas se ira desde la tradicional taza de caf con pan tostado y las flores en el jardn de la sede, hasta el cuestionamiento al secretariado sobre la direccin del partido, o la exigencia por el cumplimiento de los estatutos. Si se muere tambin la afinidad se perdera gran parte del trabajo poltico comunitario. Seran mtines pobres, no se alcanzara el total de votos necesarios para tener ni un diputado (hombre) y por lo tanto, el partido se muere. Todo sera igual Las decisiones las han tomado y casi las toman totalmente los hombres de los partidos de izquierda. La mayora han sido secretarios generales. La mayora de secretarios departamentales y municipales, si no su totalidad, han sido hombres; y esto no necesariamente es una regla en piedra, pero las decisiones, ante la ausencia de bases slidas o estructuras que se respeten, las toman los hombres que tienen a su vez, algn tipo de poder. Si las mujeres se van, todo sigue igual, las decisiones no cambian. Los hombres notan la ausencia de las mujeres hasta que no tienen un vaso limpio donde tomar agua, o cuando no hay quien atienda la recepcin. Conformaramos el partido poltico de las mujeres de izquierda Parecido a la propuesta hecha por una autora famosa en El pas de las mujeres. Las mujeres cansadas de ser relegadas y que su potencial, su inteligencia y su trabajo no sea tomado en cuenta, deciden abandonar las filas del partido y organizarse para hacer su
propio partido. Uno que en principio se conforme por estas mujeres
valiosas pero que luche para hacer vida los principios que tanto han defendido y buscado poner en prctica: la equidad, el respeto y la complementariedad. Con el tiempo se integraron al partido hombres progresistas que no crean que ellas, por feministas estaban en contra de los hombres. Pero las mujeres creemos en el planteamiento de izquierda, somos de izquierda, por lo mismo luchamos contra el capitalismo, contra su explotacin voraz y sus ansias de acumulacin y muerte, contra el patriarcado domstico, econmico, social y poltico, en las calles, dentro de los partidos polticos o bien, en las urnas, porque creemos que la batalla se da en todos los frentes para hacer valer nuestros derechos, aunque en algunos espacios debera ser ms fcil hacer vivo el principio de unidad, equidad y complementariedad, ms si estamos planteando lo que queremos para todo un pas. Pero eso s, no vamos a esperar toda la vida a que las cosas cambien ni a reproducir romnticamente el dicho me prometi que cambiara o s?