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BAZAR FREUDIANO

SERGIO ROCCHIETI

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© ART+DG By Andrés Gustavo Fernández 2009 / adncreadores@gmail.com

FREUD
Y LA VERDAD
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BAZAR FREUDIANO

FREUD Y LA VERDAD
© POR SERGIO ROCCHIETI 2

E-Mail: sergiorocchietti@gmail.com

FUENTE:
WWW.CON-VERSIONES.COM

C uando Freud nos cuenta lo siguiente (que se leerá) en


la Psicopatología de la vida cotidiana, Capítulo 10:
Errores, ejemplo cuatro, Pags. 215/216. Ed.
Amorrortu, Buenos Aires, Argentina, 1980. No
podemos menos que atender a lo que allí se dice y se
muestra, y nos muestra, lo presentado allí, en lo que
se trata referente a una posición ética. Muchas veces
se habla de la ética y ello se hace después que Lacan
lo hizo mucho más accesible, luego de su Seminario
VII dedicado a La ética del psicoanálisis, sin embargo
no debemos pasar por alto las consideraciones no
tan visibles que encontramos a lo largo de la obra
freudiana.

Y aún más, la ética o el modo de comportarse para


decirlo fácilmente de un individuo, el modo de
comportarse ‘correctamente’ no es una idea actual,
formaba parte del modo de pensamiento y acción de
los antigüos griegos y de otras regiones y culturas,
pero como nuestra filiación es occidental y griega (y
romana y judía) la llamamos ética (ethos). Dejamos
la amplitud de esta cuestión para cernirnos a lo que
continúa:

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FREUD Y LA VERDAD

“Cierto día un paciente me recordó que le prestase


los dos libros prometidos sobre Venecia, con los que
quería informarse para su viaje de Pascuas. «Ya los
tengo preparados», le dije, y me dirigí, para
buscarlos, a la sala donde está mi biblioteca. En
verdad había olvidado sacarlos, pues no estaba muy
de acuerdo con el viaje de mi paciente, en el que veía
una innecesaria perturbación del tratamiento y un Ahora tengo que poner
perjuicio material para el médico. Eché entonces un
en práctica la equidad; si 3
rápido vistazo por la biblioteca en procura de los dos
libros que tenía en mente.Venecia, ciudad del arte, tan a menudo he
leí: «aquí está uno; pero además debo tener una obra
histórica en una colección parecida. Justo este es:
enfrentado al paciente
Los Médici. Lo tomo y se lo llevo al que espera, para con sus propias acciones
luego tener que confesar, abochornado, el error. sintomáticas, sólo puedo
Es que yo sé bien, en realidad, que los Médici nada salvar mí autoridad ante
tienen que ver con Venecia; por un momento, sin él mostrándole con toda
embargo, eso no me pareció incorrecto. Ahora tengo
que poner en práctica la equidad; si tan a menudo he
sinceridad los motivos,
enfrentado al paciente con sus propias acciones que yo le había
sintomáticas, sólo puedo salvar mí autoridad ante él mantenido en secreto, de
mostrándole con toda sinceridad los motivos, que yo
le había mantenido en secreto, de mi aversión a su mi aversión a su viaje.
viaje. Puede uno pasmarse de que el esfuerzo de los Puede uno pasmarse de
seres humanos por decir la verdad sea mucho más
fuerte de lo que se suele estimar. Además, quizá sea
que el esfuerzo de los
consecuencia de mi práctica del psicoanálisis que seres humanos por decir
apenas pueda mentir ya. Tan pronto como intento la verdad sea mucho más
una desfiguración, cometo un error u otra operación
fallida por la que se denuncia mi insinceridad, como fuerte de lo que se suele
en este ejemplo y en los anteriores. estimar. Además, quizá
El mecanismo del error parece el más laxo entre
sea consecuencia de mi
todas las operaciones fallidas; vale decir: la práctica del psicoanálisis
ocurrencia del error indica en todos los casos que la que apenas pueda mentir
actividad anímica en cuestión tuvo que luchar con
algún influjo perturbador, pero ello sin que la ya. Tan pronto como
cualidad misma del error esté determinada por la intento una
cualidad de la idea perturbadora que permaneció en
la sombra. Sin embargo, en este punto agregamos,
desfiguración, cometo un
con posterioridad, que en muchos casos simples de error u otra operación
desliz en el habla y en la escritura cabe suponer igual fallida por la que se
situación. Siempre que cometemos un desliz en el
habla o en la escritura tenemos derecho a inferir una denuncia mi insinceridad,
perturbación debida a procesos anímicos situados como en este ejemplo y
fuera de la intención; pero es preciso admitir que a
menudo aquellos obedecen a las leyes de la
en los anteriores.
semejanza, la comodidad o la inclinación a apurarse,
sin que lo perturbador haya conseguido instalar un
fragmento de su propio carácter en la equivocación
resultante a raíz de aquel desliz. Es sólo la
solicitación del material lingüístico la que posibilita
el determinismo de la equivocación y le marca
también sus límites”.

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‘Emunah, aletheia, veritas’, nombres de lo Y eso alcanza, nos alcanza y nos mueve y no lo
mismo que no es lo mismo. Nombres de la Sabemos y no lo reconocemos. Hasta que va
verdad. Nombres de la verdad en lugares y perdiendo su eficacia y cuando nos detenemos y
pueblos distintos, nombres y tiempos de la puede pasar mucho tiempo para que eso suceda,
verdad. De ‘eso’ que se dice que habla. La verdad y consideramos cuando podemos, que ha
habla: “Puede uno pasmarse de que el esfuerzo sucedido, relatamos lo que creemos que pasó.
de los seres humanos por decir la verdad sea Nuestra verdad dicha en un relato para otro
mucho más fuerte de lo que se suele estimar» participa netamente del engañarnos. ¿Qué
dice Freud, en los inicios de aquello que se llama queremos-creemos ser? No es mentira ni verdad.
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«psicoanálisis” y que no es más que las palabras Es relato o sea ficción. Espacio del relato que
vayan, huyan de la boca y que sus sonidos constituye las realidades. La de cada uno, la de
resuenen, y que no des-mientan nuestra posible cada uno con otros. La de nosotros.
aprehensión. Asociación libre e interpretación,
la nuestra, la de otro, ¿Es que tú dices que yo Distintos relatos que agrupan a uno, otro, otros y
digo? ¿Es que yo digo que tú dices que yo digo? a todos. Luego, el psicoanálisis será ese lugar
¿Es que tú dices que yo digo que tú dices que yo donde se intenta ser no demasiado insincero:
digo? Nimiedades que espejean en superficies y “Tan pronto como intento una desfiguración,
retruécanos. Ese sonido que algo trae, esa cometo un error u otra operación fallida por la
imagen que algo muestra en su presentar, esa que se denuncia mi insinceridad...”
promesa dicha en su bienestar algo hará. Ni yo ni
t ú , e s o. E s o a p a r e c e y d e s a p a r e c e Y es ese leve desplazamiento desde los discursos
fulgurantemente, eso resuena y el eco se detiene. cotidianos y grupales en los espacios públicos y
Pálida permanencia siempreinsuficiente. Y sin comunes a un espacio clausurado, ajeno y
embargo el eco algo trae. Eco-trazo. Palabra distinto donde se podrá -a lo mejor o a lo peor-
vibrante. favorecer un encuentro: el encuentro con la
verdad (de un decir, de un no haber dicho, de un
La verdad habla. Más no habla en el mismo haber dicho los otros u otro) que me aqueja, que
lenguaje que nosotros. No la oímos en las me altera, que me perturba o me favorece, me
palabras, no la vemos en nuestro derredor. La satisface, me avergüenza y me ata y desata, me
verdad grita con voces tan estentóreas que nos hace y me hace hacer. Estos son los argumentos
deja sordos. Sordos y ciegos para la verdad. escenográficos que me podrán llevar a
Verdad que no es definible ni asible. Ni lo considerar la piedra-verdad o el grito-verdad o el
intentemos, estertores de ausencia lograremos, dolor-verdad o el golpe-verdad. Y hay más pero
ahogos sin suspiros, vanos recuerdos; es entre, es suficiente.
siempre entre, entre las palabras no escuchadas,
es entre los sonidos no oídos, es entre las Fragmentaria y parcial, otra no puede ser
superposiciones y los silencios, es entre los nuestra consideración de esta palabra, (verdad),
límites de nuestras percepciones que, quizás y que volvemos a encontrar en un suceso
sólo quizás, alguna vez … algún entresijo se acontecido hace más de cien años en el
abre. E inmediatamente se cierra. Y algo consultorio de un médico vienés que cometió un
alcanzamos que se deshace entre nuestros lapsus frente a un paciente. Nada más. Lo
dedos. importante es lo que hizo luego, allí, con él.

SERGIO ROCCHIETI
ES DIRECTOR DE LA REVISTA
DIGITAL DE PSICOANALISIS
CON-VERSIONES

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