Las mujeres sordas y la violencia de género

Elegí este tema, ya que me pareció interesante para desarrollar, si bien era
consciente de que el poseer una discapacidad podía llegar a atraer mayores
posibilidades de producirse un abuso jamás consideré que este fuera a llegar a
tal punto. Tal vez las personas vivimos demasiado metidos en nuestro mundo
como para darnos cuenta de lo que pasa a nuestro alrededor y las injusticias
que se producen.

Según el texto que analice, actualmente la ley apara a personas con esta
discapacidad, otorgándole los mismos derechos en un plano de igualdad con
las demás personas. Hoy en día se manifiesta demasiada discriminación, y
contra esto es que diversas instituciones luchan, el objetivo es hacer notar a las
personas esta realidad que se vive y así poder partir de allí a conseguir mucho
más.

Se dice que existe un porcentaje mayor por parte de mujeres sordas a sufrir
violencia de género que personas con la capacidad de comunicarse, y esto se
manifiesta no porque estas personas no puedan comunicarse, si no que
nosotros somos los responsables de hacer esta marcada diferencia y no
aprender a entenderlos. Si todas las personas tomaran conciencia de la
importancia que tiene entender a estas personas la discriminación no existiría
porque sería como saber un idioma más y nos comunicaríamos al igual que lo
hacemos con todas las personas.

Si necesitamos justificar por qué las mujeres sordas poseen mayor

probabilidad de sufrir violencia de género destacamos:

 Tienen más dificultades para expresar los malos tratos debido a

problemas de comunicación.
 Tienen mayores dificultades de acceso a la información y servicios,
debido a las barreras de comunicación a las que se enfrentan.
 Tienen la autoestima más baja y cierto menosprecio de la propia imagen
como mujer, producto de la discriminación en la que viven las mujeres
sordas.
 Mayor dependencia de la asistencia de otras personas, cuando es
imprescindible la comunicación con personas oyentes.
 Miedo a la hora de denunciar. Por qué no son capaces de denunciar.
 Aislamiento y falta de apoyo.
 Menor credibilidad que habitualmente se le otorga a una mujer sorda
que “tiene” problemas de comunicación.
 Mayor Vulnerabilidad en situaciones de malos tratos.
 Bajo nivel educativo y escasa capacidad de lecto-escritura comprensiva,
por ello los textos escritos tampoco garantizan su acceso a la
información.
 La existencia de lagunas o falta de información, sobre las propias
afectadas, por parte de los/las profesionales que atienden servicios de
atención e información a las víctimas de la violencia.