Soy un hombre que pocas veces se ha visto al espejo.
Mantengo mi espanto a la reserva de m mismo Y tengo miedo de lo que tiene el rostro perdido en la soledad.
Estoy degenerado, buscando, pidiendo a gritos un auxilio,
Una forma que me mantenga alerta, entusiasta.
El amor me lleg con toda su honestidad y entrega
Y no supe que trato darle. Le he fallado a las cosas que ms he querido.
Quiero encontrar la manera de poder ser feliz sin pensarlo tanto,
Sin tener que buscarlo entre mis bolsillos vacos.
Estoy tan insolentemente prendido a una tortura
Que es como si alguien dejara caer un espejo.
Borracho, fumado de todo
Enfrento al loco que quiere lanzarme hacia un despeadero Y hay das en que me levanto tan lcido, tan comprometido con el amor y el cuerpo Que parece una locura creer que llevo un hijo de nadie atracado entre los ojos.
El amor me salv alguna vez, ese artilugio, la mejor cosa de dios,
Junto a mis padres, me dieron las ganas para aguantar un poco. Y lo sigo intentando, sin nada por dentro.
Me qued noches enteras incendindolo todo
Consultndome el golpe del corazn Amarrando el orgullo a la ceniza A los meros ardores de una maana pudriendo.
He logrado un saqueo, lo tengo inventariado, lo s por mi aliento,
Por la honesta condicin del desprecio. A esta situacin ahogada, Hincado a la tierra como un condenado, He llorado; Hasta pedir mil perdones Hasta pedir un destino Un milmetro de seguridad La mirada verdadera del viento.