contenido

Consejo Editorial

02 05
Jorge Rodríguez Gómez
Felipe Saldivia
Gustavo Borges Revilla
— perfil — EL MENJURJE
Directora
Cruz Villegas Mancheta y demás
Mercedes Chacín
Editor Jefe
Carlos Cova
DirecTORa de Arte
Edarlys Rodríguez
06
— ciudad
10
— música
ÉpaleCCS punto info Musical Carrillo: pura pasta
COORDINADOR DE FOTOGRAFÍA
Jesús Castillo

Asesor Editorial
Reinaldo González 12
— mitos
13
— mIradas
Coordinadora 2.0 Un tal Bassil Battah Caracas mutante
Yanira Albornoz

Web y redeS
Kay Yam Hung
Bárbara Baralt

Redacción
20
— minicrónicas
21
— filo y borde
Nathali Gómez Moscoso Desde la casa rosada Inmoral e inalcanzable
Gustavo Mérida
Ander de Tejada
Marlon Zambrano

DiseñadorEs
Lisbeth Montell
Óscar Hernández
22
— sexodiversidad
23
— entrevista
Amanda, amante “¡Qué bicho más loco!”
Ilustrador
Alfredo Rajoy

Fotógrafo
Michael Mata 26
— libremente
27
— gastronomía
CORRECTOR
Rodolfo Castillo Tu ambivalencia Pichones de sibarita

LOGÍSTICA

28 29
Idania Bracamonte
Daniela Fernández
Edi Cordero
— crítica y media — crónicas
Colaboran en esta edición
Cine y televisión Manual del levante (I)
Clodovaldo Hernández, María B. Chacín, Miguel Posani, Mayleni
Curros, Indira Carpio, Naile Manjarrés, Freddy Fernández,
Mauricio Sánchez, Rosi Bethancourt, Enrique Hernández, Jessica

34 35
Mena, Henry Rojas, Franklin Alviárez, L. “Razor” Balza y Andrés
Palacios. Archivo Ciudad CCS.
Fotografía de portada: Enrique Hernández.
— Poesía — cruciverbo’s
Impresión
o nada Crucicentrifugado
Complejo Editorial Alfredo Maneiro
Editorial Metropolis, C.A.

36 37
epale.ciudadccs@gmail.com @epaleccs @epaleccs

Comercialización y Ventas:
0212-8080323/0426-5112114
Distribución: 0212-8085843 — el rumor — la bitácora
Depósito Legal: pp201202dc4166 de las bolas de amón-ra
Una publicación de la
Revista Gratuita Circula los domingos con el Diario Ciudad CCS
búscala de lunes a viernes en nuestra sede: esq. san jacinto, edif. gradillas “c”, piso 1,
al lado de la taquilla única de servicios municipales y en la librería-Bar el techo de la
ballena, edif. Gradillas “A”, planta Baja, Bulevar del Eterno Retorno

Premio Nacional de Periodismo “Simón Bolívar”, 2014 y 2015.

Premio Municipal de Periodismo “Guillermo García Ponce”, 2014.
02 PERFIL
 03

Cruz Villegas
un modesto soldado de la clase obrera
Albañil, sindicalista, poeta, preso político y gran padre
de familia, este hombre que nació en Cúa en 1917, el emble-
mático año de la Revolución rusa, se definió a sí mismo
como un ciudadano del mundo, un hombre universal
y profundamente venezolano. También solía decir,
con orgullo y sin importarle quien se horrorizara:
“yo sí soy estalinista”
POR Clodovaldo Hernández • clodoher@yahoo.com / ILUSTRACIóN ALFREDO RAJOY

Los hermanos Villegas, periodistas de gran trayectoria y de vibran- Al leer y escuchar sobre su vida, lo primero que impresiona es la
tes incursiones en la política y el sindicalismo, son bromistas natos. versatilidad de Cruz Villegas. Fue obrero de la construcción y, al
Cuando se juntan, no dejan títere con cabeza a punta de chistes y mismo tiempo, un dirigente comunista de primer nivel. Fue sindi-
juegos de palabras. De sus chanzas no se salvó ni su padre enfer- calista y a la vez poeta. Estuvo preso (un genuino preso político) y
mo. El viejo Cruz estaba muy mal, la diabetes había ido minando su en la cárcel tuvo la entereza para escribir emotivas cartas a sus hijos
cuerpo de guerrero. Llegó un momento en que ya no podía articular e hijas, y para crear hermosos versos. Y con las mismas manos que
palabra, pero sus camaradas de toda la vida seguían visitándolo y escribía poemas y proclamas, construyó la casa de la familia, en
uno de ellos se empeñaba en rememorar viejas andanzas. Se le metía Veredas de Coche.
en el cuarto y peroraba sin parar, mientras Cruz apenas alcanzaba
a balbucear algunas frases inentendibles. Los hijos inventaron un Una vez le pidieron que se retratara a sí mismo, con palabras,
y dijo: “Tengo grandes y múltiples satisfacciones, me siento un
chiste: “Allí lo que hay es un soliloquio: uno que habla solo y el otro
que esta loquio”. hombre universal y profundamente venezolano. He aprendido a
vivir la fraternidad y el cariño de todos los pueblos. Me considero
Si los oyó, de seguro que Cruz se estaba riendo por dentro de las ciudadano del mundo y un modesto soldado de la clase obrera
ocurrencias de los muérganos esos, pues todos los que lo conocieron internacional”.
aseguran que él también era un tipo con gran sentido del humor.
Perfecto Abreu Nieves, en el prólogo del libro biográfico Cuando El mayor entre los varones, Mario, pionero de la dinastía de perio-
tenga mis manos, recuerda que Cruz y José Félix Ramírez, otro di- distas, escribió el siguiente párrafo: “Mi papá fue un trabajador in-
rigente del Partido Comunista, siempre llevaban la voz cantante en cansable. A la par de su intenso accionar político y sindical, jamás
las chanzas que se permitían (de vez en cuando, claro) en el Comité abandonó la elaboración intelectual —tarea para la cual tecleaba
Central. Sin embargo, cuando la situación lo ameritaba, se ponía de velozmente con dos dedos su máquina de escribir— ni dejó de rea-
verdad serio y a veces hasta se pasaba de maraca. Así ocurrió en lizar él mismo, y con el concurso de sus hijos, trabajos de albañilería
1986, cuando obligó a los miembros del Comité Ejecutivo de la Cen- en nuestra propia casa. Comunista convencido y practicante, fue,
tral Unitaria de Trabajadores de Venezuela (la CUTV, organización sin embargo, un defensor irrestricto de las libertades democráticas,
obrera de los comunistas) a dejar de ver un partido del Mundial de enemigo del autoritarismo y del militarismo, del sectarismo y de la
Fútbol, celebrado en México, para realizar una asamblea. Argumen- prepotencia, del atropello, de la burla y de las descalificaciones, así
tó que “los medios de comunicación nos ponen a ver a un hombre- como también de la adulancia y del culto a la personalidad. Lo que sí
cito de mierda corriendo detrás de una pelota para distraernos de cultivó siempre fueron los valores familiares, la honestidad, el buen
nuestras tareas revolucionarias”. Varios se calaron a regañadientes humor, la solidaridad, el respeto, la tolerancia y la amistad personal y
el sacrificio revolucionario, entre otras razones porque uno de esos política, incluso con sus más firmes adversarios. Siempre doy gracias
hombrecitos era nada menos que Diego Armando Maradona. a la vida por haberme dado el padre y la madre que me dio”.

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
04

Vladimir, el segundo de los periodistas Villegas, agregó: “Fue esen- Estuvo preso (un genuino
cialmente un dirigente obrero. También fue un comunista convenci-
do de sus ideas. Ortodoxo pero jamás negado al debate ni a la crítica.
preso político) y en la cárcel
De hecho, la ejercía siempre en el seno de su partido, el PCV. Era un tuvo la entereza para escribir
militante disciplinado pero a la vez incómodo porque no se quedaba emotivas cartas a sus hijos e
callado, aunque su punto de vista fuese minoritario. Nuestras sobre- hijas, y para crear hermosos
mesas en casa con el viejo y su inmensa sabiduría y humildad son
inolvidables. El hecho de ser comunista no le impedía rendir culto
versos. Y con las mismas
a la amistad, incluso con adversarios políticos e ideológicos. Era un manos que escribía poemas y
tipo de buen humor y también un poeta del amor, la revolución, la proclamas, construyó la casa
negritud y la vida en prisión. Pese a su ajetreada vida de luchador de la familia, en Veredas de
social, siempre tuvo espacio para una vida familiar que dejó en noso- Coche
tros honda huella de afecto y unidad”.
—
Ernesto, el benjamín de la familia, también evoca las deliciosas so-
bremesas con cuentos y anécdotas e igualmente recuerda que Cruz
era capaz de entenderse con sus adversarios. Sin embargo, advierte
que no lo retrata fielmente quien pretenda hacer una versión desca- El legendario dirigente comunista Eduardo Gallegos Mancera co-
feinada de él. Para ilustrar su observación, el ex ministro de Comu- noció a Cruz Villegas a finales de la década de los 30, cuando era un
nicación e Información se remonta al día del velorio de su padre, en joven líder sindical bastante peleón. “Era pugnaz con empresarios,
enero de 1994. El entonces presidente electo, Rafael Caldera, fue a capataces y abogados patronales, claro y directo en sus planteamien-
presentar su pésame y comentó que Cruz Villegas “perteneció a una tos y enérgico en aquello de elegir y llevar a la práctica la consigna
generación de comunistas que luchó hasta el final por sus ideales sin precisa en el momento preciso”, escribió Gallegos Mancera en el pró-
tener conocimiento de las arbitrariedades del estalinismo”. Ernesto, logo del poemario Cárcel, amor, selva y libertad, publicado en 1980
que entonces tenía 23 años, se sintió obligado a disentir. Le dijo a por La Casa del Escritor.
Caldera: “Disculpe, Presidente, pero mi viejo era admirador de Sta-
lin y se sentía orgulloso de decir ‘yo sí soy estalinista’”. Otro prologuista del mismo libro, el actor y dramaturgo Yorlando
Conde, explicó que los poemas de Cruz les permitieron a los in-
Ernesto añade que, si bien tenía amigos en todos los partidos, era tegrantes del grupo Teatro Para Obreros (TPOS) transmitirles a
ideológicamente indoblegable. Como prueba esgrime otra anécdota. los trabajadores el mensaje de que ellos también podían ser crea-
Laureano Torrealba, el padre de el “Chúo” de la MUD, fue comunista dores artísticos.
y luego se volvió adeco. Cruz lo siguió tratando, pero en una ocasión
alguien le organizó un homenaje a Torrealba y este tuvo la osadía de Y el insigne periodista y profesor universitario Héctor Mujica calificó
invitar a Cruz, quien reaccionó muy indignado. “¿Cómo se le ocurre en su momento a Villegas como “un hombre vigoroso de aspecto y
a ese carajo pensar que yo voy a ir a un homenaje para él, después de vigoroso de palabra, que ha hecho de su vida la pasión revolucionaria”.
lo que hizo?”.
Miles de anécdotas describen a este tuyero nacido en el emblemático
Oigamos de nuevo a Abreu Nieves, miembro actual del Buró Político 1917, el año de la Revolución rusa, y que compartió su larga vida
del PCV, quien fue prácticamente un hijo adoptivo de Cruz. “Era de con la croata Maja Poljak. Solo queda espacio para una: la CUTV
carácter sencillo, en ocasiones jocoso, desprendido, solidario, respe- tenía varios meses de atraso en el pago del alquiler de su sede y el
tuoso, discreto y de una gran modestia personal. Firme en la toma de dueño intentaba un desalojo. En el fragor de las discusiones, el abo-
decisiones, de pasos rápidos al caminar, de carácter seguro, apasio- gado increpó a los sindicalistas haciéndoles ver que no podían estar
nado en la acción, de buen vestir, casi siempre portando un sombre- allí sin pagar la renta. “¿Ustedes que pretenden?”, interrogó, en obvia
ro, hombre sencillo que con su ejemplar conducta levantaba muros referencia al pleito de arrendamiento. Pero Cruz decidió responder
de contención en defensa de su dignidad, su condición ético-moral y como lo que era, un comunista ortodoxo: “Nosotros pretendemos la
sus convicciones ideológicas, políticas y culturales”. abolición de la propiedad privada y la dictadura del proletariado”.

Edición Número Ciento setenta y seis . Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
 el menjurJe 05

guitarra
playera
Las guitarras se van a las costas de Cho-
roní en el XX Encuentro Guitarrístico,
donde participarán Leopoldo Igarza,
Guillermo Flores, Efraín Silva, Jhibaro
Rodríguez, Yeley Parra, Esteban Ojeda y
el grupo Raíces de Venezuela.

En este encuentro, que culmina el 10 de

mayo, están programados conciertos, cla-
ses magistrales, talleres y conversatorios.

El domingo 8 de mayo habrá doble

recital en honor a las madres. Uno será
en la iglesia Santa Clara de Asís, a las 11
am, y el otro a las 7 pm en la posada El
Ensueño.
Eliézer otaiza
El pasado martes 26, la canciller Delcy Rodríguez fue la primera persona En un teatro lleno hasta los teque-teques,
condecorada con la Orden Teniente Coronel Eliézer Otaiza, en su única cla- el artista preguntó al público si sabían
se. El alcalde Jorge Rodríguez contó, emocionado, "la certeza de la victoria quién es Alirio Díaz. Nadie levantó la
cuando veía a un lado y estaba Eliézer Otaiza, siempre, cuando estaba la mano.
necesidad de proteger a sus hermanos y hermanas". Lealtad y compasión.
Eso es Eliézer.
Que la calima se está esfumando.
Falta el bachaqueo.
“Venezolano porque no queda de otra. Esposo
de una turista permanente. Preso político de
comiquita”, así se presenta Leopoldo Patiño,
desde Ramo Verde, en su página de Facebook
con el mismo nombre. Cada martes se estre- «
nan sus aventuras “simpsonizadas”. Apúrense
a verlo porque un miembro de Voluntad
Popular ya mandó a sacarlas de Youtube.
¿Manual o
manuela?
«
Una joven sostenía un cartelito
que rezaba: “Sexo seguro”, y repar-
tía condones a los viandantes entre
Monjas y Gradillas. “Dame otro”,
supliqué. “Es uno por persona”,
dijo con firmeza. “Tengo un hijo Que algunos se empecinen
adolescente”, repliqué. Me lo dio. en derrochar agua y
electricidad.
Todavía él no sabe que lo tengo.

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
06 CIUDAD
Épale CCS
punto info
Desde octubre del año pasado,
y a la máxima velocidad permitida
en los callejones de la burocracia,
un equipo de tres personas, todas
mujeres, recorrió satisfactoria-
mente las curvas binarias
hasta encontrar la distancia
más corta entre los unos
y los ceros: la determinación
POR gustavo mérida • @gusmerida1 / FOTOGRAFÍAs michael mata
Kay Yam Hung, con la mano izquierda, aco-
modaba papelitos debajo del teclado y con el
dedo índice de la derecha le daba vueltas a la
rueda de desplazamiento del ratón: la porta-
da de epaleccs.info subía y bajaba, cual pe-
lotita de pinball testaruda e independiente.
“Hagan como si trabajáramos mucho”, digo
en un arrebato de chiste malo digno de “Cha-
tén” —el payaso que Ramos Allup invitó a la
Asamblea— mientras Mata, el fotógrafo, hace
su trabajo en picado montado sobre dos ar-
turitos que siempre me han parecido mesitas
de noche. Kay Yam deja de mover las manos,
las relaja, primero tensa y después mueve su
cuello, lentamente, hasta que me mira directo
a los ojos y pronuncia con parsimonia casi in-
timidante: “Yo trabajo que jode, mijito”.
Mata terminó de apuntar el objetivo y yo hui
a procrastinar con la excusa del café. Hung
siguió trabajando, Yanira Albornoz siguió
trabajando, Bárbara Baralt se fue a seguir tra-
bajando. Ellas tres forman el equipo que, sin
aspavientos (aunque Hung sube contenidos
Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
moviendo el cuello al ritmo de DJ Snake), ha
“montado” en el nuevo sitio web de esta revista
casi la totalidad de las 176 ediciones que van
hasta el día de hoy.
Con Cariño
Nos encontramos, en la esquina de San Jacin-
to, con Mercedes Chacín, directora de Épale
CCS, y Yanira Albornoz, coordinadora 2.0 y
encargada del proyecto. Allí, luego de comer
y beber con una frugalidad absoluta, ellas con-
taron, barrigas llenas y corazones contentos
(ellas), sobre qué va el asunto: tener un sitio
web propio. “Esperamos que Unasur tenga su
propia fibra óptica, para que cuando ellos ba-
jen el suiche, no nos quedemos sin página”. Al-
bornoz salta (¿o navega?) de un tema a otro sin
discutir obsesiones, sin aparentar soluciones.
Terca, suave, Albornoz sabe que con la ética
no hay medias tintas: “No tienes que pregun-
tarle a nadie; pregúntate tú: ¿publicarías esa
foto si fuese de un familiar?”. Ahí uno se queda
pensando. Antes, o después, no importa. Yani-
ra termina de contar, sin esconder la satisfac-
Caracas, 1 de mayo de 2016.
ción en una falsa modestia, las peripecias (sí,
se tienen peripecias frente a un computador:
es otra época) para obtener los libros que están
en nuestro sitio web, famoso (sí, famoso) por
tener, además, la mejor agenda cultural y cul-
turosa de Caracas. “No puedes bajar (archivos)
PDF en todos lados porque existen los dere-
chos de autor —explica Albornoz—, pero hay
editoriales que los tienen libres y hay autores
que en sus blogs ponen sus libros, por ejem-
plo: Atilio Borón. No así Pascual Serrano: sus
libros son buenísimos, pero no ha puesto ni un
‘pedeefito’ ahí, aunque sea. Luis Britto García
sí lo hace. Es un trabajo buscar libros para ba-
jar en internet y ponerlos a la orden de quienes
entren a la página”. He allí que, entonces, tam-

“El valor de la bién hay una biblioteca con cariño, hurgada
página web de la con paciencia para que lean sin prisas. Para
procrastinar de verdad, epaleccs.info es una
revista son los buena opción. “El valor de la página web de la
contenidos propios revista son los contenidos propios y bien escri-
y bien escritos; la tos; la revista cuenta con una plantilla de pe-
revista cuenta con riodistas donde prácticamente todos escriben
una plantilla de bien, unos más profundos, otros no tanto. Tú
puedes hacer una serie de observaciones pero
periodistas donde hay un rango de buena escritura, con buen hu-
prácticamente todos mor, es decir, saben hacer lo que hacen y eso
escriben bien, unos es importante. La mayoría de las páginas web
más profundos, no tienen contenido propio —bueno, The New
York Times sí—, la mayoría de las páginas se
otros no tanto” fusilan vainas de AVN, etcétera. Por ejemplo:
— hay páginas web —que no voy a mencionar—
Caracas, 1 de mayo de 2016.
07
que toman trabajos de Épale CCS: se apropian
de los perfiles de Clodovaldo (Hernández) y
no mencionan la fuente. No tenemos derechos
reservados y lo decimos, pero por cortesía, al
menos, deben citar el autor o la autora y dónde
fue publicado originalmente. Es un gran valor,
tanto de la revista como de la página web”.
La delación
va por mi cuenta
Las páginas web de YVKE Mundial, Notivar-
gas y el PSUV publicaron el trabajo de Clodo-
valdo Hernández de la sección Perfil “Silencio
informativo: el día que Tom y Jerry trabajaron
horas extras” y ninguna citó a la revista (Épale
CCS N° 173 del domingo 10 de abril del pre-
Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
08

sente año). Albornoz y Chacín comieron un

pastel de chucho que no era de chucho. Mien-
tras la cerveza artesanal se enfría un poco más,
es imposible no tropezar, incluso ahí sentado,
donde se supone que uno está a salvo, con el
mamotreto insalvable de “Faluco”. De Gradi-
llas a San Jacinto hay mucha tela —literalmen-
te— que cortar, mucha suela que cambiar y
algún antro que inaugurar.

Dos punto cero

A Bárbara Baralt le gusta caminar por el par-
que Ezequiel Zamora. Le he visto hacerlo. Ca-
llada y serena, no quisiera estar en el pellejo de
quien se atreva a retarla. Ella se describe sin
ambages: “Las redes sociales siempre me han
gustado, tengo 19 años y a los 11, como tal, fue
que comencé a adentrarme bien en este mun- Yanira Albornoz, la jefa simpática
do. Ya había usado redes como MySpace y Hi5,
que son viejas, pero con Facebook, y luego con
la llegada de Twitter, creé una página en donde
publicaba información sobre un grupo musi-
cal que me gusta, intentando reunir a un grupo
de jóvenes fanáticos en torno a lo mismo que
yo escucho. Cuando somos pequeños no ima-
ginamos qué tipo de impacto puede tener lo
que estamos haciendo. Yo empecé por diver-
sión y terminé siendo contactada por jóvenes
de otros países y hasta por el papá del vocalista
de la banda que a mí me gusta, la cual promo-
ciono por Facebook y Twitter en nuestro país.
Pero hay que ver que cuando uno hace las co-
sas bien, y además te gusta lo que haces, recibes
una buena recompensa: el papá del vocalista
me envió desde Cincinnati, Ohio, un paque-
te con regalos para mí como agradecimiento
a mi dedicación e impacto en las redes. Es así
como he seguido dedicándome a este mundo,
no a la espera de regalos, sino con la idea de
reforzarle a la gente que esto no es un juego y Kay Yam Hung, concentrada
que pueden leernos, respondernos e, incluso,
podemos influenciar positivamente a otros que le gusta mucho alguna de las cosas que página web de Épale CCS, epaleccs.info.
más allá de nuestras fronteras. Después de esto ustedes escriben, entonces les agradezco Pero, también hay gente que dice cosas ne-
me llamaron otros grupos de fanáticos pidién- que lean Épale CCS e, incluso, los retuiteo. gativas —de ellos nadie se libra porque te
dome ayuda para manejarse mejor en internet Esa interacción es importante y les hace ver los encuentras en todos lados— y no digo
y, tiempo después, conseguí mi primer trabajo que estás pendiente de ellos. Si el público se que a ellos no los debas atender, claro que sí.
como manejadora de redes en una empresa levanta atento de ir a buscar tu producto y Hay críticas constructivas que siempre te ayu-
de comunicación estratégica, mercadeo y res- seguirte en la red, hay que ser atentos igual- dan a mejorar, pero hay otro tipo de comenta-
ponsabilidad social”. Baralt me respondió con mente, incluso aportando algo más para rios que es mejor no responder por respeto a
amabilidad: “Cuando la gente tuitea es por- ellos, como se está haciendo con la nueva los mismos seguidores y a tu imagen. Hay que

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
 09

estar claros en eso. No pienses que solo te va

a leer la persona a la que le respondes, no es
así: el mensaje va más allá. En las redes sociales
no hay que ser falso ni, mucho menos, que-
rer caerle bien a todo el mundo porque, como
dije, hay gente que siempre va a criticar, pero
hay que saber mantenerse al margen y pensar
el impacto que puede tener tu respuesta en tu
página. La atención y la amabilidad que puede
darte un empleado de un restaurante ayudan a
que vuelvas ahí a comer. La atención y amabi-
lidad que puede darte un manejador de redes
ayuda a que vuelvan a leerte... y los epaleros
2.0 suben cada vez más. A mí me parece que
estamos haciendo un buen trabajo”.

Esperamos que ustedes piensen lo mismo. Bárbara Baralt, la que se comunica con l@s epaler@s

Esta redacción parece la antesala de un portal hacia lo desconocido

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
10 MÚSICA

Musical Carrillo
pura pasta
El rincón del coleccionista musical ha dado vueltas,
como un disco, por la candelaria. si entra allí,
recordará aquellos tiempos cuando tenía
que voltear el casete
POR nathali gómez • @laespergesia / FOTOGRAFÍAs michael mata

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.

Cuando Néstor Julio Carrillo habla de él,
utiliza el plural. Ya son 60 años al frente de
Musical Carrillo. El rincón del coleccionista,
lo que le da la licencia para decir “nosotros”
al referirse a su pasión inextinguible por
la música. Mientras conversa, no para de
moverse: contesta el teléfono, atiende un
pedido, sale y regresa para continuar en el
mismo punto donde quedó.
Carrillo es menudo, con un tono de voz
suave, con bigote y cabellos blancos. Sus ojos,
que parecen una línea, han recorrido con la
mirada más de 10.000 discos que forman
parte de su colección. Su vitalidad y lucidez,
a los 78 años, asombra: sabe el nombre de
una canción solo con cantarle una estrofa.
“Empezamos trabajando en 1959 en varios
sitios”, dice este oriundo de Arboledas,
Cúcuta. Desde ese entonces no ha salido de
La Candelaria. Estuvo 30 años en el edificio
Internacional, de Urapal a Río; otros 12 años
en el Urimare, en la esquina de Urapal; ocho
más en el Iberia, en la esquina de Ánimas; y
actualmente tiene ocho en el local número
22 del Centro Candoral.
El pequeño espacio de 45 metros cuadrados
se va llenando. Los dedos de los coleccionistas
recorren, con la habilidad del deseo de
posesión, los discos de acetato que están
apilados en varias estanterías. Otros asiduos
llegan pidiendo discos MP3, que fueron
transferidos a ese formato desde casetes y LP.
“¿Cómo sigues tú, mi viejito?”, suelta una voz
que se interesa por la salud de Carrillo, que
se operó de la vista recientemente.
“Le compré un disco que es una joya”, dice el
músico Rafael Hernández, mientras muestra
Ojo musical
¿Cómo describir la música con imá-
genes? La puerta tiene la respues-
ta: “Recordar es vivir”. Dentro de
Carrillo Musical están las sonrisas
congeladas de Lila Morillo al lado de
El Puma, de una Estelita del Llano
Sensual, de Camilo Sesto sumergido
en una pared de hiedra. Arriba de los
estantes, como robots del pasado, pi-
cós, betamax, VHS y hasta un gramó-
fono. En un afiche está Frank Zappa
con una bufanda de papel toilet sobre
una foto de Julio Iglesias abrazan-
do a un perro. Lionel Richie está
atrapado en una gavera de refrescos
y los casetes son la prueba de que
alguna vez existieron. Carrillo saca
las joyas: un disco de baquelita, de
los que se rompen al caerse, un LP
con dibujos estampados y el primer
CD, que es del tamaño de un disco de
acetato. De fondo, un día cualquiera,
suena “Moonlighting” en la voz de Al
Jarreu: Some walk by night / Some
fly by day / Nothing could change you
/ Set and sure of the way / There is
the sun and moon…
un LP como si fuera un pescado recién sacado
del agua. Borinquen/ preciosa te llaman/ las
olas del mar que te bañan, canta su felicidad
por el hallazgo. En su regazo lleva varios
acetatos con música de Los Guaracheros de
Oriente, de Fernando Albuerne, de Daniel
Santos, de Alberto Beltrán y de Luis Laguna.
Pura cabilla.
Caracas, 1 de mayo de 2016.
11
Carrillo se define como un “aficionado
de oído”. En su tienda se puede encontrar
música venezolana, “del recuerdo” (como
él la denomina), colombiana, mexicana,
cubana, académica, instrumental. También
hay merengue, bachata, tango, salsa, jazz,
rock, ópera, zarzuela. “Me adapto a todos los
formatos”, dice. De fondo, como asintiendo,
hay discos de acetato, casetes, CD, MP3,
películas en VHS, Beta o DVD.
“Mantengo buenos precios, por eso vienen
unas 50 personas por día”. Y esto es cierto, un
disco de vinil vale entre 70 y 100 bolívares,
mientras que un CD puede costar 600
bolívares. “La gente me regala sus discos, por
mudanza, divorcio o por alguien que murió”,
dice este hombre casado, con cuatro hijos y
diez nietos.
Recuerda que llegó a Venezuela a los 20 años
y que trabajó en diferentes ramos, hasta que
conoció a un español dueño de la tienda
Musical Zamora, que estaba de Urapal a Río.
Años más tarde ese negocio sería Comercial
Carrillo, un amplio local donde cada sábado
se reunía una peña musical en la que llegaron
a participar Mario Suárez, Adilia Castillo,
Jesús Sevillano, Bobby Capó y Carmen Delia
Dipiní, entro otros.
“Siempre nos inclinaremos por los discos
de colección”, dice al referirse a lo que hace.
“En diciembre termina el contrato aquí,
no puedo comprar, así que estoy buscando
un alquiler asequible para que el negocio
no desaparezca. Me da gusto trabajar en
este ramo, todavía me busca mucha gente”.
Los coleccionistas lo miran, ellos tampoco
quisieran que esta canción terminara con un
abrupto sonido de disco rayao.
Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
12 MITOS

Un tal Bassil Battah

POR Marlon Zambrano
@marlonzambrano
ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

En la reunión de pauta, uno de los jefes me dijo: “Señor Zambrano, tie- fuera ayer. A ella recurro porque más de una vez la vi torcerle el brazo
ne que entregarnos, a la brevedad, una reseña de Bassil Battah”. ¿Mas- a papá con un movimiento de artificio y dejarlo comiendo suelo, un
sive Attack?, pensé con cierta duda, “Esa banda me gusta burda”, dijo sábado en la madrugada cuando regresaba de la calle con tres golfeados
mi roquero interior. Repregunté: “¿Massive?”. “No, Bassil”. Ahhh, Bazil. mordisqueados de El Junquito, y que porque no los quería dejar perder,
¿Bazil?, ¿el que cantaba un bodrio que se llama “Mi pavita zanaho- contraviniendo una norma básica del Manual del levante, que vas a leer
ria”? Pero, ¿qué está pasando en Épale CCS, dios mío? “Noooo, Bassil unas páginas más allá.
Battah”, creo que escuché, en medio del barullo del cónclave semanal
donde se discuten a fuego y sangre los trabajos de las próximas edicio- Bassil y Jorge, su hermano y también célebre luchador, fueron parte
nes, hasta que de la chimenea sale humo blanco. Me ubiqué, no sé por de la diáspora libanesa que fondeó en el país en los años 50, cuando el
qué, en Samir Bazzi, y cuando me quise levantar a protestar enérgica- cine mexicano imponía la pasión por El Enmascarado de Plata de René
mente, se escuchó el resto de una oración que me iluminó: “El de la lu- Cardona (1952), mientras el dictador Marcos Pérez Jiménez acopiaba
cha libre”. Menos mal, porque ya me estaba sonando Tareck El Aissami un odio justiciero que tenía a medio mundo entrenando, en el patio
y hasta Tarek William Saab. Cualquiera hubiera dicho “no se haga el de la casa, al fondo de la calle, en el interior del baño del apartamento,
güevón, señor Zambrano”, y eso es lo peor, que no me hago. para salir a echarle patadas voladoras al tirano. Al final, la lucha libre
que importamos como subproducto cultural de tierras aztecas y que
Pero tampoco estaba tan perdido. Todos me sonaban porque están im- desató pasiones en Venezuela a mediados del siglo pasado, llevaba el
plicados en un asunto común: son del Medio Oriente, y ya por ello en salvoconducto del desagravio, legitimado por la máscara y la identidad
Europa serían sospechosos habituales. Del Líbano, si afinamos la pun- encubierta que permitía a cualquiera, pobre, olvidado y oprimido, salir
tería del GPS. Por tanto estarían en la mira del sionismo, pero aquí no, a confrontar el mal bajo la ilusión del anonimato, con la grandilocuen-
en esta tierra de gracia donde el trópico impone su alegría febril y dilu- cia y puesta en escena del teatro antiguo.
ye las nacionalidades, esa gente termina cantante, amolador, vendedor
de electrodomésticos en El Silencio, zapatero, gobernador, distribuidor Fue una estrella de verdad, que recibió ovaciones en los escenarios más
de telas en el Paseo Orinoco de Ciudad Bolívar, defensor del pueblo y emblemáticos de México y los Estados Unidos, donde confrontó a los
hasta luchador. más grandes de su época y muchas veces los venció. Así lo atestiguan
algunos videos con calidad de Betamax que exhiben en Youtube. Qui-
A Bassil lo hizo célebre su famosa “pinza libanesa” y el “salto de la se averiguar si aún vivía para agradecerle, en nombre de mi madre, la
muerte”, cuando la señal de Venezolana de Televisión aún ni intuía a buena educación que recibí en mi etapa escolar, cuando una nota por
Con el mazo dando de Diosdado Cabello y decidió transmitir, como debajo de 10 era celebrada con la “quebradora de abandono”, una llave
espectáculo semanal, el dudoso arte del Catch As Catch Can, en me- que nos dejaba rencos por tres días a mis hermanos o a mí, según el
morables atajaperros de fin de semana donde entrompaban El Dragón caso. Leí que vivía en Miami, supongo que a merced de los cobres que
Chino, Gran Amenaza, Apolo, El Andarín, El Caníbal, El Chiclayano, le dejó el comercio, implícito en el bello arte de ser libanés, y le dejé una
El Pulpo, El Fantasma y muchos otros. Mi mamá lo recuerda como si “Solicitud de amistad” en su muro del Face, a ver qué pasa.

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
MIRADAS 13

caracas mutante
de la caracas mantuana, con sus burros y trapiches,
al romanticismo francés y la exuberancia petrolera,
hasta que los cerros se pintaron de naranja
POR maría b. chacín • @EPALECCS
FOTO NATHALIE SAYAGO

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
14

¿Cómo la Caracas de las 25 manzanitas llegó a

convertirse en un monstruo mitológico de tres
cabezas y miles de tentáculos, en una maraña
de carros, cables, bloques y, a su vez, verdor y
fauna? ¿Por qué razón a la ciudad capital se le
ha atribuido el molesto adjetivo de “caótica”?
¿Quiénes le hicieron esto a Caracas o quiénes
dejaron de hacer algo por ella para que hoy, a
pesar de su belleza tropical y sus recónditos
históricos, la ciudad viva en una perenne lucha
de planificación de espacios?

Definir a Caracas a través de su arquitectura o

planificación urbanística es una tarea enreve-
sada. Existe la visión de que Caracas ha sido
una ciudad creada por las circunstancias, las
dinámicas sociales y la improvisación. Una
ciudad que, a pesar de haber tenido una gran
influencia de las premisas del urbanismo eu-
ropeo y norteamericano, ha sido producto de
las vicisitudes y ha crecido de forma intuitiva.

Caracas es un gran experimento que arranca

en el siglo XVI, cuando Juan Pimentel hizo su
primer trazado fundacional: el famoso dibu-
jito de la cuadrícula con 25 manzanas. En esa
Caracas de los techos rojos, de alguna manera,
hay un aire renacentista que va hacia lo prag-
mático, lo racional y lo geométrico.

El esquema de cuadrícula central —casco his-

tórico— se multiplicó por todo el país. Ciuda-
des que en un principio constituían un damero
siguieron creciendo por inercia, sin visión, sin
planificación, al ritmo de sus cambios sociales,
políticos y económicos. Los especialistas con-
cuerdan en que esos procesos son inevitables
y que la “planificación” cumple la función de
intentar palear los males que esas dinámicas
generan y que, quizás, lo que distingue a una
ciudad de otra es la velocidad con la que esas
estrategias se implementan para resolver los
problemas. Hoy Caracas busca respuestas, con
profunda necesidad, a las lógicas que irrum-
pen con fuerza, a los procesos tan violentos
que, muchas veces, no dan oportunidad a la
tan aclamada planificación.

De lo colonial
a los caprichos
europeos
“Un examen más equilibrado y sereno de lo
que ha sido la arquitectura de Caracas en el
proceso expansivo que sigue desde los años
guzmancistas del Septenio —cuando la ciu-
foto enrique hernández

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.

El conglomerado urbano actual dista mucho de la cuadrícula inicial. FOTO AMBROSIO PLAZA
dad va a perder definitivamente su fisionomía
hispánica— nos llevará a la conclusión de que
ni cualquier tiempo pasado fue mejor, ni el
presente es otra cosa”, escribió Aquiles Nazoa
en su texto La Caracas del petróleo, a manera
de preámbulo de lo que vendría después de
Guzmán y la larga historia de pretensiones gu-
bernamentales que atajaron el crecimiento de
lo autóctono, para imponer majestuosidades
provenientes del antiguo continente. El Sep-
tenio de Guzmán Blanco tuvo como premisa
arquitectónica la emulación de la altisonante
fórmula francesa para construir monumentos.
Llegó la Independencia y se creó la Repúbli-
ca, ya no era España sino Francia y “la pom-
pa neoclásica del guzmancismo comienza a
levantar esas edificaciones con vocación de
templos griegos, como el Palacio Federal y el
Teatro Municipal”, continúa Nazoa.
Así, la ciudad se fue llenando de los atributos
de la rimbombante arquitectura francesa. La
Caracas mantuana iba quedando, en pequeño
contraste, con sus trapiches y burros mientras
empezaba a erigirse una pequeña urbe cos-
mopolita: Teatro Municipal, Teatro Nacional,
Santa Capilla —réplica de la Sainte Chape-
lle de París—, Palacio Federal Legislativo, El
Calvario (actual parque Ezequiel Zamora),
el Templo Masónico de Caracas, bulevares,
plazas; construcciones que poco atendían a
las necesidades funcionales de la ciudad. “Su
sueño era hacer de Caracas una réplica en mi-
15
AAA
—
niatura de París. Pero ese intento de replicar Juan Vicente Gómez
no se hizo bajo el orden de una planificación, ejerció su poder de
sino bajo el deseo de reconstruir un imagina-
rio, una apariencia de lo urbano que cambiara dominación para
los valores del paisaje. La planificación es algo coquetear con
muy abstracto. ¿Quién dice que esta es la zona la arquitectura
de los ricos, la otra de los pobres, la otra del gringa, pero no
comercio? Es la mirada de quien controla la
ciudad, de quien la domina. Esa visión es lo
previó a la ciudad
que va determinando el orden, pero en cuanto de tanto bitumen
a la creación del paisaje, la apariencia, sin duda que le caería
es lo que se percibe en el corredor urbano: en después: carros
la fachada. El paisaje urbano es asumir que la
ciudad se convierte en un sustituto de la natu-
y carreteras.
raleza donde el hombre ha puesto la mano, y El oro negro
donde el hombre mete la mano, también mete apareció y los
sus ideales”, dice Juan Vicente Pantin, arquitec- cerros empezaron
to y profesor de Arquitectura Contemporánea a ponerse
en la UCV, sin quitarle la vista a su hija de tres
años que se lanzaba de un tobogán en la plaza anaranjados
Andrés Eloy Blanco (o Lina Ron), espacio que —
ha pasado por numerosas etapas arquitectóni-
cas —fue un cuartel y hasta una oficina de telé-
grafos y teléfonos— y que, finalmente, gracias
a la concepción que ahora tiene la Alcaldía de
Caracas sobre arquitectura urbana y la recupe-
ración de los espacios públicos, es un parque.
Pantin, quien en vez de planificación prefiere
hablar de “metabolismo de la ciudad”, cree
que “a lo largo del tiempo la ciudad ha crecido
por dos grandes fuerzas: la de la dominación
(de los poderes constituidos, la fuerza econó-
mica), pero que también hay otra fuerza que
Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
16

siempre ha estado presente y ahora tiene una definir lo autóctono es un tanto complejo:
connotación especial: la fuerza de las masas de lo propio sería decir que lo autóctono es
población urbana”.
lo aborigen, pero todo eso se cercenó hace
Y eso fue lo que ocurrió en el siglo siguiente mucho tiempo. Después de 400 años es difícil
con Juan Vicente Gómez: ejerció su poder de decir que lo colonial no es autóctono
dominación para coquetear con la arquitectu- —
ra gringa, pero no previó a la ciudad de tanto
bitumen que le caería después: carros y carre-
teras. El oro negro apareció y los cerros empe- lo colonial no es autóctono. Por la vía de la sentido de pertenencia que hace desear más la
zaron a ponerse anaranjados. asimilación y de la transculturación, ter- experiencia que la apariencia”, termina Pantin.
mina siendo propio. “Cuando uno mira las
La fachada autóctona fachadas guzmancistas, se producen varias Pero de la arquitectura colonial solo quedan
“Vivimos en un país donde parte de nuestro cosas: primero, un sentido de la fascinación pocos rastros y el romanticismo francés fue
drama ha sido la dificultad para asumir una por lo extraño, pero luego rápidamente te quedando en el abandono. La Caracas petro-
identidad propia. No para construirla, sino desconectas. Uno se conecta con lo coti- lera de Gómez se sumió en la multiplicación
para asumirla. La ciudad la entendemos los diano, con lo que no hace ruido. Eso ocu- de los rascacielos, las autopistas y los carros.
ciudadanos como el conjunto de imágenes rre con gran parte de nuestra arquitectura, Pasaron los años para que arquitectos como
que ante nuestra vista van reflejando la fa- esa desconexión. Lo propio, quizás, está Carlos Raúl Villanueva, Juan Posani o Fruto
chada —explica Pantin—. Lo que uno es por construirse. Lo autóctono creo que está Vivas reemplazaran a Alejandro Chataing o
capaz de percibir con los sentidos es este cuando no se establece a priori el deseo de Juan Hurtado Manrique con un sentido más
plano, que siempre está puesto a nuestra imitar”. Será quizás por eso el extraño re- criollo de la arquitectura. “En términos de esti-
vista, es lo que construye la fachada: el pai- chazo —que las hace caer en el abandono— lo, Villanueva buscaba un nexo con la esencia
saje, los corredores urbanos. La fachada es a las grandes edificaciones como las torres arquitectural de la ciudad colonial. El rechazo
un medio de comunicación”. Pero definir lo de Parque Central o las del Centro Simón de Villanueva a la exótica monumentalidad
autóctono es un tanto complejo: lo propio Bolívar. “Ahora, ¿qué es todo aquello con lo no solo habría representado el primer paso
sería decir que lo autóctono es lo aborigen, que nos sentimos en casa? Yo creo que eso lo en busca de una modernidad vernácula, sino
pero todo eso se cercenó hace mucho tiem- da la casa de hacienda, la casa con patio. Uno también la recuperación del buen gusto de la
po. Después de 400 años es difícil decir que siente en esas arquitecturas domésticas un arquitectura caraqueña”, escribió el urbanista

foto enrique hernández

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
 17

Arturo Almandoz en su libro Urbanismo eu-

ropeo en Caracas. Durante las siguientes déca-
das, Caracas, en cuanto a monumentos arqui-
tectónicos y excentricidades respecta, siguió
creciendo: el Teatro Teresa Carreño, el Hotel
Humboldt, el Banco Central, las torres de Par-
que Central, entre otros.

La paradoja actual
El problema de identidad parece estar en un
equilibrio. Ahora el problema es de calidad y
cantidad. “La experiencia de viviendas que se Vinculación orgánica con el lugar donde se construye el inmueble. FOTO JESÚS CASTILLO
ha trazado la Alcaldía de Caracas ha sido en-
comiable, porque ha sido muy sensible con el
cómo y el dónde, ha habido una reconciliación
con la idea del lugar, no han intentado hacer
una siembra genérica del mismo edificio en
todos lados sino que han tratado de vincularse
de una forma más orgánica con el sitio donde
han intervenido”, opina Pantin en relación a la
Misión Vivienda en el municipio Libertador.

Pero hay quienes piensan que la ciudad no

debe crecer hacia arriba sino hacia los la-
dos. Fruto Vivas tiene una opinión muy crí-
tica sobre algunos conjuntos residenciales
construidos por la Gran Misión Vivienda
Venezuela en la ciudad capital: “Me dolió
ver talar árboles para ubicar viviendas, en
un gran parque que fue diseñado por De
Llarena, Juan Andrés Vega, Tomás José Sa-
nabria, Cruz Fernández y yo para detener
las construcciones de más de 50 torres de
40 pisos, que eran la continuación del ac- En el siglo XX el monumentalismo arquitectónico fue una constante. FOTO JESÚS CASTILLO
tual Parque Central y, poco a poco, fueron
construyendo edificaciones, hasta hoy, que
tomaron las áreas verdes restantes para
colocar esos gigantescos edificios y anular
el corazón verde que habíamos creado. Ya
no se puede echar para atrás, solo hay que
darle a esas edificaciones todos los servicios
correspondientes de áreas recreativas, dis-
pensarios, preescolares, entre otros”, dijo
en una carta publicada en el sitio web del
Museo de Arquitectura de Caracas, del cual
Juan Posani es el actual director, quien, jun-
to a Farruco Sesto, es partidario de que “en
Caracas cabe otra Caracas”. Pero en un in-
tento más hacia el humanismo que el prag-
matismo, Sesto y Posani crearon un mo-
vimiento que sostiene que “con ello, a los
pobres se les ha devuelto el derecho a vivir
donde abundan los servicios, se les devuel-
ve el derecho a la democracia y a la igualdad
espacial y territorial”. Veamos qué pasa. Hubo conatos de conectar con la esencia arquitectural de la colonia. FOTO NATHALIE SAYAGO

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
20 minicrónicas

Desde la casa rosada

Rosa caminaba de un lado a otro, mordía sus
uñas con ansiedad, estaba decidida a escapar,
su agonía la despertaba a diario. Ella nunca
había sido feliz, creyó haberlo estado. En al-
gún momento de su trágica existencia, Rosa
pensó tal vez en sonreír. Nunca había senti-
do la plenitud, la dicha. Desde la madruga-
da había estado escuchando voces, algunos
tambores y a la señora Juana que rezaba. Ella
no entendía por qué temblaba ansiosa, suda-
ba y las lágrimas despertaron su perplejidad.

En esa casa rosada se miraban las caras de

Juan, Hochimín y Carmela en la ventana
asomados como cachorros esperando a su
amo. Eran niños, esperaban a sus padres.
Nunca quisieron jugar con Rosa. Andrés, en

FOTO ENRIQUE HERNÁNDEZ

cambio, siempre la acompañaba. En el inte-
rior del bosque siempre encontraban la ma-
nera de jugar. Se escuchaban risas, también
los pajaros cantaban, los grillos bailaban, las
ranas pedían agua y una maraquita sonaba
como cascabel.

Durante la noche solo las velas alumbra-
ban las caras tristes de los niños. Rosa reía,
disfrutaba de la oscuridad, ella era así, muy
diferente a los demás. Jugaban al escondite
y entre sabanas corría Juan. Carmela lloraba
espantada, era la más chillona, y Hochimín,
el más valiente, se desataba a correr detrás
de Juan.
Andrés se acercaba a la casa rosada, siempre
pendiente de jugar con Rosa; ella, siempre
sola, corría a buscar a Andrés y él se adentra-
ba en el bosque oscuro. Rosa lo perseguía y le
agarraba sus manos heladas, le tapaba los ojos
con las de ellas, muy calientes. Juan, Carmela
y Hochimín, celosos, se reían de Rosa.
De lunes a jueves recibían clases en la casa
rosada, siempre bien sentados, mirando la
pizarra y escuchando las instrucciones de
don José. Apenas comenzaba la clase de
idiomas, los niños sonreían, Rosa no podía
callar y reía a carcajadas. La regla golpeaba
la mesa en señal de amenaza. Solo así Rosa
callaba, recordaba siempre una tunda que
le dieron. La regla había dejado una marca vestido rompió. Los demás sí y ellos, felices,
en su brazo. Siempre la veía, la miraba con se rieron de Rosa; y Rosa, feliz, se rio de ellos.
tristeza cada vez que escuchaba la regla gol-
pear la mesa. Andrés la abrazó, trató de calmarla; ella, por
su lado, solo quería salir corriendo. “El agua
Los viernes podían inventar qué jugar. Siem- esta fría”, le dijo. Él asintió.
pre había que jugar entre el bosque, los ca-
ballos, la lluvia, la neblina espesa, las flores Los niños, poco a poco, crecieron, las flores
de girasol, el capín melao, los árboles frutales fueron secándose, ya no había frutos en los
del abuelo. No podían dejar de inventar. árboles del abuelo. La casa rosada se veía
más bien blancuzca. Juan viajó hasta la ciu-
Lejos, el río formaba parte de su aventu- dad con Carmela y allá decidieron quedar-
ra. Escapaban a buscar el olor de las nubes se. Hochimín, el mayor, decidió emigrar al
llenas de agua, las rocas con aroma a verde. norte. Nunca más olieron sus pasos por el
Juan siempre corría más duro, era el más ve- campo.
loz de los niños. Parecían perros acabando
de escapar o buscando una liebre. Andrés desapareció entre el bosque de Rosa.
Desde las montañas se miraba la casa rosa- Rosa ya no lo encuentra, sueña con sus ma-
da y desde lejos provocaba visitarla. Estaba nos heladas y su sonrisa sin dientes, se aden-
llena de sentimientos que atraían a Andrés, tra en el bosque, muerde sus uñas sangran-
que atraían a transeúntes y viajeros. Cuando tes, camina de un lado a otro. Sigue allí, en
bautizaron a los niños, Rosa no pudo recibir la casa rosada.
la salvación. “Gritó y se retorció como ani-
mal”, dijo la abuela. Tanto fue que hasta el Por Rosi bethancourt

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
 FILO Y BORDE
Inmoral e inalcanzable
POR Freddy Fernández
@filoyborde
ILUSTRACIÓN HENRY ROJAS
“El mundo es tuyo”, dice el globo que observa el personaje encarna-
do por Al Pacino en el remake de la película Scarface (Cara corta-
da). Si mal no recuerdo, lee esta frase justo después de cometer los
asesinatos que lo colocan como el jefe indiscutible de las mafias de
narcotraficantes de Miami. No deja de tener su significado el hecho
de que este “dueño del mundo” sea un cubano llegado a Estados
Unidos como balsero.
Era, pues, un muchacho dispuesto a abrirse paso en el capitalis-
mo a como diera lugar, a comerse el mundo, a convertirse en un
hombre rico.
A pesar de todas las evidencias estadísticas llevadas durante más
de 500 años de capitalismo, parece no perder fuerza el mito del
ser humano que parte desde la pobreza y se hace multimillonario,
contando solo con su inteligencia y su trabajo (poco importa si es
legal o ilegal).
La realidad numérica no da para soportar esa creencia. En el co-
nocido ejercicio de reducir la población mundial a solo 100 habi-
tantes, resulta que solo seis personas tienen 59% de toda riqueza
(los seis de EEUU), 20 personas consumen 80% de los recursos del
planeta, 30 tienen lo necesario para comer y solo 1 es universitaria.
En esta reducción, si uno tiene comida en la nevera, ropa para
cambiarse, cama y techo, ya es más rico que 75% de la población
mundial.
Caracas, 1 de mayo de 2016.
21
En ocasiones, reunido con muchas personas, he pedido que levan-
ten la mano los que saben que en su vida no van a hacer dinero. La
respuesta casi unánime es la inmovilidad. Nadie levanta un brazo
para reconocerse entre quienes deben aspirar a alcanzar una bue-
na pensión y una buena jubilación. Todos parecen convencidos de
tener un camino que les permitirá acumular riquezas para sí y para
su familia y les hace olvidar que bien vale preocuparse por mayores
niveles de justicia social, lo que incluye luchar, entre otros aspectos,
por esas pensiones y jubilaciones.
En este contexto, dado que las riquezas nos están esperando allí,
muy cerca; mientras llega ese momento nos da por admirar las ri-
quezas de los otros. Siempre hay quien cuenta con orgullo cómo es
la casa o el carro de sus patrones. Quizá, inconscientemente, está
casi seguro de que en algún momento será él quien sea admirado
por sus posesiones.
En esta línea de reflexión, bien vale revisar el libro de Terry Eagle-
ton Por qué Marx tenía razón (Why Marx Was right), escrito hace
apenas cinco años, cuando muchos aseguraban, como lo siguen ha-
ciendo, que el marxismo caducó y que su visión no tiene nada para
nuestra época.Allí está eso que Marx y Engels llaman “conciencia de
clase”, la que, en su aspecto más básico, indica a los trabajadores que
lo real, lo que indican las estadísticas, es que el sueño de ponerse por
encima del resto de los seres humanos no solo es inmoral, también
es prácticamente inalcanzable.
Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
22 SOBERANÍAS SEXUALES

Amanda, amante
POR Naile Manjarrés
@nailemanjarres
ILUSTRACIÓN jessica mena

“No me parezco a papá ni a mamá, yo me parezco a mí”, dice con 4 años

de edad. Pregunta por qué visitamos el Cuartel de la Montaña y Chávez
nunca sale, se fastidia y me exige: “Mami, la próxima vez, avisale”. Cuenta
hasta ten en la regadera y hasta cien bajando escaleras. Lo debe a su papá,
a la maestra y a Pita. A mí me pide dormir empiernadas y en pantaletas.
Suelta mi mano y se devuelve a verificar que no dejé, de nuevo, la tarjeta
de débito en el cajero. Ella se preocupa y ocupa. Considerarla una bebé
es subestimarla. Se fue de viaje sin mí. Acordamos no llorar y cumplió;
yo no, y me puse a escribir. Le mando unas líneas, pero es pueblo, ella
decide: Amanda, vos decidís.

—Si tu maestra dice que el rosado es de niñas, decile que el azul también
es bonito, como tu pijama de avioncitos.
—¿Por qué tapar tus ojos cuando un hombre y una mujer, o dos mujeres
se besan? No es feo que la gente se quiera.
—Cuidate. No solo de barrigas. Tragedia es perder la voluntad de crear
y reinventarte.
—Leé, estudiá, cuestioná. Si seguís mis pasos, el título no te hace perio-
dista (y tampoco creáis que soy muy buena). Si estudiáis medicina, la pre-
misa es servir, no las tarifas. Si tenéis madera creativa y queréis hacer algo
por mí: mil documentales, cien murales, un millón de obras contra las
transnacionales; pero, insisto, vos decidís.
—Maquillarte, o no, no te hace más o menos mujer. El controlador, aun-
que quiera legalizar la marihuana, use guayabera, pantalón a rayas o cual-
quier disfraz de izquierda, controlador queda. Amanda, vos sé vos. No
importa lo que digan o crean.
—A la cama con condón y llorá, reíte, besá, mordé, gritá, proponé sin
pena. La iniciativa es virtud y la cautela impuesta enferma. Dejasela a Ra-
mos Allup, a Nacho, al Opus Dei, a la derecha.
—Si abusan, denunciá. Si te golpean, denunciá. Si te insultan, perdoná;
pero rompé el ciclo, este no cambiará.
—En la calle, decí sí, con ganas. Decí no, rotundamente. Dejarlos con su
mano no es capricho o “arrugar”, prescindir también es elegir.
—Sugerencia: compañero no es quien tiene más dinero ni el más inte-
lectual o bohemio. Es quien quiere aprender, se esfuerza y, con cariño,
cuestiona y enseña. Sí existen, doy fe de cuatro. No te conforméis con
escuálidos de paso.
—Frente al aborto: no fuiste solo bendición, fuiste mi absoluta y me-
jor decisión.
—Los adverbios de tiempo limitan, pero aquí no hay discusión: no per-
mitáis que alguien te diga o llaméis dos veces “puta” a otra mujer, nunca.
Si lo hacéis, ¡upa!, a sacudirse las culpas y levantarse. De esa y mil mane-
ras se pondrán a prueba tus ideales.
—Sobre el miedo, se vale, pero no de consejero. Vos arriesgate y viví. Los
junguianos dicen que no saber elegir es un acto patológico de autodes-
trucción y yo no quiero verte muerta sin morir.
—Por último, hija, recordá que el derecho a decidir aplica a hembras, di-
versos y varones. Tu nombre es Amanda, pero pudiste ser Martín.

Edición Número Ciento setenta y seis . Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
ENTREVISTA 23

¿Pedro Chacín?
¡Qué bicho más loco!
un loco maravilloso, irreverente, atrevido, hablador
y genial. cuentan earle herrera y roberto malaver que
escribía con gracia y dio en el clavo al enseñarnos, con
el Manual del Levante, a cortejar para coger, un oficio
cotidiano del que nadie nunca habló con tanta enjundia
POR Marlon Zambrano • @marlonzambrano / Fotografías enrique hernández

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
24

No puede haber mejor pauta que la que co- ¿Sería chavista? interviene el profe Earle, que llegó cumplea-
mienza, y termina, a carcajadas. De hecho, no ñero a la cita, con media sonrisa media hora
existe cosa que no deba resolverse a risa lim- ni que fúeramos después y se sumó al desayuno que también
pia. No solo por el ejercicio de los 400 mús- adivinos. pero era convocó a Mercedes Chacín, la hermana, a los
culos que se involucran en ese acto físico y camarada, admiró fotógrafos Enrique Hernández y Jesús Castillo
devuelven la lozanía a la piel, o por el brote de la valentía de y al salido de Gustavo Mérida que, como buen
endorfina que empuja la alegría y la impone a profesional del coleo, no iba a pelar ese boche.
la razón, hasta obligarnos a caer a horcajadas
chávez al asumir el
en un estado de posesión o trance. También, golpe del 92 y era un “Bicho pa’ loco, vale”, resume Herrera, quien
quizá, porque la risa es el triunfo ante la barba- justiciero recuerda que lo que más identificaba a Pedro
rie, la oxidación y el miedo. Y si la risa respon- — era su tremenda solidaridad, que iba más allá
de a la inventiva inteligente, a una elaboración de los estándares conocidos. “Tú no podías sa-
sencilla (o a veces compleja) que desarma la prácticas lecciones, los mecanismos más expe- lir con él porque siempre buscaba defender a
lógica y nos postra sumisos ante el disparate, ditos para seducir (levantar, entrompar, caer, alguien”. Mercedes asiente y, mientras lo hace,
es ya la gloria absoluta. chancear) a una jeva y, posteriormente, “ho- acaricia con un pulgar la foto de un Pedro en
rizontalizarla” (cogerla, chingarla, follarla, el franelilla y agarrándose el bigote que acompa-
Parece que así lo entendió Roberto Malaver, mete-y-saca de toda la vida) sin temor a sufrir ña la tapa dura de la segunda edición, amplia-
profesor, publicista y echador de vaina de toda el ultraje del rechazo intrínseco a los feos, con da y mejorada, del Manual del levante, titulada
la vida, que comenzó a reír apenas salivó el las precauciones consecuentes del caso, como Otra vez Pedro, siempre Pedro y editada por
nombre de Pedro Chacín a las 8 de la mañana la posibilidad de enamorarse y hasta casarse o MDC Producciones en 2008. Si algo está claro
en el lobby del hotel Alba Caracas, al tropezar- mantenerse monógamo (si ya se había consu- es que Mercedes Chacín es una de las activis-
nos para esperar a otro jodedor (con el perdón mado el matricidio). Según las probabilidades tas más comprometidas en mantener el legado
de la investidura del diputado), Earle Herrera, estadísticas de la famosa tabla del Dr. Chang vivo de su hermano, recordándolo cada 1° de
quien nos alcanzaría más tarde para un desa- para el Cálculo de los Dígitos Sexo-Afecto mayo (la fecha de su trágico deceso) o el 2 de
yuno “chaciniano”, a la usanza del almuerzo (contenida en el Manual del levante), una con- mayo (la fecha de su cumpleaños) a través de
“lezamiano” que organiza Diego en honor a seja básica: “Todas las relaciones monogámi- hermosos textos que siempre nos recuerdan al
David, en una escena clave del filme cubano cas comienzan por un atractivo sexual: la gen- Pedro íntimo, ese que amaba hasta rabiar, se
Fresa y chocolate (sin alusiones personales, cla- te no se quiere, se coge”. enguayababa, compartía sin límites con fami-
ro está). “¿Pedro Chacín? Loco ’e bola, jajaja”. liares y amigos, se emborrachaba con tres tra-
“Siempre nos hizo reír con sus ocurrencias”. Para otros, sobre todo otras, los artículos de gos y se indignaba ante el maltrato al hombre
Malaver, risueño por naturaleza, fue el respon- Chacín, que fueron recogidos en una prime- y a la mujer, por igual, al punto de ser el artífice
sable de muchas elucubraciones de seducción ra edición póstuma en el año 94 por el Fon- de su posición feminista ante la vida, aunque
de Pedro, o al menos eso insinúa el autor en do Editorial Letras bajo el cuidado de Manuel suene imposible. Para despecho de las viudas
varios capítulos de su obra serial Manual del Guzmán, constituían un irrespeto a la mujer, del Manual del levante y lejos de las conclusio-
levante, que desde esta edición nos hará felices una expresión de machismo y misoginia que nes más superficiales del asunto, “Pedro era
y será otra excusa “epalera” para echar una ri- denigraba la condición femenina. Una femi- auténticamente feminista”, nos aclara Merce-
sita al aire cada domingo, después de la misa y nista militante habló feo, creo que artista plás- des con rotundidad. “Y lo más importante:
antes de salir a entrompar. tica, así como muchas otras inscritas en el ren- sabía escribir”, remata Malaver. “Todo grupo
glón de feministas e intelectuales, para quienes necesita un técnico, un práctico y un hablador
Seductor el Manual ya tenía algunas respuestas: “Total de güevonadas, ese puesto es mío y no me lo
El Manual del levante, cuyos episodios origi- —le contesté—, yo siempre quise ser corres- quita nadie”, llegó a decir.
nales aparecieron publicados en el periódico ponsal de guerra”, alegó Pedro a una amiga
Letras de la Universidad Central de Venezuela cuando aquella le advirtió que con esos textos Personaje
y en la revista Feriado del diario El Nacional, estaba “arriesgando la vida”. Como buen narrador, dice Malaver, Pedro
entre finales de la década de los 80 y principios era un personaje en sí mismo. Ninguna
de los 90, constituyó para muchos un esfuerzo Amigo historia era sencilla o carecía de apoteosis,
científico, metodológico y sinvergüenza de un “Era un jodedor de primera, un deslenguado, cualquiera de sus anécdotas estaba matiza-
ciudadano de bien por ilustrarnos, a través de un atrevido, un provocador… y un amigo”. Ahí da por adjetivos rimbombantes, todo tenía

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.

Pedro Lorenzo Chacín Díaz
el espesor del poema épico, como “La le-
yenda del horcón” —que se detenía a reci-
tar cual poseso, frente a la librería Suma de
Sabana Grande—, o el esfuerzo de dirigir a
una abuelita hasta una dirección enrevesa-
da, lo cual la vieja le agradeció con el ofreci-
miento de una misa en su nombre.
“En esa época todo era tabú, la primera grose-
ría que apareció en televisión fue ‘pendejo’, y la
dijo Uslar Pietri. Éramos muy pacatos, estába-
mos huérfanos de jodedera —dice Malaver—
y llegó Pedro con su capacidad de sorprender”.
Se inscribe, sin duda, entre los nombres del
periodismo de humor que han regado de
alegría a este país, desde Leoncio Martínez a
Aquiles Nazoa, desde La Pava Macha hasta
Revolcón, periodismo atrevido, provocador,
desafiante, que suele no temerle al poder ni
detenerse a establecer límites morales, cuan-
do lo que toca es reírse frente al disparate de
la vida real. En ese sentido, el Manual del le-
vante está tan vigente que, como dice Earle,
aplica para levantarse a una escuálida o a una
chavista, aunque no está en su contenido por
razones obvias. De hecho, la breve estadía de
Pedro en el periodismo (“que no fue breve
porque ese carajo fue periodista por natura-
leza”, dice Malaver), hasta su partida en 1993,
con apenas 36 años de edad, dejó por fuera
una infinita lista de “horizontalizables” que
han quedado en el tintero durante estos lar-
gos 23 años de ausencia de Pedro, período
que ha sido testigo de la aparición de la tele-
fonía celular 4G, Facebook y Twitter, el mo-
vimiento LGBT (homosexuales —gays y les-
bianas—, transexuales, bisexuales, etc.), Tves
en la mañana, las líneas 3, 4 y 5 del Metro de
Caracas, diez nuevos bulevares y una extenso
abanico de hembras pagando que merecen
una generación de relevo para su disección
y puesta en Manual, como por ejemplo: la
bachaquera, la jeva 2.0, la sapiosexual, la co-
nuquera urbana, la hiphopera, la vocera de
comunicación de un consejo comunal, una
mototaxista, una reguetonera, una gerente de
Pdval... y así, sucesivamente.
Caracas, 1 de mayo de 2016.
25
Tacarigua
y El Tigrito
Earle, de cerca, es medio palmo
menor más alto que Roberto.
Roberto, de lejos, es del mismo
tamaño que Earle. Tigre no come
tigre: el chalequeo fluye, se diluye,
se rearma, se arrima. Entre los
silencios, Pedro Chacín, el inolvi-
dable, se acomoda entre el novillo
sagrado y el publicista consumado
(no consumido, cuidado, porque
algo se trae entre manos) y mira a
la mujer eludir la pregunta, siem-
pre dura, aunque hayan pasado
23 años. “Es que si lo cuento bien,
lloro”. La frase se escucha dentro
del silencio y en medio del pen-
samiento de Mercedes Chacín, su
hermana menor, directora de otra
revista dominical, distinta, feria-
da, florida, nunca sagrada. Dice la
leyenda que, un 1° de mayo, Pedro
aguardó hasta el final del día en un
bar de El Rosal que todavía existe.
Cuando cerró la puerta, la madru-
gada era tan intermitente como
los semáforos. El motor ronroneó
dentro del auto que, más que un
felino, parecía un ratoncito asusta-
do. “Nunca me gustó que Pedro se
comprara ese Minicord”, dijeron,
a destiempo, Earle y el papá de
Pedro. Pedro, el del manual, había
cambiado un Dodge Dart (de los
que siempre tenían problemas en
el tren delantero, precisamente
por el peso del motor) por el Mini-
cord y fue, también precisamente,
en ese pequeñísimo auto de origen
inglés donde Pedro Chacín, el
amigo querido de Earle Herrera
y de Roberto Malaver, escuchó su
última canción.
Por Gustavo Mérida
@gusmerida1
Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
26 libremente

Tu ambivalencia
Por Miguel Posani / mayleni curros
@mposani / @maylenicurros
ILUSTRACIÓN FRANKLIN ALVIáREZ

En ciertos momentos la vida nos pone en encrucijadas. Una

parte de nosotros nos empuja hacia un lado, y la otra hacia el
extremo opuesto.

Un ejemplo típico es cuando nuestra parte racional y mo-

ralista nos empuja y trata de controlar nuestras escogencias
pero, en cierto momento, la parte que es irracional y sensual
nos empuja hacia otro lado, y nos encontramos como en la
novela El extraño caso del doctor Jekyll y el señor Hyde, de R. L.
Stevenson. No siempre los humanos nos movemos así, pero en
algunas situaciones importantes de la vida sí.

Presos en esa ambivalencia, descubrimos dos fuerzas dentro de

nosotros, aparentemente irreconciliables y contrarias, que nos
mueven como títeres: una a través del placer, lo inmediato, lo
irracional; y otra a través de la culpa, el deber, la racionalidad.

Desde que existimos como humanos, parece que oscilamos en

este péndulo, que se expresa de muchas formas y tiene innu-
merables caras.

¿Qué es lo bueno para mí? ¿Qué debo escoger? ¿Estaré hacien-

do bien? Para eso, precisamente, se inventaron las religiones,
para que en ese vaivén te agarres a algo en lo que crees firme-
mente, a través del miedo, el deber, la culpa, la redención, la
pureza, el infierno y el paraíso, etc.

Pero así no te haces responsable de tus escogencias ni de tu
cambio interno sino que, una vez más, lo proyectas fuera de ti,
dándole poder sea a Cristo, Mahoma, Negro Primero, el perro
amarillo o Mickey Mouse.
Pensadores como Carl Jung, por ejemplo, han planteado que
justamente en ese balanceo, en ese ir y venir entre extremos,
nos vamos construyendo y evolucionando; que, como justo en
el medio estamos nosotros, podemos mediar con estos extre-
mos y crear nuevos sentidos para nuestra propia vida.
Porque construimos significados y nuestra vida es para cons-
truirlos, no importa si sentimos que vamos en contra de esa
marea que llamamos “sentido común”. Claro, a veces nos
damos cuenta de que recorremos un camino solitario, pero ese
es el precio que se paga por ser auténticos.

Sugerencia
La próxima vez que te encuentres en una
“Tu visión devendrá más clara
bifurcación o escogencia importante en tu vida, solamente cuando mires dentro de tu
escribe cada una de las posibilidades, sus pros
y sus contras. Trata de distanciarte de ti y hasta corazón… Aquel que mira afuera, sueña.
de reírte de ti mismo, y no tomes una decisión
enseguida. Trata de mediar con los dos extremos Quien mira en su interior, despierta”.
a ver qué te sucede, cómo reaccionas, siempre
con el fin de escoger lo que es mejor para ti. C. G. Jung

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
 o ir
sg de bl
e
rie e la
GASTRONOMÍA
A
su
Se
pu
Im
pe
27
Calidad
PICHONES DE SIBARITA
Precio

comida rápida Ambiente

para veganos Atención

POR reinaldo gonzález d.

@odlanierØØ

3ra Av. de Los Palos Grandes

FOTOGRAFÍAs enrique hernández

La quinoa se cultiva principalmente en Bolivia

y Perú. La usan para acompañar carnes, para 3ra Transversal
hacer ensaladas y sopas, y hasta para elaborar
cerveza a partir de su fermentación. No solo
sabe muy bien, sino que es probablemente
uno de los cereales más nutritivos, pues con-
tiene gran cantidad de minerales y proteínas
y posee los ocho aminoácidos que necesita el
ser humano. Los conquistadores españoles, en
su profunda ignorancia, llegaron a prohibirla
por “alimentar rituales paganos”.

Aunque la ignorancia no ha desaparecido

—la apertura mental, en muchos casos, parece
más conveniencia que comprensión y respeto
por el otro; una actitud políticamente correc-
ta, pues—, hoy se puede comer quinoa. En
Prana (energía vital en sánscrito), restaurante
ubicado en la Tercera Avenida con Tercera
Transversal de Los Palos Grandes, la venden
como ensalada, acompañada de tomate, pepi-
no, rábano, almendras, menta, perejil, limón,
aceite de sésamo, sal y pimienta. Está incluida
en un original menú vegano que incluye otras
dos ensaladas: de lentejas (con garbanzos, re-
pollo morado, cebolla morada, menta, perejil,
limón y aceite de oliva) y vermicelli (fideos de
arroz, zanahoria, calabacín, ajo, soya, pimen-
tón, cebollín, jengibre, mantequilla de maní,
aceite de sésamo y aceite de oliva).
Desde que el local fue abierto, el 27 de noviem-
bre de 2014, es una opción para personas ve-
getarianas, veganas, celíacas, fitness y asomadas
como yo. La idea de un bar de jugos (juice bar)
se amplió con los conocimientos de cocina de
Melanie Rosenqvist, quien diseñó los platos
principales. Entre los más buscados están los
Thai Wrap, elaborados con lechuga romana,
repollo, zanahoria, cebollín, merey, mantequi-
lla de maní, miel, soya, jengibre, ajo y aceite de
sésamo. Todo muy sano, muy rico, y muy frío.
Se toma de la nevera y se come en el mesón.
Horarios
Lunes a viernes: 7:00 am a 8:30 pm
Sábados: 8:00 am a 8:00 pm
Domingos: 9:00 am a 5:00 pm
Precios
Ensaladas: de Bs. 1.300 a Bs. 2.630
Thai wrap: Bs.1.700
Jugos: Bs. 950 (P) y Bs. 1450 (G)
La especialidad: los jugos. Son prensados
en frío, mediante una prensa hidráulica.
Este procedimiento permite conservar los
nutrientes, las enzimas y el sabor de las
frutas y los vegetales. Luego el líquido es
envasado en vidrio. Según Kevin Esteban,
el encargado del día, “los giros calientes
de la licuadora queman las vitaminas y los
minerales. Nuestros jugos tienen cinco ve-
ces más nutrientes”. Las opciones más in-
teresante son: Immunity (naranja, parchita,
limón, jengibre, cayena); Glow (manzana,
célery, pepino, jengibre, perejil, pera, espi-
naca); Green Day (célery, pepino, romana,
repollo, cilantro, limón, jengibre); Dalai
Lama (piña, naranja, zanahoria, cúrcuma,
jengibre) y Red Roots (zanahoria, manzana,
pepino, remolacha, limón, jengibre).
“Buscamos que todo sea sano. Los jugos no
tienen endulzantes ni conservantes. En los
postres no usamos leche, ni mantequilla, ni
azúcar; endulzamos con miel o con dátiles”,
explica Esteban. Sorprende degustar un rico
y dulce brownie atiborrado de nueces y luego
asimilar esta información.
Al salir, El Coyuco, con sus carnes ardientes
y sus pollos dando vueltas, incita a estro-
pearlo todo.

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
28 crítica y media
A golpe de control
Del Reino Mágico
a La Pampa argentina
La corporación Disney, o como quiera que
se denomine a estas alturas de su travesía
empresarial, ha de ser el conglomerado
creativo con mayor acervo del planeta.
Aquel “Reino Mágico” que el viejo Walt
vislumbrara en los años 20 se proyecta hoy
“hasta el infinito y más allá”. Como todo
imperio, su crecimiento dispar ha colma-
do de matices una filosofía originalmente
ideologizante y colonizadora, desnudada
en el libro Para leer al Pato Donald hace más
de cuatro décadas. Los años transcurridos
desde entonces resultaron fructíferos tanto
en lo económico como en lo productivo y,
aunque no impidieron la materialización
del inicuo Rico McPato (Donald Trump),
permitieron desarrollar obras maestras del
ingenio como Toy Story, un producto que
enorgullecería a la raza humana en cual-
quier tribunal intergaláctico.
En el tiempo, una de las más notables
transformaciones aplicó sobre los progra-
mas de talento en vivo. Desde la gracia
natural de los históricos “Mosqueteros”,
animadores del Club de Mickey Mouse,
hasta la chispa guasona de los ocurrentes
Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
Imaginadores, cientos de miles de horas
catódicas soportan un legado incompara-
ble en programación infantil. Las versio-
nes regionales sobre este género tuvieron
también repercusiones en cada país. Y es
así como alcanzamos ahora el Junior Ex-
press, una serie producida en Argentina y
emitida por Disney Junior Latinoamérica.
Se trata de una propuesta impecable en
todos sus apartados de producción, algo
cuando menos curioso. En el primer
minuto un acercamiento de cámara re-
gistra los reflejos del parabrisas del tren.
¿A quién se le ocurriría semejante rapto
de verosimilitud? Después de esto, usted
—que de hito en hito chequea lo que su
niño mira en la tele— puede dejarse lle-
var por una trama que fluye divertida ha-
cia la estación terminal. Este “expreso del
sur”, al igual que la serie, está capitaneado
por Diego Topa, clave de un éxito que aún
debe mucho al star system pero que no re-
siente trayectoria y respeto por el oficio.
Por Carlos Cova
@CarlosCobero
Caracas, 1 de mayo de 2016.
CINENROLLOS
DESPEDIDA. Querida gente, esta
es mi última columna en esta
querida revista. Quiero agradecer
a toda la gente de Épale CCS por
esta gran oportunidad y, por supuesto, a las y los
lectores quienes, durante un par de años, me han
acompañado por este medio.
Quisiera que esta entrega final sirva de reflexión
en cuanto al momento que vive la industria nacio-
nal, pues es sabido que enfrentamos una de las
peores crisis económicas de los últimos 20 años
que, por supuesto, afecta directamente a nuestro
cine. Este es el arte más caro que existe, debido
a la cantidad inmensa de recursos que se juntan
para sacar un proyecto adelante. Es muy probable
que, tanto este año como el próximo, el número
de producciones locales descienda dramática-
mente, ya que, para decirlo francamente, no hay
dinero. No todo está perdido, sin embargo.
Nuestro cine cuenta con una reforma a la ley que
se encontraba, antes de la nueva Asamblea, en
segunda discusión. Esta ayudaría muchísimo a
cortar los abusos de las grandes distribuidoras de
este país. Sería más que pertinente que en estos
momentos se reabriera el debate para su aproba-
ción, aunque ahora es más difícil, pues tenemos
una Asamblea que defenderá los intereses de los
privados. Por otro lado, el gobierno ha impulsado
mesas de trabajo, en conjunto con el Ministerio de
la Cultura (Villa del Cine y Amazonia Films), para
promover las ventajas comparativas que nuestra
industria pueda tener para generar divisas al país
y, por ende, su autosustentabilidad. La idea es
generar un catálogo de productos y servicios que
puedan ser exportables o explotados en nuestro
país. Si bien ya tuvo lugar una primera ronda
de trabajos, el día 29 de marzo, quedamos a la
expectativa sobre los resultados.
Como contrapartida a la crisis, realizar produc-
ciones en nuestro país es muy económico para los
extranjeros. La isla de Margarita se ha convertido
en plaza para la grabación de videos musicales, lo
que puede dar oportunidad a mucha gente ligada
a nuestro cine. Esperemos que más directores y
productoras foráneas vengan a trabajar acá y que
nuestra industria pueda manejar el temporal. En
los períodos de crisis salen a relucir las verdade-
ras potencialidades que tenemos como personas
y como profesionales. Deseo una larga y saluda-
ble vida a la industria nacional de cine. ¡Abrazos!
Mauricio Sánchez Díaz
diaz.mauricio@gmail.com
crónicas 29

Manual del Levante

Hoy, hace 23 años, cambió de plano el periodista
Pedro Chacín. Pero antes de irse dejó una serie
de reflexiones sobre las relaciones de pareja, el sexo,
el amor, la infidelidad, el romanticismo y, sobre todo,
sus técnicas de seducción con las mujeres.
esperamos les sean útiles

DE PEDRO CHACín / ilustraciones jESSICA MENA

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
30

Sólo para monógamos

“Cariño mío, no sé qué hacer”

Cuando uno oye trinar a la San Basilio, este de los que se oponen al adulterio, desde los go, con el paso del tiempo y al estabilizarse
delicioso himno al adulterio femenino, lo tiempos de María Magdalena hasta nuestros la relación, comienza a nacer el afecto y, des-
único que no se entiende es cómo, después días. El doctor Chang, al igual que su herma- de la derrota de los defensores de la genera-
de decir cosas tan hermosas como “él (el no el astronauta, es nativo de Altagracia de ción espontánea, sabemos que todo nace a
amante) es el viento”, “tú (el marido) eres Orituco, y estudió segundo grado con el pre- expensas de algo. Si lo que había era sexo y
mi puerto”, “a ti (el marido) te quiero”, “por sidente adjunto del Centro de Estudiantes de comienza a nacer afecto, éste tiene que nacer
él (el amante) me muero”, termina diciendo la Escuela. Aprovechando tal circunstancia, a partir de aquél, y crece a sus expensas”.
que “no sé qué hacer”. “Letras Quincenal” ha logrado entrevistarlo
en exclusiva, y además obtener su autoriza- “Un hijo —acota Chang con ojos brillan-
Y no se entiende porque la Paloma en cues- ción para publicar, como primicia mundial, tes— es el mejor ejemplo de cómo el mete y
tión está proclamando justamente lo que su famosa “Tabla de Chang para el Cálculo saca ancestral se transforma en ternura, en
debe hacerse cuando uno quiere preservar de los Dígitos Sexo-Afecto”. afecto, en tuna catuna tuna y payasito salta-
una relación monogámica: ¡montarse cachos! rín de dónde saliste tú.
Explica el doctor Chang que “todas las re-
En efecto, un revolucionario estudio, rea- laciones monogámicas comienzan por un A continuación transcribimos la llamada
lizado por el eminente sexólogo Howard atractivo sexual: la gente no se quiere, se Tabla de Chang, con sus correspondientes
Chang, ha puesto en el tapete la importancia coge. Todo consiste en intercambiar sudores, instrucciones para que cada quien pueda
de los cachos en las relaciones de pareja, con secreciones, el resbalar de un cuerpo sobre el calcular sus dígitos sexo-afecto y tomar las
lo cual amenaza derrumbar los argumentos otro, falo y hendidura, brecha y pértiga. Lue- medidas necesarias para salvar su relación.

Edición Número Ciento setenta y seis . Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
 31

DESCRIPCION DEL HECHO PUNTOS QUE SUMA AL AFECTO PUNTOS QUE SUMA AL SEXO

Vivir juntos 10,00 0,00

Comprar una licuadora Oster 2,50 0,00

Comprar una licuadora Hamilton Beach 1,00 0,00

Un cacho 0,00 3,00

Un TV blanco y negro 1,50 0,00

Un TV color 2,50 0,00

Lavadora, nevera y cocina 3,00 (c/u) 0,00

Vacaciones separados (un mes) 0,00 2,00

Vacaciones separados (tres meses) 0,00 5,00

Un hijo 20,00 0,00

Cada año juntos 5,00 0,00

Vivir con la suegra Acaba con él Lo elimina totalmente

Modo de usar la tabla: Y no se entiende 41+30=71 puntos de sexo versus 59-30=29

Sume los puntos del afecto. Reste esa canti- porque la Paloma puntos de afecto, es decir, se quieren menos
dad al 100 por ciento de sexo, con el que us- pero se cogen más: su relación está salvada.
ted comenzó su sana relación. Esos son sus en cuestión está
dígitos sexo-afecto según el método Chang. proclamando Finalmente, el doctor Chang advierte que el
justamente lo efecto multiplicador del cacho sobre el sexo
Un ejemplo. Tomemos una parejita que está que debe hacerse sólo dura tres meses, por lo que para man-
en “aquello” y tienen su 100 por ciento de tener constante un alto nivel sexual hay que
sexo sabroso y sudado... pero deciden vivir
cuando uno estar montándose cachos toda la vida. Por
juntos (10 puntos al afecto), compran una quiere preservar esta razón algunas parejas prefieren divor-
licuadora Oster (2,5 más para el afecto), una relación ciarse o separarse, lo que origina otra serie
adquieren su neverita, cocina y lavadora (9 monogámica: de fenómenos (angustia, estrés sexual, pro-
puntos para el afecto), andan siempre jun- miscuidad, etc.), profundamente estudia-
¡montarse cachos! dos en el best seller Surmenage postdivorcio,
tos para arriba y para abajo, tienen tres años
“viviendo” y un hijo. Todo esto suma un to- — o no hallo de qué palo ahorcarme, del repu-
tal de afecto de 59 puntos que, restados al tadísimo doctor John Bull.
100 por ciento inicial, deja al sexo en sólo
41 puntos. O lo que es lo mismo: se quieren monte cacho cinco veces. En total serían Tal obra será motivo de nuestro próximo
más de lo que se cogen. 10 cachos que, multiplicados por el valor comentario.
de cada cacho, da un total de treinta pun-
Si se desea mejorar el puntaje del sexo, es tos que se le suman al sexo y se le restan
muy sencillo: basta con que cada uno se al afecto. Los nuevos dígitos serán entonces Publicado en Letras, abril de 1987

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
32

Sólo para feos

Teoría de las subrutinas (Reflexiones de un seductor)

Edición Número Ciento setenta y seis . Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.
 33

¿Es usted medio feo, casi gordo, semipobre ser ninguna de esas cosas realmente. ¿Que jeres intelectuales son, en su mayoría, un
y a pesar de todo aspira a tener “éxito en el cuál es la necesidad de saber todas estas poco tristes, quizá porque saben mucho y
amor”, como dice Delia Fiallo? ¿No es us- cosas? Se la demostraremos con un senci- para andar feliz por ahí hay que ser por lo
ted tan feo, pero se le atrofia la lengua cada llo ejemplo. Supongamos que usted es un menos medio caído de la mata, como uno.
vez que intenta comunicarse con la por- gran deportista. Por supuesto, sus princi- Así que si logra hacerla reír tiene medio
tadora de “ese oscuro objeto del deseo”? pales conquistas las realiza en el medio en trabajo hecho, pero tampoco se preocupe
¿Mira ya usted con más odio que resigna- el cual se desenvuelve. Pero, ¿y si le llega demasiado si usted es un careculo sin hu-
ción el grafiti que adorna las paredes del a gustar, por ejemplo, una intelectual? A mor: cópiese pedacitos del humor de sus
baño de varones de Comunicación Social ésta no la podrá horizontalizar hablándole amigos más avispados y vaya estructuran-
y que sentencia, filosófico: “No te des mala de la pelea Leonard-Hagler, o de la lesión do su propia rutina.
vida, amiguito: practica con las feas”? Si a de Luis Salazar. Por el contrario, tiene que
alguna de estas preguntas, o a todas ellas, hablarle en su lenguaje. Además, es importante aprenderse varias
su repuesta es sí, lea este artículo. cositas de los grandes nombres de la pin-
Justamente, el objetivo de este artículo tura, política, literatura y filosofía. ¡Pero
No le alcanzará la vida para agradecérnoslo. —primero de una serie— es ofrecerle los sólo pequeñas cositas! No vaya a pasarse
lineamientos generales de la subrutina de entrenamiento y se nos convierta usted
No hay de qué. para desvestir a ese curioso, delicioso, sa- en un intelectual de verdad. Esos lo único
broso y, pasados dos meses, fastidioso es- que cogen son arrecheras.
Tal y como indica nuestro antetítulo, si us- pécimen de mujer que llaman “intelectual”
ted es un tipo lindo, “pechocho”, alto, ru- (o “intelectuala”, como les dicen en Alta- Respecto a la forma de hablar, debe tener
bio o moreno, un mango, pues, haga caso gracia de Orituco). la vehemencia de un Petkoff, pero sin lle-
omiso de estas normas: usted se las levanta gar a ser tan machote. A las intelectuales
a punta de físico. Pero si siendo bonito, Metodología les gusta que uno tenga sus... mariqueras,
se siente medio gafo, tan gafo que le han En primer lugar, como diría Lenin Moli- digamos. Quizá eso explique el éxito de
dicho varias veces como le dijeron a Yor- na, defina bien “el problema”. Catalogue Edmundo con este sector del universo fe-
dano (“sale, niño, para mí tú eres sólo...” bien a su víctima, busque una información menino. Pero, ¡ojo!, no se vaya a partir to-
etc., etc.); o si, finalmente, usted es chi- completa. Si no, le puede ocurrir lo que a talmente. La oculta esperanza de este tipo
quito, medio gordito, tirando a feo, aquí un amigo que, basado en que la chica con de mujeres es encontrarse con un tipo
le van unas reflexiones que le pueden ser la que iba a salir era “de izquierda; profun- fino, culto, pero que las jamaquee bien:
muy útiles a la hora de relacionarse con el damente preocupada por los problemas del una especie de simbiosis entre Rocco
sexo opuesto o con su mismo sexo, si es país”, se lanzó con la rutina general para las Mangieri y John Wayne. A ellas les encan-
su gusto, ya que estas líneas están escritas izquierdistas y, después de tres horas con ta el desparpajo, ese aire perdido y poé-
desde el punto de vista de un heterosexual, ella, se enteró de que la niña era del PCV. tico en la mirada. Ensaye esa expresión
pero igual le servirán si usted es homo o “Me di cuenta de que era un auténtico jon- durante horas frente al espejo, mientras
bisexual. Este es, en consecuencia, un artí- rón, no me la iba a coger ni guindándome exclama: “¡Qué bolas tiene McLuhan!” o
culo democrático y unisex. de los tubos”. Aludía aquí, mi desconsolado “¡Qué bolas tiene McBride!”, de acuerdo a
amigo, a esas grandes jugadas que se reali- sus preferencias.
La técnica zan en el Universitario y que consisten en
En informática, se denominan subrutinas “robarse” un jonrón impulsándose con el Por último, renuncie al ideal romántico. La
a secciones de un software que tienen apli- brazo de lanzar hacia arriba, apoyándose el única rutina exitosa es aquella instrumen-
caciones concretas sin necesidad de correr jugador en los tubos que forran la barda su- tada con frialdad, premeditación y alevo-
todo el programa. Igualmente, en el arte de perior del estadio. Nuestro querido amigo, sía. Así que métase a farsante.
la seducción, las subrutinas son estructu- por información defectuosa, se equivocó de
ras prefabricadas con aplicaciones aún más rutina: para las nenés del PCV hay una ru- Eso sí, si guarda usted algún parecido fí-
concretas: introducirle “pulgadas de carne tina específica que describiremos en un fu- sico a Maza Zavala olvídese. Es usted un
llorando”, como dijo Neruda, a otro ser turo artículo. La patente de esta rutina per- seguro candidato al Tiburón, al Cazador
humano; cogerse a alguien, pues. Se trata tenece (adivinen...), sí, al doctor John Bull. o al Mono Dorado. O peor aún, a casarse
entonces de que usted monte una serie de con el primer “pescao” que le pare la colita.
maniobras teatrales (que no otra cosa es Rutina
la seducción) que le permitan llegar a ser para intelectuales
algo imposible: un hombre múltiple, de- Una clásica rutina para intelectuales tiene
portista, intelectual, político, científico, sin como ingrediente básico el humor. Las mu- Publicado en Letras, mayo de 1987

Caracas, 1 de mayo de 2016. Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS
 LOS INVASORES
Por Sharon Olds (Estados Unidos)

cauto, la cara borrosa sobre mí

POR INDIRA CARPIO refulgiendo en la sombra, el olor
@indira_carpio
[ocre
de su orina propagándose por el
EL NIÑO ESTÁ VIVO (extra) [cuarto, el
Por Afua Cooper (Jamaica) calor hirviendo en mis piernas,
[mojada
Y una sobrina de la abuela Nanny
mi estrecha pelvis. Cuando cesó el
una mujer de Akan, una mujer que
[silbido, cuando un
[puede ver a lo lejos,
Hitler entró en París como mi agujero había sido marcado a fuego
una mujer con el conocimiento de las
hermana entraba en mi habitación por [en mi cuerpo, tumbada
[yerbas
[la noche, y calcinada de vergüenza, percibí el
una mujer que trabaja en el campo relumbrar de su piel en el aire, el
se sentaba a horcajadas sobre mí, me
[cortando caña
[estrujaba con las rodillas, [placer
una mujer que habla el idioma de sus

poema
clavaba las uñas de los pulgares en mis ocre que crecía cuando Hitler se
[abuelas [muñecas y [asomaba a
una mujer que cuenta historias de meaba encima de mí, sabiendo que la tumba de Napoleón y murmuraba
[animales mágicos, de [nuestra madre nunca [Éste es el
árboles que hablan y de ciudades creería mi versión. Todo muy mejor momento de mi vida.
[espectaculares debajo de
ríos poderosos
una mujer que fue robada de su aldea
[cuando tenía 14
una mujer que fue violada en el buque
[negrero por un TRINOS
marinero blanco Jesús Castilla
una mujer que vuela a África cuando ella @JesCastilla:
[duerme.
“Miramos el mundo una sola vez, en la infancia.
Esta mujer, esta sobrina de la abuela El resto es memoria”. Louise Glück
[Nanny,
toma su cuchilla y corre con la velocidad
[de Sogolón Condé
en su aspecto de mujer-búfalo
esta mujer corre con su machete
un antiguo canto subiendo de la garganta INMACULADA
Por Tanya Shirley (Jamaica)
un antiguo canto suplicando a Dios y a
[todos los espíritus Hubo muchos días de lluvia. Hubo mu-
que asisten a las mujeres que dan a luz chos días que me hallaron desprotegida.
[para que vengan a Hubo un día especial en que vestía mi
su ayuda uniforme —blusa blanca, falda blanca de
Ella llama a sus compañeras: “Formar un pliegues sobre refajo blanco, sobre ajusta-
[círculo alrededor dor de algodón blanco, braga de algodón
de la mujer muerta blanco— y empezó a llover. Caminaba
Respiren, respiren profundamente, denle despacio bajo la lluvia exactamente como
[aliento, me habían dicho que no hiciera. Damas,
denle vida”. caminen con ánimo, muévanse, muévan-
(...) se. Recuerden que la lluvia es enemiga de
Esta mujer, esta sobrina de la abuela la castidad. Caminen con ánimos, damas.
[Nanny, Pero aquel día partícular, caminé como
entra en el círculo y con su machete, yo pensé que debía caminar una dama. da muy peligrosamente del sitio donde
[el canto ancestral emergiendo de los Iría vestida de lluvia. Podía sentirme pensé que esta hierba me cortaría una
[labios, moviendo en esta lluvia —moviendo en y otra vez en rebanadas elegantes. Floté
corta el abdomen de la mujer y libera al pautas tan puras. Me tendí en la hierba y fuera de mi ropa, de la blancura, de la
[niño le desafié a crecer. La hierba se abrió como bondad, de cruces y confesiones. Oré
mientras sus compañeras canturrean. un lecho de mil tijeras y me mantuvo alza- por la lluvia y la expulsión.

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.

POR ANDRÉS PALACIOS
cruciverbonay@hotmail.com
32
24 10
33
16
25 17 11
1 Ciudad en el sureste de la isla de Margarita
2 Modo de caminar del hombre y de algunos venezolano
animales (pl.)
3 Ruido seco y súbito
4 Séptimo día de la semana
5 Aficionados a comer golosinas
6 Pongo una cosa ladeada o de través
7 Cacique indígena venezolano
8 Cierto cuerpo celesta errante
9 Modo o manera de ejecutar algo
10 Monedero, celular o inalámbrico
11 Ficción o mentira en cualquier materia
12 Trabajoso, penoso
13 Sensación que se percibe por el oído
14 … Arango, “Pancho Villa”, célebre 28 Freddy …, desaparecido actor venezolano
revolucionario mexicano
15 Aclama, tributa una ovación
16 Nombre en el siglo XVII del territorio 31 Muy grande, extraordinario
noroccidental de Nuevo México
17 Personas que están en la juventud
Instrucciones
Comenzando por el cuadro central se sigue el
sentido del laberinto, tomando como inicio de la
siguiente palabra la última sílaba de la anterior
31 30
23 22 21
15
9 14
5 29
2 4
1 8
3 13 20
6 28
7
12
18 19
26 27
18 … Zavarce, desaparecido actor y vocalista
19 Cierto dispositivo de barras giratorias
20 Artista que, en un espectáculo musical, actúa
antes de la atracción principal
21 Tomaras para sí lo ajeno
22 Rotura de un vestido o tela
23 Nombre de varón de origen visigótico
24 Población del estado Táchira
25 Sometían algo, en caso de escasez, a una
SOLUCIÓN DEL ANTERIOR
distribución ordenada
26 Malhechor, delincuente
27 Imagen de la Virgen María en la acción de
dolerse por la muerte de Cristo
29 Pendiente o arete
30 Que tiene señales de haber llorado
32 Lista o catálogo de nombres
33 Perteneciente o relativo al tiempo de Navidad
POR NATHALI GÓMEZ
@laespergesia
Ilustración: L. "Razor" Balza

Minimanual
para batirse un champú Imaginario
Usted siempre hace más espuma que los demás.
Se le puede encontrar en cualquier ambiente donde
“se da mucha bomba pero tiene poco chicle”.
Después de leer
Siempre tendrá cara de sobrado y convencerá a los
demás de que sin usted, el mundo sería un lugar
triste y solitario.
1. ¿Quién es ese que está hablando de usted? Ah,
sorpresa, es usted mismo. Su mejor relacionista
público.
2. Llega tarde a todo, solo para demostrarle a los
demás que es una persona importante a la que hay
que esperar.
3. No le gusta nada de lo que hacen los demás, a
pesar de que usted tampoco es que haga mucho.
4. Se hace de rogar por todos. Esa es su vitamina.
5. Responde mensajes y correos días después de
que se los enviaron. Y claro, nunca contesta
llamadas.
6. Considera que saludar a las personas, cuando algunos titulares de la prensa
llega a algún sitio, es para pánfilos.
7. A pesar de que le presenten a alguien mil veces,
siempre fingirá no recordar su nombre cuando se
cruce con él.
8. Aunque actúa en solitario, le gusta que lo vean
rodeado de gente. TUIT DE
9. Nunca tiene tiempo para escuchar a los demás.
Es que tiene tantas ocupaciones ficticias.
10. Su dedicatoria: “Se bate un champú y no llega
ni a jabón”.

¿
de la semana

Por qué nadie

¿
pregunta

nunca responde
la pregunta
de la semana

Edición Número Ciento setenta y seis. Año 04. ÉPALE CCS Caracas, 1 de mayo de 2016.