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UNIDAD 1: LA COMPASION DE JESUS: LUCAS Compasi6n por LIST) LB os marginados de la sociedad VERDAD CENTRAL La compasién de Cristo por los margina- dos de la sociedad es un ejemplo que debemos seguir. VERSICULO CLAVE: Lucas 5:31-32 «Los que estén sanos no tienen necesi- dad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento». FUNDAMENTO BIBLICO Lucas 5:12-32 INTRODUCCION A LA LECCION ¢Por qué algunas personas son marginadas de la sociedad? En todos los tiempos, la sociedad ha estado dividida en clases 0 estratos. En ellas encontramos personas que disfrutan de todo lo mejor que ofrece la vida, y junto con ellos, muchos que aspi- ran a ese estilo de vida. Sin embargo, también estan los menos- preciados, los marginados e incluso deni- grados. Las razones de que haya personas en esta condicién son diversas. Pero en Cristo aprendemos a acercarnos a quienes la sociedad margina. En el estudio de hoy, desarrollaremos una mejor comprensién de la compasién de Cristo, y de cémo nosotros podemos seguir su ejemplo. 1. UN LEPROSO DESESPERADO Lucas 5:12-16 En los tiempos del Nuevo Testamento, la lepra era una enfermedad contagiosa que 4 La Guia LECTURA BIBLICA DIARIA Lunes: Una oraci6n para pedir miseri- cordia. Salmo 51:1-12 Dios es compasivo. Salmo 103:1-12 ios perdona. Miqueas 7:14-20 Jesus alimenta a una multitud. Mateo 14:13-21 Su compasién por la multitud. Mateo 15:29-39 La liberacién de un nifio. Marcos 9:17-27 Martes: Miércoles: Jueves: Viernes: Sabado: desfiguraba a la persona. Pero las conse- cuencias para quien padecia por causa de ella iban mucho mas alla del sufrimiento fisico. Esta enfermedad era repulsiva para la mayoria, lo que relegaba al enfermo a una condicién en que se lo consideraba «inmundo». No podian participar con los demas judios en muchas de las practicas religiosas. Como consecuencia, los lepro- sos sufrian un aislamiento fisico, social e incluso religioso (véase Levitico 13-14). Con esta informacién de fondo, es inte- resante observar la escena que se presenta en Lucas 5. El leproso se acercé a Jesus, a pesar de que las multitudes lo considera- ban un gran maestro y un hombre santo. El leproso habia oido hablar sobre los prodi- giosos milagros de Jestis, y queria ser sano él también. El acto mismo de acercarse a Jesiis implicaba una denodada fe por parte de un hombre que habia sido desechado por la sociedad. Con todo, observe su humilde postura al acercarse y postrarse ante el Sefior (v. 12). LECTURA BIBLICA EN LA CLASE Lucas 5:12- 12. Sucedié que estando él en una de las ciu- dades, se present un hombre Ileno de lepra, el cual, viendo a Jestis, se postré con el rostro en tierra y le rog6, diciendo: Seiior, si quieres, puedes limpiarme. 13. Entonces, extendiendo él a mano, le toc6, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante la lepra se fue de él. 14. Y él le mand6 que no lo dijese a nadie; sino ve, le dijo, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu purificacién, segtin mand6 Moisés, para testimonio a ellos. 17. Acontecié un dia, que él estaba ensefiando, y estaban sentados los fariseos y doctores de la ley, los cuales habfan venido de todas las aldeas de Galilea, y de Judea y Jerusalén; y el poder del Sefior estaba con él para sanar. 18. Y sucedi6 que unos hombres que trafan en un lecho a un hombre que estaba paralitico, procuraban Ievarle adentro y ponerle delante de él. 19. Pero no hallando cémo hacerlo a causa de Ja multitud, subieron encima de la casa, y por el tejado le bajaron con el lecho, poniéndole en medio, delante de Jestis. 20. Al ver él la fe de ellos, le dijo: Hombre, tus 4, 17-24, 27-32 pecados te son perdonados. 21. Entonces los escribas y los fariseos comen- zaron a cavilar, diciendo: ,Quién es éste que habla blasfemias? ;Quién puede perdonar pecados sino s6lo Dios? 22. Jesiis entonces, conociendo los pensamien- tos de ellos, respondiendo les dijo: Qué cavi- Isis en vuestros corazones? 23. {Qué es més fiicil, decir: Tus pecados te son perdonados, o decir: Levéntate y anda? 24. Pues para que sepdis que el Hijo del Hom- bre tiene potestad en Ia tierra para perdonar pecados (dijo al paralitico): A ti te digo: Levén- tate, toma tu lecho, y vete a tu casa. 27. Después de estas cosas salié, y vio a un publicano llamado Levi, sentado al banco de los tributos puiblicos, y le dijo: Sigueme. 28. Y dejindolo todo, se levants y le siguié. 30. Y los escribas y los fariseos murmura- ban contra los disefpulos, diciendo: ;Por qué coméis y bebéis con publicanos y pecadores? 31. Respondiendo Jestis, les dijo: Los que estan sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. 32. No he venido a lamar a justos, sino a peca- dores al arrepentimiento. (Nota: La lectura en la clase incluye solo una seleccién de los versicutos del trasfondo de la leccién.) Es probable que la reaccién del Seiior asombrara a todos los presentes (v. 13). Hasta el simple acto de tocar a un leproso estaba prohibido. Sin embargo, Jestis actud para tranquilizar a aquel hombre. El gran Maestro estuvo dispuesto a sanarlo; el leproso no tenia de qué temer. Jestis sand al leproso de inmediato. En un instante, aquel hombre experimenté la sanidad fisica y la restauraci6n a la socie- dad. Jesiis habia transformado su vida. Jestis le indicé al leproso que se presen- tara de inmediato al sacerdote. Habia un procedimiento a seguir si la persona era sana de la lepra (véase Levitico 14:1-32). Por este procedimiento, él debia ser decla- rado ceremonialmente limpio, y quedaria capacitado para regresar a la sociedad y a la vida religiosa normales. No obstante, Jestis también le indicé al hombre que guardara silencio en cuanto a lo que le habia sucedido (v. 14). A nosotros Nos parezca que esto es algo extraiio, pero es importante recordar que la intencién de Jestis no era que la gente lo viera como un lider politico que estaba provocando una revuelta publica. Lo que El estaba haciendo era sencillamente proclamar el reino de Dios. Con todo, es evidente que el leproso no callé (v. 15; véase también Marcos 1:40- 45). Este gran milagro atrajo multitudes a 3 de septiembre, 2017 5 UNIDAD 1: LA COMPASION DE JESUS: LUCAS Jesiis. El se acercé a las personas que otros habrian ignorado, y obré milagros en ellos que ningun otro pudo haber hecho. El ministerio de Jesis nos sirve a nosotros hoy como poderoso ejemplo. Podriamos sentirnos tentados a ignorar 0 evadir a alguien que tiene una afliccién © un problema peculiar, Pero el hecho de ser seguidores de Cristo debemos respon- der como El lo hizo. Ore que su primer impulso no sea evadir a las personas, sino el deseo de ministrar la gracia de Dios. Para comentar en clase: ¢Por qué cree usted que los leprosos eran despreciados y marginados en los tiempos del Nuevo Testamento? Para la reflexién personal:

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