Se fundan cátedras en las principales escuelas de Medicina, sobre todo, en Francia, Italia e

Inglaterra: uno de los psiquiatras que logra fama internacional fue C. Lombroso (1836-1909),
fundador de la teoría: “Antropología Degenerativa de la Delincuencia”, en donde describe las
desviaciones físicas, mentales, nerviosas, atávicas o degenerativas de los delincuentes.

J. Charcot (1825-1993), médico francés, alcanza en la Salpetriere, las investigaciones más

importantes en Neurología y Psiquiatría, sobre todo el estudio de las Histerias: Reil, Heinroth,
Calmeil y Prichard en su “tratado sobre Demencia”, son los médicos psiquiatras más difundidos
y destacados, las investigaciones avanzan, así es como Ernest Heinrich Weber, inició en su
laboratorio, la Psiquiatría Experimental, que siguieron Rudolph Lotze, que investiga sobre la
Psicología Analítica, su obra “Psicología del Alma”, aún tiene actualidad.

Kuosmaul, escribió sobre la vida psíquica del niño recién nacido; un distinguido neurólogo que
investigo la percepción sensitiva y sensorial, la mecánica del nervio y sus centros nervioso,
pretendió reducir el psiquismo humano a datos mesurables y a leyes exactas, escribió sobre
Psicología y Psiquiatría en “Elementos de la Psicología Fisiológica”.

Por este tiempo estaba en elaboración la teoría Psicoanalítica de Sigmund Freud (1856-1935),
así como el Conductismo del norte-americano John Watson.

El progreso de la medicina científica del siglo XIX, por la introducción del sistema evolutivo de l
morfología, fisiología y biología, de donde salieron las ciencias de la Patología celular, la
bacteriología y la parasitología, que llevan a nuevos métodos de diagnóstico y nuevos métodos
de tratamientos las vacunas, los sueros, etc., a los que se suma la asepsia de Pasteur,
Semmelweis y Lister: se producen grandes cambios en salud pública, la higiene, las
especialidades iniciadas en el siglo pasado se desarrollan, se implantan otras nuevas y novedosas
bajo los grandes progresos de la Educación médica, la influencia de la Medicina Militar, sobre
todo por las múltiples publicaciones médicas y científicas, la implementación de nuevos y
rápidos medios de comunicación, la fotografía, el cable, la mejoría de transportes, la difusión y
progreso de las bibliotecas, de las Universidades, escuelas de Medicina, Museos, laboratorios y
las investigaciones que continúan, tal como descubrimientos del ruso exilado en Italia: E.
Metchnicoff, quien en forma insólita, separa de un ramo de rosas una espina la clava en la
membrana de una Estrella de mar, en 1883, al día siguiente bajo su microscopio observó un
espectáculo fascinante, pero no lo sorprende, pues era lo que esperaba, la espina estaba
circundada por un número infinito de células que acudían a defender a la estrella marina contra
la espina. Metchnicoff, que había intuido la función de defensa de células migratorias, pudo
comprobar y corroborar llamando a éste mecanismo “fagocitosis”, para indicar el proceso
celular de destrucción de las intrusos y lo llamó Fagocitosis a las células migratorias,
demostrando éste investigador ruso, que la fagocitosis es la característica de base de la
inflamación y las funciones de defensa residen en las células diferenciales: Glóbulos blancos
circulantes, células del endotelio capilar y las células del tejido linfático, lo que llevaría más tarde
a la concepción de las defensas inmunitarias, Metchnicoff obtuvo el premio Nobel en 1908.

Otra gesta trascendental de la bilogía del siglo XIX, que se gestó años antes, fueron los de la
genética, cuyos estudios fueron establecidos por Francis Galton, quien aplicó las matemáticas al
estudio de la herencia; fue Gregor Mendel (1822-1884) eclesiástico de Althrunn que inicia sus
famosos experimentos y estudios con guisantes, siguiendo la transmisión hereditaria de cada
característica en la descendencia.