7.

El analista es quien est ah y a quien se habla, pero este hablar del sujeto invitado, ms all de
acabar en la plenitud de una verdad penosa, no debera analizarse sobre este plano simplemente
(desentraar resistencias, tensiones, descarga adrenalnica, etc.) sino escucharse en lo que comporta
de entendimiento. Este entendimiento, fcil de reconocer en lo que debe a una demanda implicada por
el hecho de que se habla, si esta ltima no se aborda, es decir, si no se responde a la demanda asociada
a las palabras, lleva a descubrir otra demanda, la demanda presente vinculada a la oferta del analista,
a su invitacin a hablar.

8. La oferta del analista crea una demanda radical marcada por una ausencia, por este no responder a
las palabras que deja la puerta abierta hacia la regresin infantil, hacia el fondo del fondo a partir
del cual el analista aparecer para relevar. Se trata de la regresin analtica en que retornan los
significantes de demandas que se descubren pre-determinadas.