OBISPO DE ARECIBO, EN LAS BODAS DE ORO DIOCESANAS Amados Sacerdotes, Personas de Vida Consagra- La persona creyente que ha alcanzado su madu- las personas e instituciones están abiertas a estos da, hermanos y hermanas del Pueblo Santo de Dios. rez, se empeña cada vez más en imitar los pensa- horizontes, se adentran en la MADUREZ. ¡Feliz Pascua de Resurrección! mientos y las actividades de Cristo, y se identifica Una de las experiencias inmediatas de esta Ma- Vamos avanzando en el Año Jubilar de la Diócesis con la obra suprema del amor de Dios que es la duración es el claro sentido de la complementa- a los cincuenta años de su erección (1960-2010). Han Pasión de Jesús. La constante disponibilidad riedad y la búsqueda de la coordinación tanto sido 50 años de Vida, celebrando, misionando y cons- para la cruz de cada día, el olvido de sí para en- entre las personas como en las Parroquias y los truyendo Comunidad. Hemos recorrido el itinerario tregarse a los demás, “por la vida del mundo”, etc. Grupos. Esta disciplina es una de las señales más con grandes efusiones del Espíritu Santo y manifesta- son metas que corresponden a la figura del “gra- claras de la madurez en las personas y en los gru- ción de la gracia de Dios. no de tierra que cae al suelo y da el ciento por uno” pos. Se la busca a ultranza y se amolda a las di- (Cfr. Jn. 12,24). rectivas del Plan y Guía Diocesano. 1. Al hilo del camino recorrido 3. La fuente de la madurez 5. Para el futuro En los pasados tres años nos hemos ido mentali- zando hacia una nueva etapa histórica de nuestra Esta etapa es un don de Dios a las almas senci- Con estos dones de Dios y experiencias eclesiales Diócesis. No sólo miramos atrás y damos gracias llas; no es fruto de meros esfuerzos humanos ni nos abrimos a los nuevos tiempos del Espíritu a Dios. Nos sentimos empeñados hacia el futu- de sabidurías especiales. Una vida de unión con en las etapas próximas. Nuestros Planes progre- ro, asumiendo los retos apostólicos y de santidad Dios por la oración, la meditación de la Palabra sarán, las dificultades del mundo crecerán, y en que se nos van a presentar a nosotros y a nuestros de Dios, la celebración de los Sacramentos y el cada día y etapa será más apremiante el anuncio sucesores en los próximos años. Queremos aho- culto de la Iglesia, la humildad y la obediencia, la de la Palabra de Cristo y de la vida eterna “para ra marcar esta trayectoria de llegada a las Bodas pobreza espiritual y la fortaleza en las cruces son, los hombres que ama el Señor” (Cfr. Lc.2,14). Serán de Oro Diocesanas. Al efecto, en varias ocasiones al mismo tiempo, condiciones necesarias, fruto e tiempos duros, pero estaremos suficientemente me he dirigido con Cartas Pastorales para crear el imagen de la auténtica madurez cristiana. Así se entrenados y apertrechados. Los Apóstoles esta- clima y acompañar el esfuerzo de personas, Co- explican las vidas de los Santos, de tantas Perso- ban decepcionados por no haber podido pescar munidades y Grupos Apostólicos. nas Consagradas y de los Mártires que alcanzan nada en toda la noche. Pero aprendieron a echar una fecundidad y alegría inexplicable en el mun- las redes “en tu nombre…” y como ellos logra- Desde un primer momento centramos nuestras do. consideraciones en un trípode: SEMBRAR, CRE- remos la pesca milagrosa. La mano de Dios no se CER Y MADURAR. Estas consignas aludían a la 4. Madurez apostólica ha acortado en nuestros tiempos y en su nombre vivencia interior de cada uno, así como al camino Estas realidades están abiertas a nosotros. Nues- echaremos también nosotros las redes. indicado a las Comunidades de Vida Consagrada, tro Plan de Pastoral Diocesano nos exige la movi- Todos los hermanos somos convocados para pro- y a los Grupos Apostólicos. Pretendimos provocar lización de todos: pequeños y grandes, fuertes y tagonizar esta historia de la Iglesia: algunos fue- así la vitalidad de las Parroquias y el entramado enfermos, sabios e ignorantes. No es justo recibir ron llamados ya a la recompensa eterna; otros completo de la organización y el trabajo de toda dones de Dios y encerrarnos en nuestro “castillo proseguimos en la lucha fiel a favor de Cristo y su la Diócesis. Nos ha apadrinado sólidamente el personal”, enterrando los talentos. Cristo nos en- proyecto de salvación. Un camino de Dios y un Plan Diocesano de Pastoral, iniciado providen- vía a todos con los instrumentos que tengamos. sendero humano ciertamente memorable. cialmente hace unos años y hoy en plena eferves- No caben ociosos en la Viña del Señor. Los pro- 6. Pascua 2010 cencia y reclamo. gramas personales y aislados, ignorando a los de- más, traen la grave sospecha de un engaño. A las puertas del 50° Aniversario de la Diócesis, 2. Coronando la etapa invitamos a nuestros Sacerdotes, Personas Consa- En esta Carta Pastoral quiero referirme especial- Avivar el espíritu personal y colectivo, comprome- gradas y fieles a intensificar su vivencia cristiana y mente a la imagen de la MADURACION que, des- terse en la organización y comunión eclesial, han compromiso apostólico con el espíritu de la Pas- pués de la Siembra y el Crecimiento, ha de cualifi- de ser para todas las instituciones de la Iglesia la cua. La proclamación de la Palabra de Dios, los car y provocar nuestro estado de ánimo, las moti- tónica de este momento histórico. ejercicios de conversión y purificación, la renova- vaciones de nuestra Evangelización y la puerta de Así también las mismas Organizaciones maduras ción de los compromisos bautismales y apostó- entrada a la nueva etapa que comienza después se animan en su funcionamiento como fermento licos y el fortalecimiento de nuestra pertenencia de las Bodas de Oro. en la masa, luz en las tinieblas, sal de la tierra y y compromiso con la Iglesia Diocesana, etc. han El proceso natural de la Maduración indica el ciudad puesta en la altura (Cfr. Mt.5,13-16) para de ser programas intensos de la Pascua y las Ce- estado adulto y coronamiento de la vida. Es la guiar los caminos y la peregrinación humana. A lebraciones Jubilares que estamos proyectando. etapa de la plena conciencia, de la entrega a los diferencia de la naturaleza vegetal en su madurez, Gocémonos de las bendiciones de Dios y de la demás, del funcionamiento de todos los resortes, la persona y las Colectividades espiritualmente alegría que nuestros antepasados nos contagian etc. A la Maduración se le pide siempre el ren- maduras alcanzan una etapa que no caduca; es desde el cielo. dimiento máximo. Una persona espiritualmente más, abordan sucesivos estadios con creciente y Con el mejor compromiso personal, les envío a madura está centrada en Dios, como Principio permanente fructificación hasta alcanzar “el cie- todos mi bendición pastoral. y Fin; está en plena sintonía con el Corazón y la lo nuevo y la tierra nueva” sin fin (Cfr. 2 Pe.3,13; Obra de Jesús; y funciona con completa docilidad Ap.21,1-2). y eficiencia con el Espíritu Santo. Se derraman El espíritu misionero es inherente a la vocación Arecibo, 4 de abril de 2010 sobre él los dones y la fuerza del Dador de la Vida. cristiana; y los dones de Dios van creciendo en la Solemnidad de la Resurrección del Señor Así el creyente funciona eficazmente con las po- medida en que se comparten. De ahí también tencialidades del misterio de Cristo; y su misión que nuestros objetivos son todas y cada una de las personas, sin excepción: las queremos alcanzar + Iñaki Mallona, C.P. de santidad y apostolado reflejan la personalidad Obispo de Arecibo de Cristo Jesús. donde quiera que estén, en las condiciones que IM/sh sean; nadie es extraño a esta conquista. Cuando
Retiro de Emaús 5, del 23 al 25 de abril en la Parroquia Nuestra Señora de Fátima.
Invita la Comunidad Misionera de Villaregia 787-880-1603 / cmvar@libertypr.net