2a eee
xis
cone:
Nave
fey
ayy
ARCO
Una oposicién fue muy dificil, pero tuvo ese mérito
inolvidablerun pufiadode valientes surgidos de todas
tesek idable: un puriado de valientes surgidos de tod:
iP
do del estalinismo al trotskismo, del trotskismo
estalinismo,
En el momento de la eleccién, todo cuelga de ut
pelo, que se vuelve camello, y que vuelve a ser un pel
‘cuando las posibilidades de accién se ven rarificadas,
El mal causado por el estalinismo fue inmenso: en
su_seno hacer politica era ineluctablemente hace
‘qposicién,
Pensar y analizar el mundo era inevitablemente
hacer oposicion. La prasis, doblemente opositora, es-
taba condenada a la aniquilaci
La aniquilacién se prolongaba en el exterior de la
URSS. El monolitismo del partido condenaba las sec:
tas de oposicién adividirse, parcelarseenel incesante
esfuerzo por encontrar una via de accién. La enorme
presiGn del mastodonte dejaba detras de él la mas
horrible esterilidad: los opositores sobrevivientes se
vefan condenados a tascar el freno, ladrar a la luna,
La bestial realidad del estalinismo rechazaba tada
voluntad deaccién al puro «deber-ser»,latransforma-
baen humo... Entoncesapareeiael filésofo estalinista,
lisiado total, burlandose del trotskismo,cuyas piernas
se hallaban pulverizadas.
partes se turnaron por mantener la bandera desple-
Gada, Tnelinémonos:ontonces, na sdlpante esoahen
aitesa de len Davidovich Trott snd odie
ae
Pero, pormdsrarifieada que estuviera, la praxis no
fue imposible en el seno del estalinismo, ni, por su-
4
‘puesto, fuera de 61. Implicaba a Ja vez las estrategias
dle la resistencia, de la «espera» y de la «colabora-
cidn». Sus equivocos estaban determinados por las
‘eontradieciones reales. Mantenerse, resistir con toda
‘su alma la hibernacién estalinista, fue un combate
spiritual (stan brutal como la batalla de hombres,
como decfa Rimbaud) que salvaguardaba la posibili-
dad creadora de la accion,
La positividad petrificada
ylanegacién
Entre todas las leeciones de esta gigantesca experien-
Gia, hay que conservar ésta: Ta dialéctiea de la accién
jamas debe sobrestimar of Wrmino positivo en detri-
mento del negativo 0, reciprocamente, jamas debe
Subestimar el deber-ser en beneficio del hecho consu-
mado.
~ El papel motor no es sélo el del aparato del partido
del Estado, hay eficacia en la oposieién, euyo acoso
puede provocar modificaciones positivas, tal eomo un.
bombardeo de electrones puede modificarlaestructu-
ra de un nticleo atémico. Los marxistas de la épocs
estalinista quisievon ignorar el papel positivo de la|
iegacion la opostoan), Blestafinismo se volvio reac
ionario, colonialista eimperialistay, afin de cuentas,
inegativo, esencialmente porque se apoyaba unici~
‘mente en nuicleos «positivos» (el socialismo en un solo
ais, Ta destruecion de Ta eritica, el culto al hecho
Gansumado)Destruyendo iste, moral y politicamen-
te a los que ealificaba de sidealistas- (cuando no lesEl riesgo
yel principio de indeterminacién politica
Pormas completo que sea el dosiera partir del cual se.
vaa decidir, ese dossier no agota la realidad presente
¥y no puede indicar sino grosera, hipotétieamente, el
futuro, Las ciencias del hombre acaban de nacer y,
‘aunque fueran adultas, no podrian determinar auto-
ELEC- ) inaticamentela accion aemprender. Lapraxisrevolu-
GION ¢ cionaria depende de Ia teorin, del andlisis, ete, pero
Y _ \ depende, a fin de cuentas, dela acc na,
Ci “En toda accién hay eleccién y riesgo.
‘Aqui tambien encontramos temas archiconocidos:
mil veces seha filosofado sobre losriesgos dela accion,
peroesos problemas demasiado a menudo fueron des-
Viados por el egoismo existencial:el intelectual busea-
ba, en esenecia, demostrar vietoriosamente «su» liber
tad.
Me fe-) — Sielexistencialismo se hipnotizaen el -sujeto-dela
cin, jeremos mas bien considerar la accién
ENS! _aaanraae
(MIGMA” ~ Es claro que la accién comporta como primer riesgo
su propio fracaso, es deeir, no solo un intento inti,
7p. sino también la regresion, el desastre.
Riedoy ” Particularmente en la perspectiva revolucionaria,
Det FOX al riesgo de fracaso material se agrega el riesgo del
$0 || fracaso ético.
Th ildr del encuentro del deb
ee er-ser se disolver
DEbEe, tar el deber-ser a la realidad? ¢En qué medida transi-
S€@ | gir, sin caer en el oportunismo? {En qué medida re-
shazar transigi r nada
jejarse nar? Teoricamente nada nos da el
jnado limite derechazo el gradolimite de aveptacién
‘para actuar efieazmente, Cada situacién reclama su
(estrategia y su tactics.
No hay respuesta preparada (es decir, abstracta) a
sas preguntas, porque fa politica esa alavez el arte
{lel compromisb de Ta intransigencin. Nadie puede
testablecer el compromiso «tedricamentes posible, por-
{que los compromisos dependen a fin de cuentas de la
prictica. Nadie sabe de antemano todo lo que acepta-
‘ity todo lo que reehazaré. Lo veremos mas adelante.
De 1917 a 1921 Lenin mostré su intransigencia y,
ihdie6 en puntosinesperados, Bsquealgunas abdica-
nes son producto de la intransigencia y algunas
fhivaraigensies prviuctodelaabdleccn-
. a riesgo de no hacer nada o de
genalar-se prolongan en riesgo dialéctico.
Comolattalidarl esa resultante de fuerzasmalti-
ples y contrarias, como ninguna parte puede preten-
der encarnarla durable y totalmente, eomo en cada
parte actiian tendencias progresistasy regresivas,n0
hay politica que no lleve en ella misma su contradic-
tin, Podemos decir incluso que la contradiecién es la,
{ondicion misma de Ia elecién pol
Los duros, ls terribles problemas précticosse reve-
Jun en las condiciones de rarefaccién extrema de la
tecion: el eampo de concentracién. Como lo mostr6
Rousset en Les sours de notre mort (Los dias de
uestra muerte|, el rigor tltimo de laeleccién politica
tnparece en el mundo de los campos de coneentracién.
Luchar contra las SS era, finalmente, entrar en st
a
sgomaicrial y elriesgo éticoque acabamos ded pig 9b
Pret DiC.
ieeO
Tico ~|
2h COM
ion |conferia ta negatividad suprema, lade traidor y de
espa) el estalinismo se volvisel mks prodigioso idea.
10 de toda la historia humana, porque quisoexpul-
sarlahistorindes sistema, Eleristianismoviveenel
tiempo,en a perspoctiva dljuicio final Bl estalinis:
mo pretondierigt un paraiso perpelo: no podia ser
‘nde gop fiom
El sistema se vuelve fascista exactamente en la
medida en que califica de Tasesta todo termino de
evalucién, tao movimiento esponténeo, Bee deseode
44 0 crantoncr la posteldad amalawien pide poral
S74) nico medio posible que pueda detendr la historia
v(pép\ aniquilacién de las masas y de los individuos, de!
cra coigelar Ta =positividad en pebrifcacién
4iyis? Lapositividad estalinistase nos apareciaen primer
A gana secre
iq) wa ona tonteta es ebopo a poolvdad es
Neg) negatividad transforma las cosas humana eh pie
+iviyp) dras. Bs Ta obra cara de la muerte.
"Por eso, huostras areas polices posiivas-consis-
tenen reanimar, protege, salvaguardar la negaivi.
dad, acritica,laoposicon’laminoridad. Nose puede
confundir faieciaypostividad. Hay qus demmeret
tarel aparato del partido y del stadoy, si eso noes
pasibl, hacerlossaary forjarotroparto, ota Esta.
fo, en los que la negatividad tenga lugar,
Reintroducir la diléstica de a vida Ia prasia, sig:
nile tambisitrestablecer el-rewgo de Tada, de a
praxis. El tiempo, por lo demas, trabaja por la vida.
mnomias saben que eu prdmide se rosquebrajay
que habré qoe afontar el gran dla?
El gran arte, el nico arte
La accidn esté siempre acechada por el fracaso, 0,
mejor, no es mas que una sucesién de fracasos inte-
rrumpidos por un éxito, como, segiin parece, entre las
ballenas hay innumerables coitos para una sola inse-
minacién. Y también innumerables inseminaciones
para un solo nacimiento einnumerables monstruos pa-
ra un pequeti dionisos
Hubo entonees apuestas, caidasyensayos, errores,
fracasos, locuras... El mundo de a pottica no es e
¢ldel pensamiento, queborra ysuprimesushipdtesis,
callasus suefosysusdeliris, Esel universode as uip-
iuras y de Tos conilictos, de las tensi
Volunéadesy las determinaciones, de lasapuestasy de
fos juegos en los que se juega con los pucblos, Ta
inuert, lasbombas-Y.sinembargo-no cedoloal man.
dlodelruido y del furor. Bs ef mundo del triple riesgo:
‘material, eticoydialéctico, Esos tres riesgos nose dan
juntos oparelelos sino en relacionesinversas eincier-
tas. Bloquean el pensamiento que querria la srecetay
dela accién, ante una especie de principio deindter-
minacién politica, Elobservador nunca puede conocer
l punto exacto de encuentro entre loreal y el deber-
ser, entre Ia teoria y la préctica, lo positive y lo nega-
tivo, Nunea puede dominar a I vez los dos sisternas,
eldeladeterminacién yel del deber-ser, yel control de
tna de las coordenadas exeluye el control de la otra
Se trata del salto en la indeterminacion. Ese arte,
carte del compromiso, el arte dela intransigencia y
‘lelatransaecién, Proeede, como todoarte,neluyendo
¢! arte cientifin, por ensayo y error. Pero sus saltos
a7toseos, su comienzos bruscos, aplastan hombres ¥
pueblos, deseneadenan oseuras locuras. No puede ser
de otro modo y debe ser de otro modo.
‘La politiea es el arte mas barbaro de todos. La
Justicia penal ya es muy barbara. Pero no pena de
‘muerte sino por un asesinato cometido, La polities es
todavia mas barbara: mata por nada, un vago peligro,
tuna preeaucién. Lo que ella cree que es una precau
No ha superado el estadio totémico, es la cosa
mas atrasada que existe en nuestras vidas civiliza-
das, siempre produce «monstruos, segtin el decir de
San Justo. No hace laltanada para que el arte politico
se degrade en carniceria: el asesinato politico no es
tuna de las bellas artes.
Pero la polities, por mas asqueante que sea de icor
y de sangre y del pus amarillento de la bestia, 8,
igualmente el vinien arte, el gran arte. Hoy todas las
otyas artes se agotan, se callan, se transmutan en
ciencias ose reconvierien en magia infantil. Lasartes
comercializadas son grises y monétonas, no sirven
jue para divertirnos. El profundo arte politico,
aque juega con nuestras vidas en un juego necesario y
atento, exige artistas de una pacieneia y de una in-
transigencia prodigiosa, deuna bondad infin... Los
primeros superhombres... Arte fascinante del que se
puede hablar sin deseanso, sin jamas encontrar el
mediodeactuarcorrectamente... Arte que, después de
hhaberse arraigado, eseapa a la especulacién contem-
plativa
Claro que, por la propia urgencia, se pueden levan-
tar sistemas de control politico, eontrapesos al poder,
‘apa eon el cemento de las instituciones las brechas
48
cnormes por las que se difunié el eatactismo estali-
nista, Debemos concebir sistemas de equilirio para
impedir sus deliros. V hay un arfe en el eontrol del
arte, es decir, un arte democratico, el arte de hacer
‘experimentarlos pueblos lo mejor de ellos mismos,el
tile de hacer ctudadanos.
Pero el papel motor de la direccién politica -el arte
navegador y ereador~ no conoce recetas. Todavia no
existe una sintesis» en ese dominio, Sino luchas y
esfuerzos por conduei'con mas eonciencia las sociea-
des humanas.
Deshielo politico
ydialéetico
‘Coma el deshielo politico comenz6, ahora puedo ver
mo fue congelada la dialéctica.
La dialéetica habia nacido parcialmente amputa-
da:ignoraba a realidad semiimaginariadelhombrey
dospreciaba el deber-ser. Fue atrofiada; esterilizo la
negacién y en consecuencia ademas petrified la positi-
vvidad, Fue mitificada: inf16 como un glaboel momento
de lasintesis, Por haber despreciado el deber-ser con-
fundi6su propio deber-ser, el hombre total y el univer-
sal conereto, con larealidad. Se aterrorizédesu propia
fancién, que es pensar y producir el devenir. jLa
dialéetica se fetichizét
El deshielo dialéetico concierne directamente a la
praxis. Nos permite liberar las Iimeas de fuerza para
‘una actitud politica viviente.
49Esa actitud debe determinarse en dos planos, indi
viduales y eolectivos, cuyas contradieciones ya se hat
seialado, |
Enel planoindividual,el divorcio entre pensamiens
to ¥ accién en alguna medida puede dominarse; el
ensamiento expresado va es una forma de accion yla
‘accion reflexiva supone el pensamiento. Se trata, por’
consiguiente, de decir todo, de no transigir con los
prineipios universalizantes que controlan toda politi«
ca sovialista, El sectarismo de la accién y eleclecticis-
mo del pensamiento dlaléctioo deben entrepenetrar-
se, in preteneder jamais fundirse en una sintesis per-
manente. En consecuencia, cada uno debe afirmar
su deber y su esperanza de ser «total» y activo», sin
dejarde permanecer consciente de las contradieciones
implicadas. En.una palabra, eadaunodebetenderala
superacién permanente que es la praxis (equivalente
psicolégico de la revolucién permanente), pero sin
dejarse «superar» por la euforia, a ingenuidad o el
orgullo,
En el plano de los problemas generales, de ahora en
aidlante se pueden proponcr los prinepios de una
reoxigenacién de Ja politica marxista.
1) La nueva politica debera fundarse sobre un and-
lisis también nuevo del mundo y, con urgencia, sobre
las transformaciones historicas (sociales, econémicas,
politicas, psiquicas) acontecidas en el sigloxx, El mar-
xismo ritual y escoldstico mata todo lo que toca. Hay
que condenarlo a muerte.
Una teoria adecuada de lo real resulta indispensa-
50
qeckit
pa. eslareeer al maximo algunas de as sleso-) arecu
janidamentales: no ya la primera cleecion dé la Yng DE
afirmacion del Horabre por el Rombre, sino Tis (17 0282
amet de plea, de estravopiay deaccion quent
Dy Lad exigenvias de «democratizacion, de slibera-) 920
iacions, de sindependiencia nacional- hoy expresan (G47/ -
resistiblemente las necesidades mismas de la vida, \=AeN,
saben esac dela
Je lo positivo y lo negativo. La salvaguarda de lo nega-
fivoavha vuelto una exigenctanstituctonal absoluta
Pntorees podsianplantears las eleceiones entre las
Mheromes de derechas centrist» o de waguierda»
Esaseleccionesseran colectivas, decisivas, aleatorias.
Pero ya es posible discutir alli las condiciones, entre
fhivaradas-entrehermanos aplastadoshty por King:
Rrongs mecanizadee, pero hermanos de millones de
Gpvintlos que un ae retomarén la palabra y Jas
tings, La ceoncia del soctaliomo eslaigualdad ques PESEVC#
tna ac tmnponea través de las atime del despe- (Pee
cio, de Tamentira y de la Fuerza, no para la realizacion socit-
det hombre total sino para el progreso de un hombre )4/sio
on devenir,
{Texto originalmente publicado en el revista Arguments, de
llitionsde Minuit(n*7, abril-mayode 1958)yactualizadoporel
tutor para fa presente edicin.]FRAGMENTOS
PARA UNA ANTROPOLOGIATodo lo que pretende explicar es lo que deberfamos
tratar de explicar.
@
Marx habia visto que las cosas sociales eran energit
humana petrificada y, recfprocamente, que las en¢
fas eran cosas sociales en vias de constitucién o de
desintegracién. Un problema central de la historia
sociolégica pasa a ser mostrar eémo la energia se
‘vuelve cosa (masa enelssentidofisico, institucién enel
sentido sociolégico):1a Historiaesel poloenergético,la
Sociologia el polo estructural dela nueva y verdadera
iencia: la antropologia genética.
°
En el Manuscrito econémico filosofico de Marx se
encuentran las bases de una teoria dela relatividad
restringida, es decir de la relatividad reefproca en-
tre el hombre y la naturaleza, la historia natural y
55la historia humana (ola historia es la misma... la
transformacién de la naturaleza en hombre, Las cien-
cias naturales abarearin la ciencia del hombre, asi
como a ciencia del hombreabarcard las ciencias de la
naturaleza...») de la relatividad reciproca individuoy
sociedad, de la relatividad reefproca masa social y
energia historiea. Para llegar a una eoneepeién de la
relatividad generalizada falta:
a) relativizar el devenir mismo: el Tiempo;
b) relativizar lo real mismo. Marx: Einstein inaca-
bado,
2
Hoy, la antropologia no puede arreglérselas sin una
reflexion sobre:
1)el principio de relatividad einsteiniano;
2) el prineio de indeterminacién de Heisenberg;
3) el descubrimiento de la «antimateria» desde el
antielectrén (1932) hasta el antineutrén (1956);
4)la cibernétiea, la teorfa de la informacién;
5)la quimica biologica;
6) el concepto de realidad.
Todo lo relative al hombre nos revela ala ver. tanto
alhombre en movimiento como al hombre permanen-
te, Al hombre diverso y al hombre uno.
Elmisterio dela interioridad del hombresehallaen
sus obras, sus mitos, sus proyecciones. Busearel inte-
rior en lo exterior,
56
Habria que mostrar que hay menos materilidad
en'lo eal Lo que parece, ms de realidad en la
(Maginacin deloquece cree, comese aereamieno,
Intctar cansiderar ca material eomen: la realidad
humans
e
No es el suefo lo que diferencia el dormir de la
vigilia. Se suena tanto y més en pleno dia. Pero,
dhrante la vide diuena, los suetios se enredan con la
actividad practica, Su fantasmalidad se ordena en
Uisenode loreal: asi, nuestra personalidad se halla
estructurada de modo semiimaginario; nuestras
religiones, nuestras fes, nuestros valores son pro-
Seocionee vividas préeticamente;el Estado, la Pa-
tria no existen de modo sensible sino que se mani-
fiestan de modo sensible. Nuestrasideas son fantas-
‘mas, pero suprimamos los fantasmas y lo real se
disuelve. Digimoslo otra vez de otro modo: «el uni-
verso noes real, sino saturado de valor» (J. Gabel).
e
Precisamos nuestrasideas como los primitivos prec-
saban sus fantasmas, precisamos nuestra personali-
‘dad como los primitives precisaban su «doble». Siem
pre precisamos un poco de magia para vivir como
hombres,
eLoreal no es tanto un hecho como una idea reificada.
La reificacién de lo real constituye uno de los funda
mentos de nuestra civilizacién del siglo xx. Es signifi-
cativa de Ia magia moderna. No podemos mas que
reducir esa reificacién, pero no abolirla: no podemos
vivir absteniéndonos verdaderamente de la idea de
real. La reificacién forma parte constitutiva de la
experiencia humana como experiencia de lo real. Hay
un nticleo de magia que no podriamos destruir sin
destruir la propia razén,
a
‘Vivimos en la época triste de las ciencias humanas: el
hombre cortado en rodajas. Lo que hay que lamentar
noes la matematizacién ni la estadistica sino la atro-
fia del espiritu de hipstesis. Las hipétesis se arras-
tran, exangties
Peroconsideremos mas bien la investigacién en las
ciencias fisicas; alli la ciencia es poesia, desreifiea lo
real, relanza como hipétesis los suefios mas fantasti-
cos, verifica las mayores audacias del espiritu, se
abalanza sobre lo imposible.
e
Losprudentesnosadvierten queno generalicemoslas
nociones elaboradas por los especialistas. Pero ¢noes
necesario intentar hacer salir las ideas de su eapara-
z6n, hacerlas circular, desplegarlas en los horizontes
dereflexién? Nuncahay que renuneiar a intentaruna
58
antropocosmologia a partir de los fragmentos disper
sos del saber,
e
»tamos abtiendo sobre el hombre modern as
{nes elaoratisa para del hombre ean, Se do
un gran paso hacia adelante desde el punto de vista.
dal nit’ Povo es el conjunc de esthuctaras 9 do
pracatslamados magic lo que se puede y debe
Teeonoerenelhombretaderneen formas
ten claro, Se eencontrarian ai slgunos delos gr
(ectemasdelpicoandlissceningeascoveras del
ana
2
i de conciencia
La thayor parte de nuestros estados nei
son estados de semisimulacién, de semiposesion
Fepresentamos una comedia sincera y somos moxi-
dos por fuerzas que se nos escapan: muy a menudo,
sinceridad y mentira, conviceion y duda, honesti-
dad y engaiiono pueden ser aislados absolutamente
como cuerpos pures.
«En mi hay algo que no soy yo y que me empuja»,
dice el poseso, Todos estamos imantados, unas extra-
jas limaduras, y los Grandes Imanes invisibles nos
perturban, nos agitan, nos inmovilizan.
*
59Aplicar a nuestras experiencias (fildsofos y poetas ya
Iohicieron) este propdsito de Lupasco sobre la miero-
fisica: «Nadaes de una actualidad fundamental... pero
nada es tampoco tna pura virtulidad atta de
irrealidad», a
Precisamos conceptos polarizantes que delineen It
neas de fuerza y no conceptos espacializantes que
encierren un dominio. Conceptos que hagan jugar las,
relaciones y no que aislen esencias. Conceptos que
unten los contratios y no que eseondan a eontraie-
e
Los mitoe aparecen con el hombre y acompasian al
hombre. a stuacion del hombre, contradicetin entre
In afirmacion del individeo 7 las coneriones dela
especio, de la muerte, de la Sodedad sin duda ha
ened mits near para vi. hambe
viveenvuellopor fantasmas,Lamegiaesinseparabl
desuvdaafeetivay desu vidarecional Sileneurens
ts setae d/esleyeasierieauiarie pce
ponde a una inadaptacion profunda, entonees todo
nos dicequeclhombreesestructuralmenteneurdic,
3 qu equclle que'layataiagin denon aeurocie 7
{inl secu nero paacetcangenren unrmran de
E geen senronts pete
e
falta de modelo, un tipo dehombreseriami ideal. Su
jilibrio se modifica, se destruye y se reforma en el
:mpodebatalla de lascontradicciones. Noquiere de-
jar el terreno de las contradicciones. No quiere expul-
jar lo negativo del mundo, sino participar de sus
‘onergias, Noquiere destruir lo positivo, sinoresistira
Jn petrificacién, No quiere huir delo real ni aceptarlo,
pero querria que lo real se transformara y puede ser,
espera, que un dia se transfigure. Se esfuerza por
volver ereadora en él la lucha de los contrarios.
Para él tragedia y comedia, epopeya y farsa se
hallan presentes en cada instante.
‘Se sabe inseguro, peculiar, pero lo que siento es la
miseria universal de cada uno y no la soledad. La
soledad es el dolor de cabeza del mundo burgués.
Ese hombre no odia nada ni a nadie. Sus dos pasio-
nes son el amor y la curiosidad. Su curiosidad es una
‘energia sin fronieras. Sus amores nose excluyen ni se
aburren.
Ese hombre adulto es a la vez muy viejo, niio y
adolescente, Esta siempreen formaci6n. Se obstinaen
Dusear el mas alla.
iAforismos pablicedos originalmente conel titulo de Fragen:
tos de una antropologiay en la revista Arguments (n* 18,
{Homme probléme>, 1960) en Editions de Minuit)