Comunicado de Prensa - 30 de julio de 2010

Cierre masivo de secciones en Río Piedras y estudiantes sin clases

La Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios denuncia el cierre masivo de secciones
en el Recinto Universitario de Río Piedras. La rectora Ana Guadalupe anunció ayer a sus Decanos que
cerrarán cientos de secciones de cursos sub graduados y graduados a partir de las 3:00 de la tarde de
hoy viernes. Es vergonzoso que, quien fuera Decana de Estudios Graduados, sea precisamente quien
imparta directrices encaminadas a destruir los programas graduados del Recinto de Río Piedras al cerrar
secciones de forma indiscriminada al pretender una pre matrícula mayor a la que deben tener estos
cursos de alta complejidad. La Rectora y su Decana de Asuntos Académicos, la Prof. Sonia Balet, no
cumplen sus deberes ministeriales de mantener una oferta académica adecuada y variada en horarios
en este recinto. Cerrar secciones con 15, 20 y 30 estudiantes pre matriculados, más que una
medida de costo efectividad- que no es el propósito de una institución pública- es un acto de
represalia descarado de esta administración universitaria contra los estudiantes y contra los
profesores.
Si los burócratas universitarios pretenden emular las instituciones privadas, que imiten su
eficiencia en los procesos de matrícula y la disponibilidad de secciones para la demanda estudiantil, algo
que consideran medular para retener y atraer estudiantes a sus instituciones. Las medidas de cierre de
cursos no solamente es inusual y vengativa sino que promueve la fuga de estudiantes a otras
instituciones, mucho más que un proceso huelgario que lo que exige es mayor participación democrática
de los estudiantes en los asuntos que les afectan y evitar el encarecimiento de la principal institución
superior pública del país y la más exitosa.
Estas medidas de eliminar secciones a oídos sordos de las necesidades de los estudiantes, de
cada departamento, de los reclamos de directores y decanos inclusive, y la disponibilidad de cientos de
profesores para ofrecer los mismos, demuestra una agenda interna que es cónsona con la del partidismo
gubernamental: destruir la universidad del pueblo puertorriqueño, achicarla, encarecerla y hacerla
inaccesible a muchas familias de medianos o escasos recursos económicos. Queda en evidencia
que esta administración y sus vengativos jerarcas de turno les pesa más la agenda política partidista que
la de ser funcionarios al servicio del pueblo. Por eso, en nombre de este pueblo que tiene derecho a una
educación de calidad al menor costo posible y en el mejor espíritu universitario de defender la institución
que estos burócratas quieren destruir, exigimos la renuncia inmediata de la Rectora y de Sonia Balet.
Esta comunidad universitaria de Río Piedras no confía en estas personas porque sus ejecutorias y su
abuso de autoridad contravienen los más elementales principios universitarios.
Mientras se subutilizan las oficinas legales institucionales, se malgasta dinero en bufetes
millonarios como MacConnell-Valdés para demandar a estudiantes pobres. Recordemos que este bufete
es el gestor de la nefasta Ley #7 que se suponía no aplicara en la UPR. Simultáneamente, en
Presidencia se crean nuevos puestos para novatos debido a sus afiliaciones con el gobierno de turno, se
pagan salarios de más de cien mil dólares, y se da la espalda a la verdaderas necesidades de la
academia.
Las acciones que denunciamos de la alta administración universitaria, de la Rectora Interina Ana
Guadalupe y la Decana Balet, en medio de la visita de la Middle States, descaradamente amenazan la
existencia misma de la universidad pues buscan:
— dejar en la calle a cientos de docentes con contratos de servicio
— reducir las cargas de los docentes sin contratos que queden, a 9 créditos y además perderán la
cubierta de plan médico que requiere 12 créditos.
— eliminar cursos de profesores con plazas, arriesgando su carga completa.
— llenar secciones con 30, 45 y hasta 75 estudiantes por sección recarga de trabajo de los
 profesores que también realizan labores de investigación, creación, participan en organismos y
comités institucionales y procesos de acreditaciones.
— dejar a los estudiantes sin cursos medulares disponibles, afectar la secuencia de los cursos,
atrasándoles así su graduación, sirve para demostrar que no tienen el progreso académico
esperado.
— eliminar cursos requisitos para los estudiantes que se gradúan e instar que los tomen en
universidades privadas, o al costo de la matrícula ajustada que aplique ese año a los estudiantes
de nuevo ingreso.

Estas y otras acciones de la administración universitaria, como exigirle a los profesores que enseñen
cursos sin que se les pague por esa labor adicional, demuestran una falta de respeto al trabajo complejo
que realizan los docentes. Denunciamos que se trata de un plan concertado para desestabilizar y
desacreditar la universidad para justificar su privatización, para subcontratar servicios a través de
unidades de cursos externos que carecen de la supervisión de pares, como la División de
Educación Continua. El DECEP resulta más costoso para los estudiantes y con peores salarios para los
docentes que se contraten, incluso sin los requerimientos del estricto proceso de selección de personal
que se llevan a cabo en los recintos y departamentos. El propósito de esta maniobra gerencial es
despedir profesores y empleados alegando que no hay demanda para los cursos y
posteriormente, poner en moratoria programas por alegada falta de demanda estudiantil.
Denunciamos que esto es una burda manipulación partidista en las entrañas mismas del Recinto,
un acto de represalia institucional contra docentes y estudiantes de parte de su Rectora Interina y
de la Decana Sonia Balet. En ellas recae la responsabilidad de que se haga “limonada con los limones”
por la reducción presupuestaria inducida por el partido en el poder con su nefasta Ley #7. Es momento
idóneo para que se reduzcan gastos innecesarios y nunca la oferta y calidad académica, los servicios al
estudiante y las condiciones óptimas de trabajo de los empleados universitarios.
Esta comunidad universitaria va a resistir y defender la universidad pública siendo proactivos y
creativos frente todos sus detractores internos y externos. Denunciaremos los intereses ocultos de todos
y todas los que se unan a este proyecto de destruir la UPR.

Hoy la APPU solicita a los estudiantes, profesores, consejeros y directores que estén disgustados con
esta situación que afecta los ofrecimientos y demandas de cursos de sus departamentos, escuelas o
facultades, que nos informen qué cantidad de secciones se han cerrado en este período de pre matrícula
así como los títulos de estos cursos que se cierren arbitrariamente. Les pedimos a los estudiantes que
traigan a la Oficina de la APPU (altos del Correo Interior) traigan sus listas con firmas de estudiantes
interesados en los cursos y secciones. La APPU recibirá esta información en sus oficinas a partir
del lunes, 2 de agosto, evidencia que mostraremos a la prensa, a la Middle States y al pueblo
puertorriqueño.

Los estudiantes necesitan los cursos, y los profesores podemos ofrecerlos. ¡No más cierres de
secciones ni desempleo de docentes que sí tienen compromiso con educar a este país desde la
Universidad de Puerto Rico.

Pueden comunicarse con María Gisela Rosado, Presidenta de la APPU al 787-565-9707, o con Yolanda Rivera,
Presidenta Capítulo de Río Piedras, al 787-661-7068.

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Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU)
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