El lenguaje oral no fue el único tipo de comunicación que tuvieron nuestros antepasados, sino

aparte de ello, existieron otras formas de comunicación no verbal. Según numerosos estudios
y hallazgos arqueológicos y lingüísticos, confirman que los antiguos peruanos tuvieron
sistemas de comunicación, de transmisión de mensajes e información. Las feroces caras de los
dioses de Chavín, los maravillosos dibujos y los pallares pintados de los mochicas, los frisos de
los chimúes, así como los jeroglíficos gigantes y los ceramios de nazca, los dibujos de las telas
de paracas y tantas otras son ejemplos claros que muestran la verdadera expresión y el
sentido de su comunicación; pero aparte de querer comunicarse otra de sus intenciones fue la
estética en su arte mostrado.

El gran Mestizo EL INCA GARCILASO DE LA VEGA expresó en sus célebres Comentarios Reales
lo siguiente: “EL NUDO DICE EL NUMERO MAS NO LA PALABRA” (refiriéndose al quipu como
algo matemático, más no comunicativo). Realizando una comparación panorámica podemos
mencionar que, mientras que en Europa la información se plasmaba a través de la escritura
alfabética sobre el papel, los incas fijaban la información preferentemente con nudos en los
famosos QUIPUS y en forma de cuadrados con figuras geométricas y/o figuras estilizadas que
vendrían a ser los curiosos TOCAPUS en textiles.

¿Qué son los Quipus? Un sistema de registro de información numérico y mnemotécnico

creado por los Incas; constaba de un cordel horizontal del cual pendían varias cuerdas
delgadas trenzadas. Estas eran de diferentes tamaños y en ellas se habían ejecutado grupos de
nudos situados a intervalos distintos. Utilizaban el sistema decimal. El color de la cuerda
indicaba de qué se trataba la cantidad registrada. Este les facilitaba llevar un control de lo que
tenían, les permitía registrar su historia y les simplificaba operaciones que tenían que hacer.

¿Y, qué son los Tocapus? Como ya lo habíamos mencionado antes los Tocapus fueron figuras
geométricas plasmadas en telas de la época. Hasta ahora aún no se ha podido demostrar si
estos iconos fueron usados como un tipo de escritura. Eran bellamente decorados, con
inscripciones ideográficas que, probablemente, contenían algún mensaje o perpetuaban
algunas ideas o conceptos.

No hay que olvidarnos de los principales mensajeros del imperio incaico “LOS CHASQUIS”. Los
caminos del Tahuantinsuyo no fueron construidos ni para el uso de la rueda, ni para las pisadas
de los caballos, sino para los rápidos, ágiles y veloces chasquis. Cubrían siempre una distancia
aproximada de 200 km en condiciones adversas tales como la altura para cruzar la Cordillera
de los Andes. Llevaba siempre un pututu para anunciar su llegada, un quipu, donde traía la
información, y un quepí a la espalda, donde llevaba objetos y encomiendas. En la cabeza
llevaba un penacho de plumas blancas. Todos estos tipos de comunicación no hubieran sido
posibles gracias a los caminos, puentes colgantes, de madera y de piedra que permitieron así
la facilidad de transmitir el mensaje de una manera más rápida y eficaz.

Grupo 4: Omar Chávez Ventura – Carla Díaz Gonzales