DOSSIER

LOS
MAYAS
Realidad y enigma
Un halo de misterio
sigue
rodeando a la
civilización de los
mayas, una de las
más refinadas y
complejas de
Mesoamérica en el
período prehispánico,
con asentamientos
en lo que hoy son
Guatemala, México,
Honduras, Belice y
El Salvador. Ahora,
la película
Apocalypto, de
Mel Gibson,
populariza
su milenaria historia
 La llamada Reina de
Uxmal, escultura en
piedra calcárea hallada
160. Señores de la selva
en la Pirámide del Mago Andrés Ciudad Ruiz
de Uxmal, Yucatán
(México), Museo Nacional
de Antropología). 168. Pirámides y reyes
María Josefa Iglesias
Ponce de León

176. Bajo el signo de los astros

Alfonso Lacadena García-
Gallo

180. Apocalypto
Andrés Ciudad Ruiz
159
 LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

SEÑOR Estatuilla cerámica

representando a un guerrero,
procedente de la isla de
Jaina (Campeche, México),
finales del Período Clásico,
siglos VII-VIII.

ES
DE LA
SELVA
Los mayas na
protagonizaron u las de
más refinadas es
civilizacion surgidas
en el área
mesoamericana.
Andrés Ciudad nizaci
estudia sus orígenes ón
milenarios, su ntos y
compleja orga social sos
urbana, sus
conocimie creencias,
así como sus diver
hasta la llegada de los españ

o han los indios con la ida de española...,

perdido sino ganado la nación sus primeros
N fun- dadores,
padres que los
engendraron
hijos de la
malos

en pecado e
El Almirante valora en sus
escritos la can- tidad, variedad
y calidad de los bienes que
transporta, y se admira de la
LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

ira… no les supieron dar

sofisti- cación cultural que
orden (para que) careciesen
transmiten sus ocu- pantes.
de (los) errores tantos y tales
Sin duda, la intención, la
como en los que han vivido…”.
sensi- bilidad y la experiencia
Esta actitud del obispo Diego
de cada uno de estos dos
de Lan- da, asentada en su
personajes es distinta, pero re-
Relación de las cosas
coge dos maneras de
de Yucatán (1560),
contemplar al “otro”, al El Palacio de la ciudad de
contrasta con la sor- presa que Palenque, siglos VII-VIII
indígena americano que, en
demuestra Cristóbal Colón (Chiapas, México),
cier- ta medida, y con los magnífico ejemplo de la
cuando, en el curso de su
cambios lógicos del proceso arquitectura maya del
cuarto viaje, descubre en
histórico, persisten hoy en día. Período Clásico.
1502 una canoa maya que
El bagaje cultural de estos
navega frente a las costas de
comercian- tes mayas y de la
Honduras.
civilización que repre- sentan
no es fruto del azar, ni
ANDRÉS CIUDAD RUIZ es catedrático
de Historia de América, UCM.
obedece a procesos históricos
inmediatos o aje- nos; al
contrario, estos navegantes
par- ticipan de una sociedad
que hunde sus raíces en
milenios de tradición, en la que

160 161
 SEÑORES DE LA SELVA
LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

Estos acontecimientos se
acompañan
de una religión formalizada que,
como en el resto de las
civilizaciones de la Anti-
güedad, se asienta en la
tradición agríco- la que la
sustenta; de ahí, que las
deida- des básicas estén
dedicadas a la lluvia, al fuego,
al sol, al trueno y, en especial,
al principal alimento de los
pueblos me- soamericanos, el
maíz, además de otras
divinidades referentes al
mundo de ul- tratumba. Una
religión que, convenien-
temente manipulada, sirvió
como estra- tegia de poder de
los gobernantes mayas. Tal
Llegada de los españoles al Yucatán, según una ilustración de Historia de las Indias, manuscrito de D. Durán, hacia 1579, Madrid, B. Nacional.
proceso está reflejado por una
ela- borada iconografía a base
de mascarones de estuco
colocados en los basamentos
de los templos, mediante los
cuales los reyes difunden una
ideología que los si- túa en el
centro del universo, interfirien-
do en la órbita del Sol y de
Venus. El uso de cerámica
especializada y de utensilios
exóticos muestra el incremento
de las je-
se han desarrollado de los recursos de origen de los centros (montículos, rarquías sociales y la presencia
conocimientos, ins- tituciones, vegetal: un lar- go camino que estelas y al- tares grabados, de una cla- se gobernante cada
estructuras, ideologías y tec- culminará con el desarro- llo de sistema de escritura y ca- vez más rica y pode- rosa, que
nologías altamente la agricultura hacia 2000 a.C. lendario); rasgos que se deja huella de su existencia me-
evolucionados. No es una Esta alternativa económica y combinan en el primer milenio diante la construcción de
tradición en exclusiva maya, sociocul- antes de nuestra Era pa- ra lujosas tumbas que contienen
sino que acoge en su seno tural requiere de patrones de definir el “estilo” de la un sofisticado inventario de
diseños culturales que conviven compor- tamiento que ya civilización me- soamericana: bienes de lujo importados.
en un área de tradiciones com- identificamos como ma- yas, y el modelo de templo y de
partidas, que los expertos se desarrolla en el denominado palacio, el sistema de Esplendor urbano Detalle de un mural del Templo de las Pinturas o Estructura I de Bomanpak (Chiapas, México),
conocemos con el nombre de pe- ríodo Preclásico (2000 a.C. propaganda polí- tica, el tipo El complicado proceso de donde se relatan sucesos del reinado de Chaan Muan II, de finales del siglo VIII.
Mesoamérica, y que identifica a 250 d.C.), cuando se perfilan de divinidades, o de aportes manipulación de la ideología
un área de civilización. las bases en que se asienta la intelectuales como la colectiva por los gober- nantes
Las civilizaciones antiguas civilización mesoamericana. El escritura y el ca- lendario, y culmina en el período
incluyen en dominio de la agricultura demás. Acompañan a estos Clásico (250-1000 d.C.), y viene
sus registros culturales rasgos favorece el uso de la cerámica rasgos jerarquías sociales con anunciado por el
y estruc- turas básicas que, a y la sedentarización por medio diferente acceso a los recursos desplazamiento de los
simple vista, resultan comunes de aldeas socialmente y, con ellas, la cons- trucción de mascarones que decoran los
a todas ellas: grandes centros igualitarias, como las que impresionantes recintos ur- templos-pirámide por este- las
urbanos, suntuosos palacios, existen en la fase tempo- ral banos repletos de y altares tallados con las
impresio- nantes edificios conocida como Barra (1850- arquitectura monu- mental imágenes de los reyes,
religiosos, bellas obras de arte 1650 a.C.) que, distribuidas asociada con magníficas acompañados por textos en los
escultórico y pictórico y lujosas desde la costa del Pací- escultu- ras y con recintos que sancionan la legitimidad de
su poder
tum- funerarios ocupados
bas repletas de productos
exóticos de
gran destreza artística se
técnicas, instituciones com- plejas, religiones centralizadas y
avanza- dos conocimientos. La cultura maya no es una excepción:
Las comunidades mayas se organizan en ciudades-
combinan con sofisticadas
su milenaria tradición cul- estado autónomas, con reyes que legitiman su 163
poder en el y
ran los acontecimientos más
rele- vantes de su mandato.
origen divino n
Las ciudades se hacen aún
más com- plejas y se pueblan
a
de templos, palacios, juegos de
r
pelota, santuarios, calzadas y
tural y su pertenencia a un fico hasta la del Golfo de por ricas ofrendas. En este construcciones abovedadas más
área de civili- zación México, intro- ducen pautas momento sur- sofistica- das y específicas. Todo
culminaron con una evolución que garantizan la propie- dad gen las primeras ciudades ello acompañado por una
compleja que hoy día asombra de los territorios en que se mayas. agricultura intensiva que logra
al profano por la belleza de sus instalan Estas ciudades incipientes al- tos niveles de producción
manifestaciones ar- tísticas y –tales como el culto a los preludian, como ya lo hicieron de alimentos, un comercio
sus logros intelectuales. antepasados–, y practican antes en Mesopota- mia, China especializado a larga distan- cia
rituales chamanísticos, mu- o Egipto, un nivel organizati- vo y una sociedad estratificada,
Una evolución milenaria chos de ellos dedicados a la típico de las jefaturas cuyos ar- tesanos producen
Esta larga trayectoria evolutiva fertilidad de la tierra y del complejas y de los Estados bellas obras de arte.
tiene ante- cedentes lejanos en grupo humano. arcaicos. La arqueología do- Las comunidades mayas se organizan
pequeñas bandas de cazadores Con el tiempo, el control del cumenta un rápido incremento en ciudades-estado autónomas,
y recolectores nómadas, insta- territorio pobla- cional y el desarrollo de dirigidas por reyes que
lados en el área maya hacia y de las técnicas de trabajo de organizaciones estratificadas, legitiman su poder en el
9000 a.C., en un momento en la tierra ori- ginan cierta como testimonian los ela- origen divino de sus antepasados
que el Pleistoceno toca a su fin diferenciación social interna y borados restos funerarios, la y actúan de intermediarios
y obliga a estos grupos a los primeros centros de consolida- ción de un estilo entre las divinidades y la
introducir modificaciones en su integración ha- cia 1650 a.C. La propio en la arquitec- tura, el comunidad humana. No
economía de sub- sistencia, referida estratificación se arte y la especialización podríamos de- cir que el rey
consistente en la manipulación consolida con la influencia artesanal. Uno de los maya –k’uhul ajaw–, “sa-
olmeca de la costa del Golfo acontecimientos más notorios es grado señor”, se consideró un
162 de México, que se evi- dencia el uso de la escritura dios a la
en la ideología y la jeroglífica.
organización
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LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

manos y los árabes, un punto mítico

Los sacrificios de partida en el 13 de agosto del año
3114 a.C. El momento culminante resultó
humanos
l sacrificio humano, por renombrada tumba de K’inich con la guerra y, si bien es cuando estos cálculos

E aberrante que parezca en la

actualidad, es un rasgo
cultural ligado a la historia
Janaab’ Pa- kal I de Palenque.

Visto desde esta óptica, el

humana, haya
sido realizado con fines
religiosos, políti- cos o para
depurar a individuos antisocia-
les. Los mayas prehispánicos no
fueron aje- nos a esta práctica,
aunque la información
arqueológica, etnohistórica o
histórica acer- ca de sacrificios
masivos es escasa y permi- te
pensar que no ocupó un papel
central en su cultura.
Los mayas formaron parte de
la civiliza- ción mesoamericana,
para la que el sacrifi- cio
humano está identificado
desde
6000 a.C., quizá diseñado para
capturar la espiritualidad de un
individuo, como un me- dio para
contactar con el mundo
espiritual. La información
disponible vincula el sa- crificio
humano entre los mayas con
ritua- les realizados
exclusivamente por el Rey,
quien, en su doble calidad de
gran sacer- dote y sacrificador
y a la vez jefe político y militar,
utilizó a personajes de élite
cap- turados en el campo de
batalla para au- mentar su
carisma y su poder político-te-
rritorial; ocasionalmente,
algunos sacrifi- cados
acompañaron al gobernante en
su via- je después de su muerte,
como ocurre en la
sacrificio hu-
mano –sea por decapitación o
por extrac- ción del corazón,
desmembramiento, ahor-
camiento, destripamiento,
asaetamiento o por fuego– se
muestra en íntima conexión
Cuatro dioses mayas rodean un templo
unidos por una cuerda que perfora sus falos
erectos (Códice de Madrid, M. de América).
presentado en la iconografía
como un acto ritual, fue esen-
cia para inspirar terror político.
l La rituali-
zación del sacrificio permitió
que los reyes aseguraran una y
otra vez a sus súbdito la
continuidad de los ciclos de
tiempo y de la regeneración de
la vida, y sirvió para ex- plicar
comportamientos del más allá,
con dioses sacrificadores. Estas
prácticas estu- vieron
acompañadas por otras de
humilla- ción de los cautivos,
que incluían el des- pojo de sus
signos de rango, de prestigio e
identidad, su desnudez y
desaliño personal. Después de
1000 d.C., el sacrificio hu-
mano se transformó en un
importante fo- co ritual, como
consecuencia de la intro-
ducción de nuevos cultos a la
Serpiente Em- plumada y
asociado también al juego de
pe- lota: tuvo entonces una
función esencial de pago y
alimento a los dioses, en
reciproci- dad de aquellas
deidades que habían dado su
sangre para crear a la
Humanidad. A par- tir de estos
momentos se hace más común
el sacrificio humano en la
imaginería, y apa- recen las
primeras estructuras
especializa- das que lo
magnifican, como los altares de
cráneos –tzomplantli– situados
en el cora-
zón de las ciudades. A.C.
aritméticos se tras- ladaron a la
cerámica, la concha, el jade
y, sobre todo, a la piedra monumental jun-
to a la figura del gobernante.
Este sistema se denominó
Cuenta Larga o Serie Inicial, por
contar con un Glifo
Introductorio, y se utilizó para
contar la Historia maya.
Ciclos, astros, dioses
La concepción cíclica del tiempo
y del es- pacio permitió a los
gobernantes cono- cer el
pasado y determinar el devenir
me- diante la práctica ritual.
Una vez más, el conocimiento
de los astros les resultó de gran
valor; si conseguían explicar
la re- volución del sol, podían
manejarla, y la experiencia les
dio oportunidades sufi- cientes
para ello: los mayas
registraron eclipses de sol y de
luna, incluso aquellos que
afectaban a zonas alejadas de
sus te- rritorios. Sus libros
jeroglíficos están lle- nos de Máscara de jade del rey Pakal, gobernante de Palenque en el siglo VIII, cuya tumba se descubrió
en el Templo de las Inscripciones de esa ciudad, México D. F., Museo Nacional de Antropología.
tablas de diversos planetas,
cuyo manejo por los sacerdotes,
en combina- ción con el ritual,
hizo posible la mani- pulación
del presente y del futuro.
Si los cuerpos celestes y el
espacio en que se instalan son
cíclicos ¿por qué no te- ner los
dioses el mismo
comportamiento? Dioses y
estrellas pudieron actuar como

manera de los faraones destinadas a la repre- ostentaron títulos, arquitectura, y de ricas tieron sofisticadas diferencias Una sofisticada cultura
egipcios, pero sí sentación de unos car- gos y rangos ofrendas deposi- tadas de tradición
Un elemento que define de forma meri-
que tenía una esencia de soberanos plenamen- te diferentes y se en sus lugares de que se manifiestan en el arte y diana la cultura de la aristocracia es la
divinidad que le separaba del conscientes de su encargaron de la habitación y de culto y confieren gran riqueza cromática es- critura jeroglífica, que pone de
resto del cuerpo social y que se condición, dan tes- burocracia del palacio en sus recintos y formal a esta cul- tura: los manifies- to que los mayas participaron
reservó un papel divino tras su timonio de una y del control del funerarios. estilos arquitectónicos y la de uno de los conocimientos más
muer- te, transformándose en sociedad cortesana territorio. Todos ellos La organización exis- tencia de diversas evolucionados de la Historia de la
una deidad rela- cionada con la muy evolucionada. Las requirieron de los territorial en ciuda- escuelas estatales de Humanidad; son mi- les los textos que,
fertilidad, en especial en el cortes mayas estuvie- servicios de centenares des-estado autónomas manufactura y decoración consignados en made- ra, piedra,
dios del maíz o el de la lluvia. ron pobladas por una de personas y propició la hete- cerámica dan cuenta, por murales, cerámicas, joyas y li- bros,
Los suntuosos palacios, el lujo amplia variedad de reflejaron su posición rogeneidad cultural, ejemplo, de esta situación. registran las biografías, hazañas y
material y las obras de arte aristócratas que por medio de la de modo que exis- costumbres de los reyes y sus cortes.
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LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA
De un modo similar a las escrituras Corte maya el conocimiento el sol, atravesando el tales como resina de para afianzar su po- der
egipcia, hitita o sumeria, la maya se científico del firmamento y bajan- árbol, cera de abejas mediante la reactivación de un
compone de signos logográficos y comportamiento de los astros do al inframundo para volver a o granos de maíz. La anti- guo mito que refiere a la
fonéticos, de los cua- les se han y del ca- lendario. Los hombres renacer en una rueda que no quema de estas sus- creación maya y que fue
registrado más de 800, cuyo de ciencia se die- ron cuenta tenía fin. Y el gober- nante, un tancias y de algunos instrumentado por los reyes
desciframiento se halla en un momento de que los cuerpos celestes ser divinizado por su propio car- otros objetos “con al- pa- ra identificarse con aquellas
de gran madurez. más relevantes tenían un go, no era otra cosa sino otra ma”, como papel de divinidades que vencieron a los
También define la sofisticación de la comporta- miento cíclico. Por estrella que seguía los pasos corteza de árbol, co- dioses de la muerte y para
eso pensaron que el tiempo del sol y, favorecido por el pal, jade y la sangre explicar su renacimiento como
era cíclico y el espacio también, monopolio de los rituales de del gobernante, per- se- res sobrenaturales.
y que formaban un Estado, se consideraba el eje del mitieron a los reyes –
continuum por el que mundo, el único ga- rante del junto con determi-
deambulaban el sol y los orden cósmico en la tierra. nadas prácticas de
cuerpos celes- tes. Su Con estos ingredientes alteración de la con-
sistematización permitió a la insertados en una religión de ciencia– entrar en
Cor- te dotarse de una carácter animista, el ritual y las trance y contactar con
herramienta que les ale- jó aún prácticas chamanísticas situaron los dioses y con sus
más del cuerpo social. a ca- da individuo en el lugar antepasados para con-
Con un sistema que incluía que le corres- ponde. El paisaje jurarles y hacerles
accidentes construido maya estuvo intervenir en sus ritua-
naturales, estructuras jalonado de portales simbólicos les. El resultado de
arquitectónicas, se- ñales y que co- nectaron con el este contacto se co-
edificios especializados –como ambiente en que vivieron los municaba a los
los Complejos de Ritual Dignatario maya arrodillado, en la Estela dioses y los antepasados, los asistentes al ritual por
Público, el Caracol de Chichén 40 de Piedras Negras, fechada el 4-6-746, cuales fueron cruciales a la me- dio de la danza
o la torre de Palenque–, cons- Ciudad de Guatemala, Museo Arqueológico.
hora de escenificar los dramas estática y de cantos,
truyeron elaborados ciclos en que los señores realizaban en la que los oficiantes
calendáricos, asentados en un sus ritos de transformación: de se comportaban con ac-
sofisticado sistema ma- las puer- tas de los templos, titudes propias de los
temático: la invención del 0 les cuevas, juegos de pe- lota e, seres divinos.
permitió la creación de un incluso, de objetos como platos Además del sacrificio
sistema vigesimal y es- tablecer po- lícromos, emanó una personal, los di-
cálculos que conducen al infini- sustancia que tenía esencia rigentes realizaron
to, a partir de posiciones que divina y que los mayas denomi- otros grandes rituales,
multipli- caban por 20. naron itz, un término ligado a como el sacrificio
El sabio maya acopló este las secre- ciones del ser humano humano y el juego de
sistema arit- mético al y otras sustancias, pelota, muy útil éste
calendario y situó, como los ro-

164 165

Recinto del juego de pelota de la ciudad de
Cobà (Yucatán), fundada en el Período
Clásico y que pervivió en el Posclásico.
Esta religión animista era
compar- tida por todo el
cuerpo social, pero a la vez
fue sobrepasada por otra
que tenía una esencia más
urbana, dise- ñada por la
realeza y la Corte. Ellos
fueron quienes crearon una ri-
religión formalizada, en que so-
los dioses no eran
considerados como seres
abstractos o ginados en el
tiempo de la creación y a
ciados a un espacio metafísico
distinto – mo el dios cristiano–,
sino que compart
ciertos aspectos del desarrollo cíclico
del humano, de la naturaleza y de los
ser
as- los dioses habían nacido en un
tros:
mo-
mento determinado, necesitaban
alimen-podían sufrir por el desentendi-
tarse,
miento de los hombres y podían morir.
raron “decadente” este período panden gracias al temala el proceso es paralelo,
Posclási- reforzamiento del in- pero desde
co que concluye con la tercambio internacional 1250 surgieron Estados
conquista por l o s españoles mediante em- barcaciones que independientes con un alto
(1000-1521/1697 d.C.). Una ar- circundan la península de grado de integración política.
quitectura menos suntuosa, Yucatán para llegar a América Quichés, Cakchiqueles,
ajuares elitis- tas más sencillos Central. Los documentos Tzutuhiles y Ma- mes se
y una escultura menos escritos en grafías la- tinas que disputaban los Altos, desde
sofisticada, junto a un corpus recogen la memoria histórica don- de presentaron una fuerte
de escritura jeroglífica maya, narran las fortunas de resistencia a las tropas
reducido, hicieron pensar a los ciudades co- mo Chichén Itzá, españolas que invadieron el
expertos que esta etapa era Mayapán, Izamal y otras muchas área en 1521. Aún hubo un
equivalente a una regresión más, y documentan un último núcleo de resistencia
cultural. Hoy día se ha sistema político que, si bien maya en medio del control es-
comprobado la existencia de tan jerarquizado o más que el pañol, Tayasal, que resistió a
una muy compleja estructura vigente en el Clásico, había de- orillas del ac- tual lago
económica y organi- zativa para jado atrás la fuente carismática guatemalteco Petén Itzá hasta
el Posclásico, así como de avan- del poder real y se veía su conquista en 1697.
ces científicos e iconográficos obligado a un nuevo diseño de Finalmente, el contacto con el
y el man- tenimiento de los la estructura socio-política, del Imperio
registros escritos, que obligan paisa- je construido y de la español produce cambios muy
Disco de Chinkultic, con un jugador de pelota a interpretar de manera iconografía que jus- dramáticos, tanto en el aspecto
rodeado por una cenefa de glifos, 590 d C., distinta los connotados tificaba el orden demográfico, con po- blaciones
México D.F., Museo Nacional de Antropología.
cambios que hemos de- social. diezmadas por la guerra y las
terminado entre el Clásico y el Estos mismos textos señalan en- fermedades, como en el
ta naturaleza –el antiguo cultural. Nunca más se elevarán
Posclásico. Estos procesos que des- pués de 1450, con la
Egipto, Mi- nos o el imperio grandes templos ni juegos de
vienen alentados por nuevos decadencia de Ma- yapán, se
hitita constituyen ejemplos pelota, la escritura jeroglífica
cultos –muchos de ellos produjo una gran fragmentación
al respecto–, aunque en la será sus- tituida por el alfabeto
relacio- nados con la veneración política en provincias
zona maya ha alcanzado un castellano, su reli- gión, por la
de la Serpiente Emplumada– autóctonas, que per- duraría
elevado grado de misterio y cristiana, y su ciencia mate-
que enfatizan el militaris- mo hasta el contacto con los
de especulación, que poco a mática y astronómica, por la
y el sacrificio humano, y que españo- les en 1511. En las
lapoco se está desvelando. Las occidental.■
se ex- Tierras Altas de Gua-
ter causas definitivas del
co- int “colapso” de civilización
ían for maya están aún por de-
minar, pero parece claro que
Los mayas
procesos ernos y externos ras la conquista por los hoy der al conocimiento de los
T
produjeron una trans- mación templos de Yu- catán, Chiapas o
españoles, la sociedad
gradual de las bases do occidental o, al menos Guatemala, se enfrentaba así
colonial novohispana subsu-
sociales, europeo, de que los mayas no con la contundencia de los
mió las distintas
particularidades indígenas bajo habían desaparecido totalmen- modos de vi- da particulares de
el homogeneizador concepto de te. Si poco fuera este quienes legítimamente se
indio que supuso, de hecho, la aldabonazo, el 1 de enero de consideran herederos de sus
desaparición en el imaginario 1994, y tras la estela de un constructo- res y se distribuyen
criollo tanto de los mayas co- enmas- carado que fuma en por tierras desde el Gol- fo de
mo del resto de grupos étnicos. pipa, centenares de in- dígenas, México al Pacífico, desde la
Sin embar- go, ocultos tras tan en su inmensa mayoría mayas, mexicana península yucateca
generalizadora noción, los se alzaron en armas en el hasta Honduras, con una
grupos mayances siguieron estado mexicano de Chiapas. incursión en El Salvador,
evolucionan- do y adaptándose Estos acontecimientos de la incluyendo, cómo no, a
a las cambiantes condi- pa- sada década colocaron a los Guatemala y Belice.
mayas en la es- tela de la
actualidad. El exotismo que
algu-
políticas, económicas e ideológicas de la ciones sociales y ambientales. De nos habían utilizado como guía La aparición de universidades
cia de las comunidades y la sociedad, y con ella una reorientación de ello fehaciente
ron tuvie- prueba los para acce- intercultu-
rales, o directamente mayas, con
muerte. Los
wayob’, un alter ego o profundo significado cultural que había próceres
les cuando,colonia-
avanzado el siglo presencia
de los grupos indígenas que por
coesencia
res de concebidos
humanos los se- como afectado a todo el mundo maya hacia el XVIII,
tura la cul-
maya fue revitalizada como tal sees
nen, tie-
sólo la punta de lanza de
un del
to aspec-
alma que se aparece a los 1000 d.C. consecuen-
cia de una rebelión yucateca con la recu- de una identidad que,
peración
vos
seresmediante
vi- sueños, indígenas
la que los creyeron cumplir las jos,
con ha pervivido en el último
altiba-
 Una buena parte de estas entidades categoría especial de Un “nuevo orden” los sagrados libros del Chilam así, hoy, tan mayas son los
vinas tenían relación con la Esta sociedad urbana y Una de las consecuencias de Las luchas entre liberales y pueblo lacandones,
que llegó a unla selva de
fertilidad y con aspectos cortesana alta- mente este cambio sería una gran conservado- res, con los su nombre desde el Petén
positivos de la naturaleza, como sofisticada empezó a mostrar concentración de la po- indígenas siempre como carne guatemalteco y que ve el tu-
la lluvia (Ch’aak), el viento, el sín- tomas de deterioro y blación en el norte del Yucatán de cañón, y los procesos rista vendiendo artesanías a las
sol (K’inich Ajaw), el trueno, cambio desde fina- les del siglo y los lagos de Petén y el clímax subsiguientes a las puertas de Palenque (México),
el cielo (Itzamnaaj) o el dios VIII, de manera que en re- de ciudades como Uxmal o independencias nacionales como los que lo reciben después
de la realeza (K’awiil), o giones del Usumacinta, Petén y Chichén Itzá, quedando desha- hicieron que las diferencias en Chichicastenango
también dei- dades propias de Motagua se inició un proceso bitada buena parte del área entre grupos que pertenecían a (Guatemala) o las cercanías de
cultos celebrados en ciu- dades definido por el ce- se de las que había protagonizado la un gran tronco común se fueran Copán (Honduras). Es más,
específicas. Una divinidad actividades de la élite que cul- civilización maya del Clá- sico. acrecen- tando. Los vaivenes cerca de una treintena de
esencial fue el dios del maíz, minaría con el abandono Se inicia ahora una etapa en políticos y económicos, así lenguas de común origen –chol,
Hun Nal Ye, por su ca- pacidad parcial o total de las ciudades. que Me- soamérica se adentra como las fuertes tseltal, tsotsil, kanjo- bal,
de proporcionar riqueza y Decayó entonces la cons- hacia una estructu- ra de transformaciones am- bientales, Mujeres tsotsiles en una manifestación por tojolabal, chontal, cakchiquel,
pros- peridad; por ello, el ciclo trucción de arquitectura sistema mundial, y se incidieron en la misma el primer aniversario de la matanza de kekchi, ixil, izta, mopan....– son
de la planta sir- vió de metáfora pública, la erec- ción de reproducen interesantes dirección. Pero, velados tras Acteal (Chiapas), diciembre de 1998. todavía hoy habla- das por
para el ciclo de vida del monumentos dinásticos, la fenómenos de secularización y unos y otros, los mayas varios millones de hijos del
gobernante y para su ma- nufactura y distribución de sincretismo cultural, con más siguieron caminando hasta maíz. Sólo falta que quien
regeneración como un dios tras bienes de lu- jo y la vida de la estrechos intercambios de nuestros días. recorre la Riviera Ma- ya sea
su muerte. Estos dioses tu- Corte. El fenómeno no fue conceptos, ideas y mo- dos de El anuncio, en octubre de capaz de escucharlas. mirando
vieron sus propios avatares general, pero sí bastante vida con otras culturas de 1992, de que el Premio Nobel al pre- sente sin dejar de
nocturnos, que gobernaron el extendido. Todas las México y Centroamérica. de la Paz de ese año sería asombrarse por el pasado.
inframundo y estuvieron re- civilizaciones de la Antigüe- En el pasado, los arqueólogos entregado a Rigoberta Menchú PEDRO TOMÉ, CSIC.
lacionados con la enfermedad, dad han sufrido conside- hizo perca- tarse por vez
la desgra- transformaciones de es- primera a gran parte del mun-

166 167
 LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

PIRÁMID Escultura en piedra de

Chac Mool, procedente
de Chichén Itzá
(Yucatán, México),
siglo XI, Mérida, Museo
Regional.

ES
Y REYES Pirámide de Kukulkán,
en Chichén Itzá
( Yucatán, México), siglo
XIII, la gran ciudad maya
del Período Posclásico.

arece existir un amplio

consen- so a la hora de

P
calificar al arte maya en
Simbolismo y naturalismo se general como el de ma-
yor grado de
conjugan en la iconografía de las complejidad y de
belleza entre los desarrollos
exquisitas realizaciones artísticas artísticos me- soamericanos, e
incluso americanos en general.
de los pueblos mayas. María Josefa Ello se debe, en parte, a la ma-
yor profundidad histórica de
Iglesias analiza el talento esa excep- cional cultura, ya

arquitectónico con el que construyeron que, aunque alcanza

máximas cotas en el período
sus

sus ciudades y la maestría de Clásico (250

-1000 d.C.), es a partir del
escultores y pintores al servicio del Preclásico (2000 a.C.-250 d.C.)
cuando empiezan a definirse
poder y la memoria de sus reyes estilos e iconografías que –con
obvias variaciones– subsistirán
hasta el si- glo XVI.
Si bien es cierto que los
mayas com- parten numerosos
rasgos culturales con sus
sucesivos contemporáneos
me- soamericanos, fueron ellos
los que mos- traron una mayor
exquisitez al plasmar en una
amplia variedad de materiales
or- gánicos, como madera o
hueso, e inor- gánicos, como
diferentes tipos de pie- dras,
cerámica o concha, una
 LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA
iconogra- fía plural capaz de aunar simbolismo y naturalismo de forma eje y de manera más evidente el
magistral, y a los que hay que añadir la presencia del sis- tema de central rey o k’uhul ajaw, en torno
escritura jeroglífica más com- plejo de América, que –muy a menudo– es sin al que gira todo el sistema
acompaña y complementa las imágenes. Durante muchos años, se habló duda la figurativo. Y en relación
de un arte maya cuyos temas estaban centra- dos en aspectos figura
puramente sobrenatu- rales o cosmogónicos, cuando en reali- dad el humana, MARÍA JOSEFA IGLESIAS PONCE DE LEÓN eS
profesora de Historia de América, UCM.

168 169
 PIRÁMIDES Y REYES
LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

Nacimiento de una deidad, que emerge de

una planta. Cerámica maya de la isla Jaína
Detalle del llamado Palacio del Gobernador, en Uxmal (Yucatán, México), ciudad floreciente a finales del Período Clásico. A la izquierda, según el
(Campeche, México), Período Clásico.
dibujo de F. Catherwood, que ilustra el Viaje por América Central, Chiapas y Yucatán, de J. Ll. Stephens (1841); a la derecha, en la actualidad.

con él y su grandeza, una de tro en manos de los nes para dar una forma cepto primigenio, ancestral,
las repre- sentaciones más gobernantes, y cu- yo rasgo tangible al com- plejo e del espacio habitacional –choza
explícitas es la de la guerra, principal es una antorcha hu- inalcanzable mundo y patio– en que se transforman
apareciendo el gobernante, meante que sale de su frente. sobrenatu- ral. En realidad, los plazas y edificios monu-
re- cubierto de una Como co- rresponde a una dos aspectos están mentales. Ambos elementos
extraordinaria vesti- menta, sociedad agrícola, Hun Nal forzosamente unidos, por ser están he- chos para servir al
con cautivos atados o Ye, el Dios del Maíz, está los reyes elementos tiempo de escenarios y plateas
sangrantes a sus pies, y tanto frecuente- mente presente en intermediarios de lo cotidia- no donde se desarrollan rituales
en pintura mural co- mo en murales tempranos, cerámicas y lo supranatural. Y, si bien en comunitarios. En las plazas –
piedra tallada. Asimismo, no y talla en piedra, seguido de los ini- cios de las quizá la re- producción
es inhabitual la imagen de otras deidades, asimismo, representaciones artísticas simbólica del Mar Primordial en
gobernantes rea- lizando un relacionadas con la tierra fueron enormes mascarones el que flota el mundo– se
autosacrificio de sangrado. En donadora de vida y alimen- to, de dioses los que cubrían los sitúan los espectadores y los
muchos sentidos, el arte maya como Itzamnaaj (cielo), basamentos de los edificios soportes legitimado-
es un Ch’aak (llu- centrales de las ciudades, po- res, estelas y altares; los
templos –las
co a poco serán las estelas o el
comple-
Como corresponde a una jo estela-altar los que adquieran Montañas Sagradas– son
sociedad agrícola, el Dios del una ma- yor importancia en la
transmisión de in- formación
ocupados por los factores de
los rituales, aquellos que son
Maíz, está presente en de cósmica a histórico/cós- capaces de controlar el

murales, cerámicas y talla en mica, pasando

mascarones un
a ser los
elemento
presente y predecir el futuro.
La variedad ecológica del área maya y
piedra decorativo más, junto a cres-
arte esencialmente arte es usado para existen en la realidad, una deidad que suele via) y K’inich Ajaw (sol). En opinión de numerosos especialistas, la
antropocéntrico y realista, ya representar un mun- siendo por ello muy aparecer como ce- mayoría de estas deidades forma parte del mito ma- ya de creación del
que una buena parte de lo re- do sobrenatural difíciles de interpretar. mundo, el gran tema subyacente en el arte maya.
presentado existió realmente. poblado de dioses, en- Entre los dio- ses más Todo esto lleva a reflexionar acerca de la doble función que este arte,
En otros momentos y tidades, sustancias y representados inevita- blemente elitista, cumple: por un lado, ensalzar y legitimar la
contextos, este elementos que no destacaría K’awiil,
 PIRÁMIDES Y REYES
LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA
figura del Rey, si- tuándole en la parte terías, frisos, dinteles, su conformación territorial de Yucatán (Chenes, Río Bec
más elevada de la sociedad maya; por etcétera. en ciuda- des-estado, hace
otro, usar las imáge- que no estemos ante
Diversos estilos arquitectónicos elementos espacialmente
No pueden aislarse en ningún homogéneos en lo que se
caso las re- presentaciones refiere a estilos en arqui-
citadas –humanas o divi- nas– tectura monumental y en otros
del que será un soporte soportes para la ideología
funda- mental: la arquitectura (piedra tallada, cerámi- ca). Al
monumental. La solución a la contrario, a pesar de que el Representación de Venus en un mascarón pétreo del gran centro ceremonial de la ciudad maya
necesidad de los gober- sus- trato iconográfico y de Copán (Honduras), Período Clásico, siglo VIII d.C.
nantes de muchos rasgos es- tructurales
transmitir/compartir/imponer su son los mismos, es fácil iden-
realidad sociopolítica y tificar estilos regionales
cosmogónica, pasa por un diferenciados en la península
acrecentamiento del con-

170 171
y Puuc), Petén, cuencas de los expresión artística más inscripciones jeroglíficas que
ríos Usu- macinta o Motagua, habitual, mezcla de imagen y incluyen fe- chas, descripciones
Altiplano o zona Su- reste, que escritura, se realizó por me- dio de la escena presen- te y/o
muestran en ello una dinámi- de jambas, dinteles, paneles y información sobre los
ca variedad de respuestas tronos, espléndidamente ancestros que legitiman su
culturales. tallados (Piedras Ne- gras, poder.
Sobre esta cambiante Yaxchilán, el propio Dado que tienen, asimismo,
arquitectura se situó una Palenque), mientras que una rela- ción directa con las
abundante escultura, variada ciudades emblemáticas pe- ro, fórmulas de asenta- miento y
y, en numerosos casos, hasta cierto punto, distantes organización territorial, las es-
majestuosa. Ésta fue realizada (Copán, Naranjo, Dos Pilas) telas poseen sus propias
tanto en estuco: desde los compartieron un ras- go diferencias re- gionales en
grandes mascarones artístico y publicitario tan aspectos internos y externos.
preclásicos (El Mi- rador, excepcional como las Petén presenta los desarrollos
Nakbé, Cerros, Komchén) a las escalinatas jeroglíficas. más nu- merosos (Tikal,
ex- cepcionales fachadas Naranjo) y al tiempo más
modeladas de lu- gares Imágenes del poder real convencionales; guardan unas
clásicos (Palenque, Toniná, Ek’ Pero, sin duda, el instrumento formas bá- sicas similares –
Ba- lam), que en ciertas propa- gandístico por aunque con distintos ta-
ciudades llegan a ser esculturas excelencia son las estelas maños–, pero poseen una
virtualmente exentas (Can- –en numerosas ocasiones variedad es- tilística interna
cuén, Pueblito, Machaquilá), acompañadas de altares, que hace bastante reco- Incensario cerámico zoomorfo, procedente del
Valle de Sula (Honduras), 700-900 d.C.,
como en mosaicos de piedra asimismo, tallados–, un rasgo nocibles sus procedencias. En
Tegucigalpa, Galería Nacional de Arte.
tallada, por medio de los cuales surgido en Mesoamérica que el extre- mo sureste del área
se cuajaron literalmente fren- tiene sus an- tecedentes en el maya será donde se alcancen
tes de edificios completos a área olmeca, y que al- canza los mayores niveles de
base de la in- finita repetición entre los mayas su expresión maestría y originalidad, bien
de mascarones zoo- morfos más compleja y refinada, tanto por su tamaño (Qui- riguá),
(Kabah), o de una mayor diver- a nivel artísti- co como bien por aunar en un solo
sidad iconográfica que mezcla ideológico. El elemento princi- ele- mento la noción de estela
mascaro- nes, motivos pal será la imagen del y la técnica na- turalista que
geométricos, columnillas... k’uhul ajaw re- vestido de proporciona la escultura en
(Labná, Uxmal). múltiples elementos distinti- bulto redondo (Copán).
En torno al río Usumacinta la vos de su rango, a la que suelen No podía faltar en esta
forma de añadirse cultura un as-

Relieve en estuco del rostro del Rey Pakal de

Palenque, Período Clásico tardío, Palenque
(Chiapas, México), Museo del Sitio, izquierda.

Disco pétreo para señalización en el juego de

la pelota, procedente de la ciudad de Copán Jarro cerámico negro, con representación
(Honduras), 650-850 d.C., Copán, Museo antropomorfa, procedente de Las Sepulturas, Cabeza humana con tocado zoomorfo, esculpida en piedra volcánica, 695-738 d.C., del Centro
Arqueológico, abajo. 600-900 d.C., Copán, Museo Arqueológico. Ceremonial de Copán (Honduras). Actualmente en el Museo Arqueológico de Copán.

pecto del arte tan universal como la pin- Como tiplicidad

tur no de objetos
podía
una mínima de tamaño
ser de
de otra menor,
mejoforma, usados por
de una las élites
para
capacida tanto en su
aconte-
d cimientos
vida dia- ria
Bonampak).
artística como en
tan eventos
refinada extraordinar
como la ios. El
maya se surtido de
plasmó, materiales
asimism en los que
o, en fueron
una mul- fabricados
expresa, por una parte, y m es cierto p d
la ex- celente adecuación a que un e e
u
técnica de los arte- sanos c importante d ,
s
locales y mesoamericanos o i porcentaje e
a los di- versos medios ó del ajuar r t
ambientes, que se ve de d n artístico – n u
manera patente en e todo aquél a r
el intercambio de bienes d fabricado l q
e
de lujo con otras zonas, y e en ) u
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por otra, la importancia t materiales e
que tuvo la posesión o s perecederos o s
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S
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e
a b
f i
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que se realizaron objetos de que se alcanzó un refinado de una depurada tecnología,
estatus y grado de ex- alcanzada
adorno personal que aparecen presión artística. desde tiempos tempranos, se
de forma recurrente en Pero es la manipulación de la llega a una variedad de formas
contextos rituales y fune- arcilla, ese elemento tan y decoraciones en la que cabe
rarios (vasijas, collares, maleable a nivel físico y cul- expresar todos los mundos rea-
orejeras, pecto- rales). Otros tural, y su resultante, la les e irreales, terrenos y
objetos, asimismo, recu- cerámica –espe- cialmente en acuáticos, hu- manos y divinos
rrentes en los mismos forma de vasijas y figurillas–, que los mayas crearon a lo
contextos elitis- tas son los donde se plasmó el mayor grado largo de cientos de años de
realizados en concha –pre- de com- plejidad artística y desarrollo.
ferentemente marinas– y conceptual. Partiendo
hueso, en los Repertorio múltiple
Y si bien en el Preclásico
Urna funeraria prima la mo- nocromía y en el
polícroma, con Clásico Temprano la in- cisión y
decoración zoomorfa
y antropomorfa,
una policromía no figurativa,
Período Clásico en el Clásico Tardío vasos
maya, Guatemala, cilíndricos y pla- tos con
Museo Popol Vuh. soportes muestran una diversi-
dad de temas que incluyen
numerosas escenas palaciegas,
bailes de hombres y dioses,
procesiones, juego de pelota
y otros contenidos complejos
de difícil interpretación por
hundir sus raíces en la
mitología maya. Su disfrute
estuvo res- tringido a la élite,
que las utilizó durante su vida y
después fueron depositadas en
las tumbas para servirles en
el más allá. A través del
estudio de los cientos de
ejemplares hallados, tanto en
contexto arqueológico como
procedentes de co- lecciones
públicas y privadas, se han re-
conocido diversas escuelas de
manufac- tura que se ajustan a
las realidades so- ciopolíticas
existentes.
Las figurillas cerámicas,
presentes en el ajuar cultural
maya durante el Preclási- co y
a partir del Clásico Tardío,
destacan, asimismo, por
constituir un amplio ca- tálogo
tanto de las actividades diarias
co- mo de la sociedad humana
y divina que controlaba el
mundo de los mayas.
Por último, cabe preguntarse
en qué medida la gran masa
campesina maya participó de
un lenguaje tan sofisticado, ya
que difícilmente
comprendieron las claves de
los diversos elementos artísti-
cos, que a la larga no son sino
el reflejo o la plasmación de
u on fabricados duran- te siglos
n c para perpetuar el orden social
a o establecido.
s El arte maya, como todos, no
f m está he- cho sólo para
o o entenderlo sino también para
r s sentirlo y que sirva de correa
m , de transmisión ideológica
a entre los dife- rentes
y estamentos sociales. Si el
d campe- sino maya entendió y
e q asumió por me- dio de las
u diversas expresiones artísticas
v e cuál era su lugar en el mundo,
e cabe pen- sar que,
r f independientemente de que
u sea importante el que su
e e estética fascine a los hombres
l r y mujeres de hoy, fue, sin
duda, un buen arte. ■

174
 LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

BAJO EL El llamado Caracol de

Chichén Itzá (Yucatán,
México), Período
Posclásico. Este edificio,
destinado a observatorio
astronómico, es uno de

SIGNO DE
los escasos ejemplos
de construcción circular
en la arquitectura maya.

LOS ASTROS
Una escritura jeroglífica, un eficaz sistema aritmético
y calendarios muy
precisos dan la medida del nivel cultural y científico de
los antiguos mayas. Al analizar las funciones de estos
logros, Alfonso Lacadena destaca el
valor de sus múltiples registros para el estudio de
aquella civilización

os antiguos mayas del si- glo XVII, cuando a palabras, y fonogramas, signos que se corresponden con fonemas de la len- gua. En el caso maya, los fonogramas son de tipo silábico,
utilizaron uno de los las tropas españolas representando una vo-
sistemas de escritura del general Ursúa

L
más precisos de conquistaron Tayasal, ALFONSO LACADENA GARCÍA-GALLO es profesor de Historia de América, UCM.
Mesoamérica. Aun- que la ca- pital del último
ellos mismos no fueron reino maya indepen-
los diente, el reino itzá, en
inventores de la escritura – el corazón de las selvas
hecho que de- be atribuirse a del Petén, en
los olmecas, que les pre- Guatemala.
cedieron en el tiempo– los La escritura maya es
mayas lo per- feccionaron y una escritura lo- go-
adaptaron a las necesida- des fonética o jeroglífica,
fonológicas de su lengua. como las escri- turas
Desde su adopción en algún egipcia, sumeria,
momento de la se- gunda acadia, luvita, Li- neal
mitad del primer milenio antes B y china. Su
de Cristo, los mayas utilizaron repertorio de signos
la escritura de forma incluye logogramas o
ininterrumpida hasta finales signos que equiva- len
 LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA
c ex- traordinaria variabilidad:
u así, por ejem- plo, la palabra
r ajaw “rey, señor” podía es-
s cribirse con un logograma
o (AJAW), con un logograma con
s complementos foné- ticos (a-
AJAW, AJAW-wa, a-AJAW-wa) o
d con signos fonéticos
o únicamente (a-ja-wa). En
t todos estos casos, la lectura
a resultan- te es ajaw “rey,
señor”.
a
Sistema aritmético posicional
Junto con la escritura, los
l
mayas adop- taron de sus
a
predecesores mesoameri-
canos un sistema aritmético y
Un personaje pinta una máscara, mientras un ser fantástico e
escribe sobre un códice, detalle de un vaso maya del calendári- co sumamente
s
Clásico tardío, Guatemala. preciso. El sistema arit- mético
c
era posicional (en el que el
cal o una consonante más una vocal. r
valor de los números depende
Co- mo otras escrituras logo-fonéticas, i
de su posición dentro de la
los ma- yas usaron la complementación t
cifra numérica expresada) y
fonéti- ca (añadir uno a más signos u
vigesimal, con múltiplos de
fonéticos a un logograma para indicar r
veinte mar- cando las diferentes
los fonemas por los que comienza o a
posiciones (nuestro sistema
termina) y el pro- cedimiento rebus aritmético, también posicional,
(utilizar un logograma no por su m
es decimal). La utilización de
significado, sino por su valor de a
un sistema aritmético
lectura). La utilización de estos re- y
posicional es muy eficaz a la
a
hora de expresar y realizar
operaciones con cifras altas.
d
Clave dentro de este sis- tema
e
posicional fue la noción y uso
del cero (mih, literalmente
u
“nada”), cuya in- vención se
n
produjo de forma indepen-
a
diente en Mesoamérica.
Aunque el sistema aritmético no con-

176 177
 BAJO EL SIGNO DE LOS ASTROS
LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

taba con un sistema mayas, en los dinteles,

fraccionario me- columnas y capi-
diante el que representar teles de sus palacios y templos,
valores inferio- res a la unidad, en los pa- neles empotrados en
los mayas idearon diver- sos los muros de los sa- lones del
procedimientos para tenerlos trono o en los murales pintados
en cuenta. Uno de los recursos que ornamentan sus paredes.
empleados fue la corrección
mediante la alternancia de Historia, religión, astronomía
números enteros. Así, por Estos textos se refieren a la
ejemplo, pa- ra operar con historia di- nástica de los reyes
meses lunares, cuya dura- ción mayas que goberna- ban el
se estima en 29,5 días, los centenar de reinos en que se
mayas al- ternaron meses di- vidía políticamente el área.
lunares de 29 y 30 días, Los textos je- roglíficos nos
neutralizando de este modo la hablan de su nacimiento, su
acumula- ción mensual del genealogía, su acceso al trono
Escriba con tintero de caracol cortado y
desajuste de 0,5 días. En el y cele- bración de aniversarios,
plumilla en sus manos, cerámica del Clásico
caso de fracciones en ciclos tardío, procedente de Nakbé, Guatemala. su muerte y en- tierro, las
mayo- res, los mayas diseñaron guerras que mantuvieron con
tablas de co- rrección, en las los reinos vecinos y los
cuales el desajuste ob- enemigos captu- rados en ellas
servado se neutralizaba –su nombre y calidad–, los
proyectando ha- cia el futuro edificios y templos que
múltiplos del ciclo hasta que su comisionaron du- rante su
resultado fuera expresable en reinado y los rituales que pun-
núme- ros enteros. tualmente cumplieron.
La religión es otro de los
El calendario de la Cuenta Larga temas que se encuentran en
La pirámide del Mago, en Uxmal (Yucatán, México), única por su base elíptica, fue construida en cinco fases, la más antigua, en el siglo VI d.C.
Los mayas utilizaron diversos los textos jeroglíficos,
calenda- rios. En su base se principalmente en los tres
encuentran dos ciclos, uno de códices con- servados, los de
260 días (considerado ritual, Dresde, Madrid y París, aunque
ba- se para la adivinación) y también ocasionalmente en
otro de 365 días (dividido en otros soportes. Relatos
18 meses de veinte días, más míticos de la Creación,
cinco días situados al final, de almanaques adivinatorios que
fun- ción ritual). Su indicaban el carácter benigno
combinación proporcio- naba o maligno de los días o cuándo
otro ciclo mayor de realizar o evitar de- terminadas
aproximada- mente 52 años. actividades, textos detallan- do
Otros ciclos utilizados usaban cómo ordenar el ritual con
secuencias recurrentes de precisas
tre-
ce períodos de veinte años, la relaciones de ingredientes, tos astronómicos y conjurarlos les de las lenguas chontal, do Clásico han avanzado lo
llamada instrumen- median- ch’orti’, yuca- suficiente, la
Rueda de Katunes. Pero de tos y ofrendas, o profecías te la realización de rituales teco, tzeltal y una lengua aún expresión literaria ha podido
entre todos los sistemas asociadas a los diversos apropiados. Lamentablemente, indetermi- nada del grupo ser descu- bierta. Aliteración,
calendáricos usados por los períodos de tiempo (días, apenas se conocen los quicheano) en el Período anáfora, enálage, po- liptoton,
mayas, destaca sin duda por meses, años, katunes o registros económicos, que sin Clásico. De estas lenguas, la homeoptoton, hipérbole, me-
su utilidad y precisión la períodos de 20 años) son duda existieron para forma an- cestral del ch’orti’ táfora, metonimia, optación,
llamada Cuenta Larga, que muestra de la riqueza de es- administrar los complejos moderno –idioma aún hablado difrasismo, hipérbaton o
insertaba los calendarios de 260 te género. Estados mayas, regular la por cincuenta mil personas en paralelismo son algunos de los
y 365 días en un sistema lineal La astronomía fue interés producción y el el recursos literarios
que contaba constante de identificados. Con
los días transcurridos
un punto
desde era un sis- tema
absoluto de datación,
los mayas. Su curiosidad por los astros
les llevó a medir el ciclo orbital de Venus con una precisión
El conocimiento de
de partida –una Era–, situado que permi- tía situar notable en 584 días, y posiblemente el de Marte con 720 los ciclos
en un tiempo mítico, el 13 de
agosto del año
inequívocamente en el Un escriba, escultura en piedra volcánica
hallada en Las Sepulturas, 700-800 d.C.,
días. El conocimiento de los ciclos orbitales solar y lunar
llevó a los mayas a diseñar
orbitales
tiempo
3114 a.C. Esta Cuenta Larga
Copán (Honduras), Museo Arqueológico.
solar y lunar llevó
 BAJO EL SIGNO DE LOS ASTROS
LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA
a los mayas a la predicción sus veinte siglos de
duración y su ex-
expresividad, la li- teratura maya jeroglífica destaca
ya como una de las tradiciones literarias más no-
diseñar tablas para de eclipses traordinaria riqueza y tables de la Humanidad. ■
un día concreto. gos que se producen en las complejas tablas para la tributo y controlar a la oriente de Guatemala– fungió P A RA SABER MÁ S
Con estas herramientas –una excavaciones arqueológicas en predicción de eclipses. Pero población me- como len-
COE, M. D., El desciframiento de los glifos
escritura y un sistema curso. Por el número de textos los mayas no hicieron as- diante censos. Estos contenidos gua escrita de prestigio, mayas, México, Fondo de Cultura
aritmético y calendárico su- conservados, el Período tronomía en un sentido econó- micos se registraron sin empleándose en todo el área Económica, 1995.
mamente precisos–, los mayas Clásico maya (ss. II-X d.C.) científico occi- dental de la duda en códices de papel de maya, traspasando las fron- FREIDEL, D.; SCHELE, L., y PARKER, J., El cosmos
maya: tres mil años por la senda de los
pudieron registrar la historia, la suele considerarse el de mayor palabra, sino astrología. Co- corteza, de difícil conserva- teras políticas y lingüísticas. chamanes, México, Fondo de Cultura Económica,
economía, el ritual y la esplendor de la escritura jero- mo otros seres y fuerzas, los ción en el agresivo medio Esta lengua de prestigio jugó 1999.
astronomía de una manera glífica maya. astros de- sempeñaban un húmedo tro- pical. No obstante, en el Período Clásico maya el GRUBE, N., Los mayas: una civilización milenaria,
Colonia, Könemann, 2001.
eficaz. El desciframiento de la papel importante en el cosmos se conservan algunas mismo papel de lengua franca HAMMOND, N., La antigua civilización maya,
Los mayas escribieron sobre escritura maya en las últimas y en la vida de los seres huma- referencias epigráficas de comunicación que el acadio Barcelona, Itsmo, 1987.
todo tipo de soportes y décadas ha permitido ac- nos. Así, Venus, por ejemplo, excepcionales a la entrega en el Próxi- mo Oriente Antiguo MARTIN, S., Y GRUBE, N., Crónica de los reyes y
reinas mayas: la primera historia de las dinastías
materiales. Esculpieron y ceder a un volumen de se relacio- naba con la como tributo de ciertas cantida- o el latín en la Eu- ropa mayas, Barcelona, Crítica, 2002.
grabaron textos jeroglíficos información cua- lificada de fertilidad y la producción des de pieles de jaguar, Medieval y Moderna.
en piedra, concha, jade y valor excepcional. Entre los te- agrícola, al tiempo que manojos de plu- mas de El cada vez más profundo civilización maya, México, Fondo de Cultura
Económica, 1998.
hueso, los modelaron en mas que se encuentran mostraba su fa- ceta más quetzal, cargas de mantas y conoci- miento de la gramática
estuco, los pintaron sobre tratados en los textos terrible como estrella de la ma- gra- nos de cacao, que de las lenguas es- critas ha
cerámica, mu- rales, códices jeroglíficos mayas destaca el ñana, cuando surgía como un funcionaban como ver- dadera llevado en los últimos años al
de papel de corteza y tex- tiles. de contenido histórico político, guerrero destructor moneda. descubrimiento de la literatura
Unos quince mil textos el cual fue esculpido en las produciendo consecuencias Hoy se sabe que al menos maya je- roglífica. Una vez que
conservados dan cuenta de esta estelas y altares que ador- nan nefastas. El interés de los cinco len- guas de la familia los estudios filo- lógicos de las
producción, cifra que aumenta las plazas centrales de las mayas se cen- traba en conocer maya se registraron en la lenguas mayas del Perío-
constantemente con los hallaz- ciudades y predecir estos even- escritura jeroglífica (formas
ancestra-

178 179
 CINE
LOS MAYAS. REALIDAD Y ENIGMA

APOCALYPTO
Inspirada en los enigmas sobre el colapso de los
antiguos mayas, la
película de Mel Gibson, al tiempo que ayuda a difundir
el conocimiento de aquella civilización, también
aporta, según advierte Andrés Ciudad,
notables tergiversaciones, anacronismos y
confusiones históricas

l estreno de supervivencia incierta, mien-

Apo- calypto,
película diri-

E
gida por el
australiano Mel
Gibson, abre
unas
expectativas que
superan aqué- llas
Los prisioneros, preparados para el sacrificio, son conducidos al templo ceremonial, donde se les arrancará el corazón y serán decapitados. estrictamente
vinculadas al
entretenimiento, para
incluir la difusión de
conocimientos acer- ca
de una sofisticada
civiliza- ción: la de los
mayas.
La película presenta
una pe- queña aldea
de cazadores en la
profundidad de las
Zarpa de Jaguar, el protagonista
selvas tropicales
de Apocalypto, junto a otro de
mayas, cuya placen- los miembros de su aldea de
tera y armónica vida cazadores en la selva tropical
se ve in- terrumpida maya.
de manera violen- ta
por un grupo armado.
Los intrusos sorprenden
a sus ocu- pantes,
matan a buena parte
de ellos –entre otros, al
jefe de la aldea– y
capturan a los va-
rones adultos. Sólo
dejan con vida a unos
cuantos niños de
terior corte de su cabeza, que son lanzados rodando por las escalinatas del tem- plo. Ocurre ci- clo de sacrificios. decide su muerte en un palenque a las afue- larga y trepidan-
entonces un hecho natural fortuito –un eclipse de sol–, que es ad- mirado y temido por el Consultado el Rey ras de la ciudad: algunos de ellos son
conjunto de la comunidad urbana y que los encarga- dos del ritual sacrificatorio interpretan sobre la suerte del ajusticiados, pero Zarpa de Jaguar, el héroe
como una señal de que los dioses estiman positivamente sus ofrendas y dan por concluido ese resto de los cautivos, de Apocalypto, logra huir y se inicia una
tras se refugian en una cueva la tores, que llevan una actividad te fuga y persecución que
mujer em- barazada de Zarpa febril de le- vantamiento de concluirá con la llegada del
de Jaguar (Jaguar Paw), el edificios públicos. Una vez en el héroe y sólo dos de sus per-
que habrá de ser el centro urbano, los cautivos seguidores a una costa en la
protagonis- ta de la película, y consta- tan esa decadencia en que coinci- den con la llegada
un hijo de corta edad. Sigue a la abigarrada e in- dividualista de tres carabelas espa- ñolas.
este acontecimiento un largo vida de la ciudad y son con- Ante la posibilidad de
y penoso traslado de los ducidos –tras un intento de entregarse a éstos e iniciar un
cautivos, quienes a la llegada a venta de al- gunos de ellos– a la nuevo proyecto cultu- ral
su destino, una ciudad ma- ya, zona ceremonial, don- de los mediante su aculturación,
observan con asombro y pavor dirigentes se afanan en una decide vol- ver sobre sus pasos
la vi- da urbana. Es una ciudad prác- tica continua de sacrificios y, en compañía de sus ya dos
en decadencia, rodeada por humanos, con los que intentan hijos, adentrarse en la selva de
campos mal labrados y ex- enderezar la terca reali- dad la que procedía y,
haustos que ocupan decadente en la que se ven supuestamente, mantener su
Los desesperados habitantes de la decadente ciudad maya imploran a gritos el favor de sus dioses, mientras se sacrifica a los prisioneros. ciudadanos deses- perados por sumidos. Ya en lo alto del milenario sistema de vida.
el hambre y el sistema de vi- templo, donde se re a - lizan los Este breve comentario a la
da; a ellos suceden legiones de sacrificios observados por la fa- película Apo- calypto no se
construc- milia real y por personajes de su hace como espectador, si- no
Corte, los cautivos comienzan a como científico dedicado a la
ANDRÉS CIUDAD RUIZ es catedrático de ser sacrificados me- diante la recons- trucción del pasado
Historia de América, UCM. extracción de su corazón y el maya.
pos- Como tal, he de concluir que
ninguno

180 181
de los escenarios básicos que entre
se intentan
–los mayas rurales como idílicos
cazado- res versus los
decadentes mayas de las
ciudades sólo saciados por el
sacrificio de sus congéneres de
la selva– son correc- tos.
Tampoco lo son el acercamiento
his- tórico del “colapso” de la
civilización clá- sica al contacto
con los españoles, y otros
aspectos menores, como el
arte arqui- tectónico o el
origen de los nativos em-
pleados en la película.
Aunque el uso del yucateco
como me- dio de expresión, la
ornamentación de los
personajes, su atavío y
armamento están bien
conseguidos y pueden proyectar Al frente de la cuerda de presos, el jefe de los capturadores dirige el cruce de un río durante el penoso traslado de los aldeanos a la ciudad.
una reconstrucción acertada de
los mayas del pasado, la visión Por otra parte, la mezcla del colapso de la civilización clásica con la llegada de los galeones españoles y los efectos
que se propone sobre es- ta poste- riores de la conquista, crea una situación de seria confusión histórica. Si se utiliza para poner en relación dos
civilización es confusa y “colapsos” cul- turales, la solución es desastrosa: el cam- bio de estructuras que se produce no es equiparable, tampoco
decadente. las causas que lo originan ni los efectos que tienen.
El héroe cazador de Apocalypto esca- pa de los españoles y la cristiandad pa- ra iniciar un nuevo diseño cultural,
Errores, confusiones y mitos le- jos de la decadente vida de la ciudad ma- ya…, pero la realidad es que al hombre americano le ha costado milenios
Para millones de personas, éste con-
será el pri- mer acercamiento a
la civilización maya, y estas
personas no sabrán que fue
una de las pocas culturas que
logró organizarse en ciudades
en un medio ambiente de
bosque tropical húmedo, y que
para ello necesitó de muy
complejos conocimien- tos,
recetas e instituciones
culturales.
No hubo aldeas de cazadores
mayas tal como se dice en
Apocalypto; éstos fue- ron un
pueblo agrícola con un
sofistica- do orden sociopolítico,
económico y re- ligioso, que
organizó el campo y la ciu-
dad. Aldeas, pueblos y ciudades
estuvie- ron plenamente
integrados en un pai- saje bien
estructurado; sus moradores
se conocieron bien y
compartieron un am- plio
recetario de aspectos
culturales.
El desigual acceso a la riqueza
y el con-
trol de recursos y territorios
produjo fre- cuentes
enfrentamientos armados
n é stá plagada de visiones cuasi
e m inhumanas, cercanas al
c
i comportamiento animal, de los
i
d c nativos no- occidentales…, y
o a estas reconstrucciones han
modelado –desafortunadamente
a e más que la ciencia– la
j s mentalidad colectiva acerca de
e
esas poblaciones.
n
o i Los mayas se suman ahora –
m ya lo ha- bían hecho con poco
a p éxito en otras oca- siones– a
o este tipo de reconstrucciones.
e r Sin duda, Apocalypto
l
l t excitará el interés por las
a a selvas mayas y la vida en sus
. n an- tiguas ciudades, pero
t inevitablemente los
L e espectadores obtendrán una
a , visión con- fusa de los sistemas
o de vida, de las es- tructuras
p p mentales y comportamientos de
c e sus protagonistas.
i - No se trata de contrastar un
ó trabajo aca- démico con una
n
r ficción, con un diverti- mento
d o sin más –y no se pretende aquí
e juz- gar la calidad
l cinematográfica de la obra–; se
c a trata de llamar la atención
a acerca de la sensibilidad sobre
d
a h la visión del otro a la que nos
i obliga el mundo moderno, en
d s que la globalización ha
i t exacerbado sin límites el
- o contacto cultural, y con él las
r r actitudes xenófobas de la
e i diferencia. Se trata, en de-
c a finitiva, y al margen de la ficción
t que uno quiera recrear –y
o d reconociendo que la Aca- demia
r e científica ha participado en
algunos momentos de los
e H presupuestos que aquí se
n o critican–, de que se superen
l las viejas polémicas que han
e l provocado los contac- tos de
s y hombres y culturas distintas a lo
t w lar-
a o go de la historia. ■
o
p d Para conocer la opinión de la comunidad cien-
o tífica acerca de este trabajo, se puede consultar:
www.rctimes.com/apps/pbcs.dll/article?AID=/
l e 20061210/ENTERTAINMENT04/612100391/

Parece del todo inexacto 1005MTCN0303

w.washingtonpost.co
presentar al cazador como el m/wp- dyn/content/article/
“buen s a lvaje” y al habitante 2006/12/08/AR2006120801815.html

de las ciudades como violento FICHA T ÉCNICA

diversas entidades políticas. La captura de pueblos y el sacrificio humano, tal co- mo se ofrece en Apocalypto, no fueron anecdóticos, pero parece del todo
ine- xacto presentar al cazador formar estructuras que le
como “buen salvaje” y al permitan vi- APOCALYPTO (2006)
vir en ciudades, y éstas fueron Producción: EE UU
habitante de las ciudades co- Dirección: Mel Gibson
mo un individuo violento, conside- radas como el orden Guión: Mel Gibson y Farhad Safinia
sediento de sangre. Es perfecto de la crea- ción Producción: Mel Gibson y Bruce Davey
humana. Música: James Horner
ingenuo, y quizá tendencioso, Fotografía: Dean Semler
utilizar la propaganda colonial, Los mitos del buen salvaje y Montaje: John Wright
españo- la y extranjera, de indios Vestuario: Mayes C. Rubeo

respecto de ciertos as- pectos degenerados y violentos son Intérpretes: Rudy Youngblood (Jaguar Paw), Dalia
Hernández (Seven), Jonathan Brewer (Blunted), Raoul
de la sociedad indígena, y tan antiguos como los primeros
Trujillo (Zero Wolf), Gerardo Taracena (Middle Eye),
obviar cerca de cinco siglos de contactos con el mun- do Rodolfo Palacios (Snake Ink), Fernando Hernández
investigación. occidental, y está presente en Pérez (sacerdote), María Isidra Hoil (oráculo).
las con- cepciones del “otro” a
lo largo de la his- toria humana.
También lo está en la larga
aventura intelectual del
conocimiento so- cial del
hombre, y el cine no ha perma-

182
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