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COMO VIVIR EL TERCER FACTOR

Yo le dije al Maestro Samael en una ocasión: “Maestro ¿Cómo hace para el tercer factor?”,
porque figúrese yo estaba en la tónica de la Misión, en esa época en que yo no me paraba en el
seguro, y yo decía, yo veía a la pobre Negrita, la mujer cuidando a los niños y siendo una Isis,
eso sí, completísima en el Santuario, y entonces yo le pregunté al Maestro, Maestro y la persona
que no puede ir de casa en casa, de pueblo en pueblo llevando la enseñanza; y respondió: “Mi
caro hermano, el tercer factor es lo más sencillo de cumplir cuando uno lo quiere, haciendo
cadenas pidiendo por la paz del mundo, haciendo cadenas pidiendo por los enfermos,
cumpliendo con el deber en el Lumisial, en la comunidad, en el hogar”…¡Me pescó el Maestro
ese día! en el hogar, porque yo me refería a mi mujer, educando a sus hijos.

Eso es cumplir con el tercer factor, ¡mire que cosa tan bella! ¿Quién no puede?, quién que esté
paralitico, pero ¿qué, no puede hablar?, que es sordomudo pero que entiende algo y está
pidiendo a su Padre, “Padre mío, Señor mío, Dios mío que la paz del mundo reine en la
humanidad, en los hermanos”.

Cómo le parece que cuando a uno le sirven un plato de sopa y hay un enfermo por allá, yo
bendigo mi alimento y le pido al Sacratísimo Espíritu Santo que parte del Shakty potencial
nutritivo de este alimento que voy a comer, sea compartido con el organismo, con el vital de esa
persona, ¡y eso se da! ¡Como será!.

¿Quién no puede servir?¡Todo el Mundo!. Miren, las cadenas son una cosa importantísima,
pedir uno todos los días al amanecer y al anochecer por el pueblo gnóstico, por los hermanos,
por todo el mundo, y así nos unimos en familia, en esa gran familia a través de la oración. Es
tanto lo que hay que hacer, y eso es lo que hace que una persona se vuelva un Mago Blanco,
¡Eso!.

V.M. Lakhsmi Convivencia Diciembre 2001

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