EDITORIAL | DOMINGO 15 DE JUNIO DE 2008
Impotencia
l margen de maniobra del Go-
E bierno mexicano era infinito
cuando la Presidencia tenía con-
trol efectivo de los tres poderes. En
la medida en que ese control se fue di-
luyendo, su capacidad de acción y re-
acción disminuyó. Esa dilución fue re-
sultado de dos buenas razones: la fe-
deralización y democratización el po-
der. Pero el resultado no es encomia-
ble: los recursos se han descentraliza-
do, pero sin rendición de cuentas y la
capacidad de gobernar prácticamente
ha desaparecido. Se trata de un pro-
blema estructural: si bien la habilidad
del individuo que ocupa la Presiden-
cia para emplear los instrumentos
que sigue teniendo a su alcance esa
oficina influye significativamente en
su desempeño, nadie puede ignorar
que el país enfrenta riesgos severos,
distintos a los de antaño.
En los últimos lustros pasamos
de un Gobierno todopoderoso a uno
enclenque, incapaz de garantizar la
seguridad pública, débil frente a ac-
tores políticos, económicos y crimi-
nales, cada vez más independientes
y avezados, y con poca capacidad pa-
ra encabezar un proceso transforma-
dor en materia de desarrollo del
país. Como la energía, el poder no
desapareció, sólo se transfirió. Y, da-
do el proceso incompleto de demo-
cratización que hemos vivido, esa
transferencia no ha producido un sis-
tema de Gobierno efectivo, institu-
cionalizado y funcional.
El problema no reside en las per-
sonas que han encabezado al Gobier-
no en estos años. Muchos piensan
que el Gobierno no funciona porque
Ernesto Zedillo era un tecnócrata
que no entendía de política, Vicente
Fox un frívolo que ni intentó gober-
nar y Felipe Calderón una persona
que no ha podido con el reto. Más allá
La otra infidelidad
de Creel
L
a vida política es cruel con los
tibios y los indecisos. Por des-
gracia la decencia o las convic-
ciones suelen ser un estorbo en la
vida pública, a menos que se asu-
man hasta las últimas consecuen-
cias. Santiago Creel intentó incur-
sionar en la política bajo la bandera
de la decencia y la honestidad, pero
una y otra vez se apartó de ellas en
momentos decisivos. A la postre no
terminó siendo ni buen político, ni
buena persona.
Las razones que tuvo el PAN
(Calderón) para destituir a Creel
como coordinador de los senadores
de su partido pueden ser muchas y
de distinta naturaleza. Usted esco-
ja: Desconfianza (no pertenece al
grupo que gobierna en Los Pinos).
Resentimiento (Calderón no le per-
dona las zancadillas durante la pre-
campaña presidencial). Incompe-
tencia (resultó pésimo operador po-
lítico en el Congreso). Envidia (va
adelante en las encuestas presiden-
ciales para el 2012). Subordinación a
las televisoras (lo han boicoteado).
Escándalo (resultó demasiado “ojo
alegre” para los panistas: divorcio,
procreador clandestino con Edith
González, idilio actual con otra jo-
vencita, golpes de guaruras en una
discoteca de Acapulco).
Lo más probable es que su re-
moción sea resultado de todos los
factores anteriores. Lo sorprenden-
te no es que Creel haya perdido el
cargo de coordinador de los senado-
res panistas; lo que sorprende es
que haya durado tanto.
Y es que, considerando las opor-
tunidades que tuvo, Creel resultó
un fracaso como político. Fue derro-
tado en las dos candidaturas en las
cuales compitió (la jefatura de Go-
bierno del DF y a la candidatura del
PAN a la Presidencia). Como opera-
dor político hizo un pobre trabajo en
la Secretaría de Gobernación y en la
coordinación del Senado.
Había sido un litigante de pres-
tigio en derecho corporativo, un
buen director de la escuela de Dere-
cho del ITAM y un extraordinario
consejero ciudadano cuando el IFE
todavía era motivo de orgullo entre
los mexicanos. Su llegada a Gober-
nación, de la mano de Vicente Fox,
fue percibida como la gran oportuni-
dad de la sociedad civil: significaba
nada más y nada menos que la polí-
tica quedaba en manos del gran ciu-
dadano. Pero simple y llanamente
se paralizó. Tenía tal miedo de per-
der sus posibilidades como candida-
to presidencial que se guardó sus
convicciones, se autoincautó el cere-
| El Siglo de Torreón | 7A
LUIS RUBIO
El problema no reside en las personas que han encabezado logros no menores, pero a cambio de ca para lograr su cometido.
al Gobierno en estos años. Muchos piensan que el Gobierno
no funciona porque Ernesto Zedillo era un tecnócrata que
no entendía de política, Vicente Fox un frívolo que ni
una parálisis permanente y enormes
riesgos. Dos me parecen particular-
mente graves: ¿qué pasaría si se pre-
Nada de esto es novedoso. De he-
cho, ha habido muchas propuestas de
reforma institucional, algunas más al-
senta una crisis económica como las truistas que otras, pero la mayoría no
intentó gobernar y Felipe Calderón una persona que no del pasado no muy distante? O, quizá ha sido producto de la búsqueda de
ha podido con el reto. Más allá del juicio que cada quien más grave, ¿cómo actuaría ante un mejores soluciones estructurales sino
haga sobre estos tres individuos, el cargo es simplemente escenario como ése un presidente de cálculos políticos de corto plazo.
falso. Mientras contó con los controles tradicionales, menos respetuoso de las formas e Lo que requerimos es una presiden-
el presidente Zedillo pudo vencer la crisis económica instituciones que los últimos tres? cia fuerte en conjunto con una ciuda-
En la realidad actual, existe un danía vigilante y vigorosa, combina-
con que se inauguró su Gobierno, empleando todos los severo riesgo de que el Gobierno no ción absolutamente compatible con la
recursos que requirió para imponer un severo programa cuente con los instrumentos necesa- democracia: reglas institucionales in-
de austeridad sin más. De haberse presentado una rios para lidiar con una crisis de alta violables e instrumentos susceptibles
crisis como la de 1995 después de 1997 las cosas envergadura. En ausencia de los po- de limitar los excesos gubernamenta-
seguramente habrían sido distintas. Lo que cambió deres arbitrarios de antaño, la es- les en manos de la ciudadanía, como
tructura institucional actual simple- son la reelección, la transparencia y
con la democratización del Congreso en 1997 y luego mente no sirve para gobernar: por la rendición efectiva de cuentas.
con la derrota del PRI en 2000, fue la fortaleza intrínseca ejemplo, no sería posible imponer un Pero vamos en sentido contrario:
de la Presidencia de la República: dejó de tener programa de austeridad como el de de la Presidencia excesiva pasamos a
capacidad de maniobra. 1995, sin el cual esa crisis habría de- los mecanismos no-institucionales de
vastado al país. Cualquiera que haya presión como instrumentos para mo-
observado la relación en estos años dificar procesos legalmente constitui-
del juicio que cada quien haga sobre mayor libertad, pero no mayor legiti- entre los tres poderes no puede me- dos. Ahí está el plantón en Reforma y
estos tres individuos, el cargo es sim- midad o respeto a las instituciones; nos que concluir que hay equilibrios, el Zócalo en 2006 y la toma de la tribu-
plemente falso. Mientras contó con hay una mayor diferenciación políti- pero no capacidad de acción. Es evi- na hace unos meses. Uno se pregunta
los controles tradicionales, el presi- ca, pero no una mayor influencia de dente que la actual estructura guber- qué pasaría de llegar al poder un gru-
dente Zedillo pudo vencer la crisis la ciudadanía en las decisiones que le namental no sería adecuada para dar po dispuesto a emplear métodos de
económica con que se inauguró su afectan. La pérdida de poder de la respuesta a los retos y desafíos que esta naturaleza. Si uno observa la his-
Gobierno, empleando todos los recur- Presidencia ha beneficiado al país en serían inherentes a una situación de toria europea de la entre guerra, el
sos que requirió para imponer un se- muchos sentidos, sobre todo en la emergencia. La forma en que ha cre- escenario no es como para festinarse.
vero programa de austeridad sin disminución de la propensión al abu- cido la criminalidad es muestra con- El país requiere una transforma-
más. De haberse presentado una cri- so por parte de las autoridades al que tundente de esta nueva realidad. ción institucional por dos razones:
sis como la de 1995 después de 1997 la población estaba permanentemen- Las instituciones existen para dar una, porque el Gobierno mexicano es
las cosas seguramente habrían sido te sometida, pero no se ha traducido certidumbre a la sociedad y a los ac- cada vez más débil estructuralmente.
distintas. Lo que cambió con la de- en un país más fuerte, desarrollado y tores políticos, así como para limitar La otra porque es imperativo cons-
mocratización del Congreso en 1997 amable en sus formas de vivir. cualquier exceso y abuso. Paradójica- truir una fortaleza institucional que
y luego con la derrota del PRI en La Presidencia era fuerte por su mente, la realidad actual, de institu- haga imposible la materialización de
2000, fue la fortaleza intrínseca de la asociación con el PRI, que le permi- ciones enclenques e inadecuadas, ese escenario alternativo. El verda-
Presidencia de la República: dejó de tía un control efectivo del país en ge- abre la posibilidad de que se abuse de dero desafío reside en construir una
tener capacidad de maniobra. neral. Con la merma de ese poder, su los procesos establecidos y se impon- nueva estructura institucional que no
Las paradojas de nuestra reali- capacidad de acción se ha ido evapo- ga un régimen autoritario. Es decir, se limite a los intereses inmediatos de
dad actual son reveladoras. Se ha lo- rando. En lugar de ese poder desme- existe un riesgo real de que llegara sus autores. Los españoles lo logra-
grado un mayor equilibrio político, dido, hemos llegado a un equilibrio un presidente menos respetuoso de ron con su Constitución actual. No
pero menos crecimiento económico; inestable que permite la convivencia las estructuras institucionales vigen- veo por qué los mexicanos tengamos
hay mayor participación política, pe- política y relativamente amplios tes, dispuesto a modificar la realidad que ser menos capaces.
ro menor representación social; hay márgenes de libertad a la sociedad, empleando la fuerza y violencia políti- www.cidac.org
RELATOS DE ANDAR Y VER
ERNESTO RAMOS COBO
JORGE ZEPEDA PATTERSON
Graduales
Las razones que tuvo el PAN (Calderón) para destituir
a Creel como coordinador de los senadores de su partido
pueden ser muchas y de distinta naturaleza. Usted
abandonos
o abandonamos las cosas al enve- Antes yo chachareaba más
escoja: Desconfianza (no pertenece al grupo que
gobierna en Los Pinos). Resentimiento (Calderón
no le perdona las zancadillas durante la precampaña
N jecer, sino son ellas las que nos
abandonan.
Recientemente me he encontrado con
en el mercadillo de la 11, por
ejemplo, y hace días que fui,
apenas me agaché una vez,
presidencial). Incompetencia (resultó pésimo operador esa frase sin reparar en su significado.
sólo para tomar con mis
político en el Congreso). Envidia (va adelante en las Por allí la escuché, esporádica, en algunas
encuestas presidenciales para el 2012). Subordinación ocasiones, en los labios enmohecidos de manos un encendedor con
a las televisoras (lo han boicoteado). Escándalo algún tendero de esquina, de la señora texturas de crustáceo, y ni
que olvidó los lentes sobre la mesa, de al- siquiera pedí el precio.
(resultó demasiado “ojo alegre” para los panistas: gún párrafo del libro que ahora en mi me- Ocurrió algo semejante hoy
divorcio, procreador clandestino con Edith González, sa descansa. Hay algo en el paso del tiem-
por la mañana. Sucede que
idilio actual con otra jovencita, golpes de guaruras po que tiene tintes de drama; algo de des-
al Motown insólito de Marvin
en una discoteca de Acapulco). migajarse de pan todo cambiante; de pe-
queño reloj de arena; de ir muriendo po- Gaye lo descubrí hace años
co a poco al ritmo de las memorias. gracias a Raquel, una chica
bro y renunció a cualquier apuesta bemos reconocerle a Creel que desde Las teorías de la tierra como ser vivo, que entonces frecuentaba, y
transformadora. Bucareli evitó el uso de la represión integral y abundante, son fantásticas. Un
El caso de Televisa lo ejemplifi- y la mano dura como respuesta polí- árbol aparejado a la oruga, entrando aquí
que logró aficionarme a su
ca. Como secretario de Goberna- tica. Pero no hizo nada para evitar mismo en contacto con mis pies descalzos brillantez y a su gozo, a su
ción concedió al monopolio una des- que otros la usaran a mansalva. Allí sobre el pasto; el sol resplandeciendo en lineal y sollozante melodía,
vergonzada autorización en mate- están los casos de Oaxaca y Ulises mi cara, la concordancia exacta de los as- hasta que pasaron los años y
ria de juegos y sorteos, a cambio de Ruiz, o Atenco y Peña Nieto como tros y el breve mosquito que ya de volar lo abandoné de pronto. Hoy
una cobertura mediática favorable muestra de su inconsistencia. chueco en la pared se estrella. Se habla que encontré su disco cubierto
para la precamapaña presidencial. Quizá por eso los amigos que lo del zen, de vida integral, de noción de ar-
Pero una vez derrotado, la mala conocieron en sus tiempos de conse- monía; de algo que existe aunque ignore- de polvo decidí ponerlo de
conciencia lo llevó a criticar a la te- jero ciudadano señalaban en broma mos a que nombre responde. Hay ocasio- nuevo, después de tantos años.
levisora y eventualmente a ser par- que los alienígenas habían abducido nes en que nos sentimos bien. En donde
te de los que facilitaron la revisión e al ciudadano demócrata, y cierta- parece todo haberse alineado, como si nos
interrupción de la llamada Ley Te- mente muchos nos preguntábamos hubiéramos echado los tacos correctos, y gajan también con el paso del tiempo.
levisa. El resultado es que acabó en quién le había robado el cerebro. el día fluyera sin desazón de mente, sin Antes yo chachareaba más en el
lo peor de los dos mundos: los secto- El caso de Creel es una variante pesadumbre de cabeza en los parpados. mercadillo de la 11, por ejemplo, y hace
res críticos no le perdonan haberse más de las muchas experiencias Hay otros días, sin embargo, que son días que fui, apenas me agaché una vez,
prostituido; la televisora no le per- frustradas que dejan detrás de sí los diferentes, que parecen volar sobre nube sólo para tomar con mis manos un en-
dona haberse arrepentido. ciudadanos, profesionales y empre- negra. La teoría es que entre ellos –entre cendedor con texturas de crustáceo, y ni
Mi impresión es que Creel es sarios que arriban a la política con los diferenciados días negros y blancos— siquiera pedí el precio. Ocurrió algo se-
demasiado buena persona para ser buenas intenciones y magros resul- hay una desconexión extraña que todo lo mejante hoy por la mañana. Sucede que
político; pero no tan buena perso- tados. Llegan impacientes buscan- rompe, que disecciona el acontecer como al Motown insólito de Marvin Gaye lo
na como para hacer una diferencia do el cambio, convencidos de que la un grito entrecortado, surgiendo de ello descubrí hace años gracias a Raquel,
en la política. Carece de la malicia decencia y la honestidad transfor- el desapego, el abandono de las cosas una chica que entonces frecuentaba, y
o el estómago que hacen de los mará la esfera pública, pero termi- otrora disfrutadas. Todo ello se asemeja que logró aficionarme a su brillantez y a
Emilios Gamboas y Manlio Fabios nan subyugados por la fascinación al romperse de un nudo que une a dos su gozo, a su lineal y sollozante melodía,
Beltrones políticos profesionales, que ejerce el poder. Carecen del ci- cuerdas; es como cortar un hilo de pronto, hasta que pasaron los años y lo abando-
canallas de tiempo completo. Pero nismo que caracteriza a los políticos y volverlo a pegar desde distintas hebras. né de pronto. Hoy que encontré su disco
al final no es mucho mejor la digni- profesionales, pero hacen tantas Es sicología pura –al final de cuentas. cubierto de polvo decidí ponerlo de nue-
dad a medio tiempo que ejerce concesiones a sus principios y tales Ayer hice una larga fila para abordar vo, después de tantos años.
Creel. En ocasiones, incluso, pue- moratorias a sus convicciones para un avión, y coincidió ser frente a un espe- Y lo puse en parte para ambientar la
de ser tanto o más dañina. mantenerse en el presupuesto, que jo, cuadro de nosotros mismos, laborato- historia, pero también para poner algo
El senador tiene la extraña cuali- al final resultan personas deslava- rio de nuestros gestos. Inmóviles perma- de ritmo a la opresión de estas teclas (es-
dad de inspirar en muchos grupos la das, prisioneros de la autonegación, necimos todos durante más de media ho- cribo en teclado), como pianista de ojos
sensación de haberles engañado. Y profetas de la demagogia involunta- ra, con el mismo crispado entrecejo, el cerrados. Pero entonces Marvin Gaye so-
es que, en efecto, ha quedado mal con ria. Alberto Begné desde la ONGs mismo gesto de pasmoso aburrimiento nó distinto. Algo hubo en esos años de
tirios y troyanos. El problema con (del Partido Alternativa), Jorge que no quita la vista del frente. Ningún polvo, de su ritmo negro que quiso acer-
Santiago Creel es que sus interlocu- Castañeda desde los circuitos inte- alto ni esbelto se encorvaba, todos pare- carse, del olor a incienso de la pedregosa
tores nunca sabían si estaban ha- lectuales, Eduardo Bours desde el cíamos desinflados, agotados en el vier- nuca de Raquel que quiso acercarse en
blando con el ciudadano demócrata o empresariado, o Santiago Creel nes nocturno, y con el peso del tiempo so- fragatas, pero no, no pudo, ese pasado
con el aliado de Manuel Espino y El desde el ámbito de la abogacía. To- bre nuestros hombros. desapareció ya para siempre, y las he-
Yunque; si era el abogado estricto e dos ellos constituyeron una prome- Peso del tiempo que se apareja al bras ya rotas ahora lo contemplan desde
incorruptible o el frecuentador de sa distinta de renovación ciudadana, despojamiento existencial y físico. En las cúspides abruptas de la nostalgia.
discotecas y amores juveniles. Lo pero terminaron siendo presos de donde el mundo y sus relaciones cambian Abandonadas entonces las cosas con el
cierto es que estos políticos multipo- su propia ambición y víctimas de la frente a nuestros ojos, como cuando de tiempo, empolvadas, pierden las conexio-
lares terminan traicionando a todos. clase política que habían jurado pronto se nubla, y la luz es distinta, y el nes que alguna vez nos llenaron de fres-
Manoseó las buenas causas con cambiar. La verdadera infidelidad todo cambiante frente al prójimo, frente cor, como los pies descalzos sobre el pas-
propósito de ayudarlas, pero terminó de Creel no es la que está documen- a las cosas, frente a nosotros mismos. Un to, irremediablemente. Sicología pura
abandonando todas para no quere- tada en el Hola o el Quién. cambiante profundo plagado de desape- –al final de cuentas.
llarse con los poderes vigentes. De- (www.jorgezepeda.net) gos. Como aquellas aficiones que se des- http://ciudadalfabetos.blogspot.com