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Septiembre, 2001
2
Sumario
Comentarios finales
Anexos
- B) Cuentos recomendados.
- C) Bibliografía.
3
Los registros de clase y los relatos que se presentan en este documento pertenecen a docentes que participaron del
Curso de Reconversión Docente – Didáctica de la Lengua - Tercer Ciclo – Año 1999 - Universidad Nacional de
Tres de Febrero – Pcia. de Buenos Aires. Equipo de profesores: Siro Ana – Bogomolny María Inés – Gariboto
Estela - Grunfeld Diana – Lobello Silvia.
Los integrantes del Gabinete Pedagógico Curricular de la Dirección de Educación Primaria agradecen a la
Universidad Nacional de Tres de Febrero, especialmente al Prof. Gabriel Asprela y a todos los docentes
participantes. Los testimonios y registros que se exponen en este documento pertenecen a: Alejandra Alvarez,
Verónica Auletta, Patricia Gómez, María Isabel González, Paula Illuminato, María del Carmen Pala, Aída
Santoro, y Adriana Sirna.
2
Petit, Michèle (1999) Nuevos acercamientos a los jóvenes y la lectura. Fondo de Cultura Económica. México. Pág
82.
4
nuevos sentidos sobre la vida y sobre nosotros mismos. “El arte nos ayuda a
entender la vida. Pero no porque los cuentos digan de otra manera ciertos asuntos
o expliquen con ejemplos lo que nos pasa sino por las consecuencias que trae
habitarlos, aceptar el juego. Por esa manera de horadar que tiene la ficción. De
levantar cosas tapadas. Mirar el otro lado. Fisurar lo que parece liso. Ofrecer
grietas por donde colarse. Abonar las desmesuras. Explorar los territorios de
frontera, entrar en los caracoles que esconden las personas, los vínculos, las
ideas”.3
Existen cada vez mayores acuerdos en considerar que no se trata sólo de que
los alumnos obtengan conocimientos acerca de la literatura, sino que la escuela se
convierta en un ámbito de experiencia con lo literario. Graciela Montes en La
Frontera Indómita habla de una vinculación profunda, no susceptible de separación
entre “mensaje” y “estética del decir” a través de la experiencia, donde no importa
tanto el contenido ni la forma por sí mismos, sino lo que a cada lector le pasa
cuando transita la ficción.
"Me han pasado cosas muy bellas; en una oportunidad en la que tuve que
retirarme un rato antes, dejé la llave del armario en manos de una alumna. Una
chica muy tímida que participaba poco o nada de los debates. Cuando le
recomendé que al día siguiente no faltara, o si tenía que hacerlo se ocupara de que
alguien hiciera llegar la llave, me contestó: ‘Ni loca falto mañana, no me quiero
perder el cuento’. Otro alumno me preguntó si los padres no podían venir alguna
vez a escuchar los cuentos. Quedamos en organizar un tallercito abierto después
de las vacaciones. Y lo que realmente me resultó fascinante, fue cuando Antonella,
que se mudará a Villa Ballester después de las vacaciones, se acercó durante el
5
Montes, Graciela (ob.cit. 55)
6
La producción de reseñas puede abarcar otros textos leídos por los alumnos
o por el docente fuera de la situación de estudio de un autor determinado. La
escritura de reseñas implica haber participado de múltiples situaciones de lectura y
comentarios acerca de las obras leídas. Supone también un contacto necesario con
reseñas escritas por profesionales que se encuentran en las páginas de los
periódicos y de las revistas de actualidad, en revistas especializadas, en catálogos
de las editoriales, en solapas y contratapas de los libros. Esta propuesta demanda no
sólo la lectura de textos sino tomar posición ante ellos, es decir, asumir una
opinión personal. Los alumnos tienen que resolver cuáles son los aspectos más
relevantes de la obra que no se pueden omitir y cuáles sí para generar deseos de
leer el libro, a través de qué recursos sostener el interés del lector, evaluar la
adecuación del escrito en función de los potenciales lectores. De este modo,
profundizan sus criterios de selección y efectivizan una toma de distancia de las
obras reseñadas. Es necesario volver sobre los textos leídos una y otra vez con la
mirada de quien tiene la responsabilidad de escribir para generar inquietud en otros
lectores. Mientras atraviesan este proceso de producción y relectura, los alumnos
profundizan una crítica mirada personal acerca de lo literario.
La lectura en voz alta requiere también del docente una actitud protagónica.
La lectura en voz alta por el docente es una situación didáctica a través de la cual
se “muestra” como lector. Esta práctica de lectura, especialmente valorada en los
inicios de la escolaridad, tiene el propósito de ayudar a los alumnos a transitar el
mundo de la ficción. Como señala Graciela Montes7... “El acto de contar enseña a
entrar y salir de la ficción. Ambos –el cuento y el contar- son solidarios, se
necesitan. Por un lado está el cuento –supongamos que un cuento de autor, el
mundo imaginario que construyó, palabra a palabra, cierta persona en un cierto
día-, y por otro está el contar, el pasaje de ida y vuelta a ese mundo que otra
persona, en otro cierto día, construye con dos ingredientes fundamentales: su
tiempo y su voz. Y eso es básicamente así siempre, aún cuando se haya pasado de
la audición de cuentos a la lectura: el lector le sigue prestando su tiempo y su voz
interior al cuento, y sólo en ese tiempo el cuento vive...”.
7
Montes, Graciela (ob. Cit. 47, 48).
9
8
Bernard es el apellido de ficción de un maestro entrañable de Camus, el señor Germain.
11
que usted puso en ello continúan siempre vivos en uno de sus pequeños escolares, que, pese a
los años, no ha dejado de ser su alumno agradecido.
Lo abrazo con todas mis fuerzas.
Albert Camus9
"–Por favor, profe, queremos que le digas a la profesora de octavo que nos
trate como a verdaderas personas y nos dé este espacio como propio.
9
Camus, Albert (1998) El Primer Hombre. Tusquets. Barcelona.
12
Instalar este espacio de lectura en forma permanente durante el año -tal como
lo testimonian los alumnos de Verónica- multiplica las oportunidades para que todos,
a su manera, profundicen su vínculo con el discurso literario y configuren su propia
“hoja de ruta” como lectores en función de sus preferencias.
Otra docente, Aída, comenta una clase en la que sus alumnos le solicitan la
relectura de un cuento10 . Al culminar la lectura, por tercera vez, la expresión de
uno de ellos sintetiza aquello que ha logrado comunicar a través de su voz...:
“Nunca seño, nunca un cuento me había atrapado tanto. Mire, tengo la frente
mojada...”. Aída, cautivó a sus alumnos a partir de una preparación cuidada del
momento de lectura. Tiempo después, una recomendación escrita sobre el cuento
rememora el impacto de aquella experiencia...
10
Una vendetta de Guy de Maupassant (ver en el Anexo el apartado “Cuentos referidos en el documento”).
13
El impacto de una obra sobre los lectores depende –entre otras cosas- de la
forma en que se entra en contacto con ella, de la manera en que la escuela propone
acercarse a un autor, a un género, a un estilo. La valoración de las obras puede
comenzar en el aula a partir de la actitud de un docente, a través del entusiasmo de
un grupo de alumnos, pero puede consolidarse y extenderse si se asume como un
compromiso institucional.
14
11
La idea de la descripción de una situación didáctica de lectura habitual por parte del docente está inspirada en la
que se presenta en el Documento de Actualización Curricular - Área Lengua – EGB - Nº 2 (1996) Municipalidad de
la Ciudad de Buenos Aires.
15
Marco Denevi, a partir de una sátira del cuento de Jacobs, retoma el tema del
final de la obra, ironizando el papel de los lectores que no toleran las ambigüedades.
En la sátira se recrea el cuento de Jacobs a partir de una obra de teatro en la que un
espectador exige a uno de los actores que defina con claridad el final inquietante:
"... Una de dos: o la pata de mono no tiene poderes mágicos, y entonces las doscientas libras
fueron pura casualidad y los golpes en la puerta era el viento, o sí los tiene y la señora White, al
abrir, se encontraba con su hijo sano y salvo. [...]
-Disculpe, pero el autor quiere que las dos versiones, la fantástica y la realista, sean
igualmente válidas y que el espectador elija la que más le guste. En la versión que usted propone eso
es imposible. [...]
-¿Qué el espectador elija? ¿Qué espectador? Yo no quiero elegir. Quiero que sea el autor el
que tome la decisión...".
12
Para que resulte posible comprender el análisis se sugiere la lectura previa de los relatos. Ver en el Anexo el apartado
“Cuentos referidos en el documento”.
13
Para una mayor comprensión acerca del origen y desarrollo de los cuentos ligados a los tres deseos consultar el
Prólogo de la Antología de la literatura fantástica de Borges, J. L; Ocampo, S y Bioy Casares, A. (1965 - 1992)
Sudamericana. Buenos Aires.
16
define como un discurso “... que se propone corregir los defectos humanos con
auxilio de la risa que se suscita por el hecho de ponerlos en ridículo...”14 . Se orienta
hacia aquellos comportamientos establecidos y aceptados para determinados grupos
sociales en un contexto histórico específico. Ironizar estos comportamientos
constituye una transgresión, una irreverencia Por ejemplo, Denevi exagera la
intolerancia del espectador de la obra frente a la ambigüedad del final hasta el punto
de asesinar al actor que se niega a transformar la obra de Jacobs. Esta exageración es
la que causa risa y enfrenta a los lectores con sus propios comportamientos.
Descentrarse del rol de lector y poder reírse de sí mismos implica comprender el
doble mensaje de la ironía.
Estos dos cuentos en torno a la misma historia brindan además otras opciones
de análisis: el ritmo narrativo y el narrador.
Hay en todo relato un doble manejo del tiempo: el que corresponde a los
sucesos narrados, denominado tiempo de la historia y el que corresponde al plano
del discurso, denominado tiempo del relato. La relación de duración entre historia y
relato da lugar a un elemento muy importante que es el “tempo” o ritmo narrativo.
Esto tiene que ver con lo que dura la historia que se cuenta considerada
cronológicamente y la longitud de lo narrado (líneas, páginas). Por ejemplo, en el
cuento policial la demora en explicar el misterio se utiliza para generar curiosidad; en
cambio en el cuento fantástico la demora para explicar el misterio no es necesaria
pues el hecho de que aparezca un elemento misterioso en un escenario habitual es
suficiente para provocar la curiosidad del lector.
narrador menciona no conocerlo “...adaptada para el teatro por otro señor Marco Denevi, a
quien conozco menos...”, luego lo califica de “cómplice” de Jacobs al haber sostenido en
su obra el final de la historia original y finalmente acusa a ambos de engañar a los
lectores “...todavía no ha comprendido que Jacobs y Denevi lo han engañado.. No se deje manejar
por esos dos canallas...”, “...Quizá, la primera vez, se había prestado con inocencia y temor a las
maquinaciones de los dos granujas de Jacobs y Denevi...”. Puede resultar un desafío para los
alumnos identificar las voces que aparecen en ambos relatos. Es posible que para
muchos resulte un problema descubrir que ni Jacobs ni Denevi representan voces a
pesar de ser nombrados. Cuál es el sentido de la presencia de Denevi en el interior de
su propio cuento. Cuál la diferencia entre autor ficcionalizado, autor real y narrador.
Estas cuestiones pueden ser el punto de partida de una búsqueda de información, de
un intercambio y profundización sobre el tema.
16
Borges, J.L; Ocampo, S. Y Bioy Casares, A en el Prólogo de la Antología de la literatura fantástica mencionan una
anécdota interesante referida a este hecho y que se vincula con el comportamiento de los lectores frente a los finales
abiertos que después Denevi retoma en su sátira..
17
En Las mil y una noches se registra la primera referencia escrita del cuento de los tres deseos en el que las
consecuencias del pedido de los dos primeros obliga a los protagonistas a utilizar la tercera posibilidad para solicitar
una vuelta al estado inicial. Por lo tanto el temor por las consecuencias del pedido de los deseos está vinculado a este
antecedente. A su vez, se menciona la costumbre árabe de recibir y entregar las cosas con la mano derecha ya que
hacerlo con la izquierda constituye una ofensa. Por otra parte, las invocaciones divinas se realizan en voz alta, solo
los magos que practican la hechicería las susurran.
18
que tiene que decir...”18. Reflexionar con los alumnos acerca de las razones literarias e
históricas por las cuáles una obra ha llegado a constituirse en un clásico es una
manera de comprender mejor el funcionamiento del discurso literario en la historia de
la cultura escrita.19
Analizar con profundidad los cuentos para seleccionar adecuadamente los que
serán leídos a los alumnos, no significa que en el espacio de intercambio posterior a
la lectura deban retomarse todas y cada una de las complejidades que presentan los
textos. Es importante tomar esta previsión para anticipar las posibles formas de
orientar el intercambio. Después de un análisis de las complejidades seguramente será
más fácil seguir el razonamiento de los alumnos, captar con flexibilidad la posible
conexión de sus interpretaciones con algún aspecto de la historia o reorientar la
discusión en función de los aportes del docente. De todos modos, siempre se produce
una tensión entre garantizar una experiencia de lectura vívida y un intercambio
comprometido para profundizar el conocimiento sobre el discurso literario. Se trata de
dos aspectos de un mismo proceso que en la realización efectiva resulta difícil,
aunque no imposible balancear.
18
Calvino Italo (1991 – 1999) Por qué leer los clásicos. Tusquets. Barcelona.
19
Los textos van construyendo su propio camino en la historia de la cultura. Sobre las versiones vinculadas con la
pata de mono en la Antología de la literatura fantástica (ob. cit.) se menciona que desde hace más de diez siglos
circulan las primeras versiones escritas de los tres deseos. En 1902, W. W. Jacobs, autor de sketches humorísticos, logra
una versión trágica admirable. En esas primeras versiones “... los deseos se piden a un dios o a un talismán que
permanece en el mundo. Jacobs escribe para lectores más escépticos. Después del cuento no continúa el poder del
talismán (era conceder tres deseos a tres personas y el cuento refiere lo que sucedió a quienes pidieron los tres últimos
deseos). Tal vez lleguemos a encontrar la pata de mono –Jacobs no la destruye- pero no podremos utilizarla...”
20
Pennac, Daniel (Primera edición en francés: 1992 – Edición citada en castellano: 1993) Como una
novela. Norma. Santafé de Bogotá. Pág. 91)
19
¿Cómo acercar la distancia entre los lectores y los textos a través de la voz del
docente? Algunas decisiones didácticas a propósito de los textos de Jacobs y
Denevi.
Si se comienza por el texto de Jacobs, es importante prever que la lectura en voz alta
refleje el tono creciente de expectación y horror de la historia. Por ejemplo, no se lee
de la misma manera el tono despreocupado con que el señor White pide el primer
deseo que la desesperación posterior con que la esposa solicita que resucite a su hijo.
En el caso de la obra de Denevi la lectura tiene que reflejar la ironía general de la
historia y especialmente el tono imperativo con que el narrador-espectador increpa al
actor de la obra de teatro.
El orden en que se decide leer los dos textos puede producir impactos
diferentes en los escuchas. Se puede optar por leer primero la variante original de
Jacobs creando el clima apropiado y generando un espacio de intercambio posterior a
la lectura en torno a este clásico de la literatura fantástica. En otra clase, sin
aclaraciones previas se lee la variante de Denevi prestando especial atención a la
reacción de los alumnos. Seguramente se percaten de la vinculación entre ambos
textos aunque será necesario un espacio de reflexión para focalizar sobre sus
particularidades tal como se ha analizado en otro apartado. También es posible leer
inicialmente la variante de Denevi dado que el argumento de la obra referida está
sintetizada en la historia. En otro momento, puede resultar interesante recuperar la
versión de Jacobs como consecuencia de la intriga generada en los lectores sobre la
obra original.
construir el sentido del texto confrontando con otros sus interpretaciones. En cada
caso el docente interviene con el propósito de guiar, ampliar y profundizar los
conocimientos y reflexiones de sus alumnos, al mismo tiempo que recrea una
situación de intercambio entre lectores, similar a la que sucede fuera del ámbito
escolar. Decimos similar y no idéntica dado que en los intercambios informales entre
lectores no se ponen en juego propósitos de enseñanza. Es posible que un lector
quiera persuadir a otro acerca del valor de una obra pero no asume por ello una
responsabilidad de enseñanza. Esta sí le cabe a la escuela que trata de hacer efectivos
ciertos aprendizajes procurando que las situaciones de enseñanza se parezcan lo más
posible a las que suceden entre los lectores de manera cotidiana. En este sentido, el
intercambio procura ser un espacio en el que los escuchas compartan sus impresiones
acerca de lo leído y aprendan acerca del funcionamiento de lo literario.
Una vez que los alumnos se han expresado resulta necesario corroborar si las
hipótesis expresadas por ellos están o no vinculadas con indicios de la historia, para
lo cual la propuesta de volver al texto aparece como la más adecuada. Son diversos
los propósitos que motivan la relectura de pasajes del texto, por ejemplo:
a) cuando existen varias interpretaciones sobre algún hecho o sobre las
intenciones de los personajes;
b) cuando el docente o algún compañero cuestiona la comprensión de un
pasaje en función de los comentarios de los demás;
c) para ejemplificar la posición de un alumno;
d) para rescatar algún pasaje que llame la atención por la forma en que el autor
utilizó los recursos lingüísticos...
22
Pennac, Daniel (ob. cit.). Pág.123.
23
Eco, Umberto (1996) Seis paseos por los bosques narrativos. Lumen. Barcelona. Pág. 101.
21
está defendiendo- puede resultar muy útil para evaluar la fuerza de la argumentación
elaborada inicialmente por los alumnos.
...las referencias al propio Jacobs como “... un cierto señor, a quien no conozco...”, es
una manera de comenzar el cuento ironizando la relevancia del autor de un clásico de
la literatura fantástica, tanto como a sí mismo, cuando menciona “... adaptada para el
teatro por otro señor Marco Denevi, a quien conozco menos...”.
Veamos qué sucede en una clase de 7º año de una docente, Paula, a partir de la
lectura del cuento La dama o el tigre24 de Frank Stockton. Relato fantástico que se
desarrolla en un reino semibárbaro cuyo rey toma decisiones arbitrarias para decidir
la suerte de las personas que transgreden alguna disposición decretada por él. En este
caso el abuso de poder se centra en la figura de un joven de baja condición
enamorado de la hija del monarca. El final de la historia es abierto y a diferencia de
otros cuentos del estilo, aquí el autor lo plantea explícitamente. “No puede tomarse a la
ligera cuál fue la decisión de la princesa, y no puedo suponerla. No puedo ser yo quien dé la
respuesta. Entonces, queda para el lector. ¿Quién salió por la puerta elegida, la dama o el tigre?...”
. Una trama que permite atravesar intrincados temas de la naturaleza humana tales
como el amor, los celos, la pasión, el poder, la justicia... En este registro se ve la
24
Para una mejor comprensión de los intercambios entre alumnos y docentes se sugiere la lectura previa de los cuentos
referidos en cada uno de los registros de clase. Consultar en el Anexo el apartado: “Cuentos referidos en el documento”.
23
reacción de los alumnos ante un final poco habitual y las distintas posibilidades
interpretativas que desencadena...
Docente Alumnos
¡Y ése es el final!
[...] [...]
(Continúa el intercambio)
24
Docente: ¿Y qué me dicen de la forma en que la princesa consiguió el secreto de las jaulas?
Melisa: Pagó, porque dice algo del oro.
Docente: Releo esa parte... “ Pero el oro y la decisión de una mujer enamorada habían
alcanzado para que la princesa consiguiera el secreto...”.
En este caso la docente relee el fragmento al que alude Melisa con el propósito de
mostrar a los alumnos la relación entre lo que dice el texto literalmente y la
interpretación del soborno, realizada por la alumna.
Mariela: Ahora que pienso, para mí, por las pistas que da el texto, la princesa le señaló la puerta del
tigre, porque el cuento habla más de lo que pasaría si se casara con la doncella, que de lo que pasaría
si se lo come el tigre.
Docente: Buena observación. ¿Los demás que opinan?
Algunos: Sí profe, es verdad.
Daniel: Sí, habla más de los celos por la otra, que de la desesperación porque se lo coma el tigre.
Los alumnos de otra docente, María Isabel, discuten acerca de las razones
por las cuales el autor decide plantear un final abierto...
Docente Alumnos
[...]
25
Es curiosa la anécdota sucedida en Estados Unidos cuando Stockton dio a conocer el cuento de La dama o el tigre.
Los lectores publicaron una solicitada increpando al autor a escribir la continuación de la historia. Después de
algunas resistencias Stockton accede y escribe como respuesta otro cuento, El disipador de las dudas cuya lectura
recomendamos en el Anexo.
26
Eco, Umberto (1998) Los límites de la interpretación. Lumen. Barcelona.
25
[...] [...]
(Continúa el intercambio)
26
Docente Alumnos
[...] [...]
¿Qué piensan del rey? Oscar: Yo pienso que era justo porque
tenía el 50% de probabilidades de morir
y el 50% de probabilidades de ser feliz.
[...] [...]
quiere.
Varios : ¡No!
Algunos: ¡Sí!
Muchos: ¡Sí!
Varios: ¡No!
¿Por qué?
[...] [...]
La propuesta de Alejandra (“¿Qué piensan del rey?”) favorece que los alumnos
reflexionen sobre dos cuestiones centrales en el cuento: justicia y poder. La docente
interviene para alentar la profundización de las ideas planteadas (“¿El poder tiene que
ver con la justicia?", "¿Entonces el poder y la justicia no son cosas diferentes?"). Los alumnos no
se circunscriben solo a responder las preguntas del docente sino que entablan un
intercambio más horizontal.
También la docente retoma lo expresado por una alumna para poner en
evidencia la contradicción de la postura (“Es justo porque elige pero...”). Su planteo es
interrumpido por Sabrina y Diego que parecen haber advertido la arbitrariedad y el
28
abuso de poder que aparecen en el cuento. Una alternativa para el docente en ese
momento, tal vez podría haber sido retomar las diferentes posiciones y presentar el
problema a los alumnos. Por ejemplo, “Algunos de ustedes piensan que es justa la posibilidad
de elegir entre las dos puertas aunque las dos opciones sean un castigo, morir bajo las garras del tigre
o casarse con una mujer que no se ama. Otros piensan que la situación es completamente injusta
porque no hay posibilidad real de elegir algo que el joven desea ¿Qué piensan los demás?” Con
una intervención de este tipo se intenta que más alumnos puedan acercarse al
razonamiento de Sabrina y Diego.
A lo largo del intercambio los alumnos vinculan sus reflexiones acerca del
poder y la justicia con hechos de la realidad desprendiéndose de la ficción. Leer e
intercambiar con otros favorece la participación en otros mundos y otras vidas que
renuevan las posibilidades de analizar la propia visión de la realidad. No obstante, el
docente interviene retomando el eje de discusión en torno a la historia ("Muy bien, pero
volviendo al tema del poder y la justicia en el cuento ¿ustedes piensan que son conceptos opuestos,
que están peleados?”). Es posible emocionarse, acordar y disentir sin perder de vista la
ficción que ocasiona el intercambio. Las ideas y sentimientos personales están en
juego sin duda, pero “mediatizadas” por la historia en cuestión.
Docente Alumnos
(Concluye la lectura) ¿Qué les pareció? (Algunos responden que les gustó, otros
que no, otros que más o menos).
A1: Es raro
conjugados.
¿Qué es eso?
[...] [...]
Docente Alumnos
[...] [...]
[...] [...]
Cuando la docente abre la discusión sobre uno de los personajes (“¿Qué efecto
les causa la primera actitud de la madre?”), los alumnos van planteando sus opiniones
acerca de la legitimidad o no de la justicia “por mano propia”. La docente posterga
su opinión e intenta que un buen número de alumnos participe de la discusión, no
censurando sus apreciaciones. Ulises rescata la astucia del personaje, superando la
valoración moral de su actitud (“Está mal vengarse de otro que mató...pero ¿no van a negar
que la vieja estuvo astuta? ¿No?”) Esta opinión facilita que otros alumnos se animen a
reconocer esa astucia, evitando de ese modo un análisis polarizado en “malos” y
“buenos”. Asumir la interpretación desde la perspectiva del personaje permite
descentrarse e imaginar acciones desde dicha perspectiva, por ejemplo, la
posibilidad de dormir bien después del hecho. En casos como éste, utilizar el texto
con intenciones moralizantes podría obturar la posibilidad de los alumnos de
analizar intenciones y comportamientos de los personajes en función de la dinámica
propia de la historia. Mantener el eje de la discusión en el terreno de la ficción que
plantean los cuentos, facilita ciertos análisis que de otra manera serían complicados
de sostener en el marco de la escuela.
Un intercambio con fuerte compromiso por parte de los alumnos y el docente abre un
campo de discusión sobre lo literario donde es posible reflexionar acerca de diversos
contenidos. A través de los ejemplos se advierte cómo la literatura se asume como
experiencia y cómo en las aulas no deja de ser un discurso cultural polémico.
33
En estas ocasiones lo que se enseña son las acciones que el lector realiza cuando
el propósito es cautivar a los lectores a través de su voz. Lo que se quiere
comunicar sobre la literatura durante el momento de lectura no se explica sino que
sucede, por eso se trata de “contenidos en acción”. El docente al leer pone... “... en
juego su saber acerca de la lectura y de los textos, pero este saber está implícito en
la situación; resultaría artificioso e inútil que lo explicitara. Lo que cuenta es que
sus alumnos han participado de un acto de lectura y pueden, a su vez, poner en
juego sus propios conocimientos acerca de la lectura y de los textos...”. 28. Estos
mismos contenidos, en otra situación didáctica, pueden ser retomados y
27
Los contenidos lingüísticos y literarios que se consideran en este apartado han sido tomados del Diseño Curricular
de la Provincia de Buenos Aires (1999). Lengua - EGB – Tercer Ciclo.
28
Documento de Actualización Curricular – Lengua – EGB - Nº 2. (1996) Municipalidad de la Ciudad de Buenos
Aires.
34
El mostrarse como “modelo de lector” por parte del docente, acercando a los
alumnos diferentes maneras de experimentar lo literario con sus complejidades es
una condición necesaria, aunque no siempre suficiente en la enseñanza.
Complementar estos espacios con la reflexión sobre algunas de esas complejidades,
forma parte de los propósitos didácticos del tercer ciclo.
30
Ver en el Anexo el apartado “Cuentos recomendados”.
31
Ver en el Anexo el apartado “Cuentos recomendados”.
37
El hecho de que sea el docente quien elige los cuentos para esta situación,
hace necesario resguardar otros espacios en los cuales los alumnos puedan
seleccionar libremente los materiales de lectura. Por ejemplo, la visita periódica del
grupo de alumnos a la biblioteca institucional o la organización de “una mesa de
libros” con materiales variados en función de las preferencias que reconoce entre
los lectores de su clase. Este complemento entre una situación de libertad junto a la
opción de selección por parte del docente en función de un nivel de complejidad
mayor, genera nuevas oportunidades para que los alumnos transformen sus criterios
de selección y profundicen su formación literaria.
Comentarios finales
32
Para profundizar acerca del vínculo entre los jóvenes y la literatura consultar Soriano, Marc (1995) La literatura
para niños y jóvenes. Guía de exploración de sus grandes temas. Colihue. Buenos Aires. Págs.52 a 57 y 693 a 695.
33
Colomer, Teresa (2001) La enseñanza de la literatura como construcción de sentido en Revista Lectura y Vida.
Año 22 – Nº 1.
38
"A medida que pasa el tiempo, observo que yo misma intervengo de diferente
forma y que los chicos opinan, critican y debaten con mayor espontaneidad y
libertad. Puedo ver que alumnos que durante mucho tiempo no hablaban,
comienzan a participar gradualmente. Hay buena onda entre ellos, pueden discutir
sin agredirse y sin descalificar al otro...".
Anexo
B) Cuentos recomendados.
" ASIMOV, Isaac (1982) La clave. En Relatos de Brian W. Aldiss, Isaac Asimov y Ray
Bradbury. Ciencia Ficción. Colección Naranja. Bruguera. Barcelona.
" BORGES, Jorge Luis (1949) La casa de Asterión. En Obras completas – Tomo I – El Aleph.
Emecé. Buenos Aires.
" BORGES, Jorge Luis (1935) El brujo postergado.En Obras Completas – Tomo I - Historia
universal de la infamia. Emecé. Buenos Aires.
" CORTÁZAR, Julio (1951) Casa tomada. En Bestiario. Sudamericana. Buenos Aires.
" CORTÁZAR, Julio (1995) Continuidad de los parques. En Ceremonias. Planeta Argentina.
Buenos Aires.
" CORTÁZAR, Julio (1996) Cortísimo metraje – Las líneas de la mano. En Dos veces bueno.
Cuentos brevísimos latinoamericanos. Premio literario anual “Desde la gente”. Ediciones
Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos. Buenos Aires.
" DE MAUPASSANT, Guy (1979) Una vendetta. En La Vendetta y otros cuentos de horror.
Alianza. Buenos Aires.
" DE MAUPASSANT, Guy (1979) El collar. En Bola de sebo y otros cuentos. Biblioteca
Básica Universal. Centro Editor de América Latina. Buenos Aires.
" DENEVI, Marco (1984) No meter la pata con la pata de mono – Enoch Soames. En Obras
completas. Tomo 4: Falsificaciones. Corregidor. Buenos Aires.
" DENEVI, Marco (1996) Personas sacrificadas. En Dos veces bueno. Cuentos brevísimos
latinoamericanos. Premio literario anual “Desde la gente”. Ediciones Instituto Movilizador de
Fondos Cooperativos. Buenos Aires.
" GARCÍA MÁRQUEZ, Gabriel (1995) Algo muy grave va a suceder en este pueblo. En
Revista La Maga Extra Nº 7. Buenos Aires.
" HEKER, Liliana (1989) La fiesta ajena. En Revista Puro Cuento. Julio/Agosto. Buenos
Aires.
" HEMINGWAY, Ernest (1974) Los asesinos. En Breve antología de cuentos policiales.
Sudamericana. Buenos Aires.
" HENRY, O. (1899) El regalo de los Reyes Magos. En Cuentos Clasificados 2. Cántaro, 1999.
Buenos Aires.
" HIGHSMITH, Patricia (1985) Gritos de amor. En Once. Literatura Contemporánea – 61.
Seix Barral. Barcelona.
" KAFKA, Franz (1979) Metamorfosis. En Relatos Completos I. Losada. Buenos Aires.
" KORDÓN, Bernardo (1995) Los ojos de Celina. En Breve antología de cuentos.
Sudamericana. Buenos Aires.
" MONTES, Graciela. Ilustración: Menéndez Liliana (1996) Teseo, Ariadna y el minotauro.
Odo Ediciones – Gramón Colihue Libros. Buenos Aires.
" PIÑERA, Virgilio (1996) Natación. En Dos veces bueno. Cuentos brevísimos
latinoamericanos. Premio literario anual “Desde la gente”. Ediciones Instituto Movilizador de
Fondos Cooperativos. Buenos Aires.
65
" POE, Edagar Allan (1978) El pozo y el péndulo. En Antología del cuento tradicional y
moderno. Biblioteca Básica Universal. Centro Editor de América Latina. Buenos Aires.
" QUIROGA, Horacio (1954) A la deriva. En Cuentos de amor, de locura y de muerte. Losada.
Buenos Aires.
" SAKI (1971) El cuentista. En Cuentos. Biblioteca Básica Universal. Centro Editor de
América Latina. Buenos Aires.
" SANTIRSO, Liliana (1991) El sol es un techo altísimo. En Revista Puro Cuento. Mayo/Junio.
Buenos Aires.
" SHUA, Ana María (1996) Hambre colectiva. En Dos veces bueno. Cuentos brevísimos
latinoamericanos. Premio literario anual “Desde la gente”. Ediciones Instituto Movilizador de
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