Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
RAfAI:L MONEO
"ON TYPOLOGYl'
1
1
1
Se publica aquí en español el artículo de Ra fa el
Mu iwo s obN.t la noción de tipo que habia apareeido en
1978 en la re vista "Oppositions " . En él se entiende
ul tipo oomo aque llo que constituye la verdadera na-
t u.r-aleza de la obra de arquitectura y se traza su
l historia desde su primero formulación por Quatrem~re
a jinaks del siglo dieciocho hasta su actual situa-
c·i ón en e l panoi>ama arquitectónico que se desarrolla
a partir de los años sesenta.
Tras observar cómo tanto 'la f ormulaci ón del tipo
a pa.l"tir de Quatrem~re como s u reutilización en las
últi/11QE t endencias constituye e n r ealidad el sintoma
de su desapariaión por un lado y de la i mposibilidad
Je su r>ecuperación en los términos t radicionales por
otro y, trus consta·:cz:- el paso desde su c:ondición de
estructura formal un~ taria de la obra a la de una se
ri~ J.¿ fllQgme ntos cor. los que recompone r una imagen-
para 'la misma, este recorrido lleva a Rafael Moneo a
añoror la wtidad que el tipo con feria a la arqui tec-
turu antigua y que hoy supone lamentable y quizá de-
finitivamente perdida 1 a confi ar, sin embargo, en -
que sea aún el tipo e ~ que haga salir a la obra de -
arquitectura del aislamiento a que la somet er~a su -
consideración como :1nica e irrepetible .
11 - NOU-1999 12 : 26 E . T . S. A . -D 1RECC ION 9 15442481 PA:J. 02
9 1 544 z~a 1
189
l JS .. ..p;µ.;,4f <liC f4
1
t. 1.~. H .-U l ~~CC I ON 915442481 PAG .03
915442481 .
h.·:.'.· ·:. :190 . . ·,
,;i ·: •
,....
•,. ..,_·.
.. {;:~ ; f . ..
permiten su Nproducción. De~ · :tale$ drmíno$ pu.e..: ; .
de ~ecirse que la esencia delq ?'}rjetc·:· arqui tect6nico ·
se encuen'tra en su repetibil~~~~- '.i.
.. ·.:.:~· . ~ ...
El hecho de ·n·out>r-ar, de d~'):ih naiilbre a la obra :
de arquitec~ux-a, fuerza, por t~:· 'fuis11'18 na-t uraleza - ·
dél lenguaje, a la ~ fica~ ... .La ~dentifica~ión ·
~e un elemento ·ce &rq\U firc't 'tal ,~mo la "coluro !·
na", o de un edificio, 'tal e - u;:'r ibunal", i!R:- on
plica una categ<>x-1a e ·n tera de::Ob~etos similares, -
de objetos con -característic.\á ..':C6mun~s. Es'to signi :. ·
fica que el lenguaje también :~cónocc(, implíciia=- ·
mente, el concep~ d.e tipo. \): . ·. ·
. . ·~:: ::.~·. ' .~
Entonces ¿q~ . es · ~d tipo?.: ~f~i vei pueda ser .:d!_
finido como ·aqud concepto qu~ -'.descr-ll>e un grupo --:
de objetos caracteriiaoos por. ~ener ia misma es- ;
~Ñctura .formal.. No se trata;·;; ués, ni de un dia--
grama espacial, ni del términ();\iiédio \~ie una serie ~
El concepto de tipo se basa f~aámerrt~nte en la ¡
:·.
posibilidad de agrupar los ob:je~ds sii:-viéndose de 1 .
'i!quellas similitudes· estructura).•s q~ les son in~ ~ .
herentes. Se podr1a decir, in.~Uso • que el tipo -
penn te pensar ert grupos. PorTé~e"tilpl~~ se puede
pensar en rascacielos en té~·C>s· ·gei:(erales, pero
el hecho de agxoupar nos lleva.l;a';: habl~ de los ras- i.
cacielos o bien como inmensos;·j;iiac.io:S renacentis- ¡
tas deformados. o bien como ~~s g~icas, o bien 1••
:
c:omo pirúides truncadas, etc~¿ .• .:med~a que uno ' va i .
1 .
siendo más preciso se van in~dúciendo otros cri- i
terios de agi-up.a ci6n, se van, }~r'. un:to, descri- -
biendo nuevos tipos. Se acaha~~~~ (il~imo, con el
nombre del rascacielos concrete~: · Por, tanto la
idea de 'tipc qu~ abiertament•~éhauia idea de la
individualidad J:letorna a ella·f~ndo ~n altima ins '
1
tancia se encuentra con ia ob~;con~ta, espec1fI ¡
c:a, única. ·
.
'.: .· · ? :·~· ~ r- .
Sin eobargo ,'"la arqui tec~~:;_~l 11i~dc de lo.s
objetos creados por la arquit~tura- ño 'est& sim--
plemente descrita mediante loc> ~tpos; ~ el concepto
de tipo ateéta a la producci61f'de · 1a árquitectura .;
misma. Si la noción de tipo a~ acepta .se comprend~.
ra por qué y CÓ1nO ·~ar uitec~c:pmie~za por iden- '.
!
tificar su 'trabajo con la pro4u~.16n de un tipo.. -
concreto. Hay ~ues que hacer eons~ar c6mo el arqu.f.
tecto queda pr-endido, en prim@:('tél"lllino, en el ti- ' .
po, al ser el tipo el concfa to:~ de · ~ue ~~dispon..e para i
aprender las cosas, el objeto :ra.t su ti'al:>ajo. Más - 1
'•·
.. .... :·
T • • • · ': ·;
•";.
.'
~:=dl'
llÍllll. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . =~·~;~
:¡~·'1111.iiii...........-...,.¡.------------;T~OITTA
ALlfP~.e0G3--- -
1 91
l
.4gs momentos mas intensos de la historia de la ar
quitectura son aquellos en los que un nuevo tipo s~
ge. Una de las tareas más difíciles con que un arqui
tecto puede encontrarse a lo largo de su carrera
-por tanto una de aquellas que más merece nuestra ad
miración- es la que se le plantea cuando un tipo co~
nocido se abandona y hay que proponer, de manera ine
l. quívoca, uno nuevo . A menudo los acontecimientos ex~
ternos, tales como nuevas técnicas o nuevas exigen--
cias sociales , son los responsables de la puesta en
marcha de los mecanismos que llevan, inevitablemente,
a la creación de un nuevo tipo. Pero, a veces, la in
vención de un nuevo tipo es fruto de una personali-~
dad e xcepcional , capaz de hacer que en el mundo de -
la arquitectura se entienda el significado de su pro
p ia lengua 5 • Cuando un nuevo tipo aparece, c uando el
arquitecto es capaz de descubrir el juego de relacio
nes formales que produce una nueva categoría de edi~
ficios, es cuando su contribución alcanza el nivel -
1111111111 de generalidad y de anonimato que ca~acteriza a la -
nnn arquitectura como disciplina .
·n n n II
. n f5!' lL
_,4 L - Dándose tan estrecha relación entre el tipo y la
arquitectura como disciplina, no hay que sorprender-
se al constatar que la ~rimera formulación coherente
y explícita de la idea de tipo se haya debido al te6
rico francés Qua treme re de Quinc;:y ,, al finalizar el ~
s.;i,.glo XVIII, en un momento , por tanto , en el que la
• arquitectura, en cuanto que tradicional cuerpo de
doctrina, había sido puesta en tela de juicio por
11 - ~
'
,.... '
~ las revoluciones técni cas y sociales que entonces se
1 1 iniciaban 6 •
~
~
-- - Para Quatremere el concepto de tipo en arquitect~
ra ~rmite establecer los lazos con el pasado , me t~
fó ico cqntacto con aquel primer momento en que el
~
hombre se enfrentó, de una vez por todas , al eterno
HL1ill p'F°oblema de la arquitectura , identificándola en una
f 0-rma . En otr~s palabras, el tipo explicaría la ra--
ft U-U:i_
- ---·-
zón de ser oculta de la arquitectura, siempre laten-
te en el curso de la historia, poniendo de manifies-
to s u continuidad , la permanencia de aquel primer mo
mento en cnie la relación entre la forma y la natura~
f i g . 11 l e za de un obj e to se hizo evidente por mediación Jel
Comb i nac ione s de fa chadas. tipO: El tipo estaba, para Quatremere, en estrecha -
J .N. L. Durand , 1809 . . era'Ción con "les besoins et la nature ". "En cé r- it -
-:e l'esprit industrieux qui cherche a innover :!n
t :)Utes choses", escribía Quatreme re, "qui ne pd· 7ere
la forme circ ulaire a la forme polygonale pour la fi
gure hwnaine? qui ne croi t pas que la f orme du post~
rieur de l ' honune doit produire le type du fond du -
sie ge , que l a forme circulaire doit elle meme etre -
l~? seul type raisonnable pour le couvre -chef ? 11 7 •
194
·--
..... "'..:- estos, se acoplarán entre s í con la ayuda de la com-
posición hasta convertirse en edificios concretos . -
Así pues Durand ofrece a los arquitectos una serie -
de porches,-vé"St í bulos, ca j as de escaleras , patios ,
etc . como fragmentos de edifi cios futuros , asociados
a programas bien definidos. Dispuestos y presentados
como un repertorio de model os , constituyen el mate- -
rial de que dispone pre viament e e l arquitecto: son -
ias partes del t odo , las partes del edificio. Al uti
lizarlas el arquitecto construye , con el auxilio de-
la composic ión, la obra de arquitectura, singular y
única, atributos clásicos que Durand no rechaza . Pe-
fig . 15 ro ¿cómo alcanzar la unidad? Durand nos propondrá~
Prototipo para un recinto fe- dos instrumentos para la composi ción que van a es tar,
rial. J . N.L . Durand , 1809. de ahora en adelant e , siempre prese ntes en la cons--
1 trucción de un edificio cualquiera que sea e l progr~
ma: e l primero es la re ticula cont in'±_a y no di feren-
c iada ; el segundo e l uso de los ejes como soport e de
1 l as partes y de los elementos .
-
suponía un cierto respeto para el concepto de tipo,
pero, forzoso es reconocerlo, reducía tal concepto -
al uso a que el edificio se destinaba. Al proceder -
de este modo Durand insistía en la actitud que él ha
1 b!a mantenido veinte años atrás en su "Recueil et Pa
ralléle des Edifices del Tout Genre 119 , donde pala-:-
cios y teatros, plazas y mercados, eran clasificados
según el programa y el uso, categorías estas que pa-
recían interesarle más que sus formas o todas aque--
llas otras cuestiones relacionadas con el est ilo o -
el lenguaje.
l III
'
L
virtud de la industria~ al permitir esta la reprodu~
ción exacta del modelo; el tipo se había convertido
en prototipo.
l"~ -
!I '";",..
~ ......_,
·.. . _,.:
l os que el libro de F.R.S. Yorke, " l•f,:)(J.G:1r. ... ?..;;t;;" ,
puede ser un buen ejemplo 1 2 •
•· - .T.;. • _ _,,
Esta actitud se hizo patente sobre todo en los
trabajos de Alexander Klein. El in terés que Kl ein te
nía en sis t emat i zar todos l os e l ementos de una casa r .•• 7· ·· .
IV
O\,.._~
Tal era la actitud ante el entendimiento de la
~
,\ ciudad de Saverio Huratori quien, en Studi pe r una -
- operante Storia Urbana di Venezia,, examinaba la tex-
tura urbana de la ciudad de Venecia y hacía de la
idea de tipo, en cuanto que estruct\,l¡'a formal, el
- - - -- - - - -·-- _· concepto básico para explicar la continuidad con que
Fi g. 20 la ciudad se había desarrollado en sus distintos ele
Análisis de plantas de edifi- mentos. Para Huratori el tipo, más que un concepto~
c ios. Alexander Klein , 1934. abstracto, era un elemento que le permitía compren--
der el modelo de evolución de la ciudad como oreani~
mo vivo que adquiere su sentido en la historia 1 • Hu
ratori explicará con su ayuda el desarrollo históri~
co de Venecia, haciendo del tipo la e.lave para enten
der la conexión existente entre los elementos indivI
duales y las formas globales de la ciudad. Los tipoi'-
son para él los elementos generadores de la ciudad y
mediante ellos se definir&n las distintas escalas
que en ella se advierten¡ as1 tantp las caLLi,, como
los aampi y las corti de Venecia son considerados co
mo elementos tipo ligados los unos con los otros, -
hasta el extremo de perder su sentido si no se los -
reconoce como tales. Esta actitud, al subrayar la re
!ación entre los elementos y el todo, proponía un m"í
todo de análisis al que cabe calificar de morfol6gi:-
co para el entendimiento de la estructura que fué, -
en lo sucesivo, la base para el desarrollo de numero
sos estudios tipológicos. Entre ellos hay que desta~
car los llevaqos a cabo por Aldo Rossi y su círculo,
a mitad de los anos sesenta, como el intento más com
pleto y sistemático de entender la ciudad en su glo~
balidad, al ~iempo que hay que reconocer cuanto e! -
~cento sobre la morfología -acento que parecía hacer
g»·avitar a la tipología en el terreno exclusivo é·~ l
ar.:ilisis urbano- encontró su complemento en el re.;?e
to e interés que despertó la vieja definición que de
tipo había dado Quatremére, definición ésta que ha - -
bía utilizado Argan como soporte para la discusión -
del cpncepto de tipo que llevó a cabo al redactar l a
voz "tipología" en la Enciclopedia Universal del A!'-
te. 15
1
fig . 29
Proye cto EchLernach.
Leon Krier , 1970 .
L 210
l
L
L Not a s. 12 . F. R. S. York e , ''The Modern House " -
(London , 1934);''The Mcdern flat"(Lon -
l. Véase la man ~ ra en que W. Weisman - don , 1937).
l agrupa los rasca<·· ~ los en su artí c ulo
"A New View of Skyscraper History", 13. Alexander Klein ," Das Einfamili en-
"The Rise of an American Architecture", haus"(Stuttgart , 1934). El renovado -
l Edgar Kaufman, Jr., ed. (New Yor~ , The
Metropolitan Museurn of Art, 1970).
interés, durante estos últimos años,
por l os problemas suscitados por el -
concepto de tipo es, en buena parte,
2 . Un tal modo de entender las cosas -
l s e encuentra en los trabajos de C. NoE_
berg-Schulz,"Intentions in Architectu-
responsable de la atención que mere--
cen los trabajos de Klein. Una clara
muestra de esta atención es el libro
re "(Cambridge, Mass. 1963) y"Existence, de Giorgio Grassi,"La costruzione lo-
l Space , Architecture"(London, 1971). Pa
ra él, por ejemplo, "la centralización
gica dell'architettur~"(Padova, 1967) .
e s el factor común a todas las cúpulas'.' 14. Saverio Muratori,"Studi per una -
operante Storia Urbana de Venezia"(Ro
I_ 3 . No hay diferencias substanciales en ma, 1960). Aunque Muratori había tra:-
tre las cúpulas del Renacimiento y las ba j ado sobre este t ema en los años
de l siglo XIX. Deben ser consideradas cincuenta, sus estudios se publica ron
como pertenecientes a un mismo tipo da algo más tarde, en la revista Palla--
da su similaridad formal. dio en 1959, y corno libro en 1960 (tí
tulo c itado, Instituto Poligrafico -
4. Ver la argumentación de Bruno Zevi dello Stato, Roma, 1960 ). Muratori ha
en "Architettura in Nuce"(Venezia, 1960) cía de un entendimiento tipológi co :-
pág . 169. de la ciudad el fundamento de su pe~
samiento, pero el tono idealista y os
5 . La intervención de Brunelleschi en c uro con que está presentado no permI
Santa Maria del Fiore, Firenze, es un tió el que a su alrededor se cons t i tu
ejemplo e vidente . yese una escuela. Muratori había en-=-
tendido la racionalidad implícita en
6 . Quatrernére de Quincy,"Dictionnaire el con cep to de tipo, pero no llegó a
Historique de l'Architecture"(París, dar una exp licación sistemática de la
18 32 ). Un estudio completo de la misma. A pesar de sus esfuerzos, per-
definición de Quatremére y su relación maneció como una i ntuición nacida de
con el panorama ideológico y social una manera de pensar imprecisa y espi
puede encontrarse en el artículo de An ritualista. El papel de Muratori y -
thony Vidler, Oppositions, 8, spring, una c lara introducción a muchos de es
1977 . tos problemas puede encontrarse en un
artículo de Mas simo Scolari "Un conL-
'l . Ibid. , pág. 630. tributo per la fondazione della s cie~
za urbana", "Controspazio ~· n'2 7-8, 1971 .
8. J .N . L. Durand,''Precis des Lecons
d'Architecture",XII (París, 180 5 ). 15. La ya clásica "cita de Quatremére"
proviene de G.C. Argan, quien int rod~
9 . J .N . L. Durand,"Recueil et Paralléle jo el tema en su artículo sobre "Tip~
des Edifices de Tout Genre, Anciens et logía" en la"Enciclopedia Universale
M odernes~ IX (París, 1801). dell 'Arte"publi cada por el Istituto
pe r la Collaborazione Culturale, Vene
10 . Ver Walter Gropius,"Scope of Total cia. Más tarde e l texto volvió a pu--
Architecture~' (New York, 1955). blicarse en el libro" Progetto e Des-
tino" (Milán, 1965).
11. Bruno Taut, Modern Architecture, -
(London, 19 29).
211