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TRES MONOS, PELICULA TURCA POR MARCUS TULIUS

Crítica en torno a lo mejor y lo peor de la Quincuagésima


Muestra Internacional de Cine organizada por la Cineteca
Nacional (Noviembre - Diciembre 2008).

Título original: TRES MONOS—


Üç maymun (Three Monkeys).
Dirección: Nuri Ceylan Bilge
Año: 2008
Producción: Turquía y Entidades Europeas.
Duración:
Premios: Mejor Director en Cannes 2008, Nominada como
Mejor Película Extranjera para el Oscar 2009.
Protagonistas: Yavuz Bingol, Hatice Aslan y Rifat Sungar.
Género: Drama

(Fotos: Logo de la Quincuagésima Muestra


Internacional de Cine, La excelente y
bellísima actriz: Hatice Aslan, el cartel
oficial del´film).

MARCUS TULIUS

Aquí hago una reseña de la película turca


TRES MONOS “vista desde México”.

Si hay algún género que no alcance a


manejar el llamado Nuevo Cine Mexicano
(NCM), es precisamente el Drama. Y digo
Drama, así escrito con mayúsculas como lo
presenta Tres Monos. Con esto, me refiero
a una historia en escena bien actuada y bien
contada como ésta que nos trajo la reciente
50 Muestra Internacional de Cine en
México.

Si usted lector, está cansado del cine gringo


y del NCM (donde abunda una búsqueda fallida de novedad que entrena sin gran éxito
la farsa, las historias jaladas y los discursos con mucho más abundancia de chingados
que de sustancia) donde los intentos de alcanzar las alturas del Drama quedan en
clichés enanos que casi siempre remiten al mismo tufo de origen: Tele-envicia o
Teleazquea, vea usted el cine de otras latitudes y culturas. Algo muy turco, por ejemplo.
Valga la comparación con Tres Monos para demostrar los males que todavía
caracterizan al NCM (dejando de lado los “progresos” en taquilla de esa industria):

En México el cine padece:


Abuso del diálogo y de mala música.
Gasto vacuo para dar chamba a las empresas “renteras” de los cuates, amigos y
compadres aunque no venga al caso.
Historias acríticas que aluden siempre a los temas del mismo sector social, por tanto se
el nuevo cine mexicano se convierte en un escaparate de la mentalidad pequeño-
burguesa superficial y pretenciosa.

Esas cosas que visten a la mentalidad condesera*, de ahí que su expresión caiga sin
variar en la farsa, el melodrama y los temas con limitación de miras.

Mientras en términos de Actuación… encuentre usted más de lo mismo y peor aún en el


nombre que usted elija de las “estrellitas” que padece el escenario nacional.

Viene entonces, la Muestra Internacional de Cine que nos permite voltear hacia un país
que tampoco es Primer Mundo, como México, pero.diferente por ser islámico y de una
cultura milenaria como Turquía, donde descubrimos una verdadera joya en Tres Monos
de Nuri Ceylán Bilgen.

En la película una familia queda reducida a Tres Monos cuando el padre entra a la
cárcel, la madre consigue un amante y el hijo adolescente mata a éste último para
salvarla caída moral del clan. En el caso de las mujeres adúlteras el Corán es explícito.

Las actuaciones y la ambientación son impecables. La sonorización es creíble y hasta


magistral (no tiene necesidad de utilizar un micrófono abierto con exceso de ruido
ambiental). En Tres Monos están bien incluidos el cantar de los gallos mañaneros o
ladridos de perros para recordarnos con acierto y sutileza la hora del día.

La fotografía aprovecha bien los recursos locales y aunque hay una costosa producción
detrás, de parte de diferentes entidades europeas del cine, ésta pasa desapercibida.

En la tragedia de Tres Monos, se siente un destino ineluctable y un cierto aire griego y


mediterráneo: El Estrecho del Bósforo y los barcos cargueros que cruzan el mar como
telón de fondo; El ruido del tren que precisa un drama familiar en un suburbio turco. Y
para llegar a su precaria casa vemos cómo deben cruzar los personajes por en medio de
ruinas ancestrales, posiblemente, de una fortaleza con cientos de años de antigüedad
otra vez como alegoría de una cultura que no cambia en siglos.

Por si estos elementos fueran pocos, cómo nuestra adúltera pasional ejemplar (Hatice
Aslan), el director Nuri Ceylán Bilgen hace un excelente equilibrio con diálogos y
sonidos exactos.
Inclusive la única canción que aparece en el filme es un fragmento muy bien ubicado en
la historia que funciona muy bien para dar una idea de cómo la protagonista es esa
mujer apasionada culpable de todo (ponga usted atención cuando suena el teléfono
celular de ella).
La sensualidad de ésta fémina entrada en los 40, es sutil y bastante creíble. La madura
Hatice Aslan desarrolla un ser de belleza enigmática que -no obstante- se enamora como
una quinceañera -sin pensarlo dos veces- de un hombre que es casi su antípoda: un tipo
mentiroso, corrupto y acaudalado que busca consuelo tras una humillante derrota
electoral.
El amante representa muy bien al papel del político que en nuestros días ya es casi
universal (y no solamente privativo de México). Un arquetipo de corrupción, vulgaridad
que contrasta con la noble mujer.

Quizá el título -Tres Monos- alude a algún pasaje del Corán ya que cada mono busca
tapar su espalda, evadir su responsabilidad moral y destino. No cabe duda que en el film
existe cierta moraleja implícita, pero podría pensarse que en el marco europeo puede
funcionar como un llamado de atención sobre la condición de la mujer en Turquía.
Caso que alenta el candente debate sobre la inclusión turca en la democrática Unión
Europea.
Pero Ceylán Bilgen es más ambiguo que esto y permite que -en cambio- en un contexto
turco, la película posiblemente justifique un destino trazado por la más dura de las
tradiciones patriarcales, aquella que castiga un acostón con la muerte.

Si quedó con ganas de más, el trailer de Tres Monos está disponible en la siguiente
dirección:

http://jp.youtube.com/watch?v=7wBznN7c8YE

* Condesero: Adjetivo peyorativo de uso común en el habla local referente al ambiente


baladí de la Colonia Condesa de la Ciudad de México. En este barrio proliferan las
agencias de publicidad, restaurantes caros, sinagogas y un sector yuppie que predomina
en la industria de medios de comunicación nacional.

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