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DIOS HABLA A TRAVÉS DE LAS ESCRITURAS.

TEXTO: 2 TIMOTEO 3:15-17.

A UN GRAN SABIO LE PREGUNTARON ACERCA DE LA EDAD IDÓNEA PARA EMPEZAR


A EDUCAR MORALMENTE A LOS HIJOS. EL SABIO CONTUNDENTEMENTE DIJO:
“20 AÑOS ANTES DE NACER,EDUCANDO A SUS PADRES.”

El niño,por antonomasia, es el símbolo más claro de la inocencia y de la gran capacidad para


absorber tanto lo bueno como lo nefasto. La gran importancia de los estímulos y de las conductas
de adultos son realmente moldeadoras del carácter aún tierno del infante. Su ansia de experimentar
hace que se construyan las primeras decisiones, no siempre acertadas, y por tanto el papel, sobre
todo de los progenitores, es clave para apuntalar unos principios morales que tomarán cuerpo más
adelante. De ahí la gran responsabilidad que los padres creyentes tienen sobre el proceso de
madurez espiritual de sus hijos. Si para los padres las Escrituras no son el centro de sus actos y
motivaciones vitales, los hijos no considerarán la relevancia que puedan tener en su crecimiento
como personas.

Muchas veces nos sorprendemos de lo rápido que aprenden conductas negativas, pero no nos damos
cuenta de que la naturaleza pecaminosa surge con más fuerza. Como padres hay que pone coto a
estas conductas, creando un clima de ejemplo a través de la enseñanza de la Biblia.

Para el pueblo judío era importantísima la enseñanza padre-hijo a través de la cual se imbuía el
respeto a Jehová y la obediencia a la Torah.

Timoteo es afortunado en este sentido puesto que sus familiares, a través del amor que sentían por
él, creyeron que lo mejor era inculcarle la obediencia a Dios.

Las escrituras nos hacen sabios, no en ciencia sino en discernimiento espiritual. El conocimiento
ciéntifico no clarifica el vacío existencial del ser humano. Puede explicar lo meramente material,
pero no discierne lo espiritual. Hay personas que son capaces de hallar en la Biblia hasta la fórmula
del huevo frito. La verdadera sabiduría estriba en asimilar lo bueno y rechazar lo malo, servir a Dios
y desechar el pecado, distinguir entre el bien y el mal. La sabiduría no se alcanza, se recibe.
Nosotros no somos los que la conseguimos, sino que Dios toma la iniciativa y nos brinda el gran
privilegio de conocer su carácter e imitarlo.

La sabiduría de Dios redunda en nuestra salvación, dada por gracia, no merecida al igual que el
discernimiento. Nuestro destino como pecadores es la perdición, el abismo entre nosotros y el
Señor. Pero Él nos tiende Su mano y amante nos salva.

La Salvación es el mensaje central de las Escrituras, y por lo tanto para conocer su alcance,
debemos profundizar nuestro conocimiento de las mismas.Esta Salvación se recibe por Fe en Cristo
Jesús. Conociendo a Jesús, sus hechos, su vida, implica conocer toda la Palabra de Dios ya que de
toda ella brota Su figura y obra.

v.16. Toda: No unos libros si y otros no. No sólo lo que me conviene.No únicamente el
Nuevo Pacto. Toda ella . No hay nada más fuera de ella. No podemos acomodarla a
nuestros intereses.
Inspirada por Dios: Dios habla.El Espíritu de Dios te habla. Quiere que conozcas lo que tiene que
decirte. Dios te habla Hoy. Cada palabra de la Biblia la puso Él ahí por una razón. Para mostrarte lo
importante que tú eres para Él. Para que veas lo que fue capaz de hacer para salvarte. Para que no
dudes. Para que conozcas la verdad. A veces es difícil percibir Su voz.Es más, a lgunos les gustaría
escuchar audiblemente a Dios, por que piensan que harían más caso, como si Dios se tratase de un
profesor encolerizado. Pero no es culpa suya. A veces cuesta trabajo creer en Sus promesas escritas
siglos atrás. Hasta que ves una cumplida en tu vida. Dios nunca dejó de hablarte. Tú dejaste de
escucharle. Dejaste de tener hambre de Su voz.Te saciaste de fábulas y filosofías vanas y aparcaste
Sus palabras. Te hastiaste de Él,pero él sigue siendo fiel y te espera. Espera a que vuelvas a coger tu
Biblia y comprendas que nunca debiste dejar de oirle. Su voz en ocasiones es suave, susurrante. En
otras es un trueno que sacude tu alma y deja al descubierto todo tu ser. Dios te habla a través de Su
Palabra, no para abroncarte sino para disciplinarte. No quiere que te quedes únicamente con lo bello
y lo hermoso. También quiere que sepas que las cosas a veces no son tan fáciles.

No seríamos capaces de vivir careciendo de muchas cosas: comida,bebida, comodidades. Unos días
sin ellas nos hacen sufrir. ¿Cuanto tiempo hace que no escuchas a Dios a través de la Biblia?
¿Cuantos días hace que no pides al Espíritu Santo que te guíe a través de las Escrituras?

La Palabra es útil. No solamente para nivelar mesas o muebles. No sólo para decorar nuestras
bibliotecas personales. La Palabra es útil, es eficaz. Todos buscamos la eficacia en las cosas: en los
insecticidas, en las medicinas que tomamos, en los ordenadores... (Hebreos 4:12)La Palabra es la
eficacia en su máxima expresión. No va a acabar con las cucarachas o los mosquitos, ni va a mitigar
nuestro dolor en tiempo record... Pero si que nos va a:

A. Enseñar: Nos va a mostrar respuestas a nuestras preguntas existenciales. Va a darnos luz acerca
de nuestras necesidades espirituales. Va a ayudarnos a ser como Jesús es. Va a darnos la base sobre
la que edificaremos el resto de nuestras vidas. Disipará nuestras dudas y a través de sus palabras
conoceremos al Divino Creador de todo. Pero no nos dejará a la deriva de nuestras interpretaciones,
sino que a través de las Escrituras nos mostrará cómo aplicarlas en nuestras vidas.

B.Redargüir,convencer: Va refutar el error y traerá claridad acerca de nuestra condición pecaminosa.


A pesar del paso del tiempo, los argumentos bíblicos aún siguen sorprendiendo a escépticos y
descreidos. La Biblia aún sigue demostrando y convenciendo a incrédulos. Sigue llevando a los pies
de Cristo a Tomases y Pablos. Sigue desafiando filosofías e ideologías. Sigue encontrando
espiritualidad dónde sólo hay raciocinio.

C.Corregir: Va a enderezar los caminos torcidos. Va a declarar la verdad ante la mentira de nuestras
vidas. Dios no nos dá por imposibles. Nos mueve al arrepentimiento, mostrando la insensatez de
nuestros actos. Dios escribe recto en renglones torcidos. Va a ayudarnos a renunciar a nuestros
desvíos para volver al camino de la salvación. Sólo Dios puede juzgar. Sólo Su Palabra habla clara
y contundente a nuestros corazones. Sólo a través de ella podemos rehacer nuestras vidas al lado de
nuestro Señor y Salvador.

D.Instruir en justicia: Va a mostrarnos cómo debemos practicar las virtudes. Va a afirmar nuestro
testimonio, impulsándonos a las buenas obras. Va a enseñarnos que debemos revestirnos de Cristo
para cumplir con Su Voluntad. Veremos cómo fuimos, cómo caímos y cómo Él nos levanta para
perdonarnos. Fijaremos nuestra mirada al prójimo, mirándolo a Él.

La voluntad de Dios es que seamos perfectos como Él es perfecto.No nos deben desanimar nuestros
pecados, nuestros errores, nuestras caidas. No podemos darnos por vencidos al ver una meta tan
lejana. Todo es posible. Todo lo es en Cristo. Debe ser nuestro anhelo más fuerte, nuestra sed de
parecernos a Dios en todo Su carácter. Debemos prepararnos para dar un testimonio fiel de Aquel
que nos llamó. El manual de instrucciones, nuestra brújula, nuestra lámpara está en nuestras manos.
No necesitamos más, ni nos conformamos con menos: la Biblia es Dios hablándote. ¿Qué te está
diciendo hoy a tí?

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