Insurrectas 4 Nellie y Gloria Campobello: El fuego de la creación…continúa

ANTE LA OPINIÓN PÚBLICA

La Patria. Diario Mexicano, El Paso, Texas,

13 de diciembre de 1919, p. 1.

El debut de la familia Bell en el Teatro Colón

La mejor compañía de diversiones que ha venido a El Paso

Una velada de arte de positivo mérito

Los artistas mexicanos escucharon constantemente bravos y aplausos

Sin autor

El espíritu volaba anoche por las regiones serenas del Ideal, viendo las manifestaciones de arte en la más alta y noble acepción de la palabra, presentadas por la familia Bell y los demás artistas que forman la inmejorable compañía que trabaja en el Colón. El numeroso público que acudió anoche al nuevo teatro no se cansó de aplaudir, los bravos se escucharon con frecuencia y el bis se impuso en repetidas ocasiones, cada acto fue un éxito y cada artista un triunfador; el decorado espléndido y la presentación elegante y lujosa.

El acto en las argollas ejecutado con maestría por Alberto, Guillermo y Óscar Bell, este último haciendo una imitación admirable de Chaplin, trajo la primera tempestad de aplausos, tempestad que arreció en la acto de ventriloquismo de Jorge Bell, en el que ejecuta el acto sorprendente de beber y fumar mientras habla; y además, nos revivió muchos de los chistes llenos de sal e ingenio de su padre, el inolvidable clown Ricardo Bell.

La señorita Matilde Camacho mereció que se le pidiera el encore en sus sentidos couplets, morales y correctos como lo es todo en esta compañía, en la que no son las armas ni el calambour ni la pornografia, sino la aptitud y el talento.

El acto musical nos recordó aquellas temporadas inolvidables del Circo Orrin, sólo que ahora en su ejecución encomendada a nueve de los hermanos Bell, faltaba el padre, que se fue para siempre, pero en cambio tomaban parte en él dos más de los hijos menores, a quienes por primera vez hemos visto trabajar aquí, los otros son nuestros viejos conocidos, nuestros favoritos de antaño, a los que tantas veces prodigamos nuestro aplauso en el terruño querido. El acto ejecutado con instrumentos exóticos fue sin disputa un triunfo colosal. Aplaudidísimos en sus bailes, Nellie,¹ Judith y Carlos. Después de que la orquesta ejecutó la hermosa marcha Los aliados, original de Ricardo Bell jr., se representó el drama guignol (drama sinóptico hoy en gran boga) en el que el actor español, el señor Recalde, rayó a gran altura en la escena del delirium tremens y la muerte, conmoviendo profundamente al auditorio que le hizo una ruidosa ovación. Muy bien la señorita Camacho en la Pilar y las dos señoritas Bell que tomaron parte en la "petit-tragedia".

Ricardo Bell jr., el mayor de los hermanos, es un virtuoso de los que se imponen por la magia de su arte; ayer hizo prodigios con el violín en sus manos, el instrumento que inmortalizó a Paganini, cantó, rio, lloró, casi habló…; la imitación del canario encantó a los oyentes; Ricardo ha adelantado notablemente desde la última vez que lo oyéramos tocar hace ya más de un lustro.Y terminó la regia velada con el graciosísimo entremés original de los Bell, El espejo, en el que Sylvia, Guillermo y Jorge derrocharon la gracia a toneladas; la perfecta reproducción de uno de los hermanos por el otro, frente al espejo roto, hacía completa la ilusión de que era la imagen del primero la que se reflejaba. images/nec-16-1.jpg

La Patria. Diario Mexicano. Noticias de C. Juárez.

El Paso, Texas, 13 de junio de 1920, p. 4.

Un buen argumento

Sin autor

Para los que escriben para el cinematógrafo, tomen nota: La señorita Zobeida Lara, que sabe tanto de dirigir automóviles como un torero de aviación, se le ocurrió ayer pilotear el automóvil de sitio número 12, y en una bocacalle atropelló primeramente a la niña Juana Muñoz, causándole algunas lesiones que acreditaron su pase al hospital. La valiente chauffeur siguió con su máquina por la calle del Comercio, y tratando de evitar otro accidente desvió su auto, que fue a chocar con el de un particular, causándole serias averías, y el averiado, que se encontraba estacionado a la orilla de la calle, con el impulso que recibió echó a rodar un puesto de frutas de otro ciudadano, que también reclama daños y perjuicios. La señorita en cuestión ofreció indemnizar a tanto reclamante. images/nec-16-1.jpg

La Patria. Diario Mexicano. Noticias de C. Juárez.

El Paso, Texas, 29 de julio de 1920, p. 4.

Quería entrar

Sin autor

Luis Manuel Rodarte fue detenido hoy en la madrugada por la policía ante la queja que en su contra expuso la adivinadora Zobeida Nari,² que se aloja en el Hotel Nancy. Aseguró la quejosa que Rodarte insistía en que le dijera la buena ventura a una hora tan inoportuna y pretendía introducirse a toda costa, amenazando romper los cristales de una ventana. images/nec-16-1.jpg

La Patria. Diario Mexicano. Noticias locales y personales.

El Paso, Texas, 24 de agosto de 1920, p. 4.

La adivinadora

Sin autor

Está para despedirse de Ciudad Juárez la hermosa y gentil adivinadora Zobeida, que con tanto acierto ha venido desarrollando su labor de ciencias ocultas en esa ciudad, cooperando con ella su inteligente secretaria, la bella Ada. Al alejarse deja gratas impresiones, así en aquellos a quienes les ha anunciado un destino feliz, como a los que ha preparado para luchar contra la adversidad.

Su labor ultranatural la eleva a un nivel superior a la generalidad y por eso es admirada y se le aprecia y se le desea que en todas partes encuentre el mismo ambiente de estimación. images/nec-16-1.jpg

El Universal, México, D.F.,

6 de marzo de 1927, p. 3.

Dos cuadros del ballet Carroll, que fue un verdadero acontecimiento social

Sin autor

Convengamos en que el ballet, practicado con los viejos ritos de antaño, es una manifestación artística un poco fuera de tiempo. Cuando asistimos a una gran soirée [velada] de baile clásico nos parece recordar a Degas hace cuarenta años, trasladando al lienzo el escorzo breve y cándido de una chica de la Grand Opera… Una chica con el busto ceñido y su faldilla horizontal, mostrando, apenas, las mallas de sus piernas en formación.

Ahora el viejo ballet ha tenido que permitir intromisiones extrañas. El jazz asoma, de cuando en cuando, sus narices, y Paul White-man empuña la batuta para que tiemble un poco Josephine Baker, esa negra epiléptica que conmueve a París y a quien García Calderón llamara certeramente una lúbrica ardilla.

Anteanoche, Miss Carroll, una rubia profesora de energía, mostró en el Teatro Iris —repleto de una pulcra y distinguida concurrencia— la posibilidad de revivir al ballet sin necesidad de recurrir a las danzarinas profesionales con ilustraciones coreográficas de óperas más o menos centenarias. Y la concurrencia a esta fiesta de beneficencia tuvo una verdadera noche de arte. Hasta el embajador Sheffield entrecerraba los ojos con una diplomática emoción ante algún divertissement [entretenimiento] del más puro sabor helénico, o Mr. Ovey, el ministro Inglés, sonreía ante el número excéntrico del teniente coronel Milford, ese rancio escocés que sabe divertirse, a veces divirtiendo y grandemente al público. En el foro pasaron, como en un cuento de hadas, escenas de una prodigiosa intensidad cromática en el ritmo. El ballet oriental, ofrecido por las discípulas más adelantadas de Miss Carroll después de que los niños hicieron una deliciosa fábula infantil, fue verdaderamente el success [éxito] de esa noche de gala. Una vez en el Oriente —dice la leyenda—existió una Diosa del Amor que exigía cada año el sacrificio de una doncella. Nadie quería sacrificarse y apenas las vestales ofrecían sus presentes, implorando tímidamente el favor de la Diosa, hasta que una niña, que tuviera el mal de amores, se ofreció al sacrificio. La Diosa, indulgente, concede el perdón y hace desfilar a los efebos, heridos por las flechas del amor, en busca de sus dulces compañeras. El ballet, magníficamente montado, dio al público la impresión de las grandes compañías extranjeras. Cualquier espectador que desconociera el programa de seguro juraría hallarse frente a un conjunto profesional de verdadero mérito. Si el recuerdo de Anna Pavlova no admitía comparación, al menos, en todas las mentes, existía el de Pavley-Oukrainsky.

Las doncellas (Margaret Cuilty, Virginia Cheatham, Alicia Muench, Alice Jennings, Doris y Winckle Hakenberger, Mercedes Barranco y Helen Barrasco) ofrecieron un hermosísimo y polícromo conjunto. Sus trajes quedaban bellamente enmarcados en la decoración, obra de un talentoso artista mexicano. El príncipe feliz (Nellie Campbell) pasó bellamente por la escena con su traje plateado, de una realización perfecta, con una inmensa cimatarra color de luna. Y así, el ballet fue un verdadero sueño oriental, en que cada quien puso su temperamento de danzarinas, fuertes en técnica y en comprensión.

Los divertissements dieron un bello fin a la fiesta. Cada uno constituyó un éxito absoluto, desde aquella visión infantil, plena de sabor mexicano, ¡Ay qué inditos! (Margarita, Amelia y Kenneth Smith) hasta el baile de los marineros (Alicia Muench, Doris Hackenberger, Margaret Cuilty, Winkie y Francis Hackenbergn, Victoria Ellis, Betle Herman, Nellie Campbell y Alice Jennings), de un sabor moderno, con música sincopada y dinámica.

Quizá merezca los honores máximos en esta bellísima fiesta de arte —en la cual todas las artistas son ya verdaderas danzarinas—Miss Gloria Campbell, una estrella de catorce años [15 años] que posee una intuición de gracia y de línea extraordinaria.

Miss Carroll debe estar satisfecha. Lástima que esta clase de fiestas no sean muy concurridas por elementos mexicanos, y es de desearse una repetición bien anunciada para el público metropolitano. images/nec-16-1.jpg

Revista de Revistas, México, D.F.,

24 de julio de 1927, p. 41.

Un ensayo de ballet en México

Sin autor

En el mismo teatro donde Pavley y Oukrainsky hicieron breve temporada de belleza y de color, la chiquillería bulliciosa de Miss Carroll ha iniciado sus ensayos de ballet aristócrata, que a decir verdad, está todavía muy alejado del más puro ideal estético. Y no es que falten esculturas humanas que parecen arrancadas de un friso de Praxiteles, ni mucho menos el divino tesoro de la juventud suspirado por el poeta de las piedras preciosas. Hay señoritas que merecen el soneto cálido y la lluvia de rosas sobre la cabellera a la bob, cuerpos elásticos y finos como una vara de nardos, brazos lechosos y ojos nazarenos que sintetizan todos los matices de la armonía y del arte. Falta dirección escénica, decorado moderno y sugerente, vestuario que toque con mayor éxito la plástica del baile y se aleje definitivamente del estilo empleado en las fiestas de colegio y en las funciones de caridad.

Además, el acrobatismo de algunos números que denuncia falta de ensayos, no está bien para esas chiquillas que en manos de Isadora Duncan hubiesen dado la nota máxima de lo encantador y puro.

Una mexicana, de las poquísimas que forman parte del cuadro Carroll, es la que, a nuestro juicio, tiene mayor felicidad en su número. Nos referimos a la escena de boxeo, interpretada con ingenua coquetería, llena de color y de propiedad. El aplauso tributado a esta linda danzarina fue de los más justos y merecidos.³

La idea medular del espectáculo no puede ser más noble. Bien encauzado el esfuerzo sería, a no dudarlo, una fuente inagotable de cultura. El teatro en México pasa actualmente por desoladora decadencia. Los autores de talentos y los que simulan tenerlo, se han dedicado en cuerpo y alma a la contribución procaz en el jacalón de Campillo, buscando tal vez una segura entrada de dinero a cambio de sainetes y revistas con eterno lépero de plazuela, el desfile de mujeres modernas y chaparras por la pasarela ínfima y el plagio de trozos musicales que sin ningún recato se toma de aquí y de allá con una impunidad increíble. Otros autores de comedia seria se resignan a los estrenos milagrosos o a la edición de sus obras, ya que la ayuda oficial es cortísima y no hay un apoyo gallardo para los ensayos de un teatro nuestro.

Un ballet mexicano con asuntos de aquí, con música seria de maestros conocidos, con decoraciones brillantes de Montenegro y Carlos González sería un grito de aliento, un paréntesis de cultura seria que borrara la decadencia de nuestros espectáculos de hoy.

Pero no creemos sinceramente que el ensayo del Regis sea una manifestación que augure realizaciones espléndidas. Hay muchachas que se olvidan hasta del centro del tablado, trajes como para una repartición de premios, música con escasos elementos y una desorientación clásica en los directores del espectáculo. La sombra de Anna Pavlova surge todavía llena de prestigios y de enseñanzas. Queremos, sobre todo, algo típico aplicado a la danza moderna. ¿No hay acaso en el Chauve-souris de González, Júbilo y Quintanilla un derrotero digno de estudio? ¿No tenemos en Michoacán, en el Istmo, en la península yucateca, temas y asuntos que podrían explotarse gallardamente? ¿No hay pintores que después de su larga estancia en Europa puedan dar sugerencias y esquemas para danzas clásicas?

Lo de la concurrencia con smokings y los discursos de Miss Carroll no nos conmueven, como a cierto cronista que yo me sé. Es menester mayor respeto y mayor sacrificio en ensayos y preparativos para que el ballet en México se arraigue. Y que hay elementos valiosos y deseo palpable de corresponder a la cruzada, lo demuestran las chicas encantadoras que iniciaron su temporada en el teatrito de la avenida Juárez y el numeroso público que llenó totalmente las localidades en la noche del debut.

De cualquier manera, la intención de brindar un platillo para gustos selectos es digna de un aplauso sin reservas…

El fantasma

Ciertos cactus pueden nacer, desarrollarse y vivir por mucho tiempo en botellas cerradas de vidrio incoloro. Vale la pena realizar el experimento: se lava bien una botella o un recipiente de vidrio; se ponen dentro dos o tres puñados de tierra gorda, unas cuantas semillas y se humedece la tierra. Luego se tapa la botella con un corcho y lacre. Expuesta la botella en un lugar donde le dé el sol, las semillas germinarán, aparecerá la plantita y continuará creciendo sin requerir el cuidado durante años.

La población de los Estados Unidos ha aumentado en ocho millones durante los últimos cinco años.⁴ images/nec-16-1.jpg

El Universal Ilustrado, México, D.F.,

22 de septiembre de 1927, p. 23.

Las últimas fiestas sociales

Sin autor

Un grupo de distinguidos miembros de la Colonia Americana que tomó parte en la fiesta de la American Legion, efectuada brillantemente en el Teatro Regis los días 13 y 14 de septiembre.- Miss Lettie Carroll y el coronel W.B.I. Osbaldeston Miltford en el baile de fantasía efectuado en la Legación Británica el día 14 de septiembre, con inusitada pompa.- Exema. señora de Will Hon. David Kelly, encargado de negocios de Inglaterra, en la referida fiesta social.- Doña Lucina Méndez de Barrios Gómez, en la fiesta de la Legación Inglesa.- Una de las señoritas que tuvo a su cargo un número excéntrico en la bella fiesta de la Legión Americana. images/nec-16-1.jpg

El Universal Ilustrado, México, D.F.,

11 de octubre de 1928, p. 35.

Gráficas de la semana

Sin autor

El señor embajador de los Estados Unidos, Mr. Morrow, dando la bienvenida al grupo de excursionistas americanos que acaban de llegar a México, en viaje de estudio.- Un aspecto de la ceremonia oficial de recepción a los excursionistas americanos.- Un aspecto del palacete del Parque España, propiedad de la familia Torreblanca, frente al cual atentó contra su vida el señor don Humberto Obregón, quien felizmente se encuentra ya fuera de peligro.- Un aspecto de la llegada del primer avión-correo de Laredo. En estos momentos se transportaba al correo la correspondencia.- Las señoritas Campbell, quienes tomaron parte en el festival organizado por la Asociación de Madres de las Escuelas con fines benéficos, y cuya actuación fue largamente aplaudida por la concurrencia en el teatro de la Secretaría de Educación. images/nec-16-1.jpg

El Universal Ilustrado, México, D.F.,

13 de junio de 1929, p. 39.

Una nueva poetisa mexicana, Yo! un libro de Francisca

Carlos Noriega Hope

Una poetisa nueva —poetisa verdadera, honda— acaba de surgir en México. Nunca, hasta ahora, había pensado escribir versos y un buen día tomó el lápiz y trazó, sencilla y limpiamente, lo que había dentro de ella. Y sin artificios, ni afeites acaba de publicar su primer libro. Un grande y pequeño libro: Yo!

Ofrecemos a nuestros lectores algunos de los poemas de su libro singular que, dentro del retorcimiento de la actual literatura, viene a ser una fresca, flor del campo. Montañas, aire libre, el amigo viento, las hermanas estrellas... Optimismo que brota de un cuerpo de 20 años.⁵ Con la levedad de una mariposa, el libro de Francisca —seudónimo que oculta a la autora— estamos seguros que va a ser una sorpresa dentro del medio literario de México.

Una noche terrible

Gritar

rasgar

el silencio

de la noche

con mi desesperación

salpicar las

estrellas con

mi amor.

Suspirar con fuerza

sin respetar

los árboles

abrir mi pecho

y sacarme

el corazón.

Que la montaña

llore

conmigo

Que el sol

no ría más

ellos son

mis amigos

mis hermanos

mi pena rompe

los espacios

tumba los

árboles

estoy en toda

mi desesperación

Tú en mí

Rotación mi vida y

mis pensamientos son

En la mañana

abro los ojos

he soñado

la silueta amada

y la tengo enfrente

hecha cortina

hecha cuadro

zapato.

En el espejo

mi cara es su cara

la veo en el agua

en una taza

en la ventana

el ambiente

mi alma

todo

está inundado

de la silueta

amada

Los cerros

los caminos,

son el perfil

de él

los árboles, las casas

son su cara

algunas veces

tan chiquita que

es la nada

y cierro los ojos

y cuando los abro

Es tan enorme

tan agrandada

me parece todo

el cielo

el perfil de la

silueta amada.

Cordelia Gloria Leonor y Yo

Ser rubia

con grandes ojos azules

inquieta

como mis crenchas

doradas

con las manos finas

blancas alargadas

de hielo el corazón

Ésa quisiera

ser yo

A veces morena

como las gitanas

ojos grandes negros

rasgados.

Con los labios rojos

sensuales

Mirar de caricia

Mirar de puñales

Roja el alma

Quemar corazones

Y ser trágica

en el amor

Ésa quisiera

ser yo

Otras veces ser una

niña pálida

con las manos flacas

la mirada triste

lejana

Vacío el corazón

Vacía el alma

Sin una caricia

Sin amor

Sin nada

Ésa quisiera

ser yo

Después ni morena

ni rubia ni pálida

después quiero

ser como soy.

A mi montaña

Los árboles

me decían:

Véndenos

sonrisas

Así el invierno

no va a llegar

a quitarnos

las camisas

Los arroyos

me decían:

Véndenos

sonrisas

para aclarar el

agua

porque ya tiene

del tiempo

las cenizas

Véndenos sonrisas

véndenos sonrisas

me decían los vientos

Mas yo

no les hice caso

me fui corriendo.

Manojos de sonrisas

eran mis manos

Sonrisa mi cara

sonrisa mis cabellos

cantaban mis labios

sonriendo

Cantaba: sonrisas

sonrisas tengo

sonrisas

que no vendo

Sonrisas llevo

a los pies

de la montaña

de donde vengo.⁶ images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, La Habana, Teatro y

Gacetillas, 6 de julio de 1929, p. 8.

Las novedades del día

⁷

No son muchas en realidad las novedades del día porque el teatro, el cine y los conciertos, si no en plena bancarrota, están en agudísima crisis. Pero las hay, sin duda, pues todo no ha de ser desorganización, fracaso y ruinas.

Aparte de los espectáculos que tienen ya asegurada su estabilidad como el del Teatro Nacional por la pericia de los empresarios, por lo insignificante del precio, o por razones de índole diversa, incluso la costumbre de los espectadores, tiene La Habana una grata perspectiva. (...)⁸

En México está obteniendo ruidosos triunfos la Orquesta Mexicana de Charros Mondragón, que es un conjunto musical de los que logra imponerse por sus méritos desde el primer momento. Tal ha sido el resultado que alcanzó la filarmónica conjunción de artistas que el gobierno de la República mexicana —a quien no puede atribuirse incompetencia porque debe saber al son que bailan todos los ciudadanos— ha designado para que represente a la nación en las exposiciones de Sevilla y Barcelona. Constituyen la orquesta los señores Raúl Mondragón, director, que fue organista del Teatro Capitolio de New York; Aurelio L. Campos, primer violín; Filemón Núñez, pianista; José Andrade, violoncelista; Rafael Solé, guitarrista; Javier Gómez, violinista; Aída Rubí, Jannette Bon Nou y María Luisa Canales que forman un trío de cantantes, y Gloria y Natalia Campobello,⁹ bailarinas.

La prensa de la capital mexicana ha hecho los más cálidos elogios de estos intérpretes, que podrán ser oídos algunos días —ocho probablemente— en esta capital, gracias a los esfuerzos que ha realizado la empresa de Martí para que actúen a su paso por La Habana. ¹⁰

* * *

Teatro Martí. Hoy: La mujer en llamas y una gran sorpresa artística

(...) Se preparan distintas novedades en Martí: el estreno de la primera gran película en realidad de la cinematografía española, La hermana San Sulpicio, adaptación de la famosa novela del patriarca de las letras españolas, don Armando Palacio Valdés; la instalación del Vitaphone y del Movietone, con equipos costosos y auténticos de la Western Electric que nos harán oír a las más grandes producciones del cine sonoro como Bohemios, la magna película de la Universal Pictures Corporation, por la que paga actualmente dos pesos por luneta el público neoyorkino, y... una gran atracción inmediata que ha de sorprender gratamente a nuestro público. Se trata de un espectáculo típicamente mexicano, pleno de color y admirable de arte: la Orquesta Mexicana de Charros Mondragón. Esta pujante institución lírica, que componen un maravilloso trío de cancioneras, una pareja de bailes típicos [se refiere a Nellie y Gloria Campobello], una orquesta característica de mariachis (tocadores folclóricos del Bajío) y la orquesta típica, superior —por la cantidad y calidad de los profesores que la integran— a las demás asociaciones similares que hasta ahora han salido de México, viene a La Habana, de paso para España, donde va comisionada por el gobierno de México para representar a su país en las exposiciones de Sevilla y Barcelona.

Se trata por lo tanto de un espectáculo excepcional y de breve actuación —de vapor a vapor— que hará su debut el próximo miércoles en el Teatro Martí. Mañana daremos a conocer el elenco y otros interesantes datos de la Orquesta Mexicana de Charros Mondragón. images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, La Habana,

7 de julio de 1929, p. 8.

Teatro Martí. La mujer en llamas.- Una gran matinée.- La Orquesta Mexicana de Charros

La mujer en llamas, cinta admirable de la genial Olga Tschechova, continúa manteniendo la atención del público del Teatro Martí. (...)

Se anuncia para el próximo miércoles 10 una verdadera sensación de arte, el debut de un espectáculo luminoso, pleno de color y tipicismo: la Orquesta Mexicana de Charros Mondragón. Esta gran institución folclórica que envía el gobierno de México como representación del arte popular de su país a las exposiciones de Sevilla y Barcelona actuará brevemente en La Habana —de vapor a vapor— y su adquisición por la empresa del Teatro Martí es un verdadero triunfo de García y Portuondo.

Es el de Mondragón un espléndido espectáculo, con un famoso trío de cancioneras, una notabilísima pareja de danzas características [Nellie y Gloria Campobello], meritísimos concertistas, un grupo especialísimo de mariachis y, en fin, una admirable orquesta típica, la mejor sin duda de cuantas existen en la vecina república. Oportunamente daremos a conocer elenco y programa. (...) images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, Gacetillas,

La Habana, 8 de julio de 1929, p. 8.

Teatro Martí. Estreno en Cuba,Tarzán y el león de oro.- La Orquesta Mexicana de Charros

Un interesantísimo estreno en Cuba nos ofrece hoy la diligente empresa del Teatro Martí, la cinta de aventuras Tarzán y el león de oro (...).

El miércoles 10, o lo que es lo mismo, pasado mañana, un debut sensacional, un espectáculo eminentemente artístico: la Orquesta Mexicana de Charros Mondragón, que va a actuar tan sólo unos días en La Habana, de paso para España, designada por el gobierno mexicano para representar a su país en las exposiciones de Sevilla y Barcelona. La Orquesta Mexicana de Charros Mondragón no sólo nos ofrece sus conciertos típicos admirables, sino también canciones por un famoso trío de cancioneras, las danzas características del Anáhuac por una brillantísima pareja femenina de baile [Nellie y Gloria Campobello], estupendos concertistas y un espectáculo insospechado del grupo típico de los mariachis. La actuación de este gran espectáculo, que por algo envía a Sevilla y Barcelona el gobierno mexicano, será un éxito efectivo en La Habana. images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, Gacetillas,

La Habana, 9 de julio de 1929, p. 8.

Teatro Martí. Tarzán y el león de oro.- Mañana debut de la Orquesta Mexicana de Charros

Una interesante película de aventuras (...) la de Tarzán, ofrece hoy la empresa del Teatro Martí. (...).

Para mañana se anuncia un brillantísimo espectáculo artístico: la Orquesta Mexicana de Charros Mondragón, amplia institución lírica de características típicas bien definidas. Es la que de mayor renombre goza en la república vecina. Llega a La Habana de paso para España, ya que ha sido designada por el gobierno de México para que represente a su país en las exposiciones de Sevilla y Barcelona. Esto quiere decir que su actuación será muy breve, y que su adquisición es un verdadero triunfo de la empresa García Portuondo.

No es solamente el de su orquesta típica el que ofrecen los hermanos Mondragón, sus directores, ya que presentan un notabilísimo trío de cancioneras que forman Aída Rubí, Jannette Bon Nou y María Luisa Canales; una admirable pareja de danzas características formadas por las hermanas Gloria y Natalia [Nellie] Campobello, y un interesante grupo musical folclórico del Bajío, los mariachis.

En la orquesta que preside la garantía del barítono y músico Arturo Mondragón y de la que es director Raúl Mondragón, que fue organista del Capitol de New York, figuran elementos muy valiosos como los violinistas Aurelio L. Campos y Xavier Gómez Orozco; el pianista Filemón Núñez; el violoncelista José Andrade y el guitarrista Rafael Solé, todos ellos concertistas de mérito.

Mañana daremos a conocer el programa del debut, que es sumamente atractivo. Las localidades para el debut de mañana, señalado para las nueve y media de la noche, están ya a la venta en la contaduría del Teatro Martí, a toda hora hábil. images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, Gacetillas,

La Habana, 10 de julio de 1929, p. 8.

Teatro Martí. Hoy: Debut de la Orquesta Mexicana de Charros, un gran espectáculo colorista y único

Hoy no hay función por la tarde en Martí: la preparación del debut anunciado para la noche de la Orquesta Mexicana de Charros Mondragón así lo exige. Éste es un gran espectáculo artístico de brillante colorido y de raro tipicismo. Es el elemento representativo de la música popular de México, del peregrino folclore del Anáhuac. Institución de amplias posibilidades de arte, comprende no sólo la orquesta típica que integran quince profesores valiosísimos, sino además un grupo característico de los mariachis, músicos del Bajío de grandes originalidades; un trío de cancioneras famosas de la vecina república, con Aída Rubí, Jannette Bon Nou y María Luisa Canales; una meritísima pareja femenina de baile, formada por las hermanas Gloria y Natalia [Nellie] Campobello, y artistas de concierto como el violinista Aurelio Campos, el pianista Filemón Núñez, el violoncelista José Andrade, el guitarrista Rafael Solé y otro violinista notable, Xavier Gómez Orozco.

La importancia de este espectáculo basta a ponderarla este hecho: que la Orquesta de Charros Mondragón ha sido designada por el gobierno de México para representar a su país en las exposiciones de Sevilla y Barcelona. El programa de debut, a las nueve y tres cuartos, es el siguiente: Serenata mexicana de Ponce por el violoncelista Campos y el guitarrista Solé; Las mañanitas, número de genuino tipicismo por la orquesta y voces; Alma latina de Esparza Oteo por la orquesta típica; Aires nacionales mexicanos de Galindo; las canciones Estrellita de Ponce y Hoja marchita de Tata Nacho por Aída Rubí; canciones por el trío Cruel puñal y Albur de amor de Esparza Oteo y Caminito de la sierra de Pardavé, y bailes por la pareja, números de los mariachis y finalmente el Jarabe mexicano por la orquesta y las bailarinas Gloria y Natalia [Nellie] Campobello.

Se inicia la función a las ocho y media con una revista, una comedia y la interesante y graciosa película de Glenn Tryon, El intruso. Las localidades que son numeradas y que se encuentran a la venta y pueden separarse hasta una hora antes de la función, son a base de ochenta centavos la luneta y sesenta centavos la butaca; la tertulia sólo cuesta veinte centavos. Muy pronto un estreno cinematográfico de importancia: La hermana San Sulpicio. Y mañana la película de la pelea Uzcudun-Schmeling, completa, round por round y golpe por golpe. images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, Teatro y Gacetillas,

La Habana, 11 de julio de 1929, p. 8.

La presentación de Los Charros mexicanos de Mondragón El espléndido triunfo de anoche

Heliodoro García y Rodrigo Portuondo, los dos jóvenes y talentosos empresarios del Teatro Martí, pueden estar más que satisfechos, orgullosos del gran éxito que obtuvieron anoche presentando al público habanero el pintoresco y típico conjunto de Los Charros mexicanos de Mondragón, interesantísima organización artística que en la vecina república fue calificada de insuperable en la expresión de la música popular. El gobierno mexicano —apreciando el valor positivo del magnífico grupo de intérpretes— designó a Los Charros de Mondragón para representar a su país en la exposición de Sevilla.

No se conforman, pues, García y Portuondo con dar a su espectáculo la mayor amplitud y la más moderna expresión colocándolo, por su contrato con la Universal, para ofrecer las últimas producciones en el Vitaphone y Movietone en las mismas condiciones que los más interesantes y aristocráticos de New York, con la ventaja de fijar precios increíbles. No les ha bastado con contratar un trovero argentino como Spaventa, que acaba de alcanzar en toda España, y especialmente en Madrid, los más ruidosos triunfos con los últimos tangos de moda en Buenos Aires y en París. Tratando de despertar en toda ocasión el interés del público, han conseguido que, al pasar por esta ciudad para seguir a España, Los Charros de Mondragón nos den a conocer en un breve plazo, en unos días, su variadísimo repertorio típico. Músicos, bailarines, cantantes y mujeres de espléndida belleza constituyen el conjunto que es nutrido y está formado por elementos de primer orden en su género. Anoche demostraron lo que pueden hacer en Serenata mexicana, Las mañanitas, Alma latina, Aires nacionales mexicanos, Estrellita, Hojas marchitas, Cruel puñal, Albur de amor, Caminito de la sierra y el clásico Jarabe nacional mexicano.

La actuación de Los Charros de Mondragón fue óptima. Las artistas líricas, los músicos y los números de baile produjeron deliciosa impresión a los espectadores que aplaudieron con ese cálido entusiasmo con que siempre se rinde espontáneo tributo a los verdaderos artistas de mérito indiscutible. Trataremos en breve, con mayor extensión, de Los Charros que son la nota de actualidad teatral y que cuando el gobierno de su patria los ha escogido para representar a la nación de Juárez en España, es porque responden en sus expresiones artísticas al alma de México.

* * *

Teatro Martí. La Orquesta Mexicana de Charros.- La pelea completa Uzcudun-Schmeling

Debutaron ayer con un éxito enorme los gallardos charros mexicanos del brillante espectáculo Mondragón. Como todo espectáculo típico del Anáhuac tiene el formidable atractivo del color y la magia, sugestión de las apasionadas melodías de la república hermana y vecina. Espectáculo maravilloso éste que cuenta con múltiples facetas de éxito. La orquesta típica positivamente admirable, el notable trío de cancioneras, superior a toda ponderación, la extraordinaria pareja de baile que forman las Hermanas Campobello y ese singular grupo folclórico de los mariachis, intérpretes de la música melancólica y bella del Bajío mexicano.

La Orquesta Mexicana de Charros Mondragón es la más completa y perfecta institución de su género que hemos visto, por algo el gobierno de México la ha designado para ir en comisión de arte a las exposiciones de Sevilla y Barcelona.

Hoy actúa de nuevo la orquesta de Charros y todos los demás atractivos a las cinco y cuarto y a las nueve y media, con un repertorio distinto al del debut. Hay, además, otro atractivo notable en el cartel de hoy en el Teatro Martí. Algo que atraerá sin duda alguna a todos los fanáticos del boxeo: la película completa de la pelea Uzcudun-Schmeling. (...) images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, Gacetillas,

La Habana, 12 de julio de 1929, p. 8.

Teatro Martí. El éxito de los charros mexicanos.- La pelea Uzcudun-Schmeling completa

El público que acudió ayer en gran número a las funciones vespertinas de las cinco y nocturna de las nueve y media del Teatro Martí, confirmó con cálidos aplausos el éxito brillantísimo alcanzado en su debut por ese espectáculo colorista y magnífico que se llama Orquesta Mexicana de Charros Mondragón. Indiscutiblemente la orquesta es un alto exponente del arte lírico popular mexicano, tan rico en tonalidades y en colorido. Los hermanos Mondragón, barítono de mérito uno de ellos y el otro músico de bien conquistados prestigios —fue organista del Capitol newyorkino con amplias alabanzas de la crítica— han logrado reunir un variadísimo y valioso espectáculo, todo dentro de la gama musical típica de su prodigioso Anáhuac. La orquesta típica del grupo folclórico de mariachis, el trío de cancioneras y la pareja de bailes característicos, son otros tantos motivos de atracción de este admirable conjunto de colores y melodías que exaltan el alma de ese vibrante y bravío México, encendido crisol de nuevas modalidades raciales.

Positivamente la Orquesta de Charros honra el arte popular mexicano y justifica ampliamente la designación oficial de su gobierno para la representación de tal arte en las exposiciones de Sevilla y Barcelona. Hoy actúa este admirable conjunto en el Teatro Martí a las cinco y cuarto y a las nueve y media. (...) images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, Gacetillas y Teatro,

La Habana, 13 de julio de 1929, p. 8.

Teatro Martí. Chinas y charros mexicanos.- La pelea Uzcudun-Schmeling.- La hermana San Sulpucio

Sobre el escenario del Teatro Martí, por el que tantos y bellos espectáculos de luz y sedas han desfilado, brillan las lentejuelas polícromas de las chinas poblanas; dan al aire sus vivos rojos, sus acariciantes azules y la esmeralda de sus verdes inconfundibles los decorativos sarapes de saltillo, y enmarcan los rostros trigueños del Anáhuac los bordados áureos de los sombreros jaranos.

Los Charros —nombre con el que nuestro público sintetizó a la Orquesta Mexicana de Charros Mondragón— mantienen su récord de éxito en la escena del apostólico, diciendo mimosamente las melancólicas canciones del Bajío y las jocundas tonadas costeñas a través de un magnífico trío de cancioneras formado por Aída Rubí, Sara Miller y Jannette Bon Nou; exhibiendo las danzas características mexicanas con una pareja de baile tan sugestiva como es la de las Hermanas Campobello, y ejecutando toda la rica gama de melodías populares de las diversas regiones de México con una orquesta típica, que es orgullo de la vecina república, al extremo de que su gobierno la auspicia oficialmente como embajadora de su arte lírico en las exposiciones de Sevilla y Barcelona.

Hoy se presenta la Orquesta Mexicana de Charros en dos secciones: la de las cinco y cuarto de la tarde (a base de sesenta centavos la luneta) y la de las nueve y media de la noche (a ochenta centavos la luneta numerada). En estas dos secciones se exhibirá la película del sensacional match Uzcudun-Schmeling que tanto ha apasionado a los fanáticos del boxeo y que ha provocado una reacción favorable de los partidiarios del gran Paulino, que se muestran satisfechos de la bravura de su púgil favorito. Otra cinta interesantísima completa con la revista y la comedia de costumbre el programa cinematográfico del Teatro Martí, la del regocijadísimo de Glenn Tryon y Bárbara Kent, Soledad. Estas dos películas figuran también en el programa inicial vespertino a las dos y media, con un precio positivamente económico: cuarenta centavos la luneta.

Mañana en la gran matinée de la una y media que la empresa ofrece a las familias tomará parte principal la Orquesta Mexicana de Charros, verdadera sensación artística del día. Un estreno realmente atractivo sucederá a estos espectáculos que hoy llenan Martí: el de La hermana San Sulpicio, formidable adaptación cinematográfica de la famosa novela de don Armando Palacio Valdés. Después el Vitaphone y el Movietone, con la más estupenda encarnación del cine sonoro: Bohemios, la más alta sensación de Broadway en la actualidad.

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Los Charros mexicanos de Mondragón

Una nueva jornada triunfal fue la que organizaron anoche los artistas que componen el conjunto de intérpretes típicos que envía el gobierno mexicano a las exposiciones de Sevilla y Barcelona. Óptima la organización que se ha dado a la orquesta, al trío de cancionistas y a las bailarinas.

Mondragón, que no sabemos si es pariente del famoso general,¹¹ ha sabido escoger a todos los elementos que integran su valiosa compañía, perfectamente apta para dar una idea concluyente del folclore mexicano, ofreciendo canciones, bailables y música de típica expresión genuina. En la capital mexicana Los Charros llamaron, desde el primer momento, poderosamente la atención. El público los aplaudió con entusiasmo y la prensa les dedicó las más calurosas alabanzas. Absorbieron la atención y la curiosidad públicas y al fin fueron designados por las autoridades de México para llevar a las exposiciones iberoamericanas la expresión del alma popular.

Martí es, desde que se hallan allí Los Charros, el rendez-vous [la cita] de los aficionados al género. El programa de anoche entusiasmó a los dilettanti [aficionados al arte]. images/nec-16-1.jpg

Diario de la Marina, Teatro y Gacetillas,

La Habana, 14 de julio de 1929, pp. 8, 10.

En Martí

Los Charros de Mondragón siguen triunfando en el Teatro Martí. Heliodoro García y Rodrigo Portuondo, los populares empresarios del coliseo de la calle de Dragones, han hecho una gran adquisición al contratar a esos fieles intérpretes de la música típica mexicana para que actúen en su teatro. Fueron muy aplaudidos los números de canto, así como también los bailables. (...)

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Teatro Martí. Los Charros en matinée, tarde y noche.- La pelea Uzcudun.-