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“Nunca Fuimos Modernos”, Bruno Latour – Informe de lectura

Publicado el Abril 22, 2008 por guadalopez

Bruno Latour nació en el año 1947 en Francia. Formado en las disciplinas de


Antropología y Filosofía, se lo reconoce por ser un especialista en los estudios
sociales de la ciencia. Actualmente ejerce el oficio de profesor de Ciencias
Políticas en la Universidad de Paris, y es catedrático de Sociología en la Escuela
de Minas, también en Paris.

Entre sus principales obras podemos encontrar el libro “Nunca Fuimos


Modernos. Ensayo de antropología simétrica.”. En este ensayo, como su
nombre lo indica, Latour se propone analizar el tema de la Modernidad.

¿Qué es ser moderno? ¿Somos modernos? ¿Fuimos modernos alguna vez?


Preguntas de esta índole aparecen a medida que el texto se va desarrollando.

Para empezar, considero necesario caracterizar a la Modernidad. Según Latour,


se suele definir a la modernidad a partir del humanismo, es decir, para anunciar
el nacimiento del hombre o su muerte. Pero esta caracterización es en si misma
un hábito moderno por ser asimétrica. ¿Por qué? Tal como dice el autor, deja de
lado el nacimiento conjunto de la “no humanidad”, el de las cosas, o los objetos,
o los animales por un lado, y el de un Dios tachado, “fuera de juego”, cuando,
paradójicamente, esta contribuyendo a su proliferación.

Conjuntamente, sostiene que lo “moderno” designa dos prácticas totalmente


diferentes, pero que en realidad, hace poco dejaron de serlo. Por un lado, se
encuentran las prácticas de traducción o de mediación, “mezclas entre géneros
de seres totalmente diferentes, híbridos de naturaleza y cultura”. Estas prácticas
se corresponden con lo que Latour llamo “redes”. Por otro lado, están las
prácticas de purificación, que se corresponden con lo que el autor denomino
“crítica”. Estas “crean dos zonas ontológicas por completo distintas, las de los
humanos, por un lado, las de los no humanos, por el otro”

Por lo tanto, el punto central que caracteriza a la modernidad es esta dicotomía,


esta separación entre lo humano y lo no humano, entre naturaleza/cultura,
conocimiento exacto/interés, poder y política de los hombres, mundo
natural/mundo social, etc.

La Constitución moderna separa entonces, el poder científico, encargado de la


representación de las cosas, del poder político, que se encarga de representar a
los sujetos. Para realizar esa tarea, se sostiene en 4 garantías, a saber:

- “…no son los hombres los que hacen la naturaleza, ella existe desde siempre y
siempre estuvo ya presente, lo único que hacemos nosotros es descubrir sus
secretos…”
- “…son los hombres y solo los hombres los que construyen la sociedad y
deciden con libertad acerca de su destino…”

- “…la separación completa entre el mundo natural (…) y el mundo social, y en


segundo lugar, la separación total entre el trabajo de los híbridos y el trabajo de
purificación…”

- “…establece como árbitro a un Dios infinitamente lejano que es por completo


impotente y juez soberano a la vez…”

Como podemos ver, existe una clara contradicción entre las garantías que
plantea la modernidad, pero es justamente esta contradicción la que consolidó a
los modernos, como dice Latour: “…La Constitución hizo invencibles a los
modernos precisamente porque cree en la separación total de los humanos y los
no humanos a la vez que la anula…”

Lo que Latour trata de demostrar a lo largo del ensayo es que esta asimetría no
existe, tratando de reconstruir esa doble separación. Naturaleza y cultura se
mezclan todos los días, y eso es algo que no podemos negar, aunque la
modernidad trate de ocultarlo.

Nos podemos dar cuenta de esto en el momento en el que hablamos de robots,


de semillas transgénicas, del uso constante de nuevas tecnologías como si
fueran indispensables para el desarrollo de la sociedad. Y sin ir mas lejos, en
algo tan común y cotidiano como es leer un diario a la mañana, un diario repleto
de artículos híbridos, que mezclan constantemente ciencia, política, economía,
religión, derecho, ficción….

La Constitución moderna niega la existencia de los híbridos, pero en realidad, lo


que hace, es contribuir a su multiplicación:

“Cuanto menos mezclados se piensan los modernos, mas se mezclan. Cuanto


más absolutamente pura es la ciencia, mas íntimamente ligada esta con la
fábrica de la sociedad. La Constitución moderna acelera o facilita el despliegue
de los colectivos, pero no permite pensarlos.” (B. Latour)

Nunca fuimos modernos…

Florencia Morini

Archivado bajo: Bruno Latour, Informes de lectura

“Nunca fuimos modernos” Bruno Latour


Publicado el Septiembre 27, 2008 por kar2008

Ser moderno, ¿una forma de ser?


Ya a mediados de 1800, Charles Baudelaire se referia a que es ser moderno. Una definicion
que dio cuenta de un fenomeno que hoy se asocia con lo actual o con lo contemporaneo pero
que evidentemente va mucho mas alla.

Bruno Latour creo una división de lo moderno que consiste en dos conjuntos de prácticas
opuestas. El primer conjunto es el que llama Redes, son las practicas de traducción o
mediación, mezclas entre géneros de seres totalmente nuevos, HÍBRIDOS de la naturaleza y
de cultura. Y el segundo es la Crítica, prácticas de purificación, las que “crean dos zonas
ontológicas por completo distintas, la de los humanos, por un lado, y la de los no humanos
por el otro. Cada contemporaneidad tiene su propia idea de modernidad. Es decir, cada
comunidad establece su propio conjunto de saberes que es necesario reconocer para que las
señales se conviertan en signos. Por eso, una persona moderna, aunque registre las complejas
ramas globales que circunscriben su vida cotidiana, debe trascender los límites de una
contemporaneidad determinada. No es lo mismo “ser moderno” en Buenos Aires, Londres,
Bangkok o Nueva York, asi como tampoco es lo mismo “ser moderno” o”ser esnob”. Son
cosas distintas. El esnob se jacta de la calidad de su información. El moderno, de su variedad
y cantidad. Si el esnob es quien “marca tendencia” (como dirían en la Cosmopolitan), el
moderno es quien reconoce la existencia de éstas y otras tendencias.

Entonces, si el ser moderno se sintetiza en ciertas actitudes, conductas y estilos de vida, ¿qué
pasa en la actualidad?”La modernidad tiene tantos sentidos como pensadores o periodistas
hay –diria Latour. No obstante, todas las definiciones designan de una u otra manera el paso
del tiempo. Con el adjetivo moderno se designa un régimen nuevo, una aceleración, una
ruptura, una revolución del tiempo. Cuando las palabras ‘moderno’, ‘modernización’,
‘modernidad’ aparecen, definimos por contraste un pasado arcaico y estable.Por lo tanto este
antropologo denuncia la existencia de una separación definitiva entre el conocimiento y el
interés, el poder o la política de los hombres que va de la mano de una hibridez entre la
cultura y la naturaleza caracteristica del “hombre moderno”.

¿Qué pasaría con nosotros si dejaramos de ser modernos? ¿Entrariamos en una nueva época
que remplazaría la de los modernos?…….¿La posmodernidad?……

No hemos entrado en la era moderna porque para serlo necesitamos cumplir al menos con
una condición: sostener cierta escisión entre la ciencia y la reflexión interpretativa, distinción
que conlleva la Constitución moderna. Por lo tanto en lugar de separar practicas debemos
considerar a cada una de ellas dentro de una red, para ser mas especificos no hablamos del
contexto social y de los intereses de poder, sino de su inclusión en las comunidades y los
objetos. Es decir de una red de historias mezcladas, de historias que se suceden unas con
otras.
El hombre moderno no existe. Es una abstracción, es una quimera que queremos creer
afirmaria Latour

“Nunca fuimos modernos”, Latour


Publicado el Septiembre 26, 2008 por guerreromf
Latour plantea que lo que va haciendo la ciencia con el devenir de la
modernidad, es ir borrando todos aquellos aspectos que le dan carácter
híbrido. Con esto, lo que quiere decir es que el científico construye ciencia
y contexto, pero en ese proceso, los tópicos que no tienen que ver
directamente con la disciplina que se quiere mejorar pero que sí son
claves para generar nuevas ideas, no quedan manifestados. Sumado a
esto, y en conexión con el otro texto visto de este autor, menciona que la
ciencia también construye “relatos” ya que en sus escritos opera la
retórica y “hacen agua” ciertas categorías de verdad.
El concepto de no hibrido, tendría que ver con la “purificación” (práctica
de la crítica de separar) y se contrapondría con el concepto de
“traducción” que haría alusión a lo que en verdad sucede que es la
proliferación de los híbridos. El título del material en cuestión, “Nunca
fuimos modernos”, tiene justamente que ver con que la supuesta
separación entre las cosas, no es real.
Latour plantea que el antropólogo que desee evaluar los fenómenos
híbridos, debe ubicarse entre el sujeto y el objeto, para estar en una
posición simétrica respecto a este último. Esto sería “Imperio del Medio”.
Luego, otro aspecto del texto es la toma de autores como Hobbes o Boyle,
con el propósito de justificar sus argumentos. La Constitución Moderna
separa entre naturaleza y política; Latour entiende que no existe tal
división y por ende no existirían diferencias entre los planteos de los dos
autores citados, figuras fundantes de la ciencia política y natural
respectivamente.

Nunca Fuimos Modernos – La escisión moderna


Publicado el Septiembre 19, 2008 por camilosuarez

En el mundo moderno tanto analistas como pensadores, periodistas y tomadores de


decisiones se han empeñado en dividir al mundo en dos “categorías puras”: Naturaleza
(concerniente a los conocimientos exactos) y Cultura (relativo al ejercicio del poder). Estas
prácticas de “purificación crítica” están en el centro mismo del ser moderno y tienen su
origen en el nacimiento de la modernidad, cuando Boyle y Hobbes se disputaban la
distribución de los poderes científicos y políticos. Estos dos científicos según Latour
“inventan nuestro mundo moderno, un mundo en el cual la representación de las cosas por
intermedio del laboratorio está disociada para siempre de la representación de los
ciudadanos por intermedio del contrato social”
Estas dos categorías se hallan de hecho totalmente mezcladas en la realidad y forman lo que
Latour llama “híbridos”, madejas donde se entremezclan temáticas como ciencia, política,
economía, derecho, religión, etc. Este fenómeno se plasma claramente en los diarios, donde
día a día estos aspectos se encuentran embrollados. Por eso para el autor se trata de volver a
atar el “nudo gordiano”, atravesando los cortes que separan Naturaleza y Cultura, y para esto
introduce la noción de “actor-red” que tiene como finalidad volver a mezclar las entidades
humanas y naturales

El mundo moderno para Latour


Publicado el Septiembre 12, 2008 por marinitacarin

Latour se pregunta acerca de qué es un mundo moderno. Surge así la hipótesis sobre dos
conjuntos de prácticas diferentes que deben convivir por separado. Por un lado una mezcla de
seres totalmente nuevos, híbridos de naturaleza y de cultura; por el otro, un conjunto que crea
dos zonas ontológicas distintas. El primer conjunto corresponde a las redes. El segundo hace
una separación tajante entre mundo natural, mundo social y un discurso independiente de uno
y otro.

Mientras leía el texto, trataba de encontrar algún objeto, alguna invención que pudiera dar
cuenta de esto. Me detuve a mirar la cuchara del café y pensé cuán naturalizada era nuestra
idea de “cubiertos”. Utensilios tecnológicos que casi sin tenerlos en cuenta conviven
cotidianamente con nosotros. La industria los ha fabricado de todos los materiales, colores,
formas. Ahora bien; no siempre existieron, en la prehistoria se usaban conchas o trozos de
madera. Estos objetos son una creación del hombre pero no por azar. No podemos pensarlos
sólo como una creación humana. Marcan un contexto cultural, un nuevo modo de vida, una
forma de pensar el mundo, traen consigo la idea de civilización.

Latour se centra en esta cuestión: no se consigue construir un pensamiento crítico y lo


suficientemente completo y abarcador acerca del mundo en el que vivimos, estableciendo una
separación entre la esfera natural y la social, la científica y la política, sin tener en cuenta las
relaciones que se tejen entre ambas. Para explicarlo propone el concepto de redes: sistema
complejo de relaciones

Volviendo a atar el “nudo gordiano”


Publicado el Septiembre 7, 2008 por guadalopez

Bruno Latour, filósofo, antropólogo y sociólogo francés, postula en la primera página de


Nunca fuimos modernos que “un mismo hilo relaciona la más esotérica de las ciencias y la
política más baja, el cielo más lejano y una fábrica específica en las afueras de Lyon, el
peligro más global y las elecciones que vienen (…) Los tamaños, los desafíos, las duraciones,
los actores no son comparables y sin embargo ahí están, comprometidos en la misma
historia”.
Dos páginas más adelante nos dice que “esos artículos híbridos que dibujan madejas de
ciencia, política, economía, derecho religión, técnica, ficción, se multiplican (…)”, que
naturaleza y cultura resultan mezcladas todos los días, y que sin embargo, los analistas, los
intelectuales se empecinan en cortar el nudo gordiano que une esas madejas en las que el
conocimiento de las cosas y el interés, el poder, y la política de los hombres resultan
mezclados.

Nuestra tarea junto a Latour será la de reflexionar acerca de cómo el nudo gordiano puede
atarse nuevamente, atravesar el corte constitutivo de nuestra Modernidad que separa los
conocimientos exactos y el ejercicio del poder, la naturaleza y la cultura. Intentaremos
identificar y describir algunas de esas madejas que nos rodean.

Para ello hemos elegido algunos materiales en video que componen una serie que hemos
auto-denominado “Semillas transgénicas, boom sojero, retenciones K, y después….”, con la
intención de analizar la hibridéz (en términos latoureanos) y complejizar la mirada analítica.

Compartimos con uds. algunos de los videos con los que trabajaremos la próxima clase. Estos
materiales están publicados también en la cuenta que la comisión tiene en VodPod, un sitio
para subir y compartir videos que utilizaremos a lo largo de todo el cuatrimestre.

Soja transgénica: la pesadilla del oro verde

Más información
Pablo Figueroa, alumno del cuatrimestre anterior, compartió con nosotros este enlace en
donde podrán encontrar más información relacionada en torno a “Nunca fuimos modernos” y
su autor.

También pueden consultar las diversas entradas publicadas bajo la categoría Latour, que son
informes de lectura sobre el texto realizados por los alumnos del cuatrimestre anterior.

Sitio web de Bruno Latour (en Francés e Inglés)

Archivado bajo: Autores, Bruno Latour, Clases 2.0, Híbridos | Etiquetado: semilas
transgénicas

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