Você está na página 1de 3

Flor Elizabeth Lesher Arguello

LA REVOLUCION FRANCESA
Antecedentes
Los escritores del siglo XVIII, filósofos, politólogos, científicos y economistas,
denominados philosophes, y desde 1751 enciclopedistas, contribuyeron a minar las
bases del Derecho Divino de los reyes. Pero ya en el racionalismo de René Descartes
podría quizá encontrarse el fundamento filosófico de la Revolución. De este modo, la
sola proposición «Pienso, luego existo» llevaría implícito el proceso contra Luis XVI.
La corriente de pensamiento vigente en Francia era la Ilustración, cuyos principios se
basaban en la razón, la igualdad y la libertad. La Ilustración había servido de impulso a
las Trece Colonias norteamericanas para la independencia de su metrópolis europea.
Tanto la influencia de la Ilustración como el ejemplo de los Estados Unidos sirvieron de
«trampolín» ideológico para el desarrollo de la revolución en Francia.

Causas
En términos generales fueron varios los factores que influyeron en la Revolución: un
régimen monárquico que sucumbiría ante su propia rigidez en el contexto de un
mundo cambiante; el surgimiento de una clase burguesa que nació siglos atrás y que
había alcanzado un gran poder en el terreno económico y que ahora empezaba a
propugnar el político; el descontento de las clases populares; la expansión de las
nuevas ideas liberales; la crisis económica que imperó en Francia tras las malas
cosechas y los graves problemas hacendísticos causados por el apoyo militar a la
independencia de Estados Unidos. Ésta intervención militar se convertiría en arma de
doble filo, pues, pese a ganar Francia la guerra contra Gran Bretaña y resarcirse así de
la anterior derrota en la Guerra de los Siete Años, la hacienda quedó en bancarrota y
con una importante deuda externa. Los problemas fiscales de la monarquía, junto al
ejemplo de democracia del nuevo Estado emancipado precipitaron los
acontecimientos.
Desde el punto de vista político, fueron fundamentales ideas tales como las expuestas
por Voltaire, Rousseau o Montesquieu (como por ejemplo, los conceptos de libertad
política, de fraternidad y de igualdad, o de rechazo a una sociedad dividida, o las
nuevas teorías políticas sobre la separación de poderes del Estado). Todo ello fue
rompiendo el prestigio de las instituciones del Antiguo Régimen y ayudaron a su
desplome.
Desde el punto de vista económico, la inmanejable deuda del estado fue exacerbada
por un sistema de extrema desigualdad social y de altos impuestos que los estamentos
privilegiados, nobleza y clero, no tenían obligación de pagar, pero que sí oprimía al
resto de la sociedad. Hubo un aumento de los gastos del Estado simultáneo a un
descenso de la producción agraria de terratenientes y los campesinos, lo que produjo
una grave escasez de alimentos en los meses precedentes a la Revolución. Las
tensiones, tanto sociales como políticas, mucho tiempo contenidas, se desataron en
una gran crisis económica a consecuencia de los dos hechos puntuales señalados: la
colaboración interesada de Francia con la causa de la independencia estadounidense
(que ocasionó un gigantesco déficit fiscal) y el aumento de los precios agrícolas.
El conjunto de la población mostraba un resentimiento generalizado dirigido hacia los
privilegios de los nobles y el dominio de la vida pública por parte de una ambiciosa
clase profesional y comerciante, para quien el ejemplo del proceso revolucionario
estadounidense abrió los horizontes de cambio político.
Flor Elizabeth Lesher Arguello
LA REVOLUCION FRANCESA
El proyecto de la educación universal, laica y gratuita en la revolución francesa
La supresión de diezmos (11 de agosto de1789) afecto los beneficios relacionados con
la segunda enseñanza; la exigencia del juramento cívico elimino de la enseñanza a los
sacerdotes refractarios.
Mediante una educación, regenerada y publica se podrán reafirmar los valores y los
principios. La educación es un deber de la reacción con respecto a si mismo.
Los gobiernos revolucionarios de Francia no duran lo suficiente para realizar en la
práctica un programa educativo. Estuvieron, además, concentrados en la guerra contra
las monarquías.
El papel de la revolución es ilustrar a la nación, su acción no se puede separar de la
difusión de un conocimiento. También forma ciudadanos y no puede lograrlo más que
con la educación, para ello debe apoderase de su imaginación.
Diferenciar la instrucción pública de la educación nacional, la primera debe dar los
conocimientos y la segunda de las virtudes: la primera será el lustre de la sociedad, la
segunda será la consistencia y la fuerza.
El gran problema de la pedagogía revolucionaria es como hacer algo nuevo con lo
viejo. Dos aspectos: uno se dedica a un nuevo sistema escolar, a los programas de
enseñanza etcétera, y el otro al plan de las festividades cívicas. La educación cívica no
debería limitarse a las festividades.
La figura del instructor ideales la encarnación misma de esta unidad: tendrá que
enseñar a leer y a escribir y al mismo tiempo participar activamente en la organización
de las festividades cívicas.
Sin embargo, impulsaron la preparación de proyectos precisos para aplicar un nuevo
modelo de educación, cuando las circunstancias lo permitieran.

Propuesta de condorcet
El más importante de esos proyectos es el formulado por Antonio María de
Condorcet en las Cinco memorias sobre la Instrucción Pública, redactadas en 1790 y
presentadas en forma de proyecto a la Asamblea Legislativa en 1792.
El Marqués de Condorcet pertenecía a una familia aristocrática, pero carente de
fortuna y de poder. Fue personalmente afín a las corrientes de la ilustración (amigo y
discípulo de D’Alambert y cercano a Voltaire en los últimos años de éste) científico él
mismo ejemplifica la confianza ilimitada en la razón que caracteriza a su generación.
Murió poco después de haber presentado su proyecto, víctima de las luchas internas
entre los revolucionarios.
El proyecto de Condorcet tiene características que lo distinguen de otras propuestas
de la época. Propugna una educación universal, igual para ambos géneros, con un
sistema de niveles que va de la educación básica hasta una academia de ciencias.
Contribuir al “perfeccionamiento general y gradual de la especie humana”, la
enseñanza será gratuita, la instrucción es laica.
Flor Elizabeth Lesher Arguello
LA REVOLUCION FRANCESA
Cinco categorías: escuelas primarias, escuelas secundarias, institutos, liceas y sociedad
nacional de ciencias y artes.
El proyecto de Condorcet reprochan su carácter laico, le critican su carácter abstracto,
critico y racionalista además consideraban aquel proyecto era muy elitista y erudito.
La escuela obligatoria se pondría en contra de la república y a las madres y los padres
de toda clase social, la convección voto por la ceración de las causa de las
desigualdades.
Las ideas de Condorcet estarán presentes en el debate y las contradictorias
experiencias de política educativa que se desarrollan en Francia durante casi todo el
siglo
XIX. Muchas de sus orientaciones se recogen cuando, en la década de 1880, la Tercera
República, conducida por el ministro Jules Ferry, establece en forma definitiva la
educación pública universal, laica y gratuita, bajo la autoridad del gobierno nacional.
El proyecto de bouquer establecía una enseñanza elemental y gratuita para todos,
añadió la obligación escolar, libertad de enseñanza.
A las personas que apenas supieran leer y escribir tomar a su cargo la instrucción de la
escuela primaria.
La escuela de Marte tenía que preparar para el oficio de las armas o para una carrera
administrativa.
Escuela politécnica debía formar ingenieros para los cuerpos técnicos del ejército.

Você também pode gostar