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EL NACIONAL - JUEVES 18 DE MARZO DE 1999

Espectáculos

Amenazada declaratoria de Patrimonio Mundial

La Facultad de Arquitectura mostró deterioro de la Ciudad Universitaria

Un grupo de arquitectos de la UCV decidió iniciar una campaña de información sobre los valores
estéticos de Carlos Raúl Villanueva, crear una conciencia crítica y reparar los daños ocasionados a los
edificios y a las obras de arte

ANDREINA GÓMEZ

El conjunto integrado por la Ciudad Universitaria, el Jardín Botánico, la casona Ibarra y la antigua sede
de la Escuela Técnica Industrial concebido por Carlos Raúl Villanueva logró una declaratoria de
Monumento Histórico Nacional el 1 de septiembre de 1993. Esta circunstancia le confirió un marco legal
de obligatorio cumplimiento para su protección y conservación. Sin embargo, antes y después de esa
fecha, el recinto ha sido víctima de múltiples intervenciones, calificadas por innumerables comisiones
técnicas de "inconvenientes", pero que de ningún modo han tenido freno hasta la fecha. La publicación
de un reportaje sobre la contratación de un mural de Pedro León Zapata por parte de las autoridades
rectorales, a través de la Alcaldía de Caracas, que será colocado en la pared que delimita los terrenos de
la UCV con la autopista del Este, encendió una polémica pública que ha servido para dar a conocer la
existencia de una Comisión de Conservación de la Ciudad Universitaria, la cual renunció durante un foro
convocado para presentar la mencionada obra mural. Pasada una semana del candente encuentro, el
decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UCV, Abner Colmenares, convocó a la prensa
a fin de informar los esfuerzos que dicha facultad ha venido realizando para la conservación de la Ciudad
Universitaria; la presentación del llamado Plan Rector, elaborado por el Instituto de Urbanismo; el
proyecto de postulación como Patrimonio de la Humanidad ante la Unesco, el cual cuenta con
financiamiento de 250 millones de bolívares otorgados por el Conac, e invitar a un recorrido para
constatar el deterioro de los edificios, espacios abiertos y obras de arte. En compañía de Gorka
Dorronsoro y Frank Marcano (ambos del Instituto de Urbanismo de la UCV) y María Fernanda Jaua,
vinculada al proyecto de Patrimonio de la Humanidad, el decano Colmenares aclaró que las actividades
de conservación de la Ciudad Universitaria por parte de la Facultad de Arquitectura llevan más de 30
años. Recordó que en 1970, el profesor Lezek Zawisa elaboró un informe demoledor sobre las
agresiones al conjunto arquitectónico concebido por Villanueva, "a consecuencia de luchas políticas
internas y el violento crecimiento de la población estudiantil". Dijo que la primera comisión de
conservación data de la década de los 80, pero renunció por la demolición de una parte del comedor
universitario que contenía una obra de Narváez. Luego, a principio de los años 90 se reactivó la comisión
respaldada por una resolución del Consejo Universitario. También informó que en 1993 el Consejo
Universitario contrató el desarrollo de un Plan Rector de la Ciudad Universitaria, que a pesar de estar
aprobado en un 50%, ha sido ignorado y ha quedado como un instrumento simbólico.

Vivir en un museo
-Esta universidad confronta un problema real de sus espacios, en relación con el crecimiento de la
población estudiantil. ¿Cuál sería la proposición de ese plan rector del Instituto de Urbanismo para la
resolución práctica de esas necesidades espaciales? -La Ciudad Universitaria se levantó con unas reglas
de juego -intervino Dorka Dorronsoro-, pero se ha expandido bajo unas reglas distintas. Sin hacer
apología al perejimenismo, hasta el año 58 existía un Instituto de la Ciudad Universitaria que centralizaba
todo lo que tenía que ver con el espacio físico. Pero con la ruptura del año 58 no sólo cambiaron muchas
cosas malas sino que lo bueno también fue presa del olvido. Creo que la recuperación con los criterios
originales es posible, si somos capaces de demostrar nuestra voluntad para mantener este patrimonio.
Hay que enseñar cómo vivir dentro de un museo. -¿Con el presupuesto universitario se podría asumir
esas obligaciones legales que establece el plan rector para la recuperación de las edificaciones bajo el
criterio estético de Villanueva? -Si logramos amarrar la declaratoria de Patrimonio de la Humanidad
podemos buscar el concurso de instituciones fuera de la universidad. Tendríamos el apoyo de
organismos internacionales y conseguiríamos recursos de la empresa privada, sin que eso genere una
carga al presupuesto de la UCV- dijo Frank Marcano. -Sin embargo, el deterioro que presenta el conjunto
arquitectónico y las obras que conforman el proyecto síntesis de las artes, podría frenar la declaratoria
de Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco. -Nosotros sostenemos que el reconocimiento de
la Ciudad Universitaria como la obra de arquitectura moderna más importante del país y de América
Latina es suficiente para lograr la declaratoria como Patrimonio de la Humanidad -dijo María Fernanda
Jaua-. Sin embargo, la Unesco ha declarado bienes en peligro inminente cuando los países no están en
capacidad de mantenerlos. La idea es que el país se comprometa con la Ciudad Universitaria de ahora
en adelante.