En pos de la excelencia

Jenni tiene 12 aos y est

apuntada a un programa de
gimnasia de alta exigencia. Cuatro
veces a la semana practica al salir
del colegio; cada sesin dura
cuatro horas. Hace sus tareas
escolares en el auto yendo al
gimnasio y cena en el auto en el
trayecto de regreso a su casa.
Es lo que Jenni ha escogido. Le
apasiona la gimnasia y quiere
cultivar su talento al mximo. Ya
ha ganado medallas y estaba
considerada la mejor gimnasta de
su categora de la zona cuando se
inscribi en este programa
intensivo de entrenamiento. Su
objetivo es conseguir una beca de
gimnasia para cursar estudios
universitarios.

Unos meses despus de comenzar el programa, admite que es

duro. A veces se siente agobiada por la carga combinada de sacar
buenas notas en el colegio y al mismo tiempo progresar en la
gimnasia, o por la falta de tiempo para estar con sus amigas. Sus
entrenadores tienen altas expectativas para ella y esperan que
no se queje y persevere.
Por qu lo hace entonces? Por cumplir un sueo. Se ha
propuesto cultivar su talento.

Muchos de nosotros no tenemos la

capacidad para pujar de esa manera
en pos de la excelencia. Solo de
pensar en el compromiso, la
disciplina y el arduo trabajo que nos
exigira se nos quitan las ganas. Sin
embargo, todos tenemos
oportunidad de cultivar la excelencia
en nuestra vida, de desarrollar al
mximo nuestro potencial, de
sobresalir.
Si tienes un talento o una aptitud
que Dios te ha concedido, ejerctalo.
Cultvalo. Aunque ahora mismo no se
te ocurra qu uso le dar Dios,
puedes estar seguro de que al final
de tu peregrinar por la vida el Seor
te dir: Bien hecho.

Adapted from My Wonder Studio. Text courtesy of

Activated magazine; used by permission. Featured on
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